100 PREGUNTAS Y RESPUESTAS
SOBRE CUBA (1999)
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Los CJC no se hacen responsables del contenido de los artculos. Las
afirmaciones y opioniones que en ellos se vierten son nicamente elaboraciones
propias del autor del artculo o de instituciones o partidos ajenos al nuestro. Los
reproducimos por el inters histrico y anlitico de los mismos.
#ndice
Prlogo
1. Cmo es Cuba?
2. Cmo es su clima?
. Cmo es su flora?
!. Cmo es su fauna?
". Cu#les son sus r$os m#s e%tensos, sus montaas m#s altas, sus principales ba&$as?
'. Cu#les son los pa$ses m#s pr%imos?
(. Cmo es su di)isin pol$tico*administrati)a?
+. Cmo es su poblacin?
,. Cu#l es el grado de mesti-a.e del pueblo cubano?
1/. 0u1 representan la bandera y el escudo cubanos?
11. Cmo es su &imno nacional?
12. Cu#les son los sitios declarados por la 2345C6 Patrimonio Cultural de la
7umanidad?
1. Cmo es su capital?
1!. Cu#les son los principales lugares &istricos de la capital?
1". 8 9u1 sitios llaman los cubanos Ciudad Primada, Ciudad :andera, Capital de las
4sculturas, Ciudad de los Puentes, Ciudad de los ;ina.ones, Ciudad de los <useos y
Perla del 5ur?
1'. Cmo es la =sla de la Ju)entud?
1(. Cmo son los cayos del arc&ipi1lago cubano?
1+. Cu#les fueron las manifestaciones m#s rele)antes por la liberacin de Cuba en el
siglo pasado?
1,. Por 9u1 Jos1 <art$ es el 71roe 3acional de Cuba?
2/. >esde cu#ndo comen- el diferendo entre Cuba y 4stados 2nidos?
21. 0u1 significa para los cubanos la base na)al de 4stados 2nidos en ?uant#namo?
22. Cmo surge la consigna de Patria o <uerte?
2. Cmo se mantiene la presencia y )igencia del C&e ?ue)ara en el pa$s?
2!. 8 9u1 llaman los cubanos per$odo especial?
2". Cu#l es &oy la estrategia econmica del pa$s?
2'. 0u1 )enta.as ofrece al mundo la Ley de =n)ersin 4%tran.era?
2(. Cmo influye el turismo en la econom$a del pa$s?
2+. Cu#les son los principales polos tur$sticos?
2,. 0u1 formas tiene el turismo especiali-ado?
/. Cu#les son sus recursos minerales?
1. Cu#les son los principales productos cubanos de e%portacin?
2. Cu#l es la principal industria del pa$s?
. Cu#l es la estrategia en la produccin del &abano?
!. Cmo se comporta la e%traccin de petrleo?
". Cmo )a la e%traccin de n$9uel?
'. Cmo se desarrolla el traba.o por cuenta propia?
(. Por 9u1 se crearon las -onas francas?
+. 0u1 son las casas de cambio y por 9u1 surgieron?
,. Cu#l &a sido el impacto del blo9ueo impuesto por 4stados 2nidos a Cuba?
!/. 4s un fenmeno pol$tico o econmico la emigracin cubana?
!1. 0ui1nes fueron los balseros?
!2. Por 9u1 e%iste y se insiste en un partido @nico?
!. Cmo son las elecciones en Cuba?
!!. 0u1 es la 8samblea 3acional del Poder Popular?
!". Cu#les son las organi-aciones fundamentales en 9ue se integra la sociedad
cubana?
!'. Cu#ntos pa$ses mantienen &oy relaciones con la isla?
!(. Cmo se manifiesta la solidaridad con Cuba?
!+. Cmo es su pol$tica e%terior?
!,. Cu#l es la posicin de Cuba en la relacin globali-acin*desarrollo?
"/. Por 9u1 una Ley de Proteccin de la =ndependencia 3acional y de la 4conom$a
de Cuba?
"1. Cmo son las relaciones entre el estado y la iglesia?
"2. Cu#ntas religiones se profesan?
". Cu#l es la )irgen patraa de Cuba?
"!. 7ubo trascendencia de la )isita del papa Juan Pablo == a Cuba?
"". 8 cu#nto asciende la esperan-a de )ida en Cuba?
"'. Cu#ntos centros &ospitalarios funcionan y con cu#ntos m1dicos y personal
param1dico se cuenta en el pa$s?
"(. 0u1 es el m1dico de la familia?
"+. >e cu#les enfermedades se protege con )acunas a la poblacin?
",. 4st# permitido el aborto?
'/. 0u1 significa para el cubano la donacin )oluntaria de sangre?
'1. Cu#les son las causas fundamentales de muerte?
'2. 8 cu#nto asciende la mortalidad infantil?
'. Cmo se comporta el sida en Cuba?
'!.Cmo es el programa de ayuda m1dica a Centroam1rica?
'". 8 9u1 edad pueden .ubilarse los traba.adores y a cu#nto asciende su pensin
m$nima?
''. 0u1 personas est#n protegidas por la 8sistencia 5ocial y cu#les prestaciones se
les brinda?
'(. 0u1 derec&os tienen los &i.os naturales en Cuba?
'+. 4%iste la propiedad personal?
',. Cu#les son las formas de propiedad de la tierra?
(/. Por 9u1 no &ay analfabetos?
(1. Cmo se garanti-a la continuidad de la educacin?
(2. Cmo es el acceso a la educacin de los nios minus)#lidos?
(. 0u1 papel .uega la mu.er en la sociedad?
(!. Cmo es la .u)entud cubana?
(". Cu#l es el tratamiento a los ciudadanos de la tercera edad?
('. 0ui1nes pueden ser 71roes de la Aep@blica de Cuba y 9ui1nes 71roes del
;raba.o de la Aep@blica de Cuba?
((. Por 9u1 5antiago de Cuba es una Ciudad 71roe?
(+. 0u1 posibilidades e%isten para 9ue todos los cubanos puedan defender su
re)olucin?
(,. Cu#ntos son los museos y galer$as?
+/. Cu#les son las &uellas de 7emingBay en Cuba?
+1. Cu#ndo es el >$a de la Cultura cubana?
+2. Cu#l fue el primer poema escrito en Cuba?
+. 0u1 es la Casa de las 8m1ricas?
+!. Cmo se re)itali-a el inter1s por la lectura?
+". 4s bailador el pueblo cubano?
+'. Cmo se form la 4scuela Cubana de :allet?
+(. Cmo surgi el Cesti)al de Cine Latinoamericano?
++. Cu#ntas radioemisoras y canales de tele)isin &ay en Cuba?
+,. 0u1 representa la m@sica para el cubano?
,/. Cu#l es la melod$a cubana m#s conocida?
,1. Cmo es la cocina y la cocteler$a cubanas?
,2. Cu#les son los restaurantes m#s famosos?
,. Cu#les son los 1%itos m#s significati)os del deporte?
,!. Cu#les son los principales resultados cient$ficos?
,". Cmo marc&an la biotecnolog$a y la industria farmac1utica?
,'. Cmo se desarrolla la industria pes9uera?
,(. 4n 9u1 contribuye al desarrollo sostenible?
,+. 0u1 es el internacionalismo para los cubanos?
,,. Cu#l es el delito m#s gra)e 9ue puede.cometer un cubano?
1//. Cu#les son los principales retos a la entrada del nue)o milenio?
Pr$%ogo
0ue la re)olucin cubana &aya cumplido su cuadrag1simo ani)ersario puede
asombrar a algunos pero no a los 9ue )i)imos ac#. 5abemos por 9u1 &a sido y cmo.
5omos pri)ilegiados protagonistas de una epopeya irrepetible en la &umanidad, un
&eroico >a)id enfrentado permanentemente al poderoso ?oliat 9ue se empea en
destruirnos.
Cuba )i)e, traba.a, ama, sufre y r$e. Los nios contin@an asistiendo a sus escuelas con
la paoleta pioneril al cuello, las mu.eres sonr$en mientras laboran en los centros
cient$ficos o en el campo, los .)enes sostienen la econom$a y la defensa con la
)italidad y firme-a 9ue les caracteri-a, los ancianos son cada )e- m#s, por lo 9ue
re9uieren amplia atencin del resto de la sociedad.
Cuatro d1cadas &an transcurrido resistiendo una guerra econmica, pol$tica,
bacteriolgica, totalmente in.usta, bestialmente criminal. 4l blo9ueo 9ue las
administraciones norteamericanas imponen al pueblo cubano y tratan de
internacionali-ar mediante distintas legislaciones, &ace m#s dif$cil nuestra
subsistencia, m#s lenta la gradual recuperacin. Pero no pueden impedir nuestra
dignidad ni la )alent$a gen1tica impregnada en nuestras ra$ces. 3o pueden impedir el
multitudinario y sincero apoyo popular a una re)olucin socialista 9ue nos &a inscrito
&eroicamente en la &istoria americana.
4n esta nue)a edicin de C=43 PA4?23;85 D A45P245;85 56:A4 C2:8,
pretendemos re)elarle cmo )i)e el pueblo cubano, su &istoria y su cultura, y e%plicar
algunas de las transformaciones efectuadas para mitigar la crisis econmica 9ue
afecta a los pueblos, y &an &ec&o posible una marc&a lenta y constante por el camino
de la recuperacin.
8 tra)1s de sus p#ginas usted comprender# las ra-ones por las cuales somos
sencillamente in)encibles. ;enemos el deber y el derec&o de mantener la esperan-a
de los &umildes.
1& 'C$(o es C")a*
5=;28>8 en el <ar Caribe, a la entrada del ?olfo de <1%ico, la Aep@blica de Cuba
comprende un )asto arc&ipi1lago formado por la isla de Cuba, la =sla de la Ju)entud y
unas mil seiscientas isletas y cayos, con un #rea de 11/ ,22 Em2.
Cue llamada Lla)e del ?olfo por su posicin pri)ilegiada entre las dos 8m1ricas. 5us
l$mites geogr#ficos son el 4strec&o de la Clorida y el Canal de las :a&amas, al norteF
el <ar Caribe y Jamaica, al surF el 4strec&o de Ducat#n, al oesteF y la Aep@blica de
7ait$, separada por el Paso de los Gientos, al este.
La isla de Cuba es la mayor de las 8ntillas, con una longitud de 1 2"/ Em y una
anc&ura 9ue )ar$a entre los 1,1 y los 1 Em. 8largada y estrec&a, en sus costas se
&allan ba&$as, golfos y ensenadas, as$ como cabos, puntas y pen$nsulasF mas no
permite su configuracin la e%istencia de r$os largos y caudalosos. 5us playas son
acogedoras y &ermosas, cubiertas de arenales o formadas por abruptos farallones,
donde rompe el olea.e con )igoroso impulso. 8lgunas cadenas montaosas, de poca
altura, atra)iesan di)ersas partes de su territorio. 5u flora es )ariada y su fauna
abundante.
8tendiendo a fines poHtico*administrati)os, desde 1,(( la Aep@blica de Cuba 9ued
organi-ada en 1! pro)incias y 1', municipios, entre ellos el municipio especial =sla
de la Ju)entud. Las pro)incias, de oeste a este, se nombran Pinar del A$o, La 7abana,
Ciudad de La 7abana, <atan-as, Gilla Clara, Cienfuegos, 5ancti 5p$ritus, Ciego de
8)ila, CamagIey, Las ;unas, 7olgu$n, ?ranma, 5antiago de Cuba y ?uant#namo.
5u idioma oficial es el espaol, la nacionalidad cubana, y sus s$mbolos nacionales la
bandera de la estrella solitaria, el &imno de :ayamo y el escudo de la palma real.
5eg@n recoge la constitucin )igente, aprobada por el ,(,(J de la poblacin mayor
de diecis1is aos en 1,(', la Aep@blica de Cuba es un estado socialista de obreros y
campesinos y dem#s traba.adores manuales e intelectuales.
+& 'C$(o es s" c%i(a*
4L CL=<8 de Cuba es tropical &@medo, con una temperatura media anual de 2!KC,
siendo en )erano de 2(KC y de 21KC en in)ierno.
Cuba se e%tiende en la -ona intertropical entre los (!K, (L y "2M y los +!K, 5; y "!M de
longitud oesteF y los 1,K, !,L y 'M y los 2K, 1(L y ,M de latitud norte, muy pr%imo
al ;rpico de C#ncer. 4n la fa.a del planeta en 9ue est# situada, se &allan las regiones
m#s des1rticas del mundo, como el 5a&ara y la pen$nsula 8r#biga. <as, por ser su
mayor territorio una isla larga y estrec&a, las corrientes marinas 9ue la circundan
influyen tambi1n en el cuma. 5obre ella soplan los )ientos alisios 9ue, generalmente
producen llu)ias, pues ello depende del despla-amiento del anticicln del 8tl#ntico
3orte, conocido por el dictador del tiempo en Cuba. 6tros )ientos de menor
intensidad y 9ue soplan por el d$a desde el mar &acia la tierra constituyen las brisas,
9ue por la configuracin de la isla de Cuba afectan casi todo el territorio.
La distribucin de las precipitaciones durante el ao &a marcado la e%istencia de dos
1pocasN la de se9u$a y la de llu)ia. La primera se e%tiende de no)iembre a abril y la
segunda de mayo a octubre. 3o todos los aos, desde luego, las precipitaciones se
comportan del mismo modo. 4l promedio anual es de 1 (/ mm, y la &umedad
relati)a es del +/J.
7ay -onas 9ue rebasan la temperatura media anual, como ;rinidad, 5ancti 5p$ritus,
Clorida OCamagIeyP y el sudeste de esa pro)incia, as$ como <an-anillo, la
desembocadura del Cauto, la costa norte de las pro)incias orientales, la fa.a costera
desde 5antiago de Cuba &asta ?uant#namo, y la =sla de la Ju)entud. Promedian
temperaturas inferiores a la media, las -onas interiores de Pinar del A$o, La 7abana y
<atan-as, el territorio comprendido desde las alturas de ;rinidad*5ancti 5p$ritus
&acia el norte, y las partes interiores de 5antiago de Cuba, 7olgu$n y ?uant#namo.
>iciembre, enero y febrero son los meses m#s frescos, y los m#s calurosos .ulio y
agosto.
,& 'C$(o es s" -%ora*
43 4L 524L6 cubano crece una di)ersa y ri9u$sima flora, 9ue cuenta con m#s de
oc&o mil especies. ;$picas en el paisa.e cubano, resaltan la palma real y la caa de
a-@car.
>ebido a la di)ersificacin agr$cola, ocupan &oy amplias e%tensiones los frutalesN
c$tricos, pl#tanos, pinaF los cereales y leguminosas, en especial el arro-F las &ortali-as,
los tub1rculos y ra$ces, fundamentalmente el tomate, entre las primeras, y las papas
entre los @ltimos.
2na de las m#s famosas especies abor$genes es el tabaco, 9ue se utili-a para la
confeccin de &abanos o cigarros. Las )egas de Gueltaba.o, en Pinar del A$o, tienen
reconocido prestigio internacional por la calidad de sus &o.as.
Las maderas cubanas &an sido tradicionalmente calificadas como de e%celente
calidad, entre ellas el #cana, la caoba, el cua.an$, el 1bano, el .i9u$... La tala
indiscriminada y sistem#tica de los bos9ues &i-o 9ue luego del triunfo re)olucionario
la reforestacin fuera tarea de primer ordenN si en la 1poca del descubrimiento se
estima 9ue estaba cubierto un '/J de su territorio por bos9ues, a mitad del presente
siglo slo 9uedaba el 1J.
4n la d1cada del oc&enta, un nue)o an#lisis &i-o necesario insistir en las labores de
repoblar las montaas de #rboles maderables y frutales. 5e puso en marc&a el Plan
<anat$ Onombre del municipio donde fue ensayado el proyectoP de reforestacin, y
desde entonces se &an plantado m#s de tres mil millones de posturas.
>esgraciadamente, por la mala calidad de algunas especies, la no aplicacin de una
t1cnica adecuada desde el mismo )i)ero y el 1nfasis en la siembra y no en la atencin
sil)icultural &i-o 9ue slo la mitad sobre)i)iera. ;ambi1n la escase- de combustible y
otros recursos 9ue sobre)ino con el per$odo especial lle) a una tala indiscriminada
de los bos9ues 9ue actualmente se trata de disminuir ofreciendo alternati)as a la
poblacin.
2na e%periencia iniciada en 1,,", llamada plan de fincas forestales, mediante el cual
se entregan a familias superficies de bos9ues para su cuidado y fomento, est#
logrando positi)os resultados. 8ctualmente la mayor de las 8ntillas tiene alrededor de
dos millones de &ect#reas de #rboles, y lle)a a cabo un programa de desarrollo
forestal sostenible 9ue abarca &asta el 2/1", fec&a en 9ue esta superficie deber#
ascender a unos dos millones y medio de &ect#reas, con lo cual se completar# el 2(J
de su suelo poblado por #rboles, proporcin importante en el deteriorado mundo
actual.
<#s de mil 9uinientos ingenieros forestales se &an graduado en las uni)ersidades
durante las @ltimas tres d1cadas y, en general, en la actualidad unos cuarenta mil
traba.adores laboran en beneficio de los bos9ues cubanos en su af#n de )estir de
)erde al pa$s.
La flor nacional es la mariposa *7edye&ius coronarium*, 9ue se encuentra en las
m#rgenes de los r$os, arroyos y lagunas. 5us p1talos son blancos, de agradable
fragancia.
>e manera sistem#tica, Cuba se empea en conser)ar su entorno, en medio de los
apremios 9ue impone el desarrollo y las )icisitudes 9ue conlle)a la crisis econmica
9ue )i)e. 2n e.emplo por mostrarN fue el primer pa$s antillano en incluir en su
constitucin el derec&o a un medio ambiente sano, luego de la celebracin de la
Cumbre de la ;ierra en A$o de Janeiro. Cinco aos despu1s, aun9ue no se e)idenciaba
el cumplimiento de las promesas aprobadas en 1,,2, Cuba lle) a su parlamento una
nue)a ley de medio ambiente 9ue proporciona un amplio marco de acciones para sus
propsitos ambientalistasF m#s recientemente *a mediados de 1,,+* aprob la Ley
Corestal, y con posterioridad ser#n discutidas y anali-adas las leyes de 6rdenamiento
;erritorial y 2so de los 5uelos, toda una cultura conser)acionista en pos de la
proteccin ambiental para su arc&ipi1lago.
.& 'C$(o es s" -a"na*
4L 8G4 nacional de Cuba es el ;ocororo *Prictelus temnurus*, de pluma.e ro.o,
blanco y a-ul, 9ue son los colores de la bandera cubana. 4s s$mbolo de libertadF no
puede )i)ir en cauti)erio, pues muere al poco tiempo. 5lo se &a )isto en los bos9ues
cubanos. Construye su nido en los &uecos de los #rboles o de las palmas y se alimenta
de los insectos 9ue ca-a al )uelo.
La fauna del pa$s es abundante y )ariada. 4stas caracter$sticas, .unto a la belle-a
singular de muc&os e.emplares, ofrece a los amantes de la naturale-a una enorme
fuente de estudio.
4%isten unas trece mil especies de animales terrestres, entre in)ertebrados, anfibios,
reptiles, a)es, mam$feros, y una gran parte de ellos &abitan e%clusi)amente en nuestro
territorio. 4ntre los in)ertebrados m#s preciados est# la espon.a, 9ue se captura
especialmente en la costa meridional de la -ona de occidente. 8bundan los crust#ceos
en los r$os, arroyos y mares circundantes. 4ntre ellos se destacan por su )alor
comestible, la langosta com@n y el cangre.o moro.
>istribuidos en el pa$s est#n los insectos, 9ue comprenden m#s de siete mil especies.
7ay algunos dainos 9ue transmiten enfermedades, y otros de gran belle-a y utilidad,
como la mariposa de la 8)ellaneda, y la de ?undlac&, entre las m#s &ermosasF y la
abe.a, 9ue adem#s de producir miel y cera, e.erce una alta funcin poIni-adora.
Los moluscos alcan-an alrededor de mil setecientas especies tanto terrestres, como
flu)iales y marinas. Por su )alor alimenticio se destacan el ostin *6strea, )irginicet*,
la alme.a *<acoma contrEta*, los pulpos y calamares. 4n la regin oriental aparecen
las famosas pol$mitas *Polymita picta*, consideradas como los moluscos terrestres
m#s bellos del mundo. 5e afirma 9ue en el mar 9ue circunda el arc&ipi1lago cubano
)i)en alrededor de cuatrocientas cincuenta especies de peces comestibles.
4n cuanto a los anfibios, son abundantes la rana platanera y el sapito *5mint&illus
limbatud* considerado el m#s pe9ueo del mundo. Los reptiles comprenden unas cien
)ariedades, y entre ellas figura el ma.# de 5anta <ar$a, 9ue alcan-a &asta cuatro
metros de longitud, siendo la mayor serpiente del pa$s.
Por estar Cuba situada en medio del <ar de las 8ntillas, &a ser)ido de estacin a las
a)es 9ue emigran &acia 5udam1rica, y a las 9ue )ienen solamente a pasar el in)ierno.
Por ello, aun9ue se admiran unas trescientas especies, slo una tercera parte es
t$picamente cubana.
7ay algunas de &ermos$sima apariencia, como el flamenco y el -or-al realF de
meldico canto, como el ruiseor y el sinsonteF y otras de utilidad econmica por la
cantidad de insectos noci)os 9ue destruyen, como el tot$. 2n curioso e.emplar es el
-un-uncito, eterno libador de las flores 9ue, seg@n los estudiosos, es el a)e m#s
pe9uea del mundo.
5e estima 9ue e%isten unas treinta y oc&o especies de mam$feros, de ellos un setenta
por ciento autctonos del pa$s. 4l m#s interesante es el almi9u$ *5olenodon cubctnus*,
casi e%tinguido y 9ue slo &abita en las montaas de ?uant#namo.
Para sal)ar el legado de la naturale-a, desde principios de la d1cada del setenta fue
creada la 4mpresa 3acional para la Conser)acin de la Clora y la Cauna, 9ue e%&ibe
resultados en el rescate y desarrollo de cientos de especies, tanto acu#ticas como
terrestres. 8 )einticinco aos de su fundacin, lle)a a cabo programas de
conser)acin de la cotorra, grulla, catey, ga)il#n cagIero, paloma perdi-, pitirre real,
cao ronco y torca-a bobaF y tambi1n se dedica a la proteccin de otras especies
aun9ue no est1n consideradas en peIgro ni amena-adas, como el flamenco rosa. 2n
e.emplo es el flamingo, 9ue en 1,+/ e%ist$an unas )einte mil pare.as y ya para
principios de 1,,+ se increment a unas doscientos cincuenta mil.
/& 'C"0%es son s"s r1os (0s e23ensos4 s"s (on3a5as (0s a%3as4 s"s principa%es
)a61as*
C2:8 cuenta con numerosos arroyos y m#s de doscientos r$os de pe9ueo caudal,
distribuidos irregularmente en el territorio. 4l r$o de mayor longitud es el Cauto,
ubicado en la )ertiente sur, al este del pa$s, con unos trescientos cuarenta Eilmetros.
4ntre los m#s e%tensos se encuentran tambi1n el Qa-a, el 8gabama, Jatibonico del
5ur, 5an Pedro, 7an#bana, 7ondo, 3a.asa y Cuyaguate.e, en la )ertiente surF y el
5agua la ?rande, Caonao, ;oa, <ayar$, 9uienes desembocan en la )ertiente norte. 4l
;oa, ubicado en la pro)incia de ?uant#namo, es el de mayor caudal en el pa$s.
4n cuanto a las principales alturas, destaca el Pico Aeal del ;ur9uino con 1 ,(2 m
sobre el ni)el del marF le siguen el Cuba y la :ayamesa, con 1 +(2 m y 1 (/ m,
respecti)amente, pertenecientes los tres a la cordillera de la 5ierra <aestra. 4n el
propio grupo montaoso est# la ?ran Piedra, de 1 21! m, en cuya cima se encuentra
un singular blo9ue p1treo de un peso superior a las sesenta mil toneladas. 8dem#s de
la 5ierra <aestra, 9ue se e%tiende por las pro)incias de 5antiago de Cuba y de
?ranma, se le)antan otras -onas montaosasN la 5ierra del Purial O?uant#namoP,
5ierra del Cristal O7olgu$nP, <aci-o de ?uamu&aya O5ancti 5p$ritusP y 5ierra de Ripe
O7olgu$nP.
5us principales ba&$as son, en la costa norte, :a&$a 7onda, Cabanas, <ariel, La
7abana, <atan-as, 3ue)itas, Puerto Padre, ?ibara, :aes y RipeF y en la costa sur
Cienfuegos, 5antiago de Cuba y ?uant#namo.
5us principales golfosN el de ?uana&acabibes, en $a costa norteF y el de :ataban,
8na <ar$a y ?uacanayabo, en la sur.
7& 'C"0%es son %os pa1ses (0s pr$2i(os*
78=;S es el pa$s m#s pr%imo a CubaN lo separa slo (( Em al este por el 4strec&o de
<ais$ o Paso de los GientosF Jamaica 1!/ Em al sur, por el 4strec&o de ColnF
4stados 2nidos de 8m1rica, 1+/ =on al norte, separado por el 4strec&o de la CloridaF
y <1%ico, 21/ =on al oeste, separado por el 4strec&o de Ducat#n.
4n d$as claros son )isibles algunas de estas tierras )ecinas. Por e.emplo, las <ontaas
8-ules de Jamaica son perceptibles desde las altas laderas del Pico ;ur9uino, y las
costas &aitianas se di)isan desde el faro de <ais$.
8& 'C$(o es s" di9isi$n po%13ico:ad(inis3ra3i9a*
C283>6 la re)olucin lleg al poder en 1,",, encontr 9ue la di)isin pol$tico*
administrati)a 9ue e%ist$a en el pa$s era *sal)o algunas modificaciones*, la misma 9ue
&ab$a establecido el r1gimen colonial espaol en 1+,+N seis pro)incias y 12
municipios.
Pero si el censo de 1+(( informaba, por e.emplo, 9ue la pro)incia oriental contaba
con el 1'J de la poblacin nacional y la de <atan-as el 1(J, casi cien aos despu1s
el censo de 1,(/ recog$a 9ue 6riente pose$a una poblacin seis )eces superior a la de
<atan-as.
Por otra parte, las transformaciones re)olucionarias condu.eron a la creacin, a partir
de 1,', de regiones como eslabn intermedio entre pro)incias y municipios, y estos
@ltimos &ab$an aumentado en n@mero considerable por di)ersas ra-ones. D si en 1,",
&ab$a seis pro)incias y algo m#s de un centenar de municipios, en 1,(,
manteni1ndose en lo fundamental los primiti)os l$mites pro)inciales, e%ist$an adem#s
"+ regiones territoriales y !/( municipios y seccionales. La estructura de direccin
comprend$a as$ tres eslabones entre la direccin nacional y la baseN la pro)incia, la
regin y el municipio o seccional.;odo esto pro)oc un aislamiento e%cesi)o entre
los organismos centrales y las industrias, unidades agropecuarias y dem#s centros
econmicos, educacionales o de ser)icios en la base, complicando las tareas de
direccin, organi-acin y control. D lo esencial es 9ue esa di)isin no resultaba
racional ni funcional de acuerdo con el desarrollo econmico y social planificado. 3o
e%ist$a, en absoluto, &omogeneidad en cuanto al )olumen de la poblacin de las
antiguas pro)incias, regiones y municipios.
5e reali- entonces un minucioso estudio, considerando los factores de esa nue)a
etapa, y se lleg a la conclusin de 9ue era aconse.able simplificar la estructura de
direccin pol$tico*administrati)a, suprimiendo el eslabn regional, la necesidad de
crear un n@mero mayor de pro)incias y lo imprescindible de reducir de manera
considerable la cantidad de municipios, de acuerdo con un criterio de relati)a
uniformidad en cuanto a #rea, poblacin, acti)idades producti)as, ser)icios,
comunicaciones y otros m#s.
Como resultado, se propuso y aprob en 1,(" en el = Congreso del Partido Comunista
de Cuba la resolucin sobre la nue)a di)isin pol$tico*administrati)a 9ue, .unto a la
constitucin de los rganos del Poder Popular, constituyeron slidos pasos de a)ance
&acia formas superiores de organi-acin y direccin.
Cuba cuenta desde principios de 1,(( con 1! pro)incias, oc&o m#s 9ue en la antigua
di)isin de 1+,+, y 1', municipios, es decir, ( m#s 9ue antes de producirse la nue)a
estructura pol$tica.
;& 'C$(o es s" po)%aci$n*
8 PA=3C=P=65 de 1,,, la poblacin cubana superaba la cifra de once millones cien
mil &abitantes, y se espera 9ue para el ao 2/1" llegue a los doce millones, seg@n
datos de la 6ficina 3acional de 4stad$sticas.
Las pro)incias m#s pobladas son Ciudad de La 7abana Ola capitalP, con m#s de dos
millones doscientos mil pobladoresF 5antiago de Cuba y 7olgu$n, con m#s de un
milln cada unaF Gilla Clara y ?ranma, con m#s de oc&ocientos mil cada unaF y
CamagIey y Pinar del A$o, con m#s de setecientos mil cada una. 3o es un secreto 9ue
la sociedad cubana )a en)e.eciendo. La e%pectati)a de )ida contin@a e%tendi1ndose
&asta m#s de los setenta y cinco aos y los nacimientos se mantienen en cifras ba.as.
4s decir, primero desciende la mortalidad y luego la fecundidadN nacen menos
personas, y al aumentar la e%pectati)a de )ida, mueren m#s tarde. 3o obstante, se
percibe un signo significati)o de recuperacin lenta pero progresi)a en la poblacinN
en 1,,( y 1,,+ aument ligeramente la cifra de nacimientos, similar ya a 1,,.
Como consecuencia del sistema de salud y las condiciones de )ida de la poblacin,
desde mediados de la d1cada del no)enta se pre)1 9ue las personas 9ue lleguen a los
sesenta aos podr$an )i)ir )einte aos m#s, como promedioF y los 9ue ya contaban
oc&enta, alargar$an sus e%istencias entre seis y siete aos m#s.
8ctualmente la cantidad de personas mayores de sesenta y cinco aos sobrepasa el
milln cuarenta mil, y m#s de cien mil ancianas y ancianos &an cumplido oc&enta y
cinco aos y m#s, mientras alrededor de dos millones y medio son nios menores de
9uince aos. Por su parte, el se%o femenino representa casi la mitad de la poblacin.
9& 'C"0% es e% grado de (es3i<a=e de% p"e)%o c")ano*
4L P24:L6 cubano presenta un alto grado de mesti-a.e por ra-ones &istricas, pues
desde la 1poca colonial &ubo una fusin de espaoles, negros, antillanos y asi#ticos.
8 partir del inicio de la con9uista de la isla por 4spaa, los primiti)os &abitantes
)i)ieron en una perpetua agon$a. 5e les suprimi su libertad y se les oblig al traba.o
en los la)aderos de oro durante unas doce &oras diarias, y posteriormente al traslado
de ese mineral a distancias de cuarenta o sesenta leguas para su fundicin. 4ra escasa
la alimentacinN agua y casabe, 9ui-#s ma$- y boniato.
Como resultado, comen-aron a disminuir los indios abor$genes, decreci la natalidad
y aumentaron las muertes infantiles. T4n obra de tres meses *e%pres entonces el
fraile dominico :artolom1 de las Casas* murieron m#s de siete mil nios y nias por
ir las madres al traba.oU. 5e produ.eron suicidios en masa, fugas y al-amientos, y
muertes ocasionadas por las enfermedades 9ue &ab$an importado los blancos y los
negros. 4ste cuadro de &orror &i-o 9ue la e%tincin de los indios en Cuba fuera casi
total en menos de un siglo.
8 principios del siglo VG= se inici la introduccin de negros africanos para suplir la
labor de los indios, 9uienes se &allaban ya en franca desaparicin. La cifra de
escla)os aument durante la centuria al establecerse las primeras f#bricas de a-@car.
5e calcula 9ue la poblacin negra en 1(' ascend$a a '/L///, de un total general de
1"/L/// &abitantes. La in&umana y despiadada situacin en 9ue )i)$an los escla)os
fue empeorandoF muc&os prefer$an &uir al campo en busca de libertad, )i)ir al-ados y
con)ertirse en TcimarronesU. Para atraparlos, los ranc&eadores cabalgaban en bestias
y se con)ert$an en el terror de los negros libres.
4ntre estos se fue incubando la idea de imitar a los &aitianos 9ue luc&aron por su
libertad, y las sediciones eran frecuentes aun9ue carec$an de unidad y direccin. 4n
1+12 la suble)acin estall en )arios sitiosN &ubo sangrientas refriegas, pero el
mo)imiento fue frustrado por su pobre organi-acin. 8ponte, su l$der, y dem#s
dirigentes, fueron a&orcadosF las c#rceles se llenaron de negros, abundaron los a-otes.
4l comercio de escla)os, sin embargo, iba en aumento, ya 9ue reportaba amplias
ganancias y, seg@n los &istoriadores, desde el comien-o de la pro&ibicin de
introducirlos en Cuba, entraban anualmente unos )einte mil negros clandestinamente.
Por ese moti)o en 1+!1 &ab$a en el pa$s m#s escla)os 9ue blancos. Los negros *ubres
o escla)os* llegaban al "+J de la poblacin.
8rreciaron las suble)aciones y los brotes de rebeld$a aumentaban, as$ como la 9uema
de caa)erales. 2n e.emplo fue la Conspiracin de la 4scalera, en 1+!, por la 9ue
numerosos negros fueron e.ecutados, y muc&os m#s recibieron a-otes o la tortura de
Tla escaleraU, donde eran amarrados los prisioneros para recibir latiga-os &asta 9ue
di.eran el nombre de otros conspiradores.
Cue el 1/ de octubre de 1+'+ cuando el abogado Carlos <anuel de C1spedes, dando
muestras de su decisin de lograr la .usticia y la libertad, toc por @ltima )e- la
campana del ingenio la >ema.agua, y anunci a sus escla)os 9ue desde ese momento
eran 2bres, les &i-o .urar fidelidad a la bandera y dio a conocer un manifiesto 9ue
fue, de &ec&o, la declaracin de independencia de Cuba. La sangre escla)a y la sangre
criolla se unieron para siempre en el ob.eti)o de alcan-ar la libertad de la patria.
8 mediados del pasado siglo decenas de miles de ciudadanos c&inos fueron tra$dos a
Cuba para sustituir parte de la fuer-a de traba.o sometida a r1gimen escla)ista, ya
entonces en crisis en la isla. <uc&os de estos &ombres, su.etos a la )il e%plotacin, se
incorporaron al 4.1rcito Libertador en las guerras independentistas de 1+'+ y 1+,".
La composicin de la poblacin en 1+'2 era as$N criollos blancos, '/1L1'/F espaoles,
11'L11!F e%tran.eros blancos, 11L1"F c&inos, !L/!"F yucatecos, ++F y negros,
",!L!.
8ctualmente Cuba cuenta con una poblacin 9ue supera los once miones cien mil
&abitantes, de los cuales m#s de dos millones residen en la capital. 4l ''J son
blancos, el J negros y mesti-os y la mayor parte del resto es de ascendencia c&ina.
4se es nuestro pueblo, pueblo TlatinoafricanoU, como lo definiera el Comandante en
Jefe Cidel Castro.
10& '>"? represen3an %a )andera y e% esc"do c")anos*
L8 :83>4A8 cubana tiene el diseo de a9ue2a 9ue enarbol en 1+"/ 3arciso
Lpe- al in)adir la ciudad de C#rdenas. >urante el primer per$odo de la guerra de
1+'+*1+(+, se ne)aba una similar a la 9ue i- Carlos <anuel de C1spedes en Dara el
1/ de octubre de 1+'+F pero el 11 de abril de 1+', la C#mara de Aepresentantes de la
Aep@blica en 8rmas acord la adopcin de la insignia de 1+"/ como bandera oficial
de Cuba.
4n la guerra de 1+,"*1+,+ se continu empleando este pabelln, y al constituirse
Cuba en 1,/2 en estado independiente de 4spaa, fue ratificada como bandera
oficial. La constitucin socialista adoptada en 1,(' define a la bandera de la estrella
solitaria como uno de sus s$mbolos nacionales.
Las tres fran.as a-ules simboli-an los tres departamentos en 9ue se di)id$a Cuba a
mediados del siglo V=VF el ro.o de su tri#ngulo la sangre derramada por lograr la
independenciaF y la estrella blanca lo ele)ado y puro de los ideales patrios.
4l diseo del escudo se basa igualmente en el 9ue adoptaron los insurgentes de 1+"/F
despu1s de )arias modificaciones ad9uiri su forma actual. 4n el tercio superior
simboli-a a Cuba, Lla)e del ?olfo, como acostumbr#base a denominar a la isla desde
el siglo VG= por su posicin estrat1gicaF al fondo aparece la mitad de un disco solar
simboli-ando el nacimiento de un nue)o estado.
4n el tercio inferior derec&o Oa la i-9uierda del 9ue miraP est#n representados los tres
departamentos antes mencionadosF el tercio inferior i-9uierdo reproduce un paisa.e
t$pico de Cuba, presidido por la palma real. 4l escudo de la palma real se consigna en
la constitucin como otro de los s$mbolos nacionales.
11& 'C$(o es s" 6i(no naciona%*
4L 7=<36 nacional fue cantado por primera )e- el 2/ de octubre de 1+'+, die- d$as
despu1s de iniciada la guerra de independencia.
4l abogado y m@sico bayam1s Pedro OPeruc&oP Cigueredo &ab$a compuesto la
melod$a un ao antes, y dado a conocer en la iglesia Parro9uial <ayor durante la
festi)idad de Corpus Cristi, sin re)elar su condicin de &imno.
Cuando las tropas independentistas tomaron la ciudad de :ayamo y la poblacin se
reuni en la pla-a, Peruc&o Cigueredo, sobre la montura de su caballo, impro)is las
estrofas del &imno nacional, denominado en a9uel entonces 7imno de :ayamo. Los
)ersos escritos en a9uella ocasin, 9ue conforman la letra oficial, son los siguientesN
l combate corred! bayameses! que la "atria os contempla or#ullosa! no temis una
muerte #loriosa! que morir por la "atria es vivir. $n cadenas vivir! es vivir en afrenta
y oprobio sumido! del clarn escuchad el sonido! a las armas! valientes! %corred&
1+& 'C"0%es son %os si3ios dec%arados por %a UNESCO Pa3ri(onio C"%3"ra% de %a
@"(anidad*
783 5=>6 declaradas por la 2345C6 Patrimonio Cultural de la 7umanidad tres
#reas del pa$sN una es La 7abana Gie.a, en la capitalF otra, el Galle de 5an Luis, cerca
de ;rinidad, pro)incia de 5ancti 5p$ritusF y recientemente 4l Castillo de 5an Pedro de
la Aoca, m#s conocido como 4l <orro de 5antiago de Cuba.
Junto con la ciudad de ;rinidad, &acia el centro de la isla, el #rea conocida como La
7abana Gie.a conser)a el ambiente colonial a tra)1s de sus construcciones, las 9ue
fueron le)antadas entre los siglos VG== y V=V.
4s como un museo )i)o, en el 9ue )i)en alrededor de cien mil personas. 5us casas
est#n adosadas de enre.ados balcones y portones de slida madera, y sus calles son
estrec&as y muc&as ado9uinadas. 8bundan en La 7abana Gie.a los museos, iglesias,
con)entos, fortale-as y lugares de atracti)o inter1s para los nacionales y turistas.
>estaca la Catedral de La 7abana, donde se &a dic&o estu)ieron guardados por )arios
aos los restos de Cristbal Coln.
8l Galle de 5an Luis se le conoce tambi1n como Galle de los =ngenios. 7acia el siglo
V=V se construyeron en esa -ona m#s de cincuenta ingenios o f#bricas de a-@car,
cuyos restos perduran a@n, lo 9ue &i-o de la ciudad una de las m#s ricas del pa$s.
4ntre sus construcciones se destaca la ;orre de =-naga, imagen difundida en el mundo
como s$mbolo de ;rinidad. 4sta torre fue le)antada por rdenes del &acendado =-naga
para )igilar desde all$ el traba.o de sus escla)os en las &aciendas 9ue le pertenec$an.
La leyenda cuenta 9ue uno de los &acendados del lugar ten$a tantas ri9ue-as 9ue
9uiso cubrir el piso de su palacio con monedas a modo de mosaicos, pero las
autoridades espaolas le ad)irtieron 9ue slo lo permitir$an si las colocaba de canto,
por9ue si no las personas pisar$an la imagen del rey o el escudo espaol. 4l rico
propietario, por supuesto, tu)o 9ue renunciar a sus propsitos.
8 principios de 1,,+, en la ciudad italiana de 3aples, se incorpor al Castillo de 5an
Pedro de la Aoca, m#s conocido como 4l <orro de 5antiago de Cuba, en la lista de
sitios pertenecientes al patrimonio de la &umanidad.
4l <orro fue considerado, .unto a La 5ocapa y La 4strella, 9ue integran el sistema
defensi)o de la ba&$a santiaguera, como el m#s grande y m#s completo e.emplo de
ingenier$a militar renacentista europea aplicada a las condiciones del Caribe por una
potencia colonial. 5e tom en cuenta igualmente para la decisin de la 2345C6 el
estado de conser)acin del sitio, cuyo proceso de se)ero deterioro acumulado en las
@ltimas d1cadas del pasado siglo y en toda la primera mitad de este se pudo re)ertir
por la consecuente pol$tica de rescate y preser)acin de los )alores patrimoniales
lle)ada a cabo por el estado a pesar de sus limitaciones econmicas.
4ste )ig$a legendario fue construido entre 1'+ y 1'! por el c1lebre ingeniero
militar italiano Juan :autista 8ntonelli, art$fice tambi1n de 4l <orro de La 7abana.
4s un edificio de maniposter$a 9ue cubre un #rea de ,," Em2 con cinco ni)eles 9ue se
abren al mar en terra-a y a la boca de la ba&$a.
8ctualmente, en 4l <orro de 5antiago de Cuba se &alla el <useo de la Pirater$a, y
entre sus proyectos futuros se encuentran la implementacin de la integracin
funcional del sitio y sus #reas de proteccinN par9ue &istrico*cultural, par9ue
&istrico*ar9ueolgico, recuperacin del Cayo 5mit& OCayo ?ranmaP, y el rescate y
conser)acin de la fortale-a La 4strena.
1,& 'C$(o es s" capi3a%*
L8 C8P=;8L de la Aep@blica de Cuba es La 7abana, 9ue corresponde
geogr#ficamente a los l$mites de la pro)incia de Ciudad de La 7abana. 4s una de las
ciudades m#s antiguas del continenteF fue fundada en la costa sur en 1"1! y al poco
tiempo trasladada en direccin norte, en dos ocasiones. 4n 1"1, se &abla de su
establecimiento definiti)o.
5i en los siglos anteriores fue centro de atraccin para piratas y corsarios 9ue &icieron
necesaria la construccin de fortale-as, murallas, fosos y torreones, &oy es el centro
de atraccin de turistas de )arios continentes 9ue llegan a recorrer sus calles y pla-as,
admirar el estilo colonial de una parte de la ciudad y a con)i)ir con su pueblo.
D es 9ue, &ermosa y acogedora, la ciudad con.uga lo antiguo con lo moderno, y como
resultado de la obra re)olucionaria se transforma con nue)as edificaciones para obras
sociales y )i)iendas, con par9ues y fuentes, 9ue &acen agradable el recorrido a 9uien
la )isita.
4ntre los castillos y pla-as se destacan la Pla-a de 8rmas, de la Catedral, de la
Ae)olucin, la Pla-a Gie.aF y los Castillos de 4l <orro y de La Cuer-a. Por su
&istoria y belle-a, constituyen lugares muy )isitados la 8lameda de Paula, el Paseo
del Prado y el Par9ue Central.
Cuenta la ciudad con agradables centros tur$sticos y de recreacin, par9ues
-oolgicos, .ard$n bot#nico, acuarios, c$rculos sociales, m#s de doscientas
instalaciones deporti)as, entre ellas las construidas para los V= Juegos
Panamericanos, como el estadio panamericano, el comple.o de piscinas, el )eldromo
y las salas poli)alentesF m#s de cincuenta centros nocturnos y cabar1s, entre ellos el
internacionalmente conocido ;ropicana, as$ como tabernas t$picas, instaladas algunas
en edificaciones 9ue antiguamente fueron fortale-as construidas por el gobierno
espaol para la defensa de la ciudadF la :ode*guita del <edio, el Cloridita...
5e admiran en la capital cubana &ermosas fuentes como la Cuente de la Ju)entud,
inaugurada en ocasin del V= Cesti)al <undial de la Ju)entud y los 4studiantes, y la
Cuente de la Pa-, en saludo a la celebracin de la G= Cumbre de los 3o 8lineadosF y
otras consideradas )ie.as reli9uias, como la Cuente de la =ndia y la de los Leones.
5on muc&os los par9ues, como el Par9ue Central, el de la Craternidad, el de la =ndia,
el 8lmendares, y un gran par9ue recreati)o de m#s de setecientas &ect#reas *el
Lenin*, con anfiteatro, acuario, galer$a de arte, estadio de rodeo, par9ue de
di)ersiones, #reas de deportes &$picos y n#uticos, cafeter$as, restaurantes...
5e le)antan tambi1n en la ciudad importantes obras cient$ficasN Centro 3acional de
=n)estigaciones Cient$ficas, Centro de =ngenier$a ?en1tica y :iotecnolog$a, 7ospital
7ermanos 8mei.eiras y el Centro de =n)estigaciones <1dico*0uir@rgicas.
8 tra)1s del mo)imiento de microbrigadas y de contingentes se &an construido
m@ltiples edificios de )i)iendas y &oteles de gran capacidad para el turismo, como el
;ritn, 3eptuno y Co&iba.
1.& 'C"0%es son %os principa%es %"gares 6is3$ricos de %a capi3a%*
45;8 C=2>8> tiene numerosos sitios de )alor &istrico, entre los 9ue se cuentan
pla-as, par9ues y museos. 8lrededor del puerto de La 7abana, 9ue inici su gran
auge comercial en 1(', se desarroll la ciudad. 4n la parte conocida como La
7abana Gie.a se al-a uno de los con.untos ar9uitectnicos de la 1poca colonial m#s
antiguo de 8m1rica.
5u )erdadero )alor estriba no slo en sus casi mil edificios considerados monumentos
nacionales, sino precisamente en el con.unto urbano &omog1neo, 9ue abarca unas
ciento sesenta &ect#reas, y cuya tra-a en forma de ret$cula se &a mantenido
pr#cticamente sin alteracin, caso inslito en nuestro continente y en el mundo.
;eniendo en cuenta estas consideraciones, el 1! de diciembre de 1,+2 la
6rgani-acin de las 3aciones 2nidas para la 4ducacin, la Ciencia y la Cultura
O2345C6P declar al centro &istrico de La 7abana Gie.a y su sistema de
fortificaciones coloniales Patrimonio de la 7umanidad.
La leyenda cuenta 9ue el 1' de no)iembre de 1"1,, ba.o una corpulenta ceiba,
precedido de dos asentamientos, constituyse el primer cabildo de la )illa de 5an
Cristbal de La 7abana y se ofici la primera misa en el lugar 9ue actualmente
ocupa. 8l ser derribada en 1("! la ceiba legendaria, fue le)antada en el mismo lugar
una columna rememorati)a, y en 1+2+ el ;emplete, considerada la primera obra de
estilo neocl#sico en Cuba, y en su interior otra ceiba 9ue e)oca la original.
>el enorme cinturn de piedra o murallas 9ue bordeaban la ciudad en los siglos
VG=== y V=V, 9uedan slo cuatro fragmentos, dos de ellos con sus garitas, situados
uno frente al 8nfiteatro de la 8)enida del Puerto y otro frente al <useo de la
Ae)olucin. 4stas murallas ofrecen al )isitante una &uella singular del pasado
colonial 9ue )i)i la capital, constantemente &ostigada por corsarios y piratas.
Cue en esta ciudad, en la calle Paula, donde naci, en 1+", el 71roe 3acional de
Cuba, Jos1 <art$. 4n &onor a la madre, esa calle pas a nombrarse Leonor P1re-, y la
)i)ienda, declarada <onumento 3acional, fue con)ertida en museo donde se
muestran important$simos aspectos de la )ida del procer independentista.
4n #rea aledaa al <useo de la Ae)olucin se e%&ibe el &istrico yate ?ranma, en el
9ue +2 e%pedicionarios, comandados por Cidel Castro, continuaron la gesta mambisa
del siglo pasado &aciendo la tra)es$a desde <1%ico a Cuba en 1,"', para reiniciar la
guerra de liberacin de la 5ierra <aestra, y lograr as$ la definiti)a independencia de
Cuba.
4n la es9uina de las calles de 2 y 12, cerca del Cementerio de Coln, donde iban a
ser sepultados las )$ctimas por los bombardeos arteros de la reaccin, el l$der cubano,
al despedir el duelo, y ante la multitud all$ reunida, proclam el car#cter socialista de
la re)olucin. 89uel 1' de abril de 1,'1 y ese lugar &an 9uedado sin duda en la
&istoria de la ciudad y de Cuba.
1". A A"? si3ios %%a(an %os c")anos Ci"dad Pri(ada4 Ci"dad Bandera4 Capi3a%
de %as Esc"%3"ras4 Ci"dad de %os B"en3es4 Ci"dad de %os Tina=ones4 Ci"dad de %os
C"seos y Per%a de% S"r*
4V=5;43 ciudades en Cuba 9ue 9uedan registradas en la memoria popular con otros
nombres, atribuidos por sus distintas caracter$sticas, 9ue las distinguen del resto del
pa$s.
;ales son los casos de :aracoa, llamada Ciudad Primada por ser la primera )illa
fundada por los coloni-adores en 1"12F a C#rdenas, en la pro)incia de <atan-as,
Ciudad :andera, ya 9ue en ese lugar onde por )e- primera la ensea nacional en
1+"/F a Las ;unas, Capital de las 4sculturas, por adornarse con unas 9uince obras
monumentales y ambientales distribuidas por la ciudadF a <atan-as, Ciudad de los
Puentes, ya 9ue es atra)esada por los r$os 5an Juan, Dumur$ y Can$marF a CamagIey,
Ciudad de los ;ina.ones, por9ue pueden obser)arse en los patios de sus )i)iendas las
)entrudas )asi.as de barro 9ue almacenaban agua de llu)ia para ali)iar la escase- del
l$9uidoF a ;rinidad, Ciudad de los <useos, por9ue muestra )aliosos museos en lo 9ue
fueran el pasado siglo palacios de la opulenta aristocracia a-ucareraF y a Cienfuegos,
la Perla del 5ur, por la belle-a de su entorno .unto a la espl1ndida ba&$a de Jagua.
17& 'C$(o es %a Ds%a de %a !"9en3"d*
5=;28>8 al sur de la pro)incia de La 7abana, esta isla de unos dos mil Eilmetros
cuadrados fue canto de poetas, refugio de piratas y corsarios, argumento para
escritores, cuna del internacionalismo y actualmente tierra de c$tricos, artesan$as y
a)enturas.
Cue bauti-ada con el nombre de 4)angelista al ser descubierta por Cristbal Coln
durante su segundo )ia.e a 8m1rica en 1!,!F se supone 9ue fue el escenario descrito
por el escritor ingl1s Aobert L. 5te)enson en su conocida no)ela La isla del tesoro. 4l
nombre de =sla de Pinos perdur &asta 1,(+, cuando fue sustituido por =sla de la
Ju)entud, en ocasin de celebrarse en Cuba el V= Cesti)al <undial de la Ju)entud y
los 4studiantes.
8ntao refugio de piratas y corsarios por estar estrat1gicamente situada cerca de las
rutas mar$timas utili-adas por las flotas espaolas para transportar ri9ue-as, fue
abandonada e improducti)a durante siglos.
>esde 1+// 4spaa comen- a utili-arla como centro para deportados, y se decidi
fortificarla tres d1cadas despu1s y fundar la )illa de 3ue)a ?erona. 8 partir de ese
momento la metrpoli intensific su uso para la deportacin. 2n e.emplo inscrito en
la &istoria de la 1pocaN procedente de la c#rcel de La 7abana lleg al lugar el .o)en
independentista Jos1 <art$ el 1 de octubre de 1+(/, donde estu)o &asta el 1" de
enero de 1+(1 cuando fue deportado a 4spaa.
4n 1,2' se inici en esta isla la construccin del irnicamente denominado Presidio
<odelo, copiado de los m#s tenebrosos reclusorios norteamericanos. 8ll$ fueron
en)iados los sancionados por delitos comunes de largas condenas y tambi1n los 9ue
se opon$an al sometimiento de los gobernantes del pa$sN pasaron re)olucionarios de la
d1cada del treinta y las siguientes, como el l$der Cidel Castro y sus compaeros del
<oneada, algunos e%pedicionarios del ?ranma, combatientes clandestinos y
guerrilleros de las montaas. 7oy estas edificaciones constituyen un museo m#s para
las nue)as generaciones y turistas 9ue )isitan estas tierras. 8l triunfo de la re)olucin
el territorio pinero comen- una nue)a )ida. <iles de .)enes se trasladaron a la
tierra )irgen para estudiar y tambi1n traba.ar en el culti)o del c$trico, en el m#rmol y
en la cer#mica. D decenas de miles de .)enes africanos, asi#ticos y latinoamericanos
entonaron un canto a la solidaridad al recibir educacin primaria, secundaria,
preuni)ersitaria y t1cnico*profesional, en un r1gimen de estudio*traba.o cerca de los
campos citr$colas.
5e afirma 9ue se &an encontrado bra-aletes de oro con engarces en piedras preciosas
incrustados en sus rocas de coral. Cuenta la leyenda 9ue el pirata franc1s Latrobe,
temeroso de la persecucin 9ue ser$a ob.eto, enterr en alg@n lugar de la costa de la
4nsenada de 5iguanea el cargamento de oro y .oyas 9ue captur en barcos espaoles.
8tracti)os de esta tierra *segunda isla en e%tensin del arc&ipi1lago cubano* es la
Playa de :ibi.agua, con arenas de color negro formadas por la erosin del agua de
mar sobre las rocas de m#rmolF las cue)as de Punta del 4ste, declaradas <onumento
3acional por las pictograf$as abor$genes enconradas en sus paredesF y el Centro
=nternacional de :uceo, pues se &an seali-ado "' sitios para ese deporte.
18& 'C$(o son %os cayos de% arc6ipi?%ago c")ano*
;=4AA85 )$rgenes, playas de arenas fin$simas, )egetacin irregular, fauna sal)a.e,
fondos coralinos... algo irreal y &ermoso se esconde en la cayer$a 9ue se esparce por
el norte y el sur de Cuba, la isla grande. Por estas cualidades se puede ofrecer el
turismo en sus diferentes modalidadesN buceo, pesca, ca-a, ecoturismo y social.
Comencemos por Cayo Largo, situado al sur y casi al centro del arc&ipi1lago cubano.
Posee seis &ermosas playas, una de las cuales *;ortugas* tiene como principal
atracti)o 9ue es el lugar seleccionado por centenares de 9uelonios para deso)ar en sus
apacibles arenas.
5us fondos coralinos son una atraccin para los amantes del buceo, ya 9ue las aguas
cristalinas permiten gran )isibilidad y pueden admirarse entre otros el coral negro,
9ue se encuentra a unos treinta y cinco metros de profundidad.
8l sur de Ciego de 8)ila se e%tienden los Jardines de la Aeina, con.unto de islotes y
cayos de playas totalmente )$rgenes. Clamencos, ga)iotas, pel$canos, iguanas y otros
animales son parte del paisa.e tran9uilo y &ermoso.
La cayer$a del norte se e%tiende por sobre Gilla Clara, Ciego de W)ila y CamagIey.
2n pedrapl1n *comple.a obra de ingenier$a 9ue une a la tierra firme de Ciego de
W)ila con Cayo Coco* fue construido por cientos de &ombres, )ertiendo miles de
toneladas de piedra 9ue &oy se &a con)ertido en una e%celente autopista 9ue ya a
mediados de 1,,, alcan- los cuarenta y oc&o Eilmetros, y se pretende en una
proyeccin definiti)a 9ue alcance treinta y cinco Eilmetros m#s, )inculando el grupo
insular.
Cayo Coco, el m#s importante de toda la cayer$a, tendr# pr%imamente concluido un
comple.o tur$stico, y ampl$a su aeropuerto internacionalF Cayo ?uillermo, m#s al
oeste, ofrece un &otel flotante y &ermos$simas playasF 5abinal, al norte de CamagIey,
est# separado de tierra firme por un bra-o de mar interior de poca profundidadF y
5anta <ar$a se comunica con tierra firme por la carretera m#s e%tensa de ese tipo 9ue
se &a construido &asta el momento en el pa$s. 4s en este @ltimo lugar donde se
construye en estos aos de fin de siglo el primero de cuatro &oteles 9ue tendr#n unas
mil doscientas &abitaciones. Para el ao 2/// este n@mero debe ele)arse a m#s de
cinco mil 9uinientos, contando las edificaciones de cayos cercanos.
Para la primera d1cada del siglo VV= las in)ersiones e%tran.eras se e%tender#n en esta
-ona por oc&o cayosN Las :ru.as, 4nsenac&os, 5anta <ar$a, ?uillermo, Coco,
Paredn ?rande, 8ntn C&ico y Cru-, con una impresionante cantidad de
&abitaciones.
Da por la -ona oriental al norte de 7olgu$n se encuentra Cayo 5aet$a, con pe9ueas y
acogedoras playas en forma de conc&a, donde e%iste la posibilidad de ca-ar y pescar.
Cuba, arc&ipi1lago baado por las aguas del Caribe, tiene repartidos su belle-a y
atracti)os en todo su territorio, en armnica unidad de &ermosura.
1;& 'C"0%es -"eron %as (ani-es3aciones (0s re%e9an3es por %a %i)eraci$n de C")a
en e% sig%o pasado*
8 C=38L45 del siglo VG=== y a principios del V=V se ad)ert$a una situacin especial
en el continente americano. La )ictoria alcan-ada por los patriotas &aitianos frente a
las fuer-as de 3apolen :onaparte pro)oc una numerosa emigracin de colonos
franceses 9ue se establecieron en la pro)incia m#s oriental de Cuba. 8ll$ imprimieron
un notable impulso al culti)o del caf1, el cacao y el algodn.
Por esa 1poca, el presidente norteamericano ;&omas Jefferson &ab$a e%teriori-ado sus
intenciones de apoderarse de Cuba, so prete%to de necesidades estrat1gicas y
con)eniencia pol$tica.
Por otra parte, mientras en 4spaa se combat$a contra la in)asin napolenica, en
8m1rica del 5ur comen-aron las luc&as por la independencia. 8lrededor de 1+/+ se
produc$an en Cuba tambi1n los primeros brotes independentistas.
4n octubre de 1+! fue denunciada la Conspiracin de la 4scalera, 9ue desat una
tena- persecucin contra los T&ombres de colorU libres, y por la cual fue fusilado el
notable poeta mulato ?abriel de la Concepcin Gald1s, conocido por Pl#cido.
8l frente de una fuerte e%pedicin, 3arciso Lpe- tom la ciudad de C#rdenas, en la
costa norte de la pro)incia de <atan-as, en 1+"/F y fue durante esa ocupacin 9ue
onde por primera )e- en suelo cubano la bandera 9ue es &oy la ensea nacional.
Como resultado de la negacin de sus derec&os pol$ticos por las cortes espaolas en
1+(, y con el deseo de obtener la proteccin de 4stados 2nidos para mantener la
escla)itud y )ender cmodamente el a-@car, algunos cubanos estrec&amente ligados a
estratos de la burgues$a agraria cubana llegaron a pensar 9ue la solucin a los
problemas del pa$s estaba en la ane%in de Cuba a la nacin norteamericana. Crente a
esa idea se aline la mayor$a de los cubanos, entre ellos algunos de la alta .erar9u$a
intelectual de Jos1 8ntonio 5aco.
4ntre los factores 9ue pro)ocaron el primer al-amiento re)olucionario del pueblo
cubano, se encontraban la brutal opresin 9ue sufr$a la crisis econmica agra)ada por
el in.usto r1gimen fiscal y la influencia de las nue)as ideas pol$ticas y sociales.
4l 1/ de octubre de 1+'+ en el ingenio la >ema.agua, el abogado oriental Carlos
<anuel de C1spedes se le)ant en armas al frente de un pe9ueo grupo de patriotas,
dando comien-o a una guerra contra el poder colonial de 4spaa 9ue durar$a una
d1cada.
Los esfuer-os de los patriotas cubanos por lograr la libertad luego de prolongados y
sangrientos combates continuaron &asta el inicio de la nue)a guerra, en la 9ue otra
)e- los cubanos se lan-aron a la luc&a el 2! de febrero de 1+,".
8 pesar de la p1rdida de sus m#s 9ueridos dirigentes *Jos1 <art$ y 8ntonio <aceo*
las acti)idades militares se mantu)ieron firmes frente a //L/// soldados
coloniaIstas bien e9uipados. ;ampoco las maniobras reformistas del poder espaol a
fines de 1+,( lograron debilitar a los patriotas. 4s en estas circunstancias cuando
inter)ienen en la guerra los norteamericanos. 4stados 2nidos se apodera de Cuba,
Cilipinas y Puerto Aico con el ;ratado de Pa-, firmado en 1+,+ en Par$s, sin la
participacin de los cubanos.
La ocupacin militar del pa$s dur &asta 1,/2, cuando 9ued inaugurada la pseudo*
rep@blica cubana, con el dominio del capital e%tran.ero sobre sus recursos naturales.
19& 'Por A"? !os? Car3i es e% @?roe Naciona% de C")a*
L8 C=?2A8 de Jos1 <art$ P1re- &a sido reconocida en todas las 1pocas como uno de
los cubanos m#s preclaros del siglo V=V. =nsigne estadista, &ombre de letras,
independentista idealista y soador, era la imagen 9ue se destacaba en la etapa de la
rep@blica mediati-ada.
4l proceso re)olucionario i- su bandera de luc&a. Da en el centenario de su
nacimiento, un grupo de .)enes seguidores de su doctrina se lan- al asalto de una
fortale-a militar para llamar a las masas a una re)olucin popular.
5oberana como nunca a partir de 1,",, la patria le rindi sus &onores, public sus
)erdades, lo acerc a los nios, a los traba.adores, lo &i-o &umano y sensible. Predic
su )ida y su obra.
7oy Cuba entera &onra a a9uel .o)en, 9ue a la edad de diecis1is aos fue condenado a
prisin por las autoridades espaolas, y 9ue en su destierro en 4spaa escribi 4l
presidio pol$tico en Cuba, publicado en 1+(( y en el 9ue denuncia los &orrores de la
prisin colonial. Pero uno de los aspectos rele)antes de su )ida fue la gu$a )
organi-acin de la guerra emancipadora de 1+,", a la cual dedic sus esfuer-os para
unir a todas las clases y sectores interesados en el ob.eti)o nacional liberador. 8grup
a los cubanos de la emigracin, organi- el primer partido re)olucionario de Cuba
para luc&ar por la independencia y por una rep@blica democr#tica, y elabor un
arsenal de ideas de a)an-ada 9ue &abr$an de ser)ir de bandera no slo a los
re)olucionarios de su 1poca, sino tambi1n a los de las generaciones posteriores.
5u )erbo encendido, su oratoria )ibrante y unitaria, su )erso &ondo y sencillo, son
facetas 9ue no pueden ob)iarse por lo 9ue &an significado para las letras espaolas.
Cue cumplido en la constitucin socialista su an&elo profundo cuando escribiN TDo
9uiero 9ue la ley primera de nuestra rep@blica sea el culto de los cubanos a la
dignidad plena del &ombreU. 8s$ &a sido.
+0& 'Eesde c"0ndo co(en<$ e% di-erendo en3re C")a y Es3ados Unidos*
4L >=C4A43>6 entre 4stados 2nidos y Cuba es un fenmeno &istrico 9ue se
remonta a la segunda mitad del siglo VG===. 5u esencia descansa en las pretensiones
del poderoso pa$s del norte en imponer a la isla sus concepciones &egemnicas,
desconociendo el derec&o de esta a su independencia y soberan$a, y a establecer el
sistema econmico, pol$tico y social 9ue considere m#s con)eniente para su pueblo.
Los an&elos ane%ionistas sobre Cuba &an 9uedado plasmados en cartas de :en.amin
CranElin y Jo&n 8dams, 9uienes e%pon$an la con)eniencia de apoderarse del territorio
cubano. 8 inicios del siglo V=V el presidente norteamericano ;&omas Jefferson
declar con car#cter oficial su inter1s por apoderarse de la isla.
Criterios enarbolados a lo largo de dos siglos son la Tseguridad nacionalU y el
Tinter1s nacionalU, 9ue al defenderlos 4stados 2nidos &a reali-ado acciones
)and#licas a distintos pa$ses en )arios continentes.
;eor$as tales como la fruta madura, proclamando 9ue Cuba, una )e- separada de
4spaa e incapa- de sostenerse por s$ sola, tenia 9ue gra)itar necesariamente &acia
territorio norteamericanoF o como el fatalismo geogr#fico, 9ue ad)ert$a a las naciones
europeas no intentar Tmeter sus manosU en 8m1rica, &an sido &istricamente agitadas
para no permitir la independencia cubana.
8 finales del pasado siglo, tras la ?uerra de los >ie- 8os, Cuba depend$a del
comercio con 4stados 2nidos en un ,!J, lo 9ue condicion la idea del ane%ionismo
por parte de la burgues$a occidental cubana. 4l 71roe 3acional de Cuba, Jos1 <art$,
alert sobre los ob.eti)os norteamericanos acerca de la mayor de las 8ntillas. La
guerra necesaria ten$a el ob.eti)o estrat1gico de emancipar al pa$s del colonia.e
espaol y enfrentar la rapacidad del naciente imperialismo norteamericano.
La )oladura del acora-ado yan9ui <aine, pr%imo a las costas cubanas por el
sacrosanto derec&o de proteger )idas y propiedades estadounidenses, en febrero de
1+,+, fue el principal prete%to para iniciar la guerra con 4spaa, cuyos e.1rcitos
desgastados ser$an incapaces en poco tiempo de frenar el empu.e mamb$.
4spaa capitul en agosto de ese ao. 4n diciembre se firm el ;ratado de Par$s para
poner fin al colonia.e espaol sobre Cuba. 4l 1 de enero de 1+,, se arri la bandera
espaola y fue i-ada la de 4stados 2nidos, dando inicio a la ocupacin militar de la
isla.
4l desarme y eliminacin del 4.1rcito Libertador, la desacti)acin del Partido
Ae)olucionario Cubano, la muerte temprana de Jos1 <art$, 8ntonio <aceo y Cali%to
?arc$a, y apartado el general$simo <#%imo ?me-, de.aron a los cubanos a merced
de los norteamericanosF impusieron la 4nmienda Platt, el reconocimiento del derec&o
de inter)encin y el establecimiento de estaciones na)ales en la isla. >esde entonces,
la base na)al de ?uant#namo es ocupada por autoridades yan9uis, bas#ndose en el
arrendamiento reali-ado desde 1,/ mediante un ;ratado de Aeciprocidad entre
ambos pa$ses.
>urante el per$odo 9ue dur la rep@blica mediati-ada, el gobierno norteamericano
apoy a los gobiernos de turno, )inculados y dependientes de los terratenientes del
pa$s del norte. Los empeos )erdaderamente independentistas en la d1cada del treinta
fueron cruelmente masacrados. Cuba era realmente una neocolonia yan9ui.
8l triunfo re)olucionario de 1,",, con la adopcin de leyes radicales 9ue daban
realmente la soberan$a econmica al pueblo, las administraciones norteamericanas
asumieron una posicin de plena &ostilidadN supresin de la cuota a-ucarera, ruptura
de relaciones, blo9ueo econmico y comercial fueron las primeras acciones.
5imult#neamente apoyaron a las bandas contrarre)olucionarias, dieron soporte a la
operacin Playa ?irn, promocionaron sabota.es y atentados a las figuras rele)antes
del pa$s. <#s tarde acudieron a la guerra bacteriolgica, la presin diplom#tica a
otros pa$ses para aislar a la isla y leyes 9ue tratan de a&ogar por &ambre y enfermedad
al pueblo como la ;orricelli y la 7elms*:urton.
4l diferendo 4stados 2nidos*Cuba no es de nuestros d$as, data de casi dos siglos.
>e.ar# de e%istir el d$a en 9ue la poderosa nacin del norte comprenda 9ue la
poblacin cubana tiene el derec&o a ser libre y soberana, y aprenda a respetarla.
+1& '>"? signi-ica para %os c")anos %a )ase na9a% de Es3ados Unidos en
G"an30na(o*
;43=43>6 por sede el interior de un acora-ado de la armada norteamericana
fondeado en la ba&$a de ?uant#namo, tu)o lugar el traspaso por arrendamiento de ese
territorio cubano a 4stados 2nidos el 12 de diciembre de 1,/. Aeg$a as$ la cl#usula
G== de la 4nmienda Platt, ap1ndice constitucional impuesto a la naciente Aep@blica
de Cuba tras la ocupacin militar de la isla por tropas norteamericanas, cuando ya los
mambises &ab$an casi con9uistado la independencia luego de treinta aos de guerra
contra 4spaa.
4n esa enmienda se establec$a 9ue Cuba estaba obligada a )ender o arrendar parte de
su territorio al poderoso )ecino del norte para el establecimiento de estaciones
na)ales o carboneras.
La permanencia de la autoridad estadounidense en esa -ona salta a la )ista como
flagrante )iolacin del principio de consentimiento, a la lu- del derec&o internacional,
mediante el cual se establece 9ue toda obligacin .ur$dica de esa naturale-a debe
basarse en la plena coincidencia entre las partes a partir de ob.eti)os y Causas de
intereses comunes. 6tro elemento 9ue debe tenerse en cuenta es la pretensin por
parte de 4stados 2nidos de suplantar la condicin de temporalidad 9ue entraa
siempre todo arriendo por una manifiesta intencin de perpetuidad.
La base na)al de 4stados 2nidos en territorio cubano constituye una amena-a a la
pa- y a la seguridad nacional, pues es &arto conocida la &ostilidad del gobierno
norteamericano por la re)olucin cubana 9ue se e)idencia desde los primeros meses
de 1,",, y se &ace m#s precisa con el rompimiento de relaciones diplom#ticas en
enero de 1,'1, y la imposicin de un f1rreo blo9ueo econmico, financiero y
comercial desde 1,'2, am1n el apoyo material y log$stico a bandas
contrarre)olucionarias, intentos de asesinatos a dirigentes del gobierno, sabota.es
criminales, guerra ideolgica con transmisiones radiales de propaganda enemiga,
guerra bacteriolgica, en fin...
La constitucin cubana aprobada en referendo popular con el ,(,(J de los )otantes
el 2! de febrero de 1,(' e%presa 9ue la nacin cubana Trepudia y considera ilegales y
nulos los tratados, pactos o concesiones concertadas en condiciones de desigualdad o
9ue desconocen o disminuyen su soberan$a sobre cual9uier porcin de su territorio
nacionalU.
Los cubanos se mantienen dignos y )igilantes ante esa prepotencia norteamericana,
aun9ue decididos a &acer )aler sus derec&os cuando las circunstancias lo &agan
posible.
++& 'C$(o s"rge %a consigna de Pa3ria o C"er3e*
L8 CA854 se escuc& por )e- primera el " de mar-o de 1,'/, e%presada por Cidel
Castro en sus palabras de despedida de duelo a las )$ctimas del sabota.e reali-ado el
d$a anterior al )apor La Coubre.
La necesidad de obtener armamentos para defender las con9uistas re)olucionarias
&ac$a imprescindible la compra de e9uipos y municiones para armar al pueblo.
89uella tarde, cuando los traba.adores portuarios proced$an a descargar el bu9ue
franc1s, en una de las bodegas se produ.o una gran e%plosin, y posteriormente otra,
9ue de.aron el triste saldo de m#s de cien muertos y decenas de &eridos.
Las in)estigaciones e)idenciaron la mano artera de la reaccin, 9ue para impedir la
entrada de armas a Cuba no )acil en ocasionar muertos, mutilados y &eridos. La
8gencia Central de =nteligencia norteamericana y las fuer-as del Pent#gono fueron
denunciadas p@blicamente.
4l gu$a de la re)olucin cubana, en su di#logo con el pueblo all$ reunido, ratific la
)oluntad de resistir ante cual9uier agresin, aadiendo 9ue se abr$a una disyunti)a
similar a la del inicio de la luc&a, la de Libertad o <uerte, Tslo 9ue a&ora libertad
9uiere decir algo m#s toda)$a *e%clam*, libertad 9uiere decir patria, y la disyunti)a
nuestra ser# Patria o <uerteU.
8penas tres meses despu1s, en plena etapa efer)escente de contacto con el pueblo,
Cidel clausur el = Congreso Ae)olucionario de la Cederacin 3acional de
;raba.adores de :arber$as y Pelu9uer$as. 4se d$a, 1/ de .unio de 1,'/, enfati- ante
los traba.adores 9ue Tcueste lo 9ue cueste, )encer# nuestro pueblo X...Y por9ue sus
&i.os tienen el )alor, el patriotismo y la unin 9ue en una obra como esta se necesita,
por9ue sus &i.os &an dic&o ZPatria o <uerte[, por9ue esa es la consigna de cada
cubano. Para cada uno de nosotros, indi)idualmente, la consigna es ZPatria o <uerte[,
pero para el pueblo, 9ue a la larga saldr# )ictorioso, la consigna es ZGenceremos[U. D
con estas palabras recibieron a los mercenarios in)asores los milicianos en las costas
de la Ci1naga de QapataF con ellas se resisti en los d$as gloriosos de la Crisis de
6ctubreF ellas &an ser)ido de consigna ante cual9uier agresin miItar, econmica o
pol$tica. 7oy la inmensa mayor$a de los cubanos lle)an esa disyunti)a en su sangre, y
no )acilan un instante en ofrecer la )ida por su re)olucin, decididos a )encer.
<#s recientemente, .unto a esta consigna, los cubanos pronuncian 5ocialismo o
<uerte, con)encidos de 9ue slo este r1gimen social puede ofrecerles la posibilidad
de su independencia nacional y de sobre)i)ir como nacin soberana.
+,& 'C$(o se (an3iene %a presencia y 9igencia de% C6e G"e9ara en e% pa1s *
C283>6 se escuc&a la )o- del pionero, emocionado, e%clamarN TZ5eremos como el
C&e[U, no es una frase &ueca 9ue repite sin conocer 9ui1n fue el legendario
guerrillero, 9u1 &i-o por Cuba y por la &umanidad, cmo fue su )ida.
<uy por el contrario, el C&e )i)e a pesar de 9ue fue asesinado en :oli)ia. 5u e.emplo
se respira en forma cotidiana en las .ornadas de traba.o )oluntarioF en los centros
&ospitalarios, donde su imagen nunca faltaF en las escuelas, cuando los pioneros
suean con seguir su &uella de bondad y audacia, de )oluntad f1rrea, y de ideales por
reali-ar.
4l C&e significa para Cuba el fiel y )aliente compaero de Cidel en <1%ico, el
?ranma, la 5ierra, y en los d$as dif$ciles y &ermosos del triunfo. Aepresenta la
&onestidad, el esfuer-o constante )enciendo el asma para defender la causa de la
libertad, la dedicacin sistem#tica al estudio, la )ergIen-a re)olucionaria en los foros
internacionales al-ando la )o- de Cuba, la aficin por los deportes, el amor a los
nios... 4l pensamiento econmico de 4rnesto C&e ?ue)ara es actual material de
estudio, por9ue sus ideas mantienen plena )igencia. 4l estaba con)encido de 9ue sin
la conciencia del &ombre nue)o, aun9ue se produ.eran muc&as ri9ue-as, no se pod$a
construir el socialismo, sociedad superior, y no se pod$a aspirar .am#s al comunismo.
>el C&e, as$ como de las generaciones anteriores de cubanos, es la siembra del
internacionalismo 9ue florece d$a a d$a en el cora-n de los &ombres y mu.eres de
Cuba.
>urante 1,,( la presencia del ?uerrillero 7eroico se &i-o m#s emoti)a y fuerte para
el mundo, y especialmente para todos los cubanos. ;reinta aos &ab$an transcurrido
de su 1pica ca$da en combate en tierras boli)ianas cuando fueron &allados sus restos y
de)ueltos a su amada Cuba. 2n pueblo entero desfil ante los f1retros del C&e y sus
compaeros, 9ue primero descansaron en el memorial de la Pla-a de la Ae)olucin
Jos1 Cidel Castro &a dic&oN T5i &ace falta un paradigma, si &ace falta un modelo, si
&ace falta un e.emplo a imitar X...Y son imprescindibles &ombres como el C&e,
&ombres y mu.eres 9ue lo imiten, 9ue sean como 1l, 9ue piensen como 1l, 9ue act@en
como 1lU.
+.& 'A A"? %%a(an %os c")anos per1odo especia%*
54 78 >436<=38>6 as$ a una etapa e%cepcionalmente cr$tica del proceso
re)olucionario cubano, en la 9ue confluyen las duras condiciones econmicas y
pol$ticas moti)adas por el blo9ueo econmico y comercial 9ue e.erce 4stados 2nidos
por casi cuatro d1cadas, y el derrumbe del socialismo en los pa$ses de 4uropa del
este, as$ como el desmembramiento de la 2nin 5o)i1tica, con los cuales manten$a el
+"J de su intercambio comercial. 4%ist$a, adem#s, una situacin ad)ersa debido,
entre otras ra-ones, al intercambio desigual, 9ue tiende a reducir los ingresos por
e%portacin y encarecer las importacionesF la aplicacin de altas tasas de inter1sF las
pesadas limitaciones impuestas por la deuda e%ternaF el descenso en el precio del
a-@car y una situacin clim#tica especialmente desfa)orable. Por otra parte, el pa$s
estaba imposibilitado de recibir cr1ditos financieros de instituciones o pa$s alguno.
;odo lo anterior &i-o 9ue a partir de octubre de 1,,/, Cuba asumiera la primera fase
del per$odo especial en tiempos de pa-, adoptando como estrategia la concentracin
de recursos y esfuer-os en un con.unto de planes de m#%ima prioridad, y
restringiendo de forma organi-ada y .usta los ni)eles de consumo de la poblacin, y
de la acti)idad econmica en esferas di)ersas.
Punto )ulnerable es el combustible. 5i al triunfo re)olucionario el pa$s consum$a unos
cuatro millones de toneladas de petrleo, con la electrificacin de m#s del no)enta
por ciento de la poblacin, los grandes planes de desarrollo y otras empresas, &icieron
9ue en 1,,/ se necesitaran trece millones de toneladas. Como consecuencia de la
situacin de crisis 9ue atra)esaba la 2nin 5o)i1tica, fue necesario reducir
dr#sticamente el con)enio de trece a die- millones, y a esto se sum la demora en las
entregas del combustible. 8greg@ese a esta situacin 9ue el petrleo se mantiene a
precios muy ele)ados.
Cuba se propuso, bas#ndose fundamentalmente en los esfuer-os del pueblo y en la
conciencia pol$tica alcan-ada por las tres generaciones 9ue &oy con)i)en, no slo
resistir sin doblegar las banderas socialistas, sino tambi1n continuar su desarrollo en
alguna medida.
Las carencias en la aumentacin, los apagones *d1ficit de energ$a el1ctrica por
per$odos de tiempo )ariables en )arios d$as de la semana*, los problemas del
transporte, la ausencia casi total de distribucin de ropa y cal-ado, el agra)amiento de
la situacin de la )i)ienda, la escase- de productos necesarios para la &igiene
personal y colecti)a, las estrec&eces materiales 9ue afectaron a los e%tensos ser)icios
de educacin y salud, significaron para la poblacin un largo lustro de necesidades y
un )iolento decrecimiento del ni)el de )ida alcan-ado en la d1cada del oc&enta. 5in
embargo, pese a la crisis econmica, el estado socialista no cerr una sola escuela,
c$rculo infantil, &ospital u &ogar de ancianos. 3adie 9ued desamparado.
La recuperacin econmica iniciada en 1,," creci sistem#ticamente desde entonces,
en un proceso dif$cil y comple.o. D si ese ao a)an-amos en un 2,"J, y en 1,,'
logramos un (,+J por el salto producti)o en la -afra, al ao siguiente el crecimiento
fue del 2,"J. Pero en 1,,+, por primera )e-, &ubo crecimiento del producto interno
bruto OP=:P en 1,2J, .unto al decrecimiento del consumo de portadores energ1ticos
del 1,,J. 8lgo alentador, por9ue si bien en 1,,( el P=: &ab$a crecido 2,"J, los
portadores energ1ticos aumentaron un cuatro por ciento. >ebemos recordar 9ue la
econom$a cay un !J durante el lustro anterior.
4sta gradual recuperacin se &a con)ertido en una )ictoria e%traordinaria para la
poblacin cubana, 9ue est# resistiendo el embate del per$odo especial con una
dignidad e.emplar, esfuer-o supremo, inteligentes estrategias y fe en el futuro.
+/& 'C"0% es 6oy %a es3ra3egia econ$(ica de% pa1s*
>2A83;4 algunas d1cadas la estrategia econmica 9ue mantu)o el pa$s se basaba
en gran medida en las relaciones con el campo sociaIsta y especialmente con el gran
estado multinacional 9ue era la 2nin 5o)i1tica. 8l )iolentarse las estructuras
pol$tico*econmicas de los pa$ses del este europeo y desintegrarse la 2nin 5o)i1tica,
sufri Cuba una e%traordinaria afectacin de su comercio, 9ue pr#cticamente se
parali-, y se presentaron fuertes incumplimientos en las entregas de un amplio
con.unto de productos muy sensibles para la econom$a cubana.
4l =G Con greso del Partido Comunista de Cuba tra- entonces la estrategia 9ue
deb$a seguirse, basada especialmente en un programa alimentario para acelerar la
produccin de productos b#sicosF la e%plotacin eficiente de los lugares tur$sticos,
entre los 9ue se destacan e%tensas #reas de cayos y playasF la generali-acin de los
logros cient$ficos y t1cnicos, y los procedimientos racionali-adores e inno)adoresF el
impulso a las e%portaciones tradicionales Oa-@car, c$tricos, n$9uel, productos de la
pesca, caf1 y tabacoP y el est$mulo a la in)ersin e%tran.era.
8 partir de 1,,', el G Congreso &ace 1nfasis en las medidas dirigidas a una mayor
eficiencia econmicaF incluye la reforma bancaria, el fortalecimiento del control
econmico, el perfeccionamiento del sistema empresarial y la restructuracin paralela
del empleo.
La firme resistencia del pueblo, .unto a algunas transformaciones efectuadas con
orden y mesura, e%plican 9ue el pa$s &aya soportado la s@bita desaparicin del +"J
de sus mercados, m#s de la mitad de su abastecimiento de combustible y m#s del
setenta por ciento de sus importaciones.
4ntre las transformaciones y medidas 9ue &an tenido lugar pueden mencionarse la
legali-acin de la tenencia de di)isas con)ertiblesF la entrega del "+J de las tierras
del estado en usufructo gratuito a sus traba.adores organi-ados en cooperati)asF el
saneamiento financiero interno, 9ue incluy una nue)a ley tributaria y un riguroso
control del presupuesto, acompaado de cierto aumento de precios de bienes no
esenciales y eliminacin de determinadas gratuidades.
8dem#s, el est$mulo al autoempleo, la adecuacin de nuestra legislacin laboral y
salarial a las condiciones actuales y futurasF la creacin de nue)os mercados
complementarios de libre formacin de precios para productos agropecuarios e
industrialesF la organi-acin y simplificacin del aparato central del estado,
concediendo m#s autonom$a a las empresas y facultades para una administracin m#s
descentrali-ada.
4n la estrategia ocupa un importante lugar la apertura a la in)ersin de capital
e%tran.ero como fuente imprescindible de capital, tecnolog$a y mercados, sin los
cuales es imposible concebir actualmente el desarrollo econmico.
Cuba cuenta con una infraestructura suficiente 9ue permite tener electrificada al ,!J
de la poblacin, una e%tendida red )ial, de ferrocarriles y de a)iacin ci)il, adecuadas
instalaciones portuarias y un ser)icio de telecomunicaciones en proceso de
moderni-acin. 8dem#s, posee otros rasgos no menos importantesN un pa$s ordenado
y estable, y una sociedad donde no e%iste el terrorismo ni el tr#fico de drogas, una
nacin soberana y un gobierno &onrado. Lo 9ue s$ no est# en estrategia alguna, ni se
ofrece a los socios e%tran.eros, es un tr#nsito al capitalismo. Cuba es y seguir# siendo
un pa$s socialista.
+7& '>"? 9en3a=as o-rece a% ("ndo %a Fey de Dn9ersi$n E23ran=era*
823024 desde principios de 1,+2 un decreto establec$a las condiciones legales
para el desarrollo de las asociaciones econmicas entre Cuba y empresas e%tran.eras,
es en 1,,1 cuando se increment esa gestin debido a la urgente necesidad de
in)ersin de capitales para e9uilibrar la econom$a. Posteriormente, a finales de 1,,",
se aprob la Ley para la =n)ersin 4%tran.era, actuali-ada y acorde con los
re9uerimientos cubanos, incluso al ni)el de la legislacin internacional.
4sta ley permite la creacin de asociaciones en pr#cticamente todos los sectores,
e%cepto en salud p@blica, educacin y fuer-as armadas. ;ambi1n se &an firmado un
grupo de asociaciones 9ue )an dirigidas al sector inmobiliario, y se &a abierto un
nue)o espacio de negociacin en -onas francas y par9ues industriales.
4l aumento de las in)ersiones puede obser)arse en una sencilla comparacinN si en
1,,2 funcionaban "/ asociaciones econmicas con 1/ pa$ses, en unas oc&o ramas de
la econom$a, a mediados de 1,,, funcionaban algo m#s de trescientas sesenta
asociaciones de !/ pa$ses en ! ramas de la econom$a nacional. ;ambi1n se &ab$an
firmado ( acuerdos de Proteccin y Promocin Aec$proca de =n)ersiones con igual
n@mero de pa$ses. 8dem#s de los atracti)os econmicos 9ue ofrece la legislacin
cubana, superiores a los 9ue normalmente se dan a in)ersiones for#neas en otras
naciones, Cuba posee adem#s las caracter$sticas de su poblacin altamente calificada
con ni)el promedio de educacin de die- grados, ri9ue-as naturales, estabilidad
pol$tica y seguridad de la sociedad.
La mayor parte de las empresas mi%tas y asociaciones econmicas se concentran en
la e%traccin y prospeccin petrolera, en la miner$a en general, particularmente en el
n$9uel, en las telecomunicaciones y el turismoF tambi1n en las industrias alimentaria,
ligera, sideromec#nica, energ1tica y la de materiales de construccin. 5e &an
in)ertido m#s de dos mil millones de dlares.
4s importante aclarar 9ue en ning@n caso el pa$s )ende sus propiedades, sino 9ue las
aporta a una nue)a asociacin donde ambos miembros empie-an a ser dueos de todo
con determinada participacin. Lo 9ue Cuba necesita es la tecnolog$a 9ue no est# a su
alcance, mercado y capital fresco.
+8& 'C$(o in-%"ye e% 3"ris(o en %a econo(1a de% pa1s*
L8 =3>25;A=8 sin c&imenea, como algunos la suelen denominar, &a resultado una
pie-a cla)e en la econom$a del pa$s en estos @ltimos aos. 8ctualmente algunos
especialistas &an llegado a afirmar 9ue el desarrollo tur$stico &a pasado de ser la
locomotora de la recuperacin econmica a con)ertirse en su )erdadero cora-n.
:asan esta argumentacin no slo en su )alioso aporte en di)isas al presupuesto
nacional, sino como importante fuente de empleos y de financiamientos, y en
promotor de la produccin nacional.
D si era ya significati)o 9ue en 1,," los ingresos por este concepto fueran de mil
miones de dlares, con la )isita al territorio nacional de m#s de setecientos cuarenta
mil )ia.eros *un 2/J m#s 9ue el ao precedente*, en 1,,( arribaron a la mayor de las
8ntillas un milln ciento setenta mil personas, y en 1,,+ sobrepas el milln
cuatrocientos mil, con lo cual Cuba consolid su posicin entre los po9u$simos pa$ses
del #rea 9ue acogen m#s de un milln de )isitantes. 7a generado empleo para m#s de
oc&enta mil personas, mientras otras doscientas cincuenta mil tienen asegurados sus
puestos gracias al desarrollo tur$stico.
Las pre)isiones estatales apuntan a la cifra de dos millones de turistas para el ao
2///, y para ello se prepara el pa$s. 4l n@mero de &abitaciones disponibles asciende
ao tras ao, y si en 1,,' e%ist$an unas 2 !// distribuidas entre dos ofertas
principalesN playa y ciudad, a principios de 1,,, se acercaban a las treinta y un mil.
8ctualmente se construyen unas cuatro mil &abitaciones en m#s de treinta
instalaciones &oteleras.
4n Cuba operaban en 1,,, diecioc&o cadenas &oteleras internacionalesN siete de
4spaa, dos de Crancia, cuatro de =talia, una de Jamaica, y tambi1n de Canad#,
<1%ico y 7olanda.
3o es ocioso recordar 9ue las condiciones para este auge tur$stico no eran las
me.ores. 4n estos aos de depresin econmica la propaganda anticubana se &a
acrecentadoF surgi la neuropat$a epid1mica fundamentalmente en las pro)incias
occidentales, se produ.eron fenmenos de emigracin y la llamada crisis de balseros
en agosto de 1,,!, y m#s recientemente las condiciones clim#ticas ad)ersas. >e otro
lado, se ofrecen las condiciones geogr#ficas del arc&ipi1lago cubano, las
caracter$sticas de su poblacin, el orden y la seguridad con 9ue se )i)e, y el propio
prestigio del pa$s.
+;& 'C"0%es son %os principa%es po%os 3"r1s3icos*
6C76 son las regiones priori-adas en los planes de desarrollo tur$stico, 9ue abarcan
el ,/J de las instalaciones e%istentesN Ciudad de La 7abana, Garadero, costa sur
central y oriental O;rinidad, CienfuegosP, norte de Ciego de W)ila, de CamagIey y de
7olgu$n, y el arc&ipi1lago de los Canarreos, con la =sla de la Ju)entud y Cayo Largo.
Las in)ersiones e%tran.eras en esta esfera crecen, fundamentadas en una combinacin
de empresas mi%tas, cr1ditos e%ternos, proyectos inmobiliarios .unto a la in)ersin
estatal pura.
Las playas de arena fin$sima, la atraccin de la naturale-a )irgen en cayos de nuestro
arc&ipi1lago, las antiguas ciudades patrimonios de la &umanidad, la leyenda )igente
de un pueblo 9ue resiste sonriendo, atrae cada )e- m#s a los ciudadanos de todo el
mundo.
+9& '>"? -or(as 3iene e% 3"ris(o especia%i<ado*
78D 9uien piensa 9ue Cuba es slo &ermosos paisa.es, bell$simas playas, &istoria y
cultura. Aealmente es eso y muc&o m#s. 4%iste un turismo especiali-ado seg@n la
aficin a la pesca, aY buceo, a la ca-a y al ecoturismo. ;ambi1n puede ser )isitada por
ser sede de un e)ento cient$fico, de un curso especiali-ado y, sobre todo, para conocer
a su pueblo.
5e supone en un c#lculo oficial 9ue m#s de mil barcos fueron &undidos entre los
siglos VG= al VG7= cerca de las costas cubanas, )$ctimas de ata9ues de corsarios y
piratas, o de las tormentas tropicales 9ue cada ao a-otan a las islas caribeas.
3umerosas na)es naufragaban. 4.emplo de ello es 3uestra 5eora del Aosario, 9ue
en 1",/ se fue a pi9ue con todas sus ri9ue-as a bordo, al norte de Pinar del A$o, y
recientemente &a sido descubierto. Lo m#s importante de este cementerio na)al es
9ue no &a sido totalmente e%plorado, y menos a@n e%ca)ado ar9ueolgicamente, por
lo 9ue se considera un #rea protegida y )irgen.
La pesca es otro atracti)o tur$stico, pues el mar 9ue nos rodea es como un gigantesco
acuario, y e%isten adem#s muc&os lagos y presas con abundancia de truc&as. La -ona
norte del litoral &abanero est# reconocida como una de las me.ores para la pesca del
castero O:lue <arlinP, la agu.a abanico y la agu.a blanca, adem#s del dorado, la
picuda, el bonito y el at@n. 8nualmente se con)oca el ;orneo Cl#sico =nternacional de
la Pesca de la 8gu.a 4rnest 7emingBay, y el ;orneo =nternacional del :lue <arlin en
la <arina 7emingBay, de la capital &abanera.
?randes perspecti)as se ofrecen para la ca-a. Por su posicin geogr#fica Cuba es
atra)esada por dos corredores de a)es migratorias en su trayectoria al sur y su regreso
al norte. 5e pueden ca-ar los patos sil)adores, el ba&ama pintel, el rody docE y las
a)es migratorias. 7ay cotos de ca-a en Pinar del A$o, La 7abana, Gilla Clara, 5ancti
5p$ritus, Ciego de 8)ila, CamagIey, 7olgu$n, ?ranma y 5antiago de Cuba.
4l eco*turismo es una nue)a manera de )ia.ar en contacto estrec&o con la naturale-a,
disfrutando de ella y a la )e- contribuyendo a su conser)acin. 5e practica en la -ona
occidental del pa$sN 5ierra del Aosario, declarada reser)a de la biosferaF 5oroaF Galle
de Ginales y el Par9ue 3acional La ?IiraF en la -ona central el Par9ue 3acional
Ci1naga de Qapata y Cienfuegos*;opes de Collantes*;rinidadF y en la -ona oriental
?uant#namo*Caimanera, ?ranma con el ?ran Par9ue 3acional 5ierra <aestra, y el
Par9ue 3acional >esembarco de ?ranma.
,0& 'C"0%es son s"s rec"rsos (inera%es*
8 P458A de su #rea relati)amente pe9uea, Cuba cuenta con di)ersos tipos de
materia prima mineral. 3o posee, sin embargo, algunos muy importantes como el
carbn y las fosforitas. Aespecto a los combustibles, se destaca principalmente la
turba, con grandes reser)as en la pen$nsula de Qapata. 5on yacimientos importantes
los 9ue contienen n$9uel, cobalto y &ierro, con reser)as 9ue ascienden a centenares de
millones de toneladas. ;ambi1n los de laterita tienen inter1s internacional. 7ay
igualmente reser)as de cromitas O<oa y 3icaroP, magnesita OCamagIeyP, cobre
Ocercan$as de 5antiago de Cuba y <ata&ambreP, tungsteno O=sla de la Ju)entudP,
manganeso, caol$n y m#rmol.
,1& 'C"0%es son %os principa%es prod"c3os c")anos de e2por3aci$n*
563 4L 8Q\C8A, los c$tricos, el n$9uel, pescado y mariscos, ron, caf1, tabaco,
m#rmoles... >urante los @ltimos aos, como resultado del fruto del traba.o de
cient$ficos y t1cnicos, &an salido al mercado internacional di)ersos medicamentos
O)acunas anti*meningocccica y contra la &epatitis :, interfernP y e9uipos m1dicos
O5istema 2ltramicroanal$tico, <edicic, Cardiocid y otrosP, 9ue compiten por su
eficiencia en beneficio de la salud del &ombre.
2. 'C"0% es %a principa% ind"s3ria de% pa1s*
83;8R6 se dec$a 9ue Tsin a-@car no &ay pa$sU. Lo cierto es 9ue nuestras tierras
poseen las condiciones necesarias para el culti)o de la caa de a-@car en grandes
proporciones y con buenos rendimientos. D no podemos desdear esta facultad
ofrecida por la naturale-a, 9ue los cubanos &emos sabido apro)ec&ar.
La agroindustria a-ucarera tiene por tanto un importante peso en la econom$a cubana,
y continuar# siendo, por alg@n tiempo, el principal rengln de e%portacin, y con los
deri)ados, el soporte del desarrollo de otras acti)idades b#sicas como la aumentacin
animal, la biotecnolog$a y la industria 9u$mica, entre otras.
8 principios del proceso re)olucionario, la industria a-ucarera recibi duros golpesN
los mercados tradicionales fueron li9uidados por el gobierno norteamericano, las
compras de e9uipos se &icieron imposibles, y se marc&aron del pa$s numerosos
cuadros calificados. 4n 1,' Cuba produ.o slo ,+ millones de toneladas de a-@car
crudo f$sico.
8o por ao se agra)aba la escase- de fuer-a de traba.o, ya 9ue al eliminarse el
desempleo, disminu$an los cortadores &abituales 9ue pasaban a reali-ar otras tareas.
4l pa$s carec$a de industria mec#nica y de la industria t1cnica para la moderni-acin
de la cosec&a.
Contingentes de traba.adores industriales y de otras esferas se mo)ili-aron para los
cortes, unidos a los soldados del e.1rcito, y estudiantes en campaas )oluntarias. 4l
C&e ?ue)ara fue uno de los m#%imos inspiradores de este esfuer-o.
4n el lustro 1,''*1,(/ se reali- el primer plan de desarrollo de la industria
a-ucareraN &ubo amplias in)ersiones, se dedic una e%tensin mayor de tierra al
culti)o caero, se utili-aron fertili-antes. 4n 1,(/ se alcan- la -afra mayor de todos
los tiempos y la mayor de a-@car de caa en el mundo.
Posteriormente se produ.o una reduccin en las cosec&as, pero a partir de 1,( el
ascenso producti)o se mantu)o continuo. 4n 1,+" el al-a se mecani- totalmente, y
en 1,,/ la mecani-acin del corte alcan- el (1J. ;odos los centrales a-ucareros
pasaron a con)ertirse en comple.os agroindustriales. <iles de ingenieros y t1cnicos
de ni)el medio superior y medio traba.aban en esta esfera.
Las limitaciones en combustibles y recursos, deri)adas del per$odo especial, &icieron
9ue se sustituyeran parte de los e9uipos de siembra, corte y transportacin por el
esfuer-o del &ombre y el animal dom1stico. <#s de doscientos mil bueyes se
domesticaron para reali-ar duras faenas, y se re9uiri de un alto n@mero de &ombres
para el corte. 4n el ao 1,,! *1,," la cifra de produccin descendi a , millones de
toneladas.
4l pa$s dio pasos encaminados a cambiar ese panorama, y obtu)o unos trescientos
millones de dlares en cr1ditos para la -afra de 1,,"*1,,'F pero se e%ig$an altos
rendimientos producti)os por las fuertes condiciones de pago. 4l esfuer-o fue
gigantesco ante las llu)ias copiosas y frecuentes 9ue inundaron los terrenos, pero al
fin la meta pudo ser alcan-ada. 5e lograron !,! millones de toneladas de a-@carN 1,1
millones m#s 9ue en la anterior campaa.
Gale &acer un comentario. >esde principios de esa d1cada, para lograr mayores
producciones del crudo, &ubo molidas en mayo, per$odo en 9ue el rendimiento
comien-a a descenderF se cortaron plantaciones correspondientes a cosec&as futuras
9ue no &ab$an madurado suficientementeF y debido a la carencia de &erbicidas y otros
factores las caas no llegaban suficientemente limpias al central.
La cosec&a de 1,,(*1,,+ marc el punto m#s ba.o de todo el per$odo re)olucionarioN
,2 millones de toneladas de a-@car. 5e &i-o imprescindible una estrategia de
recuperacin 9ue pusiera su 1nfasis en la reduccin de los costos, en la eficiencia, en
la no interferencia con las -afras siguientes, as$ como en la aplicacin de frmulas de
pago 9ue estimularan a los productores caeros, entre otros aspectos.
D se comen-aron a )er los primeros resultados de necesarias medidas organi-ati)as.
Cundamental fue el cumplimiento del modesto pero realista plan de ,' millones de
toneladas de a-@car en 1,,+*1,,,, en tiempo, con eficiencia y medidas de
organi-acin 9ue a la )e- garanti-aran las campaas siguientes. 5e detu)o la
situacin anterior 9ue promo)$a la despoblacin caera y desestabili-aba la
composicin de las cepas. 5e pararon las m#9uinas cuando no e%ist$an ya condiciones
ra-onables para moler por no tener caas con aceptable contenido en a-@car, una
gestin rentable o pudiera daar la -afra siguiente. 4n fin, fue frenado el descenso en
el sector a-ucarero, tan ansiado para aumentar la recuperacin de la econom$a
nacional.
,,& 'C"0% es %a es3ra3egia en %a prod"cci$n de% 6a)ano*
8 C=38L45 de 1,,( Cuba dio a conocer 9ue &ab$a elaborado 1// millones de
&abanos para la e%portacin *un salto de crecimiento de un !2,+J sobre la
produccin del ao anterior*, y lan- su meta de 1'/ millones para la cosec&a de
1,,+, llegar antes del 2/// a los 2// millones, y en el tercer ao del pr%imo siglo
alcan-ar los !// millones de puros de ptima calidad si la demanda lo .ustifica. 4n
1,,+, tras un esfuer-o e%traordinario en la cadena producti)a, se alcan- la meta
pre)ista. 4l tabaco )ol)$a a ser uno de los fondos e%portables 1lites del pa$s.
4sta recuperacin, de gran importancia para la econom$a por su aporte de m#s de
ciento setenta millones de dlares, fue el resultado de un gran esfuer-o, dedicacin,
organi-acin e inteligencia. Aesultaba necesario salir del estado cr$tico en 9ue &ab$a
ca$do la produccin en 1,,*1,,!, cuando slo se cosec&aron unos trescientos
sesenta mil 9uintales, se e%portaron unos cincuenta millones de tabaco y &ubo 9ue
importar nue)e mil toneladas de materia prima para sostener la elaboracin de
cigarros dedicados al consumo nacional.
4l salto producti)o tu)o su origen en la creacin de las 2nidades :#sicas de
Produccin Cooperati)a O2:PCP en el sector, la entrega de tierras en usufructo a
familias para su culti)o, la disponibilidad de un m$nimo de recursos materiales
indispensables, la introduccin de nue)as )ariedades de e%celente calidad y
resistentes a enfermedades, el empleo de nue)as tecnolog$as, una me.or organi-acin
del proceso producti)o, y la construccin y reparacin de aposentos 9ue pasaron de
unos cuarenta mil a m#s de sesenta y cinco mil. 6tras medidas comprendieron la
incorporacin de m#s de dos mil nue)os taba9ueros, y otros dos mil .)enes
capacit#ndoseF la adaptacin y remodelacin de 1! nue)as f#bricas de tabaco para la
e%portacin, y la reparacin de las 1( e%istentes. ;ambi1n se confeccionaron m#s de
cuatro millones de en)ases de distintos tipos, decenas de miles de moldes y otros
insumos.
3o debe ol)idarse 9ue la fabricacin del &abano es una tradicin 9ue data de cinco
siglos, y 9ue millones de personas en el mundo buscan afanosamente las )itolas
cubanas, ya sean del Co&iba, <ontecristo u otras. >e las // )itolas 9ue e%porta la
mayor de las 8ntillas, las cuarenta y dos m#s populares en el mundo se confeccionan
a mano utili-ando cinco tipos de &o.as, seleccionadas de acuerdo con su te%tura, color
y tamao.
8un9ue el tabaco se culti)a en todo el territorio, &ay )arias regiones principalesN en el
oriente del pa$s, en la pro)incia central de Gilla Clara, en La 7abana y en la pro)incia
de Pinar del A$o. 4s en esta @ltima, en Gueltaba.o, con su singular clima y su suelo
@nico, donde se producen todas las &o.as necesarias para la elaboracin de los puros,
principalmente en las -onas de 5an Luis y 5an Juan y <art$ne-, 9ue la destre-a
&umana transforma en una ansiada .oya de delicado aroma y sabor inigualable.
,.& 'C$(o se co(por3a %a e23racci$n de pe3r$%eo*
L8 4VPL6;8C=]3 petrolera tiene antecedentes en el pasado siglo, ya 9ue en 1++1
se perforaron cuatro po-os en 5an <iguel de <otembo, y encontraron nafta a unos
trescientos metros. 4sta empresa languideci por falta de medios.
4n 1,1! se perfor en :acuranao, y aos despu1s se reanim <otembo. 4n 1,1( se
produ.eron unas treinta mil toneladas, pero los po-os se agotaban prematuramente
debido a la t1cnica rudimentaria empleada. 4n la d1cada del treinta se )ol)i a
reacti)ar <otemboF ya se &ab$an perforado unos doscientos po-os con profundidad
fluctuante desde el inicio de los traba.os. 4n la d1cada del cuarenta y &asta 1,"! se
perforaron "/ po-os m#s, y se tecnific el traba.o geolgico. Los empresarios
norteamericanos comen-aron a in)estigar la plataforma marina. >e 1,"" a 1,"+ se
desarroll una gran campaa geolgica y geof$sica 9ue propici el &alla-go de
nue)os yacimientos.
8l triunfo de la re)olucin, la nacionali-acin de las ri9ue-as del suelo tra.o airadas
reacciones de las compa$as e%tran.eras. 4l desarrollo petrolero propici la
calificacin del personal y la perforacin de po-os de e%plotacin, 9ue tra.o como
consecuencia la produccin en 1,+1 de 2"+L,// toneladas m1tricas, es decir, cuatro y
media )eces m#s 9ue en 1,"+.
4l ascenso de la produccin continu progresi)amenteN en 1,+2 lleg a "!1 ///
toneladas m1tricas, en 1,+, se ele) a (1+ !// y a partir de 1,," se est#n
produciendo m#s de un milln cuatrocientas mil toneladas, )olumen r1cord. Da en
1,,+ se e%tra.eron m#s de un milln seiscientas mil toneladas, y m#s de ciento )einte
millones setecientos mil metros c@bicos de gas acompaante 9ue fa)orece la
generacin el1ctrica y el gas manufacturado en la capital.
Los yacimientos en e%plotacin se locali-an en GaraderoF :oca de JarucoF en las
-onas de Cristales, cerca de JatibonicoF y Pina, en Ciego de 8)ila, todos en la costa
norte del pa$s. La labor m#s destacada corresponde a los petroleros de Garadero y
C#rdenas, donde la e%traccin &a superado el milln de toneladas. 8 mediados de
1,,+ &ab$a en esta -ona, en produccin o in)estigaciones, unos trescientos po-os,
tantos como los perforados en Cuba desde 1++1 cuando se comen- la e%plotacin de
<otemboF y a finales de ese ao se firm un contrato de e%ploracin a riesgo por seis
aos de duracin con P4;A6:A85, el m#s grande comple.o industrial y comercial
brasileo y una de las mayores compa$as petroleras del mundo.
4n asociacin con entidades e%tran.eras 9ue participan a riesgo, la estrategia de
b@s9ueda se e%tiende al este, particularmente en la ci1naga y cayos de <a.aguillar, en
la ba&$a de 5anta ClaraF al sur, en el golfo de :ataban, pegado a la Ci1naga de
Qapata, y m#s recientemente en el golfo de 8na <ar$a, al sur de la pro)incia
camagIeyana. >ebemos aclarar 9ue el crudo cubano posee una apreciable proporcin
de a-ufre, es asf#ltico y sumamente )iscoso.
Combinando la acti)idad petrolera con la preser)acin del medio ambiente, se
apro)ec&ar# el gas acompaante del petrleo para generar energ$a el1ctrica, para lo
cual se e.ecutan plantas en asociacin con la 5&errit =nternationalF y mediante un
gasoducto &asta la capital se bombear#n diariamente decenas de miles de metros
c@bicos de ese recurso para fortalecer el ser)icio de gas manufacturado a miles de
consumidores.
,/& 'C$(o 9a %a e23racci$n de n1A"e%*
45 238 de las principales industrias. >espu1s del decrecimiento sostenido en el
lustro 1,,/*1,,!, a partir de 1,," la e%traccin &a dado un salto 9ue se compara con
1,+,, uno de los aos de m#s alta e%traccin.
<oa, la tierra del n$9uel, es un &er)idero. Casi )einte mil personas se emplean y
&acen posible una recuperacin sensible en uno de los primeros renglones
econmicos del pa$s. 2n datoN en 1,," la industria ni9uel$fera redonde la cifra m#s
alta del @ltimo lustro, al &acer ! ,,/ toneladas y sobrepas en m#s de un sesenta por
ciento la cifra de 1,,!. 4n 1,,+ obtu)o un 1"J de crecimiento respecto al ao
precedente.
4%isten tres plantas productorasN la Aene Aamos Latour, en 3icaro, con m#s de
cincuenta aos de creadaF la 4rnesto C&e ?ue)ara, en e%plotacin desde 1,+(F y la
Pedro 5otto 8lba, asociada actualmente con capital e%tran.ero. 8dem#s se construye
otra planta en las Camariocas, tambi1n en <oa, con una capacidad por diseo de
/L/// toneladas.
,7& 'C$(o se desarro%%a e% 3ra)a=o por c"en3a propia*
43 1,, se aprob la Ley de ;raba.o por Cuenta Propia o autoempleo, con el
ob.eti)o de estimular el crecimiento de una oferta de productos y ser)icios con los
9ue el estado no pod$a responsabili-arse y, tambi1n, para dar nue)as fuentes
alternati)as de empleo 9ue estu)ieran legalmente reconocidas. ;ras el lgico
mo)imiento de altas y ba.as 9ue en todos los pa$ses ocurre en este sector laboral, a
mediados de 1,,+ se registraban unos ciento setenta y dos mil traba.adores por
cuenta propia 9ue desarrollaban m#s de ciento cincuenta modalidades de
ocupaciones. 5e destacan de manera especial los elaboradores y e%pendedores de
alimentos, los transportistas Oapro%imadamente unos once milP y los arrendadores de
)i)iendas Ocerca de seis milP.
;ambi1n est#n los ser)icios de ponc&eras y par9ueos, debido a la aguda escase- de
transporte y a la masi)a utili-acin de las bicicletasF reparaciones de enseres y
e9uipos electrodom1sticos y otros, ya 9ue las Imitaciones en materias primas y
recursos de todo tipo disminuyeron al m#%imo los ser)icios de plomeros,
electricistas, -apateros y otros brindados por el estado.
4sta modalidad &a significado para muc&os una opcin de empleo, pues estaban
des)inculados laboralmenteF para otros, una posibilidad adicional de ingresos si eran
.ubilados o amas de casaF y el resto son traba.adores 9ue desempean tambi1n esta
acti)idad. 3o se e%cluyen los profesionales. 2n mecanismo de control para el pago
de impuesto a sus ingresos y otras medidas para e)itar el enri9uecimiento il$cito son
normas 9ue &an sido legisladas por el <inisterio de Cinan-as y Precios.
,8& 'Por A"? se crearon %as <onas -rancas*
L85 Q6385 francas se crearon en busca de una alternati)a adicional al proceso de
in)ersin e%tran.era, fundamentalmente para la e%portacin. 4ntre sus regulaciones se
establece 9ue slo el 2"J de las producciones, del comercio y los ser)icios puede
entrar en el territorio nacional. 5on tambi1n fuente de empleo, facilitan las relaciones
comerciales y permiten acceder a nue)as tecnolog$as.
7asta mediados de 1,,, funcionaban tres en el pa$s, y &ab$a unos doscientos
cincuenta operadores en ellas. La primera fue en el ^a.ay, en las inmediaciones del
aeropuerto internacional de la capital cubanaF la segunda fue en :erroa, con
e%celentes )$as de comunicacin, a nue)e Eilmetros del puerto capitalino y a 2" del
8eropuerto =nternacional Jos1 <art$.
4%isten diferencias sustanciales con las del resto del continenteN por una parte, los
cubanos 9ue traba.an all$ disfrutan de los mismos beneficios y seguridades 9ue los
9ue reali-an cual9uier otra acti)idad econmica en fronteraF y por otra, no se puede
e%portar &acia 4stados 2nidos debido a las leyes del blo9ueo.
,;& '>"? son %as casas de ca()io y por A"? s"rgieron*
L8 C6<PA8G43;8 de moneda libremente con)ertible por moneda nacional,
utili-ando los tipos de cambios 9ue se emplean en el mercado informal, se inici a
finales de 1,,", primero como e%periencia en la capital y Garadero, y posteriormente
se e%tendi a todo el pa$s.
La empresa cubana Casas de Cambio 5.8. OC8>4C8P fue constituida desde el ao
anterior, y comen- las operaciones de can.e de di)isas, entregas por c&e9ue de
)ia.eros y por tar.etas de cr1dito en .unio de 1,," en &oteles y polos tur$sticos. <eses
despu1s, con una Licencia del :anco 3acional de Cuba, estableci la compra)enta de
moneda libremente con)ertible O25>P y peso con)ertible *moneda nacional con el
mismo )alor del dlar slo )#lido dentro de Cuba* en pesos cubanos. Con esta
modalidad se facilitan muc&o las cosas para los cubanos, 9uienes ya no dependen de
elementos 9ue ilegalmente traficaban con las di)isas, comerciali-#ndola a precios
muy ele)ados.
4s con)eniente recordar 9ue si a mediados de 1,,! un dlar se compraba por 1/ o
1"/ pesos cubanos, cuando C8>4C8 inici sus labores el cambio disminuy &asta
alrededor de los / a 2" pesos cubanos por dlar, y en los aos 1,,(*1,,, oscilaba
apro%imadamente entre los 2/*22 pesos cubanos. 8s$ tambi1n 9uedaba e)idenciada la
)alori-acin de la moneda nacional, en contraposicin a lo sucedido con el resto de
las monedas de pa$ses considerados e.emplos de modelos de desarrollo.
,9& 'C"0% 6a sido e% i(pac3o de% )%oA"eo i(p"es3o por Es3ados Unidos a C")a*
C6<6 una bomba silenciosa se &a calificado el in&umano blo9ueo impuesto a Cuba
ininterrumpidamente desde principios de la d1cada del sesenta por el gobierno de
4stados 2nidos. 4ste blo9ueo econmico, comercial y financiero afecta a cada
cubano cada d$a, durante casi cuatro d1cadas, incidiendo en su ni)el de )ida, en la
econom$a nacional y repercute en la reubicacin de mercados, en un incremento
significati)o de los costos de ad9uisicin, en la inseguridad de los suministros, en la
desestabili-acin de los flu.os de distribucin y de produccin.
3o es posible sinteti-ar las gra)es acciones 9ue se refle.an en toda la )ida acti)a del
pa$s, causadas por la agresin econmica del gobierno norteamericano, 9uien e.erce
adem#s presiones pol$ticas y amena-as )eladas o abiertas contra otras naciones para
9ue corten los )$nculos con la isla y se sumen a su pol$tica de aislamiento a la nacin
cubana. 2n e.emplo puede ser las afectaciones en la transportacin mar$tima, base del
desarrollo del comercio e%terior. Por cada )ia.e desde 4uropa o 8sia de un barco en
funcin de comercio con Cuba, la erogacin adicional en relacin con la de una
operacin similar desde 4stados 2nidos de 8m1rica asciende a 21"L+// dlares desde
4uropa a La 7abana, y "1'L(// dlares desde 8sia a La 7abana.
;ras la entrada en )igor de la Ley ;orricelli muc&os transportistas reclaman fletes
mayores, alegando 9ue al tocar puertos cubanos, el bu9ue no ser# admitido despu1s
en puertos de 4stados 2nidos durante seis meses.
>esde agosto de 1,,! &asta mar-o de 1,,+ el presidente de 4stados 2nidos adopt
nue)as regulaciones dirigidas a restringir al m#%imo los )ia.es, en)$os de pa9uetes y
de remesas de los cubanos residentes en ese pa$s a sus familiares en Cuba. 4sto
agra) sustancialmente las afectaciones pro)ocadas por el blo9ueo, y adicionalmente
contribuy a obstaculi-ar el normal desen)ol)imiento de las relaciones entre los
cubanos residentes en el e%terior y sus familiares en el pa$s.
4specialmente dram#tica es la repercusin del blo9ueo en el sector de la salud.
;omemos por caso a9uellos ciudadanos cuya )ida depende de la implantacin de un
marcapasos. >esde &ace )arios aos Cuba importaba marcapasos de dos firmas, una
de 8ustralia y otra de 5uecia. 8 principios de 1,, la primera plante a Cuba 9ue
ten$an dificultades en suministrar este producto al pa$s por poseer componentes
fabricados en 4stados 2nidos. 4n .ulio de 1,,! la firma sueca comunic 9ue su
di)isin de marcapasos &ab$a sido )endida a una empresa norteamericana, y
deb$amos de a&ora en adelante dirigirnos a ella. Como es conocido, ninguna firma
radicada en 4stados 2nidos puede )ender sus productos a la isla.
4n la d1cada del no)enta fue recrudecido el blo9ueo, 9ue slo en el sector de la salud
&a afectado en m#s de mil doscientos millones de dlares, 9ue se refle.a en el
deterioro de algunas instituciones, falta de medicamentos y otros insumos.
La Ley 7elms*:urton, firmada por el presidente norteamericano en mar-o de 1,,'
persigue, entre otros ob.eti)os, internacionali-ar el blo9ueo a Cuba, persistiendo en
su propsito de doblegar la manifiesta )oluntad del pueblo cubano de defender su
inalienable derec&o a la independencia y a la libre determinacin. 4sa ley fue
refor-ada en 1,,, por )arias enmiendas, a la 9ue se agregan otras decisiones
legislati)as 9ue ampl$an la guerra econmica contra Cuba y e%tienden sanciones y
amena-as &acia otras naciones. 4n este aspecto, no es ocioso recordar la afirmacin
del presidente cubano, Cidel CastroN TCuba no demanda ayuda &umanitaria de
4stados 2nidos, Cuba demanda el cese de la guerra econmica genocida contra
nuestro pueblo, y se respete su derec&o a desarrollarse econmicamente y comerciar
libremente con todos los pueblos del mundoU.
.0& 'Es "n -en$(eno po%13ico o econ$(ico %a e(igraci$n c")ana*
L65 C2:8365, como el resto de los pobladores de 8m1rica Latina, &an tenido
&istricamente como destino principal de su emigracin a 4stados 2nidos. Con el
triunfo de la re)olucin y su impacto econmico, pol$tico y social, se radicali-aron
los sectores de la poblacin. 8lgunos de estos prefirieron trasladarse a 4stados
2nidos para lle)arse sus ri9ue-as y e)itar pagar sus cuentas con la .usticia por
cr$menes, asesinatos y otras acciones delicti)as. Posteriormente el 1%odo comprendi
a profesionales y sus familiares, en etapas diferentes 9ue alcan-aron su m#%ima
intensidad entre 1,'! y 1,',, de 1,(, a 1,+1, y de 1,+( &asta &oy, con un marcado
1nfasis en 1,,, 9ue incluyeron a los m#s )ariados grupos poblacionales.
3o todas las oleadas migratorias &an tenido la misma moti)acin. Luego de la
primera gran estampida de cubanos )inculados en el plano pol$tico, militar y
econmico con la dictadura de Culgencio :atista, se produ.o otra en la d1cada del
sesenta, especialmente entre los afectados por las primeras leyes re)olucionarias, 9ue
ten$a un car#cter econmico, con algunas posiciones y criterios pol$ticos. 4stos
emigrantes fueron muy bien recibidos en tierras norteamericanas, as$ como otros
sectores medios y profesionales )inculados a las grandes empresas.
>urante la d1cada del setenta la salida disminuy. ;en$an un componente adicional a
la moti)acin econmica y )estigios de pol$ticaN el llamado aspecto de la
reunificacin familiar. 8 finales de esa d1cada se produ.o una considerable
disminucin del otorgamiento de )isas por parte de 4stados 2nidos para los
emigrantes cubanos, mientras se estimulaban las salidas ilegales de la isla y su
recepcin en tierra del norte como refugiados pol$ticos.
La &istoria posterior incluye las limitaciones impuestas por el gobierno
norteamericano a los )ia.es legales, el masi)o 1%odo mediante el puente <ariel*Cayo
7ueso en 1,+/, y efectuado en las inmediaciones y punto m#%imo del per$odo
especial por la d1cada del no)enta, &asta la llamada crisis de los balseros.
4n 1,,! se firmaron nue)os acuerdos migratorios entre Cuba y 4stados 2nidos 9ue
despoliti-an, por primera )e-, las relaciones en este campo. Los emigrantes cubanos,
al igual 9ue los del resto del mundo, &an de llegar a tierras norteamericanas por )$as
legalesF los otros ser#n de)ueltos a la patria. 4l cumplimiento de estos acuerdos se
manten$a con estricto rigor por los dos pa$ses en los aos subsiguientes a su
aprobacin.
.1& '>"i?nes -"eron %os )a%seros*
P8A8 C6<PA43>4A la e%istencia de los balseros, debe recordarse la pol$tica
migratoria de 4stados 2nidos &acia Cuba, cuyo componente estrat1gico era a&ogar la
re)olucin. Cue tendencia sistem#tica alentar la emigracin legal e ilegal de los
cubanos, a 9uienes se les otorgaba una condicin preferencial y recib$an la
denominacin de refugiados. 5e promulgaron leyes refrendando tales intenciones,
como la de <igracin y 8sistencia para los Aefugiados en 1,'2, y la Ley de Aea.uste
del car#cter de refugiados cubanos, en 1,''. 4sta @ltima operaba paralelamente a la
Ley de =nmigracin estadounidense.
8l limitarse las )isas para las salidas legales del pa$s de forma dr#stica y aumentar la
propaganda contrarre)olucionaria, por una parte, y al e%istir muy dif$ciles
condiciones de )ida deri)adas de la crisis econmica o per$odo especial, muc&os
ciudadanos buscaron la opcin de emigrar ilegalmente, utili-ando balsas, botes o
cual9uier tipo de embarcacin 9ue los condu.era a costas norteamericanas. :asta
anali-ar la disminucin del otorgamiento de )isas del gobierno de 4stados 2nidos,
9ue se redu.o de L!(2 en 1,++ a ,'! en 1,,, mientras los ilegales aumentaron de
!'( en 1,,/ a !L2/+ en 1,,.
La radio y la prensa de 4stados 2nidos real-aron la imagen de a9uellos 9ue llegaban,
fundamentalmente, con el propsito de obtener un bienestar econmico, agreg#ndoles
el ingrediente pol$tico de desafectos a la re)olucin. 3o informaban las muertes y
desapariciones de nios, mu.eres y ancianos lan-ados a esa temeraria tra)es$a. 3i 9ue
muc&os de los inmigrantes pasaban luego a las filas de los indeseados y era su destino
la c#rcel o la miseria.
Los balseros pasaron a ocupar el primer lugar en las informaciones de los peridicos.
4n Cuba, muc&os se desped$an de sus familiares en las playas, antes de ec&arse a la
mar. Cue necesario &allar una solucin. Los acuerdos migratorios firmados entre
4stados 2nidos y Cuba estipularon 9ue se impedir$an las salidas ilegales y riesgosas
desde Cuba y las entradas en 4stados 2nidosF de igual forma impedir$an el uso de la
)iolencia de 9uienes traten de )ia.ar mediante el des)$o for-oso de aerona)es y
embarcaciones, mientras 9ue, por otra parte, 4stados 2nidos dirigir# la migracin
&acia canales seguros, otorgando un m$nimo de 2/L/// )isas a cubanos cada ao, sin
contar los familiares inmediatos de ciudadanos norteamericanos.
4l cumplimiento de estos acuerdos por los dos pa$ses &a &ec&o posible la casi
eliminacin de los emigrantes ilegales, los balseros, triste p#gina escrita en la &istoria
de las relaciones entre Cuba y 4stados 2nidos.
.+& 'Por A"? e2is3e y se insis3e en "n par3ido Gnico*
L85 A8Q6345 son &istricas y a la )e- muy actuales. 5e da en Cuba la
coincidencia de 9ue, para dirigir la guerra independentista frente a la metrpoli
espaola a finales del pasado siglo, el 71roe 3acional Jos1 <art$ organi- un partido
@nico, 9ue un$a a los 9ue luc&aban por la libertad de la patriaF y, paralelamente, la
&istoria muestra 9ue para lle)ar a cabo la re)olucin socialista en un mundo donde
imperan el imperialismo y el neocolonialismo, se organi- un solo partido 9ue lle)a
al pueblo &acia una sociedad m#s .usta, en medio de los a)atares de la &istoria
contempor#nea.
8s$ como en el Partido Ae)olucionario Cubano se unieron en 1+," los gloriosos
)eteranos de la ?uerra de los >ie- 8os, simboli-ados por <#%imo ?me- y
8ntonio <aceo, con las nue)as generaciones de campesinos, obreros, artesanos e
intelectuales, a inicios del proceso re)olucionario en Cuba se unificaron en un solo
&a- los militantes del <o)imiento 2' de Julio, el Partido 5ocialista Popular y el
>irectorio Ae)olucionario, organi-aciones 9ue &ab$an participado en la luc&a por
derrocar la tiran$a batistiana. 7oy, a m#s de treinta aos de a9uella fusin, las ra-ones
para mantener una sola organi-acin partidaria, una sola base program#tica, una sola
unidad de accin popular, es tambi1n e)idente.
4l Partido Comunista de Cuba se &a identificado como el partido de la nacin cubana,
pues su ob.eti)o principal es preser)ar la independencia y las con9uistas
fundamentales de dignidad, salud, educacin, proteccin al nio y al anciano, entre
otras.
La base program#tica del Partido Comunista de Cuba unifica los propsitos
esenciales de la sociedad en su con.unto, lo 9ue no contradice la pluralidad de ideas
en su seno, pues son militantes ateos y creyentes, traba.adores y dirigentes, obreros y
campesinos. La estrategia es construir un modo de )ida m#s &umano y m#s .usto, sin
e%plotadores ni e%plotados, en el 9ue nadie 9uede desamparadoN el socialismo.
.,& 'C$(o son %as e%ecciones en C")a*
4L 5=5;4<8 electoral cubano se basa en 9ue lo esencial no es slo el )oto, sino
tambi1n la participacin popular en la formacin de la candidatura, m#s all# de
cual9uier imposicin partidista.
>esde 1,(' se estableci el principio de 9ue son los propios )ecinos, en asambleas de
barrios, 9uienes promue)en a sus candidatos a las asambleas municipales *una
especie de ediles* mediante el sencillo m1todo de proponer )erbalmente y )otar
le)antando la mano. La candidatura formada se presenta en cada circunscripcin
electoral, donde el representante a la asamblea municipal es elegido mediante el )oto
directo y secreto depositado en las urnas.
4l &ec&o de 9ue los candidatos no sean nominados por los partidos sino por los
)ecinos, e%presa la esencia democr#tica del proceso.
8 partir de la e%periencia de una d1cada, se aprob una nue)a ley electoral 9ue
establece la eleccin mediante el )oto directo de toda la poblacin, de los diputados y
miembros de las asambleas pro)inciales, como se )en$a &aciendo a ni)eles
municipales. 8nteriormente estos eran designados por los delegados de las
circunscripciones, en su calidad de representantes del pueblo.
Las propuestas para candidatos a las asambleas pro)inciales y nacional son
elaboradas por las organi-aciones de masas, presididas por un miembro de la Central
de ;raba.adores de Cuba. =ncluyen representantes de la 8sociacin 3acional de
8gricultores Pe9ueos O838PP, los Comit1s de >efensa de la Ae)olucin OC>AP, y
la Cederaciones de <u.eres Cubanas OC<CP, de la Cederacin de 4studiantes
2ni)ersitarios OC42P y la Cederacin de 4studiantes de la 4nsean-a <edia OC44<P.
8 estas organi-aciones pertenecen la inmensa mayor$a de los siete millones de
ciudadanos con m#s de diecis1is aos con derec&o al )oto.
4stas propuestas se lle)an a una comisin pro)incial y la nacional en busca de la
mayor consulta posible en aras de la mayor calidad de la seleccin. Cada candidato
compite en igualdad de condiciones con los dem#sN su foto y biograf$a es e%puesta en
un lugar p@blico para conocimiento masi)o de la poblacin, y nada m#s. 3o se
permite propaganda personal en ning@n caso.
La 8samblea 3acional comprende '/1 diputados, apro%imadamente un diputado por
cada 2/L/// &abitantes, y elige al presidente o .efe de estado, los )icepresidentes,
secretario y dem#s miembros del Conse.o de 4stado.
4n todo el territorio nacional e%isten unas die- mil circunscripcionesF en cada una los
)ecinos eligen a sus delegados, por )$a directa y secreta. Las elecciones municipales
se con)ocan cada dos aos y medio y cada cinco las pro)inciales y la nacional.
4s un &ec&o notorio 9ue en febrero de 1,,, en pleno per$odo especial, el ,,,"(J de
los electores acudieron a las urnasF y 9ue en 1,,", para elegir a los delegados a las
asambleas municipales *a pesar de las penurias econmicas y la propaganda
reaccionaria* )ot el ,(,1J del uni)erso electoral.
2na contundente respuesta de la unidad de la poblacin en torno a su gobierno, luego
de cinco aos de per$odo especial *lleno de sacrificios, sufrimientos, recrudecimiento
del blo9ueo norteamericano en una guerra econmica, pol$tica, ideolgica y
bacteriolgica*, ocurri en enero de 1,,+ durante las elecciones para diputados a la
8samblea 3acional y a delegados para las asambleas pro)incialesN Zasisti m#s del
,+J de los electores[
4sta cifra realmente sorprendente se debe a las facilidades 9ue ofrece el sistema
electoral cubano para 9ue el ciudadano pueda e.ercer su derec&o al )oto en todas
partesN en un &ospital, en una estacin de ferrocarril, donde se presente con su carn1
de identidad, aun9ue no sea su lugar de residencia. >e las boletas depositadas en las
urnas en esta @ltima ocasin, slo el ,'J estaban en blanco, y el 1,'!J fueron
anuladas, demostrando as$ una )erdadera y acti)a participacin.
2n detalle singular ocurre de 5an 8ntonio a <ais$N son los pioneros los 9ue cuidan
las urnas durante el proceso de las elecciones, y no las autoridades armadas, como es
tradicional en otros pa$ses. La participacin popular y la transparencia del proceso es
una tradicin de las elecciones cubanas.
..& '>"? es %a Asa()%ea Naciona% de% Poder Pop"%ar*
L8 858<:L48 3acional del Poder Popular es el rgano supremo del poder del
estado, 9ue representa y e%presa la )oluntad del pueblo. 4s el @nico rgano con
potestad constituyente y legislati)a, y se integra con diputados elegidos por un
per$odo de cinco aos.
4lige entre sus diputados al Conse.o de 4stado, integrado por un presidente, un
primer )icepresidente, cinco )icepresidentes, un secretario y )eintitr1s miembros
m#s. 4l presidente del Conse.o de 4stado es Jefe de 4stado y Jefe de ?obierno.
Las principales atribuciones de la 8samblea 3acional sonN acordar reformas a la
constitucinF aprobar, modificar o derogar leyesF discutir y aprobar los planes
nacionales de desarrollo econmico y socialF acordar el sistema monetario y
crediticioF discutir y aprobar el presupuesto del estadoF aprobar los lineamientos
generales de la pol$tica e%terior e interiorF declarar el estado de guerra en caso de
agresin militar y aprobar tratados de pa-F elegir al presidente, )icepresidente y
secretario de la 8samblea 3acionalF elegir al presidente, )icepresidente y dem#s
.ueces del ;ribunal 5upremo PopularF elegir al Ciscal ?eneral y a los )icefiscales
generales de la rep@blica, y otros.
La 8samblea 3acional se re@ne en dos per$odos ordinarios de sesiones al ao, y en
sesin e%traordinaria cuando lo solicite la tercera parte de sus miembros o la
con)o9ue el Conse.o de 4stado. Los diputados pueden ser re)ocados en todo el
tiempo por sus electores en la forma 9ue e%plica la ley.
4n la G Legislatura elegida en 1,,+ y 9ue regir# &asta inicios del pr%imo siglo se
incorporaron por primera )e- m#s del sesenta por ciento de sus miembros, y en su
composicin se encuentran personalidades del gobierno y del partido, y tambi1n de la
cultura, el arte, la ciencia, el deporte, l$deres religiosos de di)ersas iglesias y sencillos
dirigentes de la comunidad.
./& 'C"0%es son %as organi<aciones -"nda(en3a%es en A"e se in3egra %a sociedad
c")ana*
>45>4 los primeros aos del proceso re)olucionario se crearon di)ersas
organi-aciones sociales 9ue agruparon a amplias capas poblacionales, y
posteriormente fueron surgiendo otras con intereses espec$ficos y de menor
membres$a.
4ntre las de mayor n@mero de miembros pueden mencionarse la Central de
;raba.adores de Cuba OC;CP, 9ue comprende en sus filas a la clase fundamental de la
sociedadF los Comit1s de >efensa de la Ae)olucin OC>AP, la Cederacin de <u.eres
Cubanas OC<CP, la 8sociacin 3acional de 8gricultores Pe9ueos O838PP, la
Cederacin 4studiantil 2ni)ersitaria OC42P, la Cederacin de 4studiantes de la
4nsean-a <edia OC44<P, la 6rgani-acin de Pioneros Jos1 <art$ O6PJ<P. 6tras
organi-aciones nacionales son la 2nin de Periodistas de Cuba O2P4CP, la 2nin
3acional de 4scritores y 8rtistas de Cuba O2348CP, la 2nin de Juristas de Cuba,
etc. 4llas defienden los intereses espec$ficos de los sectores 9ue representan y
contribuyen, adem#s, a 9ue se cono-ca el sentir, los problemas y las opiniones de su
membres$a.
2n e.emploN los Comit1s de >efensa de la Ae)olucin cuentan con unos siete
millones de efecti)os, 9ue representan m#s del oc&enta por ciento de la poblacin
mayor de catorce aos. 3acieron el 2+ de septiembre de 1,'/, como respuesta
fulminante y combati)a del pueblo al terrorismo contrarre)olucionario. 5e
organi-aron para )igilar y combatir al enemigo, pero paralelamente traba.aron para
ele)ar la educacin pol$tica de las masas, promo)ieron el traba.o )oluntario, aportan
donaciones )oluntarias de sangre, recuperan centenares de miles de en)ases de cristal
y otras materias primas.
=dentifican al cederista cubano el entusiamo y la rapide- de accin ante cada nue)a
tarea 9ue le entrega la re)olucin, la efica- y masi)a mo)ili-acin de los )ecinos ante
cual9uier atisbo de elementos reaccionarios.
.7& 'C"0n3os pa1ses (an3ienen 6oy re%aciones con %a is%a*
A4C6A>4<65 9ue antes del triunfo re)olucionario, Cuba slo ten$a relaciones con
"1 pa$ses. 8 mediados de 1,,,, sin embargo, manten$a relaciones diplom#ticas con
1'( estados, )$nculos consulares con dos, y en otros dos mantiene oficinas de
intereses. 5e &allan acreditadas m#s de oc&enta misiones, algunas de las cuales son
representaciones de organismos internacionales.
4n el plano multilateral, el pa$s go-a de un gran prestigio 9ue &a a)alado su eleccin
para formar parte de numerosas entidades internacionales. 4s miembro de la 632 y
los organismos intergubernamentales del sistemaF del <o)imiento de Pa$ses 3o
8lineadosF del ?rupo de los ((, as$ como de otras agrupaciones regionales y
numerosas organi-aciones no gubernamentales.
Cuba &a sido electa para integrar las .untas directi)as del Programa de las 3aciones
2nidas para el >esarrollo OP32>P, 6rgani-acin de 3aciones 2nidas para la
8gricultura y la 8limentacin OC86P, 6rgani-acin de las 3aciones 2nidas para el
>esarrollo =ndustrial O632>=P, 6rgani-acin <undial para la 5alud O6<5P,
Conferencia de 3aciones 2nidas para el Comercio y el >esarrollo O23C;8>P,
2nin =nternacional de Comunicaciones O2=;P, Programa <undial de 8limentos
OP<8P, 6rgani-acin <eteorolgica <undial O6<<P, 6rgani-acin
Latinoamericana de 4nerg$a O6L8>4P y otras.
;ambi1n )arios e%pertos cubanos se desempean a t$tulo indi)idual en algunos
rganos, tanto en la estructura de la 632 como en otras organi-aciones.
.8& 'C$(o se (ani-ies3a %a so%idaridad con C")a*
L65 P24:L65 del mundo lo &an proclamadoN somos solidarios con Cuba para
defender nuestra esperan-a. D se unen en regiones de todos los continentes, y tambi1n
en los foros internacionales para condenar la &ostilidad reaccionaria contra nuestro
pa$s, rec&a-ar el in&umano blo9ueo 9ue impone 4stados 2nidos, aplaudir nuestros
1%itos y apoyarnos en los momentos dif$ciles.
La solidaridad con la re)olucin cubana surgi desde el mismo inicio del proceso
nacional liberador en 1,",. D la re)olucin gener solidaridad &acia todos los
rincones del mundo, gener internacionalismo 9ue, al decir del presidente Cidel
Castro, es sencillamente saldar las deudas 9ue tenemos con la &umanidad. <edio
milln de cubanos &an cumplido misiones internacionalistas de distintos tipos, como
combatientes, m1dicos, maestros, constructores. 4n el suelo cubano se &an formado
.)enes latinoamericanos y africanos en estudios medios y superioresF en
determinado momento se capacitaban en Cuba 2"L/// becarios e%tran.eros,
fundamentalmente en la =sla de la Ju)entud. Cumplimos nuestro deber, sencillamente.
4n las condiciones dif$ciles de &oy, luego del desplome de los pa$ses socialistas del
este de 4uropa y de la 2nin 5o)i1tica, y con el refor-amiento del blo9ueo
norteamericano, Cuba se mantiene con sus banderas en&iestas resistiendo entre
escaseces, penurias y limitaciones. La nacin proclama 9ue no )ol)er# al capitalismo,
9ue seguir# el camino del socialismo para 9ue ning@n nio 9uede sin escuela, ning@n
enfermo sin asistencia m1dica, ning@n anciano sin proteccin.
D los pueblos del mundo 9ue supieron lo 9ue el pe9ueo pa$s es capa- de dar y de
luc&ar, )uel)en sus o.os al Caribe y apoyan al >a)id blo9ueado y amena-ado.
8cuden a ratificar su confian-a, a comprobar el &ero$smo de las masas y para
desmentir la propaganda reaccionaria 9ue propagan transnacionales de la
informacin. D nos &acen llegar su aliento, sus donaciones, con un clamor silenciosoN
ZAesistan, no desmayen, ustedes son nuestra esperan-a[
4n no)iembre de 1,,! se celebr en la capital cubana el 4ncuentro <undial por la
5olidaridad con Cuba, en el 9ue m#s de tres mil emba.adores de la amistad y de la
solidaridad procedentes de 1/, pa$ses de cinco continentes rec&a-aron el blo9ueo
econmico y defendieron el derec&o a la autodeterminacin de los pueblos.
8sistieron e%presidentes latinoamericanos, )arios premios 3obel, ministros,
parlamentarios, integrantes de mo)imientos de distintas tendencias, de la Cara)ana de
la 8mistad Pastores por la Pa-, dirigentes de partidos pol$ticos, representantes de
iglesias y organi-aciones religiosas.
8penas un ao despu1s, el Cesti)al Ju)enil =nternacional Cuba Gi)e reuni en agosto
m#s de trescientos .)enes de '( pa$ses 9ue demandaron el cese del blo9ueo
norteamericano contra nuestro pa$s y la no aprobacin de la Ley 7elms*:urton 9ue
recrudece las sanciones econmicas contra la isla.
Con su &istrico lema de "or la solidaridad antimperialista! la pa' y la amistad, se
celebr el m#s entusiasta Cesti)al <undial de la Ju)entud y los 4studiantesN m#s de
doce mil delegados de 12 pa$ses se dieron cita en Cuba en agosto de 1,,( y
participaron en numerosos debates pol$ticos y reuniones de di)erso tipo animados por
el esp$ritu de la solidaridad antimperialista, la pa- y la amistad. La organi-acin de un
e)ento de esta magnitud en una situacin econmicamente dif$cil se &i-o posible por
la gran )oluntad de todosN de una parte, los .)enes del mundo financiaron los gastos
y sus pasa.es, y de otra, las familias cubanas brindaron sus casas y su cario, de
manera 9ue una gran mayor$a de los delegados fueron alo.ados por el propio pueblo.
4l apoyo a la re)olucin cubana y el rec&a-o al blo9ueo criminal 9ue las
administraciones norteamericanas &an impuesto a la isla fueron dos puntos
coincidentes de las .)enes delegaciones 9ue .untaron sus propsitos en pos de un
futuro me.or.
4stos son apenas tres e.emplos de cmo se e)idencia la solidaridad con la re)olucin
cubana, 9ue no slo se e%presa compartiendo con su pueblo, tambi1n se reali-a en
cual9uier rincn del planeta, a@n dentro de 4stados 2nidos, en mil formas diferentes.
Cidel manifest en uno de estos e)entos multitudinarios internacionales 9ue
Tnosotros comprendemos lo 9ue significar$a para todas las fuer-as progresistas, para
todas las fuer-as re)olucionarias, para todas las fuer-as amantes de la pa- y de la
.usticia en el mundo, 9ue el imperialismo lograra aplastar a la re)olucin cubana, y
por eso consideramos nuestro deber m#s elemental y nuestro deber m#s sagrado con
ustedes defender la re)olucin a@n al costo de la )idaU. 3o es una consignaN la
&istoria lo &a demostrado. Por eso Cuba nunca estar# sola.
.;& 'C$(o es s" po%13ica e23erior*
L85 324G85 circunstancias en 9ue )i)e Cuba en este fin de siglo VV &an dado un
nue)o mati- a su pol$tica e%terior, firme en sus principios de contribuir a la
consolidacin de las con9uistas de la re)olucin, la defensa de la patria y al
fortalecimiento de su posicin internacional.
Como estrategia de los nue)os tiempos, su ser)icio e%terior &a concentrado su
acti)idad en desenmascarar las iniciati)as anticubanas, potenciar los mo)imientos de
solidaridad, establecer nue)as relaciones y propiciar el flu.o de in)ersiones y capital
&acia la isla.
Para ello se &a desatado una amplia acti)idad diplom#tica 9ue abarca todos los
continentes, y se &a inaugurado lo 9ue se &a dado en llamar pol$tica e%terior dentro
del propio pa$s, acercando a los miembros del cuerpo diplom#tico a la realidad
nacional en )isitas sistem#ticas a distintas pro)incias.
6tro &ito importante &an sido las conferencias La nacin y la emi#racin 9ue
posibilitan el restablecimiento de una relacin de normalidad entre el pa$s y sus
emigrados, sobre la base de un respeto mutuo a la eleccin 9ue cada parte &i-o. 4n
ellas &a pre)alecido el inter1s por denunciar el blo9ueo y las agresiones contra Cuba,
y tratar de apoyar todo cuanto contribuya a la sal)acin de la nacin, su
independencia y soberan$a, as$ como el proyecto de .usticia social iniciado &ace casi
cuatro d1cadas.
Las con)ersaciones iniciadas entre Cuba y 4stados 2nidos a propsito de los sucesos
migratorios de 1,,! propiciaron la apertura de una brec&a de negociacin 9ue ofreci
posibilidades de di#logo entre ambos gobiernos.
Por otra parte, Cuba mantiene en los foros internacionales su posicin de fomentar un
desarrollo sostenible a partir de &acer muc&o m#s racional la )ida de las sociedades
desarrolladas, donde el despilfarro de recursos es tan cotidiano como la miseria y el
subdesarrollo del tercer mundo.
4n el tema de los derec&os &umanos, se reitera 9ue esta &a sido una preocupacin
central de la re)olucin desde sus inicios. Cuba puede e%&ibir una obra limpia,
amplia y e.emplar en este sentido, sin pre.uicios y s$ con muc&a dignidad y autoridad
para &ablar de derec&os &umanos.
2no de los mayores 1%itos por las acciones diplom#ticas de la isla &a sido demostrar
9ue el pa$s resiste, )i)e, luc&a, traba.a, ama y baila contra todo pronsticoF 9ue Cuba
no est# aislada como se demuestra con la reanudacin y restablecimiento de la-os con
muc&os pa$ses. La imagen de la Cuba actual, firme y en pleno despegue de
recuperacin, est# llegando a los confines del planeta.
.9& 'C"a% es %a posici$n de C")a en %a re%aci$n g%o)a%i<aci$n H desarro%%o*
36 78D reunin de cient$ficos, estadistas, economistas, y aun comunicadores, donde
no se incluya el concepto de globali-acin. La relacin entre la crisis econmica 9ue
afecta al mundo con la globali-acin de car#cter neoliberal 9ue impera en estos
tiempos es preocupacin de gobernantes y gobernados en la mayor parte de los
pa$ses. >i)ersas escuelas tratan de encontrar soluciones para un desarrollo sostenible
de las regiones subdesarrolladas... pero no la encuentran. 4l presidente cubano Cidel
Castro e%puso su an#lisis al respecto ante un encuentro internacional de economistas
efectuado en La 7abana en enero de 1,,,, 9ue sinteti-aremos as$N TLa incre$ble e
in1dita globali-acin 9ue nos ocupa es un producto del desarrollo &istrico, un fruto
de la ci)ili-acin &umana X...Y 4l &ombre actual no es m#s inteligente 9ue Pericles,
Platn o 8ristteles, aun9ue no sabemos toda)$a si suficientemente inteligente para
resol)er los comple.$simos problemas de &oyU.
T5e trata de un proceso re)ersible?U, se pregunt, y su respuesta fueN T3oU.
T0u1 tipo de globali-acin tenemos &oy? 2na globali-acin neoliberalF as$ la
llamamos nosotros. 4s sostenible? 3o. Podr# subsistir muc&o tiempo?
8bsolutamente no. Cuestin de siglos? Categricamente no. >urar# slo d1cadas?
5$, slo d1cadas. Pero m#s temprano 9ue tarde tendr# 9ue de.ar de e%istirU.
TCmo se )a a producir la transicin? 3o lo sabemos. <ediante amplias
re)oluciones )iolentas o grandes guerras? Parece improbable, irracional y suicida.
<ediante profundas y catastrficas crisis? >esgraciadamente es lo m#s probable,
casi ine)itable, y transcurrir# por muy di)ersas )$as y formas de luc&aU.
T0u1 tipo de globali-acin ser#? 3o podr$a ser otra 9ue solidaria, socialista,
comunista, o como ustedes 9uieran llamarlaU.
T>ispone de muc&o tiempo la naturale-a, y con ella la especie &umana, para
sobre)i)ir la ausencia de un cambio seme.ante? >e muy poco. 0ui1nes ser#n los
creadores de ese nue)o mundo? Los &ombres y mu.eres 9ue pueblan nuestro planeta.
Cu#les ser#n las armas esenciales? Las ideas, las concienciasU.
/0& Por A"? "na Fey de Pro3ecci$n de %a Dndependencia Naciona% y de %a
Econo(1a de C")a*
L8 L4D de Proteccin de la =ndependencia 3acional y de la 4conom$a de Cuba,
aprobada por la 8samblea 3acional del Poder Popular en febrero de 1,,,, tiene su
fundamento en el ineludible deber de responder a las acciones y decisiones
legislati)as del gobierno de 4stados 2nidos, 9ue constituyen una permanente
agresin &acia el pueblo cubano.
4n sus "or cuanto se e%presa la &istoria de agresiones lle)adas a cabo durante estas
cuatro d1cadas, desde los cuantiosos recursos materiales y financieros empleados
para destruir la independencia y la econom$a de CubaF la 4nmienda ;orricelli,
incluida en la Ley de ?astos para la >efensa de 1,,2, para el desarrollo de
acti)idades contrarre)olucionariasF la Ley 7elms*:urton, 9ue ampli, intensific y
ofici la guerra econmicaF la Ley del Presupuesto Cederal de 1,,, de 4stados
2nidos, 9ue fi. un l$mite de dos millones de dlares para la reali-acinF &asta las
acciones persistentes 9ue )iolan los principios y normas 9ue rigen en las relaciones
entre los estados.
Cuba nunca &a respondido con agresiones a las agresiones 9ue contra ella se
cometen. Pero e.erci su deber y su derec&o al responder a ellas mediante la Ley ++
de febrero de 1,,,, tipificando como delitos las conductas 9ue fa)ore-can las
acciones contra su independencia nacional y su econom$a, y estableciendo sanciones
de car#cter penal.
7e a&$ la importancia de esta legislacin. Cuando fue publicada, los medios
monopoli-adores de la opinin p@blica la presentaron como una legislacin contra la
libertad de opinar y pensar, como si el pueblo cubano *tan acostumbrado a luc&ar por
sus ideas* fuera un pueblo sumiso. Por pensar y opinar nadie es sancionado en Cuba.
Las figuras delicti)as o delitos penales tienen como denominador com@n el elemento
sub.eti)o, la intencin espec$fica del 9ue reali-a el deIto de suministrar informacin
al gobierno de 4stados 2nidos, sus agencias, dependencias, representantes o
funcionarios, con la finalidad de facilitar los ob.eti)os de las leyes y medidas
encaminadas a 9uebrantar el orden interno, desestabili-ar al pa$s y li9uidar al estado
socialista y la independencia de Cuba. 2na docena de art$culos protegen de este
modo las agresiones desde fuera y desde dentro. La ley tipifica delitos de
colaboracin con el enemigo, no delitos de opinin como se &a 9uerido &acer creer
por la reaccin.
G#lido es recordar 9ue la primera ley*respuesta del pueblo cubano fue la Ley de
Aeafirmacin de la >ignidad y la 5oberan$a Cubanas, aprobada el 2! de diciembre de
1,,', en la 9ue se declaraba il$cita cual9uier forma de colaboracin, como suministro
de informacin a 4stados 2nidos o a otra persona con el ob.eto de 9ue pueda ser
utili-ada en la posible aplicacin de la Ley 7elms*:urtonF aceptar beneficios
procedentes de 4stados 2nidos para facilitar la aplicacin de la Ley 7elms *:urton y
colaborar por medio de la radio o de la tele)isin con esa ley. 2n art$culo de ella
dispon$aN T5e presentar#n proyectos para sancionar estos &ec&osU. La Ley de
Proteccin de la =ndependencia 3acional y de la 4conom$a de Cuba cumpli esa
misin.
/1& 'C$(o son %as re%aciones en3re e% es3ado y %a ig%esia*
L85 A4L8C=6345 entre la iglesia y el estado cubanos se desarrollan positi)amente,
en un clima de comprensin mutua. La re)olucin &a reafirmado 9ue la )erdadera
libertad de conciencia no es posible si no e%iste la absoluta separacin de la iglesia y
el estado, y de la iglesia y la escuela, como garant$a del libre e.ercicio de cada
institucin sin interferencias.
Por una parte, las instituciones estatales est#n sustra$das del influ.o de la iglesia y la
religinF y, por otro lado, las entidades religiosas tienen garanti-adas las condiciones
necesarias para desarrollar sus acti)idades y as$ satisfacer las demandas espirituales
de los creyentes.
5e garanti-a as$ la libertad de conciencia, o sea, el derec&o de los ciudadanos a
profesar o no religin alguna y a practicar el culto de su preferencia, o a mantener
con)icciones materialistas o ateas. Por otra parte, la ley regula las acti)idades de las
instituciones religiosasN es ilegal y punible oponer la fe o la creencia religiosa a la
re)olucin, a la educacin o al cumplimiento de los deberes de traba.ar, defender la
patria con las armas, re)erenciar sus s$mbolos y los dem#s deberes establecidos por la
constitucin.
4n Cuba la iglesia es propietaria de numerosos templos, instituciones de asistencia
social, seminarios mon#sticos, casas pastorales y residencias eclesi#sticas. D no era
e%trao 9ue en d1cadas pasadas *anteriores a la crisis econmica actual* asumiera
reparaciones costos$simas de templos 9ue son )erdaderos monumentos &istricos y
art$sticos como son la Catedral de La 7abana, la iglesia del 4sp$ritu 5anto y otras en
el interior del pa$s.
>i)ersas comunidades religiosas masculinas y femeninas 9ue residen en con)entos,
monasterios, institutos y residencias, desarrollan su labor pastoral y asistencial. 4ntre
las comunidades masculinas se encuentran dominicos, .esu$tas, franciscanos,
escolapios, carmelitas y capuc&inos. 7ay congregaciones como la de los 7ermanitos
de Jes@s, entregados a traba.os de car#cter social. D entre las femeninas se destacan
las &ermanitas de los 7ermanos >esamparados, 5ier)as de <ar$a, 6blatas
<isioneras, 7ermanas de 5er)icio 5ocial y las 7i.as de la Caridad de 5an Gicente de
Pa@l.
Las relaciones entre las autoridades religiosas y el estado cubano se &an fortalecido
en los @ltimos aos. 4.emplos pueden considerarse las )isitas del sumo pont$fice Juan
Pablo == *m#%ima autoridad del catolicismo romano*, de representantes de iglesias
e)ang1licas y otras religiones.
4l presidente Cidel Castro, durante una de las sesiones de la 8samblea 3acional del
Poder Popular, destac el traba.o abnegado 9ue desarrollan las religiosas en Cuba.
/+& 'C"0n3as re%igiones se pro-esan*
C2:8 es un pa$s laico donde e%iste la libertad de cultos. La religin m#s importante
es la catlica. 3umerosas iglesias en el pa$s ofrecen diariamente ser)icios religiososN
misas, bauti-os, bodas, r19uiems, confesiones y otros.
4n cuanto a la iglesia catlica romana, e%isten 1/ dicesis, dos de ellas *la de La
7abana y la de 5antiago de Cuba* tienen rango de arc&idicesis. 4l cardenal,
ar-obispo de La 7abana y presidente de la Conferencia de 6bispos Catlicos
Cubanos y 1 obispos, entre titulares y au%iliares, son cubanos.
Cuncionan oficialmente "! iglesias e)ang1licas correspondientes al protestantismo
tradicional o temprano Oiglesias presbiteriana, metodista, episcopal, luterana,
con)enciones bautistas y sociedad de amigos o cu#9uerosP y al tard$o Open*
tecostalismo con 2 iglesias diferentes, y otras organi-aciones como el 4.1rcito de
5al)acin, 8d)entistas del 51ptimo >$a, 3a-arenos, =glesia Pinos 3ue)os, y :ando
4)ang1lico de ?edenP. 4n total disponen de cerca de mil cien pastores, casi todos
cubanos.
5e practica la llamada Aegla Conga o Palo <onte, con.unto de formas religiosas 9ue
se centran en el culto a las fuer-as naturalesF y en la -ona occidental del pa$s e%isten
agrupaciones secretas masculinas abaEu# conocidas por aiguismo y otras
agrupaciones religiosas de menor influencia procedentes de otras etnias.
La religin afrocubana, 9ue es en realidad un sincretismo entre la religin catlica
tra$da a Cuba por los espaoles y los cultos africanos 9ue introdu.eron los negros
escla)os procedentes de Wfrica, tambi1n se practica en el pa$s. 4sta unin dio origen
a la santer$a o Aegla de 6c&a, en la cual la figura principal es el babalao.
5antos cristianos y dioses Ooric&asP africanos comen-aron a me-clarse &asta fundirse
y producir el sincretismo religioso afrocubano. 8 modo de e.emplo, la Girgen de las
<ercedes en la santer$a es 6batal#F la Girgen de Aegla es Demay#F 5an L#-aro, santo
muy )enerado, es :abal@ 8y1F 5anta :#rbara, tambi1n muy )enerada por los
cubanos, es C&angF y la Girgen de la Caridad del Cobre es 6c&@n.
/,& 'C"0% es %a 9irgen pa3rona de C")a*
L8 G=A?43 de la Caridad del Cobre es la Patrona de Cuba. Giste una t@nica amarilla
y tiene en sus bra-os al nio. Cu1ntase 9ue una maana de 1'/+ tres pescadores 9ue
se encontraban a punto de naufragar en la ba&$a de Ripe debido a una tormenta,
descubrieron flotando entre las olas una estatuilla 9ue representaba a la )irgen y al
nio, con una inscripcin 9ue dec$aN ;o soy la Girgen de la Caridad. 5us creencias
religiosas y la fe 9ue pusieron en esta imagen &icieron 9ue los pescadores pudieran
sal)ar sus )idas.
4sta imagen se encuentra en el 5antuario del Cobre, pueblecito de mineros cercano a
la ciudad de 5antiago de Cuba. 8ll$ acuden los creyentes de toda la isla y se obser)an
ofrendas &umildes y )aliosas, entre estas @ltimas la medalla de oro 9ue el escritor
norteamericano 4rnest 7emingBay recibiera cuando obtu)o el Premio 3obel de
Literatura en 1,"!.
>urante su )isita en 1,,+, el sumo pont$fice Juan Pablo == coron a la Girgen de la
Caridad del Cobre como la reina de Cuba, y rindi &omena.e a la patrona de la isla
durante la misa 9ue oficiara en la Pla-a de la Ae)olucin <ayor ?eneral 8ntonio
<aceo, en la ciudad de 5antiago de Cuba.
/.& '@")o 3rascendencia de %a 9isi3a de% papa !"an Pa)%o DD a C")a*
8 C=38L45 de enero de 1,,+, el papa Juan Pablo == permaneci cinco d$as de )isita
en la mayor de las 8ntillas, en su )ia.e pastoral n@mero +1. Los cubanos creyentes y
no creyentes le demostraron respeto, simpat$a y &ospitalidad, y colmaron las pla-as a
las 9ue su santidad acudi.
=ntenso fue el programa desarrollado por el sumo pont$fice en la isla, donde fue
rodeado por un pueblo 9ue lo cuidaba, cantaba y aplaud$a, admirando en 1l *como
alertara el presidente cubano*, no al #ngel e%terminador del socialismo, sino a un
&ombre 9ue se preocupa por muc&os importantes problemas del mundo
contempor#neo, a un .efe de estado, a un persona.e &istrico.
>urante su recorrido por la capital y las ciudades de 5anta Clara, CamagIey y
5antiago de Cuba, en las cuales ofici misas, recibi una Tcordial &ospitalidad,
e%presin genuina del alma cubanaU, seg@n las palabras del propio Juan Pablo ==.
;u)o tambi1n contactos con el pueblo en su )isita a la 2ni)ersidad de La 7abana,
donde rindi &omena.e al presb$tero cubano C1li% G#rela en un encuentro con
intelectualesF al 5antuario 3acional de 5an L#-aro, en la localidad &abanera de 4l
Aincn, donde dirigi la palabra a pacientes del leprosorio cercano y a enfermos de
sida, acompaados del personal m1dico 9ue los atienden y de mon.as 9ue los cuidanF
y presidi una celebracin lit@rgica con sacerdotes, di#conos, religiosas y
seminaristas en la Catedral de La 7abana.
La trascendencia de su e%&ortacin Tde 9ue Cuba se abra con todas sus magn$ficas
posibilidades al mundo y 9ue el mundo se abra a CubaU, y de su concepto
globali-acin de la solidaridad, se &a e)idenciado en las crecientes acciones de
unidad y solidaridad &acia nuestro pa$s.
Cidel di.o en el momento de la despedidaN TCreo 9ue &emos dado un buen e.emplo al
mundoN usted, )isitando lo 9ue algunos dieron en llamar el @ltimo bastin del
comunismoF nosotros, recibiendo al .efe religioso a 9uien 9uisieron atribuir la
responsabilidad de &aber destruido el socialismo en 4uropa. 3o faltaron los 9ue
presagiaban acontecimientos apocal$pticos. 8lgunos, incluso, lo soaronU.
//& 'A c"0n3o asciende %a esperan<a de 9ida en C")a*
L8 45P4A83Q8 de )ida de los cubanos durante el per$odo de 1,," al 2//1 se
proyecta sea de setenta y cinco aos. 4n el se%o femenino es algo superior, con ((,",
en tanto en el masculino es de (,". 4ste es el resultado de una pol$tica de atencin al
&ombre emprendida desde los primeros aos del triunfo re)olucionario, no slo
mediante los cuantiosos presupuestos dedicados a esta esfera de la )ida, sino en
cuanto a la formacin de m1dicos y personal param1dico, la construccin de centros
&ospitalarios en las -onas m#s apartadas del territorio, la instalacin de institutos de
in)estigaciones, la prioridad 9ue en todo sentido tiene la salud en Cuba.
3o obstante las limitaciones econmicas de la d1cada del no)enta, los principales
indicadores de la salud y especialmente la e%pectati)a de )ida al nacer &an me.orado.
2n factor de )ital importancia es la atencin comunitaria con el m1dico y la
enfermera de la familia, 9ue en 1,,, cubr$an el ,+,2J del territorio nacional.
8ntes de 1,", la esperan-a de )ida era inferior a los cincuenta y cinco aos, y
actualmente es similar a la de los pa$ses desarrollados, logrado a pesar del blo9ueo
impuesto por las administraciones norteamericanas a la isla, 9ue pro&ibe la entrada de
medicamentos y e9uipos m1dicos.
/.& 'C"0n3os cen3ros 6ospi3a%arios -"ncionan y con c"0n3os (?dicos y persona%
para(?dico se c"en3a en e% pa1s*
4L 3\<4A6 de unidades de ser)icios del <inisterio de 5alud P@blica a disposicin
del pueblo en 1,,, era desglosado as$N 2+ centros &ospitalarios, 1'' cl$nicas
estomatolgicas, 21 &ogares maternos, 1,( &ogares de ancianos, '+ casas de
abuelos, 2, &ogares de impedidos f$sicos, 12 institutos de in)estigaciones y 2(
bancos de sangre. 4ntre los primeros, funcionan + &ospitales generales, 1 cl$nico*
9uir@rgicos, 2' pedi#tricos, 1+ ginecobst1tricos, 1' materno*infantiles, '! rurales, y
!2 son centros de atencin especiali-ada. 5i en 1,"+ el '2J de las camas de
asistencia m1dica se &allaban en La 7abana, &oy es a la in)ersaN el ,J de las camas
est#n situadas en la capital y el '1J en el resto del pa$s.
La atencin priori-ada 9ue otorga el estado a la salud del pueblo no slo se obser)a
en el n@mero de centros &ospitalarios distribuidos en todos los rincones, sino en el
e9uipamiento ad9uirido para ello. 4.emplo son las t1cnicas de ultrasonido, la
tomograf$a a%ial computari-ada y los e9uipos de resonancia magn1tica 9ue se &an
introducido en diferentes pro)incias para lograr un diagnstico preciso. D lo m#s
importanteN todo este ser)icio se ofrece al pueblo gratuitamente.
8 mediados de 1,,, Cuba contaba con m#s de sesenta y cinco mil m1dicos, de ellos
e.erciendo en la comunidad unos treinta mil y die- mil estomatlogos, o sea, 1(/
&abitantes por cada m1dico y 1 12! &abitantes por estomatlogo.
8l triunfo de la re)olucin &ab$a unos seis mil m1dicos, concentrados en su mayor$a
en la capital, de los cuales unos tres mil abandonaron la patria como resultado de las
maniobras e.ercidas por la reaccin.
La formacin profesional &a sido, desde entonces, incomparablemente superior, pues
se combina desde el primer ao el aprendi-a.e terico con la pr#ctica docente. Los
programas de estudio &an sido conformados tomando las e%periencias de los me.ores
centros de los pa$ses m#s a)an-ados en la materia. Para la formacin del personal
m1dico y param1dico funcionan cuatro institutos superiores de ciencias m1dicas con
12 filiales, 21 facultades de medicina, cuatro facultades de estomatolog$a, 2(
institutos polit1cnicos de la salud y ,' &ospitales docentes.
8nualmente ingresan en las facultades de medicina unos cinco mil .)enes,
seleccionados por su )ocacin, su e%pediente acad1mico y su conducta re)olucionaria
para integrar el >estacamento de Ciencias <1dicas Carlos J. Cinlay, nombre del sabio
cubano descubridor en 1++1 del agente transmisor de la fiebre amarilla.
Paralelamente, &a &abido un me.oramiento en la calidad profesional de los
enfermeros y au%iliares, pues un numeroso grupo &a alcan-ado ni)el uni)ersitario y
son licenciados. 2na e%periencia singular y fruct$fera iniciada en 1,+! se e%tiende
por el pa$sN el m1dico de la familia.
/8& '>"? es e% (?dico de %a -a(i%ia*
43 L8 >_C8>8 del oc&enta, como respuesta a la necesidad de continuar ele)ando
el ni)el de salud de la poblacin, se introdu.o un nue)o enfo9ue en la atencin
primaria, y surgi el modelo del m1dico y la enfermera de la familia, y la
especialidad de medicina general integral.
4l m1dico y la enfermera de la familia constituyen la piedra angular de la atencin
primaria, y se articula con los ni)eles secundario y terciario de atencin. Cubren un
#rea territorial bien definida Ounas ciento treinta familias como promedioP, identifican
los problemas de salud a ni)el indi)idual y del grupo familiar, tratan de dar una
solucin con un enfo9ue integral, caracteri-an el perfil epidemiolgico de su #rea y
reali-an acciones de promocin de salud interactuando con la comunidad para
incorporar &#bitos saludables en la poblacin.
4sta atencin comunitaria &a logrado en pocos aos ele)arlos ni)eles de salud en
-onas urbanas y rurales. 4ste plan de m1dico y enfermera de la familia se e%tiende a
centros de traba.o, escuelas, c$rculos infantiles, marina mercante y cooperati)as
agropecuarias con el ob.eti)o de llegar a las personas en su propio medio laboral y
educati)o.
Con la ubicacin de los graduados del curso 1,,(*1,,+, los m1dicos de la familia
ascienden a 2, ,2!, 9ue cubren al ,+,2J de la poblacin cubana. Cada 1" o 2/
m1dicos de familia se constituye un grupo b#sico de traba.o, con el n@mero
correspondiente de enfermeras, un profesor de cada especialidad b#sicaN medicina
interna, pediatr$a y ginecolog$a y obstetricia, un siclogo y una super)isora de
enfermer$a, con sede en el policl$nico u &ospital rural. La formacin acad1mica del
m1dico y la enfermera de la familia contribuye a la formacin cient$fica a tra)1s de la
pr#ctica y de problemas reales en escenarios reales. Con esta pol$tica el ciudadano no
)a al m1dico, sino 9ue el personal de salud es el 9ue acude donde se encuentra el
nio, el estudiante, el traba.ador, la familia.
/;& 'Ee c"0%es en-er(edades se pro3ege con 9ac"nas a %a po)%aci$n*
>45>4 los aos iniciales del proceso re)olucionario se dedica especial 1nfasis en
proteger a la poblacin contra las afecciones transmisibles 9ue m#s la afectaban, y
actualmente el es9uema de )acunacin abarca a doce enfermedades, Zla cifra m#s alta
9ue tiene reportado pa$s alguno en el mundo[
Primero fue una )acunacin contra la poliomielitis, en febrero de 1,'2F y en octubre
de ese propio ao se inici la inmuni-acin masi)a contra tres grandes malesN la
difteria, la tos ferina y el t1tanos, 9ue arro.aban un alto saldo de muertes. La triple
O>P;P, como se le conoce, se aplic en unos tres meses mediante una acti)a
mo)ili-acin de m1dicos y traba.adores de la salud para no de.ar ni una sola regin
rural sin 9ue se le aplicara la )acuna. ;ras esas campaas sanitarias se desarrollaron
otras 9ue completan el es9uema oficial de )acunacin en el pa$s.
4ste es9uema comprendeN la antipoliomiel$tica, la triple O>P;P, la :C? Ocontra la
tuberculosisP, la triple )iral Oprotege contra la papera, la rub1ola y el sarampinP.
8simismo se proporciona la duple Oinmuni-a contra la difteria y el t1tanosP, la
antit$fica Ocontra el tifusP y la to%oide Ocontra el t1tanosP. 5e inici a partir de 1,,2 un
programa de inmuni-acin contra la &epatitis grupo : a reci1n nacidos, 9ue incluy
tambi1n desde 1,,+ a estudiantes de ensean-a primaria, para lograr 9ue ese mismo
ao toda la poblacin cubana menor de )einte aos se encontrara totalmente
protegida contra esa enfermedad. 8 partir de 1,,, se inici la campaa de )acunacin
a menores de un ao contra el 7aemop&ilus influen-ae, causante de muertes y de
secuelas tales como retardo mental y sordera.
4st#n eliminadas la poliomielitis O1,'2P, el t1tanos neonatal O1,(2P, la difteria O1,(,P,
el s$ndrome de rub1ola congenita O1,+,P, la meningitis posparotiditis O1,+,P, el
sarampin O1,,P, la rub1ola O1,,"P y m#s recientemente la parotiditis OpaperaP desde
1,,". 4stas dos @ltimas fueron declaradas en 1,,+, luego de no reportarse en el pa$s
ning@n caso por tres aos consecuti)os. 5e &a reducido en un ,J los casos de
enfermedad meningocccica grupo :, debido a las )acunaciones masi)as desde 1,++,
mientras el t1tanos y la tos ferina no constituyen problemas de salud. 4st# establecido
y es obligatorio 9ue a cada ciudadano 9ue )ia.a al e%terior se le prote.a con el
es9uema orientado por el Control 5anitario =nternacional.
Con esta proteccin masi)a y gratuita a sus ciudadanos, Cuba, asumiendo el
e%traordinario esfuer-o 9ue significa, &ace posible el e.ercicio de uno de los
fundamentales derec&os &umanosN la salud.
/9& 'Es30 per(i3ido e% a)or3o*
5S, 823024 se trata de 9ue su $ndice disminuya, e%plic#ndoles a las mu.eres en
edad f1rtil 9ue la interrupcin del embara-o no es la frmula me.or para impedir la
descendencia.
Cada pare.a puede determinar el n@mero de &i.os y el momento oportuno del
nacimiento. Para ello el <inisterio de 5alud P@blica ofrece recursos a la poblacin
femenina, de acuerdo con las normas )igentes, con respecto a la pol$tica
anticoncepti)a, interrupcin del embara-o y esterili-acin.
4s una preocupacin constante de la Cederacin de <u.eres Cubanas *organi-acin
9ue agrupa a la inmensa mayor$a de la masa femenina mayor de catorce aos*, la
luc&a por la plena igualdad de la mu.er, y dentro de ese conte%to se enmarca la
necesidad y el derec&o a decidir su familia de com@n acuerdo con su compaero.
Como complemento se lle)a a cabo, a tra)1s de los medios masi)os de difusin, una
di)ulgacin sobre aspectos de la educacin se%ual 9ue oriente en especial a la
adolescencia y la .u)entud sobre la se%ualidad, la eleccin de la pare.a adecuada y
otras cuestiones de esta $ndole para e)itar el embara-o preco- y la maternidad
temprana.
70& '>"? signi-ica para e% c")ano %a donaci$n 9o%"n3aria de sangre*
45;8 74A<658 y &umanitaria e%periencia se inici &ace m#s de treinta y cinco
aos, en uno de los m#s cruciales momentos de la &istoria. >urante la crisis de
octubre de 1,'2, cuando el pa$s se )io amena-ado por un inminente ata9ue nuclear,
miles de bra-os se e%tendieron &acia las armas y &acia la produccinF y
simult#neamente, por primera )e-, para donar masi)a y )oluntariamente su sangre.
8 partir de a9uel entonces es una tarea organi-ada por los Comit1s de >efensa de la
Ae)olucin, 9ue educan y mo)ili-an a las personas con disposicin y posibilidades
para &acerlo, e%plicando la importancia de la generosa accin.
<ediante la clonacin )oluntaria de sangre se &a logrado una amplia y )ariada
produccin de &emoderi)ados 9ue &a permitido al pa$s autoabastecerse desde 1,+2,
e)itando la importacin de enfermedades tales como el sida, la &epatitis y otras.
4n los m#s de siete lustros transcurridos desde a9uella memorable ocasin, se &an
reali-ado m#s de oc&o millones de donaciones )oluntarias de sangre. Pero la cifra
impresionante se obtu)o en 1,,+ cuando se alcan-aron "',L,+1 donaciones
)oluntarias, la m#s alta cifra en la &istoria de los C>A. Por segundo ao consecuti)o
se da cumplimiento a la meta planteada por la 6rgani-acin <undial de la 5alud para
los pa$ses desarrollados con miras al ao 2/// de una donacin )oluntaria por cada
)einte &abitantes.
71& 'C"0%es son %as ca"sas -"nda(en3a%es de ("er3e*
L65 PA6?A8<85 de salud 9ue se &an lle)ado a cabo en Cuba durante las @ltimas
d1cadas &an tra$do como consecuencia la erradicacin de numerosas enfermedades
9ue a@n en estos tiempos llenan de luto a muc&os &ogares en pa$ses del tercer mundo.
La poliomielitis pro)ocaba la in)alide- o la muerte de unas trescientas personas por
ao, y fue erradicada en 1,'2. 4l paludismo afectaba a /// casos anualmente y fue
li9uidado en 1,'+. La difteria atacaba a un promedio de '// nios cada ao y
desapareci en 1,(,. 4l gran a-ote de la infancia en los pa$ses subdesarrollados, la
gastroenteritis, se &a logrado reducir dr#sticamente, as$ como la tuberculosis y dem#s
enfermedades infecciosas.
4n 1,,+ las primeras causas de muerte para todas las edades fueronN enfermedades
del cora-n, los tumores malignos, las afecciones cerebro*)asculares, los accidentes
y, en 9uinto lugar, la influen-a y neumon$a.
Le siguen en orden descendente las enfermedades de las arterias, arteriolas y )asos
capilares, la diabetes mellitus, el suicidio y lesiones autoinfligidas, la cirrosis y otros
padecimientos crnicos del &$gado, y bron9uitis, enfisema y asma.
7+& 'A c"0n3o asciende %a (or3a%idad in-an3i%*
L8 <6A;8L=>8> infantil &a continuado disminuyendo. 5e mantu)o por deba.o de
die- por cada mil nacidos )i)os en el trienio 1,,*1,,", parad.icamente
considerados los m#s dif$ciles de nuestra &istoria. >escendi a (,, en 1,,', a (,2 en
1,,(, y al ao siguiente Cuba se ubic entre los 1( pa$ses de m#s ba.o $ndice de
fallecimientos de nios menores de un ao *seg@n reporte de la 23=C4C* al lograr la
tasa de (,1 por mil nacidos )i)os.
8ntes del triunfo re)olucionario, aun9ue no &ab$a estad$sticas e%actas por9ue no se
registraban todos los 9ue mor$an en las -onas rurales, se calcula en '/ o (/ los
fallecidos por cada mil nacidos. 4ntonces fueron tomadas medidas sanitarias como la
medicina rural, la construccin de centros &ospitalarios en todo el pa$s, la prioridad
en la atencin materno*infantil, la )acunacin masi)a, y se redu.o a 1,, en 1,(,. 4n
1,,/ se &ab$a alcan-ado una tasa de 1/,(.
4sta significati)a disminucin de muertes de nios menores de un ao &a sido el
resultado de un esfuer-o tit#nico reali-ado por los profesionales de la salud y de los
recursos asignados. Pr#cticamente slo mueren a9uellos 9ue tienen pocas posibili*
dades de super)i)encia, algunos con malformaciones cong1ni*tas incompatibles con
la )ida.
4n Cuba e%iste la forma de detectar, en la mayor$a de las ocasiones, durante las
primeras semanas de gestacin, la posibilidad de 9ue una criatura tenga alguna
malformacin congenita incompatible con la )idaN cuando se descubre se les
comunica a los padres, 9uienes deciden si se interrumpe el embara-o o no.
=nfluyen en la cifra de la mortalidad infantil los embara-os precoces, 9ue pro)ocan
nacimientos prematuros en muc&as ocasiones. 4n el resto de los pa$ses
latinoamericanos, durante la @ltima d1cada del siglo, este $ndice supera los !/ como
promedio por cada mil nacidos )i)os.
7,& 'C$(o se co(por3a e% sida en C")a*
4L 5S3>A6<4 de =nmunodeficiencia 8d9uirida, 9ue tanto dolor y muerte est#
causando en el mundo, no es un problema de salud en Cuba. >esde inicios de 1,+,
cuando llegaron las primeras informaciones sobre la enfermedad, el <inisterio de
5alud P@blica decidi la creacin de una comisin t1cnica para la )igilancia cl$nica
de la enfermedad, 9ue era la @nica forma de diagnstico en esos momentos.
8l conocerse las )$as de transmisin del G=7 se decidi auda-mente destruir unos
)einte mil frascos de plasma para una posible contaminacin y administrar solamente
a la poblacin O&emof$licos, reci1n operados y otrosP sangre pre)iamente testada
contra el G=7.
Cient$ficos cubanos desde el principio dedicaron sus esfuer-os en ese sentido, y
crearon reacti)os 9ue disminuyeron el costo de los e%#menes diagnsticos. Luego
surgi el 5istema 2ltramicroanal$tico O52<8P 9ue propici la masi)idad de las
pruebas, y &oy se anali-a la sangre de todas las embara-adas, de los ingresados en los
&ospitales y los grupos de mayores riesgos para una deteccin temprana con )istas a
una atencin oportuna.
La estrategia de los primeros aos comprend$a el estudio serolgico a grandes grupos
de poblacin, estudio epidemiolgico de todas las personas seropositi)as para la
r#pida deteccin de otros infestados entre sus contactos y el ingreso ba.o r1gimen
sanatorial de los seropositi)es para educarlos, disminuir la difusin del G=7, a la )e-
9ue se ofrec$an las me.ores condiciones de tratamiento, nutricin y medicamentos
para los portadores y enfermos.
Con el transcurso del tiempo y el mayor conocimiento sobre la enfermedad,
e)olucion la pol$tica sanatorial y surgi el plan del paciente TgaranteU, 9ue sal$a los
fines de semana y en otras oportunidades sin acompaante m1dico. Da en 1,+, las
comisiones multidisciplinarias *psiclogos, si9uiatras, epidemilogos, especialistas
de medicina interna, enfermeros y traba.adores sociales* anali-aron los casos seg@n
su conducta, el cuidado 9ue ten$an de ellos mismos y para las dem#s personas. Cue el
paso pre)io a la atencin ambulatoria, iniciada en 1,,, a la 9ue &oy est#n acogidos
unos trescientos seropositi)os y enfermos, seg@n su )oluntariedad.
4stos pacientes son atendidos de forma especiali-ada y diferenciada en &ospitales de
todas las pro)incias, y en el caso de las pro)incias de La 7abana y Ciudad de La
7abana, asisten al =nstituto de <edicina ;ropical O=PHP.
4l tratamiento b#sico para la infeccin del G=7 se sigue administrando en los
sanatoriosN factor de transferencia, interferon, 8Q;, y en algunos casos in&ibidores de
proteasa. 8 mediados de 1,,, &ab$a un acumulado desde la d1cada anterior de algo
m#s de dos mil doscientos seropositi)os al G=7, unos oc&ocientos cuarenta enfermos
y unos seiscientos fallecidos.
7.& 'C$(o es e% progra(a de ay"da (?dica a Cen3roa(?rica*
52A?=] en no)iembre de 1,,+, a ra$- de la gran desolacin y tragedia desatadas en
los pa$ses centroamericanos por el a-ote del &urac#n <itc&, al segar miles de )idas,
desaparecer a decenas de miles de personas y ocasionar p1rdidas por decenas de
miles de millones de dlares. T4l &urac#n de la pobre-a mata m#s personas todos los
aos 9ue <itc&U, denunci Cidel Castro, y a nombre de Cuba propuso un plan para
mitigar el desastre y reducir las altas tasas anuales de mortalidad de la regin.
4%plic un programa integral de salud 9ue comprend$a la disposicin al en)$o
inmediato y gratuito de 2 /// m1dicos &acia 7onduras, ?uatemala y cual9uier otro
pa$s 9ue lo re9uiera, de los afectados por el &urac#n, para prestar ser)icios por tiempo
indefinido en los lugares m#s apartados 9ue carecieran de asistencia m1dica directa,
traba.ando en estrec&a cooperacin con los organismos internacionales de salud,
m1dicos del pa$s y red de policl$nicos y &ospitales nacionales. 4n el plan se
con)ocaba a otros pa$ses 9ue disponen de m#s recursos a 9ue aportaran los
medicamentos necesarios, mientras Cuba en)iar$a el personal m1dico para lle)ar a
cabo a corto y mediano pla-os un programa integral de salud, mediante el cual cada
ao se sal)ar$an tantas )idas como las 9ue se perdieron por el &urac#n <itc&, entre
ellas no menos de )einticinco mil nios menores de cinco aos.
>e inmediato comen-aron a partir brigadas con personal m1dico y param1dico &acia
7onduras, 3icaragua, 4l 5al)ador y ?uatemala. Los profesionales cubanos no
permanec$an en las capitales ni en las ciudades, se ubicaban en los lugares m#s
intrincados y dif$ciles de esas regiones. D la realidad fue 9ue brigadistas cubanos
marc&aron a pa$ses de Centroam1rica, el Caribe y 5udam1rica para ali)iar
enfermedades y curar a la poblacin. 4n otro aspecto del programa, Cuba ofreci
cinco mil becas a Centroam1rica para estudiar medicina en la isla en el pla-o de un
decenio. 4sta idea entusiasm a gobernantes y pueblos en general, de modo tal 9ue
posteriormente se ampli a alumnos de 8m1rica del 5ur y el Caribe. 7oy funciona la
4scuela Latinoamericana de Ciencias <1dicas, 9ue tiene su sede en lo 9ue fuera
8cademia 3a)al ?ranma, ubicada en los l$mites de la capital y la pro)incia de La
7abana. 4l <inisterio de las Cuer-as 8rmadas de Cuba traspas a 5alud P@blica el
local de su academia militar para con)ertirla en una uni)ersidad m1dica.
3o es ocioso recordar 9ue el primer paso dado por Cuba &ab$a sido anunciar la
cancelacin de la deuda de 3icaragua, @nico pa$s de Centroam1rica 9ue tema
obligaciones monetarias pendientes con la isla, ascendentes a unos cincuenta millones
de dlares. 3uestro pa$s y Crancia fueron los primeros en cancelar la deuda a la tierra
de 5andino.
Cuba cumple cabalmente con el programa integral de colaboracin m1dica 9ue
e%puso Cidel en no)iembre de 1,,+N profesionales de la salud prestan ser)icios en los
pueblos &ermanos, y centenares de .)enes &an )ia.ado a Cuba para iniciar los
estudios prem1dicos y luego iniciarse en la carrera.
'". A A"? edad p"eden =")i%arse %os 3ra)a=adores y a c"0n3o asciende s"
pensi$n (1ni(a*
4L A_?=<43 de seguridad social 9ue rige en el pa$s protege a los traba.adores
asalariados tanto de los sectores estatal, cooperati)o y pri)ado, como de las
organi-aciones pol$ticas, sociales y de masas, o de las asociaciones, y a sus familias.
;ienen derec&o a una pensin ordinaria los traba.adores 9ue lleguen a sesenta aos o
m#s si son &ombres, y a cincuenta y cinco o m#s si son mu.eres, y &ayan prestado no
menos de )einticinco aos de ser)icios.
7ay una categor$a especial 9ue se establece si las condiciones laborales determinan
un gasto de energ$a f$sica, mental o de ambas, de tal naturale-a 9ue produ-ca un
desgaste en el organismo no acorde con el 9ue corresponde a su edad. 4n tales casos
pueden acogerse a la pensin los traba.adores a partir de los cincuenta y cinco aos si
son &ombres y de cincuenta aos si son mu.eres, si &an prestado )einticinco aos de
ser)icio.
;ambi1n &ay pensiones e%traordinarias 9ue se conceden a los &ombres de sesenta y
cinco aos o m#s, y a las mu.eres de sesenta aos o m#s de edad 9ue &ayan traba.ado
no menos de 9uince aos.
Pero es frecuente encontrar por todo el territorio a traba.adores 9ue &an arribado a la
edad de .ubilacin y contin@an en sus puestos de labor, ya 9ue se sienten aptos y con
un gran amor a su traba.o. 4n estos casos, como reconocimiento a esa actitud de
brindar su aporte y e%periencia a la sociedad, reciben al .ubilarse un incremento
especial por cada ao de ser)icios prestados con posterioridad a a9uel en 9ue
alcan-aron los re9uisitos de edad y de ser)icios.
Cuba &a destinado anualmente, aun durante los aos de crisis econmica, unos mil
9uinientos millones de pesos a la seguridad social, 9ue representan unos !,1 millones
de pesos cada d$a, sin incluir los gastos en prestaciones a corto pla-o, maternidad y
enfermedad, ni tampoco lo 9ue se dedica a la asistencia social, la cual protege a miles
de personas.
Da en 1,,+ esta cifra ascendi a m#s de mil seiscientos millones de pesos, 9ue
garanti-a el pago oportuno e ininterrumpido de las pensiones a casi milln y medio
de beneficiarios. 8 causa de la tendencia ascendente en el en)e.ecimiento de la
poblacin cubana, anualmente aumenta en decenas de miles el n@mero de
pensionados.
8ntes del triunfo de la re)olucin eran muy pocos los sectores obreros en los 9ue se
obten$an pensiones por retiro o .ubilacin, y en algunos casos, si se consegu$an, eran
irrisorias. 7ab$a retiros de un peso y medio o dos pesos al mes. 4n 1,"+ los pagos por
seguridad social alcan-aban 1/" millones de pesos.
:ueno es recordar 9ue por a9uella 1poca la mayor parte de las ca.as de retiro estaban
desfalcadas. <uc&os .ubilados del sector agr$cola recib$an slo seis pesos al mes.
2na gran parte de los traba.adores no estaban comprendidos en tales derec&os 4n
1,", las ca.as fueron dotadas de fondos para 9ue pudieran cumplir sus compromisos,
y en ese mismo ao fue ele)ado el m$nimo de .ubilaciones y pensiones a cuarenta
pesos mensuales.
4n 1,' se aprob la Ley 11// de 5eguridad 5ocial, discutida y anali-ada
pre)iamente en todos los centros de traba.o, 9ue proteg$a al ciento por ciento de los
asalariados e implicaba reconocimiento de los aos traba.ados en cual9uier sector o
acti)idad laboral.
Luego se aprobaron otras medidas de contenido socialN creacin de .ubilaciones para
m#s de siete mil ancianos, sobre)i)ientes de los braceros antillanos introducidos en
Cuba en la segunda d1cada del sigloF la .ubilacin de m#s de )eintids mil
traba.adores y pe9ueos propietarios, 9ue dada su incapacidad para el traba.o o alta
edad no pod$an prestar ser)icio en la esfera estatal. Da en 1,(" el m$nimo de las
pensiones era de sesenta pesos mensuales.
Posteriormente, el de enero de 1,+(, se dispuso por el Comit1 4statal del ;raba.o y
5eguridad 5ocial 9ue se incrementaran las cuant$as de pensiones &asta un m$nimo de
cien pesos mensuales a los .ubilados por edad o in)alide- total y a los pensionados
por causa de muerte.
77& '>"? personas es30n pro3egidas por %a Asis3encia Socia% y c"0%es pres3aciones
se %es )rinda*
L8 85=5;43C=8 5ocial es un derec&o de la poblacin cubana. 4l estado la ofrece de
acuerdo con la necesidad 9ue tenga un ciudadano o una familia por la carencia de
ingresos econmicos, o de e%istir, si sus cuant$as son inferiores a las 9ue se
establecen en escala para prestaciones. 4st#n protegidos por la asistencia socialN
aP Los ancianos 9ue re9uieran atencin especial.
bP Las personas no aptas para traba.ar o 9ue, por ra-ones de fuer-a mayor, est#n
impedidas de incorporarse al traba.o.
cP Las madres solteras con dificultades econmicas para la atencin y cuidado de sus
&i.os.
dP Las madres traba.adoras en el per$odo 9ue disfrutan las licencias no retribuidas
para el cuidado y atencin de sus &i.os enfermos y 9ue por tal situacin care-can de
ingresos econmicos.
eP Los parientes de un traba.ador o pensionado fallecido 9ue no est1n comprendidos
en el derec&o a pensin por causa de muerte 9ue establece la ley, y estu)ieran a su
abrigo y proteccin.
fP Los pensionados con prestaciones 9ue les resulten insuficientes seg@n el n@mero de
parientes 9ue dependen directamente de ellos.
gP Las )iudas pensionadas, a las cuales se les e%tingan las pensiones 9ue perciben
temporalmente.
&P Los traba.adores subsidiados por enfermedad o accidente 9ue re9uieran una mayor
proteccin econmica por estar su.etos a tratamientos de larga duracin y resultar
insuficientes sus ingresos.
iP Los traba.adores 9ue arriben a las edades sealadas en la pensin ordinaria o se
in)aliden y no cumplan el re9uisito de tiempo m$nimo de ser)icios prestados 9ue se
e%ige para obtener una prestacin de 5eguridad 5ocial.
.P Los menores pensionados por la 5eguridad 5ocial 9ue al arribar a los diecisiete
aos de edad se encuentren estudiando.
EP 6tras personas 9ue, sin estar comprendidas en los incisos anteriores, re9uieran una
urgente atencin de la 8sistencia 5ocial.
Las prestaciones 9ue se brindan a los casos atendidos pueden ser en ser)icios, en
especie y monetarias. 4n ocasiones puede ser el ingreso en &ogares de ancianos, o de
menores en &ogares de impedidos f$sicos y mentales. 8simismo el alo.amiento y
atencin en albergues de tr#nsito en casos de consultas m1dicas u &ospitali-acin de
parientes fuera de la localidad de residencia del interesado.
Las prestaciones en especie est#n referidas a la entrega gratuita de art$culos de uso
personal, muebles, art$culos de uso dom1stico, espe.uelos, prtesis y aparatos de
ortopedia, y otros efectos m1dicos. 4n cuanto a las monetarias, se conceden en forma
continua o e)entual a las personas o n@cleos familiares 9ue lo re9uieran. 5i son
continuas est#n referidas principalmente a la alimentacin y otros gastos fi.os, como
pueden ser la electricidad y el combustible para las cocinas. ;ienen el car#cter de
e)entual las 9ue son concedidas por una contingencia 9ue re9uiera una atencin
urgente. Por lo regular se destina a pasa.es, productos alimenticios y otras
necesidades urgentes e imprescindibles. 7ay ocasiones en 9ue los tres tipos de
prestaciones se obtienen simult#neamente.
78& '>"? derec6os 3ienen %os 6i=os na3"ra%es en C")a*
;6>65 los &i.os tienen iguales derec&os, sean &abidos dentro o fuera del
matrimonio. La constitucin de la rep@blica &a abolido toda calificacin sobre la
naturale-a de la filiacin. Por ello no se consigna declaracin alguna diferenciando
los nacimientos, ni sobre el estado ci)il de los padres en las actas de inscripcin de
los &i.os, ni en ning@n otro documento.
4l Cdigo de Camilia manifiesta 9ue todos los &i.os son iguales, y por ello disfrutan
de los mismos derec&os y tienen los mismos deberes con respecto a sus padres,
cual9uiera 9ue sea su estado ci)il. Las leyes protegen y )iabili-an el reconocimiento
de los &i.os, aun cuando &aya fallecido alguno de los padres.
7;& 'E2is3e %a propiedad persona%*
5S, L8 PA6P=4>8> personal es a9uella 9ue comprende los bienes desuados a
satisfacer las necesidades materiales y espirituales de su dueo. Pueden ser propiedad
personal los ingresos y a&orros procedentes del traba.oF la )i)ienda, casa de descanso,
solares yermos y dem#s bienes ad9uiridos por cual9uier t$tulo legal, y tambi1n los
medios e instrumentos de traba.o personal o familiar.
4n Cuba e%isten adem#s otras formas de propiedadN la estatal socialista, la de las
organi-aciones pol$ticas, de masas y sociales, la de las cooperati)as, la de los
agricultores pe9ueos y la de empresas mi%tas, con.untas e internacionales, y de otras
personas .ur$dicas de caracter$sticas especiales.
Los bienes pueden &eredarse por testamento o por la ley. 4n el primer caso, el Cdigo
Ci)il aprobado en 1,+( dispone 9ue los testamentos pueden ser notariales, olgrafos
Ototalmente escrito y firmado de puo y letra por el testadorP, el otorgado ante
funcionario consular y otros especiales. 5on &erederos por la ley los &i.os y dem#s
descendientes, los padres, el cnyuge, los dem#s ascendientes y los &ermanos y
sobrinos.
79& 'C"0%es son %as -or(as de propiedad de %a 3ierra*
563 >=G4A585 las formas de propiedad de la tierra, a tenor de las @ltimas
transformaciones 9ue &an tenido lugar en el pa$s. 5on ellas la estatal, 9ue comprende
gran.as y empresasF las entregadas en usufructo permanente *aun9ue siguen siendo
patrimonio del estado* 9ue &an conformado las 2nidades :#sicas de Produccin
Cooperati)a O2:PCPF la pri)ada de campesinos indi)idualesF la cooperati)a, en las
cuales estos campesinos unieron sus tierras para formar la Cooperati)a de Produccin
8gr$cola OCP8PF y las parcelas, entregadas por el estado a .ubilados y a sectores
agr$colas, fundamentalmente para el culti)o del tabaco y el caf1, 9ue a principios de
1,,+ alcan-aban casi las cien mil &ect#reas, lo 9ue implica un saldo importante en la
e%plotacin m#s racional de la tierra.
Como datos de inter1s podemos destacar 9ue las 2:PC comprenden alrededor del
cincuenta y oc&o por ciento de la tierra culti)able, y 9ue a finales de la d1cada del
no)enta se manten$an m#s de ciento )einticinco mil campesinos independientes 9ue
culti)an caf1, papa, tabaco, &ortali-as, algo de caa y otros productos.
>esde &ace d1cadas estos campesinos crearon unas dos mil oc&ocientas Cooperati)as
de Cr1ditos y 5er)icios OCC5P, en las 9ue cada uno mantiene la propiedad indi)idual
sobre la tierra, pero se agrupan para recibir financiamiento y apoyo del estado para
sus producciones, tanto en ma9uinaria como en asesoramiento t1cnico y
comerciali-acin de sus producciones. 3o se les cobran impuestos, y como cual9uier
otro ciudadano cubano tienen el derec&o a la educacin y la atencin m1dica
gratuitas.
La entrega de tierras en usufructo gratuito a familias para 9ue traba.en en ellas y sean
dueos de sus cosec&as, medios de produccin e instalaciones 9ue )ayan le)antando,
asciende a unas oc&o mil caballer$as.
80& 'Por A"? no 6ay ana%-a)e3os*
L8 ?A83 proe-a de alfabeti-ar al pueblo tu)o su &ito &istrico en 1,'1, y
posteriormente las acciones de los ministerios de 4ducacin y 4ducacin 5uperior
&an continuado ofreciendo conocimientos y cultura. Cuba, como el resto de los pa$ses
del tercer mundo, tema antes del triunfo re)olucionario un ele)ado $ndice de
analfabetismo. 4n 1,", ao del asalto al cuartel <oneada *9ue inici la luc&a
armada contra la tiran$a de Culgencio :atista*, la situacin educacional era as$N m#s
de medio milln de nios sin escuelas, m#s de un milln de analfabetos, m#s de die-
mil maestros sin traba.o. 4n 1,"+ el analfabetismo ascend$a a 2,'J.
La Campaa 3acional de 8lfabeti-acin, reali-ada en 1,'1, apenas dos aos despu1s
del triunfo popular, fue una accin de masas 9ue contribuy a la estrec&a )inculacin
entre la ciudad y el campo. La fuer-a educacional estu)o integrada por m#s de
doscientos sesenta mil ciudadanos, conformada por unos cien mil estudiantes .)enes
y adolescentes 9ue formaron las brigadas Conrado :en$te-, m#s de trece mil
traba.adores organi-ados en las brigadas Patria o <uerte, unos treinta y cinco mil
maestros profesionales y m#s de ciento )einte mil alfabeti-adores populares.
5$mbolos de a9uella 1pica accin, 9ue enorgullece a todo el pueblo, fueron la cartilla
y el farol. 8 la lu- de cada farol se reun$an brigadistas y familias campesinas, .unto a
la cartilla, para aprender a leer y a escribir. T5er cultos es el @nico modo de ser
2bresU, &ab$a dic&o el 71roe 3acional de Cuba, Jos1 <art$, y la re)olucin, de ra$ces
martianas, marc&aba consecuente con su ideario.
>urante 1,'1, 8o de la 4ducacin, en medio de las campaas de mentiras y
difamaciones, de la accin de bandas contrarre)olucionarias 9ue armadas por el
gobierno estadounidense asesinaban a maestros y campesinos, y de la in)asin de
mercenarios a Playa ?irn derrotada en menos de setenta y dos &oras, se
alfabeti-aron (/(L212 &ombres y mu.eres del campo y la ciudad.
>isminuy entonces el analfabetismo a ,,J. Posteriormente esta cifra &a ido
decreciendo, y seg@n datos ofrecidos por el Censo de 1,+1, la tasa entre la poblacin
de die- a cuarenta y nue)e aos era de 1,,J. 5eg@n las estad$sticas de 1,,+ la tasa de
analfabetismo se manten$a en ,+J 9ue representa a a9uellas personas 9ue por ra-n
de su edad y otros problemas no pudieron alfabeti-arse.
Para 9ue esta obra grandiosa no 9uedara inconclusa, se organi-aron de inmediato a la
campaa planes de seguimiento a los reci1n alfabeti-ados, y de superacin obrera
para a9uellos 9ue tu)ieran ba.o ni)el escolar. ;odo este bregar en pos de una mayor
educacin a las masas deri), posteriormente, en la :atalla por el 5e%to ?rado 9ue
alcan- su m#s alto impulso en el lustro 1,('*1,+/, y fue el antecedente de la :atalla
por el 3o)eno ?rado, 9ue ganaron m#s de seiscientos cincuenta mil traba.adores.
81& 'C$(o se garan3i<a %a con3in"idad de %a ed"caci$n*
8C;28L<43;4 se mantienen estudiando m#s de dos millones trescientas mil
personas en los distintos sistemas de ensean-a, 9ue incluyen la educacin a
discapacitados, escuelas de arte y deporti)as. Las tasas de escolari-acin de Cuba
est#n entre las m#s altas del mundo, pues reciben una atencin sistem#tica y
organi-ada el ,(,!J de los nios entre seis y catorce aos, 9ue asciende al ,,,(J si
se limita a las edades de seis a once aos.
8 esto debemos incluir la atencin educati)a y de salud 9ue se ofrece por )$as
institucionales y por )$as no formales al ,!,"J de los nios de cero a cinco aos. 4l
,',,J de todos los nios de cinco aos cursa el grado prescolar. Para el curso 1,,+*
1,,, continuaban estudios en la ensean-a media superior el ,+,2J de los graduados
de no)eno grado.
4l sistema nacional de becas se &a mantenido desde los primeros aos del proceso
re)olucionario. 4n el curso 1,,+*1,,, el n@mero de becarios fue de unos trescientos
)einte mil Osuperior al curso anteriorP, y como seminternos estudiaron unos
seiscientos mil, repartidos en ambos casos entre ensean-a primaria, media y
superior.
Los ser)icios educacionales en las montaas se brindan a unos ciento cincuenta y tres
mil alumnos, donde se dispone de 2L!// escuelas atendidas por 12L'// maestros y
profesores, uno por cada once alumnos, de los cuales 2L'// pertenecen a
contingentes, destacamentos y brigadas de montaas.
4n cuanto a la ensean-a superior, funcionan "( centros en todo el pa$sN 1"
uni)ersidades adscritas al <inisterio de 4ducacin 5uperior, 1" institutos superiores
pedaggicos, cuatro institutos superiores de ciencias m1dicas y nue)e facultades
independientes, oc&o centros de ensean-a militar, la escuela superior del Partido
Comunista de Cuba y otros cinco institutos adscritos a igual n@mero de organismos.
La matr$cula actual es de 12' ',+ entre diurnos y en educacin a distancia, y se &an
graduado desde 1,", a la fec&a m#s de medio milln de profesionales. 4n esta cifra
no se incluyen los egresados de escuelas militares y de superacin pol$tica del partido
de ni)el uni)ersitario.
Aecordemos 9ue al triunfo de la re)olucin estaban matriculados unos 9uince mil
alumnos estudiando en las tres uni)ersidades del pa$sN una en la capital, una en la
pro)incia central de Las Gillas y otra en la pro)incia oriental.
8 partir de la reforma aprobada en 1,', se adoptaron planes de estudio con bases
cient$ficasF surgieron nue)as disciplinas y especialidades acordes con las e%igencias
del desarrollo nacional, y adem#s, cambi la estructura de matr$cula a fa)or de las
ramas cient$ficas y tecnolgicas, lo 9ue propici un cambio cualitati)o en los centros
de ensean-a superior. 4n la actualidad se puede encontrar este tipo de centro en
todas las pro)incias.
Cuba presenta una relacin de un maestro por cada !2 &abitantes, una de las m#s altas
de todo el planeta. 5eg@n datos de 1,,+, el '2J de los maestros de primaria son
licenciados en 4ducacin, y el ,"J en la ensean-a media. La consigna 9ue &a
guiado a los cubanos &a sidoN 5i sabes, enseaF si no sabes, aprende.
8+& 'C$(o es e% acceso a %a ed"caci$n de %os ni5os (in"s90%idos*
;434A una limitacin f$sica o mental no incapacita al nio cubano a su acceso a la
educacin. 4llos pueden acudir a las escuelas de ensean-a especial donde traba.an
coordinadamente maestros y profesionales de la salud para desarrollar sus
&abilidades.
2n total de !2( centros escolares distribuidos en todo el territorio nacional acogen a
unos cincuenta y siete mil nios y adolescentes *un 2,+J de la poblacin escolar*,
seg@n sus discapacidadesN retraso mental, retardo en desarrollo ps$9uico, trastornos de
conducta, dificultades en el lengua.e, estr#bicos y ambliopes, d1biles )isuales, sordos
e impedidos f$sico*motores.
4s con)eniente e%plicar 9ue el ingreso de un nio en una escuela especial es una
decisin de car#cter e%traordinario, y cuando as$ sucede se trata de 9ue permane-ca
all$ el menor tiempo posible.
2na cuidadosa e)aluacin sicopedaggica inicial del educando se reali-a en los
Centros de >iagnstico y 6rientacin *actualmente funcionan 1(, en el pa$s*, en los
cuales inter)ienen e9uipos multidisciplinarios. Como el resto de la educacin 9ue se
imparte, estos ser)icios especiali-ados son absolutamente gratuitos, a pesar de lo
costoso del comple.o e9uipamiento utili-ado para el diagnstico y educacin de los
alumnos.
Los discapacitados f$sico*motores aprenden no slo a mane.ar sus prtesis o silla de
ruedas, sino a )i)ir con dignidad, no obstante sus malformaciones cong1nitas,
distrofias musculares, falta de miembros superiores o inferiores por accidente u otras
causas, o par#lisis cerebrales.
4n el caso de los nios ciegos y de escasa )isin a)an-a un programa de difusin del
sistema :raille para alfabeti-arlos y proseguir su educacin. >e acuerdo con sus
posibilidades, aprenden en talleres de electrnica, computacin, artesan$a, bordado,
mecanograf$a, y otros pueden continuar los estudiosL en preuni)ersitarios y
uni)ersidades.
8,& '>"? pape% ="ega %a ("=er en %a sociedad*
C6<6 238 A4G6L2C=]3 dentro de la re)olucin calific Cidel Castro la
transformacin 9ue &ab$a logrado la mu.er en Cuba. 3o es ocioso e%presar 9ue los
resultados en los cambios pol$ticos y sociales de las masas femeninas est#n
indisolublemente ligados a la Cederacin de <u.eres Cubanas, creada en agosto de
1,'/.
8ctualmente las mu.eres constituyen el !2,,(J de la fuer-a laboral acti)a del pa$s en
el sector estatal ci)il, el '","J de los t1cnicos, el 1,1 J de los dirigentes y casi el
'/J de los graduados uni)ersitarios, seg@n estad$sticas de los @ltimos aos.
>e la misma forma las mu.eres se &an incorporado a los cargos de direccin, en el
partido y en las funciones parlamentarias, donde cubren un 2J de los escaos. La
C<C se &a esfor-ado por lograr la participacin de las amas de casa en los cursos
para alcan-ar el no)eno grado como anteriormente &i-o con el se%to grado, la
alfabeti-acin y los estudios de corte y costura a las campesinas.
>urante los @ltimos aos de limitaciones econmicas, la mu.er cubana &a .ugado un
papel de gran rele)ancia, pues sobre sus &ombros recae la responsabilidad de
diariamente ofrecer los alimentos a la familia, mantener limpias sus ropas y la &igiene
del &ogar, cuando los medios para lograrlos &an sido de gran escase-, utili-ando mil y
una formas distintasN plantas para la)ar, preparar comidas con un m$nimo de
condimentos y grasas, reparar ropas usadas... sin perder la ternura y la sonrisa.
Para facilitar su )ida laboral m#s acti)a, a principios de la d1cada del sesenta se
crearon los C$rculos =nfantiles, donde actualmente asisten m#s de ciento cincuenta
mil nios. Con respecto a la defensa, m#s de medio milln de mu.eres integraron las
<ilicias de ;ropas ;erritoriales, pasando cursos de entrenamiento, y ocupan, aun9ue
en menor escala, responsabilidades en los ministerios de las Cuer-as 8rmadas
Ae)olucionarias y del =nterior.
8.& 'C$(o es %a ="9en3"d c")ana*
02=QW5 25;4> no cono-ca 9ue de los apro%imadamente once millones cien mil
&abitantes con 9ue cuenta el pa$s a fines de siglo, m#s de siete millones cien mil no
&ab$an nacido en 1,",, es decir, no llegan a los cuarenta aos de edad. 4sa fuer-a
enorme es la 9ue sostiene en sus &ombros la mayor acti)idad laboral y defensi)a del
pa$s.
La .u)entud cubana &a sido a tra)1s de las generaciones palad$n de la independencia
y defensora de los derec&os patrios. >esde el siglo pasado se destacaron los .)enes
en las guerras por la liberacin. <art$, con slo diecis1is aos, fue sancionado a
prisin por moti)os pol$ticosF <aceo, con corta edad, dio muestras de cora.e y
audacia en la guerra libertaria. 4n la presente centuria &ay e.emplos cimerosN Julio
8ntonio <ella, fundador del Partido Comunista de CubaF Aub1n <art$ne- Gillena,
l$der indiscutible del proletariado en la luc&a antima*c&adistaF Jos1 8ntonio
4c&e)err$a, l$der uni)ersitarioF ?erardo 8breu Cont#n, obrero del mo)imiento
clandestinoF CranE Pa$s, inol)idable l$der de la resistencia contra la tiran$a batistianaF
y tantos .)enes 9ue en la sierra y el llano se enfrentaron a la dif$cil situacin
imperante.
5$mbolos de la .u)entud son tambi1n Camilo Cienfuegos, alegre y )aliente guerrillero
9ue particip desde la epopeya del ?ranma &asta la )ictoria de enero, desaparecido
f$sicamente en los albores del triunfoF y 4rnesto ?ue)ara, argentino 9ue )ia. a Cuba
dando un e.emplo de internacionalismo 9ue culmin en otras tierras americanas.
Luego del triunfo re)olucionario, la .u)entud &a dado muestras e)identes de
solidaridad &umana y )alorF la campaa de alfabeti-acin protagoni-ada por
adolescentes en 1,'1, la luc&a contra bandidos en la parte central del pa$s, la
integracin del 4.1rcito Ju)enil del ;raba.o, considerada la fuer-a m#s producti)a en
la cosec&a caera.
7a figurado en la primera l$nea en todas las tareas de la re)olucin, tanto frente a los
enemigos de la patria como contra la pobre-a y el atraso. Las p#ginas gloriosas del
internacionalismo en tierras africanas y americanas &an sido escritas por decenas de
miles de .)enes, en un gesto 9ue eternamente agradece la &umanidad.
4n estos tiempos dif$ciles, una nota de .u)enil alegr$a asoma en cada centro laboral y
estudiantil, con consignas 9ue repiten nios y ancianosN 1 y pablante, 2 y m#s
pelante, 5@mate y otras. :ailes y cantos acompaan las mo)ili-aciones a la
agricultura 9ue sistem#ticamente se lle)an a cabo en 1poca de siembra, culti)o y
recoleccin de )iandas, )egetales, caf1 y otros productos. La .u)entud no est#
perdida, sino est# encontrada, reafirman los .)enes, dando un paso al frente con la
sonrisa en los labios.
8/& 'C"0% es e% 3ra3a(ien3o a %os ci"dadanos de %a 3ercera edad*
C2:8 C243;8 a las puertas del 2/// con cerca de un milln 9uinientas mil
personas con sesenta aos o m#s, lo 9ue e9ui)ale a decir 9ue algo m#s de un trece por
ciento de su poblacin arrib a la tercera edad. La e%pectati)a de )ida de a9uellos 9ue
tienen seis d1cadas es de )i)ir )einte aos m#s, y la de los octogenarios unos siete u
oc&o.
4stas cifras dicen ya algo de lo 9ue el pa$s est# &aciendo por la super)i)encia de sus
&abitantesF pero si importante &a sido dar m#s aos a la )ida, el 1nfasis est# en dar
m#s )ida a los aos, me.orando la calidad de )ida, su autonom$a, su salud.
2n reto para toda la sociedad cubana es promo)er una cultura del en)e.ecimiento,
para 9ue los ciudadanos logren una )e.e- satisfactoriaN ese cuarto de )ida 9ue
contin@a despu1s de los sesenta debe lle)arse con un grado importante de funcio*
nabilidad, autonom$a y )alidismo. Cuando una persona en)e.ece influye de modo
determinante su estilo de )ida, y por ello se promue)e el e.ercicio f$sico, el control de
los &#bitos t%icos como el fumar y el alco&olismo.
Cerca de un nue)e por ciento de esta poblacin anciana &oy )i)e sola. Para ellos
di)ersos organismos desarrollan un programa de atencin 9ue comprende el la)ado
de la ropa, limpie-a de la casa y ayuda en la alimentacin, )incul#ndolos a comedores
obreros y sociales de la comunidad.
2na e%periencia muy positi)a comen- por la d1cada del oc&entaN los C$rculos de
8buelos en los 9ue participaron como promotores el <inisterio de 5alud P@blica, el
=nstituto de >eportes, 4ducacin C$sica y Aecreacin, el <inisterio de Cultura y
otros. 7ombres y mu.eres de m#s de sesenta aos acuden diariamente a las #reas
establecidas en sus barrios *par9ues, pe9ueas pla-as, anc&as a)enidas* y reali-an
acti)idades f$sicas.
4stos c$rculos, cuya membres$a y asistencia disminuyeron en los tiempos m#s
dif$ciles del per$odo especial, ya sobrepasan la cifra de once mil. 4llos reali-an
tambi1n e%cursiones, espect#culos art$sticos y culturales, y cumpleaos colecti)os.
2na encuesta reali-ada demostr una sensible disminucin del uso de medicamentos,
un al-a de los deseos de )i)ir y un mayor disfrute de alegr$a y felicidad entre a9uellos
9ue participaban regularmente en ellos.
8ctualmente se &a perfeccionado el programa de atencin a la tercera edad,
descentrali-ando las acciones a la comunidad, el municipio y la pro)incia, de manera
de acercarse m#s a los adultos mayores para conocer sus necesidades y ofrecerles
cooperacin y ayuda.
87& '>"i?nes p"eden ser @?roes de %a RepG)%ica de C")a y A"i?nes @?roes de%
Tra)a=o de %a RepG)%ica de C")a*
L65 ;S;2L65 &onor$ficos 71roe de la Aep@blica de Cuba y 71roe del ;raba.o de la
Aep@blica de Cuba, as$ como las medallas 4strella de 6ro y <edalla de 6ro del
;raba.o, correspondientes a estos t$tulos respecti)amente, constituyen las m#s altas
condecoraciones 9ue otorga el estado. 5e confiere el primero de ellos a los miembros
de las Cuer-as 8rmadas de Cuba y a cual9uier ciudadano, cubano o e%tran.ero, por
m1ritos y &a-aas e%traordinarias en defensa de la patria y las con9uistas de la
re)olucin, y en la luc&a contra el imperialismo. ;ambi1n puede ser otorgado a
ciudades y pueblos por moti)os an#logos.
4l t$tulo &onor$fico 71roe del ;raba.o se otorga a los ciudadanos cubanos y
e%tran.eros en reconocimiento a los m1ritos 9ue &ayan alcan-ado en el traba.o, por
)aliosos aportes 9ue aumenten en forma rele)ante la produccin y la producti)idad
del traba.o, por una contribucin sobresaliente al auge de la econom$a nacional o en
las luc&as por las con9uistas y en defensa de los logros o intereses de la clase obrera,
as$ como por e%cepcionales aportes a la causa del internacionalismo proletario.
88& 'Por A"? San3iago de C")a es "na Ci"dad @?roe*
583;=8?6 >4 C2:8 es la @nica 9ue ostenta la condicin de Ciudad 71roe de la
Aep@blica de Cuba. Cue el 1 de enero de 1,+!, .ustamente a los )einticinco aos del
triunfo de la re)olucin, cuando el .efe de estado Cidel Castro le impuso ese t$tulo
&onor$fico, .unto a la 4strella de 6ro 9ue lo identifica, y a la 6rden 8ntonio <aceo,
en cumplimiento de un acuerdo del Conse.o de 4stado, 9ue de esa forma reconoci
los e%traordinarios m1ritos re)olucionarios y la decisi)a contribucin de esa ciudad a
la total y definiti)a independencia del pa$s.
Cuna y fragua de &1roes legendarios como los <aceo, ?uillermn <oneada y una
legin )aliente de generales mam*bises, 5antiago de Cuba dio personalidades como
Pablo Lafar*gue y .)enes de )alent$a personal y entere-a como CranE Pa$s.
5urgieron all$ figuras promotoras de la cultura nacional como el poeta Jos1 <ar$a
7eredia, el educador Juan :autista 5agarra, el destacado escritor y patriota 4milio
:acard$ y el poeta y publicista >iego Gicente ;e.era. Por sus calles pasaron a9uellos
9ue asaltaron el cuartel <oneada, y tambi1n los 9ue )istieron por )e- primera el
uniforme )erdeoli)o en la &eroica .ornada del / de no)iembre de 1,"'.
>urante la luc&a re)olucionaria, 5antiago de Cuba fue escenario de numerosas
acciones del 4.1rcito Aebelde y de la clandestinidad. Luego de la )ictoria popular de
1,",, los santiagueros &an continuado prestando todo su apoyo a la construccin
socialista y a la defensa de las con9uistas del pueblo. 5u lema esN (ebelde ayer!
hospitalaria hoy! heroica siempre.
8;& '>"? posi)i%idades e2is3en para A"e 3odos %os c")anos p"edan de-ender s"
re9o%"ci$n*
L8 C63C4PC=]3 de la guerra de todo el pueblo, mediante la cual cada ciudadano
conoce 9u1 &acer y dnde en caso de alguna agresin enemiga, permite enfrentar con
1%ito la preparacin para la defensa de la patria.
Las Cuer-as 8rmadas Ae)olucionarias y el <inisterio del =nterior son ios dos bra-os
armados de la re)olucin. Pero el pueblo en su integralidad puede pertenecer a las
<ilicias de ;ropas ;erritoriales O<;;P, las :rigadas de Produccin y >efensa O:P>P,
la reser)a militar, etc. 4n cada comunidad &ay las posibilidades para integrarse a
estas organi-aciones 9ue adiestran en el arme y desarme, la preparacin militar, la
defensa ante bombardeos y la guerra 9u$mica.
<illones de &ombres y mu.eres &an sido entrenados en escuelas para saber cmo
defenderse del enemigo agresor. Cada traba.ador dona )oluntariamente en el ao el
salario de un d$a para los gastos de las <;;, institucin paramilitar ampliamente
descentrali-ada para una efecti)a proteccin de las comunidades.
D es 9ue mientras e%ista el imperialismo, como &a dic&o el Comandante en Jefe Cidel
Castro, el partido, el estado y el pueblo les prestar#n a los ser)icios de la defensa la
m#%ima atencin. La guardia re)olucionaria no se descuidar# .am#s, agregaba. La
&istoria nos ensea con demasiada elocuencia 9ue los 9ue ol)idan este principio no
sobre)i)en al error.
8,& 'C"0n3os son %os ("seos y ga%er1as*
238 A4> de 2! museos, 121 galer$as de arte y 2'1 casas de la cultura se e%tiende
por el pa$s como elementos de gran importancia para la formacin &istrica, cient$fica
y cultural. Aecordemos 9ue al triunfo re)olucionario e%ist$an unos siete museos
creados en su mayor$a por generales de la guerra de independencia, en los cuales se
recogieron muc&os )aliosos materiales y documentos, como el :arcard$, el de
8gramonte, en CamagIeyF el de C#rdenas...
8 partir de 1,", se ampli esta labor relacionada con la educacin y la cultura. <#s
tarde, con la ley de creacin de museos municipales, se acercaron a las comunidades,
promo)iendo no slo la recuperacin de )aliosas colecciones y elementos museables,
sino la comunicacin con el pueblo en las esferas del arte y la cultura.
4n Ciudad de La 7abana son frecuentemente )isitados el de :ellas 8rtes, de la
Ae)olucin, la 8lfabeti-acin, el Celipe Poey de la 8cademia de Ciencias, el de 8rtes
>ecorati)as, el 3apolenico, la Casa de 4rnest 7emingBay y otros. 4l <useo de la
Ciudad, con sede en el antiguo Palacio de los Capitanes ?enerales, es cita &abitual de
turistas e%tran.eros 9ue )isitan la -ona de La 7abana Gie.a, Patrimonio de la
7umanidad.
4n las restantes pro)incias funcionan interesantes museos como el de Ciencias
3aturales ;ran9uilino 5andalio de 3oda, en Pinar del A$oF el Playa ?irn, en
<atan-asF el de las parrandas remedianas, en Gilla ClaraF el Aom#ntico, de
ar9ueolog$a ?uamu&ayaF de Luc&a contra :andidos, en ;rinidadF el indocubano
:an$, de 7olgu$nF la ?ran.ita 5iboney, el &istrico 2' de Julio y el de la Pirater$a, en
5antiago de Cuba.
La afluencia de asistentes a las casas de cultura y galer$as de arte &a ido
increment#ndose en los @ltimos aos, luego de la reanimacin cultural 9ue se
e)idencia en todo el pa$s.
;0& 'C"0%es son %as 6"e%%as de @e(ingIay en C")a*
=3>4L4:L45 &uellas se encuentran en la capital cubana del autor de obras
inol)idables como 4l )ie.o y el mar, Por 9uien doblan las campanas, <uerte en la
tarde, 4n la corriente del golfo y tantas otras .oyas de la literatura norteamericana.
TDo siempre tu)e buena suerte escribiendo en CubaU, escribi 4rnest 7emingBay a
su amigo 4arl ^ilson en 1,"2. 7ab$a llegado por )e- primera a La 7abana en abril
de 1,2+, y en total )i)i por )eintids aos en ella. 5itios de su preferencia fueron el
bar. con restaurante Cloridita, en 6bispo y <onserrate, La 7abana Gie.a, donde
promo)i el dai9uir$ Ocombinacin de ron cubano con pol)o de &ielo y .ugo de
limnP, y luego lo dio a conocer en medio mundo. 5e cuenta 9ue la ban9ueta donde
se sentaba el afamado escritor se conser)a intacta en el lugarF y su recuerdo se &ace
mayor cuando alguien pide un PapaLs o Tun dai9uir$ especialU, como 1l sol$a llamar a
su bebida predilecta.
Cerca de este lugar est# el &otel 8mbos <undos, &oy restaurado, y en una de sus
&abitaciones del 9uinto piso 7emingBay se 9uedaba a dormir cada )e- 9ue
permanec$a en tierra, con)irti1ndose as$ en sitio permanente para escribir. T5us
)entanas *describi una )e- el propio no)elista* daban a la antigua Catedral, y a la
entrada del puerto y al mar por el norte, y daban por le)ante a la pen$nsula de
Casablanca y a los te.ados de las casas 9ue se e%tienden &asta el puerto y a todo lo
anc&o de 1lU. Aespondi al periodista Plimpton en una ocasinN T4l &otel 8mbos
<undos era un buen sitio para escribirU.
Pr%ima a la Catedral de La 7abana, podemos )isitar La :odeguita del <edio, con
su aroma peculiar a masas de cerdo fritas, yuca o malanga con Tmo.oU y fri.oles
negros TdormidosU. <uc&os afirman 9ue all$ est# otra &uella de 7emingBay, 9uien
gustaba decirN T<i dai9uir$ in el Cloridita. <i mo.ito in la :odeguitaU. 4l mo.ito es
un coctel 9ue incluye ron, a-@car, &ielo, agua y &ierbabuena.
Cuando regresa a Cuba die- aos despu1s, en la d1cada del cuarenta, ya el &otel &ab$a
perdido pri)acidad. 5u nue)a esposa, <art&a ?ell&orn, descubri entonces la Cinca
Gig$a, en 5an Crancisco de Paula, 9ue primero al9uila y luego compra el escritor. 5er#
ese desde entonces su &ogar en el pa$s. 7oy es el <useo 7emingBay, 9ue guarda
ob.etos personales, pie-as de ca-a en sus paredes, libros,y ofrece al 9ue lo )isita el
ambiente en 9ue )i)$a el Papa, como sol$a llam#rsele entre sus amigos.
5e afirma 9ue el escritor norteamericano med$a cinco pies once pulgadas, pero debido
a su corpulencia casi todos afirmaban 9ue era un &ombrn de m#s de seis pies. 2n
&alo de leyenda cubre esta figura, 9ue se asienta con su esposa en la Gig$a, fondea su
yate Pilar en Co.$mar donde traba amistad con pescadores y otras personas &umildes,
y se le )e bebiendo en algunos lugares de La 7abana Gie.a o conduciendo su
Plymout& por las calles &abaneras.
5eg@n sus bigrafos, despu1s de la Cinca Gig$a y la barra del Cloridita, el sitio donde
encontrar a 7emingBay era su barco Pilar. Pod$a este maniobrar en un radio de
accin de 9uinientas millas con unas siete personas a bordo, alcan-ar una )elocidad
de oc&o nudosF era su orgullo, y lo fondeaba en Jaimanitas, en Casablanca y otras
)eces en Co.$mar.
>icen 9ue La ;erra-a, de Co.$mar, est# descrita en 4l )ie.o y el mar y en =slas en el
golfo. 4ste lugar est# ligado a la )ida del no)elista, y se al-a un busto en el par9ue
9ue est# .unto a la costa. 2na &istoria cuenta 9ue al conocerse la noticia de su muerte,
los pescadores presentes pensaron cmo &omena.ear al 9ue fuera su compaeroN
buscaron bronce de las propelas de sus barcos y contrataron a un escultor, 9ue no
9uiso cobrar por &acer su estatua. 8ll$ 9ued, en la pla-a 9ue lle)a el nombre del
insigne escritor, .unto a las aguas 9ue tanto le )ieron re$r y soar.
7oy se contin@an reali-ando competencias de captura de la agu.a en &omena.e a
4rnest 7emingBay, 9uien las iniciara all# por 1,"/. La an1cdota del pescador y su
presa )uel)e cada ao a contarse, mientras los a)$os se lan-an a la corriente. D los
participantes del ;orneo Cl#sico =nternacional de Pesca de la 8gu.a -arpan cada ao
de los canales interiores del Aesidencial ;ur$stico <arina 7emingBay, en 5anta Ce,
municipio Playa, para emprender la a)entura de las mil emociones.
;1& 'C"0ndo es e% E1a de %a C"%3"ra c")ana*
C8>8 2/ de octubre se conmemora el >$a de la Cultura cubana en recordacin a
a9uella tarde en 9ue se cantaron por primera )e- en :ayamo las )ibrantes estrofas del
&imno, &ec&o ocurrido en 1+'+.
La cultura cubana tiene ra$ces ind$genas, espaolas y africanas, y se &a nutrido de
corrientes de otros pueblos 9ue transitoriamente permanecieron en su suelo y de.aron
sus &uellas en la ar9uitectura, la m@sica y el lengua.e. Ciguras de relie)e internacional
pudieran mencionarse en el campo de las artes y de las letras. Jos1 <art$, C1li%
G#rela, Jos1 8ntonio 5aco, Jos1 de la Lu- y Caballero resaltan por su trascendencia
simult#nea en la &istoria de la nacin.
<as solamente cuando las di)ersas facetas de la cultura llegan a todos los rincones,
se enri9uecen con el acerbo del pueblo y se a)i)an con el ingenio de las masas, es
9ue puede &ablarse de una cultura popular. ;al es el caso del proceso re)olucionario
9ue lle) bibliotecas en mulos a la 5ierra <aestra y otras -onas montaosas, el cine
m)il 9ue despert la curiosidad y el asombro entre campesinos, las giras de grupos
de ballet o de la or9uesta sinfnica para ofrecer su arte ante &abitantes de -onas
apartadas, y los grupos teatrales 9ue act@an en la serran$a lle)ando el placer de estas
manifestaciones.
La m@sica uni)ersal se &a nutrido con los bailes t$picos de Cuba, tales como el
dan-n, creado por <iguel Ca$lde &ace algunas d1cadas, y el c&ac&ac&#, &ace unos
lustros. D 9ui1n no recuerda las melod$as de 4rnesto Lecuona, ?on-alo Aoig, el
ritmo inigualable de :enny <or1, la multifac1tica sonoridad de los =raEeres, las
manos prodigiosas del pianista CranE Cern#nde- y del guitarrista Leo :roBer, o el
canto inigualable de los tro)adores 5indo ?aray, <anuel Corona y m#s actualmente
Pablo <ilan1s y 5il)io Aodr$gue-?
Cuentan 9ue los tainos y siboneyes de.aron admirados a los coloni-adores por sus
bailes r$tmicos, y en nuestra 1poca &an alcan-ado renombre internacional el :allet
3acional de Cuba con la primer$sima bailarina 8licia 8lonso, el :allet de CamagIey,
el ?rupo de >an-a 3acional, el Con.unto ColElrico y otros.
La literatura fue el marco en 9ue se destacaron figuras de la talla del ensayista Juan
<arinello, los no)elistas 8le.o Carpen*tier, Jos1 Le-ama Lima, <anuel CofioF los
cuentistas 8lfonso 7ern#nde- Cata, 6nelio Jorge Cardoso, >ora 8lonsoF los poetas
3icol#s ?uillen, Carilda 6ii)er Labra, >ulce <ar$a Loyna-, Jes@s 6rta Aui-F los
&istoriadores 4milio Aoig de Leuc&senring, 4usebio Leal, por slo citar algunos
nombres.
4n las galer$as de museos prestigiosos del mundo se muestran las obras de los
cubanos Aene Portocarrero, ^ifredo Lam, 8melia Pel#e- y m#s recientemente
<anuel <endi)e. 3o es posible de.ar de mencionar las obras escultricas de Aita
Longa, <anuel >elarra y 4nri9ue =igo, ni otras de orfebrer$a y artesan$a 9ue
reclaman la atraccin tur$stica por la singular me-cla de las materias primas
utili-adasN piel, cobre, madera, caracoles, papel y lien-o.
La cultura cubana es eso y muc&o m#s. 4s la oportunidad para 9uien posea talento y
)ocacin, en cual9uier lugar del pa$s, pueda aprender y e.ercitarse en una escuela
&asta llegar al =nstituto 5uperior de 8rte. 4s la proliferacin de bibliotecas, museos,
galer$as de arte, escuelas de m@sica, de ballet para edades tempranas. 4s la
posibiIdad de desarrollo de las &abilidades en las diferentes manifestaciones
culturales.
La cultura se &a integrado al pueblo cubano como su risa y su buen &umorN brota en
su 9ue&acer diario. Da lo di.o el apstol de la independenciaN Tser cultos es la @nica
manera de ser libresU.
;+& 'C"0% -"e e% pri(er poe(a escri3o en C")a*
4L PA=<4A poema escrito en Cuba fue compuesto por 5il)estre de :alboa ;roya y
0uesada en 1'/+ y titulado 4spe.o de paciencia. 5u autor cuenta Tla prisin 9ue el
capit#n ?ilberto ?irn &i-o de la persona del ilustr$simo seor don fray Juan de las
Cabe-as 8ltamirano, obispo de la =sla de Cuba, en el puerto de <an-anillo en 1'/!U.
;r#tase del acto bandidesco de un pirata 9ue una )e- en poder del sacerdote pidi a
los bayameses un considerable rescate. Cu1ntase 9ue ellos no slo no accedieron,
sino 9ue cuando los piratas )inieron a recoger el bot$n e%igido los enfrentaron y
salieron )ictoriosos, de forma tal 9ue e%&ibieron la cabe-a de ?irn como trofeo.
5eg@n in)estigaciones de 8ntonio 3@e- Jim1ne-, el poema 4spe.o de paciencia, fue
dado a conocer en 1++ por Jos1 8ntonio 4c&e)arr$a al descubrirlo dentro de un
libro, &asta entonces in1ditoN 7istoria de la =sla y Catedral de Cuba, del obispo Pedro
<orell de 5anta Cru-, donde se encuentra transcrito.
4l poema, escrito en octa)a real, canta a la belle-a de la naturale-a cubana y narra
cmo el capit#n ?regorio Aamos, al conocer del secuestro del obispo, re@ne a 2!
&ombres 9ue encuentra en las cercan$as de DaraN negros, indios naturales de Cuba y
criollos a los cuales :alboa llama )alientes insulanos.
4n las estrofas escritas por 5il)estre de :alboa *canario residente en CamagIey por
muc&o tiempo* se describe al etiope 5al)ador cla)ando su lan-a en el pec&o del pirata
franc1s para terminar con su )ida, y canta sobre la &eroicidad del negro &asta
con)ertirlo en &1roe de indios y criollos blancos.
;,& '>"? es %a Casa de %as A(?ricas *
C23>8>8 en 1,", por la &ero$na del <oncada 7ayd1e 5antamar$a, la Casa de las
8m1ricas es una institucin cultural, con sede en la capital cubana, 9ue por m#s de
cuatro d1cadas &a &ec&o sentir su presencia en el panorama cultural de la 8m1rica
Latina y el Caribe.
Casa de las 8m1ricas fue concebida como un espacio de encuentro y di#logo de
distintas perspecti)as en un clima de ideas reno)adoras. >e esa forma di)ulga,
in)estiga, auspicia, premia y publica la labor de escritores, m@sicos, artistas pl#sticos,
teatristas y estudiosos de la literatura, las artes y las ciencias sociales del continente,
alentando la integracin cultural. ;ambi1n fomenta el intercambio con instituciones y
personas de todo el mundo.
4ntre sus publicaciones peridicas destacan la re)ista de letras e ideas Casa de las
8m1ricas, una de las m#s prestigiosas de lengua espaola, fundada en 1,'/, en la 9ue
colabora lo m#s rele)ante de la intelectualidad mundial y .)enes 9ue se inician en la
creacin, in)estigacin literaria y el pensamiento.
8dem#s edita el bolet$n <@sica, la re)ista Con.unto dedicada al teatro, 8nales del
Caribe, sobre letras, arte e &istoria del #rea caribea, y Criterios, referente a la teor$a
de la literatura y las artes est1ticas y culturolog$a, publicada .unto con la 2nin de
4scritores y 8rtistas de Cuba.
4l premio literario Casa de las 8m1ricas se con)oca anualmente desde 1,",, y
constituy la primera manifestacin de proyeccin internacional de la institucin.
4ntre 1,'/ y 1,,/ la Casa public +// t$tulos de sus di)ersas colecciones, unos
)einticinco anuales. Con la crisis econmica de la d1cada del no)enta las
publicaciones casi cesaron. 5olamente se editaban los premios Casa con la generosa
contribucin de Colombia. Da a partir de 1,,+ me.oran las condiciones y al ao
siguiente &ay un n@mero de ediciones y coediciones.
4n su biblioteca Jos1 8ntonio 4c&e)arr$a, Casa de las 8m1ricas posee un fondo de
m#s de ciento cuarenta mil )ol@menes y una amplia &emeroteca especiali-adaF
mediante can.es con instituciones y personas de todo el mundo aumenta
sistem#ticamente esta ri9ue-a cultural.
;.& 'C$(o se re9i3a%i<a e% in3er?s por %a %ec3"ra*
36 45 C2:8 el @nico pa$s preocupado por ele)ar el &#bito de leer entre su
poblacin. 2n llamado de alerta &acia el n@mero de &oras 9ue pasan nios y
adolescentes .unto a la tele)isin o las computadoras en detrimento de la lectura, &a
sido lan-ado por la intelectualidad progresista. 4n nuestro caso, una de las mayores
incidencias &a sido tambi1n la falta de recursos para costear la industria editorial y la
importacin de obras.
Por9ue las bases para la publicacin masi)a de libros se sentaron en el pa$s apenas
tres meses despu1s del triunfo re)olucionario. 3aci la =mprenta 3acional el 1 de
mar-o de 1,",. 4se mismo ao se imprimieron !//L/// e.emplares del cl#sico de la
literatura espaola $l in#enioso hidal#o don )uijote de la *ancha, en cuatro tomos
9ue se )endieron a )einticinco centa)os cada e.emplar. 5e editaron otras obras
rele)antes de la cultura uni)ersal, y .unto a ellas las cartillas y manuales 9ue ser)ir$an
para la 1pica campaa de alfabeti-acin reali-ada en 1,'1.
>urante d1cadas fue en aumento la produccin editorial, 9ue lleg a publicar un t$tulo
por cada 'L/// &abitantes. Colecciones de arte y literatura, ciencia y t1cnica,
publicaciones infantiles y .u)eniles, g1nero policial, ciencia ficcinF libros de te%to
para escuelas y uni)ersidades, re)istas especiaI-adas. 8dem#s, el ciudadano cubano
tema acceso, antes del per$odo especial, a ad9uirir numerosas publicaciones de
car#cter informati)o de di)ersas tem#ticasF se distribu$an unos "// millones de
e.emplares de peridicos y '2 millones de re)istas.
La brusca ca$da econmica de inicios de la d1cada del no)enta &i-o disminuir
sensiblemente la compra de papel y consecuentemente la tirada de peridicos,
re)istas y libros, as$ como la importacin de publicaciones e%tran.eras. 5lo con la
gradual recuperacin econmica iniciada en el pa$s pod$a pensarse en dedicar
recursos para la reanimacin de esta importante esfera cultural, y no se &a dudado en
&acerlo.
4l dulce encanto de leer se est# adueando de nue)o del cubano, 9ue aora el Ibro o
la re)ista para lle)ar al &ogar y leer en la intimidad. 8 los nios y .)enes se les est#
promo)iendo el &#bito 9ue no ten$an. 3o es tarea f#cil, ni imposible.
>e una parte, &an aumentado sensiblemente las tiradas de los peridicos nacionales y
pro)inciales, reaparecen mensualmente las re)istas para nios Pionero y Qun-@nF
5omos J)enes y 8lma<ater para .)enes y estudiantes uni)ersitariosF y cada dos
meses, Ju)entud ;1cnica y 4l Caim#n :arbudo. ;ambi1n tendr# mayor tirada y
frecuencia la publicacin para la mu.er. La acti)idad editorial se )a recuperando
igualmente, y prueba de ello son los libros 9ue editar#n 8rte y Literatura, Letras
Cubanas y ?ente 3ue)a, entre otras.
5e &a promo)ido, asimismo, una me.or utili-acin de los t$tulos 9ue se editen,
&aci1ndolos llegar a las bibliotecas p@blicas e institucionales para ponerlos en
contacto con el lector y contribuir as$ al programa nacional por la lectura.
4s indispensable mencionar las ferias internacionales del libro de La 7abana, 9ue
mue)en a la poblacin en largas filas para conocer lo nue)o del e%tran.ero y comprar
la cantidad limitada de obras puestas en )enta de produccin for#nea y nacional.
<uestran asombro algunos )isitantes cuando se percatan de la sed de lectura del
cubano, 9ue )ia.a a los lugares de e%posicin, en lugares relati)amente distantes del
centro de la capital, y espera por largas &oras la oportunidad de acceder a nue)as
ediciones de libros.
La Ceria =nternacional del Libro de La 7abana, 9ue cada dos aos abre sus puertas en
febrero, se &a con)ertido en una fiesta. 4st#n )i)as las palabras de Jos1 <art$, uno de
los grandes intelectuales cubanos del pasado siglo, cuando e%presN T2n libro es
siempre un moti)o de alegr$a, una )erdad 9ue nos sale al paso, un amigo 9ue nos
esperaU.
;/& 'Es )ai%ador e% p"e)%o c")ano*
43 52 8<PL=8 mayor$a, s$F desde los tiempos precolombinos es el baile una
acti)idad arraigada en el pueblo. Los cronistas espaoles destacaron a9uellas
costumbres de los tainos y siboneyes, consumados bailadores en sus are$tos, y se
conoce de una carta 9ue escribi ?on-alo de ?u-m#n *sucesor de >iego Gel#-9ue-*
en el siglo VG= al rey de 4spaa en la 9ue protestaba por las medidas 9ue proteg$an a
los indios y les de.aba tiempo libre 9ue dedicaban a sus bailes.
4n in)estigacin reali-ada por el &istoriador 8ntonio 3@e- Jim1ne- se recoge 9ue a
a9uella bailoman$a se sum la de africanos, andaluces y otros pueblos &isp#nicos 9ue
brindaron ingredientes dan-arios.
D cuenta 9ue el colombiano 3icol#s ;anco, traficante de c&inos para su )irtual
escla)itud, )isit La 7abana en 1+" y escribi en su libro Gia.e de 3ue)a ?ranada a
C&ina y de C&ina a Crancia, obser) con sorpresa cmo Cuba iba siendo in)adida por
costumbres norteamericanas, y destac la pasin por el baileN
TX...Y todo el mundo baila en La 7abana sin reparar en edad, clase o condicinF desde
el niito 9ue apenas puede dar un paso, &asta las )ie.as, desde el capit#n general &asta
el @ltimo empleado. Las mismas dan-as se bailan en palacio 9ue en el bo&$o de un
negro, y &asta los co.os, ya 9ue no pueden brincar se contentan con menearse al son
de la m@sica. ;odo el d$a se oyen tocar las dan-as, ya en las casas particulares, ya por
los rganos 9ue andan por las calles, a cuyos sonidos suelen bailar los paseantes
X...YU.
4n un art$culo escrito en 1+( por un )isitante &@ngaro, titulado TLas antillas
espaolasN la =sla de CubaU, se e%presN TLos negros saltaban infatigablemente ba.o
el tinglado del ingenio o tocaban la guitarra ba.o el folla.e de los pl#tanos. 5u baile
fren1tico, cien )eces m#s ruidoso 9ue las tarantelas napolitanas, y las &oras en las
cuales se entregaban a esto, nos &icieron pensar )erdaderamente 9ue desde 9ue el sol
se pone &asta 9ue sale toda el Wfrica est# bailandoU.
4n cuanto a los bailes mambises, 3@e- Jim1ne- cuenta 9ue con frecuencia los
campamentos y prefecturas escondidas en lo m#s recndito de los montes y montaas
eran escenarios de bailes y di)ersiones. 4%pone fragmentos de una carta del
presidente de la Aep@blica en 8rmas, Carlos <anuel de C1spedes, a su esposa con
fec&a 2, de mar-o de 1+(2N T3osotros &emos tomado e incendiado a 5ao 8rriba,
poblado con trinc&eras a dos leguas de 7olgu$n. 7ubo de particular 9ue el enemigo
no fue sorprendido, sino 9ue se le arroll &asta sus fuertes X...Y 4n nuestros
campamentos 9ue son )erdaderas poblaciones, a las &oras del recreo no se oyen m#s
9ue cantos y bailesU.
Da narrando el per$odo de la ?uerra de los >ie- 8os, toma un testimonio personal
del coronel Aamn Aoa de un baile mamb$ en la 5ierra de 3a.asa, en CamagIeyN
TCuanto a di)ersiones, no nos faltaron bailes y pipiripaos, organi-ados con alguna
bandurria o guitarra a)entureras 9ue sol$an recalar por a9uellos contornos y &asta
alg@n acorden X...Y Aecuerdo all$ al muy festi)o Paco Aecio *muerto despu1s de la
guerra del ,"*, 9ue era inimitable bailando el ga)il#n, baile de cadencias 9ue en
a9uella 1poca poma escr@pulos en las familias, y tanto era as$ 9ue lleg a pro&ibirse
para e)itar desmanes de cual9uier bailador entusiasmado X...YU.
;ampoco en la guerra de 1+," el baile decay, y muestra de ello es la referencia en el
diario del comandante Luis Aodolfo <iranda, abanderado y ayudante del mayor
general Cali%to ?arc$a Sigue-, el / de .unio de 1+,'. 4sa noc&e celebraron un baile
los independentistas cerca de 5anta Aita, 6riente, en el 9ue se destac el general
4nri9ue Collado al bailar la caringa Obaile afrocubanoP con la letraN T;oma, toma y
toma caringa ` Pa la )ie.a palo y .eringaU.
8l pasar de los tiempos, los cubanos &an continuado disfrutando de la acti)idad
bailable y &an creado, con elementos &isp#nicos y espaoles, la conga, comparsa o
parranda, rumba, guaguanc, columbia y yamb@, son, ya montuno o guarac&a,
dan-n, dan-onete, mambo y c&ac&ac&#.
;7& 'C$(o se -or($ %a Esc"e%a C")ana de Ba%%e3*
43 C4C78 tan temprana como la prima)era de 1,'/ se reali- en Cuba el Primer
Cesti)al =nternacional de :allet, como .usta )aloracin de la naciente re)olucin
&acia el talento innegable y el traba.o desplegado por la insigne 8licia 8lonso y por
Cernando 8lonso en esta esfera del arte durante d1cadas, y sus ambiciosos planes
para el desarrollo futuro del ballet en Cuba.
Los aos 9ue siguieron fueron de amplio y fruct$fero traba.o. Las escuelas de arte
promo)ieron bailarines 9ue enri9uecieron el elenco tradicional, y nue)os )alores
surgieron a la palestra nacional e internacional. Cuba se con)irti en lugar de cita de
afamadas figuras de los ballets de 4uropa, 8sia y 8m1rica. 4l ?ran ;eatro de La
7abana, en el antiguo Centro ?allego, el 8madeo Aoldan y otras salas del interior del
pa$s &an )isto colmados sus locales por asistentes amantes de esta forma dan-ar$a.
4strenos mundiales, compa$as y solistas llegados de apartados rincones del mundo
son admirados por los cubanos.
D la e%plicacin a este fenmeno de masi)idad ante esta manifestacin art$stica la
ofrece la tradicin nacional de casi medio siglo cimentada por una escuela propia
encabe-ada por 8licia y Cernando 8lonso, y una compa$a 9ue est#, sin duda, entre
las me.ores del mundo.
5e dice 8licia 8lonso y se &abla de una leyenda )i)a. >e a9uella nia pe9ueita y
menuda, de slo once aos, guiada por su primer maestro en el gran )als La bella
durmienteF de a9uella )e-, &ace ya cincuenta aos en 9ue &i-o su primera ?iselle, con
el :allet ;&eatre de 3ue)a DorEF de sus grandes triunfos en la 6pera de Par$s, el
Con)ent ?arden de Londres, el Hiro) de Leningrado, el :ols&oi de <osc@F de la
fundacin en 1,!+ de la primera Compa$a de :allet cubano, 9ue lle) su nombre al
principio y luego del triunfo re)olucionario pas a ser el :allet 3acional de CubaF de
la formacin de numerosas figuras de fama internacional... 5e dice 8licia 8lonso, con
sus -apatillas prodigiosas ro-ando el escenario, y es la 4scuela Cubana de :allet.
;8& 'C$(o s"rgi$ e% Bes3i9a% de Cine Fa3inoa(ericano*
L8 34C45=>8> de fa)orecer el encuentro peridico de los cineastas
latinoamericanos, la e%&ibicin de filmes de ficcin, documentales, dibu.os
animados, materiales informati)os, y la distribucin de las m#s destacadas
reali-aciones, fueron ob.eti)os del Primer Cesti)al del 3ue)o Cine Latinoameicano,
inaugurado en 1,(, en La 7abana. Como una concrecin de tales proyectos se
reali-aron encuentros y seminarios, e%&ibiciones monogr#ficas, y se cre el <ercado
del 3ue)o Cine Latinoamericano O<4CL8P.
8 partir de esa fec&a se celebra anualmente. >esde 1,," ocurre cada dos aos esta
cita de cineastas en un fruct$fero intercambio 9ue proporciona, adem#s, para el
pueblo cubano la posibilidad de conocer cientos de filmes de gran atracti)o e inter1s
reali-ados en pa$ses de este continente.
5e instituy el Premio Coral para la categor$a de cine y )ideo, ficcin, documental y
animados, en un gran desaf$o 9ue enfrentan con entusiasmo .urados, cr$ticos,
cineastas y amantes del s1ptimo arte.
2n &ito rele)ante en esta esfera art$stica fue la creacin de la 4scuela =nternacional de
Cine, ;ele)isin y Gideo, perteneciente a la Cundacin del 3ue)o Cine
Latinoamericano 9ue presidi el prestigioso escritor colombiano ?abriel ?arc$a
<#r9ue-, premio 3obel de Literatura. 8ll$ se forman cineastas de 8m1rica Latina,
8sia y Wfrica en los ni)eles b#sico, medio y superior.
;;& 'C"0n3as radioe(isoras y cana%es de 3e%e9isi$n 6ay en C")a*
L8 4L4C;A=C=C8C=]3 del pa$s, base esencial para el uso y disfrute de radios y
tele)isores, &a sido una tarea permanente desde el triunfo re)olucionario. 4n 1,("
Cuba se situ en uno de los primeros lugares de 8m1rica Latina con el (/J de las
)i)iendas electrificadas.
4n el lustro 1,+1*1,+" recibieron electricidad del sistema nacional unas trescientas
sesenta mil )i)iendas, 9ue ele) el ser)icio el1ctrico al +"J del total del pa$s. 2n
datoN en 1,++ la generacin el1ctrica era m#s de oc&o )eces la e%istente en 1,",.
8ctualmente el sistema electroenerg1tico integrado alcan-a al ,!J de la poblacin.
7ay un estimado de casi cuatro millones de radios y m#s de un milln de tele)isores
en uso. 7ay cinco emisoras nacionales de radioN Aadio Aelo. Oespeciali-ada en
noticias las )einticuatro &orasPF Aadio 4nciclopedia Oslo m@sica instrumentalPF
Aadio Progreso, Aadio Aebelde y Aadio <usical 3acionalF 1! estaciones pro)inciales
de radio y / municipales. 2na emisora internacional, Aadio 7abana Cuba, transmite
todo el d$a en diferentes idiomas. La tele)isin cubana cuenta con dos canales
nacionalesN Cuba)isin y ;ele Aebelde, y )arios telecentros pro)inciales.
Para proporcionar informacin y entretenimiento a los turistas, brindan ser)icios la
tele)isin )$a sat1lite, la tele)isin tur$stica OCanal del 5olP 9ue transmite pel$culas,
documentales culturales y recreati)osF y Aadio ;aino, a todo el pa$s en idioma
espaol e ingl1s.
;9& '>"? represen3a %a (Gsica para e% c")ano*
4L C2:836 es un pueblo musical por e%celencia. 5us ra$ces africanas y espaolas
influyen notablemente en esta caracter$stica genuina de sus &ombres, mu.eres y nios.
4l escla)o negro tra.o a Cuba, desde su pa$s de origen, el amor a la m@sica y a la
dan-a, dos e%presiones culturales de gran fuer-a en el continente africano, y estos
ritmos se me-claron con los espaoles. 5urgi as$ la rumba cubana, la rumba de ca.n
de los solares cubanos y el guaguanc sensual.
4n la primera mitad del siglo V=V se populari- en la burgues$a la contradan-a
cubana, 1poca en la 9ue ya &ab$an cristali-ado en Cuba g1neros como la dan-a, la
&abanera y finalmente el dan-n, y como resultado de la e)olucin de la m@sica
cubana surgi el son oriental.
Las primeras d1cadas del siglo VV marcaron la llegada a La 7abana del son oriental
y su consolidacin como ritmo netamente cubano. ?1neros cantados, de moda en
esos aos, como la &abanera, la gua.ira *9ue alcan-ara su m#%imo esplendor a fines
del V=V* y la criolla, fueron despla-ados por el bolero cubano, ritmo nue)o 9ue naci
como resultado de la interre*lacin de influencias de la -ar-uela espaola, la roman-a
italiana y la cancin francesa.
Considerada por muc&os la d1cada del cincuenta como prodigiosa para la m@sica
cubana, apareci el mambo, 9ue alcan- su mayor esplendor con >#maso P1re-
Prado, 9ue triunf en <1%ico, y el c&ac&ac&#, creado por 4nri9ue Jorr$n y la
6r9uesta 8m1rica.
4n esta 1poca surgieron o alcan-aron su mayor fama los septetos, con.untos,
c&arangas y otras or9uestas, as$ como compositores y cantantes 9ue &oy se funden al
nombre de Cuba, como Jose$to Cern#nde-, 9uien populari- la ?uantanamera.
Cuatro ritmos imperecederos tra.o la d1cada del sesenta para Cuba, y 9ue
trascendieron sus fronterasN la pac&anga, el mo-ambi9ue, el paca y el piln, de Pac&o
8lonso. 8pareci a finales de esa d1cada la 3ue)a ;ro)a, 9ue alcan- su plena
madure- en el decenio del setenta con figuras cimeras como Pablo <ilan1s y 5il)io
Aodr$gue-.
4n los @ltimos aos &an surgido agrupaciones 9ue e%perimentan con distintos ritmos
e instrumentos en busca de sonidos diferentes, pero sin perder los or$genes soneros
9ue los caracteri-a. 7oy, y al producirse un renacer de la m@sica cubana en el mundo,
en Cuba se aprecian dos tendencias en el 9ue&acer musicalN una m#s tradicionalista y
otra m#s reno)adora 9ue no duda en me-clar elementos de distintos g1neros de muy
di)ersa procedencia.
\ltimamente &a surgido una buena &ornada de cultores de .a-- afrolatino, entre ellos
?on-aIto Aubalcaba, cuyo modo de &acer m@sica asombra en 4uropa e incluso en
4stados 2nidos. 8 mediados de la d1cada del no)enta aparecieron di)ersos grupos
salseros, 9ue alcan-aron la popularidad en el suelo natal y en otras latitudes de
manera )ertiginosa.
La m@sica, &oy como ayer, sigue siendo uno de los principales elementos de la )ida
del cubano, y sin duda la m#s conocida de sus manifestaciones culturales.
90& 'C"0% es %a (e%od1a c")ana (0s conocida*
=3>2>8:L4<43;4 es la ?uantanamera, 9ue &a recorrido el mundo con su ritmo
popular, generalmente coreado en actos de solidaridad con el pueblo cubano. La
melod$a fue compuesta en 1,2, por el compositor y cantante Jose$to Cern#nde-
O1,/+*1,(,P, y en sus or$genes no era m#s 9ue un estribillo al 9ue se le agregaban
d1cimas impro)isadas.
>urante doce aos, y a partir de 1,!+, Jose$to Cern#nde- cantaba por radio, con la
m@sica y el estribillo de la ?uantanamera, un suceso diario de la crnica ro.a, lo 9ue
contribuy a aumentar la popularidad de la cancin.
8 fines de la d1cada del cincuenta el m@sico cubano 71ctor Wngulo cant la
?uantanamera con los )ersos sencillos de Jos1 <art$ en una fiesta en 4stados 2nidos.
8ll$ se encontraba el cantante folclorista norteamericano Pete 5eeguer, 9uien la
incorpor a su repertorio y la dio a conocer al mundo el + de .unio de 1,' en un
concierto en el Carnegie 7all de 3ue)a DorE, como un gesto de solidaridad con la
re)olucin cubana.
+uantanamera +uajira #uantanamera +uantanamera +uajira #uantanamera. ,o
soy un hombre sincero de donde crece la palma! ,o soy un hombre sincero de donde
crece la palma y antes de morirme quiero echar mis versos del alma. +uantanamera
+uajira #uantanamera +uantanamera +uajira #uantanamera. *i verso es de un
verde claro y de un carmn encendido mi verso es de un verde claro y de un carmn
encendido mi verso es un siervo herido que busca en el monte amparo.
+uantanamera +uajira #uantanamera +uantanamera +uajira #uantanamera. Con
los pobres de la tierra quiero yo mi suerte echar con los pobres de la tierra quiero yo
mi suerte echar el arroyo de la sierra me complace ms que el mar. +uantanamera
+uajira #uantanamera +uantanamera +uajira #uantanamera.
91& 'C$(o es %a cocina y %a coc3e%er1a c")anas*
L8 C6C=38 cubana es tambi1n el resultado de la influencia de dos pueblos, el
espaol y el africano, aun9ue posteriormente se sumaron elementos de la comida
asi#tica con la inmigracin c&ina ocurrida a finales del siglo V=V.
Da desde ese siglo empe- a diferenciarse la cocina t$pica criolla de la espaola, y
lleg a ad9uirir caracter$sticas propias, tales como el arro- con pollo, el arro- con
fri.oles negros Otambi1n llamado moros y cristianos o arro- moroP, el congr$ oriental
Ocuando se utili-an fri.oles colorados con el arro-P.
4l plato nacional es el llamado a.iaco criollo. Comprende un con.unto de )iandas,
)egetales y carnes de di)ersos tipos cocinados .untos, 9ue )ar$a por la sa-n y
di)ersidad de sus ingredientes. Los m#s frecuentemente usados son la yuca, malanga,
boniato, papa, pl#tanos )erdes y maduros, ma$- y peda-os de carnes secas y saladas.
6tros platos t$picos son la carne de cerdo asada o frita, los tostones Otro-os de pl#tano
)erde fritos aplastados y finosP, c&ic&arrones de cerdo y picadillo de carne de res.
4n cuanto a la cocteler$a son famosos el ron y el aguardiente cubanos. 4l aguardiente,
sometido a un proceso de en)e.ecimiento y posterior destilacin, origina el ron de
e%9uisita calidad. 4l ron 7a)ana Club es el m#s conocido, aun9ue otras marcas &an
logrado tambi1n ad9uirir su lugar en el mercadoN Caney, Legendario, <atusal1n,
Garadero y :ucanero.
4l ron cubano puede consumirse solo OensPriEeP, o con &ielo Oa la rocaP. Cuba tiene
una amplia )ariedad de cocteles 9ue &an dado la )uelta al mundoN el Cuba Libre Oron
Carta :lanca, cola, .ugo de limn, &ielo y una roda.a de limnP, mo.ito Orefrescante
liga de ron, .ugo de limn, a-@car, soda, &ielo y &ierbabuenaP y dai9uir$ Oron, a-@car,
.ugo de limn y &ielo batidoP. 6tros cocteles cubanos conocidos son el Cubanito, el
Presidente, el <an&attan, el 5aoco y el =sla de Pinos.
9+& 'C"0%es son %os res3a"ran3es (0s -a(osos*
=3>=5C2;=:L4<43;4 son La :odeguita del <edio y 4l Cloridita, ambos en la
capital. La 8sociacin <undial de Aestaurantes les otorg el t$tulo 9ue los distingue
entre los "/ me.ores del mundo.
La :odeguita del <edio est# situada muy cerca de la Pla-a de la Catedral, en La
7abana Gie.a. Aestaurante pe9ueo y acogedor, es la cuna del coctel cubano m#s
conocido internacionalmenteN el mo.ito.
4n sus paredes pueden obser)arse las firmas, sencillas palabras e incluso poemas de
estadistas, cient$ficos, pintores, cineastas, poetas, escritores... 9ue llegados de
distintas partes del mundo se &an sentado a sus mesas para degustar el e%9uisito
men@ 9ue se brinda, en el 9ue no puede faltar la carne de cerdo asada o frita, los
tostones, fri.oles negros, tasa.o, yuca con mo.o... en fin, platos de la cocina criolla.
4l Cloridita es un bar restaurante 9ue se encuentra cercano al Par9ue Central, tambi1n
en La 7abana Gie.a. Lo &a &ec&o famoso el coctel dai9uir$ 9ue all$ se prepara,
preferido por el escritor norteamericano 4rnest 7emingBay, 9uien pasaba muc&as
&oras en ese lugar.
9,& 'C"0%es son %os ?2i3os (0s signi-ica3i9os de% depor3e*
4L >4P6A;4 es una de las con9uistas de la re)olucin y uno de los mayores
orgullos de los cubanos. 4n cual9uier es9uina de ciudades y poblados se escuc&an los
comentarios de la poblacin acerca del deporte 9ue est1 en mayor auge en ese
momentoN no se trata slo de la pelota, deporte nacional, sino del f@tbol, el )oleibol,
el baloncesto, la natacin, la esgrima, en fin...
Los nios compiten a las patadas cuando la Copa de C@tbol, lan-an y batean cuando
el campeonato de b1isbol, gustan de ensartar pelotas en los impro)isados cestos 9ue
colocan en los m#s )ariados lugares de los par9ues y aceras. La fiebre del deporte no
se ba.a con aspirinas, es un s$ntoma gen1tico del cubano, y lo disfruta.
4ntre los 1%itos alcan-ados pueden mencionarse la con9uista de 1L,1, medallas de
oro en los principales .uegos multideporti)osN 6l$mpicos, Panamericanos y
Centroamericanos y del Caribe, durante estos cuarenta aos de re)olucin, 9ue
representa el ,/J de todo lo cosec&ado en su &istoria. 4n <aracaibo L,+ el e9uipo
cubano se al- con 1,1 medallas #ureas, y sus m#s cercanos seguidores fueron
<1%ico con '/, Gene-uela con "' y Colombia con 1,, de un total de 22 pa$ses
competidores.
3o se podr#n ol)idar a 6rlando <art$ne-, de la di)isin de "! Eilogramos, 9ue tra.o
la primera medalla de oro ol$mpica despu1s de sesenta y oc&o aosF la primera marca
mundial absoluta de un atleta cubano, Pedro P1re- >ueas, en los Panamericanos de
ColombiaF la doble )ictoria de 8lberto Juantorena en la 6limpiada de <ontrealF la
triple )ictoria consecuti)a ol$mpica de ;efilo 5te)enson en m#s de +1 EilogramosF el
1%ito de las )oleibolistas con medalla de oro en el GL= Campeonato <undialF el
e.emplo de )oluntad y )alor de la )elocista 8na Cidelia 0uirot al con9uistar la
medalla de oro en el G Campeonato <undial, en ?otemburgo.
Para no &acer interminable la lista de los consagrados deportistas cubanos,
mencionaremos a los destacados de 1,,+ seg@n encuesta de la prensa nacionalN 4l)is
?regory en esgrima, Ja)ier 5otomayor en atletismo, C1li% 5a)n en bo%eo, 8le%is
Aodr$gue- en luc&a, Aeynaldo Gera en a.edre-, Aa@l >iago en )oleibol, Legna
Gerdec$a en .udo, <aiEro Aomero en bo%eo, 6restes Hindel#n en b1isbol, y en
)oleibol =&os)any 7ern#nde-.
8lgo 9ue llen de alegr$a a todo el pueblo fue el doble .uego de una seleccin de
peloteros cubanos con el e9uipo de ?randes Ligas 6rioles de :altimore, en 1,,,,
donde reinaron la confraternidad y el esp$ritu deporti)o. 4n la primera oportunidad,
teniendo por sede La 7abana, ganaron los 6rioles con apretada )enta.a de a 2F y
meses despu1s, al .ugar en 4stados 2nidos, los cubanos triunfaron con 12 a ', lo 9ue
pro)oc una masi)a y entusiasta bien)enida popular a su regreso a la patria.
9.& 'C"0%es son %os principa%es res"%3ados cien31-icos*
L65 PA=3C=P8L45 resultados de la labor rigurosa de los cient$ficos cubanos se
obser)an en distintas esferas. 4n las ciencias t1cnicas, se destacan el desarrollo e
introduccin de las cosec&adoras de caa cubanasF el desarrollo, produccin e
introduccin de las minicomputadoras cubanasF desarrollo y construccin del e9uipo
52<8, para el diagnstico m1dico r#pido de di)ersas afecciones mediante el empleo
de t1cnicas ultramicroanal$ticasF creacin de l$neas de e9uipos de in)estigacin y
diagnstico m1dico*biolgico en la acti)idad ner)iosa superior O<4>=C=>P y en
cardiolog$a OC8A>=6C=>PF desarrollo de un sistema de e9uipos y aplicaciones de la
resonancia magn1tica nuclear, entre otros.
4n las ciencias biom1dicas son rele)antes el programa de pes9uisa.e prenatal y
malformaciones cong1nitas Odeterminacin de alfafetoprote$nas e &ipertiroidismoPF la
)acuna antime*ningocccica tipo :F el ateromi%ol OPP?, regulador del colesterol y
bioestimulantePF sistema interfernF sistema de pes9uisa.e y control de sida, etc.
;ambi1n &ay amplios resultados en las ciencias agropecuarias, con nue)as )ariedades
de caa de a-@car, arro-, papa, tabacoF biof#bricas para la obtencin de semillasF
trasplante de embriones y fertili-acin in )itro en el ganado bo)ino, entre otros. 4n
ciencias sociales se reali-aron obras como el 4pistolario martiano, las 6bras
completas de Jos1 <art$ en edicin cr$tica, el >iccionario de fraseolog$a cubanaF y en
ciencias naturales y e%actas el nue)o 8tlas nacional de Cuba y el <apa ecolgico de
Cuba.
9/& 'C$(o (arc6an %a )io3ecno%og1a y %a ind"s3ria -ar(ac?"3ica*
856<:A8 conocer 9ue en pleno per$odo especial el pa$s &aya in)ertido unos mil
millones de pesos en el programa de biotecnolog$a y la industria m1dico*
farmac1utica. 3o &a sido en )anoN )acunas, medicamentos de @ltima generacin,
medios diagnsticos, e9uipos tecnolgicos y nue)os tratamientos terap1uticos se &an
producido y puesto a disposicin del pueblo para su salud y bienestar.
4n los primeros siete aos de la @ltima d1cada del siglo, &an sido creadas !
instalaciones cient$fico*t1cnicas y se ampliaron seis. Pueden mencionarse el =nstituto
Cinlay, el Centro de =ngenier$a ?en1tica y :iotecnolog$a, el de =nmunolog$a
<olecular, el =nstituto Central de =n)estigacin >igital, dos plantas de 5pirulina
*)egetal proteico*, el Centro 3acional de :iopre*parados y el de =stopos.
8)ances 9ue llenan de orgullo a los cient$ficos e in)estigadores son, entre otros, 9ue
Cuba sea uno de los cinco pa$ses del mundo 9ue reali-a pruebas cl$nicas autori-adas
para e%perimentar la )acuna contra el sida, .unto a 4stados 2nidos, ?ran :retaa,
Crancia y 5ui-aF se &agan ensayos cl$nicos en cuatro tipos de )acunas contra el
c#ncerF se produ-can la mayor$a de las )acunas 9ue protegen a los nios cubanos
gratuitamente contra 1 enfermedadesF se produ-can en las plantas *a partir del
principio acti)o importado del e%terior* el +(J de los ,// medicamentos 9ue se
emplean para la poblacin.
Los cient$ficos cubanos, &ombres y mu.eres consagrados al estudio y al traba.o, no
miden cu#ntas &oras traba.an al d$a, ni se en)anecen por sus e%itosos resultados.
>esde los laboratorios y centros de in)estigacin y desarrollo ellos defienden la
dignidad y soberan$a de su patria.
97& 'C$(o se desarro%%a %a ind"s3ria pesA"era*
8 P458A de ser Cuba un arc&ipi1lago, la e%plotacin de los recursos del mar no se
&ab$a desarrollado adecuadamente antes de la re)olucin. 4n 1,"+ el total de la
produccin pes9uera ascendi a 21L,// toneladas para un consumo de !,+ Eilogramos
perc#pita, aun9ue apenas se consum$an mariscos en tierra adentro y en las montaas.
Cuba importaba para esa 1poca un promedio de (,!, millones de pesos en productos
de mar, y e%portaba 2,1.
La )ida de los pescadores era arriesgada, dura y miserable. 2nos trece mil &ombres
con tres mil pe9ueas embarcaciones, na)egando a )ela o con remos en la mayor$a de
los casos, sal$an unas pocas millas afuera.
>esde los primeros aos, la re)olucin prest atencin al desarrollo de la pesca. 5e
introdu.eron nue)as t1cnicas y se disearon nue)os tipos de embarcaciones. 4ntre
1,'1 y 1,'" se construy el Puerto Pes9uero de La 7abana con la colaboracin de la
antigua 2nin 5o)i1tica, se cre la empresa 9ue luego ser$a la Clota Cubana de Pesca
y la Clota del ?olfo. 5e incorporaron nue)as embarcaciones. 5urgi la Clota 8tunera.
Los pescadores pasaron a un modo de )ida distinto, pues traba.aban con artes
modernas y medios seguros. 5us ingresos aumentaron. 2na nue)a tradicin surgi en
estos &ombres de mar, cuyo &eroico comportamiento frente a los actos &ostiles del
imperialismo y la reaccin &an sido e.emplares.
4n la d1cada del oc&enta la captura se increment, particularmente en la pesca de
plataforma. 5e obtu)o un me.or apro)ec&amiento industrial de la langosta y el
camarn, y se introdu.eron en el mercado nue)os productos del mar.
3o escap esta esfera a los embates de la peor crisis econmica 9ue &a atra)esado el
pa$s. >isminuy el n@mero de embarcaciones, de &ombres a la mar, y se redu.eron las
operaciones en la plataforma costera para e)itar la sobre%plotacin y sus nefastas
consecuencias. Por otra parte, la industria pes9uera mundial tambi1n se encontraba en
etapa de crisis debido a la sobre%plotacin de los oc1anos 9ue comen-aban a dar
claras seales del agotamiento de sus recursos.
5e impon$a una nue)a estrategia. >e una parte, se reali- un redimensionamiento de
la industria para mantener lo producti)o, racional, rentable, sostenible y 9ue
beneficiara al puebloF y de otra parte, priori-ar todo a9uello 9ue aportara di)isas al
pa$s, anali-ado cuidadosa y cient$ficamente. 5e e%periment con el sistema de pago
de una parte del salario en di)isas para pescadores, seg@n el sobrecumplimiento de
los planes, a&orro de recursos, calidad y otros par#metros )inculados a la e%celencia
en el traba.o.
4l resultado en un corto per$odo &i-o posible 9ue en 1,," se con)irtiera en uno de los
pocos sectores autofinanciados en moneda libremente con)ertible. La estructura de la
acti)idad continu transform#ndose r#pidamenteN se crearon nue)as asociaciones,
uniones de empresas, grupos, entidades estatales con mayor autonom$a, mientras eran
decisi)os la eficiencia, el control de recursos, la transparencia y confian-a en la
contabilidad...
2n contrato especial de traba.o se estableci en 1,,+ con )istas a consolidar la
eficiencia y a abrir opciones para me.orar cual9uier aspecto 9ue re9uiere ser
me.orado o rectificado. <ediante este nue)o sistema el barco contin@a siendo
propiedad estatal, pero la captura pertenece a la tripulacin, 9ue la )ende a una
entidad a la cual se subordinan desde el punto de )ista estructural. Los ingresos
personales depender#n del super#)it 9ue sur.a de la relacin entre cobros por )enta y
pagos por gastos. 2na e%periencia pre)ia durante )arios meses en la pro)incia de
Gilla Clara arro. una reduccin del 1"J de los gastos totales, y m#s de un die- por
ciento de aumento en la produccin y en la calidad.
4n 1,,+ los pescadores entregaron unas ciento setenta mil toneladas, similar al
promedio obtenido en el decenio 1,+1*1,,1, considerado de su m#%imo esplendor.
5e &a acelerado el desarrollo de la acuicultura *cr$a y recr$a intensi)a de distintas
especies de agua dulce en espacios interiores del pa$s* 9ue aport unas setenta mil
toneladas de pescadoF se repara gradualmente la flota de plataformaF y se introducen
tecnolog$as a)an-adas en la industria. 4l ob.eti)o final es aumentar la fuente de
prote$na animal para la poblacin y aumentar las e%portaciones incluyendo la
di)ersificacin de las producciones.
98& 'En A"? con3ri)"ye a% desarro%%o sos3eni)%e*
23=>65 a distintos proyectos 9ue la 6rgani-acin de las 3aciones 2nidas para la
8gricultura y la 8limentacin OC86P desarrolla en el pa$s, a mediados de 1,,,
comen- uno relati)o a la dendroenerg$a o apro)ec&amiento energ1tico producido a
partir de la biomasa forestal, de forma racional y reno)able mediante la reforestacin.
5e considera 9ue la aplicacin de esa t1cnica contribuye al desarrollo rural sostenible
y al control del efecto in)ernadero. 5eg@n e%pertos de la C86, .unto a la reforestacin
es preciso asegurar una adecuada transformacin y utili-acin final.de la biomasa
forestal para garanti-ar el uso racional de este recurso, escaso en muc&os lugares del
pa$s.
>atos estad$sticos re)elan 9ue entre 1,!( y 1,"+ se produc$an unos 1, millones de
metros c@bicos de lea al ao, destin#ndose el ('J a carbn )egetal. Posteriormente,
con el aumento del ser)icio de electrificacin y la ad9uisicin de productos deri)ados
del petrleo, disminuy el consumo de carbn )egetal. <as al reducirse la posibilidad
de importar los combustibles necesarios, Cuba &a de apelar a todas las fuentes
energ1ticas y de a&$ la solicitud del acuerdo.
4l ob.eti)o fundamental es utili-ar sistemas dendroenerg1*ticos optimi-ados en las
pro)incias de <atan-as y 5anca 5p$ritus, dada la escase- de lea y carbn 9ue
padecen grupos de campesinos. Los estudios con la C86 incrementar#n el uso de los
biocombustibles como fuente local de energ$a limpia y sustentable, y apoyar#n la
estrategia de promo)er este sistema en el resto de la isla.
9;& '>"? es e% in3ernaciona%is(o para %os c")anos*
4L =3;4A38C=638L=5<6 es una bandera de &onor 9ue agitan los cubanos,
.)enes en su gran mayor$a. 4llos aportan &oy su esfuer-o y su sudor como antes
aportaron su sangre en otras tierras del mundo, por9ue )ibra en sus cora-ones la
certe-a de 9ue, como afirmara un d$a Cidel, ser internacionalista es saldar nuestra
propia deuda con la &umanidad.
<#s de )einticinco mil m1dicos cubanos &an cumplido misiones intenacionalistas en
los m#s apartados rincones de la tierra, y en este pa$s se &an atendido gratuitamente
m#s de catorce mil nios de los afectados por la cat#strofe de C&ernobil. <iles de
maestros cubanos &an lle)ado su saber a otras tierras, y m#s de cuarenta y un mil
adolescentes y .)enes de 12/ pa$ses del mundo &an cursado o cursan sus estudios
a9u$.
Aecordemos lo sucedido cuando prest#bamos ser)icios en 3icaragua. 2nos dos mil
maestros cubanos )i)ieron en condiciones dur$simas .unto a las familias campesinas,
en &umildes bo&$os, aument#ndose lo mismo 9ue ellos. Casi la mitad eran mu.eres,
muc&as de ellas con &i.os, y se &ab$an separado de sus familias por dos aos para ir a
los lugares m#s recnditos de las montaas y campos de 3icaragua a brindar el pan
de la ensean-a. 4l caso es 9ue, cuando se pidi disposicin para ir a ensear all#, se
ofrecieron 2,L/// maestros, y cuando algunos de estos fueron asesinados por la
contrarre)olucin, se ofrecieron 1// ///. 4se es el esp$ritu de nuestro pueblo.Cuando
la cruel matan-a de Hasinga, campamento de refugiados ci)iles namibios al sur de
8ngola, los nios y .)enes sobre)i)ientes y &u1rfanos encontraron su &ogar y su
escuela en Cuba. <uc&os de ellos son destacados y prominentes profesionales de sus
pa$ses.
4s bueno recordar 9ue mientras otros comerciaban y &asta apoyaban al r1gimen
racista de 5ud#frica, sangre cubana fue derramada para contribuir a la independencia
de 8ngola y de 3amibia, y asestarle a la )e-, .unto a los angolanos, los namibios y
los combatientes del Congreso 3acional 8fricano, un golpe contundente del 9ue no
pudo recuperarse*.am#s el r1gimen del apart&eid. 3ada pidi nuestro pueblo a
cambio de su generoso sacrificio. 4se es el internacionalista cubano.
99& 'C"0% es e% de%i3o (0s gra9e A"e p"ede co(e3er "n c")ano*
L8 ;A8=C=]3 a la patria es el m#s gra)e de los cr$menes, seg@n la Constitucin de
la Aep@blica, 9uien la cometa est# su.eto a las m#s se)eras sanciones.
100& ' C"0%es son %os principa%es re3os a %a en3rada de% n"e9o (i%enio*
8 L85 P24A;85 de un nue)o milenio, el pueblo cubano se enfrenta al reto de su
subsistencia y desarrollo socioeconmico y cultural, en medio de un mundo lidereado
por la potencia norteamericana, principal enemigo de la re)olucin, a la 9ue no &a
de.ado de agredir.
Llega el pueblo cubano al siglo VV= saludable y alfabeti-ado, con una e%pectati)a de
)ida alta, el mayor perc#pita de maestros y m1dicos del mundo y un gran n@mero de
cient$ficos y deportistas rele)antes. La llama del internacionalismo no se &a apagado
en sus manos, sino 9ue alumbra con empeo a los enfermos y necesitados. 5e siente
@til, 9ue es sentirse contento.
Pero el imperialismo no perdona. La guerra ideolgica 9ue atenta contra los )alores
1ticos, morales y patriticos no &a cesado y ataca a los m#s )ulnerables. La pol$tica
del libre mercado y la empresa pri)ada toma m#s adeptos en el planeta, y las
econom$as se resienten. Los medios masi)os de coloni-acin cultural se &acen m#s
agresi)os y embobecen a sociedades enteras. 3o estamos en una urna de cristalN ese
es el reto.
>e un lado, preser)ar la identidad nacional y la cultura. 4stimular el m1rito, la
capacidad, el esp$ritu creador, el &umanismoF condenar el robo, la mediocridad, el
arribismo, el abuso. >e otro lado, luc&ar por la eficiencia, utili-ar m#s la ciencia y la
t1cnica, y preser)ar el medio ambiente.
Cuando se celebraba el cuadrag1simo ani)ersario del triunfo re)olucionario, Cidel se
dirigi a la .u)entud e%plicando 9ue la batalla de &oy es dura y dif$cil, y e%&ort a
profundi-ar en la conciencia, formar car#cter, educar en la dura escuela de la )ida de
nuestra 1poca, sembrar ideas slidas, utili-ar argumentos irrebatibles, predicar con el
e.emplo y confiar en el &onor del &ombre.