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El Gran Tesoro de La Naturaleza

Ania y Kin, junto con sus amigos de la naturaleza como Meshi el árbol, Bea la mariposa y Glup el pez, emprenden una gran aventura para encontrar el gran tesoro escondido en la selva amazónica. Después de cruzar desiertos, escalar montañas y navegar ríos, encuentran a Meshi el árbol que les cuenta que ya no puede cumplir su misión de producir semillas y flores debido al daño causado por los humanos a la naturaleza. Ania y Kin deciden ayudar a

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El Gran Tesoro de La Naturaleza

Ania y Kin, junto con sus amigos de la naturaleza como Meshi el árbol, Bea la mariposa y Glup el pez, emprenden una gran aventura para encontrar el gran tesoro escondido en la selva amazónica. Después de cruzar desiertos, escalar montañas y navegar ríos, encuentran a Meshi el árbol que les cuenta que ya no puede cumplir su misión de producir semillas y flores debido al daño causado por los humanos a la naturaleza. Ania y Kin deciden ayudar a

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EL GRAN TESORO DE LA NATURALEZA

Un día Tawa, un sabio chaman de la Amazonia, regaba su jardín en donde había sembrado
unas sabrosas plantas para los picaflores, otras que curaban el dolor de barriga y resfríos, y
otras que daban fruto que le encantaba comer. De repente, escucho ¡Wak! ¡Wak! -Es el
momento, es el momento!-. Era su viejo amigo Ararú, un colorido Guacamayo. Tawa sonrió
pues sabía lo que quería decir Ararú.

De inmediato, Tawa llamo a sus nietos: Ania y Kin, que se quedaban en casa jugando y
explorando el jardín cuando sus padres viajaban. Los papas de Ania y Kin eran botánicos que
investigaban los beneficios de las plantas para ayudar a Tawa en la misión de lograr que las
personas vivan en contacto y armonía con la naturaleza.

Ania abrazó a su abuela Tawa y le preguntó con gran emoción -Abu, ¿iremos hoy a buscar EL
GRAN TESORO DE LA NATURALEZ?- -¡SIII! Respondió Tawa. El tesoro esta escondido en el
corazón de la selva y para encontrarlo tendrán que cruzar desiertos, escalar montañas y
navegar ríos y mares. -¡YEEEE!- Gritaron Ania y kin, -¡Sera una gran aventura!- exclamaron.

Kin decidió llevar a LATA DATA, un robot hecho de material reciclado, ya que este los ayudaría
a pensar como llegar al tesoro. Ania manifestó -Yo llevare a Lucina, la más sensible de las flores
porque ella nos ayudará y sentir como llegar al tesoro-.

Tawa les dijo a sus nietos, -Recuerden que toda la naturaleza que está arriba, abajo, a nuestro
alrededor y en nuestro interior, también los ayudará a encontrarlo. Solo deben que conectarse
con ella-.

Y así empezó la gran aventura. Primero llegaron al desierto, donde se subieron en un jeep de
juguete que encontraron. -¡Oh no! ¡No se mueve!- Dijo Ania. -¡Necesita energía!- Exclamó Kin.
Lucina miro a su alrededor para buscar ayuda y dijo-¡Miren arriba el sol! Que bueno es sentir
su calor.- -¡Y también su energía!- Agregó LATA DATA. -¡ESO ES!- Exclamó Kin, -Usaremos la
energía del sol, y así podremos cruzar el desierto.- De esa manera, pudieron cruzar el desierto.

Más tarde, empezaron a subir la montaña y Kin estaba preocupado por lo empinadas que
estaban. En ese momento, vio una bella mariposa que le dijo -Mi nombre es Bea, y voy en
busca del gran tesoro de la naturaleza, pero estoy agotada de volar y volar.- -Yo te puedo
ayudar- Dijo Lucina. Abrió sus pétalos y le ofreció un poco de su néctar que le dio a Bea la
fuerza de seguir volando.

-Gracias- Dijo Bea. -Ahora les podre llevar por encima de las montañas para llegar al tesoro.-
Sentenció. Luego, llegaron a un caudaloso rio. KIN expresó -Parece que vamos a necesitar un
bote- Y en ese momento vieron a dos hormiguitas que remaban en un kayak hecho de una
hoja. -¡YO SOY CURHUI! La mas fuertes de las hormigas.- -¡Y YO SOY HUINSI, La hormiga más
delgada. Vamos en busca del tesoro más grande de la naturaleza.- De esta manera, los niños
siguieron la aventura junto con sus nuevos amigos, y aprendieron a remar en equipo. -¡YEEEE!-
Gritaron -¡JUNTOS PODEMOS!- Exclamaron. De pronto, la acequia desemboco en un estanque
y a lo lejos vieron un velero de jueguete. -HEY, VAMOS TODOS A NAVEGAR EN EL-. Desde
arriba, el viento soplo y le dio energía al bote para avanzar.

Mirando abajo, vieron sorprendentes formas de vida en el mar: Algas, corales y un adorable
pececito que dijo -¡GLUP GLUP! Mi nombre es GLUP y los guiare en dirección al gran tesoro de
la naturaleza. Pero, ¡OH NO! Glup quedó atrapado en una bolsa de plástico. Ania y kin lo
liberaron y eso hizo que Glup SALTARA DE FELICIDAD!. Finalmente llegaron a la orilla, y Ania
exclamó maravillada -Estamos en la Amazonía!- Era verde, frondosa, con muchos sonidos, con
plantas, animales, aves, monitos y hasta un Jaguar y un caimán. De repente, escucharon un
sonido que les pareció familiar -¡WAK! ¡WAK!- decidieron seguir el ¡WAK! ¡WAK! Que los llevo
hasta un ARBOL en un claro del bosque.

-¡Miren arriba!- Dijo Bea, -¡WAK WAK!- repitió ARARU. -¡Miren abajo y alrededor!- Dijeron las
hormigas, mientras señalaban las viejas raíces de aquel árbol. -¡Es el momento, es el
momento!-Repitieron juntas. -¡Miren adentro!- Dijo Lucina. ¡Es el momento, es el momento!
Repetía muy emocionada.

Ania y Kin colocaron sus oidos junto al árbol y escucharon latidos en su interior ¿Podra el gran
tesoro de la naturaleza estar adentro de este árbol?. En ese momento, el árbol se sacudió,
bostezó y abrió sus grandes ojos de color cielo -¡Que felicidad que me hayan encontrado!- Dijo
sonriente. -Mi nombre es Meshi y he estado esperando su llegada durante muicho tiempo.- -
¿Eres tu el gran tesoro de la naturaleza?- Preguntó Ania. -mmm, Tal vez- Respondió MESHI. -
¿Qué quieres decir con “mmm, tal vez”?- Preguntó Kin. Y MESHI RESPONDIO -Hace muchos
años, era un gran bosque. El aire era limpio y fresco, y la alegre música de la naturaleza se oía
todo el día. Mi misión era producir nuevas semillas, flores con polen que mis amigos los
animales, el viento y el agua ayudaron a que nuevas crecieran, lo que mantenía a nuestro
planeta sano y lleno de vida. Pero ahora, las cosas han cambiado. Las ciudades se expandieron,
el verde se redujo, mis amigos los dispersores ya no podían llegar a mi y la gente pasa
desconectada de la naturaleza. ¡Si no fuera por el sol y la luna, quienes me brindan calor y
frescura en el dia y la noche!, ¿qué sería de mí? Puede que ya no sea el tesoro que buscan-
exclamaba muy triste el ARBOL.

Ania y kin sintieron la tristeza de MESHI, y lo abrazaron tan fuertemente como podían, y le
dijeron -¡QUEREMOS QUE SEAS EL GRAN TESORO DE LA NATURALEZA PARA SIEMPRE!,
¡QUEREMOS QUE TUS SEMILLAS Y EL POLEN SE ESPARZAN NUEVAMENTE!. Nosotros, con
todos los niños y niñas te ayudaremos, ya que tenemos el poder del sol y la luna a nuestro
lado.- MESHI sintió tanto amor puro de Ania y Kin, que se llenó de energía y esperanzas
nuevamente, y volvió a producir semillas y flores. En ese momento, apareció TAWA que
exclamó emocionado -¡Mis pequeños aventureros, lo lograron!.- Y asi Ania y Kin descubrieron
el gran tesoro de la naturaleza, que no solo eran las flores y semillas, sino el amor y la fuerza
que llevamos en nuestro interior para hacer la diferencia en el mundo.

TAWA, junto con MESHI, BEA, LUCINA, ARARU, GLUP, CURHUI, HUINSI y LATA DATA, le
entregaron a ANIA Y KIN un espacio en su jardín. Y les enseñaron a utilizar los beneficios de la
luna y el sol, para CRIAR y cuidar con alegría las plantas, animales, el suelo y el agua para que la
NATURALEZA, ELLOS Y NOSOTROS vivamos mejor, en paz y en armonía. Este hermoso lugar tan
especial, fue bautizado como TIINI, la tierra de niños, niñas y jóvenes.

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