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La Naturaleza Es Un Campo de Batalla

sobre la filosofía de la naturaleza

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RAZMIG KEUCHEYAN LA NATURALEZA ES UN CAMPO DE BATALLA ENSAYO DE ECOLOGIA POLITICA Gi] Clave intelectual INTRODUCCION Enelotofio de 1982, te de Carolina del Norte, se mi instalacién de una descarga 1978, una empr xdo de Warren, en el nordes sels semanas contra la cos." Cuatro a 3s antes, e \dustriales habia depositado 3s policlorados formadores eléctricos Carolina del Norte decii6 gestién de des ylapintura, Una vez descu adquitir un terreno para sep ‘mente se opt6 por un terreno en las proxin Los residentes del cunstancias, se of PCB es una sustat objeto de impedir que gar, como debido a q este tipo de cit su salud, ya que e! nds tarde, el trib TING KEUCHEVAN ‘omienzo, los argumentos que expresaban los manifestantes contra la descarga se relacionaban con la contaminacién del medio ambiente (agua, suelos) por el PCB y con los riesgos que presenta para la salud. Sin embargo, a medida que el movimiento se fue ampliando y se volvié més politico, esos argumentos cambiaron de nat el Estado escogié sepul ban los resi sobre todo negros pobres. Ei descarga tiene un fundamento racista. En la época, condado de Warren esta compuesto en un 64% de negros. La regién inmediata- mente préxima a la descarga por un 75%. Los manifestantes sefialaban que esa injusticia en la ubicacién de los desechos téxicas ocurria no jo ambiente y de los recursos, el Estado favorece sistematica- mente a las poblaciones blancas y a las clases medias y superiores, 2 las que preserva de este tipo de perjuicios. & la inversa, las minorias, (0 sea, no solamente los negros sino también los amerindios, los hispa- nos y los asiéticos, asi como los pobres, asumen la mayor parte de las actualidad se comprueba que las multas p desechos en los Estados Unidos son cinco veces més frecuentes cuan- do los hechos ocurren en las cercanias de barrios blancos que de barrios nnegros o hispanos.® Esta discriminacién racial no es por fuerza inten- clonal por parte de los poderes publicos, aunque a menudo lo es. Es sistémica, vale decir, que procede de una légica en parte independien- te de la voluntad de los individuos. Lo que permitié que el movimiento del condado de Warren tomara amplitud, pues, fue su capacidad para montarlo en una generalidad, para “enganchar” una relvindicacién local en una injust Este episodio ‘obra: la naturaleza es un campo de bal LU\NATURALEZA ES UN CAMPO DE BATALLA ~y seré cada vez mas en el porvenir, a medida que se profundice la cr gentes: movimientos sociales, Estados, mercados financieros, ‘companias de segutos, organizaciones En el caso del condado de Warren, el cont ia par- des, Este enfoque de la crisis ecolégica lleva la contraria una opinion dominante en la actualidad. Un consenso bien instalado sostiene que, con el objeto de regular el problema del cambio ambiental, la humanidad setenta de la idea de que la oposicién entre da y la derecha es caduca o secundaria. También es promovido, en Francia, por personali- ddades de la “sociedad civil” como Yann Arthus-Bertrand 0 Nicolas Hulot*, de quienes existen equivalentes en la mayoria de los paises. El “pacto ecolégico” propuesto por Nicolas Hulot, firmado por un gran numero de candidatos a la eleccién presidencial de 2007, asi como por miles de ciudadanos, es tipico de esta concepcién de la ecologia.® Las lamenta ciones que acompafian el fracaso recurrente de las negociaciones nnacionales sobve el clima las de Copenhague y Rio son las ms tes- tienen a ese consenso como telén de fondo. Ellas estigmatizan la incapacidad de los Estados para reunirse finalmente alrededor de obje- tivos ambientales comunes. De este consenso ecolégico existen versiones sofisticadas. Dipesh Chakrabarty, uno de los principales teéricos del poscolonialismo, autor del clasico Provincializing Europe,* publicé recientemente un texto titu-

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