Texto del Tratado Secreto de Alianza Defensiva celebrado el 6 de febrero de
1873 entre la Repblica del Per y la de Bolivia (Aranda 1890, 441-443). Fue
firmado en Lima por el Ministro de Relaciones Exteriores del Per, Jos de la
Riva-Agero y Looz Corswarem, y Juan de la Cruz Benavente, Enviado
Extraordinario y Ministro Plenipotenciario de Bolivia en nuestro pas.
Aprobado por el Congreso peruano el 22 de abril de 1873, el canje de los
instrumentos de ratificacin se realiz en La Paz el 16 de junio de 1873. Entr
en vigencia el primero de julio de 1873.
En el artculo sobre El Tratado de Alianza Ofensiva y Defensiva entre Per y
Chile (1865) se examinaron las caractersticas principales de los convenios
ofensivos y defensivos en Amrica del Sur en la segunda mitad del siglo XIX.
Tomando como ejemplo el Tratado de 1865 de Alianza entre Per y Chile, se
precis que en estas convenciones de lo que se trataba era de repeler y batir
militarmente al enemigo, prescindiendo de la conciliacin, la negociacin
diplomtica y el arbitraje por terceras potencias.
Nuevamente hoy podr apreciarse la diferencia entre un convenio de
Alianza Ofensiva y Defensiva y, en este caso, el Tratado de Alianza Defensiva
entre Per y Bolivia de 1873 usado como pretexto por Chile para declarar la
guerra al Per.
1. Los Artculos I y II del Tratado de Alianza entre Per y Bolivia
establecieron que ambas naciones buscaban defenderse de la
agresin externa y garantizarse mutuamente su independencia, su
soberana y la integridad de sus territorios.
El Tratado no fue firmado para poner en ejecucin
intenciones expansionistas (inexistentes) contra Chile. Es faltar burdamente a la
verdad afirmar que el Convenio de 1873 tena un carcter ofensivo contra la
nacin del sur. El convenio no fund una coalicin para atacar a ese pas, a Brasil,
Colombia, o a Ecuador. Per y Bolivia nunca aspiraron a apoderarse del cobre
chileno, ni de Valparaso, Santiago o Concepcin. Nada de eso.
El Tratado de 1873 especific que su objeto era asegurar la independencia,
soberana e integridad terrritorial de Per y Bolivia, en contra de las pretensiones
de rapia territorial de cualquier otra potencia.
La convencin tuvo, como lo indica su nombre, un carcter estrictamente
defensivo. Slo se hara efectiva en caso que cualquiera de los dos pases fuera
agredido y siempre que se cuente con la aprobacin del gobierno de la nacin no
atacada (Artculo III).
2. El Artculo VIII del Tratado puso en evidencia la confianza del Per
en la conciliacin, la diplomacia y el arbitraje como medios de
resolucin de conflictos.
En cumplimiento del primer inciso de dicho artculo, ambas naciones se
obligaron a emplear con preferencia, siempre que sea posible, todos los medios
conciliatorios para evitar un rompimiento o para terminar la guerra, aunque el
rompimiento haya tenido lugar, reputando entre ellos, como el ms efectivo, el
arbitraje de una tercera potencia.
El Artculo VIII del Tratado Secreto evidencia la confianza que tena el Per, en
1873, respecto a la eficacia de la conciliacin, la negociacin diplomtica y el
arbitraje para enfrentar las discordias internacionales.
Meras ilusiones, mis estimados, cuando detrs de esos planteamientos de
racionalidad, justicia y buena voluntad no existe liderazgo ni fuerzas armadas que
puedan hacer respetar exitosa, eficaz y eficientemente a nuestro pas. Diplomacia
sin fuerzas armadas de respaldo es suicidio. As sucedi en 1879; en situacin
anloga nos encontramos hoy, a la espera del fallo de La Haya.
TRATADO DE ALIANZA DEFENSIVA
(Aranda 1890, II: 441-443)
Las Repblicas de Bolivia y del Per, deseosas de estrechar de una manera solemne los
vnculos que las unen, aumentando as su fuerza y garantizndose recprocamente ciertos
derechos, estipulan el presente Tratado de Alianza defensiva; con cuyo objeto, el Presidente
de Bolivia ha conferido facultades bastantes para tal negociacin a Juan de la Cruz
Benavente, Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario en el Per, y el Presidente
del Per a Jos de la Riva-Agero, Ministro de Relaciones Exteriores; quienes han convenido
en las estipulaciones siguientes:
ARTCULO I.
Las altas partes contratantes se unen y ligan para garantizar mutuamente su
independencia, su soberana y la integridad de sus territorios respectivos,
obligndose en los trminos del presente Tratado a defenderse contra toda agresin
exterior, bien sea de otro u otros Estados independientes o de fuerza sin bandera que no
obedezcan a ningn poder reconocido.
ARTCULO II.
La Alianza ser efectiva para conservar los derechos expresados en el artculo
anterior, y en los casos de ofensa, que consistan:
1. En actos dirigidos a privar a alguna de las Altas Partes contratantes de una
porcin de su territorio, con nimo de apropiarse su dominio o de cederlo a otra
potencia.
2. En actos dirigidos a someter a cualquiera de las Altas Partes contratantes a
protectorado, venta o cesin de territorio, o a establecer sobre ella cualquiera
superioridad, derecho o preeminencia que menoscabe u ofenda el ejercicio
amplio y completo de su soberana e independencia.
3. En actos dirigidos a anular o variar la forma de Gobierno, la Constitucin poltica o las
leyes que las Altas Partes contratantes se han dado o se dieren en ejercicio de su soberana.
ARTCULO III.
Reconociendo ambas partes contratantes que todo acto legtimo de Alianza se
basa en la justicia, se establece para cada una de ellas, respectivamente, el
derecho de decidir si la ofensa recibida por la otra, est comprendida entre las
designadas en el artculo anterior.
ARTCULO IV.
Declarado el casus fderis, las Altas Partes contratantes se comprometen a cortar
inmediatamente sus relaciones con el Estado ofensor; a dar pasaporte a su Ministro
Diplomtico; a cancelar las patentes de los agentes consulares; a prohibir la importacin de
sus productos naturales e industriales, y a cerrar los puertos a sus naves.
ARTCULO V.
Nombrarn tambin las mismas partes Plenipotenciarios que ajusten, por protocolo, los
arreglos precisos para determinar los subsidios, los contingentes de fuerzas terrestres y
martimas, o los auxilios de cualquiera clase que deban procurarse a la Repblica ofendida o
agredida; la manera como las fuerzas deban obrar y realizarse los auxilios y todo lo dems
que convenga para el mejor xito de la defensa.
La reunin de los Plenipotenciarios se verificar en el lugar que designe la parte ofendida.
ARTCULO VI.
Las altas partes contratantes se obligan a suministrar a la que fuese ofendida o agredida, los
medios de defensa de que cada una de ellas juzgue poder disponer, aunque no hayan
precedido los arreglos que se prescriben en el artculo anterior, con tal que el caso fuere, a su
juicio, urgente.
ARTCULO VII.
Declarado el casus fderis, la parte ofendida no podr celebrar convenios de paz, de tregua
o armisticio, sin la concurrencia del aliado que ha tomado parte en la guerra.
ARTCULO VIII.
Las altas partes contratantes se obligan tambin:
1. A emplear con preferencia, siempre que sea posible, todos los medios
conciliatorios para evitar un rompimiento o para terminar la guerra, aunque el
rompimiento haya tenido lugar, reputando entre ellos, como el ms efectivo, el
arbitraje de una tercera potencia.
2. A no conceder ni aceptar de ninguna Nacin o Gobierno, protectorado o superioridad
que menoscabe su independencia o soberana, y a no ceder ni enajenar en favor de ninguna
Nacin o Gobierno parte alguna de sus territorios, excepto en los casos de mejor
demarcacin de lmites.
3. A no concluir Tratados de lmites o de otros arreglos territoriales, sin conocimiento previo
de la otra parte contratante.
ARTCULO IX.
Las estipulaciones del presente Tratado no se extienden a actos practicados por partidos
polticos o provenientes de conmociones interiores independientes de la intervencin de
Gobiernos extraos; pues teniendo el presente Tratado de Alianza por objeto principal la
garanta recproca de los derechos soberanos de ambas naciones, no debe interpretarse
ninguna de sus clusulas en oposicin con su fin primordial.
ARTCULO X.
Las Altas Partes contratantes solicitarn separada o colectivamente, cuando as lo declaren
oportuno por un acuerdo posterior, la adhesin de otro u otros Estados americanos al
presente Tratado de Alianza defensiva.
ARTCULO XI.
El presente Tratado se canjear en Lima o en La Paz, tan pronto como se obtenga su
perfeccin constitucional y quedar en plena vigencia a los veinte das despus del canje. Su
duracin ser por tiempo indefinido, reservndose cada una de las partes el derecho de darlo
por terminado cuando lo estime conveniente. En tal caso, notificar su resolucin a la otra
parte y el Tratado quedar sin efecto a los cuarenta meses despus de la fecha de la
notificacin.
En fe de lo cual, los Plenipotenciarios respectivos lo firmaron por duplicado y lo sellaron con
sus sellos particulares.
Hecho en Lima a los seis das del mes de febrero de mil ochocientos setenta y tres.
JOS DE LA RIVA AGERO JUAN DE LA CRUZ BENAVENTE
ARTCULO ADICIONAL.
El presente Tratado de Alianza defensiva entre Bolivia y el Per, se conservar secreto
mientras las dos Altas Partes contratantes, de comn acuerdo, no estimen necesaria su
publicacin.
RIVA AGERO BENAVENTE
Confederacin Peruano-
Boliviana
Inicio Periodo Independiente Repblica Confederacin Peruano-Boliviana
El objetivo de la Confederacin Peruano-Boliviana era crear un Estado
confederado que uniera los territorios de Per y Bolivia, para restaurar los circuitos
comerciales que haban articulado el sur peruano y Bolivia desde pocas
prehispnicas, pero se trunc cuando el Alto Per, fue incorporado al virreinato
del Ro de la Plata (1776-1814) y ms adelante, con la creacin de Bolivia en 1825.
Este proyecto cuyo principal promotor fue Andrs de Santa Cruz, fue rechazado
por Chile y algunos sectores del pas, por resultar contrario a sus intereses.
CONFLICTOS PREVIOS
En el Per, el gobierno del presidente Luis Jos Orbegoso enfrent una fallida
rebelin al mando del general Agustn Gamarra quien, tras su fracaso, se instalo
en Bolivia. All sostuvo conversaciones con el presidente Andrs de Santa Cruz,
quien le propuso unir ambos pases sobre la base de tres Estados
confederados: Estado Nor Peruano, Estado Sur Peruano y Estado Boliviano.
Gamarra y Santa Cruz dieron el primer paso invadiendo el Cuzco.
En Lima, Orbegozo haba sido destituido por el general Felipe Santiago Salaverry,
enemigo de Gamarra. Orbegozo negoci secretamente con Santa Cruz para que el
ejercito del general boliviano ocupara el Per y le devolviera la presidencia,
mientras que Orbegozo reconocera la creacin de los tres Estados de la
Confederacin. Esta alianza provoca que Gamarra retirara su apoyo al presidente
de Bolivia y se aliara con Salaverry. Tras ser derrotado en la batalla de Yanacocha
por las tropas de Santa Cruz, Gamarra huy hacia Lima, pero all fue desterrado
por los partidarios de Salaverry. Por su parte, Salaverry fue vencido por Santa Cruz
en la batalla de Socabaya y fusilado junto a sus partidarios en la plaza de armas de
Arequipa el 18 de febrero de 1836.
SANTA CRUZ Y LA CONFEDERACIN
Santa Cruz convoc la asamblea de Huaura, donde se cre el Estado Nor Peruano;
la asamblea de Sicuani, donde se creo el Estado Sur Peruano; y la asamble de
Tapacar, donde se creo el Estado Boliviano, que seran la base de la
Confederacin. Finalmente, el 28 de octubre de 1836, reuni en Tacna a los
representantes de cada Estado y se acord la creacin de la Confederacin y el
nombramiento de Santa Cruz como protector por diez aos renovables. Santa Cruz
quera devolverle al interior del Per la hegemona que haba perdido frente al
centralismo limeo y para ello promulg la Constitucin autoritaria de 1837.
LA OPOSICIN CHILENA
Con el propsito de acabar con la Confederacin, Chile envi una primera
expedicin restauradora al Per, bajo el mando de Manuel Blanco Encalada, que
fue derrotado en Paucarpata (Arequipa). La segunda expedicin chilena, liderada
por Manuel Bulnes, cont con el apoyo decisivo de los emigrados, nombre que se
le dio a un sector de la oposicin peruana, que guiaron a los ejercitos chilenos en
territorio peruano para lograr la derrota definitiva de Santa Cruz en la batalla de
Yungay, el 20 de enero de 1839. As llego el fin de la Confederacin. Frustrado
por el proyecto de Santa Cruz, Gamarra asumi la presidencia del Per. Intento
acabar con un movimiento que se haba generado en Bolivia a favor de Santa Cruz.
As, invadi Bolivia pero fue derrotado y muri en la batalla de Ingav, el 18 de
noviembre.
Mapa de las batallas Confedereacion Per