GESTIÓN E INNOVACIÓN
¿Qué elementos están involucrados en la innovación y en
el cambio tecnológico?
¿Qué entendemos en concreto por estos dos términos?
Cuestiones son fundamentales para
entender la importancia de la RESPUESTA!!
innovación en el mundo actual.
Naturaleza del Peculiaridades Características
de la innovación fundamentales de
cambio y de la tecnológica en las actividades
innovación particular que la desarrollan.
El cambio tecnológico hace referencia a la incorporación de
nuevas tecnologías, formas de uso, nuevas reglamentaciones
y nuevos productos derivados de la tecnología. Igualmente
puede ser entendido como un conjunto de actividades
enfocadas en la solución de un problema. (Arteaga, Arnulfo;
Medellín. Dimensiones Sociales del Cambio Tecnológico.
Consultado el 13 de mayo de 2015.)
En otro sentido, el cambio tecnológico también puede ser
caracterizado en términos generales como el efecto
combinado de varias actividades tecnológicamente
relacionadas, tales
como INVENCIÓN, INNOVACIÓN, DESARROLLO, TRANSF
ERENCIA Y DIFUSIÓN.
NATURALEZA DEL CAMBIO
El ritmo y el alcance de los cambios que se están produciendo en las
organizaciones y en las actividades que desarrollan no tienen precedentes
históricos. La globalización e intensificación de la competencia, el avance
tecnológico, el aumento de las exigencias de los consumidores y los cambios
en los modelos de legislación son algunos de los factores que están haciendo
del cambio un imperativo del actual nivel de competitividad.
La experiencia muestra claramente cómo aquellas organizaciones que no han
sabido desarrollar una adecuada capacidad de cambio están viendo reducida su
capacidad competitiva de manera significativa. Así mismo, se observa que
ninguna organización, independientemente de su tamaño o posición en el
mercado, permanece inmune a este proceso de cambio. Un informe reciente de
la compañía Shell señala que de las 500 empresas que la revista Fortune
identificó como mejores en la mitad de los años 70, menos de la mitad
mantienen hoy esa posición.
No hay duda de que la asimilación y generación de innovaciones es uno de los
factores que más significativamente ha contribuido a la introducción del
cambio en la empresa y al mantenimiento de su competitividad. Se constata
que los nuevos productos ayudan tanto a mantener la cuota de mercado de la
empresa como a incrementar los beneficios en esos mismos mercados. Incluso
en los mercados más maduros y estables, el crecimiento en ventas no proviene
sólo del mantenimiento de unos precios bajos, sino también de factores tan
variados como diseño, calidad o adaptación del producto a características
específicas de los clientes.
Como consecuencia de estas y otras observaciones, en los últimos tiempos se
está generando en las empresas una dinámica orientada a fomentar su
capacidad de innovación, ya que las organizaciones que incorporan la
innovación a sus procesos y adoptan una actitud abierta al cambio se
posicionan mejor en el mercado. Se trata de una “innovación continua” que
implica que, en las organizaciones que emprenden este camino, la innovación
no tiene un punto final, no se formula para alcanzar una meta concreta, sino
que se incorpora a la propia estrategia de la empresa, institucionalizándose.
LA INNOVACIÓN
Aunque la innovación y su tipología han sido ampliamente estudiadas, dos aspectos han sido los
Comúnmente mencionados en su definición -novedad y aplicación-. De este modo, una invención o
idea creativa no se convierte en innovación hasta que no se utiliza para cubrir una necesidad
concreta.
Esta aplicación de la idea supone un proceso de cambio que podríamos considerar microeconómico.
Sin embargo, el cambio tiene también una importante componente macroeconómica, ya que el
objetivo principal es el de convertir esas mejoras empresariales individuales en mejoras o cambios
globales para la sociedad y, para ello, es esencial que se de difusión a la innovación. Se pueden
distinguir tres momentos o estados fundamentales en todo proceso de cambio:
La INVENCIÓN, como creación de una idea potencialmente generadora de beneficios comerciales,
pero no necesariamente realizada de forma concreta en productos, procesos o servicios.
La INNOVACIÓN, consistente en la aplicación comercial de una idea. Para el propósito de este
estudio, innovar es convertir ideas en productos, procesos o servicios nuevos o mejorados que el
mercado valora. Se trata de un hecho fundamentalmente económico que, incrementa la capacidad
de creación de riqueza de la empresa y, además, tiene fuertes implicaciones sociales.
Esta definición debe ser entendida en un sentido amplio, pues cubre todo el espectro de actividades
de la empresa que presuponen un cambio substancial en la forma de hacer las cosas, tanto en lo que
se refiere a los productos y servicios que ella ofrece, como a las formas en que los produce,
comercializa u organiza.
La DIFUSIÓN, que supone dar a conocer a la sociedad la utilidad de una innovación. Este es el
momento en el que un país percibe realmente los beneficios de la innovación.
El desarrollo económico de una organización, un país o una sociedad depende de su capacidad para
realizar estas tres actividades, variando su importancia relativa en función del tipo de organización
y de sociedad. Asimismo, los recursos y habilidades que precisan también son diferentes, ya que la
innovación demanda más recursos que la invención, pero no es necesario que el innovador haya
realizado previamente la invención, sino que puede tomar y adaptar una realizada por otro. La
difusión, por su parte, es más crítica que la innovación, puesto que es el requisito imprescindible
para que la sociedad reciba los beneficios de ésta.
Sin embargo, para que la difusión tenga plenos efectos en una economía moderna, sí es necesario
haber efectuado el paso previo de la innovación. Por este motivo, la innovación es el elemento que
se considera más a fondo en los estudios de cambio, hasta el punto que, muy a menudo, se utilizan
indistintamente los términos innovación y cambio.
El cambio en una empresa puede darse a través de innovaciones que se producen por primera vez en
la sociedad o a través de innovaciones que han surgido en otro entorno y que la empresa asimila en
sus prácticas por primera vez. Esta es la razón por la que existe un doble punto de vista a la hora de
identificar y valorar las innovaciones: las que son nuevas para la sociedad y las que son nuevas para
la organización que las realiza.
Si bien las primeras tienen más mérito, y son las que suelen dar más beneficios, no es menos cierto
que las segundas también requieren un cierto esfuerzo, debido al grado de incertidumbre que
imponen a la organización, y también proporcionan importantes beneficios. Por ello, es importante
la revisión continua de innovaciones introducidas en otros entornos para poder aprovecharlas lo
antes posible, dependiendo del nivel de incertidumbre que la organización sea capaz de aceptar.