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Hacia El Placer Conpenerjijijj

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Introduccion

A lo largo de más de tres mil años, los chinos han reconocido que
los hombres pueden alcanzar múltiples orgasmos retrasando e
incluso reteniendo la eyaculación. Esto es posible debido a que el
orgasmo y la eyaculación son dos procesos físicos diferentes, a
pesar de haber sido equiparados en Occidente durante largo
tiempo. Los antiguos chinos, aunque menos precisos que los
investigadores sexuales modernos, registraron sus
descubrimientos en detalle para las futuras generaciones de
buscadores sexuales y espirituales.1

En Occidente, Alfred Kinsey, pionero de la investigación sexual, no


informó de descubrimientos similares hasta 1940.2 Sin embargo,
varias décadas más tarde y después de que sus hipótesis hayan sido
probadas repetidamente en laboratorio, la mayoría de los hombres
siguen desconociendo su potencial multiorgásmico. Sin este
conocimiento y sin una técnica clara, los hombres son incapaces de
sentir la diferencia entre el crescendo del orgasmo y el estallido de
la eyaculación. La sexualidad masculina occidental sigue estando
erróneamente centrada en el objetivo, inevitablemente

1
Después de leer estos relatos, Herant Katchadourian, M. D., autor del libro de texto
Fundamentals
of human sexuality, concluyó: «Los antiguos chinos comprendían claramente la diferencia entre
el
orgasmo con y sin eyaculación. Los que dominaron el arte de este último obviaron el período
refractario [en otras palabras, no perdieron la erección], lo que les posibilitó la participación en
coitos prolongados con múltiples orgasmos sin eyaculación».
2
Mientras dirigía sus famosos estudios sobre sexualidad masculina, Kinsey descubrió que «puede
tener lugar el orgasmo sin emisión de semen... Estos hombres no tienen problema en reconocer
que experimentan orgasmos reales, a pesar de que no eyaculen». Ver Kinsey y colaboradores,
Sexual behaviour in the human male.
decepcionante, de la eyaculación en lugar de en el proceso
orgásmico de hacer el amor. El hombre multiorgásmico enseña a los
hombres a separar el orgasmo de la eyaculación en sus propios
cuerpos, permitiéndoles transformar la liberación momentánea que
supone la eyaculación en innumerables cumbres orgásmicas en todo
el cuerpo.

En este libro hacemos referencia a las antiguas prácticas taoístas y


a los conocimientos científicos más recientes para mostrarte cómo
separar el orgasmo de la eyaculación, cómo experimentar orgasmos
múltiples y cómo mejorar tu salud general. Originalmente, los
taoístas eran un grupo de buscadores de la antigua China
(alrededor del año 500 a. C.) que estaban muy interesados en la
salud y en la sexualidad.

Muchas de las técnicas que desarrollaron tienen más de dos mil


años pero siguen siendo tan efectivas como entonces. Como las
técnicas descritas en este libro fueron introducidas en Occidente
hace quince años, ha habido una revolución silenciosa entre los
hombres de la calle que las han probado y han descubierto que
funcionan. En cualquier caso, nosotros creemos que la única prueba
real es la que se hace en el propio cuerpo. Esperamos que te bases
en tu propia experiencia para aceptar o rechazar la información
aquí facilitada. Los orgasmos múltiples no son sólo para los
adolescentes, los hombres mayores muy afortunados o los adeptos
religiosos.

La sexualidad taoísta, también llamada «kung fu sexual», comenzó


como una rama de la medicina china (kungfu significa literalmente
«práctica», por tanto kung fu sexual significa simplemente «práctica
sexual»). Los antiguos taoístas eran médicos y estaban tan
preocupados por el bienestar físico como por la satisfacción sexual.
El kung fu sexual ayuda a los hombres a incrementar su vitalidad y
longevidad permitiéndoles evitar el cansancio y el desgaste que
provoca la eyaculación e impidiendo, literalmente, que se vayan con
su semilla.

China produjo los primeros manuales sexuales, los más completos y


detallados. En El hombre multiorgásmico continuamos con esta
larga tradición facilitando a los hombres y a sus parejas una guía
práctica y directa para transformar su sexualidad. Aunque en el
taoísmo la sexualidad y la espiritualidad no están separadas, nos
damos cuenta de que algunos lectores están interesados
exclusivamente en los consejos prácticos sobre sexualidad,
mientras que otros querrán aprender más sobre la dimensión
sagrada de la suya. Comenzamos con las técnicas básicas que todos
los lectores necesitan para hacerse multiorgásmicos y añadimos,
gradualmente, técnicas más sutiles para aquellos lectores
interesados en utilizar la sexualidad como camino para mejorar su
salud y profundizar en su espiritualidad.

Merece la pena mencionar que este no es un libro sobre taoísmo, ni


como filosofía ni como religión (uno de los autores del libro, Mantak
Chia, ha escrito más de diez libros que explican con todo detalle las
enseñanzas prácticas de esta antigua tradición, a partir de la cual él
desarrolló un sistema de salud muy abarcante llamado el Tao
Sanador). En El hombre multiorgásmico, ofrecemos técnicas taoístas
prácticas, confirmadas por estudios científicos, a los lectores que
están buscando no un nuevo sistema religioso sino una experiencia
más profunda de su propia sexualidad.

Conocete a ti mismx
Explorar tu cuerpo y comprender tu ritmo de excitación es esencial
para convertirte en un hombre multiorgásmico. De hecho, los
mejores amantes son los que están atentos tanto a su propio deseo
como al de su pareja. En el capítulo 4 hablaremos de cómo
satisfacer el deseo de ésta, pero primero debes aprender a
satisfacer el tuyo. Por tanto vamos a comenzar por describir
brevemente los factores básicos de tu anatomía sexual, tu energía,
tu excitación, tu eyaculación y tu orgasmo. Después te proponemos
algunas ideas que te permitirán explorar plenamente tu potencial
para el placer.

TU CUERPO
EL PENE

Cuando piensan en su propia sexualidad, la mayoría de los hombres


piensan en su pene. Es el lugar mágico donde empezar porque es la
parte más obvia de nuestra anatomía sexual.

Curiosamente, todavía hay mucho misterio y mucha falta de


información sobre este órgano de apariencia tan simple. Para
empezar, en el pene no hay huesos ni músculos; de hecho, este
órgano está formado principalmente por tejido esponjoso. Como no
tiene músculos, no puedes trabajarlo como se trabaja un bíceps...
una pena. Sin embargo sus primeros centímetros se insertan dentro
del cuerpo en el músculo pubococcígeo (frecuentemente llamado
músculo PC), el cual, como más tarde explicaremos, podemos
fortalecer para lograr erecciones más fuertes, orgasmos más
intensos y un mejor control eyaculatorio.

Como a muchos hombres les preocupa el tamaño de su pene (tanto


que algunos incluso se someten a operaciones para aumentarlo),
dediquemos unas líneas a comentar el tema. A lo largo de la
historia humana los hombres han hecho muchos intentos de
agrandar el símbolo de su masculinidad, de tal forma que los
taoístas incluso tenían un método para ello que explicaremos en el
capítulo 8. Pero la verdad es que el tamaño de la erección es mucho
menos importante que su fuerza y el empleo que se hace de ella. Si
practicas el kung fu sexual, verás ampliamente confirmado el hecho
de que eres «suficientemente hombre» para cualquier mujer. Si a
pesar de todo te sigue preocupando el tamaño de tu pene, antes de
correr al quirófano tómate un momento para leer la sección llamada
«Por favor, doctor, ¿podría hacérmela un poco más grande: alargar
el pene» en el capítulo 8.
LOS TESTiCULOS

La mayoría de
los hombres
saben que el
esperma se
produce en sus
testículos y que
la temperatura
normal del
cuerpo es
demasiado
elevada para
que este
proceso pueda
ocurrir (por eso,
la ropa interior
excesivamente
apretada, al
mantener los
testículos cerca
del cuerpo,
puede hacer
disminuir la cantidad de esperma). Sin embargo, cuando el hombre
se prepara para eyacular, los testículos son atraídos hacia el cuerpo
(una técnica antiquísima utilizada para posponer la eyaculación
consiste en tirar de ellos, alejándolos de éste).

El conducto deferente va desde los testículos hasta la glándula


prostática (ver figura 2). El esperma se traslada por este conducto
hasta su extremo superior, donde se mezcla con las secreciones de
las vesículas seminales y de la próstata inmediatamente antes de
que se produzca la eyaculación. Las secreciones de la próstata
constituyen aproximadamente un tercio del volumen del líquido
eyaculado y son las responsables de su color blanquecino. El
esperma es sólo una pequeña parte del fluido eyaculado, por lo que
los hombres que se hacen la vasectomía eyaculan
aproximadamente la misma cantidad de fluido antes y después de
la operación.

LA PROSTATA

La próstata es una glándula que se encuentra en el centro de la


pelvis, justo detrás del hueso púbico y encima del perineo. La
mayoría de los hombres sólo han oído hablar de ella en relación al
temido y extendido cáncer de próstata, que en América afecta a un
hombre de cada once. Es importante tener esta glándula sana para
evitar el cáncer y mantener nuestro bienestar sexual a largo plazo.
Los ejercicios de kung fu sexual pélvico que sugerimos aquí y los
masajes regulares de próstata te ayudarán a mantenerla sana y
posiblemente también reducirán el peligro de contraer cáncer. Si
tienes problemas relacionados con ella o quieres evitar tenerlos en
el futuro, lee la sección llamada «¿Mi qué? Prevenir y aliviar los
problemas de próstata» en el capítulo 8.

La próstata, al igual que el punto G de las mujeres, suele ser


sensible a la estimulación sexual. De hecho, se le llama «el punto G
masculino». Los autores de The G spot concluyeron: «Los hombres
tienen dos tipos de orgasmo, uno producido por el pene y otro por
la próstata». En general, los hombres describen que los orgasmos
producidos por esta última son muy diferentes de los producidos
por el primero, tanto emocional como físicamente. Los autores de
The G spot sugieren que esta diferencia es equivalente a la que las
mujeres experimentan entre el orgasmo vaginal y el clitoridiano. Lo
mismo que el punto G en las mujeres, la próstata se hace
progresivamente más sensible a la estimulación erótica a medida
que el hombre se excita y se acerca al orgasmo. Por eso, su revisión
por parte del médico es muy diferente de la estimulación prostática
que puedes experimentar en la cama con tu amante. (Debes
recordar que el cuerpo se va estimulando de adelante hacia atrás,
por lo que tu pareja deberá esperar a que estés muy excitado
sexualmente antes de proceder a estimularla.)

Dicha estimulación puede hacerse externamente a través del


perineo, en el punto del Millón de Dólares (que comentaremos en el
capítulo siguiente), o más directamente a través del ano. No es fácil
tocarse la próstata si no se es muy flexible. En general, la mejor
posición es acostarse sobre la espalda, bien con las rodillas
dobladas y los pies apoyados sobre la cama, o con las rodillas
contra el pecho.

Una vez en esta posición, si introduces un dedo (bien lubricado) en


el ano y lo curvas hacia adelante, podrás tocártela. Deberás sentir
algo del tamaño de una castaña (de entre tres y cinco centímetros)
dentro de la pared anterior (frontal) del recto. Acaríciala
suavemente hacia adelante y hacia atrás.

Puedes meter y sacar el dedo a diferentes velocidades, lo que


también estimulará las terminaciones nerviosas sensibles que
rodean al ano. Tu pareja también puede hacerlo si lo desea, pero
debe adoptar un ángulo ligeramente menos pronunciado (asegúrate
de que tanto tú como tu pareja tenéis las uñas cortas). Si no os
interesa aventuraros dentro del ano, podéis estimular el esfínter
anal y/o el perineo, lo que también estimulará la próstata. Cuando la
excitación de la próstata produce la eyaculación, generalmente el
fluido fluye suavemente hacia fuera en lugar de salir despedido.
Recuerda que esta estimulación es muy profunda e intensa por lo
que controlar el ritmo de la excitación en la estimulación prostática
es todavía más difícil que en la genital. Por tanto, ve despacio e
intenta no rebasar los límites.

EL PERINEO

El perineo es un punto esencial de la sexualidad que los taoístas


llamaban «la puerta entre la vida y la muerte». El papel que puede
jugar para prevenir la eyaculación era un secreto muy bien
guardado. En el perineo, justo delante del ano, está el punto del
Millón de Dólares, cuyo mismo nombre sugiere el valor que tiene
dentro del kung fu sexual (ver figura 2). Este punto era conocido
originalmente como el punto «del Millón de Piezas de Oro» (en la
antigua China no había dólares), porque ese era el precio que
supuestamente había que pagar a un maestro taoísta para que te
enseñara su localización exacta (los antiguos maestros taoístas eran
hombres santos, pero también tenían que ganarse la vida). En el
capítulo siguiente comentaremos el papel que juega este punto en
el control de la eyaculación.

LOS MUSCULOS SEXUALES

El músculo pubococcígeo, o músculo PC, es un grupo de importantes


músculos pélvicos que se extienden desde el hueso púbico («pubo»)
en la parte frontal, hasta el hueso posterior o coxis («coccígeo») por
detrás. Estos músculos constituyen la base de la salud sexual y son
esenciales para convertirse en un hombre multiorgásmico. En el
capítulo siguiente describiremos algunos ejercicios para
fortalecerlos.

Si te has visto obligado a guardar cama durante un período de


tiempo prolongado o si has tenido que llevar un vendaje de
escayola, sabrás que los músculos se atrofian y se debilitan cuando
no se usan. Lo mismo les ocurre a los músculos sexuales. En
realidad, como pueden testificar muchos hombres mayores y
sexualmente inactivos, el pene se va retirando hacia el interior del
cuerpo cuando no se utiliza. Los taoístas sabían que ejercitar los
órganos sexuales es tan importante como ejercitar cualquier otra
parte del cuerpo.

EL ANO

Su proximidad a la próstata y su elevada concentración de


terminaciones nerviosas hacen del ano una zona altamente
erógena, como muchos hombres (gays y heterosexuales) han
descubierto. Debes asegurarte de que esté limpio antes de tocarlo,
así como lavar aquello que hayas usado para estimularlo (por
ejemplo un dedo), antes de practicar la estimulación vaginal, con el
fin de evitar la propagación de bacterias. Mucha gente piensa que
el ano es «sucio» y «no les parece natural» estimularlo sexualmente.
Sin embargo, resulta difícil explicar que sea tan sensible si
estimularlo «no es natural». A muchos heterosexuales les preocupa
«convertirse en gays» si disfrutan de la estimulación anal, pero no
existen pruebas que sugieran que la sensibilidad anal y la
homosexualidad estén relacionadas. La homosexualidad es una
orientación sexual, no una simple práctica sexual. A muchos gays
les gusta la estimulación anal, pero también les gusta a muchos
hombres heterosexuales.

LOS PEZONES

A muchos hombres les sorprende descubrir que sus pezones son


muy sensibles. Otros pueden necesitar estimulación regular para
despertar sus terminaciones nerviosas. La estimulación de los
pezones es uno de los placeres subexplorados y subvalorados de la
sexualidad masculina.

TU ENERGIA

Comprender cómo funciona la energía dentro de tu cuerpo te


ayudará a expandir los orgasmos genitales a todo el cuerpo y a
utilizar la energía sexual para mejorar tu creatividad y tu salud.
Como dijimos en la introducción, el kung fu sexual se desarrolló
como una rama de la medicina china, la cual es uno de los sistemas
de curación más antiguos y efectivos del mundo, responsable del
descubrimiento de algunos sistemas terapéuticos tan reconocidos
como la acupuntura y la acupresión.

Según la medicina china, además de sus estructuras físicas, nuestro


cuerpo también está formado por una energía física que circula
constantemente por cada una de sus células.

EL CUERPO ELECTRICO

A medida que la química occidental ha ganado en sofisticación ha


podido demostrar que, evidentemente, nuestros cuerpos están
llenos de energía y cargas eléctricas. En el número de febrero de
1984 de la revista Discover, K.C. Cole hizo la siguiente descripción:
«La electricidad es la más elusiva de las cosas cotidianas: habita en
las paredes de nuestras casas y regula la vida de nuestras células...
hace funcionar los trenes eléctricos y los cerebros humanos... Todo
tu cuerpo es una gigantesca máquina eléctrica: la química corporal
(como toda química) está basada en los enlaces eléctricos».

La medicina china se basa en la habilidad de la persona para hacer


circular su energía bioeléctrica por el cuerpo. Si has sido tratado
con acupuntura, habrás experimentado la circulación de esta
energía bioeléctrica, que los chinos llaman chi, en tu propio cuerpo.
Pero si no has tenido esta oportunidad, hay un experimento muy
simple que puedes hacer para experimentar tu chi corporal. Frótate
las manos durante diez segundos y después mantén las palmas a
una distancia de dos o tres centímetros. Si te concentras, podrás
sentir un flujo de energía que pasa de una a otra.

La idea de que el chi está presente en nuestro cuerpo no es


específica de China. El doctor John Mann y Larry Short, autores de
The body of light, nombran cuarenta y nueve culturas de todo el
mundo que cuentan con una palabra para designar el chi; las
palabras usadas por estas culturas son tan variadas como prana en
sánscrito, neyatoneyah en sioux lakota, o num, que significa punto
de ebullición, utilizada por los kung del Kalahari. La cultura
occidental quizá sea la única que carece de un término equivalente.
En Occidente, decimos que nos sentimos energetizados o que
estamos bajos de energía, pero, con algunas notables excepciones,
tendemos a ignorar este aspecto tan importante de nuestro cuerpo
físico.

El concepto de chi va ganando aceptación entre el estamento


médico. Una transición muy importante tuvo lugar cuando el
presidente Richard Nixon restableció las relaciones diplomáticas
entre Estados Unidos y China en 1972. En Pekín, los doctores
chinos practicaron una operación de emergencia a James Reston,
corresponsal del New York Times, utilizando únicamente la
acupuntura como anestesia. Desde entonces muchas delegaciones
de médicos occidentales han sido testigos de este mismo suceso. El
chi está empezando a ser entendido y expresado en la terminología
de la ciencia occidental. Actualmente, algunos médicos occidentales
están explorando este fenómeno. Uno de ellos es Robert Becker,
ortopeda de la Universidad de Siracusa y autor de The body
electric, que intenta explicar el chi a partir de sus investigaciones
sobre la circulación bioeléctrica y la curación. Sus investigaciones
sobre la electricidad y el papel que juega en la regeneración de los
huesos han dado lugar al empleo habitual de corrientes eléctricas
de baja intensidad para acelerar la soldadura de fracturas óseas.

TU ORBITA MICROCOSMICA

La energía bioeléctrica está presente en cada célula del cuerpo y


viaja siguiendo ciertos circuitos muy bien definidos llamados
meridianos, usados por la acupuntura para regular la cantidad de
chi en las diversas partes del cuerpo. El principal circuito de
nuestro cuerpo se llama órbita microcósmica (ver figura 3) y está
formado por dos canales, el anterior y el posterior (en la medicina
tradicional china son conocidos como canal gobernante y canal
funcional respectivamente).

Estos canales se forman al principio mismo de nuestro desarrollo.


En el útero, nuestro cuerpo es parecido a un disco plano. A medida
que el embrión va desarrollándose, el disco se dobla sobre sí mismo,
creando dos costuras: una discurre a lo largo de la línea media de
la espalda de nuestro cuerpo y la otra lo hace por delante. La
costura posterior puede ser percibida a lo largo de nuestra
columna, pero la anterior es más sutil. Raras veces notamos la
costura anterior excepto cuando no se cierra completamente, como
en el caso de un niño nacido con un labio leporino.

Un hombre multiorgásmico nos explica su comprensión de la órbita


microcósmica de esta manera: «Pienso en la órbita microcósmica
como si fuera un canal, o meridiano, o ruta, que ha sido usado
durante miles de años para transformar la energía biológica bruta
que usamos para crear niños en otro tipo de energía más refinada
que puede ser utilizada para mejorar la propia salud y la práctica
sexual».
EL CANAL POSTERIOR

El canal

posterior comienza en el perineo y discurre por la espalda,


ascendiendo desde el extremo del coxis por la columna y cuello
hasta la coronilla, y bajando finalmente por la frente hasta su
terminación situada entre la base de la nariz y el labio superior,
lugar donde hay una pequeña hendidura.

EL CANAL ANTERIOR

El canal anterior discurre a lo largo de la línea media del cuerpo,


comienza en la punta de la lengua y desciende hacia el pubis y el
perineo. Cuando nos tocamos el paladar con la lengua cerramos la
órbita microcósmica. En su traducción literal del chino, el canal
anterior recibe el nombre de canal de la concepción y, si miras de
cerca el vientre de una mujer embarazada, generalmente verás una
línea oscura (que los médicos llaman línea negra) extendiéndose a lo
largo de este canal.
¿QuE SENSACIoN PRODUCE LA ENERGIA CUANDO SE MUEVE
EN EL CUERPO?

En realidad, la energía o chi ya se está moviendo por todo nuestro


cuerpo; si no fuera así no estaríamos vivos. Sin embargo, no
solemos ser conscientes del movimiento de esta corriente
energética por nuestro organismo. Cuando tomamos conciencia del
chi por primera vez, podemos experimentar muchas sensaciones,
entre ellas algunas de las más conocidas son: calidez, cosquillas,
pinchazos (como la sensación de la electricidad estática),
pulsaciones, susurros, burbujeos, zumbidos. Algunas personas
sienten que se mueve lentamente mientras otras experimentan
«sacudidas» repentinas. Algunos la sienten moverse en línea recta a
lo largo de la órbita microcósmica pero para la mayoría la sensación
es más clara en algunos puntos de la órbita que en otros.

¿COMO SE MUEVE EL CHI?

Hay un dicho taoísta que afirma:

«La mente se mueve y el chi la sigue». Dondequiera que enfoques la


atención dentro de tu cuerpo, el chi tenderá a reunirse e
incrementarse en ese punto. La experimentación en
biorretroalimentación ha confirmado que el hecho de centrar la
atención en un área de nuestro cuerpo puede producir un
incremento de la actividad en los nervios y músculos de esa zona.
Cuanto mayor sea la concentración, tanto mayor será el movimiento
del chi. Cuando hagas los ejercicios, recuerda que no estás
empujando o tirando del chi, simplemente estás llevando la
atención de un punto a otro. Es muy importante entender esto para
poder desarrollar las prácticas de manera efectiva. Sin embargo,
precisamente por ir desplazando tu atención sobre la piel,
experimentarás un flujo palpable de energía cálida y vibrante.

LA ENERGIA SEXUAL

La energía sexual, o ching-chi en chino, es uno de los tipos de


energía bioeléctrica más obvios y poderosos. Lo que nosotros en
Occidente llamamos excitarnos o activarnos sexualmente, para los
taoístas era generar energía sexual. Las prácticas del kung fu
sexual están basadas en cultivar esta energía sexual y usarla para
aumentar nuestra energía general y nuestra salud. Para dominar
las técnicas taoístas, experimentar orgasmos múltiples en todo el
cuerpo y mejorar tu salud, debes aprender a extraer la energía
sexual de los genitales y hacerla circular por el resto del cuerpo.
Como mencionamos en el capítulo 1, según los taoístas, todas las
partes del cuerpo (incluyendo el cerebro, las glándulas, los órganos
y los sentidos) dan lo mejor de su energía durante el orgasmo para
crear una nueva vida. Este poder puede ser empleado para crear un
niño, pero cuando la meta no es la procreación, los taoístas creen
que es mejor conservar la energía y canalizaría por todo el cuerpo
para que produzca placer y salud. Como somos concebidos a través
de un orgasmo y la energía orgásmica empapa cada célula de
nuestro cuerpo, para seguir estando sanos y activos necesitamos
sentir regularmente esta energía rejuvenecedora; lo ideal es
sentirla cada día.

Una vez que desarrolles el hábito de hacer circular tu energía


sexual por todo el cuerpo, podrás sentir estas sensaciones en
cualquier momento. El veterano instructor del Tao Sanador Michael
Winn explica: «La energía sexual está disponible para el hombre las
veinticuatro horas del día, pero la mayoría de los hombres se
sienten muy necesitados porque creen que sólo pueden sentir
satisfacción sexual durante los breves minutos del coito. Para los
hombres lo más liberador es descubrir que pueden acceder a su
energía sexual y controlarla en todo momento».

Tal vez te preguntes si el hecho de sentir toda esta energía sexual


hará que estés constantemente excitado y necesitado de sexo, «que
desees rascarte el picor». Los hombres (y las mujeres) tenemos
impulsos sexuales que deben bien llevarnos a actuar, o bien ser
canalizados de alguna manera. En Occidente, hemos intentado
suprimir o sublimar estos deseos, pero según el Tao, esto nos
produce desequilibrios físicos y psicológicos.

Cuando practiques el cultivo de ti mismo, esta sensación de


excitación no te producirá impulsos sexuales incontrolables, sino
una sensación de bienestar tranquila y vigorosa. Un hombre
multiorgásmico nos explica la diferencia: «Antes de empezar a
practicar kung fu sexual, cuando llevaba un rato sin eyacular sentía
un impulso sexual cada vez más fuerte. Miraba revistas
pornográficas, buscaba planes de una noche o me iba de putas.
Después de eyacular el impulso desaparecía casi instantáneamente
y no podía entender por qué había dedicado tanto tiempo y dinero a
satisfacerlo. Me decía a mí mismo que no volvería a hacerlo la
próxima vez, pero sabía que al rato el impulso sexual volvería y yo
repetiría todo el ciclo exactamente igual. Cuando empecé a
practicar el kung fu sexual, mi energía sexual siguió siendo intensa
pero por fin podía equilibrarla. Me sentí feliz de ser hombre por
primera vez cuando pude controlar mi energía».
A medida que practiques, dispondrás de más energía de la que estás
acostumbrado a emplear, por lo que tendrás que aprender a
canalizar este exceso. Un hombre multiorgásmico lo explicó así:
«Cuando comencé a practicar, todas mis relaciones se volvieron
sexuales. Tuve que aprender a hacer circular y a equilibrar la
energía». Si te ocurre esto, el ejercicio de la Absorción en Frío
descrito en el capítulo siguiente te ayudará a transformar la energía
sexual en ese otro tipo de energía física más neutral y menos volátil
que hemos llamado chi. También puedes practicar tai-chi o chi-kung
u otros ejercicios que te ayuden a estabilizar y canalizar la energía
adicional. En general, cualquier tipo de ejercicio físico te ayudará a
gestionarla mejor.

TU EXCITACION

Según el taoísmo, necesitamos sentirnos excitados, sentir la fuerza


vivificante de la energía sexual cada día, porque cuando nos
excitamos nuestros cuerpos producen más hormonas, consideradas
como la fuente de la juventud (esta necesidad de excitación es la
causa por la que el sexo vende tan bien: nos sentimos atraídos por
las imágenes que estimulan nuestra energía y nuestras hormonas
sexuales). Cuando aprendas a hacer circular tu energía sexual por
el cuerpo, podrás sentir este poder rejuvenecedor en cualquier
momento.

TOMA CONCIENCIA DE TU EXCITACION

Para aprender a ser multiorgásmico, tendrás que aprender a ser


cada vez más consciente de la velocidad a la que te excitas. Ya sé
que esto parece muy evidente, pero la mayoría de los hombres no
prestan mucha atención a su ritmo de excitación. Suelen pasar de la
erección a la eyaculación como automóviles de carreras, sin tomarse
el tiempo de contemplar, por no hablar de disfrutar, los paisajes
que hay a lo largo del camino.

Cuando empiezas a excitarte sexualmente, tu pene se alarga y se


ensancha y sus tejidos esponjosos se llenan de sangre. Una vez que
está erecto, las válvulas cierran las venas e impiden que la sangre
vuelva al cuerpo. La erección ocurre espontáneamente en los recién
nacidos y en la mayoría de los hombres varias veces cada noche
durante el sueño. En algún momento de su vida, casi todos los
hombres experimentan la extraña situación de no lograr una
erección con su compañera. Esta incapacidad ocasional puede ser
causada por lo que el psicólogo Bernie Zilbergeld llama la
«sabiduría del pene», que nos avisa de que hay algo que debe
trabajarse en esa relación, aunque también puede ser una señal de
que se está aturdido por el trabajo u otras presiones.

Si esta situación se repite, se tacha al hombre de impotente, una


palabra cargada de matices que sugieren debilidad y falta de
poder. En el kung fu sexual no existe la «impotencia»; cuando
aprendas a hacer los ejercicios para fortalecer tus erecciones y a
utilizar la técnica de Entrada Suave durante el coito, no tendrás que
volver a preocuparte del tema. Si no puedes conseguir una erección
cuando quieres o si quieres saber qué hacer cuando se presente
esta situación (o aunque no se presente), lee «Encantar la
serpiente: superar la impotencia» en el capítulo 8.

LOS ESTADIOS DE LA ERECCION

La mayoría de los hombres creen que tienen deseo sexual o que no


lo tienen, que tienen una erección o que no la tienen. Cuando
somos jóvenes, la erección es tan rápida y consistente que es difícil
distinguir entre los niveles de excitación. Sin embargo, los taoístas
distinguen cuatro estadios o etapas de la erección, cuatro logros o
realizaciones, como ellos les llaman.

La primera es firmeza (también llamada elongación).

La segunda es dilatación.

La tercera es dureza.

La cuarta es calor.

El pene erecto, por tanto, no es un apéndice estático sino que sigue


un proceso que refleja tu nivel de excitación sexual. Los médicos
occidentales han confirmado recientemente la existencia de estos
cuatro estadios de la erección, aunque los describen con otros
términos más técnicos.3

El instructor del Tao Sanador Walter Beckley describió los cuatro


estadios de la siguiente forma: «En el primer estadio el pene
empieza a moverse y se pone erecto. En el segundo, está firme pero
no duro, no lo suficientemente duro como para penetrar (a menos
que se utilice la técnica de Entrada Suave). En el tercer estadio, el
pene está erecto y duro. En el cuarto está tenso y muy caliente. Es
en este cuarto estadio cuando los testículos son atraídos hacia el
cuerpo. Es mucho más fácil evitar la eyaculación si se puede
permanecer en el tercer estadio. Elevar la energía sexual nos ayuda
a evitar que el pene entre en ese último estadio, en el que está muy
tenso y caliente. Otro elemento esencial es la relajación, así como
3
La medicina occidental ha identificado los siguientes estadios: 1) fase latente (de llenado); 2)
estadio tumescente (hinchado); 3) fase de la plena erección; y 4) estadio de erección rígida. Los
estadios de la pre y posterección (flácido y detumescente, respectivamente) también son añadidos
en algunos casos.
intentar tomar conciencia de cuándo entramos en ese ansioso y
explosivo cuarto estadio en el que la eyaculación es inminente».

EL SECRETO DE LA SEXUALIDAD MASCULINA

A medida que vamos madurando como amantes e intentamos


satisfacer a nuestras compañeras, vamos obteniendo cierto control
sobre nuestra excitación. Esta capacidad suele ser llamada nuestro
aguante y se logra aprendiendo a distraer la atención de la
excitación sexual (pensando en otra cosa; en los resultados
deportivos, por ejemplo) en lugar de aprender a sensibilizamos a
ella.

El verdadero control eyaculatorio aparece cuando conocemos el


ritmo de nuestra excitación sexual, no cuando lo ignoramos. A
medida que aprendas a reconocer y a sentir cada vez más el placer
que surge en ti, te resultará más fácil seguir el camino
multiorgásmico.

¿PERO, EN EL SEXO NO SE TRATA DE RELAJARSE Y DEJARSE IR?

Para experimentar placer sexual, los hombres debemos


ciertamente relajarnos y dejarnos ir, pero si nos relajamos y nos
dejamos ir demasiado, eyaculamos, y entonces la mayor parte del
placer, si no todo, desaparece. La esencia del kung fu sexual y el
secreto de la sexualidad masculina es saber cuándo controlar
nuestra sexualidad y cuándo dejarnos ir.

TU EYACULACION

En realidad, el semen es expulsado de nuestro cuerpo en dos


tiempos. En la fase contráctil (a veces también llamada fase de
«emisión»), la próstata se contrae y vacía el semen en la uretra. En
la fase de expulsión, el semen es propulsado por la uretra fuera del
pene. Cuando te conviertas en multiorgásmico experimentarás las
placenteras contracciones pélvicas (lo que llamamos la fase
contráctil del orgasmo, que sentimos como un pequeño estallido o
una sensación de temblor en la próstata) sin llegar a eyacular.
Aunque hay hombres que pueden tener varias eyaculaciones
consecutivas haciendo el amor (es fácil para los adolescentes), ya
debe haber quedado claro que esto es muy diferente a tener
múltiples orgasmos sin eyaculación.

Cuando estás muy excitado, tu pene puede derramar algunas gotas


de un fluido claro. Es el fluido preseminal que procede de la
próstata y de otras glándulas, como la glándula de Cowper; este
fluido alcalino es utilizado para lubricar la uretra y preparar así el
camino para el esperma. Los taoístas llaman agua a este fluido,
para distinguirlo de la leche o semen; y se trata de algo
perfectamente natural que señala la proximidad de la fase
contráctil del orgasmo. Sin embargo, este líquido también puede
contener cierta cantidad de esperma: es la «pre-eyaculación» de la
que suelen advertir en los cursos de educación sexual, por lo que,
aunque no eyacules, debes tomar la precaución de utilizar algún
método anticonceptivo. De cualquier forma, si no eyaculas durante
el orgasmo, las probabilidades de que tú y tu pareja tengáis que
enfrentaros a un embarazo no planeado son mucho menores.

¿DoNDE VA EL SEMEN CUANDO NO EYACULO?

El semen es reabsorbido por el cuerpo, tal como ocurre en el


hombre que se ha sometido a la vasectomía. Sin embargo, los
efectos de las técnicas taoístas en nuestro cuerpo son muy
diferentes a los de esta intervención quirúrgica. Cuando se practica
la vasectomía, el esperma no tiene dónde ir, dado que se corta el
conducto deferente justo por encima de los testículos, y aunque
finalmente acaba siendo reabsorbido por el cuerpo, muchos
hombres se quejan de que sienten congestión en los testículos y en
la pelvis. Si te has hecho la vasectomía, es particularmente
importante para ti practicar el ejercicio de masaje de testículos (ver
capítulo 8) y hacer circular tu energía sexual.4 Estas dos técnicas
ayudan al cuerpo a reabsorber el esperma y a aliviar las
sensaciones de congestión. Las contracciones involuntarias de la
fase contráctil del orgasmo sin eyaculación que aprenderás a
experimentar también masajean la próstata, lo que ayuda
mantenerla sana y a aliviar la congestión.

¿PUEDE DAÑARME EL HECHO DE NO EYACULAR?

Los taoístas han estado practicando las técnicas descritas en este


libro durante miles de años sin sufrir secuelas negativas y, de
hecho, han supuesto una gran mejora para su salud y longevidad.
Estas son las conclusiones extraídas por Dunn y Trost de su estudio
sobre los hombres multiorgásmicos occidentales: «Ninguno de
nuestros sujetos ha tenido hasta el momento dificultades con la
erección o con la eyaculación. Nuestros hombres multiorgásmicos
mayores siguen teniendo erecciones firmes después de uno o más
orgasmos. En nuestra experiencia clínica no hemos comprobado
que los hombres sufran disfunciones sexuales tras experimentar
con los orgasmos múltiples».

4
Algunos estudios recientes han apuntado la posibilidad de que la vasectomía pueda estar ligada al
cáncer de próstata. Aunque todavía no hay una sentencia definitiva, el Dr. Stuart S. Howards
escribe en el Western Journal of Medicine:
«La posible relación entre la vasectomía y el cáncer de próstata debe ser contemplada con
escepticismo porque otros dos estudios, uno de ellos con un seguimiento muy largo, no
descubrieron ninguna relación. Además, no hay una explicación biológica plausible que explique
la relación entre la vasectomía y el cáncer de próstata» (vol. 160, nº 2 [Febrero 1994]. Como los
médicos desconocen la causa del cáncer de próstata, a la medicina occidental le cuesta explicar la
conexión entre ella y la vasectomía.
TU ORGASMO

El orgasmo masculino reside en el precipicio de la eyaculación. Si


corres a experimentarlo, caerás en el abismo del estupor post-
eyaculatorio. Algunos hombres siguen sintiendo placer después de
la eyaculación, pero la mayoría caen en el fondo de la pendiente de
su excitación y tienen que volver a trepar lentamente hacia arriba.
Las cinco o diez contracciones eyaculatorias que se producen son
muy placenteras; si no fuera así, los hombres no harían de ellas el
objeto de su deseo. El orgasmo eyaculatorio puede parecer un viaje
muy emocionante, pero una vez que experimentes las prolongadas
y extáticas acrobacias sexuales de los orgasmos múltiples, la salida
eyaculatoria te parecerá trivial y, por comparación, muy
decepcionante. «Después de un orgasmo “con líquido” —comenta un
hombre multiorgásmico que así define la eyaculación— tengo la
sensación de haber estado en la montaña rusa durante seis
segundos ¡después de haber aguantado dos horas en la cola!»

ENCONTRAR EL CAMINO

¿Donde ha ido?

No he eyaculado pero he perdido la erección. ¿Qué ha ocurrido?


Además de ser eyaculado o reabsorbido por el cuerpo, a tu semen
también puede ocurrirle una tercera cosa. En ocasiones, cuando
practicas las técnicas taoístas, puedes experimentar un orgasmo sin
eyaculación y perder la erección. En el caso de que no se deba
simplemente a que has perdido la excitación, puede tratarse de una
eyaculación retrógrada: has eyaculado hacia atrás. Cuando esto
ocurre, el semen se vierte en la vejiga urinaria y será expulsado de
tu cuerpo sin que te cause ningún daño la próxima vez que orines. El
hecho de que pierdas la erección, y en último término también el
esperma (cuando orinas), supone que no has realizado la práctica
correctamente, pero debes saber que no te has causado ningún
daño.5 Hartman y Fithian lo explican así: «Es importante saber que
el cuerpo no parece sufrir ningún daño cuando tiene lugar una
eyaculación retrógrada. Lo único que ocurre es que si la eyaculación
es completa el pene se queda flácido, como suele ocurrir en las
eyaculaciones ordinarias». Si has perdido la erección y sientes
curiosidad, puedes orinar en una taza. Si la orina es turbia,
entonces has tenido una eyaculación retrógrada. Posiblemente sólo
querrás hacer este test de orina cuando estés solo, porque podrías
crear una situación demasiado clínica si estás en medio de una
noche de amor rodeado por la luz de las velas.

5
Muchos observadores y escépticos respecto a la sexualidad oriental han confundido erróneamente
la eyaculación retrógrada con la no eyaculación prescrita por los taoístas.
¿COmo PUEDO EXPERIMENTAR ORGASMOS MULTIPLES?
Como en el caso de cualquier otro orgasmo que hayas tenido,
empieza excitándote sexualmente a partir de un pensamiento, de
ver a tu amante, escuchar su voz o sentir su contacto (en el caso de
los adolescentes, una ráfaga de viento puede ser suficiente). Esta
excitación suele llevar a la erección y a medida que aumenta la
estimulación atravesarás otra fase posterior de excitación que te
llevará a la fase contráctil. En este punto crucial los caminos se
separan, uno lleva directamente a la eyaculación y el otro a los
orgasmos múltiples (ver figura 4). Durante la fase contráctil,
sentirás una serie de contracciones en la próstata que pueden durar
de tres a cinco segundos. Estos placenteros orgasmos pélvicos son
lo que hemos llamado orgasmos de la fase contráctil. Aunque su
intensidad varía y pueden llegar a ser tan intensos como los
orgasmos eyaculatorios habituales, al principio pueden ser muy
suaves. Es el momento de la verdad. En lugar de continuar hasta el
punto de No Retorno, después del cual la eyaculación es inevitable,
debes detenerte o disminuir momentáneamente la estimulación, lo
suficiente como para recuperar el control de la excitación.

También puedes presionar el músculo PC que rodea a la pulsante


próstata, lo que te ayudará a controlar sus espasmos. Retirar la
energía de tus genitales y elevarla por la columna, tal como
explicamos en el capítulo siguiente, te ayudará a aliviar la presión y
a evitar el impulso eyaculatorio.

Tu nivel de excitación descenderá un poco mientras te preparas


para el siguiente orgasmo genital. En los orgasmos múltiples, la
excitación es como una ola que sube hasta una cumbre y después,
en lugar de precipitarse hacia el otro lado y estrellarse, es barrida
por otra ola mayor que la arrastra hacia otra cumbre aún más
elevada. Un punto importante: si durante la fase contráctil del
orgasmo mantienes una actitud de lucha, es muy probable que
acabes eyaculando. La mayoría de los hombres expresan que deben
detener la excitación justo antes de llegar a la fase contráctil y
relajarse en ese punto. Muchos hombres multiorgásmicos describen
que se dejan caer mentalmente hacia atrás en el orgasmo sin
eyaculación en lugar de caer hacia adelante en la eyaculación. La
idea es permanecer tan cerca como se pueda del punto de
inevitabilidad eyaculatoria (que se revela en la fase contráctil del
orgasmo) sin permitirse ir más allá ni precipitarse hacia la
eyaculación. Sentirás el placer que produce la liberación de las
contracciones de la próstata, del músculo PC y del esfínter anal.

La proximidad con que puedes experimentar los orgasmos múltiples


durante la fase contráctil depende de ti. Experimentarás olas de
satisfacción y placer que, si tu compañera también es
multiorgásmica, os ayudarán a armonizar vuestro deseo sexual. No
tendrás que preocuparte de dar a tu compañera «su(s) orgasmo(s)»
y después conseguir «el tuyo». Por el contrario, ambos tendréis la
posibilidad de alcanzar múltiples cumbres de placer orgásmico.

ENCONTRAR EL CAMINO

¡Uy!

Si te cuesta mucho diferenciar el orgasmo de la eyaculación,


puedes hacer que tu energía sexual ascienda por la columna antes
de llegar al orgasmo. Según el Tao, la verdadera clave del placer
corporal y de la salud es la circulación de la energía sexual por la
órbita microcósmica. Una vez que empiezas a impulsar la energía
hacia arriba, tal vez descubras que tienes sensaciones orgásmicas
en el cerebro, en otras partes de tu cuerpo o en todo él.

Presionar intencionalmente el músculo PC y los alrededores de la


próstata puede ayudarte a desarrollar una mayor sensibilidad en la
pelvis y a controlar la fase contráctil del orgasmo que produce
placenteros espasmos involuntarios en la próstata. Si te precipitas
hacia la eyaculación, lo que puede ocurrirte muchas veces durante
el aprendizaje (y también en alguna que otra ocasión
posteriormente), no te frustres ni te sientas decepcionado. Disfruta
de las placenteras contracciones que acompañan a la eyaculación y
piensa que siempre habrá otra oportunidad para experimentar las
cumbres del orgasmo más adelante. Recuerda que esta práctica
requiere tiempo e intimidad, tanto si practicas contigo mismo como
con tu pareja.

¿CUÁL ES LA DIFERENCIA ENTRE ORGASMOS MÚLTIPLES Y


ORGASMOS MULTIPLES EN TODO EL CUERPO?

Cada orgasmo genital ayuda a liberar la tensión producida por la


acumulación de energía sexual y por el aumento del flujo sanguíneo
en la pelvis. Los orgasmos pélvicos sin eyaculación pueden ser
extremadamente satisfactorios (y energetizantes), pero a medida
que vayas desarrollando tu capacidad orgásmica, sin duda querrás
expandir estos orgasmos pélvicos al resto del cuerpo ya que éste es
el verdadero secreto del Tao.

Los orgasmos múltiples en todo el cuerpo comienzan también con la


liberación de los orgasmos pélvicos que tiene lugar durante la fase
contráctil, pero en lugar de mantener la energía sexual (y el placer)
en la pelvis, elevas la energía por la columna hasta el cerebro y la
extiendes por todo el cuerpo, tal como te enseñaremos paso a paso
en el siguiente capítulo.

La mayoría de los hombres ni siquiera se dan cuenta de que pueden


alcanzar estas cumbres sexuales. No sólo se limitan a experimentar
un orgasmo (que para ellos es lo mismo que eyacular), sino que
experimentan este orgasmo en los genitales. En Todo lo que
siempre quisiste saber sobre el sexo (pero nunca te atreviste a
preguntar), el Dr. David Reuben describe el orgasmo tal como lo
entienden los sexólogos occidentales: «Para que tenga lugar el
orgasmo, toda la fuerza de todo el sistema nervioso corporal debe
estar concentrada en los órganos sexuales. Para que el orgasmo
tenga éxito es necesario que cada microvoltio de energía eléctrica
sea movilizado y dirigido hacia el pene o el clítoris-vagina».

Pero Reuben no va más allá de lo que para los taoístas es sólo el


primer nivel del orgasmo, el orgasmo genital. Tal como viene
representado en la ilustración de tu potencial orgásmico (figura 4),
puedes aprender no sólo a experimentar orgasmos múltiples, sino
también a extender tus orgasmos desde los genitales hasta el
cerebro y después a todo el cuerpo. En palabras de un hombre
multiorgásmico: «Un orgasmo en todo el cuerpo es increíble. Una
vez experimentado nunca querrás volver al orgasmo genital».

¿CUÁL ES LA SENSACIÓN EXACTA QUE PRODUCEN LOS ORGASMOS


EN TODO EL CUERPO?

Cada persona experimenta las alturas orgásmicas de una manera


ligeramente diferente, por lo que es difícil describirlas en términos
generales. La experiencia suele ser tan intensa que alguna gente
recurre al lenguaje místico (usando frases como «unidad con el
universo», que son difíciles de entender si no se ha experimentado
lo que intentan describir). Sin embargo, la gente también suele
describir sensaciones más concretas como calidez, cosquillas,
hormigueos, vibraciones o pulsaciones que se extienden por todo el
cuerpo. La mejor manera de saber lo que se puede sentir es
recurrir a las descripciones que realizan los hombres que los han
disfrutado.

Un hombre multiorgásmico describió así su primera experiencia de


un orgasmo en todo el cuerpo: «Estábamos haciendo el amor y
pensé que estaba a punto de irme, por lo que comencé a practicar
los ejercicios de respiración profunda. Entretanto, tuve la sensación
de que mi cabeza estaba electrificada, sentía un hormigueo; era
como si hubiera chispitas dentro de mí, cositas hormigueantes que
me subieran y bajaran por el cuello. Empezaron a dar vueltas a
toda prisa dentro de mi cabeza. Pensé que me iba a marear: ¡me
sentía tan bien! Y entonces pensé: “¡Si esto continúa, voy a
despegar!”. Duró al menos un minuto, aunque es difícil saber cuánto
duran las cosas en la cama. Fue un largo orgasmo. Sencillamente
sentía sensaciones de hormigueo, hormigueo y más hormigueo. La
sensación se iba y después regresaba. Mi cuerpo vibraba como si
fuera una campana».

Otro hombre describió su primera experiencia de orgasmo múltiple


así: «[La sensación] No estaba localizada en los genitales. Todo mi
cuerpo empezó a vibrar. Y pensé: “Bueno, no sé qué está pasando
aquí”. Por eso, al principio me sentí un poco alarmado, pero como la
sensación era agradable, me relajé y permití que sucediera».

Otro hombre multiorgásmico describe su experiencia en estos


términos: «Mi excitación sexual es menos activa, menos caliente y
menos salvaje que un orgasmo con eyaculación. Es más equilibrada
y controlada. A medida que el placer y la presión van aumentando,
pueden empezar a fluir por mi órbita microcósmica y por todo mi
cuerpo. El fin no es expulsar el esperma sino sentir esta vibrante
energía por todo el cuerpo, activar el amor y la ternura, y expandir
el espíritu. Todo el cuerpo está mucho más relajado, especialmente
en el momento del orgasmo».

Finalmente esta es la comparación que hace un hombre


multiorgásmico entre su experiencia y el orgasmo con eyaculación:
«La sensación del orgasmo en todo el cuerpo es más sutil, completa
y satisfactoria. Este proceso no produce la sensación de una breve
explosión sino de una larga y lenta implosión. Al terminar no me
siento vacío, lo que se puede entender fácilmente porque una
explosión implica que algo salga de tu cuerpo, pero en una
implosión todo se queda en ti. La sensación resultante es una
profunda satisfacción a nivel físico, emocional y espiritual, que a
veces dura horas y a veces días enteros».

En Occidente hemos limitado la definición de orgasmo a la pulsación


que tiene lugar en la pelvis (próstata) y en los genitales (pene),
pero los antiguos taoístas entendieron que un orgasmo es cualquier
pulsación (contracción y expansión) y puede tener lugar en
cualquier parte del cuerpo. Michael Winn explica: «Puedes sentir la
pulsación del orgasmo en todo el cuerpo o en cualquier parte de él.
Uno de tus órganos puede tener un orgasmo. Tu cerebro puede
tener un orgasmo. No sabrías que estás teniendo un orgasmo en el
pene o en la próstata si tu cerebro no lo estuviera teniendo
también».

ORGASMOS MÚLTIPLES DISCONTINUOS Y CONTINUOS

Es importante señalar que los orgasmos en todo el cuerpo son tan


intensos que a veces es difícil saber dónde acaba uno y dónde
empieza el siguiente. Las olas de placer que se experimentan hacen
que cualquier intento de «llevar la cuenta» resulte irrelevante. Las
investigaciones llevadas a cabo por Hartman y Fithian (ver capítulo
1) sugieren que los hombres (y las mujeres) puede tener orgasmos
múltiples discontinuos (separados) y orgasmos múltiples continuos.

En el caso de los orgasmos discontinuos se experimenta una


cumbre orgásmica y, después, el orgasmo amaina para ser seguido
posteriormente por otro orgasmo discontinuo. En el caso de los
orgasmos múltiples continuos tienes una experiencia de cumbre
orgásmica que puede ir cambiando, haciéndose más o menos
intensa, pero nunca pierdes el estado orgásmico completamente.
Hartman y Fithian distinguieron entre estos dos tipos de orgasmos
diferentes estudiando los ritmos cardíacos, que en los orgasmos
discontinuos volvía a normalizarse (unas setenta pulsaciones por
minuto) entre un orgasmo y otro. En los orgasmos múltiples
continuos el ritmo cardíaco alcanzaba una serie de cumbres sin
volver entre medias al punto de partida (ver figura 19, página 126).
En último término, los orgasmos discontinuos y continuos pueden
mezclarse para crear incontables combinaciones de cumbres
placenteras. Las posibilidades son realmente ilimitadas, y media un
abismo entre ellas y el orgasmo de seis segundos que la mayoría de
los hombres acostumbran a tomar por norma.

SEXO Y ESPIRITUALIDAD

Si practicas el sexo a dúo (es decir, con una pareja), puedes llegar a
sentir tu energía sexual circulando a través de ella y la suya a través
de ti. También puedes llegar a sentir que las fronteras físicas entre
vosotros se disuelven. Muchos hombres han experimentado este
estado de unidad con su pareja durante las relaciones íntimas, e
incluso un estado de unidad con el universo. Gracias al kung fu
sexual, aprenderás a volver a este lugar de manera regular con tu
pareja y también estando solo. Este tipo de unión sexual con otra
persona, o entre tú y el universo, puede dar como resultado una
transformación de la conciencia. Con razón, la sexualidad en Oriente
ha sido contemplada como parte del camino espiritual y no como
algo opuesto a él. (Seguiremos comentando la conexión entre
sexualidad y espiritualidad en el capítulo 5, en la segunda sección
llamada «Sexualizar el espíritu».)

CAPÍTULO TRES

Convertirse en un Hombre Multiorgásmico

Ahora que entiendes mejor tu sexualidad y su verdadero potencial,


ha llegado el momento de hacerte multiorgásmico. Esta tarea exige
que desarrolles tanto tu fuerza sexual como tu sensibilidad. Como
mencioné en la introducción, la mayoría de los hombres que
practiquen los ejercicios que explicamos comenzarán a
experimentar orgasmos múltiples en una o dos semanas y
dominarán la técnica en un período de tres a seis meses. Los que
tengan más energía sexual y sensibilidad podrán experimentarlos la
primera vez que lo intenten, mientras que otros con menos energía
o sensibilidad pueden tardar más de seis meses en hacerlo con
regularidad. Estos períodos también dependen de la dedicación a la
práctica. Damos estas referencias temporales como una estimación
aproximada, pero lo más importante es no desanimarse. Si
perseveras, lo conseguirás.

Fundamentos de la Respiración

Por extraño que parezca, para aprender a controlar la eyaculación y


a hacernos multiorgásmicos comenzamos fortaleciendo y
profundizando la respiración. Como se afirma en todas las artes
marciales y en las prácticas meditativas, la respiración es la puerta
que nos permite controlar el cuerpo.

La respiración es al mismo tiempo voluntaria e involuntaria. En


otras palabras, habitualmente respiramos sin pensar en ello, pero
podemos elegir cambiar el ritmo o la profundidad de nuestra
respiración. Esta utilización de la mente para cultivar el cuerpo es la
base misma del kung fu sexual.

La respiración también está relacionada con el ritmo cardíaco. Si


respiras rápida y superficialmente, como después del ejercicio físico
intenso, el ritmo cardiaco aumenta. Si respiras lenta y
profundamente el ritmo cardíaco disminuye. Como aprendimos
anteriormente, el ritmo cardíaco elevado es una de las
característica del orgasmo y la respiración rápida es un signo de
que nos estamos acercando a él. Por tanto, el primer paso para
controlar el ritmo de la excitación, y por tanto la eyaculación, es
respirar lenta y profundamente.

RESPIRACIÓN ABDOMINAL

La mayoría de nosotros respiramos muy superficialmente,


habitualmente con el pecho y hombros, lo que hace que nuestros
pulmones sólo puedan absorber una pequeña cantidad de oxígeno.
La respiración abdominal (la respiración profunda que llega hasta el
fondo de los pulmones) es la forma de respirar de los niños recién
nacidos. Si observas respirar a un bebé dormido, verás que todo su
vientre asciende y desciende con cada respiración. Respirar con el
vientre nos permite reemplazar el aire estancado en el fondo de los
pulmones por aire fresco y lleno de oxígeno. Es la forma más sana
de respirar, pero perdemos este hábito natural cuando la ansiedad
y el estrés hacen que acortemos la respiración. Esta respiración
corta, producto de la ansiedad, está limitada a la parte superior del
pecho.

Cuando nos sentimos felices y nos reímos, volvemos a respirar con


el abdomen. En este ejercicio aprenderás a respirar con el abdomen
como cuando eras un niño.

Unos minutos diarios de respiración abdominal enseñarán a tu


cuerpo a respirar profundamente por sí mismo, incluso cuando
estés dormido. En medio del calor de la pasión, la capacidad de
controlar la respiración será esencial para no precipitarse en la
eyaculación y expandir la sensación de orgasmo por todo el cuerpo.

Cuando hayas aprendido a no eyacular, es muy importante seguir


haciendo este ejercicio de respiración profunda o sencillamente
practicar la respiración profunda según tu propio criterio. Te
ayudará a hacer circular la energía sexual por todo el cuerpo y a
que tus órganos la absorban. La respiración abdominal también
masajea los órganos y la próstata y puede aliviar la sensación de
congestión que muchos hombres sienten cuando empiezan a dejar
de eyacular.

No es tan importante espirar a través de la nariz como inspirar,


pero siempre es preferible. Sin embargo, algunos prefieren espirar
por la boca cuando respiran profundamente. Adopta el hábito que
mejor funcione en tu caso.

EJERCICIO 1

RESPIRACIÓN ABDOMINAL

1. Siéntate en una silla con la espalda recta y los pies apoyados en


el suelo, separados aproximadamente la misma distancia que los
hombros.

2. Sitúa las manos sobre el ombligo y relaja los hombros.

3. Inspira a través de nariz y siente expandirse la parte interior del


abdomen y el área del ombligo (por debajo y alrededor de él), de
manera que sobresalgan ligeramente. El diafragma descenderá (ver
figura 5).
4. Mantén el pecho
relajado, espira con
fuerza para volver a
meter el abdomen,
como si tirases del
ombligo hacia atrás,
hacia la columna.
Siente también cómo
el pene y los
testículos se elevan.

5. Repite los pasos 3


y 4 de dieciocho a
treinta y seis veces.

ENCONTRAR EL CAMINO

Inspira con la Nariz

Cuando practiques cualquiera de los ejercicios descritos en este


libro, inspira siempre a través de la nariz para filtrar y calentar el
aire. Cuando inspiras a través de la boca, respiras aire sin filtrar y
sin calentar, por lo que al cuerpo le resulta más difícil de asimilar.

Risa Abdominal

Si te cuesta mucho respirar con el abdomen, como les sucede a


muchos occidentales, en lugar de la respiración puedes practicar la
risa abdominal. Es el tipo de risa que hace temblar todo el
abdomen.
No es la risa falsa del vendedor sino la risa auténtica que compartes
con tus amigos íntimos. Es el tipo de risa que puede hacer que te
duela el estómago ya que la mayoría de nosotros no estamos
acostumbrados a usar esos músculos con frecuencia. Para reírte
con el abdomen, siéntate en una silla manteniendo la espalda recta,
apoya los pies en el suelo y manténlos separados aproximadamente
a la misma distancia que los hombros. Sitúa las manos sobre el
abdomen y comienza a reírte (desde el vientre). Siente cómo vibra
tu estómago. Esta risa abdominal te ayudará a relajar el diafragma
y te permitirá respirar desde el abdomen. También te ayudará a
generar mucha energía, que más tarde podrás hacer circular por el
cuerpo para mejorar tu salud y la calidad de tus orgasmos.

EJERCICIO 2

LA CUENTA DEL SIGLO

1. Inspira lentamente (expandiendo el abdomen) y espira


(contrayéndolo). Cuenta una inspiración y una espiración completas
como una respiración.

2. Sigue respirando desde el abdomen y cuenta de uno a cien,


manteniéndote concentrado en la respiración.

3. Si te das cuenta de que te has despistado, vuelve a empezar.

4. Practica este ejercicio dos veces al día hasta que llegues a contar
cien fácilmente.

Aumenta Tu Concentración

Este ejercicio está basado en la respiración abdominal que acabas


de aprender y te ayudará a mejorar la concentración. En él debes
contar de una a cien respiraciones sin dejar que tu mente divague
(una inspiración y espiración completas se cuentan como una
respiración). Es muy simple pero no es fácil de hacer. A la mayoría
de la gente le cuesta contar hasta diez sin despistarse, por lo que
contar hasta cien resultará mucho más difícil. Un hombre
multiorgásmico nos explica su práctica: «Voy al gimnasio, me siento
en la sauna y cuento mis respiraciones: inspiro y espiro, uno,
inspiro y espiro, dos, hasta llegar a cien. A veces mientras estoy
respirando y contando (puedo ir por cincuenta o sesenta) me doy
cuenta de que estoy pensando en los valores bursátiles o en
cualquier otra cosa y no recuerdo por qué número iba; entonces
vuelvo al uno y empiezo a contar de nuevo hasta cien».

Fortalece Tus Músculos Sexuales

Ha llegado el momento de desarrollar tu fuerza sexual. El músculo


pubococcígeo o músculo PC, que mencionamos en el capítulo
anterior, es la banda muscular que se extiende desde el hueso
púbico en la parte anterior del cuerpo hasta el coxis en la posterior
(ver figura 6). La mayoría de los hombres sienten el músculo
coccígeo en el perineo, justo detrás de los testículos y delante del
ano. Es el músculo que usamos para retener la micción cuando no
podemos encontrar un urinario. El músculo PC también es el
responsable de las contracciones rítmicas de la pelvis y del ano
durante el orgasmo. En The G spot, Ladas, Whipple y Perry
describen la importancia del músculo PC:

«Si los
hombres
desarrollan la
fuerza de su
músculo
pubococcígeo,
también
pueden
aprender a
ser
multiorgásmic
os y a
distinguir
entre
orgasmo y
eyaculación».
Los orgasmos
parten de la
próstata, por lo que aprender a presionarla con los músculos
pélvicos es esencial. Además de tener más y mejores orgasmos, por
medio de estos ejercicios impedirás el endurecimiento y la
dilatación de la glándula próstatica, lo que te ayudará a evitar o a
sanar los problemas de próstata.

El músculo PC (que rodea la glándula prostática) es como una


válvula que rodea a los genitales, la cual debes aprender a abrir y
cerrar. Este músculo entra en funcionamiento cuando intentas
expulsar las últimas gotas de orina. Las mujeres lo sienten muy
claramente cuando paren; igualmente, aquéllas que han fortalecido
sus músculos PC pueden sujetar y presionar el pene en su vagina,
con lo que aumentan las sensaciones para ambos miembros de la
pareja.

Asimismo, el músculo PC es el que permite a los animales menear la


cola. Curiosamente la palabra pene significa literalmente «cola» en
latín. Con estos ejercicios aprenderás a «mover tu cola» con lo que
fortalecerás las erecciones, harás los orgasmos más intensos y
podrás distinguirlos de la eyaculación.

DETENER LA CORRIENTE

La forma más sencilla de localizar el músculo PC es detener el flujo


de orina cerrando los músculos de la pelvis la próxima vez que
vayas al servicio. Contener la orina fue uno de los primeros actos
de control sobre tu cuerpo que tuviste que aprender. Ahora,
controlar el flujo de orina te ayudará a controlar la eyaculación
porque tanto el conducto urinario, como el eyaculatorio y el de la
vesícula seminal pasan por la próstata (por eso, cuando la próstata
se agranda, el hombre tiene problemas para orinar y eyacular).

Si tu músculo PC es lo suficientemente fuerte, debes ser capaz de


interrumpir el flujo de la orina y posteriormente continuar con la
micción. Cuando este ejercicio resulta difícil es porque el músculo
PC todavía está débil. Al principio, cuando detengas el flujo de orina
puedes sentir una punzada. Esto es perfectamente normal y debe
cesar a las pocas semanas a menos que por alguna razón tengas
una infección, en cuyo caso debes ir al médico y resolver ese
problema antes de continuar practicando. Si el músculo se resiente,
sencillamente debes seguir practicando. Tira del perineo hacia
arriba mientras expulsas la orina, esto te ayudará a orinar con más
fuerza y a fortalecer los riñones, la próstata y la vejiga, además del
músculo PC.

Ponerte sobre la punta de los pies y apretar los dientes te ayuda a


hacer el ejercicio más intenso, pero lo más importante es detenerte
y volver a empezar tantas veces como puedas. Un hombre
multiorgásmico describió así su «ejercicio urinario»: «Cuando voy al
baño, intento detener el flujo y retornarlo al menos tres veces. Y si
tengo tiempo y ganas de divertirme, intento repetirlo cinco, seis o
siete veces».EJERCICIO 3

DETENER LA CORRIENTE

1. Cuando estás a punto de orinar, ponte de puntillas sobre los


dedos de los pies. Si es necesario, usa

una pared para apoyarte.

2. Inspira profundamente.

3. Espira lentamente, haciendo fuerza para expulsar la orina al


tiempo que tiras del perineo hacia arriba y aprietas los dientes.

4. Inspira y contrae tu músculo PC para detener el flujo de orina.

5. Espira y vuelve a orinar.


6. Repite los pasos 4 y 5 de tres a seis veces hasta que hayas
acabado de orinar.

ENCONTRAR EL CAMINO

Vaciar la Vejiga

Como la vejiga y la próstata están muy cerca una de la otra, si


sientes la vejiga llena, debes orinar antes de cultivarte en solitario
o de hacer el amor. Tener la vejiga llena puede provocarte la
necesidad de eyacular y puede hacer que retener la eyaculación te
resulte más difícil.

FORTALECER EL MÚSCULO PC

La importancia del músculo PC fue descubierta en Occidente


durante la década de los años cuarenta por el ginecólogo Arnold
Kegel, creador de los famosos ejercicios Kegel, que ayudan a las
embarazadas a controlar la vejiga y facilitan el parto. Las mujeres
se dieron cuenta de que estos ejercicios podían aumentar su deseo
sexual, intensificar sus orgasmos y ayudarlas a ser
multiorgásmicas. Como mencionamos anteriormente, fortalecer
este músculo también es muy importante para la salud pélvica y el
placer sexual masculino.

En Occidente se utilizan una gran variedad de ejercicios para


fortalecer el músculo PC, pero la mayoría son variaciones de la
técnica original de Kegel. Todos ellos enseñan a contraer y estirar el
músculo, aunque el número de repeticiones y la cantidad de tiempo
recomendado para mantener las contracciones varía. El ejercicio
siguiente está basado en el principio taoísta de que los músculos
circulares del cuerpo (los que rodean los ojos, la boca, el perineo y
el ano) están conectados. Puedes aumentar la fuerza de tu músculo
PC apretando los músculos que rodean los ojos y la boca. Al
principio se recomienda practicar este ejercicio sentado, pero
posteriormente puedes practicarlo de pie o tumbado.

Contraer los ojos y los labios te ayudará a tensar el músculo PC


alrededor de la próstata y del ano, pero lo más importante de esta
práctica es contraer y soltar el músculo PC tan frecuentemente
como puedas, y eso es algo que puedes hacer casi en cualquier
lugar: mientras conduces, ves la televisión, envías un fax o asistes
a una reunión aburrida. Puedes contar las contracciones que eres
capaz de hacer mientras el semáforo está rojo, o puedes mantener
una única contracción hasta que se ponga verde.

Intenta practicar este ejercicio al menos dos o tres veces al día,


aunque puedes hacerlo todas las veces que quieras. En algún
momento, tus músculos pueden resentirse, como cuando practicas
las flexiones habituales. No vayas demasiado lejos; aumenta el
número y la frecuencia poco a poco y recuerda que la constancia es
más importante que el número de flexiones. Una buena forma de
practicar a diario es ligar la práctica a ciertos hechos cotidianos,
como levantarse por la mañana, ducharse, o acostarse por la noche.

Según los autores de The G spot, un hombre con un músculo PC


sano debe ser capaz de levantar una toalla colocada sobre su pene
erecto con una contracción del músculo (en prácticas taoístas más
avanzadas puedes incluso aprender a utilizar pesos para fortalecer
tus músculos pélvicos). Por ahora puedes intentar levantar y bajar
una toalla, pero evita hacerlo en público. Como señalan los autores
de The G spot, «la ansiedad que produce actuar ante un público es
el gran enemigo de la erección masculina».

EJERCICIO 4

FORTALECER EL MÚSCULO PC

1. Inspira y concéntrate en la próstata, el perineo y el ano.

2. Cuando espires, contrae el músculo PC alrededor de la próstata y


del ano, al tiempo que contraes también los músculos que rodean
los ojos y la boca.

3. Inspira y relájate, relaja el músculo PC y los músculos de los ojos


y boca.

4. Repite los pasos 2 y 3, contrayendo los músculos cuando espiras


y relajándolos cuando inspiras, de nueve a treinta y seis veces.

Autoplacer y Autocultivarse

El siguiente paso es cultivar la sensibilidad sexual. La forma más


sencilla de desarrollar esta conciencia es darse placer a uno mismo.
Desgraciadamente, en Occidente, a la mayoría de nosotros no se
nos educó desde la perspectiva de que el sexo y la energía sexual
son partes naturales y esenciales de nuestra salud general. Lo más
probable es que desde la primera vez que empezaste a tocarte tus
«partes», tus padres te dijeran (sutil o no tan sutilmente) que
mantuvieses las manos fuera de los pantalones. Y aunque esto no
impidió que siguieras encerrándote en el baño o en tu habitación,
probablemente sientes culpabilidad o vergüenza cuando te
masturbas. No eres el único.

La ambivalencia de las culturas cristianas hacia el sexo, en


particular el no procreativo, todavía influencia la sociedad
occidental y nuestras costumbres sexuales. Un buen ejemplo es el
siguiente: en 1994, el Dr. Joycelyn Elders, la más alta autoridad
sanitaria de los Estados Unidos, fue obligado a dimitir por declarar
públicamente que la masturbación «es parte de la sexualidad
humana». Merece la pena mencionar que la prohibición que la
cristiandad ha impuesto sobre la masturbación, antes llamada
onanismo, está basada en una interpretación errónea de la historia
bíblica de Onán. Onán fue castigado por negarse a dar un hijo a la
esposa de su hermano fallecido, como era costumbre en su tiempo.
Su «pecado» no tuvo nada que ver con la masturbación.1

JUGAR CONTIGO MISMO

La sexualidad taoísta se desarrolló como una rama de la medicina y


por tanto no incluye ninguna enseñanza moral específica.2 No
prohibe ningún tipo de actividad sexual humana sino que trata de
enseñar a conservar la salud cuando se practican estas actividades.
Para los maestros taoístas, la masturbación (que ellos llamaron
práctica solitaria o ejercicio genital) era la manera esencial de
lograr el control eyaculatorio y de aprender a hacer circular la
energía sexual para revitalizar todo el cuerpo. (Recuerda que la
práctica solitaria, que llamaremos autocultivo o autoplacer, no
incluye la eyaculación.)

Según el Tao, el juego es una de las mejores formas de aprender, y


«jugar con nosotros mismos» es una excelente manera de fortalecer
nuestros genitales e incrementar nuestra energía sexual. Mucha
gente se preocupa porque piensa que se masturba en exceso, pero
los taoístas sabían que no existe tal cosa, siempre que uno aprenda
a controlar la eyaculación. El problema, lo que consume la energía
masculina, es el exceso de eyaculación, que puede ocurrir tanto en
el coito como en la práctica solitaria.

Según Kinsey y otros estudios más recientes, casi todos los jóvenes,
así como la mayoría de los hombres, se masturban.3 Prohibir o
desanimar este aspecto tan importante de la sexualidad infantil y
adolescente convierte a los muchachos en ladrones sexuales y les
obliga a robar su placer. Es muy posible que tantos hombres
tengan problemas de eyaculación precoz porque crecieron con la
preocupación de eyacular antes de que les «descubrieran». El Dr.
Wardell Pomeroy, en su libro Boys and sex, explica que como casi
todos los muchachos se masturban, deberían aprender a hacerlo
lentamente y durante largos períodos para poder hacer el amor
durante más tiempo cuando sean adultos sexualmente activos.
Los taoístas añadirían que los muchachos deben aprender a darse
placer sin eyacular. Los jóvenes o adolescentes que eyaculan en
exceso se suelen encontrar con que la energía y la motivación de
que disponen para realizar otras actividades decae
significativamente. Mantak Chia, uno de los autores de este libro,
nació y creció en Tailandia.
Cuando era niño, se sentaba
en la escuela junto a otro niño
que tuvo que repetir el cuarto
curso cuatro veces. El
muchacho se masturbaba en
clase todos los días cuatro o
cinco veces y eyaculaba
dentro de una botella.
Obviamente este es un caso
extremo, pero según el
taoísmo, su fracaso escolar
está plenamente justificado:
literalmente estaba
vaciándose a sí mismo y
vaciando su cerebro. La
expresión «follar hasta perder
la cabeza» es una descripción
precisa del estupor que sigue
a las eyaculaciones repetidas.

Muchos hombres (y mujeres) casados o que mantienen una relación


continúan cultivando el placer en solitario. En 1972, la Asociación
Médica Americana informó a los médicos por medio de un libro
llamado Sexualidad humana de que «la masturbación es practicada
por hombres y mujeres de todas las edades, a menudo como
complemento del coito sexual, y las mujeres tienden a masturbarse
más cuando se hacen mayores» (las estadísticas sugieren que
aproximadamente el 70 por ciento de los hombres y mujeres
casados se dan placer a sí mismos).4

El placer con uno mismo no puede sustituir la práctica sexual con


una pareja, pero puede constituir un complemento valioso. Un
estudio reciente llevado a cabo a nivel nacional y patrocinado por
la Universidad de Chicago ha descubierto que las personas que
practican el sexo de manera regular con su pareja tienden a darse
placer a sí mismos con más frecuencia que los que no lo hacen.5 El
placer autoinducido puede ayudar a aliviar la tensión acumulada
cuando lo que se necesita más es una descarga sexual y no un
encuentro íntimo. También puede ayudar cuando la pareja está
cansada, distraída o tiene menos apetito sexual (si habitualmente
tu pareja tiene menos apetito sexual que tú, recomiéndale la lectura
del capítulo 6, y asegúrate también de que ambos leéis la sección
llamada «Las estaciones de nuestra vida sexual» en el capítulo 9). Si
por la razón que fuera sientes que no puedes darte placer a ti
mismo, puedes aprender a hacerte multiorgásmico con tu pareja.
Puede que tardes un poco más, pero eso es todo. También puedes
practicar los ejercicios que ya has aprendido: respiración
abdominal, la cuenta del siglo, detener la corriente y las flexiones
del músculo PC.

Nadie nos enseña a darnos placer a nosotros mismos. Y, si tenemos


en cuenta el escándalo que se produjo cuando el inspector general
de sanidad Elders sugirió que quizá la masturbación «debería
enseñarse», concluiremos que no es nada probable que se incluya
próximamente entre las materias docentes. Casi todos aprendemos
a masturbarnos a toda prisa, en soledad, o con otros muchachos
igualmente inexpertos. Ninguna de estas circunstancias nos ayuda
a desarrollar una verdadera sensibilidad —o una gran habilidad—
por lo que a continuación te ofrecemos algunas sugerencias.

EXPERIMENTA TU PROPIO PLACER. Si utilizas pornografía o textos


eróticos para excitarte, una vez que lo logres intenta dirigir la
atención a tus sensaciones corporales. La pornografía, aunque
puede aumentar nuestra energía sexual, nos distrae y puede hacer
que nos resulte difícil concentrarnos en las sensaciones corporales
cuando estamos cerca del orgasmo. Muchos hombres aprenden a
darse placer con la pornografía, y aunque este no es el mejor lugar
para discutir los pros y los contras de esta costumbre o de la
industria sexual, es importante reconocer que la pornografía tiene
éxito cuando te aleja de ti mismo. En las prácticas sugeridas por
este libro tienes que ir hacia dentro y experimentar tu propio
placer, no la idea del placer que pueda tener otra persona.

ESTIMULA TODO EL PENE. Es importante estimular todo el pene. La


mayor parte de los hombres se centran fundamentalmente en el
glande, que es la parte más erógena. Pero, según la medicina china,
las distintas partes del pene se corresponden con los miembros y
órganos de nuestro cuerpo (ver figura 7). Para evitar estimular en
exceso una parte del cuerpo, intenta frotar todo el pene, tanto el
cuerpo como el glande.

TÓCATE LOS TESTÍCULOS. Si no acostumbras a tocarte el escroto,


quizá quieras probarlo. Los testículos pueden mostrarse
especialmente sensibles a un toque ligero, y muchos hombres
disfrutan también cuando tiran del escroto. Frotar los testículos
aumenta la producción de testosterona, lo que añade potencia al
cuerpo, aumentando la producción de esperma y mejorando la
salud general (ver masaje de testículos en el capítulo 8). En la
sección siguiente describimos la técnica para «tirar del escroto», que
puede ayudarte a retrasar la eyaculación, pero de momento debes
aprender a tocarte el escroto por simple placer.

EXPLORA EL PUNTO DEL MILLÓN DE DÓLARES. Durante la


masturbación debes explorar el perineo y el punto del Millón de
Dólares (junto al ano). Presionar sobre este punto Justo antes de
eyacular te ayudará a detener el reflejo eyaculatorio, pero, una vez
más, de momento sólo estás explorando por placer. Cuando
presionas o aprietas este punto envías más sangre hacia el pene, lo
que puede provocar sensaciones agradables. Una presión intensa y
rítmica aplicada en este lugar imita las contracciones de la próstata
que acompañan a la fase contráctil del orgasmo.

Es preferible estimular el punto del Millón de Dólares cuando se ha


logrado la erección y se está muy excitado ya que, como
comentábamos anteriormente, el pene se excita e hincha de
adelante hacia atrás. Si no sientes ninguna sensación o si sientes
una sensación incómoda, detente y espera a estar más excitado. Si
este lugar no llega a excitarte sexualmente, vuelve a centrarte en
el pene y en el escroto.

TÓMATE EL TIEMPO QUE NECESITES. Es importante tomarse todo el


tiempo que se desee para disfrutar y aprender a prolongar la
eyaculación. Hartman y Fithian comentan: «A lo largo de nuestro
trabajo con más de mil casos, hemos descubierto que si un hombre
puede aprender a prolongar la masturbación de quince a veinte
minutos, podrá prolongar el coito todo el tiempo que quiera. Este
período de tiempo (de quince a veinte minutos) parece ser crítico y,
una vez superado, se tiene la situación controlada. Es así de
simple»;

Puede parecer mucho tiempo, y lo es, especialmente si estás


acostumbrado a masturbarte a toda prisa en dos o tres minutos. Un
hombre multiorgásmico explicaba así la diferencia: «Cuando jugaba
conmigo mismo, solía eyacular en unos pocos minutos,
simplemente para aliviar la tensión, porque estaba aburrido o por lo
que fuera. El cultivo personal es diferente. Intento jugar conmigo
mismo sin irme todo el tiempo que pueda. Después de intentarlo
unas cuantas veces pude prolongarlo durante veinte minutos».

Cuando seas multiorgásmico podrás alcanzar muchas cumbres


orgásmicas (sin eyacular) a lo largo de esos veinte minutos y podrás
hacer circular la energía rejuvenecedora y sanadora por todo tu
cuerpo. Otro hombre multiorgásmico describió esta práctica como
«algo que está a medio camino entre la masturbación y la
meditación».

Lo último que querríamos hacer es que el auto-placer te resultara


mecánico o supusiera una carga y, al igual que cuando hacemos el
amor, no hay un número correcto de orgasmos ni una cantidad
concreta de tiempo que sea la ideal. Ambos dependen de la
situación, del tiempo libre de que dispongas y de tu nivel de
excitación. Si empiezas a sentirte aburrido, pregúntate cuál es la
causa de tu aburrimiento.

¿Estás volviendo a caer en antiguos hábitos? ¿Tu forma de tocarte


se está volviendo mecánica? ¿Estás demasiado centrado en los
genitales? ¿Estás distraído? Si no puedes concentrarte, intenta
practicar el ejercicio de respiración descrito en el capítulo siguiente
para volver a conectar con tu cuerpo. Generalmente consideramos
que sensibilizar nuestros cuerpos y mimarnos no es muy masculino,
pero el placer es tan masculino como el dolor y además es mucho
más divertido. Una buena forma de realizar estas prácticas es
empezar por tomar un buen baño caliente (quizá con un poco de
sésamo calmante y aceite de oliva) y darse un masaje corporal. Una
iluminación tenue o la luz de las velas te ayudarán a centrarte. Otra
posibilidad es sentarte frente a un espejo (con o sin vela) donde
puedas contemplar tu cuerpo. Intenta sentir su sensualidad; toca y
siente tus manos y brazos, tus pies (si puedes llegar hasta ellos),
pantorrillas y muslos. Tócate el pecho y los pezones. Cuando te des
placer, intenta masajearte y acariciarte los muslos y el estómago
antes de concentrarte en los genitales.

CULTIVA EL AMOR. Aunque la mayoría de los hombres se dan placer


a sí mismos (se sientan culpables o no), muy pocos son capaces de
hacerlo con una actitud amorosa, cultivando el amor hacia sí
mismos mientras lo hacen. Cultivar el amor hacia uno mismo es
esencial si se quiere ser un compañero amoroso para los demás. La
energía sexual sólo amplifica la energía que ya está en nuestro
cuerpo, sea positiva o negativa. Si lo que sientes es amor, el amor
aumentará con el deseo sexual, pero si lo que sientes es odio,
entonces aumentará el odio. Es esencial que entiendas cómo la
energía sexual amplifica tus emociones, tanto cuando prácticas en
solitario como en pareja. Cultivar la energía sexual convirtiéndola
en amor y bondad te ayudará a no eyacular; es mucho más difícil
mantener el control si sientes ira o impaciencia.

En la sexualidad taoísta no puedes separar los genitales del corazón


porque la energía sexual circula por todo el cuerpo. Como explicó
un hombre multiorgásmico: «Antes intentaba mantener separados
el sexo y las emociones, pero con la práctica de la sexualidad
taoísta, mis genitales están cada vez más conectados con el corazón
y he descubierto en mi un amor real y profundo por mi compañera,
e incluso por otras personas». Los taoístas practican un ejercicio
muy simple para conectar el corazón con los genitales (el amor y el
sexo). Inténtalo si te encuentras irritado, frustrado o distraído
antes de empezar el contacto sexual contigo mismo o con tu
pareja: pon tu mano derecha sobre la ingle y los genitales y la
izquierda sobre el corazón, conectando así la energía sexual con el
amor. Si sientes cólera, odio u otras emociones negativas muy a
menudo, debes transformar estas energías antes de cultivar la
energía sexual. La sonrisa interna y seis sonidos sanadores
(técnicas descritas en el libro Sistemas taoístas para transformar el
estrés en vitalidad, de Mantak Chia) pueden ayudarte, y también te
ayudará una buena terapia psicológica.

El autoamor, que es muy distinto del egoísmo y del narcisismo, es


la base de cualquier práctica, sea solitaria o a dúo. En el libro The G
spot, los autores advierten que no han escrito un libro sobre el
amor. Nuestro libro tampoco trata del amor, es fundamentalmente
un libro sobre sexualidad. Pero los taoístas sabían que si quieres
ser una persona sana no puedes separar ambas cosas.

Ahora prueba a hacer el ejercicio de darte placer a ti mismo; te


ayudará a expandir tu sensualidad y a extender el placer por todo
tu cuerpo. En la sección siguiente aprenderás alguno más de esos
complicados ejercicios destinados a controlar la excitación y a
hacerte multiorgásmico. Pero como todos ellos se basan en ser muy
consciente del propio placer, empezaremos por damos placer a
nosotros mismos.

EJERCICIO 5

DARSE PLACER A UNO MISMO

1. Empieza por lubricarte el pene. El lubricante hará que aumenten


tus sensaciones. En general, el aceite es mejor que la loción, que
suele secarse más rápidamente.

2. Date placer como prefieras y recuerda que debes masajear y


estimular la totalidad del pene, el escroto y el perineo, incluyendo
también el punto del Millón de Dólares.

3. Intenta mantenerte consciente de tu nivel de excitación: date


cuenta del hormigueo que sientes en la base del pene, de los
distintos estadios de la erección; siente cómo aumenta el ritmo
cardíaco.

4. Cuando estés cerca de la eyaculación, detente y espera. Intenta


sentir las contracciones del músculo PC y del ano durante la fase
contráctil del orgasmo, pero no debes sorprenderte si tardas algún
tiempo en sentirlas sin eyacular. También puedes presionar el
músculo PC que rodea a la próstata si esta comienza a contraerse y
temes rebasar el límite.

5. Una vez recuperado el control, puedes volver a empezar todas


las veces que quieras y continuar todo el tiempo que desees.

Si puedes experimentar las contracciones involuntarias del músculo


PC durante la fase contráctil del orgasmo sin eyacular, ya estás en
el camino que te llevará a ser un hombre multiorgásmico. Y si llegas
a tener dos miniorgasmos, ¡ya lo has conseguido! Al principio estos
orgasmos no serán muy intensos, no sentirás temblar la tierra, pero
acabarán extendiéndose a todo el cuerpo. De momento, dedícate a
disfrutar los temblores que te producen estos miniorgasmos. Un
hombre multiorgásmico explicó su experiencia con estas palabras:
«Cuando estoy a punto de llegar a la eyaculación, me detengo, me
relajo y respiro. Es como si me dejara ir o me dejara caer hacia
atrás en un orgasmo sin eyaculación. A veces siento un tirón
placentero en la próstata. Otras veces lo siento por todos mis
genitales y es tan intenso como un orgasmo eyaculatorio (más
intenso incluso). Mi esposa no suele saber si he eyaculado no hasta
que se lo digo».

Si todavía no puedes sentir la fase contráctil del orgasmo y la


presión que sientes en la pelvis te resulta muy incómoda, puedes
intentar hacer el ejercicio de masaje pélvico que describimos un
poco más adelante en este mismo capítulo o también puedes
simplemente eyacular. Si retiras la energía sexual de la pelvis y la
masajeas, aliviarás la presión que todo el mundo siente cuando
empieza a practicar.

Asimismo, si accidentalmente vas demasiado lejos y eyaculas, no te


castigues por ello. Recuerda que estás aprendiendo a realizar estos
ejercicios y a controlar el ritmo de tu excitación.

Aprende a Controlar la Eyaculación

Ahora que has comenzado a aprender a controlar la respiración y


los músculos sexuales, estás preparado para aprender algunas
técnicas específicas con las que podrás controlar la eyaculación
cuando estés muy excitado. Cuanto más practiques los ejercicios
aprendidos hasta el momento, más fácil te resultará practicar los
que te proponemos a continuación y evitar traspasar el punto de No

Retorno.

DETENERSE
En primer lugar, lo más importante es ser consciente en todo
momento del ritmo de la propia excitación y detenerse unos toques
antes (o unos movimientos antes si estás con tu pareja) del
momento en que piensas que vas a eyacular. Muchos sexólogos le
llaman la técnica de detenerse y volver a empezar, pero es simple
sentido común. En general, más vale pararse demasiado pronto que
demasiado tarde. Al principio, probablemente tendrás que dejar de
estimularte durante diez o veinte segundos para permitir que se
diluya el impulso eyaculatorio.

RESPIRAR

La respiración profunda que ya hemos comentado anteriormente es


muy importante para controlar el ritmo de excitación y retrasar la
eyaculación cuando
estás muy excitado.
Una técnica
particularmente
efectiva es la inspirar
profundamente y
contener la
respiración durante
unos segundos hasta
que el impulso de
eyacular desaparezca.
Sin embargo, algunos
hombres
multiorgásmicos
respiran rápidamente
para retrasar la
eyaculación (esta
respiración superficial y
rápida es llamada la
respiración de fuego
en la tradición del
yoga). La respiración
profunda y lenta
ayuda a controlar la
energía sexual, mientras que la superficial y rápida sirve para
dispersar la energía. Puedes experimentar con ambas y ver cuál
funciona mejor en tu caso.

CONTRAER EL MÚSCULO PC

Como ya hemos mencionado, el músculo PC rodea la próstata y el


semen debe discurrir a través de ella durante la fase de expulsión.
Aprendiendo a presionar la próstata durante la fase contráctil
(cuando se contrae involuntariamente), se puede evitar pasar de la
fase de contracción a la de expulsión. (Entre la contracción y la
expulsión está el infame «punto de No Retorno»). Un hombre
multiorgásmico describió su experiencia así: «Retengo la eyaculación
contrayendo el músculo PC en el momento preciso. Me ha costado
mucho tiempo llegar a dominar este proceso, pero el resultado
definitivamente merece la pena».

APRETAR EL PENE

Muchos sexólogos recomiendan apretarse el pene, una técnica que


fue desarrollada originalmente para ayudar a los hombres que
eyaculan «prematuramente». Es muy simple. Sólo tienes que colocar
dos dedos de una mano en la parte inferior del pene, después sitúa
el pulgar en la parte superior y aprieta (ver figura 8a). Algunos
hombres comentan que para reducir un poco su nivel de excitación
agarran el pene como si fuera el manillar de una bicicleta,
apretando en la punta o en la parte inferior con el pulgar (ver
figura 8b). Estás técnicas son muy efectivas en la práctica solitaria,
pero resultan un tanto incómodas cuando se realiza el coito con
otra persona ya que hay que retirarse. A fin de estar preparado
para esta situación, intenta apretarte la punta del pene utilizando
la mente. Con la práctica, podrás conseguirlo y evitarás la torpeza
de tener que usar las manos. Otra buena técnica es apretarse la
base del pene (recuerda que debes apretarla también con la
mente). Te ayudará a controlar el nivel de excitación y a expandir y
fortalecer tus erecciones (ver figura 8c).

PRESIONAR EL PUNTO DEL MILLÓN DE DÓLARES

Una de las técnicas taoístas más antiguas consiste en presionar el


punto del Millón de Dólares al tiempo que contraemos el músculo
PC. Esto nos
ayuda a
retrasar la
eyaculación
porque
desvía
nuestra
atención al
tiempo que
interrumpe el
reflejo
eyaculatorio.
Es una
técnica
simple y
efectiva. En
primer lugar debes localizar el punto del Millón de Dólares, situado
justo delante del ano (ver figura 2, página 35). Cuando presionas en
el lugar correcto debes sentir una pequeña hendidura. Tendrás que
empujar el dedo hacia arriba hasta tocar la primera articulación. Un
hombre multiorgásmico describió su experiencia así: «Presionar
sobre el punto del Millón de Dólares durante un rato disminuye la
erección ligeramente y reduce mucho el riesgo de eyacular». Puedes
utilizar esta técnica durante el coito sin necesidad de retirarte.

TIRAR DEL ESCROTO

Como los testículos tienen que acercarse al cuerpo para poder


propulsar el semen hacia fuera, alejarlos del cuerpo ayuda a
retrasar la eyaculación. Dibuja un. círculo con el pulgar y el índice
alrededor del escroto (ver figura 9) y estira firmemente hacia
abajo.

RETIRAR LA ENERGÍA SEXUAL

Más que en las técnicas mecánicas, el secreto para evitar la


eyaculación reside en aprender a bombear la energía sexual,
alejándola de los genitales y haciéndola ascender por la columna
hacia el resto del cuerpo. Si sigues acumulando energía sexual en
la zona de los genitales, acabará siendo imposible de controlar y
saldrá disparada hacia fuera por el camino más directo que tiene: a
través del pene. Sin embargo, si retiras la energía, te resultará
mucho más fácil evitar la eyaculación. Como comentamos en el
capítulo anterior, este es el secreto que te permitirá aprender a
sentir orgasmos en todo el cuerpo.

En la sección siguiente daremos instrucciones detalladas para


mostrarte cómo hacer circular la energía sexual por todo el cuerpo,
pero, entre tanto, sencillamente imagina que la energía sexual sale
del pene, pasa por el perineo y sube por la columna. La contracción
del perineo ayuda a bombear la energía hacia arriba y te prepara
para el ejercicio de la Gran Aspiración que describimos más
adelante en este mismo capítulo.

En el ejercicio 6 utilizarás estas técnicas para calmarte un poco


cuando empieces a sentirte muy excitado. Una vez más, intenta
experimentar los placenteros espasmos de la próstata y el ano
(orgasmos de la fase contráctil) sin eyacular. Esta es la descripción
que hace un hombre multiorgásmico de su capacidad de sentir
orgasmos sin eyacular: «Hago varias cosas: 1) el hecho de variar y
no repetir las mismas cosas una y otra vez (variar la profundidad
de la penetración cuando hago el amor, o usar toques diferentes
cuando estoy conmigo mismo) parece servir de ayuda; 2) voy más
lento cuando siento que me estoy acercando al límite; 3) practico
los ejercicios de respiración profunda; 4) y movilizo el chi
acumulado en mi columna, extendiéndolo por la órbita
microcósmica».

Sean cuales sean las técnicas que uses para excitarte o para
calmarte, los puntos más importantes de la práctica son: respirar,
apretar el músculo PC y aprender a relajarse en el orgasmo sin
eyaculación.

EJERCICIO 6

SEPARAR EL ORGASMO DE LA EYACULACIÓN

1. Empieza lubricándote el pene como hiciste en el ejercicio de


darte placer a ti mismo.

2. Antes de centrarte en los genitales, recuerda que debes tocarte


y masajearte el resto del cuerpo, especialmente el vientre, los
muslos y los pezones.

3. Date placer como más te guste, recordando estimular todo el


pene, el escroto y el perineo.

4. Presta atención a tu ritmo de excitación. Una vez más, intenta


tomar conciencia de los distintos niveles de excitación: siente el
hormigueo en la base del pene, los distintos estadios de la
erección; siente cómo cambia la respiración y se acelera el pulso.

5. Cuando sientas que te estás acercando al punto de No Retorno,


detente, respira y contrae ligeramente el músculo PC alrededor de
la próstata. Además, también puedes retrasar la eyaculación
presionando el punto del Millón de Dólares, utilizando el tirón
escrotal, presionando en la punta del pene con el dedo o utilizando
la mente para hacerlo. Puedes experimentar y ver cuál de estas
técnicas funciona mejor en tu caso, pero lo más importante es estar
muy atento a la propia excitación y detenerse a tiempo, al menos
unos cuantos toques antes de llegar al punto de No Retorno.

6. Si sientes que estás demasiado excitado y te resulta difícil


mantener el control, intenta retirar la energía sexual hacia la
columna con tu mente, apretando y soltando varias veces el
músculo PC.

Si sigues sintiéndote demasiado excitado y fuera de control,


detente de diez a veinte segundos concentrándote en la respiración
profunda.

7. Intenta sentir las contracciones del músculo PC y del ano que


tiene lugar durante la fase contráctil del orgasmo.
8. Después de haber alcanzado varias cumbres sin eyacular,
detente. Te sentirás en paz y/o energetizado. Intenta sentir la
energía circulando por todo tu cuerpo y las sensaciones de
hormigueo, picor o pinchazos que te produce.

ENCONTRAR EL CAMINO

PRESIÓN PÉLVICA

La presión que sientes en la zona pélvica es el resultado de la gran


cantidad de sangre y de chi que han sido bombeados hacia esa
zona y del aumento de tu energía sexual. Si esta presión te resulta
muy incómoda, no te detengas y eyacula, o utiliza la respiración
profunda, las flexiones del músculo PC y el masaje del perineo (que
describimos más adelante en este mismo capítulo, en la sección
llamada «el Bloqueo Dactilar»), para aliviar la tensión. Cuando
aprendas a sentir las pulsaciones de la próstata y a aspirar la
energía sexual hacia arriba, será mucho menos probable que
sientas presión en los genitales.

Un hombre multiorgásmico describió así su experiencia: «Cuando me


detengo, mi pene sigue duro un par de minutos más, pero no me
siento tenso ni incómodo. No siento presión en los genitales porque
hago los ejercicios respiratorios y aspiro la energía hacia arriba.
Simplemente me siento relajado».

Aprende a Controlar la Energía Sexual

En la sección siguiente vas a aprender la Aspiración en Frío, la


técnica taoísta para retirar la energía sexual de los testículos y
hacerla circular por todo el cuerpo antes de estar excesivamente
excitado e incómodo. Y dos secciones más adelante aprenderás la
Gran Aspiración, que puedes practicar cuando ya estés muy
excitado y te sientas incómodo.

Pero te resultará mucho más fácil trabajar con tu energía sexual


cuando aún estés «fresco», por lo que te animamos a aprender este
ejercicio antes de practicar la Gran Aspiración. Si aprendes a
practicar con éxito la Aspiración en Frío, apenas necesitarás usar la
Gran Aspiración. Cuanto antes empieces a retirar la energía de los
genitales, más fácil te resultará extender y experimentar los
orgasmos en todo el cuerpo. Finalmente podrás utilizar tu energía
sexual para sanarte y conservar la salud.

Cuando tengas un contacto sexual, contigo mismo o con tu pareja,


la Aspiración en Frío te permitirá contener el impulso de eyacular. Y
cuando sientas ganas de tener un contacto sexual, pero no quieras
o no puedas tenerlo, la Aspiración en Frío te ayudará a aliviar la
«presión» de la excitación y a transformar la energía sexual en
creatividad y vitalidad. Michael Winn explica: «He enseñado esta
técnica a miles de hombres occidentales y mi experiencia me ha
revelado que es la forma más rápida y segura de aliviar el deseo y
la frustración sexual, así como de aumentar el flujo de energía
creativa en el corazón y en el cerebro.

Esta técnica permite al hombre cultivar su energía sexual en


cualquier momento y lugar: mientras espera que le atiendan en el
banco, cuando está trabajando en su oficina, e incluso cuando se
despierta a media noche con una erección porque ha tenido un
sueño erótico».

La Aspiración en Frío

A la Aspiración en Frío también se la conoce con el nombre de


«Respirar con los Testículos», porque esta técnica hace que los
testículos suban y bajen, como si estuvieran respirando. En
realidad, se usa la mente y los músculos para elevar y bajar los
testículos y para retirar energía sexual de los genitales y dirigirla
hacia la cabeza. Para los taoístas, el orgasmo no eyaculatorio no
sólo permite a los hombres evitar la pérdida de semen (y las
hormonas, proteínas, minerales, vitaminas y aminoácidos que
contiene), sino evitar también la pérdida de la energía bioeléctrica
(el ching-chi) generada por el esperma. (6) Los testículos fabrican
las hormonas sexuales y la energía sexual, y a partir de ellos
elevamos la energía por la columna hasta el cerebro (ver figura 10).
Esto nos permite retirar la energía sexual de los genitales y
finalmente producir una ola de energía revitalizante y refrescante
que asciende por la columna estimulando todas las terminaciones
nerviosas que encuentra a su paso.

Podrás sentir esta ola de placer orgásmico en cualquier momento


sin necesidad de estar excitado sexualmente. Eso hará que sientas
que tu día ha merecido la pena, y quizá justifique también tu
semana, tu mes, ¡e incluso toda tu vida!

EJERCICIO 7

LA ASPIRACIÓN EN FRÍO

1. Tócate o rodea los testículos con la mano para calentarlos hasta


que empieces a sentir un leve hormigueo, el primer movimiento de
tu energía sexual (si te encuentras en un lugar público,
simplemente puedes tener un pensamiento o fantasía sexual).

2. lnspira y tira suavemente hacia arriba de los músculos que


rodean a tus testículos, perineo y ano. Mientras inspiras y tensas
los músculos, imagina que absorbes esta energía sexual, retirándola
de los testículos hacia el perineo, el ano y el coxis.

3. Espira y relaja los músculos, pero permanece atento a tu


creciente energía sexual.

4. Continúa inspirando y tirando hacia arriba y después espira y


relájate varias veces más hasta que puedas percibir una sensación
cálida y
hormigueante en
el perineo. Una
vez que sientas
que la energía
sexual está
movilizada
puedes utilizar la
espina dorsal
como si fuera una
paja que te ayuda
a absorber esa
energía desde los
testículos y el
perineo, a lo
largo de la
columna, hasta la
base del cráneo.
(Hunde la barbilla
ligeramente hacia
atrás, lo que te
ayudará a elevar
la energía de la
columna a la
cabeza.) Repítelo
de cinco a diez minutos, o hasta que veas una luz o sientas un
hormigueo en la cabeza. Intenta hacer circular la energía dentro de
la cabeza con la mente.

5. Finalmente, tócate el paladar con la lengua un par de


centímetros por detrás de los dientes, en el lugar donde el paladar
se curva (ver figura 11). La lengua funciona como un interruptor
que conecta los canales anterior y posterior del cuerpo,
permitiendo que la energía fluya hacia abajo por la parte anterior
hasta el ombligo.

ELEVAR LA ENERGÍA

Lleva cierto tiempo aprender a hacer circular esta energía, por lo


que no debes desanimarte, especialmente si no tienes mucha
experiencia con la meditación u otras artes que trabajan el aspecto
interno. También es muy posible que sientas la energía en algunos
puntos de la columna pero no en otros. La forma de saber si has
completado el ejercicio con éxito es comprobar si la energía ha
llegado al cerebro.

Te resultará sorprendente comprobar que puedes movilizar esta


energía de forma casi inmediata. Como dijimos al principio del
capítulo, lograrlo dependerá en gran medida de tu energía sexual y
de tu sensibilidad.

Un hombre multiorgásmico nos explica su experiencia:

«Desde la adolescencia, siempre he tenido mucha energía sexual, lo


que me ha llevado a sentirme muy frustrado. Pensé que había que
ser un yogui y vivir treinta años en una cueva para aprender a
controlar la propia energía sexual. Después de aprender este
ejercicio tan simple, me quedé sorprendido de que en sólo diez
minutos podía experimentar el hormigueo en la columna y en la
cabeza. A los pocos meses pude controlar mi deseo desmedido y
eliminar el sentimiento de frustración que me había acompañado
durante tantos años».

ENCONTRAR EL CAMINO

Soltarse
Si tienes la espalda o la pelvis muy tensas, te resultará difícil elevar
la energía sexual por la columna. Es muy importante que relajes la
zona pélvica, la columna vertebral y el cuello. Imagínate que vas
montado en un caballo a galope y que mueves la pelvis hacia
adelante y hacia atrás, dejando que la barbilla oscile arriba y abajo.
La médula espinal debe balancearse como una ola.

CONDUCIR LA ENERGÍA HACIA ABAJO

Además de elevar y hacer circular la energía desde los genitales


hasta el cerebro a lo largo del canal posterior, también es esencial
que la dirijas hacia abajo por el canal anterior hasta el abdomen,
donde puede ser almacenada de manera segura. A los hombres les
suele resultar mucho más difícil hacer circular la energía hacia
abajo que elevarla. Michael Winn nos lo explica: «Muchos hombres
se dan cuenta de que es fácil elevar la energía por la columna, ya
que los testículos y el cerebro están conectados. Algunos llegan a
descubrir este camino de manera natural, pero a la mayoría de los
hombres les cuesta más hacer descender la energía por delante
porque se encuentran con sus órganos y porque tienen mucha
energía emocional retenida inconscientemente en esa zona. A las
mujeres que realizan esta práctica les suele resultar más fácil
descender la energía por delante, pero tal vez les cueste más
elevarla por la columna. En algunos casos me he encontrado con
hombres a los que les es más fácil elevar la energía por el canal
frontal, en cuyo caso simplemente recomiendo que hagan circular
la energía en sentido contrario».

Aunque todos los pasos descritos nos ayudan a elevar la energía, la


contracción del ano es la parte más importante de esta práctica
porque es esta acción de apretar la que literalmente bombea la
energía hacia la columna. Con la práctica, aprenderás a confiar en la
mente y con una sola contracción rápida del ano podrás llevar la
energía hasta la cabeza.

Al principio trabajarás con la elevación de la energía hasta la


cabeza, lo que te ayudará a experimentar orgasmos «cerebrales» o
en todo el cuerpo y te hará sentirte energetizado. Pero también es
muy importante que aprendas a llevar la energía hasta el ombligo
para restablecer el equilibrio y permitir que tu cuerpo la almacene
para su uso posterior (ver figura 12). Los taoístas conocían bien la
verdad de la expresión «todo lo que sube debe volver a bajar».

Los occidentales suelen bromear sobre los yoguis que se sientan a


contemplarse el ombligo. Para la mayoría de la gente el ombligo
sólo es un vestigio del cordón umbilical, pero en realidad se trata de
nuestro centro físico y energético. Fue nuestra primera conexión
con el mundo exterior: todo el oxígeno, la sangre y los nutrientes
fluían hacia nuestro cuerpo fetal a través de ese pasadizo
abdominal. En el ombligo tenemos un reserva energética en la que
podemos almacenar a buen recaudo la energía generada durante
nuestra práctica. Posteriormente el cuerpo podrá «digerir» esta
energía según la necesite. Asimismo, si al principio no consigues
elevar la energía sexual hasta la cabeza, puedes conducirla por la
columna hasta el abdomen y almacenarla directamente en el
depósito del ombligo.

Si practicas un poco, podrás elevar la energía hasta arriba en muy


poco tiempo.

ENCONTRAR EL CAMINO

Lo que te Puede Pasar...


NO SIENTO MI ENERGíA SEXUAL

Cuando la energía sexual no está muy activada es fácil de elevar y


al cuerpo le resulta fácil digerirla porque no está muy caliente. Pero
si, tocándote los testículos o recreándote en una fantasía sexual no
sientes suficiente energía sexual, puedes estimularte directamente
los genitales.

NO PUEDO ELEVAR LA ENERGÍA POR LA COLUMNA

Si tienes problemas para elevar la energía por la columna, puedes


ayudarte utilizando el bombeo natural de ésta. El fluido
cefalorraquídeo baña el cerebro y la columna. Este fluido circula
gracias a los dispositivos de bombeo situados en el sacro (en la
parte posterior de la pelvis) y en la base del cráneo, que también
pueden ayudar a elevar la energía por la columna (ver figura 13).
Actualmente estos dispositivos de bombeo son utilizadas por los
médicos osteópatas, pero ya eran conocidas por los antiguos
taoístas hace miles de años. Puedes practicar el siguiente ejercicio
estando de pie o sentado.

1. Activa el dispositivo de bombeo del sacro apretando el ano hacia


arriba, hacia el coxis, y balanceando la pelvis hacia adelante y
hacia atrás.

2. Activa el
dispositivo de
bombeo craneal
(en la base del
cráneo) metiendo
la barbilla hacia
dentro y hacia
arriba y volviendo
a sacarla
después,
dibujando con
suavidad un
pequeño círculo.
Mantén relajados
los músculos de la
mandíbula y el
cuello.

3 Una vez
activado el
bombeo del sacro
y el craneal,
descansa y
comienza a elevar la energía por la columna hasta el cerebro.
Enfoca los ojos hacia la parte alta de la cabeza, eso te ayudará a
dirigir la energía hasta la coronilla. Repite estos bombeos hasta
que sientas elevarse la energía.

NO PUEDO HACER DESCENDER LA ENERGíA

Como hemos mencionado anteriormente, muchos hombres y


algunas mujeres encuentran dificultades para hacer descender la
energía. Usando las manos, puedes frotarte el canal frontal que
discurre por la línea media del cuerpo, bajando desde la frente
hasta la garganta, el pecho y el vientre. También puedes intentar
«tragar» la energía junto con la saliva. (Si esto no funciona, tal vez
tengas un bloqueo en el canal frontal. Ver la sección «Encontrar el
camino: abrir los bloqueos del canal central», más adelante en este
mismo capítulo.)

1. Da vueltas con la lengua por el interior de la boca para activar


tus glándulas salivales.

2. Cuando hayas almacenado una gran cantidad de saliva dentro de


la boca, absorbe la energía sexual que ahora tienes en el cerebro
en tu saliva, centrando la atención en ella. (Recuerda que la energía
sigue al pensamiento.)

3. Trágate la saliva de un golpe y síguela con la mente en su fluir


por el esófago y el estómago. Repite este ejercicio e imagina que la
energía se va almacenando en tu estómago.

4. Finalmente, acaríciate la parte frontal del cuerpo con ambas


manos, desde la garganta hasta el vientre.

Actualmente, la mayoría de la gente arrastra consigo mucha tensión


física y emocional. A medida que hagas circular la energía, puede
que notes tensiones o congestión en la espalda y en el pecho. Los
hombres, en concreto, tendemos a retener y a no expresar
nuestras emociones, lo que puede producirnos bloqueos
energéticos en el canal frontal ya que las emociones se almacenan
a lo largo de él; es decir, en el corazón, en el plexo solar, estómago
e intestinos. Es esencial que disuelvas estos bloqueos antes de
intentar practicar la Gran Aspiración. Si sigues teniendo problemas
a la hora de conducir la energía hacia abajo, incluso después de
desbloquear el canal frontal, entonces prueba el poderoso ejercicio
de descarga descrito en la sección siguiente.

La Gran Aspiración
Ahora que has aprendido a hacer circular tu energía sexual cuando
no está demasiado activada, tienes que aprender a hacerla circular
y a controlarla cuando lo esté. En este caso, la energía será mucho
más fogosa, más explosiva, y será más difícil evitar que salga
disparada por el pene. Pero antes de intentar realizar la Gran
Aspiración, debes asegurarte de que puedes hacer circular la
energía tal como se describe en el último ejercicio. Detener la
energía sexual activada es como intentar detener una manada de
caballos salvajes que corren hacia un precipicio. Antes de intentar
semejante cosa en el ejercicio de la Gran Aspiración debes estar
seguro de que sabes montar; eso es lo que te enseña la

Aspiración en Frío.

ENCONTRAR EL CAMINO

Disolver los Bloqueos del Canal Frontal

Si tienes problemas para hacer descender la energía y sospechas


que podrías tener un bloqueo, prueba los ejercicios siguientes:

1. Sitúa la mano izquierda sobre el vientre y la derecha en la base


de la garganta, por encima del corazón.

2. Imagina que, mientras inspiras, absorbes la energía por el canal


central hasta tu mano derecha y desde allí la haces ascender por la
garganta hasta la punta de la lengua.

3. Al espirar, imagina que inviertes el flujo, haciéndola descender


por debajo del corazón hasta el vientre. Esto te ayudará a disolver
cualquier bloqueo energético en el canal frontal.

Como mencionamos en el capítulo 1, la eyaculación es simplemente


un espasmo muscular involuntario que estás aprendiendo a hacer
voluntario para poder eyacular cuando y como quieras.

Michael Winn explica el funcionamiento de la Gran Aspiración: «La


eyaculación puede ocurrir tan sólo si hay suficiente energía en los
nervios locales y suficiente sangre en los músculos locales como
para provocar un espasmo muscular. No hay nada místico en la
técnica de la Gran Aspiración que usamos para detener el espasmo
eyaculatorio. Aprieta los músculos PC que rodean los conductos
espermáticos y después tensa progresivamente los grandes
músculos del trasero (y, si es necesario, el pie, los puños y los
músculos de la mandíbula). Estos grandes músculos retiran la
energía de los nervios genitales enfocando la atención mental hacia
la ola de sensaciones nerviosas que asciende por la columna hasta
el cerebro. Esta serie de acciones combinadas simplemente retiran
la sangre y la energía que necesitan los músculos genitales para
producir el espasmo involuntario. Es así de simple.
Todo este tema de apretar y tensar es un poco crudo, pero
funciona. Cualquier hombre que practique con regularidad y de la
forma adecuada, acabará haciéndolo bien. Cientos de mis
estudiantes lo han demostrado».

Cuando comiences a practicar la Gran Aspiración, tendrás que usar


las distintas
técnicas
descritas en
esta sección.
Finalmente,
podrás
realizarla
utilizando la
mente y
quizá
también un
pequeño
apretón del
músculo PC.
Según un
hombre
multiorgásmi
co: «Al
principio,
tuve que
contraer los
músculos,

especialmente los del perineo y el ano, mientras me concentraba


en aspirar la energía hacia arriba con la mente. Ahora la energía
asciende casi por sí misma».
ENCONTRAR EL CAMINO

Precauciones

La Gran Aspiración es un ejercicio muy poderoso, por lo que debes


asegurarte de seguir ciertas instrucciones de seguridad.

NUNCA DEJES LA ENERGÍA SEXUAL EN EL CEREBRO DURANTE


MUCHO TIEMPO

Recuerda que debes tocarte el paladar con la lengua para permitir


que la energía baje por el canal frontal hasta el ombligo, donde
puede ser almacenada de manera segura. En el pasado, muchos
profesores de sexualidad oriental han enseñado a sus estudiantes a
aspirar la energía y dirigirla hacia el cerebro sin enseñarles cómo
hacerla descender después. Esto ha dado como resultado el llamado
síndrome Kundalini. Los taoístas sabían lo importante que era
completar el círculo. Si sientes que tienes demasiada energía,
inspira hacia el abdomen, y al espirar, dirige la energía hacia abajo,
hasta los dedos y las plantas de los pies (ver figura 14).

ASEGÚRATE DE QUE TE SIENTES EN EQUILIBRIO


Recuerda que la energía sexual circulará por todo el cuerpo Y
amplificará cualquier emoción que sientas. Michael Winn explica:
«Lo más importante es intentar descartar las emociones extremas y
evitar practicar cuando se está muy enfadado o muy “lo que sea”».
También debes evitar prac ticar cuando estés demasiado cansado.
Si estás bajo supervisión médica, debes hablar con un instructor del
Tao Sanador (ver el apéndice), antes de comenzar con esta práctica.

HAZLO POCO A POCO

Aunque no te parezca importante, de hecho, la actitud hacia la


práctica es esencial. El instructor taoísta Walter Beckley lo explica
así: «Muchos hombres entran en esta práctica, y eso es bueno, pero
tienen que tener cuidado de que no se les atasque la energía en la
columna porque pueden hacerse daño. Debes mantener una
actitud alegre y juguetona y debes ser cuidadoso con tu cuerpo. Es
mejor perder la energía y eyacular que intentar que la energía suba
por la columna de manera forzada».

PREPÁRATE

Cuando practiques, debes tener el estómago vacío, pero sin estar


hambriento. Espera siempre al menos una hora después de comer.
El cuerpo necesita energía para digerir el alimento que acabas de
comer,lo que significa que dispondrás de menos energía para
hacerla circular. Ponte ropa cómoda. La habitación debe estar
aireada, pero evita las corrientes y el viento. Y recuerda que
siempre debes respirar por la nariz.

PONTE EN LA POSICIÓN ADECUADA

Al principio no es recomendable realizar estos ejercicios tumbado


de espaldas, ya que la energía sexual ascendente podría estancarse
en el pecho y causarte dolores. Es mejor estar de pie, sentado o
tumbado sobre un costado. Y, si adoptas esta última postura, debe
ser sobre el costado derecho (tumbarse sobre el costado izquierdo
crea demasiada presión sobre el corazón). Una vez que domineslos
ejercicios, podrás hacerlos en cualquier posición. Tampoco debes
colocar ningún objeto (como una almohada) debajo de ti mientras
estés tumbado sobre el costado derecho, ya que esto creará un
pliegue en el canal energético que puede causarte dolores de
espalda.

AVISO
Si tienes un herpes activo, no realices estas prácticas hasta haberte
curado. Si tienes herpes pero está remitiendo (es decir, si no es
visible), entonces puedes realizarlas. Al principio utilizarás los
grandes músculos para ayudarte a aspirar la energía. Pero pronto
aprenderás a confiar más en el músculo PC y tendrás que utilizar los
grandes músculos cada vez menos. Finalmente podrás concentrarte
en la coronilla y aspirar la energía sin esfuerzo. Quizá tardes algún
tiempo en realizarlo, pero llegará el momento en que podrás
producirte una vigorosa descarga energética en la columna con sólo
pensar en ello.

Una vez que domines la Gran Aspiración, podrás hacer ascender la


energía en cualquier momento y situación: mientras caminas,
mientras esperas que te atiendan en un establecimiento,
conduciendo o estando tumbado en la cama. Pero al principio
debes elegir momentos tranquilos en los que sabes que no serás
interrumpido, así podrás concentrarte en dirigir este suave y
vitalizante flujo energético portodo el cuerpo.

No debes preocuparte si después de los primeros días, e incluso


semanas, el efecto que sientes es muy leve. Cada persona necesita
su tiempo para aprender a hacer circular la energía por el cuerpo.
Si has practicado otros ejercicios mentales como meditación, yoga o
artes marciales, te resultará más fácil realizar estos ejercicios. Si es
la primera vez que practicas las artes internas, no te sientas
frustrado. Se necesita tiempo para aprender a concentrarse.
Aunque te pueda parecer difícil, te sorprenderá comprobar lo rápido
que comienzas a sentir el movimiento energético en tu cuerpo.
Como la energía se mueve siguiendo circuitos naturales, la energía
guía la mente tanto como esta guía la energía. Y como
mencionamos con anterioridad, pronto podrás olvidar la mayoría de
los pasos intermedios de este ejercicio y elevar la energía con la
mente. Pero al igual que cuando aprendemos a conducir, debemos
memorizar los pasos concretos antes de olvidarlos. El bombeo
energético que realiza la Gran Aspiración funciona con el mismo
principio que la bomba de agua. Creamos la presión y la succión que
aspiran la energía apretando los músculos, pero es más fácil
aspirarla cuando estamos relajados. Durante los períodos de
descanso, la mente debe permanecer concentrada en el flujo
energético.

Es mejor practicar por la mañana o por la tarde que por la noche, ya


que el aumento de energía que sentirás después de practicar la
Gran Aspiración puede impedirte dormir. Si te ocurriera esto o
sintieras que tienes demasiada energía «nerviosa», tócate el paladar
con la lengua (lo que conecta el canal anterior con el posterior) y
haz descender la energía desde la cabeza hasta el ombligo, donde
puede ser almacenada. También puedes hacer girar la energía
dentro de tu cerebro, como acabamos de mencionar, utilizando las
técnicas aprendidas en la Aspiración en Frío. Si el problema
persiste, puedes utilizar el ejercicio de descarga descrito más
adelante en esta sección.

Como hemos mencionado anteriormente, si tienes dificultades


para hacer descender la energía puede tratarse de un bloqueo en el
canal frontal. Los taoístas utilizan sonidos para abrir los canales de
energía bloqueados y sanar el cuerpo. Esta técnica del sonido se
llama «los seis sonidos sanadores» (encontrarás una descripción
detallada de ella en el libro de Mantak Chia Sistemas taoístas para
transformar el estrés en vitalidad). El sonido que te ayudará a abrir
el canal frontal y a descargar el exceso de energía se llama “sonido
del triple calentador”. Cada vez que practiques la Gran Aspiración,
asegúrate de masajearte los genitales posteriormente. El masaje
dispersará la energía que no ha sido absorbida y aliviará las
sensaciones de congestión o tensión excesiva. Masajéate también el
perineo, el coxis y el sacro tal como se describe en el ejercicio que
proponemos más adelante en este mismo capítulo. Si sientes que
tienes los testículos llenos, puedes practicar el ejercicio de masaje
de estos órganos facilitado en el capítulo 8. El masaje de testículos,
como el masaje pélvico, ayudará a que tu cuerpo pueda absorber la
energía sexual y el esperma.

EJERCICIO 8

LA GRAN ASPIRACIÓN

1. Date placer hasta conseguir una erección fuerte pero sin llegar al
punto de No Retorno (quédate de treinta segundos a un minuto del
punto donde normalmente eyacularías).

2. Deja de estimularte y descansa un momento para recuperar el


control. Después contrae el músculo PC firmemente alrededor de la
próstata curvando también los dedos de los pies.

3. Inspira y absorbe la energía sexual desde el perineo hacia el ano


y la columna apretando fuertemente los glúteos.

4. Contrae los músculos anales en oleadas elevando la energía


hacia la columna —como si estuvieras bombeando los frenos de tu
automóvil— y toma una breve inspiración en cada ocasión. El
movimiento de balancear la espalda, como si estuvieras
cabalgando, también te ayudará a elevar la energía por la columna.
5. Cuando la energía alcance la base del cráneo, asegúrate de que
tienes la barbilla ligeramente contraída para ayudar a elevarla
desde la columna hasta la cabeza.

6. Gira los ojos como si estuvieras mirando hacia la parte alta de la


cabeza; esto te ayudará a llevar la energía hasta la coronilla.

7. Cuando has bombeado la energía hasta la coronilla, ya has


realizado una Gran Aspiración. El estado de la erección servirá para
saber en qué medida has tenido éxito en esta práctica: a medida que
aspiras la energía desde los genitales y la elevas por la columna, la
erección debe disminuir.

8. Repítelo de 3 a 6 veces más.

9. Después de haber bombeado la energía hasta la coronilla nueve


veces, utiliza la mente, los ojos y todos los sentidos para hacerla
girar en espiral dentro de tu cerebro, nueve, dieciocho o treinta y
seis veces, primero en una dirección y después en la otra. Cuando
hayas acabado de girar en espiral, descansa un rato y experimenta
la deliciosa sensación de energía en tu cerebro, que suele sentirse
como calidez y hormigueo, como si fuera un miniorgasmo.

10. Cuando sientas el cerebro lleno, tócate el paladar con la lengua


y permite que la energía fluya hacia abajo por el canal anterior
hasta el entrecejo, la nariz, la garganta, el corazón, el plexo solar y
finalmente hasta el ombligo, donde puede ser almacenada.

ENCONTRAR EL CAMINO

Situaciones con las que Te Puedes Encontrar

NO SIENTO NADA

Te hemos sugerido que practiques la Gran Aspiración antes de estar


excesivamente excitado. Cuanto más excitado estés, tanto más
difícil te resultará controlar la energía y más probable será que
eyacules, con lo que perderás la energía que intentas elevar. Pero
si no sientes suficiente energía sexual, excítate hasta el 95 o el 99
por ciento de tu capacidad sin llegar al orgasmo. Una vez que
aprendas a tener orgasmos sin eyacular, podrás llegar hasta el
nivel del orgasmo sin dejar de elevar la energía hasta el cerebro.
Cuando estés a punto de tener un orgasmo o mientras lo tienes,
detente y practica la Gran Aspiración de tres a nueve veces, o hasta
que sientas que la sensación orgásmica comienza a ascender.

ESTOY DEMASIADO EXCITADO

Tal vez te des cuenta de que estás demasiado excitado y a punto de


explotar, o bien ya estás eyaculando, o te sientes incapaz de elevar
la energía por la columna. Si te ocurre esto, no debes excitarte
tanto. Necesitas sentir la suficiente energía como para poder
elevarla, pero, al menos al principio, no desees tener demasiada.

SIGO EYACULANDO

Si te acercas demasiado al punto de No Retorno, debes intentar


contraer tu músculo PC continuamente para poder apretar
firmemente la próstata y detener la eyaculación. Puedes mantener
el músculo PC apretado mientras bombeas con los músculos de las
nalgas. Si estás próximo a la eyaculación y necesitas más fuerza
para dirigir la energía hacia arriba, cierra los puños y aprieta los
dientes y la mandíbula al mismo tiempo que contraes los glúteos.
Esto aumentará la presión del bombeo. Esta última técnica debe ser
evitada por los hombres que tienen mucha tensión acumulada en el
cuello y en la mandíbula.

ME DUELE LA ESPALDA

Algunas veces resulta difícil dirigir la energía a la base de la


columna y algunos hombres sienten un poco de dolor, hormigueo o
«pinchazos» cuando la energía entra en el sacro por primera vez. Si
te ocurre algo así, no te alarmes. Puedes favorecer la circulación
energética masajeando suavemente esa área con los dedos.

ME DUELEN LOS OJOS

Cuando entornas los ojos hacia arriba y hacia atrás, puedes sentir
dolor en el músculo ocular o en la cabeza. Este es un signo típico de
agujetas musculares y no hay nada de qué preocuparse. Si el
problema persiste, debes hacer esta práctica con suavidad o
contactar con un instructor del Tao Sanador (ver apéndice).

ME DUELE LA CABEZA

Si te duele la cabeza, te sientes «raro» o tienes dificultades para


dormir, tal vez tengas demasiada energía acumulada en la cabeza.
La energía puede recalentar la zona donde se queda estancada,
problema que se puede resolver fácilmente movilizándola.
Asegúrate de hacer circular la energía en tu cabeza nueve,
dieciocho o treinta y seis veces, primero en un sentido y después en
el otro (como cuando cocinas, debes remover la cacerola para que
ninguna parte del guiso quede demasiado hecha). Una vez que has
hecho circular la energía por tu cabeza, déjala fluir por la parte
anterior del cuerpo a través del canal frontal. Si tienes problemas
para hacer descender la energía por el canal frontal, puedes dejarla
descender por la columna.

ME SIENTO IRRITABLE E IRACUNDO


Si la nueva energía no circula suficientemente, además de
amplificar la cólera que pudieras albergar previamente, también
puede hacer que se recalienten y desarrollen las emociones
negativas, tales como la cólera. En tal caso, intenta centrarte en
reciclar esa furia (o la emoción negativa de que se trate) en amor y
compasión. Estudia también la sección llamada «Cuándo eyacular»,
más adelante en este mismo capítulo.

OTROS EFECTOS SECUNDARIOS

Un pequeño porcentaje de los hombres que prueban estas técnicas


experimentan que se les queda atascado un exceso de energía en
la parte superior del cuerpo. Los síntomas varían de una persona a
otra, pero los más habituales son insomnio, zumbidos en las orejas,
palpitaciones o tensiones y dolores de cabeza, que pueden durar
varios días. Si tienes alguno de estos síntomas, abandona la
práctica inmediatamente y haz el ejercicio de descarga descrito en
esta sección. Si persisten, contacta con un instructor del Tao
Sanador (ver apéndice) o un acupuntor. La mayoría de los médicos
occidentales no serán capaces de diagnosticar y tratar
correctamente el problema porque no han aprendido a entender los
movimientos de energía en el cuerpo y sus efectos físicos. Merece
la pena mencionar que estos problemas no están causados por la
circulación de la energía sexual sino por la emociones preexistentes
y las tensiones físicas atrapadas en la parte superior del cuerpo. La
energía sexual simplemente amplifica el problema, razón por la que
debes tratar primero con los problemas subyacentes antes de
seguir adelante con la práctica sexual.

EJERCICIO 9

DESCARGA

1. Túmbate sobre la espalda. Eleva las rodillas con una almohada si


sientes dolor en la zona lumbar.

2. Coloca las manos delante de la boca de forma que las puntas de


los dedos se toquen y las palmas queden encaradas hacia los pies.

3. Cierra los ojos y haz una respiración profunda. Siente el


estómago y el pecho expandirse ligeramente.

4. Sonríe y espira despacio, produciendo un leve sonido al hacerlo.


Mientras espiras, empuja las manos hacia los pies e imagina que tu
cuerpo es un tubo plano que vacías con las manos.

5. Repite este sonido y este movimiento tres, seis o nueve veces,


imaginándote cada vez que retiras el exceso de energía de la
cabeza y lo llevas a través del corazón y el vientre hacia las piernas
y los pies. Puedes intentar hacer el mismo ejercicio de pie o
sentado. Si después de hacerlo sigues teniendo problemas para
evacuar tu energía, contacta con un instructor del Tao Sanador (ver
el apéndice) o un acupuntor.

El Bloqueo Dactilar

Ahora vamos a mostrarte cómo detener el semen una vez que has
pasado el umbral de lo que Masters y Johnson llaman inevitabilidad
eyaculatoria; en otras palabras, una vez que vas más allá del punto
de No Retorno. Siempre que sea posible, es preferible utilizar la
Gran Aspiración y la mente para detener la eyaculación que utilizar
los dedos, porque esto puede resultar un poco extraño. Utiliza esta
técnica cuando tengas que conservar la energía (como en caso de
estar enfermo o realizar un trabajo físico exigente) pero no hayas
podido detenerte antes de la eyaculación. Cuando uses esta técnica
para bloquear la salida del semen una vez traspasado el punto de
No Retorno, perderás la erección. Pero tal vez descubras que vuelve
más rápidamente. Un hombre multiorgásmico explicó: «Después de
utilizar el Bloqueo Dactilar puedo volver a tener una erección y a
hacer el amor muy rápidamente».

En la sección anterior comentamos que el punto del Millón de


Dólares era el lugar donde podías apretar para retrasar la
eyaculación. También es el punto donde puedes bloquear el semen
para impedir que salga del cuerpo una vez superado el punto de No
Retorno. Un hombre multiorgásmico describe así su uso del Bloqueo
Dactilar: «Al principio, utilizaba el Bloqueo Dactilar durante el
cultivo solitario. Probaba a acercarme cada vez más al punto de No
Retorno porque podía utilizar el Bloqueo Dactilar cuando me
pasaba. Yo recomendaría que se practique primero durante el
cultivo solitario para que no resulte extraño cuando se realice
haciendo el amor».

Básicamente, el Bloqueo Dactilar consiste en presionar el punto del


Millón de Dólares (el entrante que está justo delante del ano) con
los tres dedos medios de la mano derecha (ver figura 15). Si tu
mano dominante es la izquierda, utilízala; necesitarás toda la fuerza
de tu mano dominante para practicar esta técnica (asimismo, debes
asegurarte de tener las uñas cortas y romas para no hacerte daño).
Debes ejercer la presión cuando sientas que has traspasado el
punto de No Retorno pero antes de empezar a eyacular, y debes
mantener la presión hasta que las contracciones eyaculatorias se
detengan.

Debes presionar en el punto donde el conducto eyaculatorio y la


uretra membranosa se encuentran. Un hombre multiorgásmico
sugiere: «Debes tener en cuenta que la concentración y la presión
que debes aplicar durante el orgasmo al principio reducirán tu
disfrute de las contracciones orgásmicas. Sabiéndolo, podrás
mantener la presión hasta el final». No debes preocuparte: con el
tiempo esta práctica te resultará más fácil y te distraerá menos. Si
aplicas la presión en el lugar correcto, no saldrá nada de semen y si
sale semen es que todavía no has encontrado el punto del Millón de
Dólares. La próxima vez acerca los dedos un poco más al ano y
asegúrate de presionar firmemente en la hendidura.

Si tienes curiosidad por saber si has hecho el ejercicio


correctamente puedes orinar en una taza. Si la orina es clara, lo
has hecho bien. Si la orina es muy turbia, entonces el semen ha ido

a parar a la vejiga, has tenido una eyaculación retrógrada. Si te


ocurre esto, la próxima vez (como ya hemos mencionado) intenta
situar los dedos un poco más cerca del ano.

Cuando bloqueas el semen con los dedos, la mayor parte del fluido
vuelve hacia el epidídimo y a las vesículas seminales. Los tejidos de
estas regiones son muy elásticos y no resultan dañados por esta
técnica, pero es muy importante que después de realizado el
ejercicio te masajees la zona pélvica (ve el ejercicio de masaje
pélvico en la página 103), hagas las flexiones del músculo PC, y lo
óptimo sería que pudieras hacer circular tu energía sexual por todo
el cuerpo, tal como se describe en la sección anterior. Cuando
empieces a usar el Bloqueo Dactilar tal vez sientas presión, e
incluso dolor, lo que significa que todavía es más importante que
ayudes a tu cuerpo a reabsorber el semen. Un hombre
multiorgásmico explica así su experiencia: «En el Bloqueo Dactilar
tienes que tener cuidado de no empujar con demasiada fuerza. Una

noche apreté muy fuerte cuando empecé a sentir los espasmos


después me estuvo doliendo durante un rato». Buena parte de la
presión que se suele sentir en la pelvis después de practicar el
Bloqueo Dactilar o la Gran Aspiración puede ser aliviada
masajeando varios puntos clave de la zona pélvica. Lo primero más
importante es masajearte el perineo (el lugar entre la base del
pene y el ano) y los testículos (ejercicio de masaje de los testículos
se encuentra en el capítulo 8). Esto aliviará la presión y ayudará tu
cuerpo a reabsorber el semen. También es importante que te
masajees el coxis, en concreto la hendidura entre el ano y el coxis
(ver figura 16) y los ocho orificios del sacro (ver figura 17). Esto te
ayudará a absorber la energía sexual generada.
Una vez perdida la erección se derramará una pequeña cantidad de
semen, por lo que esta técnica no es aconsejable como método
anticonceptivo. Sin embargo, si se combina con otro método
anticonceptivo mejorará su eficacia. Como con esta técnica se
pierde parte de la energía, cuanto antes aprendas a realizar la Gran
Aspiración, tanto mejor resultará para ti. No obstante, a pesar de
que al principio te puedas sentir fatigado, sentirás que la energía
vuelve a ti mucho antes que si hubieras eyaculado. Esta es una
práctica muy poderosa que, al principio, no debe ser utilizada más
de una vez cada dos o tres días. Si eres mayor o estás enfermo, al
principio no debes utilizarla más de dos veces por semana. La
energía sexual retenida puede hacer que te sientas sediento o
acalorado. Si es así, bebe más agua.

Después de haber practicado esta técnica de uno a tres meses, y


algunas veces antes, notarás que tu vigor sexual aumenta y tienes
erecciones con más frecuencia. Incrementa tu actividad sexual
(solitaria y a dúo) con
moderación; intenta no
sobrepasarte.

EJERCICIO 10

EL BLOQUEO DACTILAR

1. Cuando sientas que la


eyaculación es inevitable,
presiona con los tres dedos
centrales (es decir, dejando
fuera el pulgar y el meñique)
de tu mano dominante, en el
punto del Millón de Dólares,
con la fuerza suficiente como
para detener el flujo de
semen.
2. Debes mantener los dedos ligeramente curvados y el dedo medio
debe presionar directamente sobre la uretra. Cuando estás próximo
a la eyaculación este conducto se dilata, por lo que te resultará fácil
encontrarlo. Los otros dos dedos deben presionar a ambos lados
del conducto para mantenerlo en su sitio.

3. Contrae el músculo PC, que rodea la próstata, y tira del perineo


hacia arriba. Eleva la energía orgásmica por la columna hasta el
cerebro.

4. Mantén los dedos en esa posición antes, durante y después de las


contracciones.

5. Cuando el bombeo se haya detenido completamente, retira los


dedos.

EJERCICIO 11

MASAJE PÉLVICO

1. Utilizando los dedos, masajéate el punto del Millón de Dólares en


círculo, primero en una dirección y después en la otra.

2. Repite este masaje entre el ano y el coxis.

3. Repite este masaje en cada uno de los ocho orificios del sacro. Si
no puedes encontrar los orificios individuales, hazte un masaje
general de la zona en lugares diferentes, describiendo círculos
primero en un sentido y después en el otro.

ENCONTRAR EL CAMINO

Dolor

Si sientes un dolor intenso, probablemente has presionado en un


punto demasiado hacia adelante o lo has hecho demasiado tarde.
Cuando esto ocurre, la uretra, que es como una manguera que
hubiera sido comprimida, se hincha con el fluido que contiene y
puede producir dolor. Tienes que cerrar el grifo antes de que el
agua (o en este caso, el semen) entre en la manguera. Asegúrate
de presionar más atrás y/o antes la próxima vez. Asegúrate también
de no presionar con demasiada fuerza. Es normal sentir un poco de
incomodidad, especialmente durante las primeras semanas,
causada por la presión aplicada con los dedos y por la presión del
fluido en la pelvis, pero no debe durar demasiado tiempo. Si
sientes dolor, intenta refinar la técnica u olvidar esta medida de
cierre y concentrarte en la Gran Aspiración que es más importante.

Sientes Presión en la Cabeza


Después de practicar durante un mes o más, puedes sentir cierta
presión en la cabeza como resultado del aumento de energía en tu
cuerpo. Es un signo de que estás progresando, de que tu cuerpo
tiene mucha más energía que antes. Algunos experimentan este
aumento de energía como un hormigueo placentero, como
electricidad estática sin descarga (esta energía es la misma
kundalini que ha sido popularizada por los profesores de tantra en
Occidente). Sin embargo si este poder empieza a resultarte
desagradable, una vez más puedes hacerlo circular por el resto del
cuerpo presionando con la lengua en el paladar y permitiendo que
la energía fluya hacia abajo.

Si tienes la presión sanguínea alta, debes mantener la lengua en la


mandíbula inferior (en lugar de tocarte el paladar) mientras diriges
la energía hasta la planta de los pies (ver figura 14). El ejercicio
físico, el masaje de pies y una dieta a base de cereales integrales,
también te ayudarán a asentar la energía. Si todavía no estás
preparado para aprender a hacer circular la energía por todo tu
cuerpo, entonces puedes eyacular una o dos veces para liberar el
exceso de energía.

Permite que la Erección Disminuya Cada Veinte Minutos

Si habitualmente te das placer o haces el amor durante más de


veinte minutos, lo que puede suceder muy fácilmente cuando eres
multiorgásmico, es importante permitir que la erección disminuya
un poco cada veinte minutos para que la sangre vuelva a circular
por todo el cuerpo. Vale la pena mencionar una vez más que el kung
fu sexual no es una prueba de resistencia. Date placer y cultívate
mientras tengas el tiempo y el deseo de hacerlo.

Evitar el Recalentamiento

Según el Tao, la erección es una energía asociada al elemento


madera (y al hígado). Por tanto, cuando no eyaculas y elevas la
energía del orgasmo, aumentará tu energía hepática. Si este exceso
de energía no es transformada en amor y compasión, se
transformará en cólera y odio. Por tanto, cuando tengas mucha
energía, debes intentar ser especialmente bueno y amoroso con tu
compañera o, si no tienes compañera, con las personas que forman
parte de tu vida.

Entre las técnicas que puedes utilizar para prevenir el


recalentamiento están las de beber mucha agua e incluso tragar tu
propia saliva, lo que tendrá un efecto refrescante en tu cuerpo. Tu
estado emocional también puede afectar a tu energía corporal. Si te
sientes tranquilo y amoroso, el cuerpo puede absorber la energía
mucho más fácilmente. Si sientes cólera o desprecio hacia ti mismo
o hacia tu compañera, corres un riesgo mucho mayor de
recalentarte. Si ya lo estás o sientes que tienes mucha más energía
de la que puedes absorber, probablemente deberías eyacular. Si el
problema persiste, intenta practicar la «sonrisa interna» o los «seis
sonidos curativos» descritos en Sistemas taoístas para transformar
el estrés en vitalidad, o contactar con un instructor del Tao Sanador
(ver el apéndice).

Cuándo Detenerse

La mayoría de los hombres dejan de masturbarse o de hacer el


amor cuando eyaculan, pero una vez que aprendas a realizar la
Gran Aspiración y te hagas multiorgásmico, la cuestión de cuándo
detenerse puede plantearse de forma muy real. Habrá días en los
que querrás darte placer o hacer el amor durante mucho tiempo y
habrá otros días en los que querrás tener un orgasmo múltiple pero
breve. La elección está en tu mano y dependerá de las
circunstancias de tu vida. Tu propio deseo y satisfacción y los de tu
compañera deben ser tu guía. Sin embargo, es importante tener en
cuenta que no hay que sobrepasarse, especialmente al principio.
Como explica el instructor taoísta Masahiro Ouchi: «Los hombres se
sienten muy poderosos cuando empiezan a practicar el kung fu
sexual y no suelen saber cuándo detenerse. Tómatelo con calma y
permite que tu cuerpo y el de tu compañera se acoplen». También
debes asegurarte de que tu compañera tenga la suficiente energía
sexual para estar a la altura de tu nuevo nivel de intensidad.

Puedes proponerle que lea el capítulo 6 que está escrito


especialmente para ella, pero no la presiones y sé sensible a sus
necesidades. Siempre puedes practicar por tu cuenta. A mucha
gente le preocupa masturbarse demasiado o piensa que descuidará
otras áreas de su vida si se permite experimentar demasiado
placer. Según el Tao, si eres capaz de darte placer y satisfacerte,
no tendrás que estar buscando continuamente sexo superficial u
otros estímulos insatisfactorios.

Cuándo Eyacular

Cada vez que tienes un orgasmo, absorbes más energía sexual en


tu cuerpo; por tanto, si acabas eyaculando, pierdes menos energía
de la que hubieras perdido si antes no hubieras tenido múltiples
orgasmos. Por ejemplo:

1. Si tienes media docena de orgasmos (haciendo circular la energía


en cada ocasión por el cerebro y el resto del cuerpo) y después
eyaculas, perderás aproximadamente la mitad de tu energía sexual.
2. Si tienes media docena de orgasmos y después utilizas el
Bloqueo Dactilar, perderás aproximadamente una cuarta parte de
tu energía sexual.

3. Si tienes media docena de orgasmos y después utilizas la Gran


Aspiración (y no eyaculas), no perderás nada de tu energía sexual.

Esta última opción es la que te da la posibilidad de cultivarte y


sentir orgasmos extáticos en el cerebro y en todo el cuerpo.
También te permite cultivar esta energía para favorecer tu salud
general. Pero si generas toda esa energía y la retienes, te arriesgas
a un sufrir un recalentamiento a menos que seas capaz de hacerla
circular por la órbita microcósmica. El ideal taoísta es eyacular lo
menos posible, pero cada hombre debe evitar la eyaculación
durante el período de tiempo que sea más apropiado según sus
circunstancias. En las palabras de Su Nü, «uno debe medir la propia
fuerza y eyacular de acuerdo a ello. Cualquier otra opción es
forzada o estúpida».

La fuerza depende de la edad, del estado de salud, del estado


mental y de la voluntad. Sun Ssu-miao, uno de los principales
médicos de la antigua China, explicaba que los hombres mantienen
la salud y la longevidad eyaculando dos veces al mes, siempre que
coman sano y hagan ejercicio. También ofreció estas guías
específicas:

Un hombre de veinte años puede eyacular una vez cada cuatro días.

Un hombre de treinta años puede eyacular una vez cada ocho días.

Un hombre de cuarenta años puede eyacular una vez cada diez días.

Un hombre de cincuenta años puede eyacular una vez cada veinte


días.

Un hombre de sesenta años no debería eyacular.

No hace falta añadir que esta prescripción no limita el número de


veces que un hombre de cualquier edad puede disfrutar del sexo y
de los orgasmos sin eyacular. El hecho de restringir la eyaculación
puede sonar un poco decepcionante, pero una vez que hayas tenido
orgasmos múltiples sin eyacular no la echarás de menos. En las
palabras de un hombre multiorgásmico, «una vez que tengas
“multis” [orgasmos no eyaculatorios], nunca querrás volver a los
orgasmos normales [eyaculatorios]. Los orgasmos normales se
localizan en los genitales; los multis se extienden a todo el cuerpo».

Sun Ssu-miao, que vivió 101 años, eyaculaba sólo una vez de cada
cien veces que hacía el amor. Pero, en lugar de adherirte a una
fórmula numérica rígida, debes prestar atención a tu cuerpo. Si te
sientes enfermo o agotado, si estás borracho o empachado, debes
evitar eyacular. Si trabajas duro posiblemente querrás conservar el
semen, pero si estás de vacaciones quizá desees eyacular con más
frecuencia. Los antiguos taoístas vivían cerca de la naturaleza y
creían que, al igual que las plantas y animales conservan su energía
durante el invierno, la gente también debería hacerlo. Además de
las estaciones, hay otros ritmos que determinarán la frecuencia de
tus eyaculaciones. Si quieres concebir un hijo, tendrás que eyacular
cuando tu compañera esté ovulando.

En general, cuando eyacules debes sentirte fresco y energetizado.


Si la eyaculación te deja exhausto o con una sensación de vaciedad
o depresión, debes aumentar el tiempo entre dos eyaculaciones
consecutivas o evitar eyacular hasta que tu energía sexual se haya
regenerado. Cuando eyaculas, puedes conservar parte del semen y
de la energía sexual si te acercas al punto de No Retorno con
lentitud en lugar de precipitarte enérgicamente en el clímax.
Después de eyacular puedes practicar las contracciones del músculo
PC para apretar tus músculos pélvicos y reducir la cantidad de
energía que generalmente se pierde después de la eyaculación.

Al mismo tiempo es importante no obsesionarse con evitar la


eyaculación y no castigarse o sentirse mal con uno mismo cuando
se eyacula. Michael Winn lo explica así: «Es muy importante
noconvertirse en un fanático de la no-eyaculación. Muchos de los
hombres que aprenden kung fu sexual piensan: “Bueno, esto es
genial. Tiene mucho sentido. Quiero hacerlo”. Y después, cuando
tienen problemas para controlar la eyaculación, comienzan a
juzgarse y a sentirse culpables. No entienden el verdadero sentido
de la práctica, que no trata de si se eyacula o no, sino de si se
puede reciclar parte de la energía sexual por el resto del cuerpo
antes de eyacular. Obviamente, cuanto más retrases la eyaculación,
más oportunidades tendrás de cultivar esta energía y dirigirla hacia
propósitos creativos y a tu desarrollo espiritual. Si necesitas
eyacular, estás a punto y no puedes detenerlo, simplemente sigue
adelante. No te culpes. En último término, lo realmente importante
no es la energía que reside en el esperma sino el amor mutuo que
existe entre tu pareja y tú».

Recuerda que la energía es más que el esperma: si puedes absorber


parte de la energía presente en éste, has adelantado un gran trecho
en relación al lugar donde empezaste, tanto en términos del nivel
de placer que experimentas como de la energía que puedes hacer
circular por el cuerpo para mejorar tu salud. La verdadera
satisfacción procede tanto del placer como de la salud; en el
capítulo siguiente, te mostramos cómo compartir ambos con tu
pareja.
PODER Y SEXUALIDAD

Las prácticas que estás aprendiendo en este libro son muy


poderosas. Cuando las hayas aprendido es muy natural que te
sientas orgulloso de tu capacidad de dominar la energía sexual y de
tus nuevas habilidades en la cama. Sin embargo, es esencial que
evites el fanfarroneo y el machismo que acompañan a buena parte
de la sexualidad masculina. Como explica el instructor taoísta
Masahiro Ouchi: «El kung fu sexual es muy fácil de aprender y
muchos hombres empiezan a sentirse muy poderosos en la cama,
pero no debe convertirse en un viaje de poder. El poder trata de
conquistar; es opuesto al amor y a la verdadera práctica espiritual».
Ouchi, cinturón negro de karate, compara el kung fu sexual con lo
que él ha observado en el karate: «La mayoría de los cinturones
negros utilizan su poder incorrectamente. Se hacen más rígidos y
egoístas y pierden la sensibilidad y la suavidad que son el
verdadero origen de su poder».

Para practicar el kung fu sexual correctamente, debes abrir tu


corazón y practicar con un espíritu de humildad y de amor
compasivo, no con arrogancia y egoísmo. El egoísmo es una
expresión de inseguridad y, a medida que aprendas a sentirte
verdaderamente confiado a nivel sexual, podrás abandonar la
pretensión y el pavoneo. Recuerda que estas prácticas y tu nueva
energía sexual amplifican tus emociones, por eso es esencial que
las cultives. Si la arrogancia y el egoísmo son un problema para ti,
intenta practicar los seis sonidos sanadores (ver Sistemas taoístas
para transformar el estrés en vitalidad). Si no prestas atención a
estas emociones, limitarán tu práctica, tu placer y la calidad de tu
compañía.

EL ARTE DE HACER EL AMOR

Muchos hombres se centran tanto en sus ejercicios cuando


comienzan a practicar el kung fu sexual que pierden el contacto con
su pareja y con el proceso extático y espontáneo de hacer el amor.
Puedes practicar todo lo que quieras por tu cuenta, pero cuando
estés con tu pareja es muy importante recordar que no se trata
exclusivamente de tu práctica. El propósito del contacto sexual es
hacer el amor, y es del amor del que proceden el placer y la salud;
no se trata de generar energía sexual para ti mismo ni de
demostrar tus habilidades. Masahiro Ouchi lo explica así: «La
técnica no es más que eso, técnica. No es el verdadero arte. Debes
aprender la técnica lo suficientemente bien como para poder
olvidarte de ella. Es como si estuvieses aprendiendo a tocar un
instrumento musical, en primer lugar tienes que aprender a tocar
las escalas, pero después debes olvidarlas y tocar
espontáneamente». En los dos capítulos siguientes pasamos de los
ejercicios en solitario que te ayudan a convertirte en un hombre
multiorgásmico a los ejercicios a realizar en pareja, que os ayudarán
a ti y a tu compañera a convertiros en una pareja multiorgásmica
(los hombres gays pueden desear saltar directamente al capítulo
7).

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