LA MUSICA DE CHILE
ALEJANDRO ARRIETA SUTA
DANA SALAMANCA PARRADO
EGNA CAROLINA AGUIRRE
FREDY RONALDO CAMARGO
UNIVERSIDAD COOPERATIVA DE COLOMBIA
FACULTAD DE DERECHO
VILLAVICENCIO, META
2020
INTRODUCCION
El objetivo de este texto es explicar cómo ha sido la historia y la evolución de la música
chilena, de cómo los pueblos indígenas formaron las raíces de toda la música de esta región
que poco a poco fue mejorando y siendo influenciada por países como España y Argentina
fue implementado nuevos géneros, instrumentos, bailes y tajes típicos.
También se cuenta sobre el enorme impacto que tuvo la dictadura militar, y cómo varios
artistas de la época se unieron en una revolución para acabar con esa tiranía y hacer florecer
el talento y la música chilena, abriendo paso a futuras generaciones que hoy en dia son
grandes representantes de Chile e influyen en todo el mundo con la música, cultura y raíces
de este bello país.
DESARROLLO
La música tradicional chilena de la época precolombina es la del pueblo mapuche, una
música fundamentalmente religiosa que se interpretaba con ayuda de instrumentos
tradicionales como el cultrún, las cascahuillas, la trutruca y el torompe. Junto a estos
instrumentos también se han conservado algunas danzas de origen ritual, ejemplos de las
cuales pueden ser el lepún y el machitún. Según Merino Montero, Luis la Revista Musical
Chilena", Anales del Instituto de Chile, vol. XXXII: Perspectivas sobre la música en Chile
explica como la música folclórica chilena se mueve fundamentalmente alrededor de la
cueca. Este baile fue designado danza nacional chilena en 1979.
Peña Fuenzalida, Carmen "Juan Pablo Izquierdo Fernández: Premio Nacional de Artes
Musicales 2012, comparte que la influencia andina en la zona norte del país y la presencia
de las bandas militares que los españoles trajeron a esa región se ven reflejadas en el uso de
la zampoña, la quena, el charango y la guitarra, así como los bombos, trompetas y tubas de
origen militar que acompañan a bailes como la cueca, los bailes chinos o los huaynos. En la
zona del centro chileno se encuentran instrumentos como el acordeón, traído por los
numerosos inmigrantes alemanes que a esa región y al sur del país llegaron tras el
“descubrimiento”. La guitarra, la caja y el curioso tormento son instrumentos que
acompañan a los bailes de la región central como la sajuriana (de origen argentino), la
refalosa y el sombrerito. El sur chileno, sobre todo el archipiélago de Chiloé, las tradiciones
de España se mezclaron con las huilliches que convivieron con la pericona, variante del
pericón español.
Luego del golpe de estado de 1973 y posterior inicio de la dictadura militar en Chile, se
produjo en dicho país el llamado “apagón cultural”, debido a la persecución, exilio o
asesinato de diversos artistas de tendencia izquierdista. Dado que una de las características
más evidentes de la Nueva Canción Chilena era el poseer un fuerte componente de canción
protesta en sus letras y música, el periodo de dictadura virtualmente terminó con el
movimiento en Chile. Sólo algunos artistas exiliados en el extranjero continuaron con él,
pues estos músicos e investigadores como Violeta Parra, Víctor Jara, Tito Fernández y
muchos más, buscaron recuperar la música folclórica tradicional chilena y fusionarla con
los ritmos latinoamericanos, además de explorar líricas de contenido social. Pero fue hasta
1975 donde Ricardo García fundó el Sello Alerce, como una forma de reeditar la Nueva
Canción Chilena, que en dicho momento estaba prohibida o censurada de su emisión en las
radios, así como una forma de rescatar las grabaciones originales de su destrucción. A partir
de entonces el movimiento dio pie al Canto nuevo, caracterizado por ser una nueva
generación bajo la opresión de la dictadura. Esto dio paso a la libertad después de tanta
opresión y el florecimiento de nuevos ritmos, melodías, canciones, letras y artistas en toda
la región chilena. Entre estos entra la cumbia, el rock and roll, el jazz y demás géneros
musicales.
También abrió paso a nuevos exponentes y artistas tanto masculinos como femeninos como
German Garmendia, Mon Laferte y Paloma Mami, que inculcan la cultura y el talento de
raíces chilenas a todo el mundo.
CONCLUSIÓN
La música folclórica es en si la identidad de un país, ya que esta contiene sus tradiciones,
costumbres, creencias y cultura que han perdurado en el tiempo y se mantienen para seguir
identificando a las generaciones futuras como verdaderos chilenos.
Chile aporta un gran legado cultural al mundo con sus instrumentos, melodías, géneros,
letras y ritmos únicos, que nos llenan de alegría, tranquilidad, felicidad y otras emociones y
sentimientos con su música y ver como esta misma ha evolucionado con el paso del tiempo
y cada vez es más reconocida y valorada.
También, gracias a los artistas que lucharon contra la dictadura opresora y nunca se
rindieron, a ellos, se les debe todo el reconocimiento cultural y el florecimiento,
mejoramiento y evolución de la música chilena que hoy influye en las nuevas y futuras
generaciones de esta región, que cada vez avanza, enseña y aporta toda su cultura, raíces e
historia para el mundo.