La filosofía es un término griego, (Philos) y (Sophia) que al traducirse al español quiere
significar, ¨amor por el conocimiento¨. Ésta busca saber el porqué de las cosas que
existen en el mundo hasta de la existencia misma. Muchos dirán que la filosofía no es
algo que se pueda hacer todos los días o se preguntarán, ¿En qué me ayuda en la vida
cotidiana?
A través de esta el ser humano puede llegar a mejorar el alma, la mente y el cuerpo. Y
esto gracias a que, si tenemos un cambio en nuestra mentalidad podemos crear
aprendizajes significativos que nos hagan ver la vida desde otra perspectiva. Se dice que
la filosofía va de la mano con la educacion, y sí, es cierto ya que ambas buscan un
mismo objetivo que es el saber, el conocer y el hacer.
Desde que nacemos y vamos creciendo, nos vamos cuestionando a nosotros mismos
sobre cosas que vemos y hasta en ciertas ocasiones preguntamos a nuestros padres,
desde ese momento la sabiduría es parte de nosotros.
La filosofía en la vida cotidiana, es la forma en la que nos expresarnos ante el mundo,
creando nuestro propio estilo y sobre eso nuestra esencia, que tiene que ver con la
verdad, el conocimiento y la moral.
La misma juega un papel muy importante ya que está presente en nuestros
pensamientos, criticas y cuestiones. Muchos científicos, humanistas y filósofos aseguran
que la filosofía ocupa un lugar fundamental en la sociedad, ya que aporta al avance de
las investigaciones científicas, así como también abriendo las puertas a determinadas
formas de programas tecnológicos y la inteligencia artificial.
La sabiduría es necesaria en nuestro día a día, para desenvolvernos de la mejor manera y
reflexionar ante cualquier situación sin tomar una decisión precipitada, llevando acabo
su objetivo de ponernos a pensar en cientos de soluciones, investigar e indagar para
llegar a resolver nuestro problema.
Los educados se diferencian de los no educados tanto como los vivos de los muertos.-
Aristóteles.
Finalmente, Aristóteles fue muy preciso al decir esta frase, y es qué en un mundo de
cambios constantes, solo los sabios progresan. Es tiempo de auto educarnos y
convertirnos en filósofos de la vida