Elaborado por Jhon Vivas
Primero vamos a realizar un resumen de las propuestas presentadas por Kim y Antonakis.
Tema: Relación entre liderazgo e Inteligencia Emocional
Autor: Kim Kim Autor: John Autonakis
Enfoca su estudiar a revisar la relación Descarta la relación entre la IE y el
entre la Inteligencia Emocional (IE) y el liderazgo por no tener pruebas ni
liderazgo transformacional (LT). evidencia científica que compruebe la
Los trabajos de investigación revisados relación.
solo confirman de forma empírica la Indica que la IE no es una condición
relación entre la IE y LT. indispensable para el liderazgo eficaz.
Confirma que todavía no hay consenso No se tienen indicadores confiables para
en la comunidad investigadora. mediar la relación entre la IE y LT.
Al realizar la revisión de las propuestas de los 2 autores, la propuesta más sólida es la de John
Autonakis. Todavía no se tiene suficiente sustento para confirmar la relación entre la IE y el LT,
posiblemente en futuras investigaciones podamos volver a revisar las propuestas entre los 2
autores.
Personalmente considero que la IE no necesariamente puede predecir un resultado de LT, pero
la capacidad de las personas con un alto índice de IE su pueden medir y controlar los
resultados del LT.
Es decir, se pueden utilizar las capacidades de conocimiento y control del equipo para verificar
y recibir el feedback de las estrategias utilizadas por el líder.
A continuación, describimos la propuesta presentada por Antonakis.
Autonakis inicia realizando observaciones a la propuesta de Prati (2003), quien inicialmente
considera el concepto general de Goleman pero luego se da cuenta que es muy genérico y
realiza una publicación indicando las modificaciones por las observaciones realizadas por
Autonakis, en la nueva publicación paso de Goleman a apoyarse en la definición de Peter
Salovey.
En internet abundan los artículos que asocian la IE y LT, pero no tienen la solidez necesaria es
más desde el punto de vista estadístico no se muestran las soluciones claras ni se puede
predecir el resultado del LT considerando la IE. Considerar que no se indica que no existe
relación entre la IE y la TL solo que no hay evidencia de esta, pero para las futuras
investigaciones es necesario considerar pruebas y metodologías más rigurosas.
Otro punto observado es la confiablidad de los indicadores, no es suficiente que la medida sea
válida si no que se encuentre dentro del objetivo para evidenciar la relación de las variables
deseadas, es decir que los indicadores muestren correlación.
Para considerar la validez: se debe considerar la validez discriminante para medir la
correlación de la IE y otras variables como por ejemplo la personalidad, la validez convergente
que evalúa la correlación de las pruebas y la validez incremental que evalúa la varianza de las
variables independientes como la IE respecto de una variable dependiente como LT.
Respecto a las pruebas presentadas, Antonakis indica que la IE no puede definir el desempeño
laboral por ello no tendría opción de definir resultados más complejas como la efectividad del
LT. Las propuesta de Rooy y Viswesvaran son más retórica que realidad.
Finalmente Antonakis desbarata la idea de que se requiere un nivel desorbitante de IE para
tener efectividad en el liderazgo, es más los elementos de la IE están relacionados
negativamente con el desempeño de los equipos de los líderes. Las habilidades de IE depende
de la cultura de las personas pues las prácticas que son válidas en un país podrían no ser
válidos en otros países por lo que no se podría generalizar la relación entre la IE y LT.