Sayago - 2010 CC y Amenazas Ambientales AMTucuman
Sayago - 2010 CC y Amenazas Ambientales AMTucuman
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Instituto de Geosciencias y Medio Ambiente (INGEMA). Universidad Nacional de Tucumán. E-mail: [email protected]
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CONICET
RESUMEN
La variabilidad espacial y temporal de los efectos del calentamiento global aconseja aplicar la perspectiva regional en la pre-
dicción de sus impactos sobre el paisaje natural y las comunidades. En este trabajo se presenta una aproximación metodo-
lógica preliminar, cuyos fundamentos son: a) la reconstrucción paleoclimática regional y la determinación de escenarios ex-
tremos de cambio climático; b) la evaluación de amenazas ambientales generadas en cada escenario; c) el desarrollo de pla-
nes de alerta temprana y prevención de riesgos. Mediante la reconstrucción paleoclimática regional en tres escalas tempo-
rales (centenal, milenaria y el Holoceno) se identificaron dos escenarios extremos de cambio climático (húmedo y seco). La
perioricidad de ENSO (El Niño/La Niña) en la región, sumado a la influencia de los cambios paleoclimáticos de los últi-
mos milenios en la dinámica ocupacional de las comunidades agroalfareras permitio una aproximación a los posibles im-
pactos futuros. Se dividió el área metropolitana de Tucumán en unidades de relieve, subdivididas en unidades menores se-
gún el uso del suelo (urbano, suburbano y rural). En cada escenario de cambio climático, unidad de relieve y uso del suelo
se evaluaron las principales amenazas generadas por los extremos de variabilidad climática. Para cada amenaza ambiental,
es posible desarrollar planes alerta temprana, protección o mitigación. Esta primera aproximación espacial podrá ser me-
jorada cuando la complejidad de la información colectada permita una valoración cuantitativa, a mayor escala, mediante in-
formación satelitaria y los sistemas de información geográfica.
Palabras clave: Cambio Climático, escenario seco y húmedo, riesgos geoambientales, alerta temprana, mitigación.
ABSTRACT: Climate change and environmental hazard at the Metropolitan Area of Tucumán. The present paper discusses the type and
intensity of environmental hazards affecting the urban conglomerate of Greater San Miguel de Tucumán in the presence of
future climatic changes. The steps required for making regional predictions as regards their impact on superficial geodynamics
are described on the basis of the poor reliability of global models and on the marked spatial variability influencing natural or
anthropized landscape. The significance of paleoclimatic reconstructions is stressed as an expression of the prevalent regio-
nal environmental conditions in the past, free of anthropogenic influence. The data is analyzed at three levels of temporal re-
solution (the last decades, the last millennium, and the Holocene period). The first level discusses inter-annual variability and
“El Niño-La Niña” Southern Oscillation effects on the generation of morphodynamic processes negatively affecting the me-
tropolitan area of Tucumán. The millenarian climatic variability analysis stresses the environmental changes influencing regio-
nal agro-pottery cultures and the extreme humid-arid climatic conditions during the Holocene period associated to paleoeda-
phic development and loess deposition. Consequently, two potential scenarios for climatic change are described, characteri-
zed by definitely more humid conditions or by marked aridity. The metropolitan area was divided into seven geo-morpholo-
gical units. Matrices were elaborated so as to perform qualitative assessment of the potential intensity of each environmental
hazard on every extreme scenario for climatic change and under different conditions of soil-use (urban, suburban, and rural).
In brief, this proposal constitutes a preliminary approximation to the characterization of the future effects of climatic chan-
ge with the purpose of contributing to the development of early alert, prevention, and/or mitigation programs.
Keywords: Climatic change, dry and wet scenario, geoenvironmental hazard, early alert, mitigation.
América del Sur, el crecimiento demográ- 1998). En el área cumbral y laderas de la torrenciales provenientes de las áreas
fico se intensificó durante las últimas dé- sierra se ubican edificaciones residencia- más elevadas situadas el Oeste y Norte.
cadas (Fig. 1) motivado en gran medida les, generalmente afectadas por procesos El valle fluvial del Río Salí (Unidad F)
por la crisis de la actividad rural, provo- de remoción en masa, facilitadas por las presenta moderado riesgo de inundación
cando la migración de los campesinos ha- precipitaciones estivales y la inestabilidad fluvial debido a la existencia de un embal-
cia las grandes ciudades (Laymont 2006). del sustrato loésico. El piedemonte de se (El Cadillal) situado 10 km aguas arri-
Este explosivo crecimiento urbano se este cordón (Unidad B), está constituído ba, aunque durante periodos de intensas
manifesta en una serie de riesgos ambien- por un relieve de cuesta desarrollado so- precipitaciones se inunda la terraza baja,
tales y sociales (inundación, contamina- bre un sustrato terciario adosado al basa- generalmente ocupada por viviendas pre-
ción hídrica, sequías, polución atmosféri- mento precámbrico, cuya cubierta clásti- carias pertenecientes a los estratos socia-
ca, pobreza, etc.) facilitado por la insufi- ca holocénica permite adjudicarle el ca- les más pobres. En la margen izquierda
ciente planificación urbanística y la crisis rácter de glacis cubierto, siguiendo la ter- del río Salí (Unidad G) se extiende un
económica que afectó a la Argentina en minología europea. Numerosas edifica- conglomerado urbano relativamente po-
la década del 90. A los riesgos ambienta- ciones residenciales, susceptibles a la re- bre, llamado Banda del Río del Salí, des-
les propios del espacio urbano, se suman moción en masa y a un moderado riesgo arrollado sobre la llanura chaqueña occi-
aquellos originados en las áreas de relieve sísmico, cubren un relieve colineado cu- dental constituída por un sustrato loésico
montañoso que rodean a Tucumán por el bierto parcialmente por el bosque sub- sobre la cual ha migrado el río Salí duran-
Oeste y Norte (Fig. 1), primitivamente tropical. El piedemonte se prolonga ha- te el Holoceno medio y superior. Los
cubiertas por el bosque nublado subtro- cia el Este con el carácter de una llanura principales riesgos geoambientales son la
pical y en la actualidad afectada por la de- suavemente inclinada (menor 5%) co- inundación fluvial y pluvial y la contami-
forestación y la urbanización incontrola- rrespondiente a un glacis de erosión nación de las aguas superficiales y subte-
da. Este cuadro de pobre calidad de vida, (subdividido en proximal y distal) des- rráneas producidos por los efluentes do-
posiblemente se agravará frente a la pers- arrollado sobre los sedimentos loésicos mésticos, industriales y agrícolas.
pectiva de los futuros cambios climáticos de edad pleistocena tardía y holocena
globales, que afectarán con mayor inten- (Unidad C), sobre el cual durante los úl- LOS CAMBIOS CLIMÁTICOS
sidad a los estratos sociales más pobres, timos 20 años se ha producido la expan- GLOBALES
especialmente vulnerables a los riesgos sión urbana de mayor nivel económico, a
geoambientales. expensas de terrenos antaño cultivados Los cambios climáticos producto del lla-
con caña de azúcar o citrus. Por carecer mado efecto invernadero constituyen uno
El marco geomorfológico de drenajes adecuados, durante las fuer- de los acontecimientos más traumáticos en
El área metropolitana de Tucumán se ha tes lluvias de verano este sector es afecta- la historia de la especie humana. El conti-
desarrollado en la transición entre dos do por anegamiento o inundación plu- nuo incremento del volumen del dióxido
grandes espacios geográficos, la llanura vial. El centro urbano de San Miguel de de carbono atmosférico, metano, óxido ni-
chaqueña occidental (integrante del Gran Tucumán (Unidad D) ocupa la parte dis- troso y clorofluorocarbonos, producto de
Chaco sudamericano) y los cordones pre- tal del piedemonte de las Sierras del la actividad industrial, la deforestación o
andinos del noroeste Argentino. La sierra Oeste y la margen derecha del valle del los incendios forestales entre otras causas,
de San Javier situada al oeste (Unidad A), río Salí. Con un relieve plano a suave- ha iniciado un proceso de calentamiento
cubierta por el bosque nublado de Las mente inclinado hacia el sureste, los ma- global que puede alcanzar en las próximas
Yungas, constituye el area generadora de yores riesgos ambientales están represen- décadas entre un 1,5ºC y 6,5ºC, con una
numerosos rios de régimen torrencial, tados por limitaciones geotécnicas deri- duplicación del contenido de CO2 en la at-
cuyos derrames estivales afectan a las ciu- vadas de la presencia del sustrato loésico, mósfera (Panel Intergubernamental de
dades situadas en el piedemonte (Fig. 1). sumado a la inundación pluvial (anega- Cambio Climá-tico, IGPCC 2007). En sín-
Este cordón constituye la prolongación miento) en los distritos de bajo nivel eco- tesis, los hechos que objetivamente prue-
boreal de las Sierras Pampeanas, reflejan- nómico, situados al Sur. Hacia el Norte, ban el inevitable incremento del calenta-
do en su morfoestructura de plataforma, sobre un relieve colineado cuyo sustrato miento global (si los países industrializados
el típico estilo tectónico pampeano (mar- terciario truncado corresponde a un anti- no reducen drásticamente las emisiones de
cadas pendientes al oeste, una suave pen- guo nivel de glacis (Unidad E) se han gases de invernadero), son entre otros: a)
diente de reverso al Este y una superficie desarrollado barriadas de clase media Aumento en la temperatura global de
cumbral aplanada). La porción norte de baja que alternan con espacios rurales, re- 0,6ºC durante la última centuria (IGPCC
la sierra pasa transicionalmente hacia un manentes de las antiguas áreas de cultivos 2007); b) Retroceso general de los glacia-
estilo de plegamiento característico del citrícolas y de caña de azucar, cuyos prin- res de montaña y clara deglaciación de
ambiente subandino (Mon y Mansilla cipales riesgos ambientales son los flujos los hielos polares; c) Significativo impac-
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to del calentamiento global en poblacio- pobre resolución espacial de estos mode- tiempo” (Global Environmental Change
nes de plantas y animales, lo que podría los, muestran la necesidad de prediccio- 1999.). Ello explicaría la importancia cre-
provocar cambios en las comunidades y nes a nivel regional. Así, la gran variabili- ciente de las reconstrucciones paleocli-
posiblemente extinciones (Root et al. 2003); dad climática del territorio argentino, ex- máticas como expresión de condiciones
d) Las temperaturas de la última centuria tendido entre latitudes tropicales y sub- ambientales que dominaron en el pasado
fueron las más elevadas dentro del último polares, exige un análisis regional de los en la región, con nulas o débiles influen-
milenio (Crowley y Lowery 2000); e) Los futuros cambios y, especialmente, de sus cias antropogénicas, permitiendo recrear
registros de temperaturas geotérmicas efectos sobre el paisaje natural y los cen- los ritmos y ciclos naturales del clima. En
globales de los últimos 500 años, recons- tros urbanos. Por caso, en la fachada sub- tal sentido, el más destacable y serio efec-
truidas a partir de perforaciones en la tropical húmeda de los cordones prean- to a largo plazo del cambio climático, no
corteza terrestre, se incrementaron dra- dinos y la llanura chaqueña occidental en se ve reflejado por los cambios en los
máticamente durante la última centuria el noroeste, un aumento de lluvias impli- promedios de temperatura y precipita-
(Huang et al. 2000); f) El nivel actual de caría un crecimiento de los riesgos de in- cion, sino en eventos extremos como
gases de invernadero, es el máximo regis- undación, remoción en masa y elevación tormentas, sequías, olas de calor, inunda-
trado en el Polo Norte en los últimos de las napas subterráneas, mientras que ciones, incendios (Delmónaco et al. 1999).
200.000 años (Crutzen y Golitsyn 1992) y una disminución pluvial tendría conse- A su vez, los científicos sociales han ex-
en los últimos 800.000 años en el Polo cuencias en la disponibilidad de agua plorado los impactos de la variabilidad
Sur (EPICA, 2004, Loulerge et al. 2008, para consumo e irrigación, aumento de la climatica en los registros históricos y ar-
Lüthi et al. 2008). polución atmosférica e incremento de queológicos y la influencia humana en la
tormentas de gran energía y corta dura- modificación de los ecosistemas terres-
Las predicciones sobre los cambios ción, entre muchos otros efectos. El pro- tres (Global Environmental Change 1999).
climáticos futuros blema se vuelve más complejo en las áre-
Las actuales predicciones sobre cambios as urbanas donde la relación infiltración- LOS CAMBIOS CLIMÁTICOS
globales de temperatura y precipitación, escorrentía ha sido completamente mo- DEL PASADO EN LA
efectuados por los centros de investiga- dificada por los cambios artificiales de las REGIÓN TUCUMANA
ción de mayor prestigio, se basan en ge- primitivas líneas de avenamiento (segado,
neral en modelos de simulación combi- modificación y desvío de cauces, cons- La region tucumana se caracteriza por
nados con las actuales observaciones cli- trucción de canales, etc.), sumado a la im- una marcada variabilidad interanual en el
máticas. Al respecto, las predicciones re- permeabilización de extensas áreas y la régimen pluvial como se observa en la fi-
lativas al incremento de temperatura glo- elevación de napas por infiltración de gura 2. Durante las tres últimas décadas
bal con una duplicación de las emisiones efluentes domésticos. En suma, la pre- del siglo XX un aumento del 30% en las
de CO2 muestran un cuasi lineal creci- dicción de los efectos de los cambios cli- lluvias, transformó la llanura oriental tu-
miento anual de aproximadamente un máticos sobre la geodinámica superficial cumana -anteriormente cubierta por el
1% que alcanzaría en este siglo entre 1,5 a nivel regional, constituyen una infor- bosque chaqueño occidental- en un area
y 6,5ºC (PICC 2007) lo cual asigna a las mación esencial para establecer progra- de intensa actividad agrícola. Las conse-
predicciones un carácter marcadamente mas de contingencia que contribuyan cuencias de este abrupto cambio en el
aleatorio de cara al futuro. Teniendo en prevenir o atenuar los efectos negativos uso de la tierra, en suelos con limitada
cuenta que como expresa Pierrehumbert de tales cambios. aptitud para la agricultura, fueron un pro-
(2002), el clima es un pas des deux entre el gresivo deterioro de sus características fí-
Dióxido de Carbono y el agua, los cam- El pasado como clave del futuro sicas, químicas y biológicas (Bergsma y
bios espaciales en la distribución de la A la pobre resolución temporal y espacial Neder 2006), que aunque enmascarado
precipitación (pluvial y nival) derivados de los modelos predictivos globales, se en parte por el intensivo uso de agroquí-
del calentamiento global, constituyen suman las limitaciones derivadas de los micos, se enfrentan en el corto a media-
uno de los problemas más complejos a registros instrumentales modernos que no plazo a un futuro productivo no sus-
resolver. Los modelos más confiables ex- cubren una centuria o menos, lo cual res- tentable. Adicionalmente, la población
presan en síntesis que habrá un fuerte in- tringe la comprensión de la variabilidad rural que habitaba desde epocas inme-
cremento de precipitación cerca del climatica regional al mezclar respuestas moriales el bosque chaqueño, ocupa ac-
Ecuador, alguna reducción en las regio- naturales y antropogénicas. “Solo la vi- tualmente el cinturón de villas de emer-
nes de subsidencia subtropical y un con- sión del pasado permite reconocer y en- gencia en las grandes ciudades de la re-
sistente incremento en las latitudes me- tender que el cambio climático es el efec- gión. El citado incremento pluvial se tra-
dias (Allen e Ingram 2002). Tanto la mar- to acumulado de mecanismos causales dujo tambien en la intensificación de los
cada generalización temporal como la que operan en cortas y largas escala de procesos de erosión y remoción en masa
548 J. M . S AYAG O, M . M . C O L L A N T E S, L . D E L V. N E D E R Y J. BU S N E L L I
Figura 2: Variabilidad
interanual en el régimen
pluvial de la región tucu-
mana (tomado de Busnelli
et al. 2006).
en los valles de altura y el piedemonte de ruana-ecuatoriana y otros lugares del pla- laridades regionales de este fenómeno. Por
los cordones de Aconquija y Cumbres neta e intensas sequías en el Pacífico occi- caso, durante el último gran El Niño
Calchaquíes, incrementando la torrencia- dental, afectando también a extensas regio- (1997/98) una grave sequía afecto severa-
lidad y el transporte de sedimentos, pro- nes de sudamérica (Daw-son y O’Hare mente la producción agropecuaria del nor-
duciendo sedimentación en los cauces y 2000). Durante la fase La Niña se produce, oeste, mientras por el contrario La Niña
embalses de la llanura tucumana, la eleva- por el contrario, un generalizado enfria- (1999/2000) se caracterízo por lluvias de
ción de la napa freática y la salinización miento del Pacífico Ecuatorial con refor- extraordinaria intensidad que afectaron a
de los suelos en la llanura deprimida, a lo zamiento de la circulación anticiclónica, los principales centros urbanos, destruyen-
cual se sumo el generalizado incremento provocando sequías sobre la costa sud- do la infraestructura vial y afectando seve-
del riesgo de inundación estacional por americana e intensas lluvias en Australia e ramente la producción agrícola.
elevación de las llanuras de inundación Indonesia. Contrario sensu a lo que ocurre en
(Sayago y Toledo 2000). el litoral sudamericano, durante la fase El Cambio climático y ocupaciones hu-
Niño el noroeste argentino presenta con- manas en los últimos milenios
El Niño Southern Oscilation (ENSO) diciones de sequía, mientras que durante la La historia de las ocupaciones humanas
Uno de los avances importantes en la pre- fase fría La Ñiña, coincide con un aumen- durante el Holoceno Superior destaca dos
dicción de fenómenos climáticos con una to de las precipitaciones en muchos casos periodos cuyas condiciones climáticas
antelación significativa, es el alcanzado con de inusual intensidad. Esta inversion en el afectaron positiva y negativamente a las
el fenómeno ENSO (El Niño Southern comportamiento de ENSO justifica tam- ocupaciones humanas. Desde aproxima-
Oscilation). Este fenómeno climático que bien la necesidad de un marco regional en damente 3000 AP se inicia en la región un
afecta irregularmente (con intervalos de 3- la valoración de fenómenos como El Niño periodo húmedo que coincide aproxima-
7 años) al Océano Pacífico Ecuatorial y Southern Oscilation que constituye uno de damente con la expansión de las culturas
produce marcadas perturbaciones en el cli- los pocos sistemas climáticos con capaci- agroalfareras durante el llamado Período
ma global, aparece como uno de los siste- dad predictiva confiable. En efecto, me- Formativo. En los valles áridos de
mas climáticos más sensibles al calenta- diante un sistema de monitoreo (ENSO Hualfín, el Bolsón y Santa María, (actual-
miento global. Producto de la atenuación Observing System) es posible controlar en mente inaptos para la agricultura por limi-
de los vientos alisios sobre el Pacífico tiempo real numerosos parámetros climá- taciones hídricas y térmicas) y en los valles
Ecuatorial y el consecuente reflujo y calen- ticos y oceánicos, permitiendo monitorear de altura de Tafí, Las Estancias y Ambato,
tamiento de las aguas oceánicas en el la temperatura oceánica y predecir el com- se destaca la aparición de un grupo de cul-
Pacífico oriental. El Niño provoca abun- portamiento del clima con meses de ante- turas caracterizadas por el excelente ma-
dantes precipitaciones sobre la costa pe- lación, a condición de conocer las particu- nejo de suelo y agua y una importante pro-
Amenazas ambientales en el área metropolitana Tucumán… 549
paleoclimatica regional y la determina- lidad climática regional y la evaluación de gen natural, aunque potenciados por la
ción de escenarios extremos de cambio sus impactos negativos biofísicos o so- acción antrópica en el último milenio y
climático; b) la evaluación de amenazas cioeconómicos, permitiría elaborar pro- que han actuado sobre las ocupaciones
geoambientales que se generen en cada gramas de contingencia, de alerta tempra- humanas, infraestructuras o directamente
escenario; c) el desarrollo de planes de na y acciones de prevención o mitigación. sobre las personas. En el presente traba-
alerta temprana y prevención de riesgos. jo se considera amenaza geoambiental
Desde que las tendencias climáticas futu- Evaluación de amenazas ambientales todo proceso natural que, potenciado por
ras son un tópico de difícil evaluación de- Los procesos generados por los climas la influencia antrópica, pueda generar
bido a la complejidad del sistema terrestre del pasado (cercano y lejano), desde efectos perjudiciales traducidos en pérdi-
y el gran número de variables que influ- eventos de fuerte impacto social y econó- das humanas, económicas o naturales y
yen sobre la circulación atmosférica y mico como los detectados en las últimas cuya valoración es posible mediante me-
oceánica, la determinación en una región décadas en la región, hasta fenómenos de todologías científicas o criterios empíri-
de eventos climáticos extremos en el pa- carácter catastrófico (que en el pasado cos. En esta primera etapa de nuestra
sado -cuyos efectos impactaron negativa- provocaron la migración de comunidades aproximación metodológica, los concep-
mente sobre los seres humanos y el paisa- humanas o produjeron la extinción de tos de riesgo y vulnerabilidad, no se con-
je natural- permitiría la definición de po- una mega fauna a principios del sideran debido a la variedad de procesos
sibles escenarios futuros de cambio cli- Holoceno), reflejan los posibles extre- involucrados y la complejidad de las si-
mático (Delmonaco et al. 1999). Así, el mos de variabilidad climática regional. tuaciones sociales y económicas del área
conocimiento de los extremos de variabi- Los procesos que se analizan son de ori- metropolitana. Sin embargo, en la valora-
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una amenaza el componente antropogé-
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Aumento polución atmosférica por
nico esta siempre presente. Por caso, en mayor nubosidad
la valoración del peligro de contamina-
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ción hídrica en un sistema fluvial es igual-
Aumento área con freática arsenical
mente importante el tipo y recurrencia de
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la fuente contaminante como la influen-
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cia del clima en la descarga y la perioci- Aumento contaminación hídrica por
basurales
dad del muestreo. Considerando que la
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unidad geomorfológica constituye el ele-
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Aumento erosion hídirca
mento o unidad básica para la clasifica-
ción y valoración del paisaje natural
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(Sayago 1982), se dividió la superficie Aumento efluentes industriales
ocupada por el conglomerado urbano del
Gran San Miguel de Tucumán en siete
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Aumento contaminación ríos y canales
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unidades de relieve (Fig. 1). Las clases de por efluentes domiciliarios
uso del suelo urbano (urbano, suburbano
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y rural) constituyen subunidades dentro
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de cada unidad geomorfológica. La clase Subsidencia edilicia por
elevación de napas
de uso urbano está constituída por unida-
des o sectores en los que entre el 90 al 70
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Contaminación aguas subterráneas por
por ciento del terreno esta cubierto por efluentes domiciliarios
construcciones habitacionales o infraes-
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tructura vial o ferroviaria y el resto por
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espacios verdes. En la clase suburbana se Elevación napa freática
consideran los terrenos constituídos en-
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tre el 70 y hasta 20 % de construcciones
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Aumento inundación pluvial
e infraestructura y el resto terrenos no (anegamiento)
urbanizados, espacios verdes o rurales.
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Finalmente, el uso del suelo rural incluye Aumento remoción en masa
los terrenos constituidos por entre 20 y
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rrenos no urbanizados, zonas de recrea- Aumento erosion lateral de cauce
ción, áreas protegidas, áreas naturales y
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Destrucción infraestructura urbana por
cambio climático se construyeron matri- inundación pluvial
ces (Cuadros 1 y 2), valorando en cada
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Intensidad Amenaza
4. Muy alto
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disecado
disecado
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Migración de población rural a ciudades de efectuar cuantificaciones más precisas,
en base a métodos y técnicas conocidas.
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Aumento de incendios
Así, la sectorización espacial dada por las
unidades geomorfológicas (Fig. 1) consti-
Sub. 1-2
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tuye el primer nivel de percepción del fe-
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Incremento de heladas nómeno, que podria cambiar cuando la in-
formación disponible presente un mayor
grado de complejidad o detalle. El ambi-
Sub. 2-3
Sub. 2-3
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Aumento remoción en masa por
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desecación de taludesIncremento de heladas to de su aplicación puede variar desde una
gran región como la llanura chaqueña oc-
cidental, una cuenca fluvial, un gran aglo-
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Aumento subsidencia terreno por
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merado urbano o una pequeña población,
depresión napa freática
ubicados ya sea en la región subtropical
húmeda, los valles aridos o el altiplano pu-
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Aumento tormentas de polvo neño del noroeste argentino.
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Planes de alerta temprana y mitigación
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Aumento erosión eólica La identificación y valoración de riesgos
posibles determina la necesidad de elabo-
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rar planes de protección o mitigación que
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Aumento enfermedades pulmonares
deberían surgir de la colaboración entre
científicos, tecnólogos de las agencias gu-
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Aumento polución atmosférica bernamentales y la comunidad. El plan
de mitigación para cada escenario y cada
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Aumento contaminación aguas dos cada vez más como los lideres para el
superficiales y freática desarrollo de una capacidad regional, na-
cional y multinacional para alertar antici-
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G. Planicie fluvio-eólica
4. Muy alto
Rur. Rural
disecado
disecado
1. Bajo
3. Alto
chos otros) los siguientes: programas de contingencia destinados a del Valle, Provincia de Tucumán,
- Modelos de simulación sobre diferentes prevenir o atenuar las graves consecuen- Argentina. Tesis Doctoral, Facultad de
niveles de inundación en cuencas fluviales, cias que los mismos podrían ocasionar. Ciencias Naturales e I.M.L., Universi-
como base para identificar las areas más dad Nacional de Salta, (inédito), 220 p.,
necesitadas de acciones de prevención. AGRADECIMIENTOS Salta.
- Programas de alerta incluyendo sistemas Crowley, T.J. y Lowery, T.S. 2000. How
de alarma y aviso, preparación de la pobla- El presente trabajo ha sido desarrollado warm was the medieval warm period?
ción para la emergencia e identificación de en el marco del Proyecto PICTO 884, fi- Ambio 29(1): 51-54.
puntos de acogida más favorables. nanciado por la Agencia Nacional de Crutzen, P.J. y Golitsyn, G.S. 1992.
- Identificación de puntos susceptibles Promoción Científica y Tecnológica. Linkages between global warming,
para la provición agua para consumo hu- ozone depletion, acid deposition and
mano y/o riego, en situación de extremo TRABAJOS CITADOS EN EL TEXTO other aspects of global environmental
estress hídrico. change. En Mintzer, I.M. (ed.)
- Elaboración de alternativas de manejo Allen, M.R. e Ingram, W.J. 2002. Cons- Confronting Climate Change. Risk,
agrosilvopastoril ante situaciones de ex- traints on future changes in climate Implications and Responses, Chapter
tremada sequía o excesiva precipitación. and the hydrologic cycle. Nature 419: 2: 15-32. Cambridge University Press.
- Programas de alerta y salvataje en casos 224-232. Dawson, A.G. y O’Hare, G. 2000. Ocean-
de incendio producto de la sequía. Berberian, E.E., Nielsen, A.E., Arguello Atmosphere Circulation and Global
- Programas sanitarios para la prevención de Dorsch, E., Bixio, B., Spalletti, L.A., Climate. Geographie 85(3): 193-208.
de epidemias o control de enfermedades Salazar, J.A. y Pillado, E.L. 1988. Delmonaco, G., Margottini C. y Serafini S.
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CONCLUSIONES chingonia, VOLUMEN y PAGINAS, Casale, R. y Margottini, C. (eds.) Floods
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mental de cambio climático y otros pres- land management aspects. En: Zinck, EPICA community members 2004. Eight
tigiosos centros científicos dejan pocas A. (Ed.): Land use change and land de- glacial cycles from an Antartic ice core.
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bios climáticos generados por el efecto Tucumán province, Northwest Argen- Global Environmental Change: Research
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Sería innecesario expresar el anhelo de tion 84: 119-132. Enschede. Nacional Academy of Sciences. 616p.,
que las más graves predicciones se vean Busnelli, J., Neder, L., Sayago, J.M. y Washington.
atenuadas como consecuencia de reduc- Flores Ivaldi, E. 2006. Cambio climáti- González, A.R. 1999. La cultura de La
ciones significativas en las emisiones de co, deforestación y degradación de los Aguada y el Periodo Formativo.
gases de invernadero. El conocimiento suelos (periodo 1970-2003) en la llanu- Evolución e historia en el proceso cultu-
de los cambios climáticos del pasado ra chaqueña occidental (Tucumán, ral del noroeste argentino. En
(centenarios a milenarios) es un aporte Noroeste Argentino). En Sanabria, J.A. Ledergerber-Crespo, P. (ed.) Formativo
significativo en las predicciones de esce- y Arguello, G.L. (eds.) Actas de Sudamericano, una revolución, Ediciones
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bres de influencias antropogénicas, cons- zación arqueopalinológica del sitio 1960. Preliminary report on archaeolo-
tituyendo, un simil valido de cara al futu- Ticucho 1 (Cuenca Tapia-Trancas) gical research in Tafí del Valle, NW.
ro, especialmente en caso de situaciones Tucumán, Argentina. En Collantes, Argentina. Internationalen Amerika-
catastróficas que afectarían a las comuni- M.M., Sayago, J.M. y Neder, L. (eds.) nisten Kongresses, Akten 34: 485-96.
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de los climas del pasado (cercano y leja- Congreso Argentino de Cuaternario y Reframing the Discussion. The
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metropolitana de Tucumán, constituye Collantes, M.M. 2001. Paleogeomorfolo- Heredia, O.R. 1975. Investigaciones ar-
una aproximación válida para establecer gía y Geología del Cuaternario de la queológicas en el sector meridional de
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