0% encontró este documento útil (0 votos)
178 vistas79 páginas

57PC La Presencia Humana Mas Allá Del Sistema Solar

kvmlvkmlkdfjnfgj, lf;dsk;kf;sd, ejremldkslfksd
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF o lee en línea desde Scribd
0% encontró este documento útil (0 votos)
178 vistas79 páginas

57PC La Presencia Humana Mas Allá Del Sistema Solar

kvmlvkmlkdfjnfgj, lf;dsk;kf;sd, ejremldkslfksd
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 79
La presencia humana mas alla del sistema solar Primeros pasos hacia el éxodo interestelar > ar ee Na v “Un paseo por el inn _ COSMOS | La presencia humana nas alla del sistema solar | Primeros pasos hacia el éxodo interestelar RBA Imagen de cubierta: Impresion artistica de una nave espacial tripulada, Hegando asu destino en un sistema binario. Direccién cientifica de la coleccién: Manuel Lozano Leyva © Oscar Augusto Rodriguez Baquero por el texto © RBA Contenidos Editoriales y Audiovisuales, S.A.U. © 2017, RBA Coleccionables, S.A. Realizacién: EDITEC Disefio cubierta: Lloreng Marti Disejio interior. tactilestudio Infografias: Joan Pejoan Fotografias: AGE: 23, 133, 118; Bill Saxton (NRAO/AUI/NSFY/NAO: 57; Bill Stafford, James Blair, Regan GeesemarV/NASA: 117; Bill Stafford/NASA: 77; Daein Ballard/ Wikimedia Commons: 110; Donald Davis-NASA Ames Research Center/Wikimedia Commons: 17a; ESA, NASA, and L. Calcacla (ESO for STSeI)/ESA, NASA: 107bi; ESA: 97Galaxy Publishing/Ed Emshwiller/Wikimedia Commons: 119; John Frassanito and Associates/NASA: 107ai; Johns Hopkins University Applied Physics Laboratory/NASA: 59bd; JPL-Caltech/NASA: 67, 93, 106; L. Weinstein/Ciel et Espace Photos/ESO: 38a; M. Kortunesser/ESO: 95b; M. Kormmesser/Nick Risinger/ESO: 33b; Marshall Space Flight Center/Wikimedia Commons/NASA: 73b; Michael Okoniewski 1994/Wikimedia Commons: 129; Miksu-Own work/Wikimedia Commons: 149a; N. Bartmann/spaceengine.org/ESO: 43b; NASA and Ball Aerospace/NASA: 37; NASA: 17bi; 87i; NASA's Goddard Space Flight Center/NASA: 6lbi; NASA's Goddard Space Flight Center/Chris Gunn de Greenbelt, MD, USA/ NASA: 87d; NASA/MSFC: 107ad; NBC Televisior’ Wikimedia Commons: 17bd; NordGervDag Terje Filip Endreser/Wikimedia Commons: 149b; Oscar Augusto Rodriguez Baquero con imagenes de ESO/M. Kormmesser, NASA, NASA Ames/ SETI Institute/JPL-Caltech: portada; Oscar Augusto Rodriguez Baquero/ESO/ NASA: 61a; P. Kalas (Univ. of California, Berkeley) et al/ESA, NASA: 43a; Q. Zhang, University of California/NASA: 73a; SAIC/NASA: 107bd; Schokraie E, Warnken U, Hotz-Wagenblati A, Grohme MA, Hengherr §, et al/Wikimedia Commons: 127; ¥. Beletsky (LCOVESO: 95a. Reservados todos los derechos. Ninguna parte de esta publicacidn puede ser reproducida, almacenada 0 transmitida por ningtin medio sin permiso del editor. ISBN: 978-84-473-9090-8 Depésito legal: B-22061-2017 Impreso y encuadernado en Rodesa, Villatuerta (Navarra) Impreso en Espaiia - Printed in Spain ana En SUMARIO GALOLTL ELLE LOL SLOT dir tet PP PPPPLSPLOLIRLESILLETLONILILL ATIC ELECLITLOUATSELEL LEE INTRODUCGION .. sec bb see be eee Eas ew EF ee 7 CAPITULO1 —- El suefio del viaje interestelar ....- 16-5. - 50 +- 13 CAPITULO 2 Planetas extrasolareS ©... eee ees 27 CAPITULO3 = Mas alladelaheliosfera..............+-.. 47 CAPITULO4 = ,C6mo llegar alas estrellas? .......-..-0--00-5 63 CAPITULO 5 La eleccién de un destino... 2.0... .00 205055 81 CAPITULO 6 Elfactorhumano.... 6.006. eee eee 99 CAPITULO 7 Un posible encuentro extraterrestre........... 121 CAPITULO 8 El futuro de nuestra especie... 0... ee ee 135 LECTURAS RECOMENDADAS........ 0.00.00 0c eu eueeeeae 153 INDIE, on ciate garg es Wes cue co chats, bate 155 =a INTRODUCCION GULL ELVELILEELELELTETLITL ALE LALALOLETEATTATSALAAL DOL EL PLET EL OELELE EET TELELELELOL ELLE El ser humano siempre se ha sentido motivado por varios ins- tintos, siendo el principal de ellos el de la conservacién de su propia vida, es decir, el instinto de supervivencia, que nos ha Nevado a multiplicarnos y expandimos, garantizando asi la con- tinuidad de nuestra especie sobre la faz de la Tierra a lo largo de muiles de afios. Uno de los factores que han influido notablemente en la super- vivencia humana ha sido la curiosidad, la bisqueda de respues- tas, desde las mas prosaicas hasta las mas trascendentales. La curiosidad es avidez de conocimiento, y este ultimo constituye una de las bases sobre las que se asienta la supervivencia. Cues- tiones tan simples como «jqué habra tras aquella colina?» en- contraron solucién en el momento en que emprendimos el cami- no para intentar hallar la respuesta, naciendo asi una actividad que ha acompaniado a nuestra especie desde el amanecer de los tiempos: la exploracién. Con ella, descubrimos nuevas tierras, nuevos lugares en los que asentarnos y de los que obtuvimos re- cursos que garantizaron nuestra pervivencia y la proliferacién del ser humano a lo largo y ancho del globo terrestre con el transcurso del tiempo. Nuestro deseo por conocer mas sobre el entorno que nos ro- dea nos Ilevé a preguntarnos si era posible abandonar nuestro planeta para adentrarnos en el frio y oscuro vacio del espacio. La respuesta legé en el cuarto dia del mes de octubre del afio 1957, fecha en la que una pequefia esfera de aluminio, dotada de cuatro largas antenas, partia desde Jas aridas estepas de la Rept- blica de Kazajistan, dejando atras nuestra atmosfera pocos mi- nutos después del despegue para entrar en la érbita de la Tierra. Nacia asi lo que popularmente conocemos como era espacial, una nueva etapa de exploracién que dura ya seis décadas, a lo Jargo de la cual hemos adquirido un nivel de conocimiento sobre nuestro entorno planetario, y sobre el universo en general, sin precedentes en Ja historia de la civilizacion. Gracias a la astrondutica sabemos que es posible enviar hu- manos al espacio, hacerlos aterrizar en otros cuerpos celestes y traerlos de vuelta a la Tierra con éxito. Mediante robots, hemos recorrido las planicies del vecino Marte, y el lanzamiento de teles- copios orbitales nos ha permitido obtener una visidn completa- mente nueva del universo, pudiendo retrotraernos en el tiempo hasta los primeros segundos después del Big Bang, aquella gran explosion origen de todo lo que conocemos. Estas seis décadas de exploracién espacial también nos han permitido profundizar en el conocimiento de la dinamica de las estrellas. Sabemos cémo nacen, cémo evolucionan, y también cémo mveren, procesos que afectan, sin excepcion, a todas y cada una de Jas estrellas que pueblan el universo conocido, incluido nuestro Sol, una estrella de tipo medio con una longevidad que los cientificos estiman en torno a los diez mil millones de afios, y que ya ha cumplido la mitad de su vida prevista. Aunque con frecuencia no nos percatamos de ello, nuestra supervivencia depende del Sol, dado que este constituye la prin- cipal fuente de energia que todo ser vivo precisa para existir. ‘Un ejemplo de ello lo encontramos en las plantas, que necesitan la luz del Sol para sintetizar los carbohidratos, un proceso CO- nocido como fotosintesis. Nosotros, los humanos, dependemos igualmente del Sol para fabricar un nutriente esencial, la vita- INTRODUCCION 1 mina D, que, entre otras cosas, regula los niveles de calcio de nuestra sangre y huesos. Los estudios realizados en el marco de la heliofisica apuntan aque, antes de morir, nuestra estrella experimentara una trans- formacién que hard inviable la vida en la Tierra. Previamente a su colapso definitivo, el Sol sufriré un aumento de tamafio que probablemente le hard crecer hasta alcanzar Jas 6rbitas de los planetas interiores del sistema solar, incluido el nuestro, que podria ser engullido literalmente por el astro rey. Inexorable- mente, el destino de la Tierra se encuentra unido al del Sol, y si la especie humana logra sobrevivir hasta el final de los dias de nuestro planeta, debera encontrar, con el tiempo suficiente, otro hogar celeste para evitar asi la extincién. Y ese lugar, casi con toda seguridad, se encuentra en otro sistema solar, a afios-luz de distancia. Ello obligara a nuestra civilizaci6n a afrontar un desafio cientifico, tecnolégico y econémico sin precedentes en la historia de la humanidad, en el marco de un proyecto que se extenderé a lo largo de muchos siglos, involucrando por tanto a centenares de generaciones. Uno de los principales problemas que deber4 resolver la hu- manidad para emprender el viaje hacia otras estrellas es el de Ja velocidad. Las naves Voyager 1 y 2 de la NASA, dos de los vehiculos mds rapidos construidos por el ser humano, viajan a una velocidad relativa al Sol préxima a los 62000 kin/h. Aban- donaron nuestro planeta en el afio 1977 e invirtieron cuarenta afios en cubrir una distancia de algo mds de 134 y 110 UA (uni- dades astronémicas), respectivamente. La primera cifra equivale a mas de veinte mil millones de kildmetros, una distancia que nos puede parecer muy grande en el ambito cotidiano pero que, en términos astronémicos, es extremadamente pequefia. Man- teniendo esa velocidad, una nave espacial invertiria alrededor de 76000 afios en liegar a Alfa Centauri, el sistema estelar mas cercano al nuestro. Este se encuentra situado a 4,3 afios-luz, es decir, a mds de cuarenta billones de kilémetros, y en tomo a una de sus estrellas, Préxima Centauri, los cientificos han descubier- to un planeta de tamafio similar ala Tierra, denominado Préxima Centauri b, que orbita en una region considerada habitable, en la INTRODUCCION 10 que las temperaturas permiten la existencia de agua en forma li- quida. Tales plazos de tiempo son absolutamente inviables para una misién espacial convencional, pero existen proyectos para el envio de naves espaciales a velocidades relativistas que, si bien no seran tan rapidas como la luz, si ganaran la velocidad sufi- ciente como para reducir esos 76000 afios a un plazo de cuatro décadas, algo mucho més factible para una expedicién humana. Por otra parte, carecemos de informacion detallada sobre las condiciones que reinan en el medio interestelar. Nuestro sistema solar se encuentra «protegido» de la radiacién césmica emitida por los diferentes cuerpos celestes que pueblan el firmamento, gracias a una envoltura denominada heliosfera, generada por la actividad de nuestro Sol. Es por ello por lo que se hace impres- cindible la puesta en marcha de misiones robotizadas mas alla de esa envoltura solar, al objeto de recopilar datos que puedan utilizarse mas adelante y que se antojan de vital importancia para poder dar el salto a las estrellas con unos ciertos niveles de seguridad. Paralelamente a las investigaciones que se lleven a cabo mas allé de la heliosfera, sera igualmente esencial adquirir experien- cia en otros ambitos, como el establecimiento de asentamientos planetarios. Por ahora, las visitas a la Luna han sido muy bre- ves, y meramente exploratorias. La migracién humana a plane- tas extrasolares pasar por la realizaci6n, con éxito, de ensayos previos, usando como campo de pruebas planetas vecinos como Marte. Los proximos cincuenta afos seran cruciales para com- probar si el ser humano tiene la capacidad de lograr tal objetivo y establecer una presencia permanente en la superficie marcia- na. Otro de los 4mbitos que debe ser explorado es la capacidad de transformar la atmosfera de los planetas con el propdsito de permitir que las formas de vida que conocemos, incluida Ja espe- cie humana, puedan sobrevivir en su superficie prescindiendo de estructuras presurizadas y sistemas de soporte vital. Esa capaci- dad abre las puertas a una nueva area tecnolgica, la ingenieria planetaria. La construccién y establecimiento de procesadores atmosféricos que doten a los planetas de presién y aire respira ble es, nunca mejor dicho, vital, dado que sera muy dificil encon- INTRODUCCION atos a la colonizacién cuyas caracteristicas atmosféricas sean exactas a las de la Tierra. Una minima varia- cién en ellas podria impedir el asentamiento humano en tales mundos si antes no se han desarrollado técnicas que permitan la adecuacion de la atmésfera. Todos estos pasos previos, incluyendo la construccién de los vehiculos destinados a la migracién humana a otros sistemas solares, constituyen, como menciondbamos antes, una empresa que involucrara a centenares de generaciones. El ser humano suele razonar de manera individualista y cortoplacista. Somos tendentes, de manera sistemdtica, a preferir asegurarnos lo ne- cesario para nuestra supervivencia en el presente, independien- temente de si las generaciones venideras se veran perjudicadas por nuestras acciones. jSeremos capaces de invertir tiempo y recursos en estos proyectos de ejecucién tan larga? ¢Podremos llegar a pensar como especie en lugar de como individuos? Es- tas son preguntas para las que todavia no existen respuestas definitivas, y de ellas depende el éxito de todas y cada una de estas iniciativas. Solo el pensamiento colectivo podra abrirnos las puertas a las estrellas, convirtiéndonos asi en una especie de caracter interestelar y asegurando con ello nuestra pervivencia y expansion. Ya lo adelantaba uno de los padres de la astrondutica, el ruso Konstantin Tsiolkovski, al asegurar a finales del siglo xx que la Tierra era la cuna de Ja humanidad, y que no podremos permanecer en Ja cuna para siempre. trar planetas candid INTRODUCCION 1 CAPITULO 1 eA PLETE ETE LE rt sedi ete Vt LITPLest PL ese Vit besa t ates (de AOI EOEPLELAISELOREILEEE EI suefio del viaje interestelar empresas de caracter cientifico, tiene su origen en la imaginacién humana, plasmada en lo que conocemos como ciencia ficcién. Diversas novelas y largometrajes han descrito, con mas o menos acierto, cémo se desarrollaran en el futuro las expediciones humanas a planetas | | | | # Viajar hacia otras estrellas, al igual que todas las i | | extrasolares. En la amplia y eterna oscuridad del espacio, la astronave comer- cial Nostromo viaja de retorno a la Tierra. La tripulacién, some- tida a un estado de hibernacion, es despertada de su letargo por MADRE, la computadora central de la nave, al interceptar una extrafia transmision de radio cuyo origen se sitiia en una peque- fia luna que orbita en tomo a un planeta gaseoso ubicado en la constelacién de Reticulum. Asi comienza Alien, una pelicula de terror dirigida por Ridley Scott en el afio 1979 y ambientada en el siglo xxn, un marco temporal en el que los vuelos més alla del sistema solar son algo cotidiano. A lo largo de los afios ha quedado demostrada la interaccién entre la ciencia y la ficcién. Conceptos que hoy son abordados en ambitos cientificos y tecnolégicos tuvieron su origen en la imaginacion humana. Del mismo modo, un importante ntimero de historias ficticias, sobre todo Jas més recientes, est4n asen- tadas en hechos factibles que, si bien no pueden materializarse todavia, es muy probable que vean la luz en un futuro no excesi- vamente lejano. La ciencia ficcién, con frecuencia, es el punto de partida hacia la consecucién de una meta a largo plazo. Y no hay mejor forma de predecir el futuro que inventarlo. EL SUEMNO DEL VIAJE INTERESTELAR 1§ Los suefios del ayer son la mafiana. 16 La idea de emprender viajes humanos interestelares, aunque | de la ciencia ficcién hace un siglo, fue inspj. j nacida en el seno ? rada por algunos Cientificos e ingenieros, considerados hoy pa. dres de la astrondutica, quie conocimientos de la materia. Probablemente, el relato mds antiguo que se conoce en el que se hace referencia a viajes interestelares en el marco de la cien- | cia ficcién es La ultima migracton, | Es dificil decir qué es imposible. la historia escrita en 1918 por el in- j ventor del cohete de combustible lf- j quido, el ingeniero estadounidense | esperanza del hoy y la realidad del Robert Hutchings Goddard (en la | fotografia inferior izquierda de la pa- Rosert Hurcuines GoppARD gina contigua). Esta historia, que no | trascendio publicamente hasta el afio © 1972, sumerge al lector en una época futura en la que la huma- nidad, con el propdsito de migrar a otros sistemas solares, ha sido capaz de fletar gigantescas naves espaciales, una suerte de «arcas de Noé» que portan, de manera condensada, todo el co- nocimiento y tecnologia de la especie humana, propulsadas me- | diante una tecnologia de fusién nuclear del hidrégeno. El mismo | dia que escribid aquella historia, Goddard redact6 una version | condensada, en la que especulaba con la utilizacién de pequenas lunas 0 asteroides como vehiculos para realizar un viaje interes- telar, empleando como sistema de propulsién un concepto que denomin6 energia intraatémica. Las historias de Goddard supusieron la introduccién de las de- 5 nominadas naves generacionales (véase una recreacion artistica | en la pagina contigua), vehiculos espaciales cuyos tripulantes desarrollan una vida normal, que les permite tener descendencia | y, asi, producir generaciones enteras que suceden a las anterio- | res. Goddard incluso especuld sobre los cambios que podrian su- frir las sucesivas generaciones en diversos ambitos, entre ellos el psicoldgico y el genético. En misiones excesivamente larga, con una duracién de varios centenares de miles de afios, God- dard pensaba que la mejor opcidn era someter a los miembros EL SUENO DEL VIAJE INTERESTELAR nes, a través de historias y novelas, | combinaron sus anhelos y curiosidades sobre el espacio con sus SSRI Pe SS em a Sa Be ni Impresién artistica de un «mundo isla», un concepto de nave generacional propuesto por el ingeniero britanico es Neill. Abajo, ala izquierda, Robert H. Goddard, que abord6 la migracion humana a otros sistemas solares en | ito de ta Ciencia ficcién. A la derecha, los actores Leonard Nimoy (izquierda) y William Shatner (derecha) en una imagen promocional de la popular serie Star Trek. EL SUENO DEL VIAJE INTERESTELAR v? Todos habéis sacrificado mucho para estar aqui y formar parte de lo que estamos haciendo [...]. Es de las tripulaciones a lo que hoy conocemos como hibernacién o animacidn suspendida, despertandolos a ciertos intervalos de tiempo al objeto de realizar, si fuera necesario, las correspon. dientes correcciones de rumbo de la nave espacial. El fisico ruso Konstantin Tsiolkovski, otro de los padres de la astronautica, también realizé incursiones en el mundo de la ciencia ficcién espacial. En 1928 escribid una historia titulada | El futuro de la Tierra y de la humanidad. Al igual que God- | dard, Tsiolkovski introdujo la nave generacional en su relato. Tras va- rios sighos de viaje, los descendien- tes de los primigenios tripulantes habian cambiado tanto en aspectos | la primera misian colonizadora a gran escala de la historia, y en la Tierra todo el mundo agradece muchisimo vuestro enorme tan diversos, que no consideraban a la Tierra como su planeta de origen. El concepto de nave generacio- nal presenta multitud de problemas | esfuerzo, vuestro valor. DANIELS, PERSONAJE DE ALIEN: COVENANT FesurSGa en frateria de soporte vir | a la hora de materializarse, siendo el principal de ellos el relativo a los tal: aire respirable, agua y alimentos, entre otros muchos. Goddard parecia encontrarse en el camino correcto cuando abordd la animacion suspendida como técnica para realizar viajes de tan larga duracion. En las tiltimas décadas, los autores tienden a recurrir al aseso- ramiento de cientificos e ingenieros para dotar de verosimilitud asus historias. Lo cierto es que, desde el punto de vista comer- cial, no hay nada tan atrayente como una historia cuyo argumen- © to, ademds de resultar interesante, pueda, de algtin modo, con- vertirse en realidad en un plazo de tiempo no demasiado largo. Algunos de los sistemas de propulsién descritos en la saga Alien, que permiten realizar expediciones tan distantes, se basan en motores idnicos de plasma alimentados por energia nucleat, un concepto que, junto a la propulsion nuclear de pulsos, ya 5¢ habia esbozado previamente en las mesas de disefio. Los moto- res idnicos ya han sido introducidos en diversas misiones espa ciales no tripuladas, entre ellas la estadounidense Deep Space , EL SUENO DEL VIAJE INTERESTELAR a ini a EID, se RSS RE la japonesa Hayabusa 1 y Ja europea SMART-1, siendo su princi- pal cualidad la de proporcionar un empuje continuo a los vehicu- los espaciales. En tales misiones, la introduccidn de este tipo de sistemas de propulsién estaba orientada, principalmente, a estu- diar su versatilidad. En destinos cercanos esta tecnologia suele ser mds un inconveniente que una ventaja, ya que los motores de este tipo tardan mucho en rendir la maxima potencia. En misio- nes a cuerpos cercanos, las naves espaciales Uegarian antes de que sus motores iénicos alcanzasen la potencia maxima. Por ello son més apropiados para destinos remotos. Otra obra de ficcién cuyo argumento se centra en viajes huma- nos de cardcter interestelar, y que cuenta con una base cientifica bastante solida, vio la luz en el aiio 1995 con el titulo original de Cualquier tecnologia suficientemente avanzada es indistin- guible de la magia. Su autor, el fisico y escritor Robert Forward, describe en ella una tecnologia de propulsién que permite a las naves espaciales alcanzar hasta un diez por ciento de la veloci- dad de la luz (es decir, aproximadamente 30000 km/s). Se trata de vehiculos muy ligeros, cuyo sistema de propulsion esta basa- Conceptos surgidos en ta ciencia ficcién y materializados por la tecnologia Concepto Cohetes lanzadores de alta velocidad. Retrocohetes. Empleo de velas como sistema de propulsin. 1928 | Médulos de aterrizaje planetario. 1929 | Aletas estabilizadoras para la estabilidad aerodinamica de los cohetes. Edificios de ensamblaje vertical. Clusters (conjuntos) de cohetes aceleradores. Actividades extravehiculares, trajes espaciales, umbilicales de soporte vital. 1945 | Construccion de estaciones orbitales mediante el transporte de estructuras y mantenimiento regular de las mismas en el espacio. Comunicacién via satélite mediante ingenios en drbita geoestacionaria. 1954 | Tanques de almacenamiento de propergol mattiple. Médulos aerodinamicos tripulados de entrada atmosférica, EL SUENO DEL VIAJE INTERESTELAR 19 20 do en los denominados ramjet o estatorreactores, dispositivos que generan un intenso campo magnético mediante el cual son capaces de recoger el hidrégeno interestelar durante el vuelo empleéndolo como combustible. La nave experimenta una pau. latina aceleracién a medida que obtiene hidrégeno, lo que permi- te al estatorreactor recoger mayores cantidades de este elemen- | to y, con ellas, alcanzar mayor velocidad. Este concepto habia sido propuesto por el fisico Robert W. Bussard treinta y cinco anos antes de la publicacién de dicha novela. HISTORIAS DE UN SUENO PROFUNDO Una misién tripulada de caracter interestelar, sea cual fuere el método de propulsién empleado, invertira un periodo de tiem- po notablemente superior al de la longevidad humana. Cono- cidos los numerosos inconvenientes que presenta el concepto de nave generacional, especialmente en lo que a recursos se refiere, quiza la solucién a este problema consista en someter a los tripulantes a un estado de hibernacién, algo que, como explicabamos en lineas anteriores, ya habia considerado Robert H. Goddard en una de sus historias de ficcién. Este concepto, que cuenta con varias denominaciones (letargo, criostasis, hi- persuefio, animacién suspendida...) es, contrariamente alo que podriamos pensar, bastante antiguo, constituyendo el argumen- to central de algunas historias muy populares que, aunque no se desarrollan en escenarios del Ambito espacial, constituyen de alguna forma el germen del concepto de animacion suspendida. Quiza el relato mas antiguo relacionado con el sueno pro- fundo o hibernacién sea la leyenda de Holger Danske (Ogier el danés), un personaje protagonista de El Cantar de Roland (ca. 1060), que segun algunos testimonios escritos, puede tener su origen en un hombre llamado Olgerus Danicae Dux (Olgero, du- que de Danica) quien, con la ayuda de Carlomagno, reconstruyé el monasterio de San Martin de Colonia después de que este fue- Ta saqueado por los sajones en el afio 778. Segiin las leyendas danesas, Ogier, que llegé a ser rey, se encontraba sometido a un EL SUEAO DEL VIAJE INTERESTELAR | oA AE EN EE TT a a oR “ vom Se ET sasnguee siesta a 5 ORE: cap suefio profundo del que despertaria en el caso de que Dinamarca se encontrase amenazada por algun peligro. Otro relato que podriamos relacionar con la animacién sus- pendida, este de popularidad universal, fue escrito en 1812 por los hermanos Grimm, y publicada su revision cuarenta y dos afios después. Titulado en aleman antiguo Sneewitichen, «Blancanie- ves», explora las envidias de una reina por la belleza de la joven pro- tagonista. Su enfermiza obsesién por ella la conduce a intentar asesinarla en varias ocasiones. En la ultima de ellas, regala a la joven una Manzana envenenada, cuya ingestion le hace caer en un estado de sueno profun- Estos son los viajes de la nave estelar Enterprise. Sus cinco afios de mision: explorar nuevos y extrafios mundos, en busca de nueva vida y nuevas civilizaciones, llegar hasta donde ningun ser humano ha llegado nunca. Stan Taex (inrropuccion) do. Introducida en un cofre de cris- tal —que, de algtin modo, guarda se- mejanza con las unidades de animacion suspendida de algunas historias y peliculas recientes de ficcio6n espacial—, la joven re- cupera la consciencia tras ser besada por un principe que habia quedado profundamente enamorado de ella a primera vista. La literatura del siglo xx ha abordado en numerosas oca- siones la hibernacién humana desde la perspectiva de las mi- siones interestelares. Arthur C. Clarke, autor de renombradas obras como 2001: una odisea del espacio (1968), que trata la animacién suspendida en vuelos espaciales que tenian lugar dentro de nuestro sistema solar, public6é en el afio 1986 la no- vela Canticos de la lejana Tierra, basada en un relato corto con el mismo titulo que él mismo escribié en 1958. La historia Se sittta en el aio 3800, y esta ambientada en el ficticio pla- neta oceanico Thalassa. En é) reside una pequefia comunidad de seres humanos, que fueron enviados alli varios siglos antes ante la inminente destruccién del planeta Tierra como conse- Cuencia de la transformacién del Sol en una nova. Los primeros humanos se enviaron cuando todavia eran embriones, en una Pequefia nave espacial tripulada por robots que se encargaban de supervisar el desarrollo embrionario. Se trataba de una de EL SUENO DEL WAJE INTERESTELAR at tantas naves enviadas a aquellos planetas que los cientificos habfan considerado habitables. A lo largo de seis centurias aquella comunidad logro adaptarse al planeta y desarrollarse, siendo la serenidad, la estabilidad y el poseer una cultura ajena a cualquier tipo de creencia religiosa o mistica sus principales rasgos de identidad. Los thalassanos reciben la visita de la nave espacial interestelar Magallanes, que transporta a un millén de seres humanos en estado de hibernacién, procedentes igual- mente de la Tierra y con destino al planeta Sagan 2. La novela, en esencia, exploraba el impacto producido por el contacto en- tre dos culturas tan distintas. LAS EXPEDICIONES INTERESTELARES EN LA GRAN PANTALLA Las historias sobre la presencia humana mas alld de nuestro sistema solar también han trascendido a la literatura, bien me- diante adaptaciones cinematograficas de novelas y series de te- Jevision, bien a partir de historias escritas especificamente como base para el rodaje de largometrajes. Un ejemplo muy popular lo constituyen las diferentes pelicu- las ambientadas en el universo de Alien, una saga cuyo desarro- | llo abarca ya cuarenta afios, existiendo planes definidos para su continuacién en la préxima década. Las historias de Alien explo- | ran, ademas de la hibernacién humana, el concepto de procesa- dor atmosférico disefiado para hacer respirable la atmésfera de | otros cuerpos celestes y fomentar asi la presencia humana més alla de nuestro sistema solar. Adem4s, abordan la incorporacién de robots humanoides a las tripulaciones de las naves espacia- les, al objeto de realizar tareas complementarias a las efectuadas por los seres humanos. Un afio antes de que Alien viera la luz en los cines, se estrend la versién cinematografica de Star Trek, una saga creada por Gene Roddenberry y que originalmente surgié como serie en la pequefia pantalla en la segunda mitad de la dé- cada de 1960. En esta época el interés por la exploracién del es- pacio se hab{a incrementado, tras el lanzamiento del Sputnik 1, el primer satélite artificial de la historia, y vivid un momento 4l- EL SUENO DEL VIAJE INTERESTELAR soa cane staitc pte te a ancatonaabe SS RIOR ats ak f LA BESTIA ESTELAR El argumento de Alen cuenta una historia terrorifica ambientada en un futuro no muy leja- no. La astronave comercial Nostromo, tripulada por siete astronautas, se encuentra rea- lizando su viaje interestelar de regreso a la Tierra cuando intercepta una sefial de origen extraterrestre procedente de una pequefia luna en la constelacion de Reticulum. Su tripu- lacin es despertada de su hibernacién para aterrizar alli ¢ investigar la fuente de emision. Uno de sus integrantes es atacado por un organismo alienigena, que libera en su interior un ambrién. La gestacién culmina con el nacimiento de una nueva entidad y fa consecuents muerte de su anfitridn, De aspecto ciertamente antropomorfo, este ser escapa al control de la tripulacion, amenazando sus vidas. Alien, dirigida por Ridley Scott, se estrané en 1979 y abrié las puertas a una nueva forma de ficcién: el terror espacial. La historia continud con otras tres peliculas mds, Aliens (1986), Alien’ (1991) y Alien: resurreccién (1997), y dos precuelas, tituladas Prometheus (2012) y Alien: Covenant (2017). Los padres de la historia El relato que dio origen a la saga Allen es fruto de la colaboracién de los escritores Dan Semntenina DSR UpE DUK uesescaneipreat ee sit Sachse nigel O'Bannon y Ronald Shusett. O’Bannon estudié cinematografia en la Universidad Estatal de | California (USC), donde conocié a John Carpenter, quien estaba rodando una pelicula de fic- cidn espacial como trabajo de tesis. O’Bannon colaboré con Carpenter en aquella cinta, que lego a los cines con el titulo de Estrella Oscura. Por su parte, Shusett, que habia estudiado teatro en la Universidad de California en Los Angeles (UCLA), tras ver Estrella Oscura decidié contactar con sus directores. Shusett trad muy buena relacién con O'Bannon y ambos decidieron establecer una linea de colaboracién, que se inicié con una historia de terror espa- cial cuyo primer acto O’ Bannon habia esbozado previamente en veintinueve paginas. Aquel borrador constituia el germen de Alien. Escena dela pelicula Alien en ta que los pasajeros de la nave Nostromo examinan [os restos de Io que parece ser una nave espacial alienigena. Paha th iecciatasls amc ot EL SUENO DEL VAJE INTERESTELAR nih ins ee 24 gido durante los afios en que se llevaron a cabo las expedicioneg humanas con destino a la superficie lunar, en el marco del pro. | grama estadounidense Apolo. Star Trek se centra en las expediciones emprendidas por ung tripulacion de seres humanos a bordo de la nave estelar Enter. prise, con el propésito de explorar nuevos mundos y hallar nue. vas formas de vida, Tanto la serie como Jas incontables peliculas que la sucedieron, estan ambientadas en una época en la que | Ja humanidad ha establecido relaciones con multitud de civi- lizaciones extraterrestres, lo que condujo a la fundacién de la | llamada Federacion Estelar, una suerte de Naciones Unidas inte- grada por representantes de \as distintas civilizaciones del uni- verso conocido. En la misma época en la que Star Trek se emitia en televisién, se abria paso en la pequeiia pantalla otra serie que también abor- | daba el Ambito de las misiones mas allé de nuestro sistema solar, | Se trataba de Lost in Space (Perdidos en el espacio), creada y producida por Irwin Allen. Integrada por ochenta y tres episo- dios distribuidos en tres temporadas, la serie contaba la histo- ria del doctor Robinson, un astronauta que, junto a su familia, un piloto de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos y un robot, emprendian un viaje a bordo de la nave Jupiter 2 con destino a un planeta remoto en 6rbita alrededor de la estrella Alfa Centau- ri, con la esperanza de poder establecerse en él, dado que en la €poca en la que transcurria la historia (aiio 1997), la Tierra sufria una grave sobrepoblacién humana. Un intento de sabotaje de la nave provocé que esta se desviase de su rumbo. En 1998 legé su adaptacion a la gran pantalla, dirigida por Stephen Hopkins y escrita por Akiva Goldsman, que incorporé algunos cambios significativos como, por ejemplo, la fecha en que suceden los acontecimientos (2058 en lugar de 1997). Ademas, incluy6 cier tos tributes a la produccion televisiva, asi como la participacién de algunos de sus protagonistas. El] género infantil también se ha adentrado en las profundida- des del espacio. Al calor de peliculas como Encuentros en. la ter cera fase (1977) y E.T. el extraterrestre (1982), ambas dirigidas por el genial Steven Spielberg, otros populares directores como EL SUENO DEL VIAJE INTERESTELAR ) Joe Dante también han abrazado el género espacial de ficcién con cintas como Exploradores, escrita por Erik Luke y estrena- da en el afio 1985, que cuenta la historia de tres muchachos que, a través de una serie de extrafios suefios, reciben las instruc- ciones para construir una nave espacial a partir de elementos domésticos, a la que bautizan con el nombre de Thunder Road («el camino del trueno»), en honor al titulo de una cancién de Bruce Springsteen. Tras varios ensayos previos, abandonan con ella nuesiro sistema solar para entrar en contacto con una raza alienigena, la cual ha aprendido nuestro lenguaje y costumbres a través de las ondas de radio que continuamente escapan de nuestro planeta hacia el espacio exterior. Un accidente durante un vuelo interestelar es el punto de parti- da dela pelicula Pitch Black, dirigida por David Twohy y basada en una historia escrita por Jim y Ken Wheat. Estrenado en 2004, el lar- gometraje se centra en Jas aventuras de los tripulantes de la nave mercante Hunter Gratzner que, rumbo al sistema solar Tangier, sufre el impacto de una luvia de particulas de origen cometario que dafian gravemente el fuselaje del vehiculo. Con cuarenta tripu- lantes a bordo en estado de hibernacién, la nave se ve obligada a hacer un aterrizaje de emergencia en un planeta desértico, situado en un sistema solar con tres estrellas. El astro, que se encuentra iluminado por los soles continuamente —salvo breves periodos de eclipse que tienen lugar cada veintidés afios—, esta poblado por una serie de animales voladores de extraordinaria agresividad, que amenazan con acabar con la vida de los supervivientes. Las misiones interestelares parecen estar viviendo un auge en el mundo del cine en la segunda década de! presente siglo. En 2009 se estrend la primera parte de una nueva Saga espacial, Avatar, escrita y dirigida por James Cameron, que se sitéa en el afio 2154, una época en la que escasean los recursos naturales en la Tierra y la humanidad se ve obligada a obtenerlos en otros cuerpos celestes, entre ellos Pandora, un planeta situado en el Sistema estelar de Alfa Centauri. Ademds de varias precuelas de la saga Alien, se han rodado otros largometrajes espaciales, como Interstellar, dirigida por Christopher Nolan, y Passengers, de Morten Tyldum. EL SUENO DEL VIAJE INTERESTELAR Interstellar, estrenada en 2014, est ambientada en un futuro en el que la Tierra sufre una gran crisis de recursos naturales, lo que obliga a un grupo de cientificos de la NASA a poner en mar. cha diversas misiones con destino a planetas extrasolares, con e] proposito de recopilar informacién sobre la habitabilidad de tales cuerpos celestes. Lejos de emplear sistemas de propulsion que podriamos considerar convencionales, las naves espaciales de In- terstellar viajan hasta sus planetas de destino a través de lo que se conoce como agujeros de gusano, dos puntos situados respec- tivamente en lugares remotos del espacio, y conectados a través de un agujero o puente producido en el continuo espacio-tiempo. Dos afios después del de Interstellar tuvo lugar el estreno de Passengers, basada en una historia escrita especificamente para la pelicula por Jon Spaiths, vinculado también al universo de Alien (es coguionista de Prometheus, una de las precuelas de la saga). Passengers cuenta la historia de una expedicion empren- dida por la nave Avalon, que transporta en estado de hibernacién a su tripulacién y a un pasaje integrado por mas de cinco mil colonos, con destino al planeta extrasolar Homestead I. El viaje, cuya duracién estimada es de 120 afios, sufre una incidencia, y dos de sus tripulantes despiertan de su letargo 90 afios antes de llegar a su destino. Con mas o menos acierto en los argumentos y en las tecno- logias expuestas, todos y cada uno de estos ejemplos ponen de manifiesto no solo el interés del ser humano por el espacio, sino también el anhelo por ampliar las fronteras del conocimiento y comprobar si nuestra especie, con el transcurso del tiempo y con la ciencia y la tecnologia como bases, es capaz de abando- nar los lazos que nos unen a nuestro sistema solar y adentrarse en lo mas profundo y desconocido del espacio, en busca de ho- gares potenciales para las generaciones venideras, una vez que las condiciones ambientales de nuestro planeta lo hagan com- pletamente inhabitable. EL SUENO DEL VIAJE INTERESTELAR Ree ESOL Sraitacemetse tamara acer ca aa REKED CAPITULO 2 past tld Lele rDELIALELELLETLLLILLEELOITILLELALELLULELSOELPEELEL AD OMLLELLLLELLLLED Planetas extrasolares Hasta donde somos capaces de observar, el universo es ilimitado, y esta poblado por miles de millones de galaxias. Solo en la Via Lactea, existen en torno a doscientos mil millones de soles, La légica nos dice que la posibilidad de que haya planetas orbitando otras estrellas es muy alta, pero la confirmaci6n de su existencia no llegé hasta la década de 1990. | = =a re a a Se RN eT ore ETE LTO ENS BEGET ESD AEB IIIT La mayoria de las novelas y buena parte de las producciones cine- matograficas que abordamos en el capitulo anterior vieron la luz mucho antes de que la ciencia pudiera confirmar si, efectivamen- te, existian otros planetas mas alla de nuestro sistema solar. En el afio 1992, los astrofisicos Aleksander Wolszezan y Dale Frail encontraron la respuesta, al detectar la presencia de tres exo- planetas, también denominados planetas extrasolares, orbitando una estrella de neutrones llamada PSR 1257+12. Este tipo de as- tros se caracteriza por tener un comportamiento pulsante, por lo que se conocen como pilsares. No parecia, en principio, el lugar en el que encontrar planetas extrasolares, dado que los pilsares generan un entorno espacial bastante agresivo, principalmente caracterizado por unas intensas emisiones de radiacién, letales para cualquier forma de vida conocida. Pero ;existirian planetas orbitando en torno a estrellas «normales»? La incognita no tardé mucho en despejarse. Tan solo tres afios después del hallazgo de Wolszczan y Frail, los astrofisicos de la Universidad de Ginebra (Suiza) Michel Mayor y Didier Queloz descubrieron ciertas anomalias en torno a5l Pegasi, una estrella perteneciente ala denominada secuencia principal, una clasifi- PLANETAS EXTRASOLARES eR cacién que engloba a la mayoria de estrellas que pueblan nuestra, galaxia, entre las que se incluye nuestro Sol, cuyo tamatio es ena. no en comparacién con las dimensiones de otros astros como lag gigantes rojas. Las anomalias detectadas por Mayor y Queloz Se debian, presumiblemente, ala presencia de un cuerpo de dimen. | siones planetarias orbitando aquella estrella. No obstante, la ciencia siempre precisa de la confirmacion de un hallazgo a través de fuentes adicionales, y esta vino dela mano de otro equipo de astrofisicos, liderados por Geoffrey Marcy y Paul Butler, cuyas observaciones realizadas desde el Observato- rio Lick (California, Estados Unidos) no dejaron lugar a dudas, Aquel planeta, que pasé a denominarse técnicamente 51 Pegasi b aunque popularmente se conoce come Dimidium, tiene aproxi- | madamente la mitad de la masa de Jupiter. Su periodo orbital, es decir, el tiempo que tarda en girar en torno a su estrella, es de tan solo cuatro dias, de lo que se infiere que este se encuentra ocho veces mas cerca de su sol de lo que Mercurio lo esta del nuestro, Desde su deteccién, el mimero de exoplanetas hallados se cuenta por miles, descubriéndose nuevos candidatos cada semana. LAS ESTRELLAS ILUMINAN EL CAMINO Dado su reducido tamafio y su excesiva distancia a la Tierra, la deteccién de planetas extrasolares se realiza, principalmente, mediante observacion indirecta, es decir, midiendo los efectos que el planeta provoca en su estrella matriz. Existen varias téc- nicas para hacerlo, entre ellas el estudio de la variacién de su brillo causada por el paso del planeta delante de ella, lo que se denomina téenica de transitos (figura 1). Otro de los métodos, conocido como técnica de velocidad radial, mide el «balanceo» que la estrella experimenta como consecuencia de la atraccién gravitatoria ejercida sobre ella por el planeta (figura 2). Sin embargo, el 13 de noviembre de 2008 pas6 a los anales de la historia de la astronomia por ser el dia en que se hizo publica la primera imagen de un exoplaneta obtenida mediante observacion directa y en el rango de la luz visible del espectro (véase la foto- i ] 1 PLANETAS EXTRASOLARES i Estrella Técnica de transitos para 'a deteccion de planetas extrasolares, a partir de la cual se determina la presencia de un planeta midiendo 1a pérdida periddica de brillo de su estrelia matriz, en los momentos en que aquel transita por delante de ella. FIG. 2 El planeta y su estrella matriz orbitan en torno a un centro de masa comin. Las lineas espectrales se mueven hacia e! azul mientras la estrella se aproxima a nosotras. Las lineas espectrales se mueven hacia e! rojo mientras la estrella Se aleja de nosotros. Elle Debido al efecto Doppler, mientras ta estrella se distancia de nosotros, las ondas de luz que emite se expanden, desplazandose hacia el rojo del espectro visible. Del mismo modo, mientras la estrella se acerca a nosotros, las ondas de luz emitidas por ella se comprimen, desplazancose hacia el azul del espectro. Técnica de velocidad radial. La fuerza gravitatoria ejercida por el planeta provoca pequerios movimientos en su estrella matriz. Debido al efecto Doppler, esos pequefios movimientos quedan reflejados en el espectro y pueden Ser detectados. PLANETAS EXTRASOLARES. 3t MAYOR, QUELGZ Y LOS NUEVOS MUNDOS DEL COSMOS Michel Mayor y Didier Queloz se hicieron mundialmente conocidos en la segunda mitaq de la década de 1990 por ser los descubridores del orimer planeta extrasolar en drbita alrede. | dor de una estrella similar a nuestro Sol; 51 Pegasi b. Este hallazgo los hizo merecedorag de un gran reconocimiento internacional, traducido en la concesién de diversos premios y j distinciones. Un veterano astrofisico Doctor en Astronomia, Michel Mayor nacié en la localidad suiza de Lausana, e! 12 de enerp de 1942. Su tesis doctoral estaba orientada a intentar establecer una relacién entre las pro- Piedades cineméaticas de las estrellas en las proximidades del sistema solar y la estructura espiral de nuestra galaxia, la Via Lactea. Entre 1971 y 1984, trabajé en el Departamento de Astronomia de la Universidad de Ginebra como investigador asociado, En 1988, la institucion te nombré profesor titular, cargo que desempend hasta su jubilacion en 2007, aunque desde antances sigue trabajando como profesor emérito, y levando a cabo estudios y descubrimien- tos sobre exoplanetas. Michel Mayor también ha realizado investigaciones en otras areas Como instrumentacion astronémica, estructuras galacticas y dinamica de los climulos estelares de disposicién globular, entre otras. Ademas, es coautor del libro titulado Los nuevos rnundos del cosmos (2001), una obra centrada en el descubrimiento y estudio de las exoplanetas. Un joven y prolifico descubridor de exoplanetas Didier Queloz nacié e} 23 de febrero de 1966, y es uno de fos astrofisicos que mas pla- netas extrasolares ha descubierto, realizando principalmente sus investigaciones en el Grupo de Astrofisica del Laboratorio Cavendish (Cambridge, Reino Unido) y en la Universidad de Ginebra. Durante su doctorado en esta ultima institucién en 19985, él y su director de te- sis, Michel Mayor, descubrieron el primer exoplaneta en torno a una estrella perteneciente ala secuencia principal. En un ejercicio para mejorar sus habilidades de calculo, Queloz realiz6 las medidas de la velocidad radia! de {a estrella 51 Pegasi, a partir de las cuales pudo determinar el periodo orbital de! planeta que giraba a su alrededor, que era de tan solo 4,2 dias. Entre las numerosas distinciones que le han sido concedidas se encuentra el ga- fardén Fronteras del Conocimiento, de la Fundacion BBVA, obtenido en 2011 y compartide con Michel Mayor. El hallazgo de 51 Pegasi b El descubrimiento del primer planeta extrasolar orbitando en torno a una estrella de la se cuencia principal supuso toda una revolucién cientifica. Este hallazgo no solo proporciond una nueva perspectiva al estudio del universo, sino que amplid considerablemente las po sibilidades de encontrar vida en otros mundos ajenos a nuestro sistema solar, Gracias 4 los esfuerzos de Mayor, Queloz y otros astronomos, hoy tenemos un concepto del cosmos sensiblemente diferente al que teniamos hace treinta anos. PLANETAS EXTRASOLARES SARTORI! a a los astrafisicos suizos Didier Queloz (izquierda) y Michel Mayor {derecha) posan ante uno de los telescopiog el Observatorio de La Silla, en Chile, en el afio 2010. Debajo, ilustracién de 51 Pegasi b y su estrella, PLANETAS EXTRASOLARES 33 COE grafia superior de la pagina 43). Captada por el telescopio Hubble, un ingenio fruto de la cooperacién entre la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA), en ella se apreciaba un cuerpo en drbitg alrededor de la estrella Fomalhaut, situada a veinticinco atios.y, de nuestro sistema solar, que fue bautizado como Fomalhaut b, La secuencia principal Si represent4semos todas las estrellas del firmamento en un dia- grama de Hertzsprung-Russell (figura 3), que relaciona la luminosi. | dad con la temperatura superficial, observariamos que la mayoria AG.3 Luminosidad (comparada con el Sol) Diagrama 108 Hertzsprung- Russell, que 10° clasifica los 7 ; diferentes tipos de estrellas en funcién de su temperatura | y Juminosidad. Enanas blaneas i is) AB Doradus C ie lietbtrelir ere lieememesiiermecnnet — eae \ ! 10000 6000 Temperatura de la superficie (°C) PLANETAS EXTRASOLARES se concentran en una banda bien definida y continua, llamada se- cuencia principal, A ella pertenece, entre otras, nuestro Sol. Ordenadas de mayor a menor en funcién de su espectro —re- Jacionado con su temperatura—, y basandose en la clasificacién Morgan-Keenan, la més empleada para la tipificacién estelar, existen siete tipos de estrellas, definidos por las letras O, B, A, F G, Ky M. Cada una lleva asignado un digito que indica su tem- peratura, del 0 (las mas calientes) al 9 (las mas frias). Asimismo, el rango de luminosidad, de mayor a menor, se representa con numeros romanos, el I corresponde a las mas brillantes y V alas mas débiles, perteneciendo estas tiltimas a la secuencia princi- pal. Nuestro Sol es una estrella de tipo G2V. Los parametros de las estrellas pertenecientes a la secuencia principal se recogen en la tabla siguiente, en la que se destacan los datos correspondientes al Sol, que se toma como referencia: ; Radio “| Masa | Luminasidad ' Temperatura ' | (Sol = 1,00) | Gol=1,00) | Gol=1,00) } (0) pean Ejemplos Theta 1 Orionis € Phi Orionis Pi Andromedae A Alpha Coronae Borealis A Clase estelar 18 40 §00000 | ~37700 iL 18 20000 ~ 29700 | zoo _| 65 800 ~ 16100 3,2 80 ~ 10500 21 20 ~ 8300 Beta Pictoris — 1,7 6 ~7000 Gamma Virginis ’ ~ 6200 Eta Arieti 1,3 =f ta Arietis 1,10 interestelares. A esta iniciativa le sucedié en septiembre de Clog el Proyecto Icarus, desarrollado en el marco de la BIS en co racion con la Tau Zero Foundation, bajo el liderazgo de Rig Obousy. Se trata, en lineas generales, de la continuidaq del Pry, yecto Daedalus, dado que sus objetivos son andlogos, Proy, Energia enfocada para internarse en el océano césmico Las iniciativas abordadas en paginas anteriores son tan comple. jas que su puesta en marcha es, por ahora, imposible, aungque técnicamente son viables. Sin embargo, existen proyectos que son factibles con la tecnologia disponible, y emplean algo tan comin y tan misterioso como la luz. Las velas solares emplean la radiacién solar como fuente pro- pulsora. El Sol emite un flujo continuo de fotones (luz solar) que, al impactar contra una gran superficie constituida de materia refiectante, provoca una presién sobre ella, produciéndose m efecto propulsivo (véanse las irdgenes de la pagina 73). Una presién continuada suministra, a una nave espacial dotada de una o varias velas solares, el empuje necesario para realizar en el espacio maniobras como rotacién y cambios de orientacién, que precisarian de una importante cantidad de combustible sise emplearan sistemas de propulsién convencionales, En misiones lejanas, como por ejemplo a otros sistemas solares, donde lar diacion luminica de nuestro Sol haria poco practica la utilizaciin de velas solares a partir de una determinada distancia, el flujo de fotones podria ser generado por la emisién de haces de Juz cor centrada (laser), cuyo efecto sobre las velas seria andlogo al pr ducido por la radiacién solar. El concepto de vela solar como sistema de propulsién espacial no es nuevo. En la década de 1970, Carl Sagan, Louis Friedmal y Bruce Murray elaboraron las primeras propuestas en las oficr nas del Laboratorio de Propulsién a Chorro, en Pasadena, Estados COMO LLEGAR A LAS ESTRELLAS? y- Entre otras, disefiaron una nave dotada de velas solares naga ala exploracion del cometa Halley durante su paso cer de Tierra en 1986, aunque nunca leg6 a volar. Sin embargo, ca. de la io de vela solar continud en estudio, y algunos proyectos el aac Ja mesa de disefio para convertirse en realidad. Tal es a, Ja japonesa IKAROS (de 196 m? de superficie), lanzada ol cast “las estadounidenses NanosailD (de 93m?) y LightSail 1 en? 9 we) lanzadas en 2008 y 2015, respectivamente. La tltima (de 3 oo ecto de The Planetary Society (Sociedad Planetaria), foe vd funded por Sagan, Friedman y Murray en 1980, lo que la enti virtié en la primera jniciativa privada de estas caracteristicas. con NASA y Ja Universidad de California iniciaron en el aiio ne el programa DEEP-IN (acrénimo, en inglés, de ). Esta ini- ciativa persigue el lanzamiento de naves espaciales a velocida- des relativistas (fracciones de la velocidad de la luz) y asi acor tar sensiblemente las misiones con destino mas alla de nuestro sisterma solar. Se trata de pequefias sondas no tripuladas de muy baja masa, lamadas popularmente wafer sats, «satélites barqui- lo», en alusién a la principal caracteristica de estos populares productos alimentarios: su ligereza. En esencia, son nanosondas que no superaran el gramo de peso. A pesar de sus reducidas dimensiones y masa, estaran dotadas de sistemas de comunica- cién, Optica y sensores diversos. Los ingenieros que trabajan en este proyecto creen que las velocidades que podran alcanzar es- tas nanosondas estardn proximas a 0,25 ¢ (siendo ¢ el simbolo de la velocidad de la luz), es decir, alrededor de 75000 kiw/s. Uno de los principales objetivos de estos ingenios roboticos sera probablemente el sistema solar de Proxima Centauri, en el que se ubica un planeta de tamafio similar a la Tierra. Como explicéba- mos en el segundo capitulo, y abordaremos con mayor detalle en el Dréximo, este sistema solar se encuentra a tan solo cuatro afios-luz de nosotros, por Jo que una nanosonda viajando a una velocidad de 0,25 c invertiria solamente dieciséis afios en llegar hasta él, y los datos obtenidos por ella aleanzarian la Tierra en un plazo de cuatro anos, Dadas las caracteristicas de distancia y tiempo de este pro- yecto, una sola nave tendria muchas probabilidades de sufrir al pnidos {COMO LLEGAR A LAS ESTRELLAS? La extension del espacio se convierte literalmente en un analogo del mar abierto. Si el espacio es el océano de mafiana, la superficie de la Tierra es su costa. 72 guna averia grave que truncara completamente la misi¢, motivo, ¢l DEEP-IN contempla el lanzamiento de yp a Por ee de nanosondas, al objeto de maximizar las probabili dade, te En abril de 2016, el filéntropo ruso Yuri Miner es Ue ii. programa Breakthrough Initiatives ( y restandosela a 1, obtenemos 0,9999999993. Aplicando la raiz cuadrada a dicho resulta- = do, {a cifra obtenida es de 0,9999999997, que se refiere a la duracién, en afios terrestres, de un afio en Orbita alrededor de nuestro planeta. En otras palabras, un afo en ef espacio es 0,0000000003 afios mas corto que en la Tierra, lo que equivale a 0,01 s. Teniendo en | cuenta que Kelly y Kornienko pasaron en el espacio 340 dias, ta dilatacién del tiempo en la 4 mision fue, en realidad, de 0,0088 s, j os A Et lhe BI eebie La dilata Apartir de quvo lugar gién matem Ldesaanlenes ae! 6] astronauta de la NASA Scott Kelly (izquierda) y el cosmonauta de ROSCOSMOS Mijai Kornienko, posan en una fotografia tomada antes de partir al espacio. {COMO LLEGAR A LAS ESTRELLAS? 7 | - 450 km de distancia de nuestro planeta provoca que lad temporal se reduzca, al existir un menor potencial gra “atacigy Naturalmente, el efecto se veria potenciado en Misiones tig desplazasen a fracciones de la velocidad de la luz, We g, UNA INICIATIVA DE UN SIGLO DE DURACION En el afio 2010, con el auspicio de la NASA y de jg Investigacion de Proyectos Avanzados de Defensa Unidos (DARPA, por sus siglas en inglés), se puso en Maret, el proyecto 100 Year Starship («Nave espacial del Siglo»), uy iniciativa de financiacién de un afio de duracién destinada ah creacién de un plan empresarial cuyo desarrollo podria englo. bar a varias generaciones y extenderse durante cien afios, con a proposito de fomentar la investigacion cientifica y tecnoldgica que permita el desarrollo de los vuelos interestelares. La Dorothy Jemison Foundation for Excellence (Fundaciiy Dorothy Jemison para la Excelencia), dirigida por Mae Jemison, cientifica que en 1992 se convirtié en la primera mujer afro tadounidense en volar al espacio, fue la entidad que obtuvok financiacién, en asociaci6n con otras dos organizaciones, Ice rus Interstellar y Foundation for Enterprise Development. Ac tualmente en solitario, la Jemison Foundation prosigue con esta iniciativa, conservando la denominacién 100 Year Starship. Este proyecto persigue varios objetivos. En primer lugar, el desartt- Uo de infraestructuras que permitan dar el salto hacia las este Has, como la creacién de tecnologias revolucionarias de caracter no quimico para generar, controlar y almacenar enormes catt- dades de energfa de forma segura. Ademés, también se impul# el disefio y construccién de sistemas avanzados de soporte vita que permitan la fabricacién de habitats auténomos para su utlk zacion en el espacio y en otros cuerpos celestes. Por dltimo, otf objetivo basico del proyecto es la implementacion de sistem robéticos basados en inteligencia artificial, partiendo de la be de que el desafio de viajar a otros sistemas planetarios pod & nerar actividades transformativas, nuevos conocimientos ¥ Agencig tk de Estadg, éCOMO LLEGAR A LAS ESTRELLAS? vas que Te dundarén positivamente en la sociedad mundial, nologe® orto como a largo plazo. tanto 3 de fomentar el interés y la colaboracién en los 4mbitos A fin alitico, econémico y cientifico, la iniciativa 100. Year social, y elebra simposios periddicos en los que representantes Stats eevidod sectores presentan los resultados de investiga- de los F astudios que sirvan de base para la puesta en marcha de ciones y humanas interestelares en el futuro. misiones yectos encaminados a enviar a seres humanos mas all4 cae sistema solar se encuentran, atin, en una fase muy incipiente. Se requerira de décadas, e incluso de siglos, para esta- plecer las infraestructuras necesarias que permitan materializar jaambiciosa empresa de dar el salto a otras estrellas, 4COMO LLEGAR A LAS ESTRELLAS? — 05 piTul e persed Teel tients Eade yh wee La eleccién de un destino VOLE OLA LLL LELETENEE ENA bends dra a resp hip Una vez desvelados los misterios que atesora el medio interestelar, y desarrolladas las capacidades reales de propulsién avanzada, nuestra especie debera elaborar un mapa que identifique todos y cada uno de los mundos extrasolares considerados candidatos para la migraci6n humana. El estudio e identificacin de los planetas extrasolares es un cam- po, dentro de la astronomia, que atin se encuentra en ciernes. Tan solo han pasado algo mas de dos décadas desde que fuera descu- bierto el primer planeta en 6rbita alrededor de una estrella perte- neciente a la secuencia principal. Aunque hoy en dia los planetas ajenos a nuestro sistema solar detectados se cuentan por miles, las limitaciones que impone la tecnologia no nos permiten, por aho- ta, conocer con detalle las caracteristicas de aquellos exoplanetas que, a priori, consideramos habitables y que, por los motivos ex- puestos en el segundo capitulo, podrian perfectamente no serlo. La eleccién de un destino extrasolar para el envio de seres humanos depende, Pprincipalmente, de tres factores. El primero de ellos €s, como es obvio, la proximidad a la Tierra del planeta £n cuestion. Huelga decir que cuanto més cerca se encuentre, la infraestructura necesaria para el viaje sera mas simple —dentro dela complejidad que entrafia un vuelo extrasolar—, la duracién ee serd menor y las probabilidades de que tengan lugar se tear alo largo del trayecto disminuyen sensiblemente. El del pt a, de los factores lo constituyen las caracteristicas fisicas eta, como su gravedad, atmosfera y potencial de habi- LA ELECCION DE UN DESTINO ae ee te tabilidad. El tercer factor esta estrechamente relacion, el segundo, y se centra en la susceptibilidad del Dlaneta, coy terraformado. La terraformacion es la capacidad de ‘tts i. te en la atmésfera de un cuerpo celeste, ya sea planeta 4 el objetivo de transformarla y hacerla habitable para Iog orp oom mos terrestres, desde los mas simples a los mas complejgs ; cluyendo a los seres humanos. De este modo se pregcin ie q in, infraestructuras destinadas al soporte vital. Cualquier planeta satélite extrasolar considerado candidato deberd ser suscepti, de ser terraformado en caso de que fuera necesario, circtnste, cia mas que probable, dado que las posibilidades de encontry un planeta «gemelo» a la Tierra en propiedades y en atmésfen son infinitamente remotas. Obviamente, este proceso depends 14 de las facultades que nuestra especie haya adquirido, con ¢ transcurso de los afios, en las técnicas de terraformacién. BUSQUEDA DE OTROS HOGARES CELESTES Con la informacion disponible en la actualidad, existen algunos planetas que, en principio, pueden considerarse candidatos a ser colonizados por tener una masa similar a la de la Tierra, ser dena turaleza rocosa y encontrarse orbitando en la zona habitable gene rada por su estrella matriz. Algunos de ellos ya los abordamos en el segundo capitulo, pero en las paginas siguientes los trataremos con mayor detalle. Proxima h: el exoplaneta mas cercano a nosotros El exoplaneta mas proximo a la Tierra se encuentra en la const lacion de Centaurus (el Centauro), y se conoce como Préxim o Alfa Centauri Cb. Su descubrimiento fue anunciado en 2508? de 2016 por un equipo de cientificos del Observatorio Europ? Austral (ESO) liderado por el astrofisico Guillem Anglada- Bs" dé, y se realiz6 mediante la técnica de medicién de la velo“ radial de su estrella matriz, Proxima Centauri, una estrella © UAELECCION DE UN DESTINO ipo M. gituada a tan solo 4,22 afios-luz de distancia de ig de a solar (figura 1), lo que convierte a Proxima b en nu = 5 primeros planetas candidatos a ser explorados me- de envio de sondas rob6ticas, inte es, proximadamente, 1,3 veces superior a la de la Su m. ja distancia a su estrella matriz es de 0,05 UA (unos 7,5 Tiert®, y ae kil6metros), circunstancia que hace que su periodo eal muy breve, de 11,2 dias. ofbil 6n que llega desde su estrella es eminentemente in- La radiaci frarroja, PO lo que el planeta goza tan solo de un 2% de la lumi- nosidad que Ja Tierra recibe del Sol. Dada la proximidad a su es- JJa matriz, Préxima b se encuentra expuesto a una radiacién en tre! 5 rayos X cuatrocientas veces superior ala recibida la franja de lo: : por la Tierra, POF lo que el planeta parece, a primera vista, poco Ubicacion a Slexoplaneta ek Si ; ;

También podría gustarte