Neffa - Crisis y Emergencia de Los Nuevos Modelos Productivos PDF
Neffa - Crisis y Emergencia de Los Nuevos Modelos Productivos PDF
Introduccin
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En este trabajo nos proponemos un objetivo que puede parecer ambicioso, pero que es necesario: consiste
en analizar el tema desde la economa, para intentar de manera sinttica presentar algunos de los modelos
o paradigmas productivos dominantes (centrndonos en el taylorismo y el fordismo), explicar las causas
por las cuales postulamos que desde hace aproximadamente tres dcadas los mismos comenzaron a agotar
sus potencialidades, y sealar cuales son algunas de las alternativas que se proponen tericamente o se
han instaurado para salir de la crisis. 1
Como lo postulan ciertos economistas inscriptos en diversas escuelas de pensamiento cuestionadoras
del pensamiento nico, afirmamos que la economa mundial se encuentra sumida en una grave crisis y
que un nuevo rgimen de acumulacin se est gestando, cuyos perfiles no aparecen expresados an con
claridad.
El proceso de surgimiento, desarrollo, difusin y consolidacin de un nuevo modelo productivo o
paradigma productivo requiere muy largo tiempo y no es algo que se consolide de manera fcil, pues
surge a partir de procesos contradictorios sometidos a la incertidumbre y sin que ningn tipo de
determinismo pueda explicarlo. Se trata de un concepto meso-econmico, que permite pasar de las
dimensiones micro a las macroeconmicas, y que recurriendo a las formas institucionales se define como
... la complementariedad y la coherencia entre los principios de gestin, la organizacin interna de la
firma, sus relaciones con la competencia, su articulacin con las empresas subcontratistas, y la relacin
salarial..., y el sistema educativo, sin olvidar la regulacin macroeconmica teniendo en cuenta la historia,
las tradiciones socio-culturales, las funciones del Estado (Boyer, Durand, 1994).
Cuando se consolida, un modelo o paradigma productivo deviene estructuralmente estable hasta que,
por el efecto de shocks externos y contradicciones endgenas, desencadena dinmicas internas
susceptibles de ponerlo en cuestin a mediano y largo plazo. Es muy temprano an para afirmar cul ser
la modalidad que adoptar. Probablemente no marchamos hacia un solo modelo productivo optimizador,
dada la complejidad de variables que intervienen y los procedimientos de coordinacin necesarios para
establecerlo.
En cada pas, segn sea el modo de desarrollo vigente, su formacin histrico-social y la correlacin
de fuerzas, se construyen nuevos modelos productivos totalmente originales o se procede a la hibridacin
con paradigmas exitosos inherentes a los modos de gestin de las empresas transnacionales. Esto se
concreta teniendo en cuenta la heterogeneidad del sistema productivo, las tradiciones nacionales, la
configuracin del sistema educativo, as como las formas estructurales: la forma de competencia en el
mercado, el papel del Estado, la insercin en la divisin internacional del trabajo, el sistema monetario y
la relacin salarial (Boyer, Durand, 1994).
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Los ciclos largos propuestos por Schumpeter, siguiendo a Kondratieff, incluyen ondas de
destruccin creadora y seran una sucesin de varios paradigmas tcnico-econmicos asociados con los
cambios en el contexto institucional. Segn G. Dosi, un nuevo paradigma emerge luego de que se
produce un proceso de transformacin estructural y comienza a desarrollarse cuando el anterior ciclo
largo se encuentra todava en su fase depresiva; pero slo se establecera un nuevo rgimen tecnolgico
dominante luego de una crisis de ajuste estructural, incluyendo grandes cambios sociales e institucionales,
con impacto sobre el conjunto de ramas de la economa.
El concepto de paradigma tcnico-econmico, es as mucho ms amplio que el de innovacin y el de
sistema tecnolgico. Se lo puede definir como una combinacin ms eficiente de productos y procesos,
inter-relacionados con innovaciones tcnicas, organizacionales y de gestin empresarial, que promueven
un crecimiento de la productividad de toda, o de una parte, de la economa, reducen drsticamente los
costos de numerosos productos y servicios, cambian la estructura de costos relativos y abren de manera
indita una amplia gama de oportunidades para las inversiones rentables (Dosi, G, 1984).
En lugar de probarse una tendencia hacia la convergencia tecnolgica y econmica, lo que
histricamente se comprueba es que la capacidad de innovacin est muy concentrada y se encuentra
distribuida de manera muy desigual entre los pases, a pesar de que la difusin de las tecnologas haya
dado lugar a procesos de imitacin, adopcin y adaptacin de las que provienen de los pases ms
avanzados.
El cambio de cada paradigma implica una transformacin radical de las tecnologas y de los modos
de gestin empresarial precedentes. La aceptacin social de las nuevas tecnologas innovadoras puede
demandar un cierto tiempo, dado que se necesitan cambios en la legislacin, en la educacin, pero sobre
todo en los modos de gestin de los dirigentes de empresas y en los mtodos de trabajo de sus obreros y
empleados. Esas nuevas tecnologas influencian las decisiones de inversin y tienen efectos de
propagacin a travs de todo el sistema econmico. Por esas razones Chr. Freeman haba postulado que la
automatizacin microelectrnica y la informtica constituyen una verdadera revolucin tecnolgica
(Freeman, Chr. 1986).
Carlota Prez por su parte defini el paradigma tecnolgico como un conjunto de nuevos principios
de gestin que terminan por convertirse en el sentido comn de los dirigentes de empresas, de los
ingenieros y de los operarios en el curso de cada fase importante de evolucin (Prez, C., 1989).
El nuevo paradigma o modelo productivo emerge primero de manera gradual como un nuevo tipo
ideal de organizar la produccin, para desarrollarse luego ms rpidamente cuando el impacto del nuevo
factor comienza a ser cada vez mas visible en la estructura de costos. Histricamente, los mayores
cambios de paradigma han sido el resultado de una activa y prolongada bsqueda emprendida cuando se
percibe que se han encontrado ciertos lmites en la situacin anterior, pero no siempre la bsqueda parte
de una perfecta informacin, sino que acta mediante sistemas o procesos de prueba y error. Ahora bien,
cuando se adoptan de manera generalizada las nuevas tecnologas, el resultado del cambio es
generalmente irreversible.
En la fase de expansin rpida del ciclo, una vez que las dificultades iniciales son superadas y que se
implantan las nuevas infraestructuras e instituciones, las innovaciones tecnolgicas permiten que crezcan
considerablemente la productividad del capital y del trabajo. Frente al peligro de desempleo estructural
por causa tecnolgica, los economistas enrolados en el pensamiento evolucionista estiman que el aumento
de la productividad del capital y de la produccin es lo que a mediano y largo plazo posibilitar alcanzar
un mayor nivel de empleo.
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La existencia y magnitud de costos de transaccin es lo que explica que en algunos casos las firmas
integran verticalmente su produccin y en otros casos recurren al mercado. Las rutinas construidas en
cada firma permiten guiar el comportamiento de las personas y hacen posible la continuidad de las
organizaciones. La trayectoria de cada firma depende de su base tecnolgica y de la actitud empresarial
para desarrollar una capacidad de aprendizaje que sea suficiente como para superar los problemas que se
le van a plantear en el medio donde acta.
Como caracterizar el paradigma productivo que, aunque declinando, se encontraba vigente en los
pases capitalistas industrializados? El mismo se caracterizaba por la dominacin de grandes empresas
organizadas jerrquicamente y la produccin masiva de productos homogneos, utilizando mquinas
herramientas de propsitos nicos. Eran productos de baja complejidad, poco sensibles al progreso
tecnolgico. La divisin del trabajo estaba condicionada por la dimensin del mercado; los procesos de
trabajo tayloristas y fordistas implicaron una simplificacin del trabajo, pocos requerimientos en materia
de calificaciones y competencias profesionales, menor autonoma de los trabajadores, con lo cual se
posibilit el reemplazo de los trabajadores por mquinas, y los empresarios manifestaron poco inters
para invertir en la capacitacin. La educacin publica masiva proporcionaba a las empresas trabajadores
que saban leer y escribir, y que haban sido disciplinados para el trabajo. Para hacer frente a la magnitud
de los costos de transaccin, las empresas se integraban verticalmente, generndose una inercia
estructural; entonces los tiempos de respuesta a los cambios en la demanda fueron largos y los costos
unitarios de produccin elevados. Esas formas de coordinacin son eficaces cuando los mercados son
estables, la demanda es grande, los gustos de los consumidores son homogneos, stos tienen pocas
exigencias de calidad, y la tecnologa utilizada es simple y progresa lentamente (Hollingsworth, R. 1998).
En otras de nuestras publicaciones hemos caracterizado los procesos de trabajo tayloristas y fordistas,
que configuran en su esencia el paradigma socio-productivo que desde mediados de la dcada de los aos
70 comenz a transitar su etapa de agotamiento (Neffa, J. C. 1987, 1989 y 1998).
El primero de esos procesos estaba estructurado bsicamente sobre la racionalizacin y organizacin
cientfica del trabajo. El segundo le incorpor la mecanizacin de las tareas y la banda transportadora. La
industria automotriz es, tradicionalmente, el sector que primero y con ms detalle ha sido estudiado desde
esa segunda perspectiva.
A) La racionalizacin del trabajo, u organizacin cientfica del trabajo (OCT)
El paradigma taylorista surgi en un contexto histrico caracterizado por el fuerte crecimiento econmico y
la expansin de la demanda, sin que paralelamente se produjera un cambio tecnolgico importante que hiciera
posible substituir fuerza de trabajo. Debido al cambio en el proceso migratorio generado por la guerra de
secesin, se produjo la escasez de fuerza de trabajo calificada, junto con la existencia de fuertes sindicatos de
oficio, cuyos miembros controlaban el proceso de trabajo. El problema que se trat de resolver fue el de hacer
una economa de movimientos y de tiempo de trabajo, reducir los costos unitarios de produccin, simplificar el
trabajo e intensificarlo, para incorporar mano de obra poco calificada.
Una cierta concepcin de los trabajadores inspir la reflexin de Frderic Winslow Taylor. Para el,
los obreros tendan sistemticamente al ocio y a la vagancia, como una medida protectora contra los
despidos de trabajadores excedentes; las causas de ese comportamiento colectivo eran los inadecuados
sistemas de remuneracin (segn el tiempo de trabajo y sin tener directamente en cuenta la productividad)
y la falta de una direccin cientfica de las empresas. As se postula que la eliminacin del tiempo muerto
beneficiara tanto a los empleadores como a los trabajadores porque sentara las bases de una prosperidad
durable, haciendo posible la coexistencia de mano de obra barata y de salarios elevados.
Los rasgos esenciales del viejo paradigma (que, aunque declinante an sigue vigente en la mayora de
las grandes empresas en todos los sectores y ramas de actividad), presentados sintticamente y slo para
fines expositivos, se enuncian a continuacin (Neffa, J. C., 1989 y 1998).
1) El estudio sistemtico de tiempos y movimientos, para en un primer momento identificar, medir y
posteriormente eliminar el tiempo muerto y los movimientos considerados improductivos e intiles,
estipulando los tiempos obligatorios de reposo, para permitir la recuperacin de la fatiga, y de pausas
para hacer el mantenimiento de las maquinarias y equipos;
2) La estandarizacin de los objetos de trabajo (materias primas e insumos intermedios) y de las
herramientas ms adecuadas para hacer cada tarea;
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A. La mundializacin
Desde fines del siglo pasado, los progresos en materia de transporte ferroviario y martimo hicieron
posible un fuerte crecimiento del comercio internacional, interrumpido temporariamente durante los
perodos blicos. Lo que buscaban prioritariamente los pases desarrollados era la importacin de
alimentos, materias primas e insumos intermedios de carcter estratgico, y la exportacin de su
produccin industrial, con mayor valor agregado. Entre las dos guerras mundiales y sobre todo luego de
la crisis de los aos 30 predominaron polticas proteccionistas para preservar el mercado interno, pero
luego de la segunda guerra los EE.UU. devienen la potencia hegemnica y promueven el libre cambio y
el desarrollo del comercio internacional y en una primera fase el intercambio se hizo ms intenso desde
los pases desarrollados hacia los pases en desarrollo; pero ya desde 1974 el comercio de productos
manufacturados tendi a concentrarse cada vez ms dentro de la Trada y con posterioridad, la crisis de la
deuda, el estancamiento y la inestabilidad macroeconmica de aquellos pases, frenaron nuevamente su
participacin en el comercio internacional.
Al mismo tiempo que los pases subdesarrollados orientaron sus economas hacia la exportacin, las
innovaciones tecnolgicas contribuyeron a acelerar el proceso de sustitucin de materias primas, a reducir
la capacidad exportadora de los pases en vas de desarrollo (PVD) y a mantenerlos en una
especializacin desventajosa.
Las innovaciones tecnolgicas derivadas de la informtica redujeron sensiblemente los costos
unitarios de produccin y han contribuido a re-localizar dentro del territorio de los pases industrializados
la actividad de las empresas que antes se buscara externalizar. Pero esta modificacin no afecta la
tendencia general hacia el crecimiento del comercio y de la concentracin del mismo entre los pases de
la trada.
A modo de complemento cabe sealar que desde que emergiera la crisis de los aos setenta, la parte
de los servicios en el comercio mundial no ha hecho sino aumentar, especialmente los servicios
financieros, y coincidentemente, la mayor parte de las IED (inversiones extranjeras directas) se estn
concentrando en los servicios.
La mundializacin no es un proceso que se haya instaurado de manera automtica ni que haya
concluido totalmente de evolucionar. La globalizacin se caracteriza porque genera un proceso asimtrico
de distribucin de los beneficios. Pero en esta era signada por la globalizacin de los mercados, persisten
an las trayectorias nacionales, puesto que cada pas desarrolla tecnologas especificas, y las diferencias
entre ellos son grandes y crecientes (Zysman, 1996).
La mundializacin sera una fase especfica del proceso de internacionalizacin del capital cuya
valorizacin ahora se busca a la escala de todas las regiones del mundo donde se encuentren los mercados
o los recursos. En el origen de este fenmeno, se identifica la influencia de las ETN que actan de manera
autnoma respecto de los Estados (inclusive del que aloja a la casa matriz) y establecen una estrategia de
produccin a escala planetaria.
La transformacin esencial consiste en que, con la mundializacin, los Estados de todos los pases,
incluso los de mayor potencial econmico, pierden su capacidad de llevar a cabo un desarrollo totalmente
autocentrado e independiente, basados en sus propios mercados (Chesnais, 1994).
Surge as una nueva jerarqua del sistema productivo mundial que es el resultado de varios factores:
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1. El proceso de concentracin y de centralizacin del capital en los pases con economas capitalistas
dominantes, que vuelve ms densos los intercambios alrededor de los polos de la Trada y
marginaliza a los pases menos avanzados.
2. El nivel elevado del comercio mundial representado por la intensificacin del comercio intra-firma
generado por las ETN, y la subcontratacin transfronteriza, provocado por el movimiento de las Inversiones
Extranjeras Directas (IED).
3. La atenuacin de la anterior distincin entre la produccin domstica y la extranjera dentro de los
mercados nacionales, debido a que la competencia entre firmas se ejerce dentro y fuera de los pases
sede de las ETN y de sus filiales, como consecuencia de la liberalizacin de los intercambios y de las
IED.
4. La sustitucin progresiva del anterior paradigma de las ventajas comparativas basadas en la
dotacin y bajos costos de los recursos naturales y que tericamente dara como resultado un
beneficio por igual a todos los participantes, por otro paradigma en el cual las ventajas competitivas
dinmicas no son dadas o naturales, sino que han sido construidas gracias a las polticas industriales,
que establecen a nivel mundial fuertes jerarquas y generan dos grupos de pases despus de la crisis:
ganadores y perdedores.
5. Los cambios cientficos y tecnolgicos con sus efectos sobre la productividad, la organizacin
empresaria y la localizacin de la produccin industrial, que redujeron los costos de transaccin y de
coordinacin de las empresas transnacionales.
6. Los factores polticos y el rol de los Estados para constituir o reestructurar los bloques regionales
(U.E., TLC., Mercosur).
7. El reducido lugar y la situacin dependiente en que quedaron los pases del ex socialismo real y
el cambio de rgimen de acumulacin como consecuencia del desastre econmico y social provocado
por la ineficiencia econmica del sistema burocrtico de inspiracin staliniana.
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permite as otorgar aumentos salariales nominales y reales de los trabajadores los cuales junto con el
incremento de las tasas de ganancia, provocan un aumento de la demanda. El aumento de la demanda
estimula a su vez un incremento de la produccin, para lo cual se hacen necesarias nuevas inversiones y
por la dinmica de las economas de escala el aumento de la produccin refuerza el proceso de
incremento de la productividad. Pero el crecimiento del sector terciario y de los servicios presionara
hacia abajo la evolucin de las tendencias al crecimiento de la productividad (Husson, 1996).
Pero se ha constatado que, entre 1960 y 1982, el crecimiento anual promedio de la productividad por
hora de trabajo en la industria manufacturera, para el conjunto de los pases de la OCDE, fue de 4,4%
para el perodo 1960-73 y descendi fuertemente siendo slo de 1,6% entre 1973 y 1982. (United States
Department of Labor, citado por Griliches, Z. en: Salomon J. J. y Schmeder, G, 1985).
Las consecuencias de este fenmeno fueron, primero la brusca reduccin de las tasas de crecimiento
del PBI, luego la disminucin de las tasas de ganancia y de inversin, el estancamiento de los niveles
salariales, y posteriormente el incremento sostenido y durable de la desocupacin.
Con referencia a la economa norteamericana, el Prof. Lester Thurow busc por su parte la
explicacin de la paradoja de Robert Solow, en la creciente cantidad de trabajo improductivo
(especialmente el administrativo y de oficina), la falta de involucramiento de los trabajadores americanos
por escasez de incentivos monetarios y por miedo a la desocupacin, y debido a la fuerte divisin social y
tcnica del trabajo. Si bien la tasa de inversin haba crecido en el perodo estudiado, se necesitaba cada
vez ms capital por trabajador para crear un empleo; el resultado fue que la preferencia de los
empleadores se desplaz desde la compra de bienes de capital (caros) hacia la contratacin de
trabajadores (baratos) y como resultado de la disminucin del volumen de capital y el aumento del
nmero de trabajadores, la productividad por hora de trabajo disminuy. Por otra parte, en momentos de
recesin, como las empresas no despiden inmediatamente a su personal por prudentes razones
econmicas y sociales, la productividad del trabajo cae, pero sucede todo lo contrario cuando la economa
est en expansin (Thurow, L., 1991).
Para otros autores, como W. Baumol, en parte la cada de la productividad tendra un origen
estructural, y se debera al proceso de desindustrializacin y de terciarizacin de la economa, dando por
supuesto que en las actividades de servicios la productividad es inferior que en la industria (Baumol,
1985).
Los economistas radicals, van a explicar la cada de la productividad por los excesivos costos de
control que requiere la aplicacin de los procesos de trabajo tayloristas y fordistas (Gordon, Weinsskof)
Desde el punto de vista de la demanda solvente, el consumo masivo de los bienes durables vinculados
con el proceso de urbanizacin (automvil, vivienda, aparatos del hogar) que es un indicador de la
existencia del rgimen de acumulacin fordista, comienza a manifestar signos evidentes de saturacin.
La produccin masiva de largas series de productos homogneos, caracterstica de dicho paradigma
productivo, ya no se adecua a la nueva conformacin de la demanda.
2. Los lmites sociales
Por otra parte, desde mediados de los aos 70, la relacin salarial y el compromiso laboral fordista
entran en crisis y comienza a descomponerse por su rigidez, los costos ocultos que generaba para las
empresas y los costos sociales que implicaba para los asalariados.
La fuerza de trabajo ocupada actualmente tiene, desde el momento mismo de su ingreso en el
mercado de trabajo, un mayor nivel de escolaridad formal y de formacin profesional que antes y los
jvenes son ahora ms exigentes en cuanto a las posibilidades de emplear y valorizar los conocimientos
adquiridos en el sistema escolar, reivindican un mayor grado de autonoma y de responsabilidad para
realizar las tareas y evaluarlas. Por otra parte, ellos valoran ms que sus predecesores las posibilidades de
comunicarse horizontalmente entre s a partir de sus puestos de trabajo y de participar de manera activa
en la gestin, involucrndose en la vida de la empresa por medio del acceso a la informacin y la
elaboracin de propuestas. En consecuencia, los jvenes trabajadores rechazan la rigidez de la
descripcin, hecha por otros, de tareas asignadas para cada puesto de trabajo por debajo de sus
calificaciones y competencias y han accedido a una mayor informacin y conciencia en cuanto a los
efectos de las condiciones y medio ambiente de trabajo sobre su propia salud (Coriat, 1993; Dejours,
1987; Neffa, 1982 y 1989).
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La llamada primera crisis del taylorismo (Stankiewicz, 1991) se origin, por una parte, en el
desprestigio y el rechazo del trabajo parcializado sobre lneas de montaje, organizado segn los mtodos
y tcnicas de la OCT, y llevado a cabo por parte de los trabajadores (con frecuencia inmigrantes semicalificados provenientes de pases con un menor grado de desarrollo econmico) dedicados a la
fabricacin de grandes series de productos homogneos. Por otra parte, se constat que ese proceso de
trabajo daba lugar no slo a incidentes y fallas en la calidad de la produccin, sino tambin estimulaba el
ausentismo y altas tasas de rotacin de personal, por el empobrecimiento de su contenido. Las polticas
gubernamentales para humanizar el trabajo y mejorar las condiciones de trabajo se orientaban de
hecho a reducir esos costos ocultos, pero sin proponerse verdaderamente erradicar el taylorismo.
El desconocimiento o incluso la represin de la subjetividad y la prdida de identidad profesional de
los trabajadores calificados de oficio, impidieron el pleno involucramiento de los obreros y empleados en
la marcha de la empresa, los desalentaron para permanecer en la misma, reducir el ausentismo, aumentar
la productividad y asegurar un nivel aceptable de calidad, mediante la movilizacin de los saberes
productivos y de la experiencia acumulada.
La aplicacin sistemtica y generalizada de esta forma de organizar el proceso de trabajo en las
empresas de grande y mediana dimensin, dio como resultado un trabajo simple, repetitivo, desprovisto
de inters y poco creativo, que acompaaba un deterioro de las condiciones y medio ambiente de trabajo,
cuyos indicadores son los accidentes, las enfermedades profesionales, la excesiva fatiga y, de manera ms
general, la intensificacin del trabajo. Todo esto se traduce en mayores costos para la empresa, muchos de
los cuales permanecen ocultos a los ojos de la direccin.
Sin embargo, la profunda divisin social y tcnica del trabajo y sus consecuencias en materia de
condiciones y medio ambiente de trabajo, dificult la percepcin de la distancia o el desvo generado
entre el trabajo, tal como estaba prescripto, con respecto a la actividad efectivamente realizada, e ignor,
dej de lado o gener reticencias respecto de la creatividad, de la capacidad de autonoma responsable, y
de las competencias de los trabajadores. En consecuencia, la OCT impidi o no estimul el
involucramiento de los trabajadores en la marcha de la empresa, ni su adhesin a los objetivos
empresariales. Por estas razones, con el correr del tiempo se fueron agotando las potencialidades
generadas originalmente por la OCT, se generaron conflictos, surgieron disfuncionamientos y aquella
dej de ser una garanta para obtener incrementos sostenidos de productividad, y la reduccin de los
costos.
Pero adems, la configuracin de la direccin cientfica de las empresas (DCE) a nivel de la
estructura organizativa de las mismas, dificultaba:
a) la introduccin, difusin y absorcin de las innovaciones,
b) la transmisin de informaciones y la socializacin de las competencias entre los trabajadores de
ejecucin,
c) los procesos de aprendizaje colectivos que requieren una estructura menos jerrquica y ms
comunicante, y
d) la cooperacin horizontal, puesto que el contexto de incertidumbre hace difcil la gestin de las
empresas con una visin sistmica desconociendo, como ya se seal, los desvos del trabajo tal
como era efectivamente realizado, respecto del trabajo que haba sido prescripto por quienes lo
concibieron pero no tienen la experiencia productiva ni ejecutarn el trabajo, prescripciones que no
dejaban lugar para prever los incidentes.
Por otra parte, se deterioraron las condiciones de trabajo, -no slo la higiene y la seguridad del
colectivo de trabajo-, como consecuencia de su sometimiento a las elevadas cadencias de la lnea de
montaje, la emergencia de nuevos riesgos ocupacionales, y la intensificacin de la carga de trabajo
psquica y mental.
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Todos esos factores y expectativas terminan siendo contradictorios con la vigencia de las formas
tpicas de la organizacin cientfica del trabajo y del fordismo, provocan su rechazo, generan costos
ocultos (ausentismo, sabotaje de la produccin, mal uso de maquinarias y equipos, prdida o sustraccin
de herramientas, materias primas e insumos), no incitan al compromiso que es necesario para aumentar la
productividad y mejorar la calidad, y estn en el origen de conflictos laborales prolongados, que dieron
lugar a nuevas formas de lucha por parte de los asalariados.
Estos conflictos pueden desencadenarse sin llegar hasta el lmite extremo de la huelga, valindose
para ello precisamente de las caractersticas especficas y de la vulnerabilidad de la norma de produccin
fordista (el trabajo a reglamento, los paros parciales dentro de las lneas de montaje, o la innovacin de
los asalariados japoneses, que consiste en superar los tiempos asignados provocando enormes cuellos de
botella), con lo cual se desarticula y retrasa la produccin.
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La crisis del taylorismo ya no surge solamente de las reivindicaciones de los asalariados. Son las
nuevas tecnologas productivas las que lo cuestionan: la eficacia de estas innovaciones depende ahora
menos del esfuerzo de los trabajadores que cuando la produccin se llevaba a cabo con las mquinas y
herramientas tradicionales. Pero al mismo tiempo, los nuevos sistemas productivos requieren una
organizacin de la empresa y del trabajo que implican una ruptura, mayor o menor, con los principios y
tcnicas constitutivos de la OCT. La rigidez propia del taylorismo y del fordismo son incompatibles con
las nuevas modalidades de competencia.
En consecuencia, 1) la polivalencia en materia de calificaciones, 2) la flexibilidad en cuanto al uso
del tiempo de trabajo y la movilidad de los trabajadores, 3) la flexibilidad productiva de los medios de
trabajo para adaptarse rpidamente con el objeto de producir series cortas de productos heterogneos, 4)
el esfuerzo de investigacin y desarrollo para innovar en cuanto a los procesos y productos, y 5) las
tcnicas japonesas de organizar las empresas trabajando justo a tiempo en redes con subcontratistas y
proveedores, son algunas de las tcnicas post-tayloristas que comienzan a generalizarse, lenta pero
progresivamente, a medida que se va constatando su mayor eficiencia.
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calidad. Para disminuir los costos, cambian las formas de la competencia en el mercado tendiendo a
constituir redes de empresas articuladas entre si por relaciones de subcontratacin y la prestacin de
servicios mutuos.
La organizacin de la produccin empresaria se basa ahora en establecimientos pequeos y
medianos, descentralizados, desconcentrados, que establecen relaciones de subcontratacin con otras
empresas de mayor o igual tamao. Para ser competitivas esas empresas procuran introducir innovaciones
tecnolgicas y organizacionales para cambiar los procesos productivos, abandonar las tecnologas basadas
en mquinas herramientas de propsitos nicos, aumentar la gama de variedades y generar nuevos
productos, buscan ahorrar capital y reducir su densidad por trabajador ocupado. La estructura
organizativa se hace ms horizontal para favorecer las comunicaciones y la cooperacin entre los
diversos estamentos de la empresa.
La gestin de la fuerza de trabajo parte de la premisa que es cada vez ms difcil asegurar a los
nuevos trabajadores un empleo estable, a tiempo completo y con contratos de duracin indeterminada. En
su lugar aparecen contratos de duracin determinada, el trabajo a tiempo parcial, mltiples formas
particulares de empleo de carcter precario, favoreciendo el trabajo clandestino y la economa no
registrada. El sistema de determinacin y ajuste de las remuneraciones de los asalariados cambia, y en
lugar de basarse en las clasificaciones estipuladas por el Convenio Colectivo de Trabajo, en la formacin
profesional inicial de los trabajadores, o en los salarios mnimos legales indexables se adopta el criterio
de ajustarse de manera diferenciada teniendo en cuenta el rendimiento (medido en trminos cuantitativos,
productividad, o cualitativos, calidad) de cada trabajador, la situacin del mercado de trabajo (donde las
elevadas tasas de desocupacin frenan el crecimiento de los salarios), y las competencias profesionales.
El movimiento sindical pierde fuerza, representatividad y prestigio, al disminuir el nmero de sus
afiliados como consecuencia de la desocupacin, de los costos sociales que implica la afiliacin, y del
cambio de los valores culturales precedentes.
Luego de la emergencia de la crisis, las empresas se encuentran confrontadas a una complejidad
creciente, pues deben reaccionar de manera rpida ante los cambios en el contexto econmico interno e
internacional, y al mismo tiempo hacer un esfuerzo para anticipar como ser el futuro, que se presenta
cada vez como ms incierto.
1.
El escenario neo-liberal de salida de la crisis: va la austeridad salarial, la flexibilidad
laboral y el libre funcionamiento de los mercados
Las estrategias neo-liberales comprenden un conjunto de medidas que se adoptan de manera conjunta
o siguiendo una cierta secuencia, y que abarcan entre otras polticas: privatizaciones, severos ajustes
fiscales, drstica reduccin de las tasas de inflacin va contraccin de la demanda y estancamiento
salarial, desregulacin de los mercados para dejar que la competencia acte sin mayores trabas, atraccin
de las inversiones extranjeras otorgndoles derechos iguales o superiores que al capital nacional, apertura
del mercado a los intercambios internacionales de productos, servicios, capitales, y en menor medida de
mano de obra.
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Para que un nuevo ciclo de larga duracin entre en la fase de expansin es menester que los cambios
tecnolgicos y del paradigma productivo se den de manera sincrnica con una transformacin de las
formas institucionales.
Este enfoque, que pone el acento en el papel de los empresarios innovadores que desencadenaran un
proceso de destruccin creadora, ha sido criticado por padecer de un cierto reduccionismo tecnolgico,
por la poca capacidad para explicar como fue que el agotamiento del sistema tcnico condujo a una
mayor densidad de capital y a una cada en las tasas de ganancias, y porque no se dan explicaciones claras
acerca de la aparicin de las grandes innovaciones, que si fueran meramente aleatorias no haran probable
las ondas largas de crecimiento: debera existir regularidad y una sincronizacin entre los cambios
institucionales y las transformaciones tecnolgicas (Boyer, R.,). D. Gordon a su vez reprocha a los
economistas schumpeterianos que transformaron algo que es variable y especfico para cada formacin
econmico-social en cada gran fase del desarrollo capitalista -las innovaciones-, en un proceso dotado de
cierta regularidad, invariante y generalizado.
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4. La especializacin flexible 4
Otros autores, como M. Piore y Ch. Sabel, proponen la especializacin flexible como una alternativa
vlida frente al taylorismo y el fordismo. Sera sta la manera de evitar las consecuencias negativas de la
excesiva divisin social y tcnica del trabajo y de la rigidez provocada por una orientacin de la
produccin hacia series largas de productos homogneos, que hace difcil su adaptacin frente a los
cambios rpidos e impredecibles de la demanda. (Piore y Sabel, 1984). El camino hacia la prosperidad
estara constituido por la automatizacin integrada y flexible implementada junto con innovaciones en
materia de organizacin industrial. Para esos autores habra concluido definitivamente la poca de la
produccin masiva de series largas de productos homogneos fabricados por grandes empresas, con
inversiones indivisibles, que integraban verticalmente su produccin.
Este nuevo modelo estara posibilitado por la rpida reduccin del costo de los componentes
electrnicos que constituyen el ncleo de los nuevos bienes de produccin y por la difusin de la robtica
y la burtica, en virtud de lo cual la produccin en pequeas series de productos heterogneos sera ms
rentable que la produccin estandarizada de productos homogneos, fabricados en grandes o medianas
series. Se ahorrara mucho tiempo en la preparacin y mantenimiento de las mquinas, pero sobre todo en
el paso de la produccin de un producto a otro.
Existira un proceso de transicin hacia una diversificacin de los productos, puesto que con una
concepcin modular y estandarizada de los insumos, y combinndolos, se podra obtener una mayor
variedad de productos y lograr incluso importantes rendimientos de escala. Esta capacidad de adaptacin
es importante en una poca donde la tecnologa informtica y sus aplicaciones evolucionan tan
rpidamente.
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58
El modelo productivo de la especializacin flexible ha sido criticado por B. Coriat puesto que para
ser viable, se basara en una serie de hiptesis que deberan darse conjuntamente: 1) las empresas
orientadas a la bsqueda de economas de variedad y de alta calidad tendran siempre una superioridad
sobre las que procuran economas de escala; 2) la demanda debera ser cada vez ms segmentada e
inestable; 3) no podra existir una demanda creciente y estable que permita obtener economas de escala
para la produccin en grandes series; y 4) las estrategias productivas basadas en la calidad -lograda
mediante las innovaciones y la diferenciacin- seran siempre superiores respecto de las estrategias que
buscan incrementar el volumen de produccin a travs de economas de escala.
A la especializacin flexible, Coriat opone la flexibilidad dinmica, basada en las economas de
experiencia, la articulacin entre innovaciones de productos y de procesos productivos. Si existiera
entonces un mercado compuesto por un conjunto variado de productos, pero cuya demanda es creciente y
exigente en cuanto a la calidad, el mismo podra ser satisfecho ya sea por una serie de pequeas y
medianas empresas flexibles, o por una gran empresa dotada de equipamientos flexibles y que haya
establecido relaciones de subcontratacin con pequeas empresas innovadoras que le permiten continuar
obteniendo economas de escala y reducir sus costos unitarios (Coriat, 1990).
Sus crticas se unen a las de Robert Boyer (Boyer, R. 1991) quien duda que este modelo lleve de
nuevo a un mercado de competencia pura y perfecta entre pequeas y medianas empresas que acten de
manera independiente, dado que para hacer frente a la crisis las grandes empresas ya han reformado
profundamente la organizacin de la produccin y del trabajo y han procedido a la subcontratacin
modernizando de manera simultnea a la anterior integracin vertical de la produccin. La bsqueda de
rendimientos crecientes a escala sigue siendo importante para explicar los procesos de crecimiento y de
competencia. El problema consiste en lograrlos por otros mtodos que no sean el taylorismo y el
fordismo.
De esto se deduce que la emergencia de un nuevo rgimen de acumulacin, donde la produccin est
basada en la automatizacin flexible y la produccin masiva de productos diferenciados, est
condicionado al surgimiento de otras formas institucionales y no est excluido por anticipado que las
grandes empresas puedan organizar su sistema productivo de esa manera, recurriendo a la
descentralizacin y a la subcontratacin.
La flexibilidad tecnolgica dentro de las firmas puede darse conjuntamente con una mayor rigidez a
nivel macroeconmico y de la rama de actividad, pues se producen fusiones de empresas y se requiere
una mayor inversin en actividades de investigacin y desarrollo, dando lugar a indivisibilidades.
Dados los cambios operados en el mercado financiero en cuanto a la creciente concentracin, y el
objetivo de las grandes firmas de controlar una parte significativa del mercado, no hay que descartar el
predominio de estructuras oligopolsticas en detrimento de mercados ms competitivos, ni una fuerte
disparidad entre regiones productivas.
Robert Boyer insiste en que las economas de variedad y las economas de escala, ms que excluirse,
se refuerzan mutuamente en las nuevas inversiones de capital fijo; as en el futuro podra emerger un
nuevo rgimen de acumulacin basado en la automatizacin flexible, o la produccin masiva, de
productos diferenciados. Esto estara condicionado a la emergencia de nuevas formas institucionales y a
un profundo cambio de la relacin salarial.
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El ejemplo tpico de la PM est dado por la empresa japonesa TOYOTA, como resultado de la
aplicacin de los conocimientos y experiencias de un especialista en organizacin del trabajo llamado
Ohno. Un nuevo debate sobre la organizacin de la produccin y del trabajo se ha instaurado
internacionalmente, pero esta vez la diferencia consiste en que intervienen muy activamente las
organizaciones sindicales ms dinmicas, especialmente la DGB alemana y, sin dudas por influencia de la
IGMetal, la FITIM (Federacin Internacional de Trabajadores de la Industria Metalrgica y Mecnica).
En el seno del GERPISA se han formulado tres hiptesis respecto de la significacin del toyotismo
respecto del anterior modelo productivo. Para algunos investigadores, el toyotismo no sera sino una
variante del fordismo. Para otros, el toyotismo sera una concrecin de la estrategia inicial de Henry Ford
(paternalismo, bsqueda de integracin de los asalariados, estabilizacin de la mano de obra mediante
altos salarios que se indexaban segn los resultados). Finalmente, segn otra interpretacin, el toyotismo
nacera de una hibridacin del fordismo, que se fue adaptando a los cambios de la economa japonesa y
dio lugar a modelos productivos originales.
Las caractersticas esenciales del modelo productivo PM son las siguientes:
1. La produccin es flexible, en cuanto a cantidades y a variedad de modelos, pero esta
caracterstica no est basada en la automatizacin micro-electrnica sino en otra modalidad de
organizacin del trabajo y de la produccin. Las empresas deben estar en condiciones de reaccionar frente
a un contexto dominado por la incertidumbre y responder a la demanda de diferenciacin de los
productos.
La mayor productividad se busca ahora por intermedio de un trabajo ms cooperativo de los
trabajadores dentro de los equipos de trabajo y con una mejor utilizacin de las maquinarias y equipos
gracias a los sistemas de trabajo just-in-time.
2. La PM se caracteriza por una organizacin interna de la produccin y del trabajo de tipo
eminentemente cooperativa y descentralizada, reduciendo al mnimo la burocracia y el trabajo
indirecto.
3. El proceso de produccin est organizado segn las tcnicas del KAIZEN, es decir procurando
introducir permanentemente pequeas innovaciones que lo perfeccionen. Con los mtodos Kaizen se
busca producir con cero error o defectos, a fin de reducir los costos y ser ms competitivos. Para ello se
recurre a las tcnicas estadsticas implementadas a travs del TQC (Control Total de la Calidad) y a la
constitucin de los Crculos de Control de Calidad (CCC) para movilizar y aprovechar el saber
productivo, la motivacin y la creatividad de los trabajadores que estn ocupando puestos en las tareas
directamente productivas.
4. La PM implica la fuerte disminucin del trabajo indirecto dentro de los talleres y las oficinas
y su transferencia hacia la lnea de produccin para generar mayor valor agregado. De esta manera
se asigna a los productores directos la mayor cantidad posible de tareas y de responsabilidades, para
detectar inmediatamente los defectos de la produccin, buscar sus causas ltimas y remediarlas
colectivamente con el apoyo del equipo de trabajo. Los trabajadores deben devenir polivalentes y estar
calificados para resolver los problemas.
5. El trabajo de ensamblaje de la produccin se lleva a cabo en equipos compuestos por
trabajadores polivalentes (generalmente menos de 15 personas), que tiende a integrar la produccin
con la calidad, sistema denominado Chido-ka. Se trata de grupos flexibles y autogestionados de
trabajadores, cada uno de los cuales tiene un lder. Se promueve dentro de cada equipo una rotacin
peridica de tareas y se toman las decisiones colectivamente para mejorar el proceso productivo del cual
son totalmente responsables (Kaizen). El equipo de trabajo asume las tareas indirectamente productivas
ligadas a sus puestos de trabajo, como por ejemplo la puesta a punto de las mquinas y equipos, el
mantenimiento y las pequeas reparaciones, la gestin del stocks y el control de calidad. Dentro de los
equipos existe una gran autonoma de los trabajadores para tomar decisiones respecto de los problemas
emergentes a nivel del puesto de trabajo, por ejemplo interrumpir la marcha del proceso productivo
cuando ste marcha de manera ineficiente. Para promover la cooperacin entre sus miembros, estimular la
motivacin y brindar una mayor satisfaccin a los trabajadores, se reducen internamente las diferencias
salariales y el nmero de niveles de remuneracin. El monto de los salarios se ajusta finalmente a los
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resultados econmicos de los equipos de trabajo y se relaciona directamente con los resultados de la
empresa. Cabe sealar que, en Japn, cuentan con equipos de trabajo casi el 70% de las empresas donde
hay lneas de montaje.
6. La produccin dentro de la empresa y de las secciones se organiza siguiendo los mtodos del
tipo Just-in-Time (interno) para hacer una economa del tiempo de trabajo, utilizar ms intensamente
las maquinarias y equipos, reducir los costos de capital generados por la constitucin de excesivos stocks
de materias primas, insumos intermedios y de productos terminados, as como por los retrasos en la
produccin y en las cobranzas a los clientes. El Just-in-Time implica esencialmente que no se debe
comenzar a producir un bien, o a prestar un servicio, si antes no est vendido o comprometida su venta.
7. En la PM se establecen estrechas relaciones simbiticas y de cooperacin de las grandes
empresas con las firmas subcontratistas, las cuales reciben permanentemente asesoramiento, ayuda
tcnica, prstamos de maquinarias y equipos por parte de las empresa ensambladoras. Se busca
progresivamente el agrupamiento, la coordinacin y la integracin de los subcontratistas, segn sus
funciones y piezas o partes que deben proveer, para que la empresa ensambladora no tenga que tratar cada
vez con mltiples subcontratistas. Los mtodos Just-in-Time (en este caso seran externos) se aplican
tambin a las relaciones de las empresas con los proveedores y subcontratistas, para ajustar la demanda
da a da y evitar la constitucin de excesivos stocks.
8. Con la PM se procura establecer una ingeniera simultnea, es decir, un proceso de trabajo
cooperativo continuo e integrado, de varios departamentos de la empresa, desde la concepcin y el diseo
del producto hasta la produccin y comercializacin del mismo. De esta manera se reduce sensiblemente
el tiempo que transcurre entre el momento de agotamiento del ciclo de vida de un producto y el comienzo
de la fabricacin del que lo va a reemplazar.
9. Todos los trabajadores deben prestar atencin y hacer un seguimiento constante del cliente
interno (es decir, las otras secciones de la empresa que requieren su intervencin especfica, sistema
ms conocido con el nombre de Kanban) y del cliente externo, procurando su continua fidelidad a
la marca de fbrica, dado que la PM busca la responsabilizacin de los trabajadores con respecto a todos
los problemas, desde la produccin hasta la comercializacin.
10. Las empresas que estn organizadas segn el sistema de PM deben dedicar un monto
considerable de tiempo y recursos para hacer una severa seleccin del personal antes del
reclutamiento, utilizando varias series de tests sobre un conjunto elevado de postulantes, y luego
mejorar permanentemente la informacin y calificacin profesional de sus trabajadores. La
seleccin tiene en cuenta no tanto el nivel educativo y de formacin profesional alcanzado, como la
capacidad y habilidad para resolver problemas. Como resultado inevitable de esto, cada vez se necesitan
menos trabajadores indirectos en el taller.
11. Al interior de las empresas las escalas jerrquicas entre las gerencias y los productores
directos se comprimen, las clasificaciones de puestos se hacen ms simples y su nmero disminuye y
desaparecen las divisiones rgidas entre los puestos de trabajo.
12. Dentro de los equipos organizados segn las PM, el trabajo humano es sin dudas ms
confiable y eficaz que antes, pero al mismo tiempo mucho ms intenso y prolongado. Las causas ms
importantes de que, en comparacin con otros pases, haya una mayor implicacin de los trabajadores en
la marcha de las empresas japonesas, motivacin que es la clave del relativo xito del modelo, se debe a:
la creacin de una cultura de empresa, que lo estimula a trabajar de manera eficaz, la descentralizacin
de la autoridad y de la responsabilidad desde la gerencia hacia el equipo de trabajo y el trabajador en su
puesto de labor, que disminuye el trabajo indirecto, la mayor calificacin profesional que se requiere para
ser reclutado, garanta de lograr una elevada productividad y mayor calidad, la reducida divisin social y
tcnica del trabajo, que estimula su creatividad, una participacin en los mayores beneficios empresarios
logrados, la estabilidad y seguridad en el empleo, aunque para ello se deba cambiar frecuente y
sistemticamente de puesto de trabajo y al riguroso proceso de seleccin, a la formacin profesional
permanente y al sistema de empleo de por vida predominante todava en las grandes empresas, que
contribuyen a integrar e identificar el trabajador con su empresa.
61
13. En el caso del Japn, este sistema de organizacin del trabajo y de la produccin se basa en
una relacin salarial especfica, cuyos trazos caractersticos en las grandes y medianas empresas son:
a) el predominio de trabajo a tiempo completo, con contratos de duracin indeterminada en una
misma empresa, llamados comnmente vitalicio en los pases occidentales.
b) Debido al elevado costo de la vida, los trabajadores buscan arduamente su promocin, que se logra
por medio de su lealtad e integracin a la empresa, o sea aceptando una cierta forma de coercin. Eso da
lugar a un sistema de evaluacin-promocin segn el mrito, a cargo del superior jerrquico, denominado
satei. Los rubros que comprende dicha evaluacin son los siguientes: el nmero de sugestiones para
mejorar la produccin; el control de s mismo y de sus emociones; la sumisin y obediencia al superior; el
respeto de la disciplina del trabajo; la cooperacin con los dems trabajadores y su desapego al propio
juicio y a sus intereses particulares dentro de los crculos de calidad; la actitud para lograr la excelencia y
altos rendimientos en el trabajo. Este sistema -ms que la dimensin cultural y religiosa predominantesexplica en buena medida la intensidad del trabajo, la prolongacin de la jornada, las enfermedades
profesionales provocadas por la fatiga y la sobrecarga de trabajo (o surmenage, denominado karoshi), el
escaso ausentismo, y la ausencia o rara frecuencia de conflictos laborales.
c) El sistema escolar constituye un importante antecedente y el trabajo asalariado es de alguna
manera su continuacin: la educacin es extremadamente exigente y minuciosa, predomina el trabajo en
equipos bajo la direccin de uno de los alumnos, los horarios de clase son prolongadas y el trabajo
contina en el hogar y en los cursos vespertinos obligatorios; en sus tareas escolares los alumnos son
controlados de manera permanente y consecutivamente por los maestros y sus padres, y existe un nmero
considerable de controles peridicos, de una gran severidad.
d) la estructura de los salarios mensuales est compuesta por:
1) un salario de base, que en promedio es el 70 u 80% del salario mensual, que constituye la parte
mayoritaria, y tiene en cuenta la persona del trabajador: el diploma y la antigedad en la empresa. Otra
parte depende de la funcin ocupada, de su experiencia y competencias. Finalmente las primas ordinarias
o salario indirecto (asignaciones familiares, alojamiento)
2) un salario extra (aproximadamente el 20 o 3O% del salario mensual) en compensacin por horas
extraordinarias, las primas por trabajo nocturno y trabajo por turnos y las asignaciones familiares.
3) una prima anual consistente en varios salarios mensuales adicionales, pagados en dos veces y que
tambin es el resultado del proceso de evaluacin segn el mrito y la dedicacin a la empresa, cuyos
montos son diferentes para cada trabajador.
4) La prima al terminar la vida activa en la empresa, para jubilarse, que es funcin de la
antigedad en la firma y del ltimo grado que tena (resultado del satei).
e) Pero tambin es cierto que la duracin anual efectiva de das y de horas de trabajo en Japn
es muy superior a la vigente en otros pases industrializados, debido a la larga duracin de la jornada,
las horas extras, el bajo ausentismo, y los pocos das de vacaciones que se toman los empleados.
f) el movimiento sindical que fue muy combativo luego de la Segunda Guerra Mundial, es
actualmente poco reivindicativo y juega un papel muy discreto, cooperativo y sumiso dentro de la
empresa actuando segn los reglamentos y sin cuestionar la forma de gestin de la fuerza de trabajo.
14. La PM no deja de tener problemas que pueden agravarse en caso de crisis. Al caer la
demanda de automviles y disminuir las economas de escala, para evitar mayores costos, se ha reducido
el nmero de modelos; se ha generado una creciente insatisfaccin de los trabajadores frente a la
intensificacin del trabajo y al deterioro de las condiciones y medio ambiente de trabajo; en un contexto
de quasi-pleno empleo, los jvenes rechazan el elevado nmero de horas de trabajo; se va abandonando el
objetivo inalcanzable del cero defecto aceptando formalmente la existencia de un cierto nmero; los
problemas del trnsito y embotellamientos han llevado a incrementar el margen mnimo del stock
preventivo de seguridad, alejndose del justo a tiempo externo y del stock cero, que eran los
objetivos iniciales. An no se ha integrado en sus objetivos productivos la preservacin del medio
62
ambiente, y la difusin e imitacin del modelo en los pases occidentales amenaza la posicin del Japn
en el comercio internacional.
Incluso dentro del sistema productivo japons, y ms especficamente en la industria automotriz, se
dieron variantes de la Produccin Magra, modelos productivos que R. Boyer y M. Freyssenet han
caracterizado de la siguiente manera:
a) Sloanista: las empresas que, siguiendo el modelo de la General Motors, buscan optimizar los
efectos de volumen (obteniendo rendimientos de escala) y de diversidad, orientando la produccin hacia
el comercio exterior, pero dando poca importancia a la innovacin y a la calidad;
b) Toyotista: empresas que, inspiradas en el modelo productivo ideado por Ohno, buscan reducir los
costos unitarios, actuando al mismo tiempo para aumentar el volumen, ampliar la gama de variedades,
mejorar la calidad y flexibilizar la produccin, con el costo social que significa la intensificacin del
trabajo;
c) Hondismo, firmas que, siguiendo la experiencia de la empresa Honda, buscan la introduccin de
grandes innovaciones tecnolgicas junto con la flexibilidad productiva, buscando ocupar nuevos
mercados y obtener rentas tecnolgicas.
Pero no hay que olvidar que el nuevo paradigma emergente en Japn en la postguerra, que a
posteriori de su xito se presenta como algo coherente, fue en primera instancia el resultado de mltiples
ensayos y pruebas a lo largo de varias dcadas, luego de haber fracasado en la aplicacin sistemtica del
fordismo.
Conclusiones
El anlisis de las diversas alternativas que se proponen sustituir al taylorismo y al fordismo como
paradigmas o modelos productivos, muestra que las mismas no estn exentas de contradicciones que las
limitan.
Puede constatarse que a mediano plazo, las medidas de polticas neoliberales que pusieron el acento
en la flexibilidad laboral defensiva (desregulacin social, estmulo de la competencia en el mercado de
trabajo), y en la reduccin de los costos salariales directos e indirectos, no han dado buenos resultados
macroeconmicos, como lo demuestran los sistemas productivos norteamericanos e ingleses.
La bsqueda de la flexibilidad productiva utilizando el progreso en cuanto a la informtica y las
telecomunicaciones por parte de las pequeas y medianas empresas, est condicionado al otorgamiento de
mayores recursos y la realizacin de grandes esfuerzos en cuanto a investigacin y desarrollo y al acceso
en su proximidad a adecuadas infraestructuras en materia de transporte, vas de comunicacin, fuentes de
energa, telecomunicaciones, servicios sociales, etc. Con frecuencia, la especializacin flexible de la
produccin se da conjuntamente con el crecimiento de las indivisibilidades, dado que las diversas
modalidades de equipos productivos basados en la robtica y la burtica tambin encuentran sus lmites
para diversificar la produccin pues se necesitan grandes inversiones, y requieren un esfuerzo sostenido
de formacin profesional polivalente y de aprendizaje durante largo tiempo.
En el medio empresarial y gubernamental predomina la idea de que la crisis fue provocada por una
excesiva monopolizacin de la economa y en consecuencia se debe volver a instaurar una mayor
competencia sobre todos los mercados, incluso el de trabajo. El cambio que se busca del modelo de
industrializacin anterior significa la descentralizacin y la consolidacin de las pequeas y medianas
empresas, pero contradictoriamente puede a su vez provocar otra modificacin en las formas
institucionales, que a mediano plazo pueden dar lugar a un fortalecimiento de las grandes empresas y a
que en vez de dejar librado cotidianamente al mercado la complementariedad entre las empresas
contratantes y subcontratistas, se establezcan formas novedosas de subcontratacin-contractualizada
con un horizonte temporal de mediano plazo. Por otra parte, la contradiccin establecida entre las
intervenciones del Estado productor y la lucha entre empresas podra ser resuelta mediante el desarrollo
de formas intermediarias articulando el inters pblico con el privado, los aspectos econmicos con los
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sociales, como parece ser la va escogida por varios pases que han salido ms rpido y exitosamente de la
crisis.
La crisis econmica y nuevas teoras econmicas han promovido una mayor articulacin entre los
intereses de los empresarios y del gobierno, para la generacin, o la imitacin, y difusin de numerosas
innovaciones tecnolgicas y organizacionales que procuran transformar las formas institucionales -y en
primer lugar la relacin salarial-, para construir un nuevo modo de regulacin que restablezca las
regularidades econmicas propias de un nuevo rgimen de acumulacin del capital.
Se puede hacer la hiptesis de que, como consecuencia de la mundializacin de la economa, del
peso creciente de las IED que vienen de la mano de las ETN, del incremento de la competencia y de una
insercin ms neta dentro de la nueva divisin internacional del trabajo, las formas innovantes de
organizar la produccin y el trabajo que se hayan manifestado como exitosas en otros pases, sern
conocidas y comenzarn a penetrar aunque sea de manera heterognea en las empresas de los pases en
vas de desarrollo que estn ms abiertas a la competencia internacional, son de mayor talla y dinamismo.
Pero al mismo tiempo se puede postular tambin que el tiempo requerido para la consolidacin,
difusin y adaptacin de los modelos productivos y procesos de trabajo a escala internacional es muy
variable segn los pases, ya que la transicin y la transferencia de una a otra sociedad no son
instantneas. Dentro de dichos pases, las innovaciones generadas o implantadas en su seno por las
grandes y medianas empresas se transfieren luego dentro de un sector o de las ramas de actividad, en
virtud de las relaciones establecidas con las proveedoras, subcontratistas, licenciatarias y por imitacin
debido al efecto demostracin. Pero la difusin no se hace de manera rpida, automtica y
generalizada: est condicionada por la capacidad empresarial, la formacin profesional de los agentes
econmicos y el proceso de aprendizaje y adaptacin de las nuevas tecnologas.
La transicin generalizada desde el modelo fordista en su versin norteamericana tradicional, a un
nuevo paradigma productivo -representado por las experiencias japonesas, alemanas y/o suecas-, no es
nada fcil ni puede hacerse rpidamente dadas las diferencias en cuanto a la organizacin de la
produccin y del trabajo, los sistemas de relaciones de trabajo, la relacin salarial, y los modos de gestin
empresarial que se deben instaurar para hacer frente a la incertidumbre en cuanto a la demanda,
incorporar innovaciones y producir con calidad productos diferenciados y con bajos costos unitarios.
Esa transicin puede seguir diversos caminos, por ejemplo alguno de los siguientes:
1) dejar librado el proceso a la sola iniciativa de los empresarios, que haran jugar la competencia
internacional para atraer capitales, innovaciones tecnolgica y organizacionales y mano de obra
calificada; pero este proceso puede bloquearse a causa de la persistencia de las viejas formas de
organizacin;
2) intentar copiar fielmente el modelo productivo considerado como el ms exitoso, ya sea de manera
parcial o total;
3) la hibridacin, combinando formas de organizacin, instituciones, reglas y comportamientos
propios de esos modelos para adaptarlos y hacerlos compatibles con los que predominan en el pas en
cuestin. No se trata de una simple mezcla, sino que es el resultado de una verdadera transformacin,
cuyos resultados pueden ser incluso superiores a los del modelo inspirador.
4) apoyarse en los valores, formas institucionales y regularidades econmicas propios del pas para
construir un modelo productivo nacional que pueda ser ms eficaz que su predecesor para incrementar
la productividad, ampliar la gama de variedades y mejorar la calidad; y finalmente;
Los cuatro grupos de alternativas al modelo neo-liberal que enunciamos muy suscintamente, no
agotan el nmero de las posibles. Pueden inspirar a los responsables de la poltica econmica y a los
interlocutores sociales que se proponen construir un nuevo rgimen de acumulacin a fin de salir airosos
u honorablemente de la crisis. Los mismos tienen en comn el acento puesto en el rol protagnico de las
innovaciones tecnolgicas y organizacionales, en los nuevos modos de organizacin y de gestin de la
fuerza de trabajo y en el rechazo a cualquier tipo de determinismo. Esto significa, en otras palabras, que
para innovar en los productos, ofrecer una mayor variedad de los ya existentes, incrementar la
productividad, mejorar la calidad y cumplir estrictamente los plazos de entrega, la restriccin ms
importante no es la escasez del capital para invertir en nuevas tecnologas informatizadas.
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Entre las principales condiciones que deben darse para que tengan xito los modelos productivos
alternativos al neo-liberal, se encuentran las siguientes:
- el esfuerzo pblico y privado en materia de educacin, de investigacin y desarrollo y de
modernizacin de las infraestructuras econmicas y sociales, para asegurar el buen funcionamiento y
la expansin de los mercados;
- la coordinacin y el complemento de esfuerzos entre el sector pblico, las instancias regionales,
locales y empresarias para la educacin y formacin permanente de todos los asalariados y personal
de direccin, la reconversin profesional y el aprendizaje para operar con las nuevas tecnologas;
- el paso de la produccin masiva de series largas de productos homogneos a la produccin
diferenciada de series cortas de productos heterogneos, introduciendo innovaciones organizacionales
y sirvindose de la especializacin flexible de la produccin para adaptarla rpidamente a los
cambios en el volumen y contenido de la demanda;
- la adopcin de una estructura organizativa por parte de las firmas que sea ms chata, horizontal y
comunicante, para crear las condiciones que hagan posible un trabajo ms coordinado y cooperativo y
socializar los conocimientos y progresos en el aprendizaje de todos los miembros de la empresa;
- la promocin del trabajo conjunto y cooperativo entre los diversos departamentos de la empresa
instaurando la ingeniera simultnea, superando la extrema divisin social y tcnica del trabajo y la
organizacin piramidal y jerrquica, que es fuente de retrasos, ineficacia y altos costos;
- el establecimiento de relaciones leales de las grandes empresas con los proveedores y
subcontratistas, basadas en la confianza mutua, estables y contractualizadas;
- la promocin de la polivalencia en materia de calificaciones, de la flexibilidad cualitativa interna y
de la movilidad del personal entre secciones y puestos;
- el desarrollo del trabajo en equipos, siempre que sea posible;
- la descentralizacin del poder, -y consiguientemente de las responsabilidades-, de la direccin hacia
los operadores que operan en el taller, para tomar decisiones con el fin de asegurar la produccin con
calidad, perfeccionar los procesos y productos y hacer frente a los incidentes a nivel del puesto de
trabajo;
- la reduccin del nmero de mandos medios y de trabajadores indirectos de supervisin y
mantenimiento, y dar ms importancia al trabajo directo dentro de las empresas, con el objeto de
mejorar el clima laboral, bajar los costos de control y aumentar la calidad y el valor agregado;
- la aplicacin de tcnicas de produccin justo a tiempo, en funcin de la demanda y hacerlo en el
momento ms oportuno, reduciendo el stocks de insumos y de productos elaborados;
- la bsqueda de la implicacin o involucramiento de los trabajadores con el fin de que participen
permanentemente para mejorar y hacer ms eficaz el proceso productivo (en materia de
productividad, calidad, costos, plazos de entrega y cuidado de los medios de produccin);
- y como contrapartida negociada de estos compromisos, hacer partcipes a los trabajadores de los
frutos econmicos de la expansin empresaria lograda con el aporte de sus esfuerzos, preservando la
estabilidad en el empleo incluso en coyunturas depresivas, ofrecindoles posibilidades de formacin
y de promocin segn el mrito y experiencia acumuladas, mejorando las condiciones y medio
ambiente de trabajo y aumentando sus remuneraciones de acuerdo con los resultados obtenidos. 6
Esto significa que con la emergencia de un nuevo modo de desarrollo, la viabilidad y el xito de la
articulacin entre el rgimen de acumulacin del capital y el modo de regulacin posteriores al fordismo,
dependen en gran medida de:
a) la introduccin del cambio tecnolgico por parte del empresario y del proceso de aprendizaje para
construir rutinas productivas (en el modelo evolucionista),
b) la incorporacin, de innovaciones tecnolgicas y organizacionales por parte de pequeas y
medianas empresas que interactan conformando redes a nivel regional o local, comprometiendo a todo el
colectivo de trabajo (en el modelo de especializacin flexible),
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Neffa Julio Csar: Transformaciones del proceso de trabajo y de la relacin salarial en el marco
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los prrafos, sigue el texto preparado por Franois, Vatin).
Womack, James, Jones, Daniel and Roos, Daniel: The Machine that Changed the World, New
York, Rawson ass, 1990.
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Notas
Licenciado en Economa Poltica (UBA), Doctor en Ciencias Sociales del Trabajo (especialidad
Economa) de la Univ. de Pars I. Investigador Cientfico del Centre National de la Recherche
Scientifique (CNRS) de Francia y del CONICET de Argentina. Director del del Centro de Estudios e
Investigaciones Laborales (CEIL) y del Programa de Investigaciones Econmicas sobre Tecnologa,
Trabajo y Empleo (PIETTE) del CONICET. Profesor de las Facultades de Ciencias Econmicas de la
Universidad Nacional de La Plata y de la UBA y docente en el Institut des Hautes Etudes de l
Amrique Latine, de la Univ. de Paris III. Director y docente del Programa de Posgrado en Ciencias
Sociales del Trabajo de la UBA. Es autor de varios libros y publicaciones sobre temas de Economa
del Trabajo y del Empleo, Procesos y Organizacin del Trabajo, Condiciones y Medio Ambiente de
Trabajo, Relaciones de Trabajo, Teora de la Regulacin, Economa del Desarrollo y Economa de las
Innovaciones Cientficas y Tecnolgicas.
Correo electrnico: [email protected]
2 Las reflexiones presentadas en este trabajo son el resultado de una serie de investigaciones que se
llevan a cabo por parte de un equipo pluridisciplinario, desde hace varios aos, en el Programa de
Investigaciones Econmicas sobre Tecnologa, Trabajo y Empleo (PIETTE) y en el Centro de
Estudios e Investigaciones Laborales (CEIL) del CONICET, con apoyo de PID de las Universidades
de La Plata y Buenos Aires y de un PICT de la ANPCyT de la SECYT.
3 Los economistas que ms han analizado esta problemtica pertenecen a la escuela evolucionista.
Schumpeter, Joseph: Thorie de l volution conomique, Dalloz, Paris, 1935; Boyer, Robert: Les
alternatives au fordisme. Des annes 1980 au XXime sicle. CEPREMAP, Rono, Fevrier 1991;
Gordon, David: Kaldors macrosystem: Too much Acumulation, too little Disaccumulation, en:
E. Nell, W. Semmler (Eds.): Nicholas Kaldor and Mainstream Economics: Confrontation or
Convergence? MacMillan, Londres, 1989.
4 Los radicals americanos y los regulacionistas son quienes ms han estudiado el tema. Bowles S,
Gordon D, and Weisskopf, Th.: Leconomie du gaspillage, La Dcouverte, Pars, 1986. Boyer,
Robert: Les alternatives au fordisme. Des annes 1980 au XXime sicle. CEPREMAP, Rono,
Fevrier 1991. Coriat, Benjamin: Latelier et le chronomtre, Christian Bourgeois, Paris 1982. Hay
traduccin castellana, Ed. Siglo XXI, Mxico 1987. Coriat, Benjamin: Latelier et le robot,
Christian Bourgeois, Paris 1990. Hay traduccin castellana, Ed. Siglo XXI, Mxico 1992. Coriat,
Benjamin: Penser lenvers, Travail et organisation dans lentreprise japonaise, Ed. Christian
Bourgeois, Editeur, Pars, 1991. Hay traduccin castellana. Ed. Siglo XXI, Mxico 1993. Sundqvist:
New technologies in the 1990s. A socio-economic strategy. Informe preparado para la OCDE,
Pars, 1989.
5 Para la especializacin flexible y los distritos industriales conviene referirse a los autores
siguientes. Bagnasco A.: Dveloppement rgional, societ locale et conomie diffuse, en Maruani
E., Reynaud et Romani Cl.: La flexibilit en Italie, MIRE SYROS, Alternative, Pars, 1989. Boyer,
Robert: Les alternatives au fordisme. Des annes 1980 au XXime sicle. CEPREMAP, Rono,
Fevrier 1991; Brusco S.: The idea of the industrial district: its genesis. in: Industrial district
interfirm cooperation in Italy, Eds. PYKE, BECATTINI et SENGENBERGER, IIEL, Ginebra, 1990.
Marshall, Alfred: Principes of Economics, London, Macmillan, 1890. Marshall Alfred: Lindustrie
et le commerce, Ed. Marcel Giard, Pars 1934. Piore M. et Sabel Ch.: Les chemins de la
prosperit, Hachette, Pars, 1988. Williamson O.E. Markets and Hierarchies: Analysis and
Antitrust.
6 Las ideas sobre la produccin magra fueron sistematizadas a partir de los siguientes autores:
Aoki, M.: A new paradigm of work organisation: the japanese experience, Working Paper,
WIDER, N 36, February, 1988. Aoki, M: Toward and Economic Model of the Japanese Firm,
Journal of Economic Literature, Vol. XXVIII, March 1990. Boyer Robert: Les alternatives au
fordisme. Des annes 1980 au XXI sicle, in: Benko et Lipietz A.: Les rgions qui gagnent!
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Districts et rseaux: les nouveaux paradigmes de la gpolitique, PUF, Pars, 1991. Coriat,
Benjamin: Penser lenvers, Travail et organisation dans lentreprise japonaise, Ed. Christian
Bourgeois, Editeur, Pars, 1991. Hay traduccin castellana. Ed. Siglo XXI, Mxico 1993. Di Martino,
L. A.: The crisis of fordism and the japanese mode of regulation, OSAKA City University, WP,
December 1989. Jacot J. H.: Du fordisme au toyotisme? les voies de la modernizsation du
systme Automobile en France et au Japon. Etudes et Recherches N 7-8, Commissariat Gneral
au Plan, La Documentation Franaise, 1990. Muller, Hans Erich: Lean production; mythe, vises
et ralite, Ed. Hans Bockler Stiftung, Dusseldorf, 1992. Ohno, T: Lesprit Toyota, Masson, Pars,
1989. Roth, Siegfried, IG Metall: After Japan, ou comment trouver sa propre voie?, Ed.
Friedrich Ebert Stiftung, Pars, 1992. Sengenberger, Werner: Lean Production: the way of working
and producing in the future?, New Industrial Organisation Programme, IIEL de la OIT, Ginebra,
1992. Paper N 1. Shingo S.: Maitrisse de la Production et Mthode Kanban. Le cas Totyota, Les
Editions de l Organisation, Pars, 1983. Womack, James, Jones, Daniel and Roos, Daniel: The
Machine that Changed the World, New York, Rawson ass. 1990.
7 Un desarrollo de las estrategias sindicales como consecuencia del cambio de paradigma productivo
puede verse en: Neffa Julio Csar: Transformaciones del proceso de trabajo y de la relacin
salarial en el marco de un nuevo paradigma productivo. Sus repercusiones sobre la accin
sindical. Contribucin presentada al Coloquio de Jalapa, Mxico, Mimeografiado, Buenos Aires,
1992.
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