“Los intelectuales en la edad media” Jacques Le Goff
Las universidades pueden ser consideradas catedrales del saber debido a que son el espacio cultural común.
El paisaje intelectual se desarrolla en medio de las ciudades emergentes (en las que se montan las escuelas
urbanas laicas), la división del trabajo, las nuevas instituciones y estas catedrales del saber; que a diferencia de lo que
encontramos en la Alta Edad Media (cultura parcelada), se agrupan en el espacio común de la cristiandad.
Gracias a las escuelas urbanas se crea un panorama de democratización de la educación en el que el ascenso
social de campesinos (de muy pocos), es posible gracias al sistema que occidente adopta de los chinos: el examen. Por
lo tanto, de ese modo la impermeabilidad de la sociedad, al añadirse otro modo de acceso al poder a los tres ya
existentes (nacimiento, riqueza o sorteo) se hace un poco más transpirable. Y en la teoría, la iglesia cristiana abre el
camino a todos a los honores eclesiásticos.
Los nuevos intelectuales son vendedores de palabras, se ponen al servicio de la Iglesia y el estado, pero no
pierden su espíritu crítico. También son los maestros de escuela, cuyo oficio es pensar y enseñar su pensamiento.
Con el establecimiento de este estamento universitario, encontramos una sociedad trifuncional: la función
religiosa, la función políticoguerrera, la función universitaria (como símbolo de la economía productiva, la
abundancia). La universidad se establece como poder político.
Le Goff: Siglo XIII 7
3 Según la descripción del padre Mandonnet realiza: Revue Thomiste 1928
de Bernardo, encaramados a espalda de los Antiguos para ver más lejos.
La razón se une a la teología para convertirla en ciencia. La escolástica unía las leyes de la razón a las de la
imitación y los argumentos de la ciencia a las prescripciones de la autoridad. Los escolásticos responden al llamado de
San Pablo, para quien la fe es la demostración de las cosas que no se ven. La razón teológica es la razón iluminada por
la fe. La fórmula de San Anselmo: fe en busca de la inteligencia se aclara con Tomás: la gracia no elimina a la
naturaleza, sino que la completa. La razón culmina en la inteligencia. Así fundada, la escolástica se construye
mediante el trabajo universitario, con sus peculiares procedimientos de exposición.
Los ejercicios "Quaestio, Disputatio, Quodlibet" 122
Disputa.(disputatio, discusión) 3 Cuando un maestro disputaba, cesaban todas las lecciones en la Facultad
Porque el feudalismo, sistema político predominante durante la Edad Media, es ante todo un sistema pactista, basado
en un acuerdo "entre un rey que necesita de unos recursos que no tiene y aquellos que pueden proporcionarle esos
recursos", resultando en un limitación del poder real, explica de Ayala.
El delicado equilibrio de poder de la Edad Media favoreció un pactismo que, con el nacimiento del estado moderno, se
transforma en el más cruel absolutismo
Es precisamente en la Edad Moderna cuando surge el absolutismo, un régimen "más restrictivo con las libertades
porque los reyes o príncipes medievales no tenían la capacidad, la fuerza o los recursos como para hacerse lo
suficientemente absolutos, lo que les obligaba a negociar" con la nobleza, el clero y el campesinado, aclara el
catedrático.
El parlamentarismo hace su aparición por primera vez en Europa en las Cortes de León de 1188 y comenzó en otros
reinos como Inglaterra y Francia con el Parlamento y los Estados generales respectivamente durante el período
medieval.
"Se podría reservar el término de Edad Media para los dos últimos siglos" de los diez que duró, un período de
transición "entre feudalismo y monarquía". Y "solo para este último período estarían justificadas las opiniones
simplistas para las que la Edad Media fue una época de guerras, hambres y epidemias”, prosigue la medievalista en su
libro. Epidemias como la de la peste negra que mató a un tercio de la población europea en el siglo XIV pero que
fueron poco comunes en el resto del período medieval, intensificándose su frecuencia en la era moderna.
Un fenómeno estructural de la economía medieval fueron las hambrunas, en palabras de Le Goff, "que tan sólo
desaparecieron a finales del siglo XVIII en Francia y en el siglo XX en Rusia (...). Lo que en mi opinión ha podido
alimentar la idea de una Edad Media oscura es su debilidad económica o más concretamente las consecuencias que
esto engendró para la vida de las mujeres y hombres de esa época", escribió.
La civilización del Occidente Medieval Autor: Jacques Le Goff la cristiandad
Por el año 1000, la Cristiandad sufre un gran empuje debido a los motivos económicos que implicaba las
obras de construcción que se encargaban, como: la producción de materias primas a escala mayor, el uso de
nuevas técnicas y la fabricación de herramientas que se utilizaban para la extracción, transporte y elevación
de materiales de tamaño considerable, la mano de obra y el financiamiento de las obras. Se podría decir que
la industria medieval se limitó a las construcciones. Pero las construcciones respondían a una necesidad que
tenía origen en el crecimiento constante de la población y su necesidad de alojamiento. Además, también
entraba en juego el deseo de que el pueblo cristiano sea más numeroso. El crecimiento demográfico del siglo
X era consecuencia del inicio del desarrollo occidental. Además, también se dio el fin de las invasiones que
conllevaba la mejora de las instituciones a favor de la paz, restringiendo la actividad militar y las personas
que tenía facultad de combatir. El aumento de la seguridad era, también, una derivación de la aspiración de
mantener el progreso. El origen de este desarrollo se basa en la tierra y comienza cuando la clase dominante
se ruraliza. Los censos permitieron la prosperidad de los métodos de trabajo. La revolución agrícola se dio
entre los siglos X y XIII. Se hicieron nuevas introducciones en los procesos agrícolas, lo que trajo un
aumento de la población; incluso en los siglos X y XIV, se dobló. La expansión de la cristiandad no se
podría haber dado sin este desarrollo demográfico. El sistema feudal no permitía progresos cualitativos de la
producción que pudieran satisfacer por completo a la población. Por lo tanto, la solución era aumentar el
espacio cultivado. La expansión de la Cristiandad comenzó entre los siglos X y XIV con un fuerte
movimiento de roturación. Entre 110 y 1150 se desarrolló ampliamente la conquista agraria en el sector
capital, el de los cereales. Lo usual era que los campos nuevos era solo una extensión de los territorios
antiguos. En 110, en Flandes, se construyen diques en varios lugares. Mediante la rotulación se comenzó la
conquista de tierra nuevas y con esto, la fundación de nuevas aldeas. La Cristiandad hizo un doble
movimiento de conquista: la expansión de los límites de la Cristiandad en Europa y las Cruzadas. La primera
tuvo gran relevancia en el siglo VIII y entre los siglos IX y X. En 1000, el cristianismo se extendió hacia el
norte y el Este. La expansión escandinava, en el siglo X, alcanzó Islandia, Groenlandia y, probablemente,
hasta América, Inglaterra (a finales del siglo X), Dinamarca, Noruega y Suecia, además se llega a ubicar en
el mediterráneo (Campania, Sicilia, Italia, Epiro y Tesalia). El reino normando se convertirá en un modelo
político y cultural. Por otro lado, la expansión francesa, radicando en la Francia del Norte, colonizará la
Francia del Mediodía y el reino de las Dos Sicilias, además reconquista casi toda España (entre los siglos X
y XIV), se apodera de Mallorca (1229), Valencia (1238) y Murcia (1265). La reconquista española implica el
repoblamiento y la revalorización del país que había terminado destruido a causa de la guerra. Esta situación
adquiere un carácter religioso a mediados del siglo XI. Si bien la iniciación de las Cruzadas fue por motivos
materiales, demográficos, no se debe olvidar la importancia del contexto emocional y mental. No obstante,
se puede decir que las Cruzadas fueron una buen remedio para el exceso de población occidental. Sin
embargo, estas no pudieron amortiguar el deseo de nuevos territorios que tenían los occidentales. Las
Cruzadas no permitieron el crecimiento de la economía occidental ni el mejoramiento de las técnicas y
productos; sino que trajeron empobrecimiento, en especial para la clase caballeresca. Además, a causa de su
financiamiento se aumentó la fiscalidad pontificia y de la autorización de indulgencias. Hubo personalidades
como Urbano II y San Bernardo que trataron de dotar a esta guerra de una causa digna, como la lucha contra
los infieles. La Iglesia y el papado tenían el fin de dominar el Occidente por medio de la Cruzada, mas el
proyecto fracasó. A pesar de todo, el peregrinaje tenía gran
importancia para la estabilidad emocional del cristiano y la Cruz era un símbolo de triunfo, no de
sufrimiento. Todas las clases sociales participaron en las Cruzadas, siendo más fuerte el espíritu en los
sectores más humildes debido a que su espiritualidad y mitología la experimentaban en cierta medida con
mayor fuerza. En 1099, la ciudad de Jerusalén queda bajo el dominio cristiano, pero pronto es amenazado
por Saladino, quien la reconquista en 1187. Federico II la obtiene por medio de negociaciones en 1229, mas
vuelve a ser tomada por los musulmanes en 1244. Tiempo después, San Luis manda dos expediciones: la
primera, en 1248 hasta 1254 y la segunda, inicia en 1270, dando como resultado la muerte de este personaje
en Tunez.