Asignatura:
Nombre del alumno: José Angel Soto Romero.
Tipo de trabajo: Ensayo.
Introducción
Este ensayo hace una reflexión sobre la importancia de la psicopedagogía como ciencia y su
función en las prácticas escolares. En la escuela, el profesional de la psicopedagogía es casi
inexistente. Para las problemáticas en cuánto a dificultades en los aprendizajes, incluso en la
atención de alumnos con discapacidades, los encargados en esos ámbitos son los psicólogos
educativos, los mismos profesores de aula y pedagogos.
Ahora ¿tiene relevancia en el ámbito educativo la psicopedagogía cómo ciencia o son suficientes
las disciplinas afines cómo la psicología o la pedagogía para mejorar las problemáticas en el aula?
A partir de este supuesto, es necesario comprender y reflexionar las prácticas de la labor docente,
tanto en el aula o investigación. En tanto estas prácticas sustentan y dan vida a la psicopedagogía
hay teorías que la sostienen, para esto Sandra Bertoldi y Soledad Vercellino (2013) dicen que Da
silva (2006) comenta que son áreas del saber que contribuyen para la construcción teórica
psicopedagógica tales como la epistemología genética, la lingüística, la neurología y el
psicoanálisis. Dicen también identifican diferentes paradigmas psicológicos que adoptaron en el
campo de la educación (conductista, de orientación cognitiva, humanista, psicogenética y
sociocultural, así cómo su influencia en la clínica psicopedagogía.
En cuanto para afrontar las problemáticas de la escuela actual se necesita de una amplia
capacitación y formación académica. Así, es necesaria una base profesional donde la Universidad
pedagógica Nacional y la Normal urbana del estado son las principales, si no las únicas que dotan a
Baja California Sur de docentes, todos ellos con una preparación de licenciaturas en educación
básica donde están pedigüeñas en sus ´planes de estudio, de disciplinas necesarias para las
problemáticas actuales en educación y la psicopedagogía es necesaria para la intervención
conjunta, disciplina que está invisibilizada, al menos en el sistema educativo en Baja California Sur.
Asi tomando en cuenta que hay necesidad de construir bases fuertes en la formación
psicopedagógica, siendo algo necesario la presencia en el curriculum de la epistemología, ya que
no la creen importante, de esto es participe el comentario De Sandra Bertoldi y Soledad Vercellino
(2013) que dicen que “ la marginal presencia de asignaturas y/o contenidos vinculados ba la
epistemología y la siempre postergada discusión con los responsables académicos de dicha
formación sobre la necesidad (o no) de su inclusión, caracterizan el lugar asignado hoy por el
análisis epistemológico en la formación de los futuros psicopedagogos”. Hay una necesidad vital
de la fundamentación de la psicopedagogía como ciencia, ya que es una propia disciplina con sus
propias orientaciones, propias reflexiones tales que no pueden explicarse con otras ciencias por
separado, así comenta Sandra Bertolli y Soledad Vercellino que la epistemología de la
psicopedagogía disciplinar es un espacio inaugural y forma parte de la agenda contemporánea. Las
autoras también reflexionan que desde la opción teórica-metodológica se enfatiza en la
producción conjunta de conocimientos a través del diálogo y la discusión así cómo en la función
epistémica de la lectura y la escritura.
La psicopedagogía es una disciplina científico-profesional la cual ha tenido en la historia un lugar
importante, ya que ni la pedagogía, psicología ni otras disciplinas han podido poder resolver las
cada vez más complejos retos educativos que se van presentando en la actualidad. Esta disciplina
según Lidia Cabrera Pérez y José Tomás Bethencourt Benítez comenta que cuenta con
antecedentes históricos bien delimitados en diferentes países del continente europeo y
americano, siendo en el año 1925 la fundación del primer laboratorio de psicopedagogía en el
seno de la escuela pública, que dio paso en el año 1927 a la creación del laboratorio de psicología
del niño, esto a consecuencia de una obra del autor francés Henri Wallon. Aún con el paso del
tiempo la función del psicopedagogo no estaba bien definida. En España la reforma para fijar las
principales funciones del psicopedagogo se produce 25 años más tarde en los años 70 con la Ley
General de Educación, tomando de referencia la francesa según Lidia Cabrera et al. En al ámbito
educativo, las diferentes intervenciones de la función y los ámbitos de acción han provocado la
dificultad de poder observar en los grandes ámbitos pedagógico y psicológico.
En el sistema educativo las disciplinas imperantes habían sido tanto el pedagogía o especialista en
educación y la psicología escolar. Cuando se realizaba el diagnóstico el docente de aula
normalmente el pedagogo o licenciado en educación valoraba las necesidades de los educandos,
este a su vez planteaba las adecuaciones pertinentes, entonces, los niños con necesidades
específicas de aprendizajes los dirigía al equipo de especialistas educativos con especialidad en
comunicación o psicología. Aun así las problemáticas del aula hacen necesaria una mayor calidad
en la enseñanza. Lidia Cabrera et al., plantea, que en España, en el año de 1990 se promulga la Ley
General Orgánica General del Sistema Educativo (LOGSE). Con esto se impulsa la orientación e
intervención psicopedagógica en todos los centros de enseñanza obligatoria con el fin de que den
apoyo y asistencia a las necesidades de los centros, el profesorado, el alumnado y sus familias. La
LOGSE demanda al sistema educativo: un sistema de apoyo al currículo de orientación educativa e
intervención psicopedagógica, una mayor calidad de la enseñanza, y una personalización de los
aprendizajes. Para ello se institucionaliza dentro del sistema educativo la figura profesional del
psicopedagogo al que hasta el momento había estado diversificada, o repartida entre dos
profesionales (pedagogo y psicólogo escolar). Este logro abre las puertas para la investigación
también a partir de las prácticas en el ámbito educativo en el cuál la psicopedagogía se está
abriendo paso. Como anteriormente comentaba los contratados por SEP (Secretaria de Educación
Pública) y encargados de atender las diversas necesidades educativas han sido tanto los
pedagogos, licenciados en educación, psicólogos educativos, todos ellos con grandes carencias, ya
que se atienden y se han atendido a los alumnos partiendo de distintas y separadas disciplinas, las
cuáles divergen sin tener en cuenta diversas situaciones psicopedagógicas habiendo un vacío
enorme que no contribuye en la investigación en la disciplina. No basta el tener una licenciatura
en psicología, pedagogía, psicología para ser eficaz en la intervención psicopedagógica así
comentan Lidia Cabrera et al. “El acceso laboral a los distintos espacios espacios profesionales ha
sido posible tanto desde la psicología como desde la pedagogía, exigiendo a los pedagogos y
pedagogas retomar la formación psicológica recibida en su formación inicial, y a los/as
psicólogos/as “subsanar su carencia de conocimientos sobre los procesos educativos a los que no
tuvieron acceso en el transcurso de su formación inicial” (coll, 1196:43). Se trataba de fomentar la
formación de profesionales competentes en todas las acciones psicopedagógicas que el sistema
educativo y social demanda, independientemente de las divisiones disciplinares”. Estas autoras
también comentan que en España el Ministerio de Educación y Ciencia tratan de compensar las
lagunas detectadas en la formación inicial de psicólogos escolares asi cómo de pedagogos
especializados en orientación, para la realización de actividades y tareas típicamente
psicopedagógicas según Coll, 1996 dicen Lidia Cabrera et al. Mencionan que (en España) “los
Estudios Oficiales de Psicopedagogía, que son regulados a través del Real Decreto 916/1992 de 17
de Julio, con el apoyo de los profesionales de uno y otro ámbito. Gonzalo (1991) es muy explícito
al respecto, cuando dice: es evidente que no cualquier psicólogo o pedagogo por el mero hecho de
tener la titulación, posee ya el perfil apropiado para las funciones de orientación e intervención
psicopedagógica”.
La psicopedagogía tiene una riqueza exquisita para abordar problemáticas y reorientar las
prácticas educativas de forma específica de manera interdisciplinaria, lo que la pedagogía y la
psicología tienen grandes limitaciones dentro de su mismo currículo, que resuelven con
especialidades, que, al pensar es si se da la contratación de psicólogos y pedagogos cómo únicos
parea afrontar el reto educativo con la ruta de cursos y especialidades para su formación se estará
atentando a los propios sujetos de aprendizaje, tanto alumnos y profesores, ya que es necesaria la
ciencia psicopedagógica en el sistema educativo si no, vital para afrontar los retos actuales, cómo
Lidia Cabrera et al., hace la pregunta “¿Constituye el conocimiento psicopedagógico un corpus
disciplinar básico profesionalizador, o una formación especializada dentro de los estudios de
pedagogía y psicología respectivamente?”. La autora hace referencia a la especialidad de
orientación como propia de la psicopedagogía, aunque también está de formación específica la
intervención psicopedagógica. La psicopedagogía tiene años de haber surgido, teniendo en cuenta
que trabaja con problemáticas específicas de la disciplina e interviniendo psicopedagógicamente.
Tomando Lo anterior Lidia Cabrera et al., menciona que la psicología “como disciplina científica
como de formación para el ejercicio profesional goza de carácter autónomo desde hace más de un
siglo…la psicopedagogía surge para definir un tipo de conocimiento pedagógico y psicológico, el
referido a situaciones educativas con necesidades diferenciadas…los psicopedagogos y
psicopedagogas, por tanto, desarrollan su profesional en contextos educativos formales y no
formales, y han sido siempre profesionales de la intervención psicopedagógica. El conjunto de
conocimiento teórico y aplicado que se ha derivado en los últimos 17 años en España lo
evidencia”.
Para que una disciplina pueda brotar y florecer hace necesaria la expansión de su conocimiento en
el plano social, intercambiar investigaciones, prácticas en el desarrollo de distintas formas de
trabajo, de nivel regional a nivel mundial con distintos especialistas de la psicopedagogía, con esto
Lidia Cabrera et al., explica que “…la definición de un corpus propio de conocimiento, la
emergencia constante de nuevos ámbitos de acción profesional, dentro y fuera de la escuela, y la
consecuente necesidad de una formación disciplinar específica, con la suficiente amplitud para
abordar las competencias profesionales generales y especificas del profesional en psicopedagogía,
así como de especialización en ámbitos específicos de intervención y estrategias de investigación”.
La psicopedagogía va más allá del solo hecho de trabajar con los educandos. Este eje disciplinar
atraviesa el contexto social, laboral, legal y de atención en jóvenes y menores, la inclusión,
intervención educativa y comunitaria, etcétera. Tomando en cuenta lo anterior, Lilia Cabrera et al.,
explica que en la sociedad actual se identifican cada vez nuevas necesidades educativas que
requieren intervención o acción psicopedagógica. Comenta esta autora también que”…la acción
psicopedagógica también se extiende más allá de los escolares con necesidades educativas
especiales y con necesidades de atención u orientación especifica.
Las investigaciones en el área psicopedagógicas son muy pobres. Es necesario más trabajo de los
especialistas y docentes que llevan a cabo estas funciones. Ortiz et al (2014) menciona “…que el
empirismo predominante en las investigaciones educacionales, las pocas exigencias por elevarse
por encima de los datos para elaborar generalizaciones teóricas, unido a la falta de una cultura
verdaderamente científica de los profesionales de la educación, han contribuido a la inexistencia
de elaboraciones teóricas generales para fundamentarla mejor y ofrecerle más coherencia
epistemológica a la psicopedagogía”.
Conclusiones
La ciencia psicopedagógica es multidisciplinar.
Es necesaria la construcción teórica psicopedagógica para fortalecer al currículo
psicopedagógico con la epistemología genética, lingüística, neurología y el psicoanálisis.
Es vital para la psicopedagogía la conformación de un sistema epistémico.
Ortiz et al (2014) menciona que la psicopedagogía se nutre de todas las ciencias que
estudian los seres humanos y a la sociedad de forma directa e indirecta, sin dejarle todo
los aportes solo a la psicología o la pedagogía.
Es una disciplina científica que puede ser demostrable y verificable a través del método
científico, aunque la subjetividad es un proceso valioso de estudio.
La psicopedagogía toma la subjetividad de los actores clave como elemento importante de
su estudio y práctica.
La psicopedagogía tiene un estatus científico. Es una integración de nivel superior y
metodológico de diversas disciplinas.
Bibliografía
Lidia Cabrera, José Tomás Bethencourt Benítez. La pedagogía cómo ámbito científico-
profesional. Education & Psychology I+D+i and Editorial EOS. España. 2010. Pp.893-913.
Sandra Bertoldi y Soledad Vercellino. Reflexión epistemológica en psicopedagogía:
Relevancia y condiciones de posibilidad. Revista Pilquen. Argentina. 2013. Pp. 1-9.
Ortiz, E. y Mariño, M. 2014. Una comprensión epistemológica de la psicopedagogía Cinta
moebio 49: 22-30 www.moebio.uchile.cl/49/ortiz.html
Introducción:
breve descripción
del trabajo