Lectio Divina. Lunes (7-Septiembre-2020)
Lectio Divina. Lunes (7-Septiembre-2020)
Meditación-Reflexión
Curar a una persona de cualquier dolencia siempre es bueno. Curar a uno la
“mano derecha” la que normalmente usamos para comer, para trabajar, todavía debería
ser mejor. Pero hay gente tan retorcida que no lo ve así. Y se enfadan con Jesús, y
deliberan a ver qué se puede hacer con un hombre que sólo piensa en hacer el bien
desde el amanecer hasta el ocaso. Esos hombres no son ateos, incrédulos... No... Esos
son gente religiosa, se pasa la vida con la Biblia en la mano, son doctores de la Ley,
son los encargados de enseñar al pueblo llano y sencillo. Jesús les desenmascara su
malicia y la cerrazón de su corazón. Es cierto que Jesús podría haber dicho a aquel
hombre: Como es sábado, vas a esperar un día más, y te curo. ¡Y así habrá paz! Jesús
no acepta este tipo de componendas. Y les hace una pregunta genial: ¿Es lícito en
sábado hacer el bien o el mal? ¿Salvar una vida o destruirla? Con esa pregunta, Jesús
pone el sábado en su lugar, según la intención que Dios, desde el principio, le quiso
dar. El sábado es de Dios y no de los hombres. El sábado está destinado a hacer el bien
a los hombres, que es la mejor manera de agradar a Dios. Y el no hacer el bien en
sábado, ya es un mal. Hacer sufrir a una persona un día más, no se puede tolerar. Así
es Jesús.
5.- Propósito: Dedicar un rato del domingo a hacer el bien visitando a un enfermo.