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Unidad 9 - Unidad 10 Tarea 5 Consolidación

Este documento describe la hipertensión arterial, incluyendo sus signos y síntomas, diagnóstico, tratamiento farmacológico, y recomendaciones para el uso de medicamentos antihipertensivos. Se explican las seis clases principales de medicamentos utilizados para tratar la hipertensión, los factores a considerar para el tratamiento, y la importancia del seguimiento del paciente.

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Unidad 9 - Unidad 10 Tarea 5 Consolidación

Este documento describe la hipertensión arterial, incluyendo sus signos y síntomas, diagnóstico, tratamiento farmacológico, y recomendaciones para el uso de medicamentos antihipertensivos. Se explican las seis clases principales de medicamentos utilizados para tratar la hipertensión, los factores a considerar para el tratamiento, y la importancia del seguimiento del paciente.

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Unidad 9 - Unidad 10: Tarea 5 - Consolidación

Diplomado de profundización en Farmacovigilancia

Tutor:

Cristian David de la Rosa

Estudiante:

Sindy Alexandra Sabogal Rodríguez cód. 1033690865

Grupo: 152004_2

Universidad Nacional Abierta y a Distancia


Escuela ESCISA Tecnología regencia de farmacia
Bogotá D.C 20 de Noviembre del 2020
HIPERTENSION ARTERIAL

 Descripción de condición clínica. (Signos y Síntomas)

La mayoría de las personas con hipertensión no muestra ningún síntoma. En ocasiones,


la hipertensión causa síntomas como dolor de cabeza, dificultad respiratoria, vértigos,
dolor torácico, palpitaciones del corazón y hemorragias nasales, pero no siempre.
La hipertensión, también conocida como tensión arterial alta o elevada, es un trastorno en
el que los vasos sanguíneos tienen una tensión persistentemente alta, lo que puede
dañarlos. Cada vez que el corazón late, bombea sangre a los vasos, que llevan la sangre
a todas las partes del cuerpo. La tensión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra
las paredes de los vasos (arterias) al ser bombeada por el corazón. Cuanta más alta es la
tensión, más esfuerzo tiene que realizar el corazón para bombear.

 Diagnóstico
Un análisis de la presión arterial diagnostica la presión arterial alta. Esto suele
comprender el uso de un brazalete inflable que se coloca alrededor del brazo y un
medidor de presión.
La medición de la presión arterial, que se da en milímetros de mercurio (mm Hg), consta
de dos números. El primero, o mayor, mide la presión en las arterias cuando el corazón
late (presión sistólica). El segundo, o menor, mide la presión en las arterias entre los
latidos del corazón (presión diastólica).
La presión arterial se considera normal si se encuentra por debajo de 120/80 mm Hg.
Otras mediciones de la presión arterial se clasifican de la siguiente manera:
Presión arterial elevada. La presión arterial elevada es una presión sistólica entre 120 y
129 mm Hg y una presión diastólica por debajo de 80 mm Hg. La presión arterial elevada
tiende a empeorar con el tiempo a no ser que se tomen medidas para controlarla.
Hipertensión en etapa 1. La hipertensión en etapa 1 es una presión sistólica entre 130 y
139 mm Hg o una presión diastólica de 80 a 89 mm Hg.
Hipertensión en etapa 2. Una hipertensión más grave, la hipertensión en etapa 2, se
caracteriza por una presión sistólica de 140 mm Hg o superior o una presión diastólica de
90 mm Hg o superior.
Debido a que la presión arterial suele variar, el diagnóstico de la presión arterial alta se
basa en el promedio de dos o más lecturas que se toman en dos ocasiones por separado
de manera consistente. Por lo general, la primera vez, la presión arterial debe medirse en
ambos brazos para determinar si hay alguna diferencia. A continuación, se debe utilizar el
brazo con el que se obtuvo la lectura más elevada.
El médico podría sugerir una prueba de control de la presión arterial por 24 horas que se
denomina control ambulatorio de la presión arterial. El dispositivo que se utiliza para esta
prueba mide la presión arterial en intervalos regulares por 24 horas y proporciona un
panorama más preciso de los cambios en la presión arterial durante un día y una noche
promedios. Sin embargo, estos dispositivos no se encuentran disponibles en todos los
centros médicos y el seguro los cubre en casos excepcionales.

El médico también puede recomendar que utilices un control de presión arterial en el


hogar, preferentemente uno que pueda almacenar las lecturas en su memoria para
controlar la presión arterial de forma regular. Si es así, debe mostrarte cómo utilizarlo
correctamente.

 Tratamiento Farmacológico (TF), duración y evaluación de la efectividad,


Precauciones de seguridad del (TF) y Reacciones adversas.

Hay seis clases principales de medicamentos utilizados en todo el mundo para el control
de la hipertensión arterial (HTA): los diuréticos, los bloqueadores b adrenérgicos, los
antagonistas del calcio, los inhibidores de la enzima convertidor de la angiotensina (ECA),
los antagonistas de angiotensina II y los bloqueadores a adrenérgicos.
Se debe utilizar la dosis más baja disponible a fin de reducir posibles efectos adversos. Si
hay respuesta, pero aún insuficiente para los valores buscados, se puede optar, ya sea
por aumentar la dosis, considerando su buena tolerancia, o bien, agregar otro
medicamento para potenciar la eficacia hipotensora minimizando los posibles efectos
colaterales. A este respecto están cada vez más disponibles diversas combinaciones a
dosis bajas fijas en un solo preparado.
Si con el primer fármaco se observa poca o nula respuesta, o aparición de claros efectos
adversos, es preferible cambiar a otro de una clase totalmente diferente, antes que
aumentar la dosis o agregar un segundo medicamento.

Se debe preferir utilizar fármacos de acción prolongada (24 hrs), de dosis única, a fin de
aumentar la adhesión al tratamiento y lograr un control más sostenido de la presión
arterial, lo que conlleva mayor efecto protector contra el riesgo de eventos
cardiovasculares mayores y de daño a órgano blanco.

El tratamiento se debe iniciar inmediatamente de confirmado el diagnóstico.


Los grupos de riesgo medio y bajo iniciarán medicamentos según el grado de control
logrado con las medidas no farmacológicas tanto de la presión arterial como de otros
factores de riesgo presentes.
1 TOD = daño a órgano blanco
2 ACC = condiciones clínicas asociadas
Consideración especial merecen los pacientes diabéticos o con insuficiencia renal que
tienen presión arterial normal alta (130-139/85-89 mmHg), los que deben iniciar
tratamiento precoz y agresivo a fin de preservar la función renal.

Los principales factores a considerar para el inicio y mantención de la terapia son:


 Perfil de riesgo cardiovascular de cada paciente
 Presencia de daño en órgano blanco, enfermedad cardiovascular clínica,
enfermedad renal, diabetes.
 Variación de la respuesta individual a los medicamentos
 Interacciones con otros fármacos utilizados en patologías asociadas

Diuréticos
Son fármacos de gran utilidad en el manejo de la hipertensión arterial, de bajo costo, bien
tolerados a dosis bajas y de probada eficacia en la prevención de eventos
cardiovasculares mayores. Los tiazídicos como la hidroclorotiazida, se deben utilizar en
dosis de 25 mg como máximo para evitar la aparición de efectos adversos (intolerancia a
la glucosa, hipokalemia, hiperuricemia, impotencia sexual). Están especialmente
indicados en ancianos con hipertensión sistólica aislada.
Los diuréticos de asa, como la furosemida, se deben emplear en los hipertensos con
insuficiencia renal.

Bloqueadores beta
Son fármacos seguros, de bajo costo, eficaces en monoterapia o en combinación con
diuréticos, antagonistas del calcio (dihidropiridinas) y a bloqueadores. Están
contraindicados en pacientes con limitación crónica del flujo aéreo y con enfermedad
vascular periférica.

Inhibidores de la ECA
Son seguros, efectivos, más baratos que en sus comienzos, son especialmente útiles en
la insuficiencia cardíaca y en la nefropatía diabética con proteinuria. Su efecto adverso
más frecuente es la aparición de tos seca.
Antagonistas del calcio
Todos los subgrupos son eficaces y bien tolerados. Se deben utilizar aquellos de acción
prolongada (retard) y evitar los de acción corta y rápida. Su indicación principal es la
hipertensión sistólica aislada del anciano. Sus efectos adversos más comunes son la
taquicardia, el edema maleolar y la rubefacción.

Antagonistas de angiotensina II
Son similares a los inhibidores de la ECA, pero no provocan tos seca. Aún son de costo
alto.

Bloqueadores alfa
Son seguros y efectivos, aunque no se ha probado todavía su efecto sobre el riesgo
cardiovascular. Se los utiliza preferentemente en dislipidemias, intolerancia a la glucosa y
en pacientes con hipertrofia prostática benigna, por su efecto favorable sobre el músculo
detrusor. Su efecto adverso principal es la hipotensión postural.

Otros medicamentos
Existen numerosos fármacos de acción central como la clonidina, reserpina, guanetidina y
metildopa, y de acción periférica como la hidralazina y el minoxidil, pero por sus
reconocidos efectos adversos son poco utilizados. Cabe destacar, sin embargo, que la
metildopa y la hidralazina son fármacos empleados ampliamente en la hipertensión del
embarazo.
Combinaciones medicamentosas favorables
Como principio ordenador general se establece que sus efectos hipotensores sean
ejercidos por mecanismos distintos. Ejemplos de asociaciones efectivas son:

Diurético + b bloqueador
Diurético + IECA
Antagonista del calcio + b bloqueador
Antagonista del calcio + IECA
a bloqueador + b bloqueador
Diurético + b bloqueador + Antagonista del calcio
Diurético + b bloqueador + IECA
Otros tratamientos medicamentosos asociados con frecuencia, son los antiplaquetarios.
Estos se deben usar a dosis bajas (80-150 mg) en pacientes de alto riego de enfermedad
cardiovascular y que han alcanzado un buen control de la presión arterial y no tienen
riesgo de sangrado.
Hipolipemiantes: tienen un efecto aditivo en la disminución del riego de enfermedad
coronaria en hipertensos.

Seguimiento
Durante el período de evaluación y estabilización del tratamiento, los controles serán más
frecuentes y se utilizarán para reforzar la educación sobre la condición de hipertenso y
sus implicancias, sobre todo en la calidad de vida, efectos adversos y necesidad de su
empleo de por vida, a fin de lograr una buena adhesión a la terapia, la que puede
experimentar muchas modificaciones a lo largo del tiempo.

 Recomendaciones de uso del TF (a fin de promover el uso adecuado de los


medicamentos y gestionar las posibles RAM o EAM)

Proceso de selección del medicamento Sigue un proceso análogo al utilizado por la OMS
para elaborar la lista de medicamentos esenciales. Muestra cómo aprender a manejar,
discriminar y contrastar información farmacológica, y mantener una visión crítica respecto
a las indicaciones de los medicamentos.
Los pasos sucesivos para seleccionar un medicamento son los siguientes:
1. Definir el problema a tratar.
2. Especificar el objetivo terapéutico.
3. Elaborar un inventario de los grupos de medicamentos efectivos.
4. Elegir según criterios de calidad (eficacia, seguridad, coste, adecuación al proceso y a
la persona).
 Definición del diagnostico
 Especificar el objetivo terapéutico
 Elaborar un inventario de los grupos de medicamentos efectivos
 Elegir un grupo terapéutico según criterios de calidad
Eficacia
Seguridad
Coste
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Sellén CJ. Hipertensión arterial. Diagnóstico, tratamiento ycontrol. La Habana: Editorial


Ciencias Médicas; 2008.

Guías clínicas para la detección, prevención, diagnóstico y tratamiento de hipertensión


arterial sistémica en México. Arch Cardiol Mex. 2008;78(2):5-57.

AHA. Heart disease and stroke statistic-2008 update. Circulation 2008;117:25-146.

Pérez CMD, Dueñas HA, Alfonso GJ, Vázquez VA, Navarro PD, H del Pozo, et al.
Hipertensión arterial. Guía para la prevención, diagnóstico y tratamiento. La Habana:
Editorial Ciencias Médicas; 2008.

Mancia G. Long-Term Risk of Mortality Associated With Selective and Combined Elevation
in Office, Home, and Ambulatory Blood Pressure. Hypertension. 2006;47:846-53.

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