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Relación de Las Economía Ambiental Con Otras Ciencias.

Una disciplina muy cercana es la de la economía ecológica. Una diferencia es que la economía ecológica es una disciplina con menos tradición que la economía ambiental. [4] “La economía ecológica va más allá de las concepciones convencionales de las disciplinas científicas y pretende integrar y sintetizar muy distintas perspectivas disciplinarias para lograr un mundo ecológico y económicamente sostenible.”

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Relación de Las Economía Ambiental Con Otras Ciencias.

Una disciplina muy cercana es la de la economía ecológica. Una diferencia es que la economía ecológica es una disciplina con menos tradición que la economía ambiental. [4] “La economía ecológica va más allá de las concepciones convencionales de las disciplinas científicas y pretende integrar y sintetizar muy distintas perspectivas disciplinarias para lograr un mundo ecológico y económicamente sostenible.”

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Introducción

Partimos de la base de que los recursos naturales y ambientales son escasos, por
tanto en economía ambiental se estudia cómo utilizar esos recursos naturales para
beneficio de las generaciones presentes y futuras. En las últimas décadas la
economía ambiental se ha desarrollado muy rápidamente como disciplina científica
debido a que las relaciones entre medio ambiente y economía se han hecho más
patentes en los últimos años. [1] El mayor conocimiento acerca de los impactos
ambientales sobre las actividades humanas y de las actividades humanas sobre el
medio ambiente ha contribuido al desarrollo de la economía ambiental. [2] La
biodiversidad o riqueza en especies es importante para garantizar la estabilidad y
flexibilidad de un sistema ecológico. [3] La combinación de nuevos conocimientos
junto con la creciente generación de residuos y los límites de la naturaleza en la
provisión y renovación de los bienes incrementa la necesidad de hallar principios
útiles que contemplen el hecho de que los recursos de la tierra forman parte de un
sistema más o menos cerrado. [4]

Relación de las economía ambiental con otras ciencias.

Economía ambiental – Economía ecológica

Una disciplina muy cercana es la de la economía ecológica. Una diferencia es que


la economía ecológica es una disciplina con menos tradición que la economía
ambiental. [4] “La economía ecológica va más allá de las concepciones
convencionales de las disciplinas científicas y pretende integrar y sintetizar muy
distintas perspectivas disciplinarias para lograr un mundo ecológico y
económicamente sostenible.” [2] También consideran a la economía ambiental
como una materia donde los problemas se estudian bien a muy corto plazo, bien a
muy largo plazo. Según los economistas neoclásicos, el horizonte temporal en la
economía ambiental no pasa de los cincuenta años. [3]

Nuestros recursos naturales y ambientales se han contemplado habitualmente


como elementos para utilizar en la producción de bienes (factores de producción).
[4] Se han utilizado como materias primas en la producción de bienes y servicios.
Por ejemplo, en la edad de piedra esta última se utilizaba para confeccionar
herramientas. [5] La gente que vivía en la edad de piedra difícilmente podía percibir
la piedra como un factor limitativo o como un recurso escaso. [2] Más bien era el
conocimiento sobre cómo confeccionar las herramientas lo que constituía un
recurso escaso. El posterior desarrollo, y sobre todo la revolución industrial, ha
llevado a un uso creciente del medio ambiente y los recursos naturales, lo cual ha
contribuido a la toma de conciencia de que el entorno y los recursos naturales son
en realidad escasos. [4]

Ecosistemas
De acuerdo con la teoría económica tradicional, la sociedad dispone de diversos
factores de producción que pueden clasificarse en las categorías siguientes: trabajo,
capital y recursos naturales. [1] En la actualidad, esta visión tradicional se ha
modificado sobre todo con respecto a la noción de capital. Podemos pensar en el
conjunto de recursos en términos de tres tipos de capital: capital humano, capital
real y capital natural. [1] Los ecosistemas también se pueden considerar como parte
de nuestro capital, en este caso natural, por analogía con el capital real (máquinas,
edificios, etc.), que son importantes para la producción. [4] Los ecosistemas son
importantes para nuestro suministro de agua, para la producción de alimentos y de
recursos renovables. [5] Los ecosistemas contienen la información genética y los
procesos necesarios para el desarrollo de la vida. Los ecosistemas también pueden
asimilar la contaminación, prevenir inundaciones y mantener una dispersión
adecuada de los gases en la atmósfera, entre otras funciones. [3]

Los recursos naturales y ambientales como bienes de consumo.


Los recursos ambientales y naturales se utilizan como factores de producción y
contribuyen indirectamente al bienestar de las personas. La humanidad ha utilizado
siempre los servicios que el medio ambiente ofrece. [3] Esos servicios pueden tomar
forma de frutos, verduras o carne que obtenemos del sistema ecológico, además de
servicios de recreación y la belleza del patrimonio natural, que actualmente pueden
representar un componente importante del bienestar de muchas personas. [4] Si el
entorno se deteriora porque aumentamos rápidamente el uso de nuestros recursos
naturales, esto puede llevarnos a una pérdida de calidad de vida. [1]

Hay aspectos que conllevan problemas interesantes desde el punto de vista de la


economía ambiental. [3] El primero es que muchos bienes ambientales son
consumidos o utilizados por muchos de nosotros a la vez (Si observo las cataratas
de Iguazú y otras bellezas naturales, otra gente puede disfrutarlas al mismo tiempo).
[2] El segundo hecho es que muchos bienes ambientales no tienen propietario
directo. Esta falta de definición de los derechos de propiedad incrementa el riesgo
de sobreexplotación o consumo excesivo de un recurso. [5]

Economía ambiental y Economía de los recursos naturales


Se denomina economía ambiental al estudio de la relación de las actividades
económicas con el medio ambiente, [1] sin embargo la economía ambiental contiene
dos disciplinas: la economía de los recursos naturales y la ambiental. [3]
La economía de los recursos naturales se dedica al estudio de la relación de la
actividad económica que toma recursos de su entorno para llevarla a cabo.[4] Es
decir, los recursos como parte de la función de producción, como inputs o insumos
para la actividad humana. [3] Las relaciones de salida o retorno de las actividades
económicas hacia el medio ambiente, constituyen el campo de estudio de la
economía ambiental en sentido estricto; es decir, el resto de flujos. [1]

La economía de los recursos naturales estudia aspectos muy diversos: Recursos


renovables y no renovables. Los recursos renovables incluyen los bosques, las
pesquerías, la ganadería, el agua. Los no renovables son aquellos cuyo periodo de
reposición es demasiado largo a escala humana, como para considerarlos
renovables. [2] El petróleo constituye un buen ejemplo de recurso no renovable, al
igual que la mayoría de minerales. [3]
Este enfoque de los estudios explica, por ejemplo, los inventos de finales del siglo
XVIII y principios del siglo XIX, no como un desarrollo técnico sino sobre sus efectos
sobre la oferta y demanda de los factores de producción que entraron en su
fabricación y la oferta y demanda de bienes y servicios a que dieron lugar. [5]

Conclusión
La economía ambiental se basa en los mismos conceptos y presupuestos básicos
de la teoría neoclásica, que concentra el análisis sobre la escasez, y donde los
bienes son valorados según su abundancia; cuando se trata de bienes escasos son
considerados bienes económicos, mientras que cuando son bienes abundantes, no
son económicos.[2]

Tiene como una de sus características el hecho de que realiza un análisis del medio
ambiente en términos económicos y cuantitativos, en función de precios, costes y
beneficios monetarios.[1]

A través de la economía ambiental, se buscan soluciones de tipo económico al


problema de incompatibilidad entre los usos privados, y los usos sociales que se les
da a los recursos naturales.[3]

Propone un conjunto de instrumentos económicos, llamados “incentivos


económicos”, que tienen como objetivo principal modificar las variables económicas
reales, disminuyendo los niveles de contaminación. [1] Abarca el estudio de los
problemas ambientales empleando la visión y las herramientas de la economía.[5]
Fuentes

Fuente [1]: Alier, J. y Roca, J. (2001). Economía ecológica y política ambiental.


México, D.F. FCE.

Fuente [2]: Alier, J. (2004). El rol de la economía ecológica en América Latina. In


Globalización y Desarrollo en América Latina. FLACSO Ecuador.

Fuente [3]: Behrens, W., Meadows, D.H., Meadows, D.L. y Randers, J. (1972). Los
límites del crecimiento. México, D.F. FCE.

Fuente [4]: Costanza, R., Cumberland, J., Daly, H., Goodland, R. y Norgaard, R.,
(1999). Introducción a la economía ecológica. Madrid: AENOR.

Fuente [5]: Constanza et al. (1997). The value of the world’s ecosystem services
and natural capital. In Nature, Vol. 387, pp 253-260.

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