Del Quipu Incaico A La Yupana PDF
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SERIE
ETNOGEOMETRÍA
PARA LA
ETNOMATEMÁTICA Nº 2
INDICE
Introducción
Consultando A Los Antecesores
EI Quipu Una Base De Datos Aritméticos Y Astronómicos
Quipus Contemporáneos
EI Quipu Incaico
Descripción Del Quipu
Los Datos y Su Representación En Los Nudos
Cromatismo Del Quipu
Cómo Hacer Un Quipu
La Yupana O EI Computador Incaico
¿Qué SignificaYupana?
Antiguos Tableros Con Escaques
Yupanas Y Taptanas
Interpretando La Yupana
Escritura De Numerales Menores Que 50 000
Operaciones Con La Yupana
Qué Es La Adición De Números Naturales En La Yupana
Modelos De Adición Con La Yupana
Modelos De Sustracción En La Yupana
Qué Es La Multiplicación De Números Naturales En La Yupana
Modelos De Multiplicación En La Yupana
La División De Números Naturales En La Yupana
Modelos De División En La Yupana
La Yupana Boliviana.
Numerales Del 1 AI 10 En La Yupana Boliviana
Modelos De Adición En La Yupana boliviana
Modelos De Sustracción
Modelos De Multiplicación
Modelos De División
Conclusiones
Bibliografía
1
A mis mentores:
A mi Patria toda:
Digna de mejor destino, como producto de una real y consciente educación liberadora del
sistema.
A mi familia:
Apreciada(o) Colega del Magisterio y compañero de lucha por un mañana mejor. Si este
ejemplar llega a sus manos sin ser pirateado. Antes de leerlo, te pido meditar sobre este aforismo,
pues lo dedico con mucho cariño, a ti, a nuestros discípulos y a mi primera maestra.
La vida es MATEMATICA *
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INTRODUCCION
Cuando nos propusimos realizar el ensayo "Un intento de Filosofía de la Matemática" Nos
hicimos una serie de preguntas entre las cuales teníamos la siguiente:
Hoy esta cuestión nos obliga a formular otra, que viene a ser copartícipe de esa
preocupación:
Posiblemente podríamos citar un sin número de elementos, a los que aleatoriamente les
hemos llamado medios. Desde los más simples y baratos como pueden ser unos granos de maíz o
porotos, hasta los más sofisticados como son las calculadoras de cualquier tamaño a las
computadoras, o inclusive nuestra creatividad echando mano a experiencias circundantes. Sea lo
que fuere, consideramos, que aun no estaríamos satisfechos, porque siempre nos preguntaríamos,
¿y antes como se efectuaba ese proceso de aprendizaje y qué medios se utilizaban?
Nos dirigimos a lo de nuestros grandes amigos. Los libros. Silentes mensajeros que
guardan entre sus páginas informaciones tan valiosas que fueron colocadas por autores o
cronistas de esa época antes citada, y otras posteriores, así como por investigadores de épocas
recientes.
El presente ensayo lo realizamos con sólo dos fines primordiales, uno, como es obvio, el
educativo y otro, el de tener una idea más clara de lo que era el "quipu" su uso en el incario junto a
la función de la "yupana" (contador y/o calculadora"), pero, ante todo fundamentar la razón de
volver a usar o, poner en vigencia a la "yupana" incaica en nuestras escuelas, como el medio
auxiliar más efectivo y económico para coadyuvar en el aprendizaje de la Matemática, partiendo de
la Etnogeometría y la Etnomatemática de un modo integral y de la predisposición lúdica del
aprendiz. Esta es una de las razones por las que en el capítulo final tenemos variados ejemplos del
uso y aplicación de la yupana con operaciones de adición, sustracción, multiplicación y división.
Es muy posible que algún lector se pregunte y diga, como es que desde Santa Cruz, un
lugar tan distante de la cuna preincaica y prehispánica se pretenda escribir sobre un elemento tan
propio de la cultura andina?
Para responder a esa y otras preguntas que pudieran surgir, diremos que los valores
culturales que permiten hacer ciencia, no tienen territorialidad o, no son un patrimonio petrificado,
que no pueda ser difundido y/o actualizado, si ellos van a prestar un servicio también cultural a la
propia humanidad que, día a día procura superación. Pero, si revisamos con detenimiento la propia
historia, veremos que Santa Cruz también formaba parte del incario.
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"En una segunda expedición a las selvas orientales, el Sapa-Inca, repobló el valle de
Cochabamba con familias quechuas procedentes del Cuzco y avanza hasta Samaipata, donde fijó
su frontera y dejó una guarnición acuartelada en una vieja fortaleza tiwanakota reconstruida. ("Los
imperios Andinos" J. F. Velarde)
En resumen diremos que, tres son los tópicos principales que abordaremos: una primera
parte sobre la naturaleza del quipu; la segunda, el estudio de la Yupana y tercera, su aplicación
mediante ejemplos y ejercicios prácticos.
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CONSULTANDO A LOS ANTECESORES.
Antes de todo y para evitar malos entendidos, parafraseamos, una expresión usada por un
miembro de "Los amigos de la Egiptología", respecto a lo que dicen catedráticos y alumnos de
famosas universidades españolas para alentar, la búsqueda de la verdad:
"Sí alguien copia un libro es un plagio, pero si copia o consulta varios libros es una
investigación".
Luego, consideramos que hemos hecho una investigación, consultamos y/o consultaremos
todas las fuentes posibles, entre las que destacan, la elaborada por cronistas de la estirpe del
nativo Guamán o Huamán Poma y/o del soldado hispano Cieza de León, sin desmerecer a otros
prolíficos autores contemporáneos y modernos cuya lista es larga, amen de la propia bibliografía
de los consultados, a quienes no los citamos expresamente ahora por no cometer omisiones
involuntarias.
En ese intento nos sumergimos en ese viaje al pasado para incursionar en el campo de la
Etnociencia, procurando sustanciar una vez más, que para hacer Etnomatemática, según nuestro
entender necesariamente deberíamos por lo menos pensar primero en la Etnogeometría sin ánimo
de sobreponerla tal como ya lo explicamos en el trabajo ya publicado: "Etnogeometría para la
Etnomatemática".
En esta empresa, no nos imaginamos que, cada vez haríamos un recorrido retrospectivo,
más y más apasionante hacia lugares de la Historia preincaica y prehispánica (literalmente
hablando), visitando esas culturas antiguas que habían alcanzado un alto grado de desarrollo,
como demuestran las propias ruinas de Tiwanaku en las que, pese al tiempo transcurrido, nos
admiran sus colosales trabajos de arquitectura e ingeniería, o las de Machu Picchu, en cuyo lugar
sus habitantes hicieron una labor de alta escuela, construyendo templos, palacios, terrazas o
andenes con una perfecta distribución de canales de riego, distribución que, sólo con la Teoría de
redes de Könisberg, se podría resolver en su estructuración matemática. Aun hoy en día con toda
la tecnología, no sería fácil realizar semejantes trabajos de hidráulica, así como los serpenteantes
caminos entre las montañas que parecen conducimos hasta el cielo los que:
“En su gran mayoría eran empedrados, su ancho variaba entre 1.50 a 4 m. Se elevaban
cerca de un metro sobre el nivel del terreno estaban limitados por pretiles y construidos con sentido
de "rectitud direccional" procurando unir dos puntos dodos por su menor distancia y superando los
obstáculos en vez de evitarlos." (J. F. Velarde 130.1977)
Tales muestras, además nos indican que esos constructores tenían conocimientos básicos
de geometría y seguramente algún un sistema de cálculo y medición.
Después de observar ya sea en una fotografía o en el mismo lugar, quien podría dudar de
que también poseían, una bien montada organización administrativa y económica, que debió estar
basada en la previsión de guardar alimentos para los tiempos de espera entre la siembra y la
cosecha de esos productos agrícolas? Inclusive para los eventuales contratiempos de la sequía o
desastres naturales y para un reparto proporcional entre todos los habitantes desde el Soberano al
último vasallo, y esta nuestra cábala o conjetura la ratifica Oscar Valdivia Gutiérrez en sus apuntes
cuando dice:
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se consideraba una manifestación de riqueza en un mundo que desconocía el empleo de la
moneda."
Justamente debido a que no se conocía un elemento que justipreciara el valor ya sea del
trabajo, agrícola, artesanal debió obligar a que se realizarán cuentas que posibilitarán conocer el
número de habitantes o saber las cuantías de todo lo guardado en los depósitos, pues, como
indica O. Valdivia;
Si dijimos más antes, que no se conocía una moneda de pago, eso no implica que, ante la
ausencia de la misma, se debía poseer algún rudimento de contabilidad o medios que permitieran
verificar circunstancialmente los acopios o distribución de cada cosecha, entrega o distribución de
esa producción, inclusive sobre los tributos que el pueblo debía aportar al soberano y, cuando no
tenían con que tributar inclusive lo hacían con sus piojos, y eso se debía contabilizar con algo, por
tanto consideramos que el gráfico de la pagina 360 de la "Coronica) de Guamán Poma, es un
indicador, que posteriormente lo estudiaremos en detalle, pero, por ahora Valdivia nos corrobora:
"Las cantidades mencionadas fueron expuestas en medidas castellanas (no podía ser de
otro modo dada la imposición del idioma del avasallador peninsular que llegó con lengua,
costumbres y experiencias traídas del viejo mundo), pero se conservó el orden de los objetos
enumerados según las categorías andinas. A pesar de la quiebra de las instituciones indígenas a la
llegada de los españoles, se siguieron manejando los quipus, anudando las salidas y también los
ingresos a los depósitos."
Por los documentos a los que hemos tenido acceso incluyendo a los de Huamán Poma,
Pedro Cieza de León o Garcilaso de la Vega, nos podemos enterar de la forma de vida en el
incario. Y, las escrituras de Cieza posiblemente sean en las que se pueda acreditar con mayor
confianza. Pues, hay razones valederas para ello. Cieza llegó a territorio incaico solo quince años
después de iniciado el asalto a Caja-marca, a la que eufemísticamente le llaman conquista. Cieza
tenía entonces 29 años cuando inició su caminata por el territorio avasallado como un soldado
común y son sus postreras jornadas las más marcantes, que se inician allá por el 1547, cuando él
recorre los caminos norteños, casi por los extremos de lo que era el Imperio Incaico. Según sus
propios comentarios, esos caminos eran superiores a los caminos romanos, por los que, cuando el
era muchacho, había caminado en su terruño español. Se dio cuenta que, las cosas eran
diferentes con las que él ya conocía. Aún hoy, pese, a los más de cinco siglos que han pasado,
podemos comprender lo que Cieza sentía al realizar las comparaciones y darse cuenta del lugar en
el que se encontraba. Pues escribió:
"Este territorio y el resto de Las Indias están a muchas leguas de España y hay muchos
mares de por medio"
Él tuvo que ver y observar cosas que otros, que le siguieron, no pueden haber visto y, él
conversó con personas que eran adultos en el apogeo del poderío incaico. Además, Cieza es un
interlocutor capaz. Con un rico vocabulario, y una habilidad propia de él, con una narrativa concisa,
para que el lector menos avisado pudiera entenderle. Por ejemplo veamos lo que él dice:
"dondequiera que el español ha pasado, ha conquistado y ha descubierto, es como si un fuego
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hubiera ido y había destruido todo él paso". ¿Cabe alguna explicación más para dar testimonio de
las fechorías de sus coterráneos?
Pues sí, es confiable y mucho, pero hay escritores que aferrados a su modo de pensar
occidental que, se creen los únicos dueños de la verdad, han tratado de crear un cerco de
descrédito alrededor de Huamán Poma y a se atreven a decir que se lo debe leer con lupa.
Parece ser que en esta vida quien no se expresa bajo los cánones del pensamiento
occidental o el pensamiento dominante, está condenado a ganarse detractores gratuitos. Cualquier
ser humano que lea los documentos que hemos consultado y no sólo los de Guamán Poma,
también otros, quedar maravillado ante el coraje que tuvieron esos cronistas de colocar en el papel
sus observaciones y experiencias, para que generaciones venideras se informaran de esa realidad
ajena a la nuestra y lo que es más, cómo hicieron ese trabajo en condiciones en las que debían
preparase su propia tinta y construir su propia pluma.
Uno de esos exaltados detractores es Raúl Porras Barrenechea, quien califica con dureza
al cronista Poma, pero sin embargo no le queda otro camino que admitir lo valioso de su empeño,
pues, dice:
"Es mérito que un indio de su tiempo con escasa y confusa cultura, pero su viva intuición,
abordara la hazaña intelectual de escribir una crónica. Pero esto no puede llevarnos a divinizar
todos sus yerros, inepcias e inexactitudes. (Porras 1948:57).
-Nosotros nos preguntamos. ¿El ser "indio" le quita capacidad intelectiva o lo hace un
inútil? ¿Pide Guamán Poma que lo deifiquen para que se viertan expresiones de esa naturaleza? -
Y agrega que
"Huamán Poma lejos de ser un erudito, yerra a coda paso en las noticias más sencillas y
divulgadas sobre hechos cercanos del Incario o de la conquista ocurridos en vida de sus padres o
en la suya misma... (ibid).
Otro émulo de Porras es Francisco Esteve Barba en el "Estudio Preliminar" "A las Crónicas
Peruanas de Interés Indígena", dice que
"El mismo lo ha embrollado todo a causa de una mentalidad oscura, confusa y orgullosa...
de una naturaleza llena de complejos y de un idioma mixto a veces arbitrario" (Esteve 1968: LXI),
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Y en cuanto a la expresión gráfica, que para nosotros tiene especial interés:
La denominación indígena de determinados objetos queda explicada mejor que por una
descripción, por la imagen más o menos hábilmente conseguida del objeto mismo" (Esteve 1968:
LXIII)
Como se ve, es otro a quien no le cae bien Poma, pero, sin embargo, tiene que reconocer,
los gráficos informan mejor que las palabras, para justificar su opinión de que
“... la rudeza de mi ingenio y ciegos ojos y poco ver y poco saber y no ser letrado ni
doctor ni licenciado ni latino (ibid)
Estamos en las postrimerías del Siglo XX y hay mucha gente por ahí que aún no se da
cuenta de ese detalle que, para sentirse persona no es necesario poseer un título académico y
Guamán Poma lo hizo notar hace más 500 años atrás.
"La primera parte de la crónica contiene, aun en el desorden cháchara repeticionista del
indio viejo noticias folklóricas de gran interés sobre los ídolos y las huacas, los sacrificios y los ritos,
los hechiceros, las abusiones, las procesiones, el ayuno, el entierro este sentido una cantera
magnífica" (Porras 1948:42).
"EI instinto estadístico de los quipucamayos antiguos, asoma por debajo de la indumentaria
española de Huamán Poma y se une a su propensión tintirillesca de influencia colonial. " (Porras
1948:54).
Las opiniones tan adversas de Porras y otros, no han dejado de generar una corriente
contraria. No todos concuerdan con él, pues, hay otros autores como Nathan Wachtel que en su
libro Sociedad e Ideología hace la apología del cronista y de su crónica, pues, para él
"La obra de Guamán Poma constituye una fuente prodigiosa de información sobre el
mundo indígena antes y después de la conquista." (Wachtel 1973:65)
"La crónica de Guamán Poma no es confusa sino en la medida en que la juzgamos a partir
de nuestro criterio occidental… (Wachtel 1973: 167)
Mediante, los comentarios adversos o favorables y lo que hemos leído sobre Guamán
Poma, podemos formarnos una idea de la personalidad que lo caracterizaba, la misma que nos
ayudan a guiar nuestra o observación sobre los documentos referidos a nuestro trabajo. Luego,
consideramos que nuestro nativo cronista, si bien no era un letrado universitario, como él mismo lo
reconoce y su cultura intelectual parecía poca, era un observador innato e intuitivo, digno de ser
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imitado y admirado y que, además, supo trasmitirnos con claridad sus observaciones, pero, es visto
con un poco de menos precio por nuestro entender alienado,
"... fantaseador a veces, ávido de hacerse valer, con hábito indagatorio y con "instinto
estadístico" que puede explicar su interés en elementos de registro y cálculo como son el quipu y la
yupana."
Aquí cabe preguntamos, ¿hay o no, otros cronistas nativos de la talla de Huamán Poma,
que nos hayan legado un material tan proficuo como el suyo, que inclusive sirva para dar
oportunidad de salir a la palestra a sus detractores?
La respuesta la tiene la misma historia, pues, la mejor muestra es la que nosotros en las
postrimerías del siglo XX seguimos nutriéndonos de esos manuscritos.
EL QUIPU
Tal como leemos el fragmento anterior. Consideramos que W. J. Conklin no podía ser más
oportuno en su comentario sobre el "Quipu" denotando no sólo, la aplicación matemática que todos
los estudiosos tradicionalmente le dieron mas, también lo relacionado a la observación de la
cosmología que los habitantes del Imperio avasallado realizaban.
En este capítulo intentaremos tener una idea somera de lo que es el "quipu" en general sin
determinar su territorialidad, pero tomando en cuenta su temporalidad y sus características
principales, pues, está demostrado por investigadores como el matrimonio Ascher, los autores de
"Mathematics of the Incas - Code of the Quipu" (y muchos otros más de quienes no tenemos
conocimiento), que hay variantes según una región u otra, pero en esencia la función del "Quipu"
siempre fue la misma, guardar información relativa a todas las actividades de la comunidad o
comarca. Tampoco, intentaremos describir las distintas clases que existen, pues, reiteramos no
pretendemos hacer un estudio riguroso de lo que era el "quipu". Nuestra intención de modo
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general es conocer su origen, construcción, cromatismo, categorías, utilidad que prestó, y su
respectiva relación con la "yupana", y la aplicación positiva que podemos darle a ella en la
actualidad, para retomar el camino de la Etnomatemática a la que está direccionado el estudio de
la "yupana" fundamentalmente.
Quipu en Quechua quiere decir nudo, de modo particular fue usado en el incario para
nombrar a las cuerdas anudadas, cuya función o utilidad era la de servir como fichas
mnemotécnicas. EI gráfico que tenemos al lado es una muestra de un quipu de tamaño moderado.
Entre las primeras referencias que se tienen de los quipus, son las que se usaron
ampliamente para registrar datos, información censal, acontecimientos históricos, depósito de
tesoros, acontecimientos relacionados con la astronomía, como leímos en el fragmento
introductorio y quien sabe hasta para asuntos legales.
Observando, este dibujo del "Astrólogo" del siglo XVI podemos notar que, en el mismo hay
explicación, gráfica, relacionando la astronomía con los quipus. En la parte superior izquierda
vemos el dibujo del sol apareciendo en el horizonte, que en este caso está determinado por las
montañas y en el lado derecho a la misma altura y con las mismas características, la
representación de la luna. Inclusive pareciera que hay un observatorio coinciden casi
exclusivamente con los quipus encontrados en las tumbas de los antiguos habitantes de las
regiones comprendidas en territorio peruano. El texto que contiene el dibujo escrito por G. Poma
dice:
"Y nuestro astrologo-poeta que sabe de la relación del Sol, y del eclipse de la luna, de las
estrellas y de los cometas, de las horas, los domingos, los meses del año y de los cuatro vientos
del mundo y del tiempo de sembrar las semillas para el alimento, desde tiempo inmemorial.
QUIPUS CONTEMPORÁNEOS
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Graf. 1 Nudos que utilizan en algunos quipus actuales Graf. 2 Quipu que representa 300 unidades
En el caso de contar sus animales por cientos hacen un nudo y dejan un espacio en el
cordón (jalti). Esto debido a que las unidades no son tomadas en cuenta cuando pagan de 100
llamas u ovejas tal como ilustra el Gráf 2.
EI Gráf 3. Es una muestra de la representación de 339 unidades, que bien podían haber
sido llamas, ovejas, u otras especies, inclusive personas, en el supuesto caso reunir personas para
un determinado trabajo agrícola en el Ayllu.
EL QUIPU INCAICO
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"Administrativamente, para los fines del tributo y la leva, los hatunrunas fueron clasificados
en grupos de diez individuos dirigidos por un chunca.camayu (encargado de diez personas) que
era a la vez, su jefe inmediato y el responsable por ellos ante los superiores. Cinco de estos grupos
obedecían a un pichca-chunca-camayu (encargado de cincuenta individuos. Dos de estos
dependían de un pachaj-camayu (cien) y diez huaranca-camayu o sea diez mil individuos, de un
hunu-camayu) millón). Cuatro hunu-camayu por último a un tucrituc..." "Los conquistadores
hallaron ayllus a los que se habían quitado o agregado elementos para complementar un número
decimal. La realidad de la aritmética, sin embargo, acabó por triunfar y la decimalización persistió
solamente para fines administrativos, aunque todo su vigor, fue impuesta al ejército". "Su
organización era decimal" (J. F. Velarde -122/1977)
Aunque nuestro objetivo no es verificar la aserción o error de los cronistas, tomamos estas
notas para hacer ver la enorme importancia que los quipus han tenido en la cultura precolombina y
aun después del genocidio realizado por los avasalladores hispanos.
"Sin embargo el quipu precolombino permanece indescifrado, en gran parte, porque casi
todos los cordones han perdido sus colores originales que de un modo u otro le daban su real
significado."
"El aporte más importante para la comprensión de los quipus sigue siendo el de Leland
Locke, quien en 1912 demostró que los quipus por él estudiados mostraban que su contenido no
era lenguaje sino información de naturaleza puramente numérica. También descubrió que en ellos
se usaba un sistema decimal, de naturaleza posicional, y que tuvieron el concepto de cero. Desde
entonces, usando el descubrimiento de Locke, se han hecho varios y notables esfuerzos para
relacionar los números que pueden leerse en los nudos con el conocimiento calendárico y
astronómico, debiendo mencionarse especialmente los trabajos de Nordenskiöld en 1925 y de Day
en 1967. Sin embargo, tales esfuerzos parecen no haber convencido a muchos investigadores en
razón de que las “demostraciones" consisten, por lo general, en seleccionar y ordenar
cuidadosamente una parte de la información numérica, tanto la astronómica como la de los quipus,
para obtener determinadas concordancias, dejando sin explicación la parte restante que es la
mayor."
Los pobladores del Tawantinsuyo (Las Cuatro Regiones) emplearon sistemas de medición
y de contabilidad que, no eran inferiores a los usados en Europa Medieval. En el ordenamiento
demográfico crearon una división poblacional basada en un cómputo decimal que facilitaba un
conocimiento aproximado del número de habitantes par regiones. AI norte Chincha-Suyo , al este,
Anti-Suyo, al Sur, Kolla-Suyo, y al oeste, Conti-Suyo lo que, en el pensamiento occidentalizado,
quien sabe sería apenas la región norteña, sureña, etc. Regiones que a su vez tenían provincias
llamadas humanus, integradas por las distintas markas, o sea "ciudades que fueron planificadas
con sentido global, lo que ha dado motivo a algunos arqueólogos para calificar como "Urbanística"
(J.F. Velarde 90)
La cuenta del tiempo transcurrido ha tenido que basarse en referencias de prácticas
empíricas, como ser la observación del año solar (Inti), el lunar (Quilla) y/o el de los
acontecimientos importantes como los referidos para fines agrícolas de siembra, cosecha y
festivos, p. ej.: la fiesta del Inti Raymi. Es decir que con "...los conocimientos heredados de los
tiwanakotas por vía de la tradición amauta -medían el año, conocían los meses, los solsticios, los
equinoccios y algunas constelaciones principales -aunque su técnica para calcular el tiempo, de
atenerse a las evidencias arqueológicas, era diferente. Lo hacían guiándose por la dimensión y el
ángulo de la sombra, proyectados por el sol en pilares de piedra levantados a propósito y llamados
inthihuatanas o "amarraderos del sol",..."
"Una de las características de las culturas andinas fue una clasificación poblacional de
acuerdo con los ciclos vitales de las personas y no en el cómputo de años transcurridos; es decir,
eran culturas preparadas no sólo para contabilizar la infinidad de depósitos escalonados a lo largo
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y ancho del imperio sino también con estructuras socio-políticas cuyas finalidades convergían
hacia una organización de las fuerzas de producción y de trabajo para el Estado"
Esos registros eran realizados en "Los quipus, que "eran llevados por partida doble. Uno
quedaba en el poder de la autoridad subalterna bajo cuya responsabilidad era levantado y su copia
iba al Cuzco, donde se guardaba una suerte de registro central para que el Sapa-Inca o la
autoridades superiores, tuvieran a la mano un cuadro completo hasta sus últimos detalles, del
estado del imperio. Los funcionarios locales debían dar cuenta estadística. Por otra parte cada año
se hacía un nuevo censo total para mantener al día ese cuadro".
EI manejo de los quipus "se hallaba reservada a un tipo especial de funcionarios, los
quipucamayos"
En todo lo hemos leído hasta ahora, no hemos encontrado alguna pista que nos sugiera
que los quipus eran utilizados para realizar operaciones aritméticas, por tanto podemos inferir que
su utilidad radicaba fundamentalmente en el registro de datos numéricos y de acontecimientos
importantes (según algún autor) razón por lo que se les dio el nombre de “fichas mnemoptécnicas”.
b) En forma transversal van unidas a esta cuerda gruesa, otras mas delgadas cuya longitud
en algunas ocasiones llega a unos 50 cm. EI número de estas cuerdas colgantes puede ser desde
una a cien o más dependiendo de la cantidad de datos. Su colocación con respecto al cordón
principal puede estar direccionada, hacia abajo o hacia arriba de modo opuesto al mismo tiempo.
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Este quipu muestra las cuerdas colgantes y
secundarias aunque no tiene nudos.
Esas cuerdas colgantes son de distintos colores; unas de un solo color y otras de dos.
c) Las cuerdas colgantes tiene otras secundarias que pueden variar de longitud y valor de
acuerdo al color. Su colocación con respecto de las principales se halla a diversas distancias de la
transversal.
d) Los nudos se confeccionan con la misma cuerda, sea esta colgante o subsidiaria. Están
colocados a diversa distancia de la transversal, algunos de ellos son simples, dobles, compuestos
o a medio hacer. El nudo a medio hacer es el que se encuentra generalmente al final y no encierra
a otros nudos.
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Los dibujos “j” y “2 a 9” representan los
nudos simples y compuestos que aparecen
con mayor frecuencia (Tomado de Locke 15)
Las unidades tienen un tipo de nudo diferente a los otros, pues es un nudo compuesto y
además están en la parte inferior de la cuerda.
Los nudos de una cuerda pueden representar uno o varios números en el sistema
posicional de base 10, pues, tienen un ordenamiento de en grupos de diez. O sea, el 322 equivale
a 300 + 20 + 2, dicho de otro modo equivale a la representación por descomposición polinómica.
También, en una misma cuerda pueden estar dos distintos números, tal el caso del "Quipu
sumatoria" en cuya primera cuerda colgante se tienen los números 31 y 22. Para una cuerda que
contiene más de dos números, la única exigencia está en que ella debe ser más larga, según los
requerimientos de uso o almacenamiento de datos.
Un aspecto importante que debemos tomar en cuenta es que, el cero es un número virtual,
pues ocupa una posición a la que podemos llamar "nada" veamos la cuerda que contiene al 30,
sólo vemos tres nudos, pero, por la posición que ocupan y por una convención que asumimos en la
interpretación determinamos que esos nudos equivalen a 3 decenas.
Otro ejemplo podemos obtener en la cuerda que contiene al 209. Sólo vemos los dos
nudos que están cerca del cordón principal y nueve en la parte inferior, luego una vez más vemos
15
que, el cero, o la "nada" está representada con la ausencia de un nudo o un grupo de nudos en el
lugar que correspondería a las decenas.
Un aspecto muy importante que debemos tomar en cuenta es que el “quipumayo” apenas
tomado el quipu y desplegado podía leer o saber de inmediato el valor que guardaba o
representaba el quipu en cuestión, le era suficiente observar la cuerda superior, pues, ella es la
“cuerda resumen” de todos los datos que el quipu contiene. Si, un quipu tiene cuerdas subsidiarias
la cuerda resumen también posee su “cuerda subsidiaria resumen”.
Es forma de guardar los quipus, al parecer era para facilitar su transporte y/o
almacenamiento, pues, como ya lo indicamos debían ser hechos por partida doble, quedando, una
con el ”quipumayo” y la otra era enviad al jefe superior o funcionario público más importante, ya
sea de la marca o, alguna repartición del incario.
Los dos gráficos que aquí tenemos son más que elocuentes para mostrarnos, no sólo, el
tamaño que podía alcanzar un quipu, más también de los encargados de manejar y custodiarlos.
16
CROMATISMO DEL QUIPU
"Por lo que toca al cromatismo de los quipus contables, corta es la lista de colores que nos
han proporcionado los cronistas. Ellos señalan, en primer lugar, el empleo del color natural (marrón
en sus tonalidades, clara y oscura) que es propio del material (lana o algodón) empleado en la
confección del quipu: mencionan luego, los colores obtenidos del teñido, como blanco, rojo,
morado, pardo, amarillento pajizo, verde, carmesí. Como combinación cromática hablan de la
mezcla de tres colores en la misma cuerda de tres torzales: azul, amarillo, blanco".
Las mezclas de colores son muchas, habiéndose registrado más de veinte: el quipu N° 7
de Nordenskiöl, por ejemplo, exhibe 17 expresiones cromáticas, de las cuales 8 son colores únicos
y 9 de combinados. La tendencia de la mezcla se efectúa primeramente entre las mismas
tonalidades de los colores, en especial del marrón; luego entre dos o más colores diferentes,
preferentemente el blanco que se une a negro, el azul, el verde y sobre todo el marrón; éste a su
vez, además de juntarse con el blanco, lo hace también aunque menos frecuentemente con el azul,
el negro, el rojo y este último en cambio sólo se mezcla con el marrón como acabamos de decir y
con el marrón.
Aunque hasta ahora, sólo hemos visto las fotografías de los quipus y, de una manera
rápida, sus clases temporalmente hablando, consideramos que es muy importante, sin embargo,
conocer como se podían hacer estas llamadas fichas mnemotécnicas. Como es natural debió ser
necesaria alguna técnica, por ello recurrimos a los esposos Marcia y Robert Ascher (quienes en su
trabajo ya citado Código de los Quipus), luego de una prolífica investigación no sólo en el territorio
que un día fue el Imperio Incaico, han visto alrededor de 400 quipus que se encuentran
diseminados en diferentes Prestigiosos Museos alrededor del mundo, hoy, nos muestran como
elaborar un quipu.
17
"Los cordones individualmente hilados son la unidad básica de un quipu. Los cordones son
distintivos en que cada uno, que es un juego de por lo menos dos y uno se tuerce mientras el otro
se adelgaza y termina con un nudo pequeño" (Fig. 1)
Los extremos doblados se usan juntos para unirse a los cordones. Cuando el algodón o
lana está hilados como cordón, o si los pedazos de torzal están cortados de los cordones más
largos, un paso especial del hilado final se necesita para prepararlo como cordón del quipu. El
último paso es doblar el cordón doblemente torcido.
Paso 1
Para tener el equipo necesario es suficiente construir algo parecido a una rueca o huso
llamado "huso de la gota" por su parecido a la gota de agua. Este simple instrumento puede
crearse con cualquier pedazo de madera de modo que sea el piso redondo o una pequeña papa
(patata) partida por la mitad. Una aguja de tejer o un lápiz introducido en la mitad de una patata o
de otra cosa parecida son ideales. Para ello, inserte perpendicularmente la aguja de tejer a través
del centro de la mitad de la patata como lo indica la Fig. 2. Como si fuera un eje de la misma.
18
Paso 2
Luego, cortar un pedazo de torzal de dos veces la longitud del eje para ser usado como la
cuerda principal. Atar el extremo de la cuerda alrededor del eje y la patata como indica el diseño y
lo afianza en el lugar envolviéndolo alrededor del eje tres o cuatro veces. Sacar la punta fuera y,
bajo la envoltura del eje una vez alrededor de su base; y lo pasa por encima del otro lado del eje a
la punta del mismo (Figs. 3 y 4). Se sigue este procedimiento cada vez que se quiere hacer un
nudo y el número de vueltas determinan las unidades que el nudo representa. (P .ej.; fig. "e" del
"Cuadro A" de los nudos.
Para anudar al cordón principal, como está indicado en las letras de los cordones "b", "c", e
inclusive la cuerda subsidiaria "I" del cordón 3 indicado con la letra "d"; puede seguir dos pasos.
a) Repita el paso anterior simplemente, ate la punta del cordón aproximadamente 4 cm. de
la nariz del eje con un medio tirón. Ya están ahora completas y puede separar el torzal. (Fig. 4)
Para asegurar en el cordón principal recorra el torzal, se tuercen dos pedazos juntos, es el
como indica la fig. 4.
Como nosotros no podemos hilar los hilos de lana o algodón, y también hoy en día eso es
indispensable. Las madejas de lana disponibles en el comercio dan buenos resultados mejor que el
cordón de algodón disponible comercialmente. Antes de iniciar la preparación de los cordones para
manufacturar el quipu, primero veamos los nombres que adquieren los tipos de torcedura o formas
de torsión de los hilos.
b) Cuando se procede a torcer en sentido contrario a las agujas del reloj a esta dirección se
llama una torcedura. S.
Pruebe con un pedazo del hilo de lana para ver en que dirección esta la torcedura original
del mismo. Si es en Z, siga con esa misma dirección, y si es en S hago lo indicado;
Para preparar los cordones se toma una longitud de unos 2 m de hilo de lana de la madeja.
Primero se extiende el hilo de lana luego , una vez bien torcido el hilo ya sea en Z o en S, se dobla
a partir de la mitad del mismo y se deja que se junten los dos brazos del hilo y se retuerce aun más
hasta conseguir la torsión deseada. Seguidamente se habrá obtenido una longitud aprox. de 1 m Si
se quiere que éste sea el cordón principal se retuerce nuevamente ya sea en Z o S y finalmente se
dobla por la mitad y se obtiene un cordón grueso al que llamaremos "doblemente doble torcido". Si
19
se quiere que sea para las cuerdas colgantes se sigue la primera parte de este procedimiento
hasta lograr la longitud de 1m o menos, luego se lo puede dividir en dos partes a cada parte le
llamaremos "doble torcido". Cada parte es un tamaño conveniente para empezar. La cuerda
subsidiaria bastará que sea un torcido simple. Ahora, anude los extremos del cordón y
empiece a realizarlo según lo indicado en las figs. 2, 3, y 4.
Para colocar la cuerda secundaria como la de la letra "d" del "Cuadro A" puede seguir los
pasos indicadas para la Fig. 5
Cada quipu normalmente tiene un cordón (el cordón principal) eso es mucho más grueso
que los otros. Para hacer cordones más gruesos, doblar el torzal o se puede aumentar usando el
primer método, finalmente, antes de doblar los cordones que usan el método modificado.
Para determinar los colores de los cordones y de las cuerdas principales o subsidiarias,
puede tomarse en cuenta los explicado en el capítulo correspondiente al cromatismo de los quipus.
20
La YUPANA o el Computador Incaico
Gráfico A
b) Este personaje, que bien podría ser a quien refiere el título o el quipu-camayo, tiene en
las manos un objeto con una sarta de hilos o cordones alineados como indicadores de cantidades,
lo que ya conocemos con el nombre de quipu.
c) En la parte inferior izquierda nos llama la atención un rectángulo que parece una
formación de 4 x 5 de fichas de dominó, por los puntitos que tienen suponemos, a primera vista
que indican cantidades y muy posiblemente, las que están en el quipu. Sería este el instrumento
que permitía hacer las cuentas? Intentaremos hallar respuesta a esta y otras cuestiones de las
que, nos ocuparemos más adelante con las investigaciones respectivas.
Mas, antes de ese cometido veamos lo que contiene el manuscrito de la página 361. El que
a la letra y sin corrección alguna dice:
"Contador I Tezorero Contador mayor deto doeste rreyno condorchaua hijo de apo oeste le
llamauan tauantinsuyo runaquipoc yncap haziendan chasquicoc tezorero mayor dize que este
principal tenia una grande auilidad para sauer su auilidad el ynga mando contar y numirar ajustar
con los yndios deste reyno con la lana del cierto taruga enparexaua con una comida llamado
quinua contaua la quinua y los yndios fue grande su auilidad mejor fuera en papel y tinta contador
Mayor hatunhuchaquipoc – contador menor huchuy huchaquipoc- cuentan en tablas – numiran de
cien mil y dedies mil y de ciento y de diez hasta llegar auna deto do lo que pasan eneste rreyno lo
asienta y fiestas y domingos y meses y años y en cada ciudad y uilla y pueblos de indios auia estos
dichos contadores y tesoreros eneste rreyno y contaua desta manera comensando de unos dos y
tres suc – taua – pichica – zocta – canchis – puzac - yscon -chunga -yscacychunga - quinzachunga
- tauachunga - piscachunga -zoctachunga - canchischunga - pozacchunga - ysconchunga -
pachaca - uaranga -chungauaranga - huno -pachahuno -uarangahuno - pantacachuno.
21
Análisis.
Después de dar una lectura general, nos percatamos que el manuscrito se ha realizado
con el lenguaje propio de su autor. Es decir, tal como él lo hablaba y como es de suponer, eso
haría que el idioma se presente defectuoso. Sin embargo eso no le quita su valor informativo e
ilustrativo, pues, es comprensible, según log filólogos y lingüistas, en la legua Quechua y Aimara
las vocales de mayor dominio son "a, i, u ", así como su alfabeto no tendría las letras "b" o "v"
“En efta lengua ningún vocablo comiença por B ni fevfa defta letra entre Aymaraes”
(Diccionario de la Lengva Aymara P. Lvdovico-Bertonio) (1612)
Consideramos que será de mucho mas valor realizar una traducción donde corresponda y
luego un análisis semiológico del contenido decodificando, el mensaje, antes que buscando lo
semántico. Por tanto, vamos a interpretar lo que no es totalmente Castellano o Quechua ya sea un
párrafo, oración o palabra:
22
Interpretación: //Le llamaban el hombre encargado de los quipus en la hacienda del inca de
las cuatro regiones//
c) Se lee "el ynga mando contar y numirar ajustar con los indios deste reyno con la lana del
cierto taruga
Interpretación: //El Inca mandó enumerar y hacer cuentas con los indios de este reino con
la lana de cierto cervatillo. Se sobre entiende que dicha lana era para hilar los cordones de los
quipus en los cuales quedarían registrados los datos de esas cuentas.
"... enparexaua con una comida llamado quinua contaua la quinua y los yndios fue grande
su auilidad mejor fuera en papel y tinta contador mayor hatunhuchaquipoc... "
Interpretación: IIHacia las cuentas (sumaba y contaba) paralelamente con una comida
llamada quinua. Para aclarar aun más, los granos de quinua son del tamaño de los granos de
alpiste, par ello resalta "su grande auilidad" del contador mayor o "hatunhuchaquipoc" (encargado
de usar la matemática "Juchhawa" en Quechua), mejor que si lo hubiera hecho con tinta y papel.
Después de saber que la quinua son unos granos muy pequeños hasta para manipular, nos
parecería algo ilógico o contradictorio usarlos para hacer las cuentas. Pero, no es así, pues, como
ya lo leímos, contaban de 1 a 100 000; luego, sólo para tener una idea, si las cantidades de las
cuentas hubieran alcanzado un número sólo de hasta 4 cifras, algo así como 5483 ¿en qué bolsas
o depósitos hubieran tenido cabida otros granos de mayor tamaño, si cada grano representaba a
un habitante del Imperio? Imaginemos que hubieran usado, maíces, porotos o piedrecillas ante la
ausencia de esos granos. Además del tamaño tendríamos el peso, lo que significaría un problema
para su traslado dependiendo de las cantidades y tomando en cuenta que, los medios de
transporte en la época eran las llamas, las que no pueden llevar más de una arroba u 11 kgs de
peso y más aun por esos serpenteantes y empinados caminos.
"…- contador menor huchuy huchaquipoc - cuentan en tablas - numiran de cien mil y
dedies mil y de ciento y de dies hasta llegar auna deto do lo que pasan eneste rreyno lo asienta y
fiestas y domingos y meses y años..."
"... y en cada ciudad y uilla y pueblos de yndios auia estos dichos contadores y tesoreros
eneste rreyno y contaua desta manera comensando de uno dos y tres.
interpretación: IITodos los poblados del Imperio tenían personas encargadas de las
cuentas públicas y de la custodia de los valores por los llamados tesoreros.
"...era suc (uno)- iscay (dos) - quinza (tres) - taua (cuatro) - pichica )cinco) - zocta (seis) -
canchis (siete) - puzac (ocho)- yscon (nueve) - chunga (diez) - yscacychunga (veinte) -
quinzachunga (treinta) - tauachunga (cuarenta) - piscachunga (cincuenta) - zoctachunga (sesenta)
-canchischunga (setenta) - pozacchunga (ochenta) - ysconchunga (noventa) - pachaca (cien)-
uaranga (mil)- chungauaranga (diez mil) - huno (millón) - pachahuno (cien millones) - uarangahuno
(mil millones)- pantacachuno (infinito).
Interpretación: IIVemos que la forma de contar por lo que está escrito, increíblemente
llegaron a contar hasta mil millones y lo que admira tener un nombre para aquella cantidad superior
a mil millones. "Pantac o pantajj, cuya palabra primitiva es panta que en quechua significa
equivocación. Es decir el número es tan grande que, el contador después de los mil millones no
teniendo otro nombre para utilizar en siguiente lo llama el Millón que puede hacer equivocar.
23
Una pregunta que nos hacemos es, si alguna vez se realizó una cuenta empírica tan grande que
obligó a crear este nombre, o el mismo es fruto de una cuenta apriorística?
Dejando de lado esto último, queremos ratificar que, manipular cuentas con tales números
en los quipus hubiera sido un trabajo no sólo difícil, mas también agotador, en eso de hacer y
deshacer nudos, así, como el tamaño y el peso que tendrían los quipus, máxime si los cordeles de
los mismos dada la naturaleza del que estaban manufacturados absorben la humedad ambiental
con lo que se hacen aun más pesados, especialmente si ellos eran tan grandes como el de la
colección de Daulsberg en Arica-Chile que vimos en las páginas precedentes.
Hasta ahora hemos vista de un modo muy simple lo que es el quipu. Y, encontramos que,
este es un instrumento utilizado por los habitantes andinos desde la época del incario. Después de
haber aprendido como se construye un quipu, dada la laboriosidad que requiere manufacturarlo,
además del análisis anterior, no nos queda duda alguna de que el mismo, apenas podía ser un
instrumento para registrar o guardar esa cuentas, de un modo organizado. Los Esposos Ascher por
ejemplo han hecho una relación de su interpretación del quipu con aplicaciones algebraicas por lo
que se colige que los incas tuvieron, al igual que en otras culturas, un sistema de numeración
basado en el valor de posición de los signos, los cuales como ya lo vimos, en vez de ser gráficos,
tenían la forma de nudos situados a lo largo de un cordón. La numeración incaica, por lo visto era
decimal, pues, no se puede pensar de otro modo cuando se habla de los encargados de las
personas que eran miembros del ejército, los "chunca-camayo" (por diez personas), "pachaj-
camayo" (por cien personas), o, "waranca-camayo" (por mil personas). Por usar la modalidad de
los romanos hasta podríamos decir decuriones, centuriones, etc.
Sin embargo para no quedar en el campo puramente especulativo y quien sabe, por ahí
surge alguien que diga que, con los quipus se podían realizar perfectamente las operaciones de
computo tomando como base la palabra quechua "quipuni", que aparece en los antiguos glosarios
y que, además de la idea de anudar, expresa también la de contar por nudos, sin tener que recurrir
forzosamente al empleo del ábaco. Por ello en lo sucesivo nos abocaremos directamente a nuestro
objetivo como es el estudio de la "Yupana" al que hemos dado en llamarle el primer computador
incaico.
24
QUÉ SIGNIFICA YUPANA?
Yupana según los primeros léxicos, se denominó yupani, que en quechua quiere decir,
"hacer cuentas o contar" o, yo hago las cuentas. Por las informaciones que ya tenemos, los
encargados de la contabilidad (si vale la expresión), preferían calcular con piedrecitas u otros
materiales parecidos, en especial granos e quinua, maíz o frijoles, y luego anotar con nudos, los
resultados obtenidos en los hilos del quipu. De acuerdo con la mayoría de los cronistas, el cálculo
con piedrecitas y granos era ejecutado con gran precisión, y según relata asombrado el padre
Acosta, "...las cuentas, "aún las muy embarazosas", se hacían “puntualísimamente, sin errar una
tilde...". (1954:190)
Esta manera de calcular generalmente" cuando eran varias las personas que iban a
realizar las cuentas decían "yupana" que significa "contemos o hagamos nosotros las cuentas".
Luego, de ahí viene el nombre que se le dio al instrumento con el que se contaba y realizaban las
cuentas.
“"Son pocos los datos que se obtienen del procedimiento adoptado para calcular, el padre
Acosta se limita a informar que para ello "los indios toman sus granos y ponen uno aquí, tres
acullá, ocho no se donde; luego pasan un grano de aquí, truecan tres de allá, y así salen con su
cuenta""
De todas las fuentes consultadas las que mejor nos explican estas la de Guamán Poma en
su "Nueua Coronica", que lo representa como una especie de tablero, que lo hemos visto en el
diseño realizado por el mismo en la pagina 360; otra información tenemos en la "Historia del Reino
de Quito", del padre Juan Velasco, que al parecer conocía bastante, sobre de las antigüedades
indias, él nos dice que, "... el instrumento usado para esos menesteres era algo así como unos
depósitos hechos de madera, de piedra o de barra, con diversas separaciones, en las cuales se
colocaban piedrecillas de distintos tamaños, colores y figuras angulares" (1841- 44, T.II: 7), y una
tercera en las explicaciones que nos da Radicati Di Primeglio. Mas veamos por partes.
Según el dibujo antes citado, dijimos que parecían fichas de dominó, el mismo viene a ser
la yupana, es decir, un tablero con veinte casillas distribuidas en cinco filas y cuatro columnas. En
cada casilla aparece cierto número de círculos, correspondiéndole cinco círculos a las casillas de la
primera columna, tres a las de la segunda; dos a las de la tercera y uno a los de la cuarta. Además,
algunos de estos círculos son negros y otros son blancos.
Algunos han considerado que los círculos blancos representan sitios u hoyos destinados a
ser ocupados por elementos auxiliares de cálculo; tales como granos de quinua (que los hay
negros y blancos), maíz, frijoles, piedrezuelas, etcétera. Los círculos negros representarían lugares
ocupados por elementos (que en general llamaremos fichas). Dando por válida esta suposición, a
25
lo más podrían colocarse cinco fichas en una casilla de la primera columna, o dos fichas en la
casilla de la tercera columna.
Entre los científicos que han estudiado el ábaco incaico, llegando a formular
planteamientos concretos sobre su estructura y uso, mencionamos a Henry Wassen, que en 1931
publicó The Ancient Peruvian Abacus, a Carlos Radicati di Primeglio, quien en su libro EI sistema
Contable de los incas se ocupa conjuntamente del tablero de cálculo y de los quipus (al estudio de
este último tema se dedicó de 1950 hasta su muerte en 1990); a Emilio Mendizábal Losack, que
dedicó a la yupana uno de los capítulos de su tesis doctoral escrita en 1971; a William Burns
Glynn, que en el trabajo "La tabla de cálculo de los incas" desarrolla su visión sobre el uso del
ábaco; a Juan Ansión que hace desarrollos importantes sobre el tema en su artículo "Cómo
calculaban los incas"; a Hugo Pereyra Sánchez, que en su trabajo "La Yupana, complemento
operacional del Quipu" plantea una generalización de los trabajos de Wassen y Radicati; y a Percy
Aitken-Soux y Faustino Ccama, que en su artículo "Abaco andino, instrumento andino ancestral de
cómputo" describen las instrucciones de una yupana etnográfica del pueblo de Itujata, Potosí,
Bolivia..." (Ref, tomada de Colección de Escritos por los autores citados 1990:207-209)
En cambio el padre Juan Velasco hace mención del tablero para hacer las cuentas, pero
no le da el nombre con el que se le conoce.
"... el instrumento usado para esos menesteres era algo así como unos depósitos hechos
de madera, de piedra o de barro, con diversas separaciones, en las cuales se colocaban
piedrecillas de distintos tamaños, colores y figuras angulares" (1841- 44, T.II: 7)
A parte de usar las ilustraciones que Radicati de Primeglio nos ofrece en su singular
trabajo titulado "Tableros de escaques en el antiguo Perú" también copiaremos sus respectivos
textos en su íntegra, pues, consideramos que de ese modo, ayudamos a difundir su trabajo
manteniendo fielmente su contenido.
El primer tablero con el respectivo perfil original, lo tenemos al lado con una vista desde
arriba.
"Se trata de un tablero de madera de forma rectangular (33x27 cm.) en cuya cara superior
hay 17 compartimientos, de los cuales 14 son cuadrados, 2 rectangulares y 1 octogonal. De ellos,
7 cuadrados y 1 rectangular, están sobre el lado más prolongado del tablero y otros tantos
aparecen en el lado opuesto; ambos conjuntos están separados por un espacio central, que tiene
forma octogonal como la de un signo escalonado. En dos de las esquinas del tablero hay unas
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salientes prismáticas en forma de torres cuadradas (12x12cm.) con dos plataformas superpuestas;
la segunda de estas plataformas, que es la más pequeña (7 x 7 cm.), se asienta sobre uno de los
ángulos exteriores de la primera. Por los cuatro costados el tablero está decorado con figuras
incisas que representan cabezas humanas y un animal que, según M. Uhle, podría ser el cocodrilo
(Uhle 1922); en el fondo hay dibujos de rosetas."
"Idéntico a este aparato es otro excavado en las ruinas de Chan Chan y conservado en el
Museo Etnográfico de Gotemburgo (Izikowitz 1967:78- 79). Es también de madera y sus casilleros,
al igual que las torres, siguen el mismo ordenamiento; carece, sin embargo, de decoración y tiene
tamaño mucho más pequeño(16.5x13.5cm.)(Fig.4)."
"Estos tableros, tantos ecuatorianos como peruanos son de piedra y, salvo pequeños
detalles, resultaban casi idénticos a los de madera. El primero, encontrado en Caraz, se diferencia
tan sólo por haber sido sustituido el espacio octogonal central por un casillero de forma rectangular
y por tener tres plataformas las torres de las esquinas. (Fig. 5). Otro, procedente de Pallasca, es de
planta ovalada y la distribución dual de los casilleros es perfectamente simétrica (Fig. 6). Un
tercero, que integra la colección del autor de la presente monografía, es de origen desconocido,
pero debe proceder de algún lugar del Callejón de Huaylas; tiene las salientes prismáticas de los
costados recortadas en ángulo en una de sus esquinas, como si se hubiese deseado trasladar la
reproducción del signo escalonado, que en los aparatos de madera tipo Chordeleg está en el
centro, a las aristas de los torreones laterales. (Fig. 5). Este aspecto, que rompe la
configuración cuadrada de las plataformas, da lugar también a que el piso de las dos primeras
adquiera de una manera más pronunciada, la forma de una especie de mazo o martillo,
particularidad que, como veremos más adelante, es la característica más notable de algunas
casillas de tableros del mismo tipo encontrados en Ica."
27
"Mayores diferencias se advierten en otros subtipos, originarios también del Callejón de
Huaylas, de los cuales el mejor representante lo tenemos en el tablero que describió E.
Nordenskiöld en su obra Origen de las civilizaciones indígenas de América del Sur (Ibidem). Aquí
los casilleros cuadrados están alineados a lo largo de los lados laterales de la tabla, mientras que
los rectangulares se encuentran en su interior. Las dos torres, que son cuadradas y de una sola
plataforma, están colocadas una a continuación de otra, en la parte superior, justamente encima de
los dos casilleros rectangulares del centro; debajo de éstos se sitúa también otro compartimiento
rectangular mucho más pequeño. (Fig. 7)."
"Otro subtipo, que hemos estudiado en el Museo de Arqueología de Lima, tiene casi todos
los casilleros en forma de triángulo (en total 18) dispuestos alrededor del tablero, a excepción de
un lado en que esta ubicada una torre rectangular de un solo piso y con tres compartimientos
también triangulares. En la parte central hay cuatro casillas de forma cuadrada, dispuestas de dos
en dos."
"Aunque el monumento que ocupa nuestra atención estuvo, evidentemente, distribuido por
todo el territorio del Tahuantinsuyo, las noticias arqueológicas que por el momento poseemos se
refieren solamente a ejemplares provenientes de la provincia de Cuenca en el Ecuador y de
algunos lugares nórticos del Perú, en especial el departamento de Ancash."
"Por esta razón hemos decidido incluir en la presente monografía la descripción de los
especímenes inéditos originarios de la región de lea, los cuales presentan, además, modalidades
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desconocidas y tienen la originalidad de haber sido trabajados en materiales que, como la arcilla y
el hueso, aún no han sido señalados por la información arqueológica y, por lo que atañe el empleo
del hueso, ni siquiera por las noticias de los cronistas. Ellos se encuentran en el Museo Regional
de Ica y han sido descubiertos en el yacimiento arqueológico de Carhua de la Bahía de la
Independencia en la provincia de Pisco."
"El primero es de arcilla, de color marrón oscuro, y está asentado sobre una base
igualmente de terracota, pero más tosca y de color más claro. Ha sido obtenido mediante el
empleo del molde, lo que confirió exacta proporcionalidad y una orgánica distribución de los
casilleros. Es de planta rectangular, de 47 x 32 cms., y tiene una altura de 5 cms., sin incluir la
base. Los compartimientos de forma cuadrada son veintidós y los rectangulares tres; los cuadrados
tienen una superficie que oscila entre los 4 y 5 cms. por cada lado; y los rectangulares 16 x 18 cms.
la del casillero central y 21.5 x 5.5 cms. la de los laterales; su profundidad es de 1.5 cms. También
aquí la disposición de los casilleros evidencia el propósito de presentar dos conjuntos, cada uno de
diez compartimientos cuadrados y uno rectangular, situados en las partes laterales del tablero y
separados por tres casilleros independientes, de los cuales dos son cuadrados y uno rectangular,
ubicados en el centro.
"AI lado de estos tableros cuya principal característica es la forma cóncava de sus
compartimientos existen otros en que los casilleros están simplemente señalados con rayas incisas
o dibujadas, o también mediante cuadritos de colores alternados muy parecidos a los que son
propios de las tablas que se emplean actualmente para jugar ajedrez o a las damas. La
representación del ajedrezado fue muy difundida en el antiguo Perú y llamó la atención de los
29
españoles desde el instante mismo de su llegada al país, siendo precisamente los testigos de la
captura de Atahuallpa los que describen los trajes de los acompañantes del inca como libreas con
colores dispuestos a manera de escaques de tablero de ajedrez. Trajes semejantes los podemos
admirar en las vitrinas de los museos o reproducidos en la figuración de la cerámica peruana de
todas las épocas y estilos."
"Como ejemplo de tablero con casilleros señalados mediante rayas, podemos mencionar el
que encontró Mas Uhle en una sepultura de Huancarcucho en el alto Ecuador (Uhle 1922: 230).
Tiene la forma de una pequeña loseta de 2,5 cm. de espesor y 805 x 9 cm de superficie y
representa grabados en una de sus caras. 10 casilleros distribuidos en triángulo escalerado; en
una de las esquinas del lado superior hay cavado en la piedra, un platillo de 5 cm. de profundidad,
separado del damero escalonado por un espacio con ornamentos constituidos por dos fajas con
puntos y una tercera con motivos de ramas de árbol. (fig. 10)
"Delineamientos también incisos es otro ejemplar presentado por Olaf Holm en la Mesa
Redonda de Arqueología de Guayaquil de 1057 y descrito en el ensayo titulado "Taptana o el
ajedrez de Atahuallpa" (Holm 1958) Se trata igualmente de una loseta de piedra arenisca, pero de
dimensiones mucho mayores que la de Uhle: 38x25 cm. De superficie por 7.5 cm de espesor. Su
procedencia probable es el austro ecuatoriano. En la parte superior hay un platillo de 12 cm. de
diámetro y un cm. de profundidad, cavado en la piedra. Inmediatamente debajo vienen dos campos
formados por líneas incisas y diagonalmente opuestas: cada campo está constituido por nueve
casilleros (3 x 3) y mide aproximadamente 9 cm. en cuadro."
“Como dijimos también en la alfarería el escaque sirvió de motivo para la decoración de las vasijas
o de los trajes de los personajes en ellas figurados; en este caso cuando se trata de
guerreros, significó las chapas o cintas metálicas que como blindaje protector recubren las cusmas
y los escudos. Sin embargo, a veces, el dibujo en cuadros o rectángulos, no está función de simple
decoración o para señalar aspectos particulares del atuendo, sino como modalidad precisa de un
verdadero artefacto en forma de tablero con escaques. De esta clase de representaciones nos
limitaremos a señalar dos, que pertenecen a la cerámica mochica. La Primera de ellas es la
escenografía de un huaco que Rafael Larco H. escogió para demostrar su tesis de la escritura
sobre pallares (Larco 1939, T,II: lámina XXIII). En la escena aparecen individuos rodeados de
pallares y en actitud de disponer sobre la arena algunas varillas que forman una especia de
enrejado o damero cuya particularidad consistía, quizá, en su fácil confección y en la rapidez con
que se podía desarmar. (Fig. 12). La segunda representación de tableros con escaques la
encontramos en una vasija del Museo de arqueología de Lima que ha sido por L. Y Th. Engl (Engl
1967: lámina 15 p.200) La escena de este cántaro consiste en un desfile de personas que
transportan con solemnidad un tablero de grandes proporciones, en cuya superficie están
delineados veinte casilleros (5 x 4), de los cuales la mayoría tiene dos puntos en su extremidad
superior. EI individuo que carga el tablero está precedido por dos guerreros ricamente ataviados y
seguido por músicos y cargadores de trofeos que llevan estacas en cuyas cimas están clavadas
cabezas humanas."
30
"El dibujo de este tablero es muy semejante, diríamos casi idéntico, al de una viñeta de la
difundida crónica de Guamán Poma de Ayala, aquella que ilustra la manera de contar de los
antiguos quipo-camayos (Guamán Poma 1936:360)."
“Yupanas y Taptanas”
"En relación con su uso, las tablas de escaques fueron interpretadas de tres maneras:
como maquetas arquitectónicas, como yupanas o ábacos y como taptanas o tablas empleadas en
los juegos de azar, especialmente aquellos que se practicaban en cumplimiento de ciertos
preceptos o ritos funerarios."
31
La tesis del ábaco tuvo su mejor representante en Carlos Wiener, que planteó y desarrolló
en el relato de su viaje por el departamento de Ancash (Wiener 1877) y después, en su obra Perú y
Bolivia (Wiener 1880). Fue en el pueblo de Huandoval, cerca de Caban y en la hacienda Urcon,
siete leguas de Corongo, donde este viajero tuvo la oportunidad de examinar dos tableros de
granito parecidos al de madera de Chordeleg, que habían sido encontrados en las ruinas de la
población prehispánica de Chucama y en la antigua apacheta del cerro Huauyan."
"Un relato tradicional, difundido en localidad y recogido probablemente de labios del cura
de Huandobal, sugirió Wiener la idea de que estos aparatos debían haber servido para calcular los
tributos que pagaban los ayllus de la zona "Según la leyenda, dice, en ellos fueron registradas, en
otros tiempos, por medio de granos de diferentes colores, las contribuciones de todos los
habitantes Huamachuco, representando cada color una tribu especial".
En cuanto a la manera realizar cálculo, piensa que "los diferentes pisos de estas especies
de depósitos tenían la particularidad de elevar al décuplo el valor del grano que allí se hallaba; de
manera que un grano en una división indicaba un valor de contribución que podía ser el décuplo o
céntuplo de aquél de otra división", Concluye expresando que, "en el Perú de ayer existía un cierto
orden de cosas que se reflejaba en el libro mayor de la relación exacta del Debe y Haber";
concepto este que explicaría el dualismo de los casilleros y torres porque señala que, en un mismo
tablero uno de los conjuntos de casilleros con su respectiva torre, servía para consignar el tributo
que se debía pagar mientras que el otro conjunto situado en el lado opuesto, registraba la cantidad
de trabajo a medida que se recaudaba."
"En cuanto a las fichas o marcas, se apuntaba lo de cada lado de la pisca con guijas que
eran movidas dentro de los escaques del tablero. Sin embargo era muy frecuente el uso de
frejoles, generalmente redondos, de varios géneros y nombres y, más que todo, de diferentes
colores. De ellos, los preferidos eran los llamados huairuros, lindísima semilla del huairo (Erythrina
corallodendron)" (más conocido como "sirari” en la región oriental de Bolivia), "árbol que crece en
las regiones cálidas de las vertientes orientales de los Andes. Parece que cuando el juego se
realizaba con fichas de huairuros, la pisca que se empleaba era de mayor tamaño y el propósito
del juego no era simplemente la distracción o la ganancia sino el cumplimiento de ciertos ritos o
ceremonias funerarias. Al respecto González Holguín apunta en su diccionario que la palabra
huairo significó el juego con este tipo de frejoles sobre todo en el velorio de cadáveres" (González
Holguín 1952); finalidad admitida por muchos cronistas que al comentar los actos ceremoniales
anteriores al entierro, señalan como de gran importancia el juego de la pisca"
"Para dar término a estas reflexiones sobre la taptana debemos considerar, por último, la
posibilidad de que de ella haya derivado la yupana, suposición que coincide, en parte, con la tesis
de Nordenskiöld que señala como un paralelismo cultural entre el Viejo y el Nuevo Mundo la
práctica de los juegos de fortuna con tablas para contar (Nordenskyöld 1931). Creemos que,
después de haberse inventado y usado por cierto tiempo la tabla de juego, surgió la idea de que
ella podía ser empleada también con fines contables. Esta creencia se basa principalmente en la
similitud que, en cuanto forma, disposición y número de casilleros, existe entre el tablero de juego
32
reproducido en el cántaro mochica y el auténtico ábaco incaico dibujado y descrito por Guamán
Poma: similitud que ha sugerido a algunos autores, entre ellos L. Y Th. Engl, la suposición de que
la escena del mencionado cántaro representa un cortejo que vuelve triunfante del combate,
llevando la tabla de contar que sirvió para calcular y liquidar el botín de guerra o los tributos
recaudados (Engl 1967 didascalia lam. 15). Otra razón favorable a nuestra manera de pensar es la
natural derivación que de la taptana a la yupana debió producirse cuando fue necesario facilitar el
recuento de las cosas con la adopción de un sistema de cómputo más rápido y eficiente."
54 55
"Es evidente que de todos los tipos de taptanas, el que mejor se presta para la finalidad
contable es el más simple, o sea aquel formado por casillas del mismo tamaño, distribuidas
uniformemente en sentido vertical y horizontal: en otros términos, un tablero que puede ser
confeccionado fácilmente con rayas trazadas sobre una plancha de madera o representadas
mediante esas famosas varillas dispuestas en enraejado que, de acuerdo con la interpretación de
R. Larco Hoyle, sirvieron para descifrar los mensajes escritos sobre pallares (Larco 1939, Cap.
V), o, según opinión de otros autores, representan taptanas donde los frejoles eran empleados
como fichas para señalar los tantos del juego (Vivante 1942)."
La figura que tenemos al lado es uno de los tableros parecido a una taptana que, aun hoy
en día es usado por los Yao de Mozambique, Este tablero es de 4 x 8, pues, los hay de menos
casilla circulares y, sólo es usado para jugar y no para realizar cálculos.
33
Interpretando la YUPANA
Si bien podemos colegir que entre el quipu, el ábaco y la yupana existen relaciones
concomitantes sobre su uso, por las razones ya indicadas en otro acápite, no, nos ocuparemos de
modo pormenorizado de las mismas, pues, muchos cronistas, ya se han ocupado de ello, por tanto
en lo que a nosotros concierne, centraremos nuestra atención sólo, a la Yupana propiamente
dicha. Por tanto, continuaremos con Radicati, toda vez que, es el que mejor interpreta la YUPANA,
de Guamán Poma, comparado con otros cronistas y, por lo que hemos estado viendo el material
que nos ha ofrecido hasta ahora. Luego, para no perdemos o, confundimos una vez más vamos a
observar el diseño junto al quipu-camayo, que nos legó Guamán Poma por lo que podríamos decir
que, para, él, la yupana es el complemento del quipu. Según el dibujo, la yupana era un tablero
con 20 casillas distribuidas en cinco filas de cuatro columnas. En otras. palabras diríamos que es
una matriz de 4 x 5.
En cada casilla aparece cierto número de círculos, correspondiéndoles cinco círculos a las
casillas de la primera columna, tres a las de la segunda, dos a las de la tercera y uno las de la
cuarta. Además, algunos de estos círculos son negros y otros son blancos. Esa observación hace
que algunos consideren que los círculos blancos representan sitios u hoyos destinados a ser
ocupados por elementos auxiliares de Cálculo, tales como piedrecillas, granos de quinua, maíz,
frijoles, etc. Por tanto, los círculos negros representarían lugares ocupados por elementos (a los
que podríamos llamar de fichas), luego la suposición sería válida, pues, a lo más podría, ponerse
cinco fichas en una casilla de la primera columna, o dos en una casilla de la tercera columna.
Una segunda opinión al respecto es que, las fichas de dos colores diferentes, se convierten
en un recurso muy útil, especialmente en la sustracción, asignando uno de los colores al minuendo
y el otro al sustraendo.
Aquí vamos a tomar íntegramente algunos fragmentos de lo que dice Pereyra sobre la
interpretación que hace Henry Wassén en su trabajo "The ancient Peruvian Abacus", porque
34
consideramos una información muy valiosa que no precisa ser interpretada y por ende
distorsionarla.
"En su estudio, este autor afirma que "en el imperio de los Incas para las cuentas en quipus
se usaban evidentemente tableros para la ejecución de operaciones aritméticas, esto es como
ayuda para recibir el resultado que después se anudaba en los hilos de los quipus." Así mismo
discrepa de Nordenskiöl y está de acuerdo con Locke en cuanto a que, por sus propias
características, el quipu no podía haber sido utilizado para efectuar cálculos."
Pereyra hace notar, la interpretación del ábaco relacionada con la yupana es la más
acertada, pues, concuerda con el sistema de numeración decimal que usaban en el incario sin
entrar en contradicción con las referencias de los cronistas.
De la anterior descripción queda claro que el autor admite la hipótesis de que en el tablero
de Guamán Poma los pequeños círculos dibujados en cada casilla indican el número máximo de
elementos que pueden colocarse en ella." Veamos este gráfico según el modelo de Wassén
35
En c) tenemos un 30, tres 15 y dos 1.= 47
Podemos decir que este último ejemplo es el más acertado, sin embargo, tal como observa
Pereyra, las dos últimas filas parecerían no tener función alguna, pero, la posibilidad de ser usadas
se daría en las “sumas altas” según Wassén, por lo tanto esa estructura vendría dada sólo por dos
columnas igual que en ábaco chino del ejemplo antes mostrado.
A las muchas formas de interpretar que realizaron otros investigadores como Wassén
Henry (1931), Hugo Pereyra (1990, Carlos Radicati de Primeglio (1990). Tal como en el modelo de
Wassén, las sucesivas filas, comenzando desde abajo, corresponden a las unidades, la primera
fila; decenas, la segunda; centenas, la tercera; millares, la cuarta y decenas de millar, la quinta.
Multiplicando por el número de fichas o marcas que contiene cada casilla.
Hugo Pereyra, considera que la cantidad de círculos existentes en una casilla indica el
valor que se le dará a cualquier ficha colocada en dicha casilla. Es decir, una ficha colocada en una
casilla con tres círculos tendrá un valor igual a 3.
A las muchas formas de interpretar que realizaron otros investigadores como Wassén
Henry (1931), Hugo Pereyra (1990, Carlos Radicati de Primeglio (1990). Tal como en el modelo de
Wassén, las sucesivas filas, comenzando desde abajo, corresponden a las unidades, la primera
fila; decenas, la segunda; centenas, la tercera; millares, la cuarta y decenas de millar, la quinta.
Multiplicando por el número de fichas o marcas que contiene cada casilla.
36
Hugo Pereyra, considera que la cantidad de círculos existentes en una casilla indica el
valor que se le dará a cualquier ficha colocada en dicha casilla. Es decir, una ficha colocada en una
casilla con tres círculos tendrá un valor igual a 3.
3x102 ó, 3x100; 2x102 ó, 2x100; 1x102 ó, 1x100; en la cuarta fila: 5x103 ó, 5x1000; 2x103 ó,
2x1000; 1x103 ó, 1x1000 y en la quinta fila: 5x104 ó, 5x10 000; 3x104 ó, 3x10000; 2x104 ó,
2x10000; 1x104 ó, 1x10 000;
Una vez analizadas las filas y columnas del tablero. Veamos cómo se escribirían algunos
números, por ejemplo el 20 y el 687.
37
.
38
39
40
OPERACIONES CON LA YUPANA
“… Pues verle otra suerte de quipos que usan de granos de maíz, es cosa que encanta;
porque una cuenta muy embarazosa, en que tendrá un muy buen contador que hacer por pluma y
tinta, para ver a cómo les cabe entre tantos, tanto de contribución, sacando tanto de allá, y
añadiendo tanto de acá, con otras cien retartalillas. Tomarán, uno aquí, tres allá, ocho no sé
dónde; pasarán un grano de aquí, trocarán tres de allá, en efecto ellos salen con su cuenta hecha
puntualísimamente sin errar un tilde; y mucho mejor se saben ellos poner por cuenta y razón de lo
que cabe a cada uno pagar ó dar, que sabremos nosotros dárselo por pluma y tinta averiguado. Si
esto no es ingenio, y si estos hombres son bestias, juzguémoslo quien quisiere, que lo que yo
juzgo de cierto es, que en aquello á que se aplican, nos hacen grandes ventajas” (Acosta 1954:
190).
Antes de iniciar las operaciones con la yupana, consideramos, que bien vale recalcar las
expresiones del Padre Acosta al inicio de esta página al manifestar su admiración por la forma
como llevaban las cuentas los nativos del incario y, veamos sólo estas dos expresiones: "Tomarán,
uno aquí, tres allá, ocho no sé donde; pasaran un grano de aquí, trocarán tres de allá, en efecto
ellos salen con su cuenta hecha puntualísimamente sin errar un tilde" y "Si esto no es ingenio, y si
estos hombres son bestias, juzguémoslos quien quisiere,... Claro se nota, como se tenía a menos
a nuestros ancestros al compararlos con "bestias" "... que lo que yo juzgo de cierto es, que en
aquello á que se aplican, nos hacen grandes ventajas" Con hidalguía reconoce el Padre la
superioridad intelectual de los nativos frente a la pseudosapiencia de los avasalladores y si esa
hidalguía la hubieran tenido dichos burócratas hispanos, otra sería nuestra historia.
Según los cronistas, con la yupana se pueden realizar las operaciones de adición,
sustracción y multiplicación .No obstante creemos haber descubierto un método experimental
sobre la división, aunque es muy posible que está se realizaba por sustracciones sucesivas. Eso lo
veremos a su debido tiempo.
Veamos el proceso
41
Las dos unidades se convierten en una ficha cuyo valor es 2 y las dos 5, se convierten en
una ficha cuyo valor es 10.
Después de la simplificación, estos son los valores finales en las dos filas en las que
realizó la reducción.
Las dos fichas 300 se convierten en dos fichas de 500 y de 100 y se tienen dos fichas de
500 y una de 100
Las dos fichas de 500 se convierten en una ficha de 1000 y finalmente se tiene una sola
ficha en cada casilla.
EI número resultante es 6142.
En resumen podemos decir que, para realizar las reducciones mediante la simplificación
hasta obtener el resultado final, lo único que se debe tener en cuenta son los valores que las
respectivas casillas de la yupana admiten en cualquiera de su filas y columnas.
a) Escribir o colocar las fichas sumando, cada una de ellas sucesivamente si eliminar las
anteriores que ya hubieran ocupado una casilla.
b) Una vez colocadas las fichas sumando que pueden ser todas del mismo color, se tendrá
como resultado que en varias casillas se encuentren mas de una ficha, siendo así, proceder a la
simplificación.
42
c) Realizar todas las reducciones necesarias hasta conseguir que haya como máximo una
sola ficha en cada casilla.
En la parte superior del tablero a) están los sumandos y dentro de él, sólo por razones
didácticas, tenemos las diferentes marcas que los representan, para el 18 hemos usado "o", el 22
con "." y el 47 con "x". En el tablero b) hemos simplificado las fichas de valor 2 y 3 y convertido a 5
por ello aparecen tres fichas en la casilla del 5; en el tablero c) en la casilla del 10, tenemos ahora
tres fichas y en la del 2 una ficha, luego su valor es de 5, eso implica que debemos colocar una
ficha en la casilla del 5; el tablero e) muestra que ya no hay más simplificaciones, luego, la
reducción está completa y el tablero con la respuesta lo tenemos como muestra el gráfico.
EI proceso de operar con la yupana resulta fácil debido a que ese proceso se realiza por
descomposición polinómica lo que pasamos a ilustrar cada operación realizada con la Yupana.
En este segundo ejemplo hemos seguido los mismos pasos que en el anterior y de igual
modo para cada sumando usamos los mismos símbolos que los representan 42 = x, 35=., y 73 =
o. Cada uno de los tableros nos muestra, las simplificaciones respectivas hasta llegar a la
reducción total en e).
43
44
Ahora vamos a operar con sumandos de cuatro dígitos.
Como hemos podido observar, en todas las operaciones, para poder simplificar al realizar
las reducciones, el único requisito es saber igualar valores menor o igual que diez en cualquiera de
las filas, pues, por ejemplo en la segunda fila, podemos decir, dos decenas más tres decenas son
cinco decenas y llevarnos a la casilla respectiva donde ya hay una ficha, dos-cinco decenas hacen
una centena, etc. etc.
45
¿Qué es la sustracción de Números Naturales en la Yupana?
a) Escribir o colocar las fichas Minuendo con un solo color, y las del "Sustraendo" con otro
color para facilitar las reducciones.
b) Una vez colocadas las fichas operando con distinto color, posiblemente se tendrá como
un primer resultado en el tablero, que en varias casillas se encuentren dos fichas de color
contrario. Siendo así, proceder a la simplificación retirando ambas fichas.
d) Realizar todas las descomposiciones necesarias hasta conseguir que haya como
máximo una ficha del color del "Minuendo" en cada casilla.
46
color contrario queda el resultado con las fichas del color del "Minuendo" en e), 87- 47 = 40.
Veamos por descomposición polinómica
Ejemplo 1) 87 – 47 87 = 80 + 7
47 = -40 + (-7)
40 = 40 + 0 = 40
Reiteradas las fichas de color contrario en el tablero a) podemos ver lo que queda en el
tablero b). La ficha de valor 100, la descomponemos en dos fichas de valor 50 -tablero c)-
Tomamos nuevamente la ficha de valor 50 y la descomponemos en dos fichas de valor 30 y 20 y
las colocamos en sus respectivas casillas –tablero d) -Retiramos las fichas de color contrario y
pasamos a descomponer la ficha de valor 30 en dos de valor 20 y 10 -tablero e)- , luego, la ficha de
valor 10, la descomponemos en dos de valor 5 -tablero f)-, nuevamente tomamos una ficha de
valor 5 y se la descompone en otras de valor 3 y 2- tablero g)-, finalmente se retiran las fichas de
color contrario y se tiene el tablero e) conteniendo el resultado o "Diferencia".
47
Si observamos todo el proceso en este último ejemplo vemos que no hay ninguna dificultad
en realizar la sustracción mediante la descomposición de los valores mayores en otros menores
equivalentes.
Descubrimos que en las unidades no es posible realizar la sustracción, esto implica que
previamente debemos reagrupar decenas a unidades.
Para una mejor reafirmación de lo tratado hasta aquí recomendamos realizar los ejercicios
siguientes:
48
ADICIÓN
SUSTRACCIÓN
Por razones didácticas y para una fácil comprensión, los ejemplos los realizaremos con
valores bajos para el multiplicador con respecto del multiplicando, a fin de manejar bien el
mecanismo operativo.
Supongamos que queremos elaborar la tabla del 2. Veamos cómo se procede en cada
caso.
Ejemplo 1
Ejemplo 2
Igual que en el caso anterior colocamos dos fichas en el valor, virtual de la casilla para
hacer 2 x 2, como el valor real es cuatro, ponemos las fichas donde corresponde y se tiene la
respuesta cuatro en b)
49
Ejemplo 3
Ejemplo 4
En este ejemplo ya no podemos proceder igual que en el caso anterior, por que no existe el
4 virtual, pero, obtenemos sumando los valores virtuales en a). Por tanto se colocan dos fichas en
cada valor virtual y luego se obtiene el valor real con la suma de 6 + 2 , que es el resultado de
multiplicar 4 x 2 = 8 en b).
Ejemplo 5
Ejemplo 6
Como después de los valores virtuales de 1, 2, 3 y 5 ya no tenemos los que les siguen,
siempre procederemos igual que en el ejemplo 4, para el 6 con 5 + 1. Y, no tendremos problema
alguno en proceder como ya sabemos.
50
A partir de ahora en todos los numerales que sean mayores que 5 y que no estén en el
tablero, siempre procederemos aplicando los pasos iniciales a sus respectivas sumas, así, para el
6, será 5 + 1, para el 7, 5 + 2, para el 8, 5 + 3 y para el 9, 5 + 3 + 1.
En el caso de las decenas, centenas, etc., el mecanismo también será análogo, pues, por
ej. Para el 40 será 30 + 10, el 70, 50 + 10, el 90 será 50 + 30 + 10, el 600 = 500 + 100, etc., etc.
Luego se aplicará a esas cantidades virtuales del tablero el mecanismo del ejemplo 4.
Ejemplo 7
El valor real de las fichas de la casilla 2 es 4, luego llevamos una ficha a la casilla del 3 y
otra a la del 1; el valor real de las dos fichas de la casilla del 5, es 10 y lo llevamos la casilla del 10.
Ejemplo 8
EI valor real de la casilla del 3 es 6 en a), luego llevamos una ficha a la casilla del 5 y otra
la del 1, como en la casilla del 5 tendríamos tres fichas el valor que representan dos fichas lo
llevamos a la casilla del 10 en b)
Ejemplo 9
La casilla 1 en a) tiene dos fichas cuyo valor real es 2, ese valor lo colocamos en la casilla
del 2 en b). Después tomamos los valores reales de una ficha de la casilla 2 y de la 3, que
sumados 3 + 2 nos da 5. Ese valor lo trasladamos a la casilla del 5 en c). En la casilla del 5
tenemos tres fichas cuyo valor real es 15, Tomamos dos fichas cuyo valor real es una decena y
ese valor lo llevamos a la casilla del 10 en d) de ese modo obtenemos el resultado final indicado en
la parte superior del tablero.
Veamos otros ejemplos con numerales virtuales mayores que el diez o sea de polinomio
por un monomio.
51
Ejemplo a)
Ahora se trata de multiplicar números de dos o más cifras, por tanto vamos a crear un
mecanismo muy simple que nos facilitará la operación. En primer lugar marcamos con una ficha las
casillas que representan al multiplicando. Luego, como el multiplicador es 2, aumentamos una
ficha más a cada casilla y se convierte en multiplicador. Una vez colocadas las fichas en las
casillas correspondientes, se procede a realizar la reducción, dos fichas en la casilla del 2, equivale
a 3 + 1 y, dos fichas en la casilla del 30 es igual a 50 + 10. El resultado de 32 x 2 = 64
Ejemplo b)
Siguiendo el mecanismo del anterior ejemplo, en el gráfico a) está el valor virtual de 59 por
la posición de las fichas, en el grafico b) observamos que el valor real de las dos fichas de la casilla
1 ha sido colocado en la casilla 2. En el c) muestra la reducción del valor real de las fichas de las
casillas 2 y 3 y llevadas a la casilla 5. Luego el valor real de las dos fichas de 5 se ha llevado a la
casilla 10 y finalmente se ha realizado el mismo proceso con las otras fichas.
Ejemplo c)
52
Igual que en el ejemplo anterior hemos colocado dos fichas representan el valor real del
multiplicador 2 en cada casilla correspondiente al valor virtual de 145. Luego procedemos a realizar
las reducciones correspondientes para cada valor real y dejando una ficha en la respectiva casilla,
tal como lo muestran los gráficos b), c) y d) de manera secuencial, hasta llegar al resultado final.
Antes de continuar con más multiplicaciones, queremos indicar que, hemos realizado
nuestra propia interpretación a diferencia de otras descritas por los cronistas consultados, sobre el
posible método o modalidad, cómo se realizaba la multiplicación aplicando la yupana y, esa
modalidad es la que hemos visto y aplicado hasta ahora. Pues, si tratamos de multiplicar,
colocando fichas por cada vez que se repita el multiplicador se tendría un enorme montón de fichas
en cada casilla, además de significar un trabajo muy engorroso en el proceso de reducción, lo que
inclusive podría llevar a confusiones, desvirtuando, la versatilidad y utilidad práctica que tenía la
yupana, pues, al intentar operar con multiplicandos con más de dos cifras, por ejemplo multiplicar
274 x 55, siguiendo los pasos de la descomposición polinómica y no teniendo suficientes espacios
en las casillas, donde registrar los productos parciales, las fichas con los valores de los mismos
tendrían que ser colocados en algún otro lugar o casillas, a las que hemos dado en llamarlas
auxiliares por consiguiente siguiendo nuestro método se evitaría el caos con las consecuencias
indicadas.
53
Tenemos dos caminos para realizar a operación, uno es por descomposición polinómica
iniciando con las centenas o decenas y otra por el método tradicional comenzando por las
unidades.
Comenzamos utilizando éste último. Siguiendo nuestro método hemos colocado primero
una ficha para determinar el número 274 como multiplicando, después hemos completado al 5 con
las otras cuatro fichas que corresponden al multiplicador, el tablero a) muestra esta operación.
54
Finalmente tomamos el valor real 9000 de las tres fichas de la casilla de 1000 y de las tres
de la casilla de 2000 y las reducimos colocándolas donde corresponde, una a la casilla de 1000, la
segunda a la casilla de 2000 y la tercera a la de 5000 y obtenemos el resultado final presentado en
la parte superior del tablero m). Por la observación de tantos gráficos utilizados para la
demostración, seguramente nos parece un trabajo muy largo y engorroso, sin embargo en la
práctica, no es así, pues, todos los pasos de reducción y simplificación se los realizan casi
simultáneamente, trasladando valores de una casilla a otra.
acostumbrada por descomposición polinómica. Para ello vamos a iniciar primero multiplicando 274
por 30 y luego será 274 x 5.
55
Iniciamos 274 x 3 y después por 10 para que sea por 30, tablero a), el valor real de las
casillas 10 y 30 b) es 3 fichas de 10 y 3 fichas de 30 y 3, procedemos a la reducción obtenemos lo
indicado en c). Igualmente reducimos las dos fichas de la casilla 50 a la casilla 100 y tenemos d).
EI valor real de la ficha de la casilla 100 y de las tres fichas de la casilla 200 las reducimos y se
llevan a la casilla 500 e), ese valor real llevamos a la casilla 1000 f) y tenemos el producto parcial
en g), sólo por razones didácticas les hemos cambiado el color a las fichas. Ahora multiplicamos
274 x 5 colocando las fichas en el respectivo valor virtual h). Haciendo la reducción del valor real
de las fichas de las casillas 10 y 3, tenemos i), igualmente las fichas de las casillas 10, 20 y 50, las
reducimos y tenemos j). El valor real 1500 de las 3 fichas de la casilla 100 y de las 6 fichas de la
casilla 200 en k) las reducimos a la casilla 500 en I). Las dos fichas de valor real de 500 las
reducimos y las llevamos a la casilla de 1000. Luego, no teniendo que hacer más reducciones
cambiamos el color de las dos fichas del producto parcial anterior y tenemos el resultado final en
m).
En todo el proceso de esta operación ejemplo, dado que hemos trabajado con números
pequeños no hemos necesitado usar de casillas auxiliares y por tanto diríamos que ha sido fácil la
operación.
56
La División de los Números Naturales en la Yupana.
Ejemplo 1. 2: 2
En primer lugar hemos adoptado la decisión de usar fichas blancas para indicar el
dividendo y así, diferenciar de las fichas de la descomposición. En este ejemplo tomamos el valor
real de 2 y lo descomponemos en dos unidades que se colocan en la casilla de valor virtual "1" en
b).
Luego pasamos esas dos unidades a la casilla de valor virtual "2" convertida en una sola
ficha, que ficha, que finalmente es la respuesta buscada en c).
57
Ejemplo 2 4:2
Como en nuestro tablero no dispone del valor virtual “4”. Usamos las casillas que lo
representan por su sumatoria 3 + 1. Colocamos las fichas blancas en las casillas 3 y 1 en a), luego
pasamos, el valor real de 3 descompuesto en 2 y 1 a las respectivas casillas en b)
Tomamos las dos unidades (fichas blancas y negra) de la casilla 1 y las trasladamos a la
casilla 2 siendo esta la operación final, cuyo resultado es 2 por el número de fichas que se
encuentran en la casilla de valor virtual 2 que es la casilla de divisor por tanto el cociente es 2.
Ejemplo 3. 6:2
Ejemplo 4 8:2
58
Como ya sabemos, al no tener el valor virtual de 8 en el tablero colocamos las fichas en las
casillas que hacen la sumatoria de 5+3, a). Pasamos a descomponer el valor real de 5 en 3 y 2 y
colocamos en las respectivas casillas, b). Realizamos una operación análoga con el valor real de 3
y pasamos a colocar las fichas donde corresponde, c). Nuevamente realizamos otra
descomposición y tenemos que muestra d).
Para finalizar la operación, las dos fichas que se encuentran en la casilla 1, las convertimos
en una y las pasamos a la casilla 2. Ahora tenemos 4 fichas en la casilla 2 de f), que representan al
cociente de la división propuesta.
Ejemplo 5 10: 2
Ejemplo 6 12 : 2
Con el procedimiento del ejemplo anterior hemos realizado la división indicada de 12:2 y
se ha conseguido el cociente de 6 fichas, las mismas que tomadas en su valor real conjunto
siguen teniendo el valor de 12.
59
Considerando que ya tenemos suficientes ejemplos de división con dividendos menores
que 20 y por un divisor simple que tiene su casilla como es el 2, a continuación vamos a ver con
otros mayores 20 y menores que 100, para divisiones por el divisor de un cifra. Sin embargo.
Debido a que serán distintos divisores y además que se encuentran en dos casillas, como el caso
del 4, 6, 7, 8, ó 9, esas casillas las tendremos con el fondo sombreado y así denotar al valor virtual
del divisor.
Dado que el divisor debe ocupar dos casillas, las mismas las tenemos sombreadas. Luego,
procedemos a descomponer la ficha de la casilla del 30 en a), como en el ejemplo anterior y las
trasladamos a la casilla del 10, después las convertimos en 6 fichas de valor 5 y las llevamos a la
casilla del 5 en b), Tomamos dos fichas de 5 y las descomponemos en fichas de 3 y 2 y las
colocamos en las casillas correspondientes en c), finalmente las dos fichas de la casilla 3, las
convertimos en 3 fichas de valor 2 cada una y las colocamos en la casilla del 2 en d). Observando
el tablero vemos que en ambas casillas sombreadas existe el mismo número de fichas que
representan al cociente buscado y cuyos valores reales sumados nos da 35. Luego, la división se
ha realizado correctamente.
Veamos otros ejemplos en los que se justifica la necesidad de poseer un tablero auxiliar,
mas, ante la falta de éste se colocan las fichas sobrantes fuera de la casilla que sirve para
representar al cociente.
60
Ejemplo 9. Dividir 36 : 2
Los pasos a) y b) ya los conocemos, por tanto pasamos a descomponer las 6 fichas negras
de la casilla 5 en fichas equivalentes de 3 y 2 y las colocamos donde corresponde en c), a
continuación también tomamos las dos fichas blancas, una de la casilla 5 y otra de la 1 y las
reemplazamos por su valor de 6 con dos fichas de 3 y las colocamos en la casilla del 3 en d) y así
completamos la operación. El cociente es 12. Y, 12 veces 3 es 36. Luego la operación es correcta.
A diferencia de los dos ejemplos anteriores, el divisor 4 precisa de dos casillas las que
hemos sombreado. Como los pasos de a) y b) ya los conocemos, pasamos a descomponer las 7
fichas de la casilla 5 en los valores de 3 y 2 en c), después, pasamos a distribuir las fichas de la
61
casilla 2, tomamos 3 de valor 2 de la casilla 2 y las regresamos a la casilla 3 convertidas en 2
fichas, las otras 4 fichas restantes las llevamos convertidas en 8 fichas a la casilla del 1 y se juntan
a la ficha blanca que allí había y ahora tenemos a 9 fichas en cada casilla sombreada, por tanto
ese es el número del cociente.
Dado que conocemos los pasos a) y b) iniciamos en c) tomando dos fichas de la casilla 5 y
las convertimos en valores de 3 y 2 y las colocamos donde corresponde las 2 fichas de la casilla 2
las pasamos a la 1 en d) convertidas en 4 fichas. Nuevamente tomamos una ficha de la casilla 5 la
convertimos en dos fichas de 2 y 3 y las colocamos donde corresponden. Levantamos la ficha
blanca de la casilla 1 y la negra de la 2, como, ambas equivalen a una de 3, colocamos una ficha
en la casilla 3 en f). Ahora ya tenemos igual número de fichas en cada casilla sombreada, eso
implica que la operación ha sido correcta.
62
Ejemplo 14. Dividir 36: 12
En esta operación el divisor tiene también dos cifras cuyo valor excede a 10, pero, no nos
hacemos problema, pues ya sabemos como repartir las fichas en casillas que representan la
sumatoria del divisor. La ficha tomada de la casilla del 30 la convertimos en 3 fichas de valor 10,
luego pasamos a tomar la ficha blanca de la casilla del 5 y la descomponemos en los valores de 3
y 2 en b). La ficha de la casilla del 3 la descomponemos en los valores 2 y 1 y las colocamos
respectivamente donde corresponden en d) Las 2 fichas de la casilla del 1 las convertimos en una
de valor 2 y la pasamos a la casilla del 2, finalizando la operación, pues, ya tenemos las fichas del
cociente en las casillas sombreadas que representan al divisor. 3 fichas que representan un 30 y 3
que representan un 6. Por tanto la división es correcta.
Ya conocemos cómo realizar lo indicado en a) y b), por ello pasamos una ficha de la casilla
del 10 una ficha descompuesta en 2 fichas de 5 y las colocamos en la respectiva casilla en c).
Tomamos las dos fichas blancas, una de la casilla 5 y otra de la 1 y las reemplazamos por su valor
de 6 con dos fichas de 3 y las colocamos en la casilla del 3 en d). Las tres casillas sombreadas del
divisor 18 tienen igual número de fichas, 2 en cada una, representando al número del cociente.
63
Ejemplo 16. Dividir 270 : 18
Nuestra primera acción es marcar las casillas que serán las representantes de del divisor.
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Una ficha de 10 = 2 de 5; una de 5 = una de 3 y una de 2; una de 3 = una de 2 y una de 1,
finalmente una de 2 = 2 de uno.
Todos los ejemplos que hemos visto hasta ahora, están referidos a divisiones exactas, por
lo tanto vamos a ver un ejemplo cuyo cociente no es exacto y además su número tiene más cifras
en ambos términos.
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del 5 en n), de las 10 fichas tomamos 4 y las descomponemos en 4 de 3 y 4 de 2 colocándolas en
las respectivas casillas en o), las 4 fichas de la casilla del 2 las convertimos en 8 fichas pero de
ellas tomamos 3 y las convertimos en una que la trasladamos a la casilla del 3 para aumentar
las 5 ya existentes quedando ahora 6 en esa casilla en p). Ahora tenemos el mismo número de
fichas en todas las casillas sombreadas que representan al divisor siendo por tanto el cociente 6.
Las 5 fichas que quedan en la casilla del 1 son las que representan al residuo.
Debemos indicar que, puede darse el casó en el cual, el número de fichas restantes,
fuera igual o mayor a las del cociente, pero, por la regla establecida de que en todas las casillas
que representan al divisor debe existir el mismo número de fichas y además, el valor real de las
sobrantes deberá ser siempre menor que el divisor, al comprobar con 45 538 : 7588, veremos que
nos da el mismo cociente pero un residuo de 8, ó 45 550 : 7588 = 6 R 22. Sin embargo como una
muestra real, verifiquemos con el ejemplo siguiente.
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Ejemplo 18. Dividir 85 : 15
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LA YUPANA BOLIVIANA
Esta yupana tiene un pequeño parecido con la yupana original de Guamán Poma, que
analizamos en la página 53, decimos parecido, pues, aquí presentamos dos gráficos para ver la
analogía o diferencia entre ambas “yupanas”.
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Sin embargo tal cual lo vimos en la página 57, para anotar un número de dos cifras, lo más
que se puede ocupar, son las dos primeras filas, colocando este tablero en forma horizontal,
haciendo que los 5 círculos queden en la primera fila de abajo hacia arriba como lo indica el Graf.
3. De donde se desprende el formato de la yupana boliviana padronizada por el Min. Educ. toman
do en cuenta sólo las tres primeras filas haciendo un total de 10 círculos en cada columna, como lo
muestra el Yupana Boliviana Graf. 4. Esto implica que, para representar cualquier dígito de 1 al 9
basta llenar uno cualquiera de los círculos de la primera columna, preferentemente, empezando,
par el primero de la parte menor derecha (Graf. 5), los cuales al llenarse formarían la unidad del
orden inmediato superior, en este caso las 10 unidades forman una decena, del mismo modo al
llenarse las diez 10 decenas forman una centena y 10 centenas forman una unidad de mil, así
sucesivamente según sea el número de cifras del número resultante después de utilizar en una
operación de adición.
Se puede apreciar claramente que la representación es muy simple, pues bastará colocar un grano
en el círculo vacío respectivamente según sea el número a ser representado. Una vez llenos los
diez círculos, tomar un nuevo círculo de la columna de las decenas y comenzar a marcar tal
como lo indica el Graf. 6. Luego, para cualquiera de los números dependiendo del número de las
cifras se podrá usar dos o más columnas. Ver los ejemplos.
Si bien resulta fácil representar cantidades vemos a continuación como se pueden realizar
operaciones básicas de adición, sustracción, multiplicación y división.
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MODELOS DE ADICIÓN
Se colocan las 8 fichas del primer sumando en la columna de las unidades en a), luego se
continua con el siguiente sumando 7, pero nos sobran 5 fichas, porque ya se llenó la columna de
la unidades en b), entonces, esas 10 fichas las convertimos en una sola de valor 10, o sea una
decena y la colocamos en la columna de las decenas en c) y se tiene 15. Por razones
didácticas hemos usado dos colores de fichas para diferenciar los sumandos y ver el proceso
gráficamente, pues, en la práctica, no hace falta diferenciar los sumandos, pero, las unidades de
las decenas, sí. Los colores y el tamaño de las fichas para unidades, decenas, centenas, etc.,
resultan de un acuerdo convencional
Como en el ejemplo anterior comenzamos colocando las fichas del primer sumando 16 en
las correspondientes columnas de las unidades y las decenas en a), luego pasamos a colocar el
siguiente sumando en b) y tenemos 58, lo que muestra c).
MODELOS DE SUSTRACCIÓN
Ejemplo 1 15 -7
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Para realizar esta sustracción, la decena de a) primero la descomponemos en 10 unidades
que se juntan a las otras 5 de la columna de las unidades para tener las fichas minuendo, pero,
como la columna de las unidades ha sido desbordada, se colocan las fichas sobrantes
fuera de ella en b), luego cambiamos el color de las 7 fichas sustraendo en c) y, procedemos a
retirarlas y obtenemos el resultado o diferencia 8 en d).
Ejemplo 2 58 – 42
Comparando este este ejemplo con el anterior, luego de determinar el minuendo 58 en a),
vemos que fue más fácil cambiar de color a las fichas que representan al sustraendo 42 en b) y,
proceder a retirarlas en c), obteniendo de ese modo la diferencia 16.
Ejemplo 3 101 - 34
MODELOS DE MULTIPLICACIÓN
Para realizar la multiplicación de una cifra por una se coloca el número de fichas del
multiplicando 3 en a) y b), tantas veces como sumando, tal cual lo indica el multiplicador 2, luego,
el producto resulta del total de fichas colocadas en c). Como en otros algoritmos por razones
didácticas hemos usado dos colores de fichas para apreciar más gráficamente el proceso, pues,
en la práctica todas las fichas pueden ser de un solo color por cada columna.
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Ejemplo 2 23 x 3
Igual que en los ejemplos precedentes basta repetir el multiplicando tantas veces como lo
indica el multiplicador, como en este caso el multiplicador es 3, por ello tenemos en una vez en a),
2 veces en b), 3 veces en c), finalmente esta última acción determina la operación final y tenemos
el producto en d), con fichas de un solo color para las unidades y de otro color para las decenas.
Ejemplo 3 234 x 2
En este ejemplo hemos seguido los mismos pasos que en el ejemplo anterior, por tanto, es
difícil multiplicar por una sola cifra.
Ejemplo 4 23 x 24
En este ejemplo tenemos una multiplicación de dos por dos cifras. Para realizar la
operación utilizamos la descomposición polinómica en el multiplicador y luego procedemos a
multiplicar tal como sabemos En a) y b) tenemos el producto parcial de 23 x 4 = 92. En c) y d),
hemos realizado dos operaciones, como 20 es igual a 2 x 10, primero hemos multiplicado 23 x 2
repitiendo el 23 dos veces en c) y luego por 10, para ello ha sido suficiente recorrer la cantidad
anterior una posición hacia la izquierda y hemos obtenido el otro producto parcial de 460 en d).
Procedemos a sumar los dos productos parciales en e), como las fichas de las decenas han
desbordado esa columna, las fichas sobrantes las colocamos afuera. Las 10 decenas las
convertimos en una centena y la colocamos en esa columna en f) y tenemos el producto total en
g).
Al operar con números de mayor cantidad de cifras en las que harán centenas, unidades
de mil, decenas de mil, etc. Se procede como en el ejemplo anterior, primero multiplicando por el
dígito indicado y luego recorriendo uno, dos, tres, etc., lugares hacia la izquierda según sea por 10,
100, 1000, etc., respectivamente.
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MODELOS DE DIVISIÓN
Ejemplo 1 6:2
Por razones didácticas en el uso del color hemos aumentado el tamaño de los gráficos.
Las 6 fichas que están representadas en a), se recuentan de 2 en 2 como en b), marcando
cada par de fichas con un color hasta que no quede ninguna. Luego se cuentan cuántos grupos de
2 fichas se han formado y, vemos que se formaron 3 grupos de 2 fichas. Por tanto dividir 6 : 2 es 3.
Como se indica en c).
Ejemplo 2 12 : 4.
Para efectuar esta división, en primer lugar tenemos que descomponer la decena en 10
unidades y llevarlas a la respectiva casilla en b). Como ellas han desbordado la columna, las
sobrantes se las coloca fuera. Luego procedemos como en el anterior a recontar de 3 en 3 fichas
y darles un color de modo que se note cada grupo en c) y tenemos 12 : 3 = 4.
Observación.- En este ejemplo se ve fácil realizar la división por descomposición de la
decena sin embargo si se tratara de un número mayor como por ejemplo 38 : 2, el desborde de
las fichas en la columna de las unidades sería tal, que daría lugar a una confusión y la operación
habría que realizarla en otro lugar o creando casillas auxiliares, salvo que se trabaje siempre que
sea posible, como lo indica el ejemplo siguiente.
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Ejemplo 3 48 : 4.
Tenemos las fichas de las 4 decenas en un color y las 8 unidades en otro. Observamos
que en ambas columnas hay un número par de fichas además que, las podemos agrupar de a
cuatro como lo indica el divisor. Para hacerlo notar gráficamente cambiamos de color dos fichas de
las decenas y cuatro de las unidades y obtenemos 2 grupos de decenas con 2 fichas y 2 grupos
de unidades con 4 fichas luego vemos en b) que el resultado o cociente de 48 : 4 es 24.
Ejemplo 4 66 : 5
En este ejemplo, también ambas cifras del dividendo son pares. Si procedemos como en el
ejemplo anterior tenemos a), pero, vemos que sobra una ficha en las decenas y otra en las
unidades, equivalente a un residuo de 11, indicando que ese valor es mayor que el divisor, luego
debemos descomponer la decena y llevar esas fichas a la columna de las unidades en b), que
desbordan la columna, formamos más grupos de 5 y obtenemos 1 grupo en las decenas y 3 en las
decenas y 3 en las unidades nos sobra una ficha como residuo. En consecuencia 66:5 =13 R1.
Ejemplo 5 66 : 22
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En este ejemplo tenemos también cifras pares en las decenas y unidades del dividendo
en a), pero, además son iguales. Procedemos como en el ejemplo anterior tomando 2 fichas de las
decenas y 2 de la unidades, marcando con colores diferentes para que se distingan de las fichas
de la proposición inicial y conseguimos 3 grupos en las decenas y 3 grupos en las unidades.
Quedando sin agrupar 3 fichas en las unidades, las que resultan ser las fichas del residuo. Luego,
69 : 22 = 3 R 3.
Ejemplo 6 89 : 24
En este ejemplo tanto las fichas de las decenas como las de las unidades ya no son pares
ambas. Sin embargo procedemos como en el caso anterior tomando 2 fichas de las decenas y 4
fichas de las unidades. Pero conseguimos agrupar sólo 2 grupos de 24 y nos quedan 2 decenas y
una unidad. Por tanto, tomamos una decena y la descomponemos en 10 unidades y las llevamos
a la columna de las unidades. Como ya teníamos dos decenas marcadas, agrupamos 4 fichas de
las unidades y tenemos 3 grupos de 24 y sobra una decena y siete unidades. Por tanto. 89 : 24 =
3 con residuo de 17.
Podríamos seguir dando más ejemplos para realizar la operación de división con la
YUPANA boliviana, haciendo notar la poca practicidad de la misma, como coadyuvante del
aprendizaje de la Matemática, sin embargo nos abstenemos por las razones que hacemos notar
más adelante en la "conclusión"
CONCLUSIÓN
De igual modo consideramos que los diferentes modelos presentados para las
operaciones, pero, sobre todo para la división, posiblemente, no sean los suficientes y quizá se
precisen de otros más explícitos, sin embargo, pensamos, que silo hiciéramos así, tomando en
cuenta ese criterio, estaríamos limitando la satisfacción de descubrir y aprender nuevas técnicas a
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quienes ingresen en ese maravilloso mundo de la construcción del aprendizaje, a partir de la propia
iniciativa.
Para tener siempre una Yupana a la mano que pueda ser llevada a cualquier lugar, la
misma se la puede construir apenas con 45 palitos de fósforos colados a una hoja de papel bond
oficio formando un casillero de 20 cuadritos de 4 x 5, todos iguales de tamaño de los palitos de
fósforos. Y, en lugar de fichas, se pueden utilizar los mismos palitos partidos por la mitad,
quedando una cantidad con la cabecita negra y otra simplemente palitos. Esto para diferenciarlos
en el momento de utilizarlos, ya sea, en la operación de sustracción o división como lo vimos en los
respectivos modelos.
Queremos resaltar de modo especial, la invalorable ayuda que nos presto el Dr. Juan
Ansión en nuestras consultas a través de la internet. Y por haber tomado nota de sus apuntes de la
coletanea publicada por el "Consejo de Ciencia y Tecnología del Perú. CONCYTEC"
Finalmente, nuestra gratitud a todos quienes de uno u otro modo nos insuflaron el valor
para dar a la luz este ensayo que en un principio estaba destinado a ser apenas un resumen de
apuntes destinado al uso de la yupana, que sin embargo, se tuvo que ver aunque sea de modo
rápido al quipu como el disco duro del computador incaico.
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