Mantenimiento del Sistema de
admisión e Inyección inyección Otto
Durante décadas, desde la aparición del motor a gasolina, se utilizó un sistema
mecánico de alimentación de gasolina, conocido como el carburador. Sin embargo,
desde los años sesenta, a raíz del problema de contaminación ambiental, los fabricantes
empezaron la búsqueda de un sistema más eficiente y limpio. Gracias a ello, en la
actualidad los vehículos de producción masiva implementan en su mayoría el sistema
de inyección electrónica de combustible (EFI por sus siglas en ingles). En este artículo
explicaremos su funcionamiento y sus componentes, y haremos las recomendaciones
para mantenerlo en óptimas condiciones de funcionamiento.
La inyección electrónica divide en dos grupos: los sistemas monopunto y los
multipunto. El primero consta de un solo cuerpo de inyección, donde puede haber uno o
más inyectores, que administran combustible a los cilindros del motor. Esta fue la
forma de inyección más primitiva, y en realidad se asemeja más a un carburador
electrónico. La inyección multipunto, por otro lado, implementa un inyector de
combustible por cilindro, que va ubicado justo antes del puerto de admisión. Este
mecanismo es mucho más eficiente y preciso, dado que el combustible ingresa al motor
con una mayor dispersión y no se adhiere a las paredes del múltiple. A continuación
hablaremos de sus componentes y su función en el sistema:
ECU: Más conocida como la computadora ó
centralita, es la que gobierna la inyección del
motor. En su interior se encuentran los circuitos
entrada y salida de señales eléctricas, y los
controladores electrónicos programados por el
fabricante. La ECU procesa la información de
entrada de los sensores, y determina la cantidad
de combustible que se necesita en cada instante.
Bomba de Combustible: La inyección
electrónica requiere de una presión considerable
de combustible, de alrededor de 50 psi, y por lo
tanto, requiere de una bomba eléctrica de
presión. La bomba es controlada por la ECU,
que la encienda cuando el motor se encuentra
en movimiento.
Inyectores: Son las válvulas solenoides encargadas de
dosificar el combustible a los cilindros, en cantidades
específicas, de acuerdo al régimen del motor. Son
gobernadas directamente por la ECU, que las abre y cierra de acuerdo a la
programación del fabricante. Los inyectores van montados sobre un elemento conocido
como el Riel de Combustible, donde la presión es la requerida por el sistema.
Regulador de Presión: El Riel de inyectores es alimentado por la bomba de
combustible, pero para generar la presión del sistema, se requiere de un Regulador. El
mecanismo es en realidad una válvula de alivio que mantiene la presión en un punto fijo
determinado. Normalmente está compuesto por una válvula accionada por un resorte, y
en pocos casos, es gobernada electrónicamente.
Sensores: Con el fin de conocer el régimen del motor, y las condiciones atmosféricas
para así determinar la cantidad de combustible que se requiere en todo momento, la
ECU utiliza una serie de sensores. Los más implementados en la actualidad son los
siguientes:
• Sensor de Velocidad del Motor: Existen varios sensores de este tipo. Puede ser un
Sensor de Efecto Hall, montado en el árbol de levas, o un Sensor de Reluctancia
Variable (VRS) montado en la polea del cigüeñal. El primero es utilizado comúnmente
en vehículos con distribuidor más antiguos, mientras que el segundo se implementa en
sistemas más modernos. El Sensor de Velocidad del motor es el encargado de medir las
RPM, o revoluciones por minuto, a las que gira el motor en cada momento.
• Sensor de Volumen de Aire: Dado que el motor quema una mezcla de aire-
combustible, debe conocer la cantidad de aire que ingresa por el múltiple de admisión
en cada momento para así administrar la cantidad correcta de combustible. Existen
varios sensores capaces de realizar dicha medición, entre ellos el Sensor MAP (Presión
Absoluta del Múltiple de Admisión) y el Sensor MAF (Flujo de Masa de Aire), por sus
siglas en inglés. Estos sensores generan señales eléctricas proporcionales a la cantidad
de aire que ingresan al motor en tiempo real.
• Sensores de Temperatura: Los sensores CTS (Temperatura del Refrigerante) e IAT
(Temperatura del Aire de Admisión) son los encargados de medir la temperatura del
motor, y de la mezcla aire-gasolina, respectivamente.
• Sonda Lambda: Este sensor se ubica en el múltiple de escape del motor, y es el
encargado de medir la concentración de oxígeno restante en los gases de combustión. Si
los niveles son altos, se debe a que la mezcla es pobre de combustible, y viceversa. Con
esta retroalimentación, la ECU puede efectuar correcciones en su programación, y
mantener una apropiada alimentación del motor. También es conocido como Sensor de
Oxígeno.
• TPS: Para conocer la posición del acelerador, más específicamente del cuerpo de
aceleración, la ECU implementa un sensor conocido como el TPS (Sensor de Cuerpo de
Aceleración). El sensor está compuesto por un potenciómetro lineal, que arroja un
voltaje proporcional a la apertura de la mariposa del acelerador. Esta información es
importante, entre otras cosas, porque revela los momentos de exigencia del motor para
generar una sobrealimentación del mismo, obteniendo una mayor respuesta y
aceleración del vehículo.
El sistema de inyección es susceptible a la mugre y las impurezas, y sufre desgaste
como cualquier otro sistema del vehículo. Por lo tanto, se deben seguir una serie de
cuidados para su correcto funcionamiento
1. Realizar con frecuencia una limpieza de inyectores, ya sea por medio de aditivos para
el combustible, o a través de una limpieza profunda en un taller especializado. Con la
mugre e impurezas del combustible, las boquillas se van obstruyendo, lo que cause
fallas de funcionamiento y un consumo mayor de combustible.
2. Cambiar cada 20.000 km el filtro de combustible, ya que se va obstruyendo con las
impurezas.
3. Realizar con frecuencia un mantenimiento de las conexiones eléctricas del sistema,
asegurando un correcto contacto de los componentes con la ECU.
4. Mantener una buena sincronización del sistema de encendido (cables de alta, bujías,
rotor, tapa del distribuidor, etc).
5. Utilizar el combustible adecuado para nuestro vehículo.
6. Mantener las conexiones a tierra del vehículo y los bornes de la batería limpios y bien
ajustados
7. Mantener el escape del vehículo en buenas condiciones funcionales.
8. Mantener el múltiple de admisión libre de fugas de aire.
9. Mantenga el tanque de combustible con un buen nivel de combustible para evitar
recalentamiento de la bomba.
10. Si la luz amarilla conocida como CHECK ENGINE, o MIL, se enciende en su
tablero, es porque ocurre algún problema en la inyección de su vehículo. Lleve su
vehículo a un centro de servicio de inyección para que identifiquen y reparen el
problema.
Siguiendo estos consejos, aseguramos un buen funcionamiento del sistema de inyección
electrónica de nuestros vehículos, lo que en últimas reduce nuestra cuenta de
combustible y mantiene la potencia del motor.