Antecedentes Del Artículo 3° Constitucional y Reformas
Antecedentes Del Artículo 3° Constitucional y Reformas
El 24 de septiembre de 1810 se inaugura la asamblea constituyente de las juntas provinciales del reino
español, mejor conocidas como las cortes de Cádiz. En ellas había representantes de cada una de las
regiones que componían el imperio incluida la asiática y las americanas, que resultaron ser las más
numerosas.
Las cortes de Cádiz estaban conformadas por militares, altos mandos del clero, funcionarios del gobierno
y la aristocracia. Todos ellos de corte conservador que desconocían la autoridad de José Bonaparte. Y
para llenar el vacío del poder, crearon una constitución que pretendía dividir los poderes, dar igualdad
entre españoles y americanos, dar división a todas las regiones e independencia y el derecho al voto.
La Constitución de Cádiz de 1812 representa el triunfo jurídico y político de la burguesía liberal por
primera vez en España. Es la expresión legal de una serie de valores que una clase social, la
burguesía, intenta imponer a la sociedad española tras haber adquirido conciencia de clase. La
Constitución gaditana es burguesa porque el propio hecho histórico que la hace gaditana, la Guerra de
la Independencia, ha propiciado que los diputados que se van a reunir en las Cortes no representen a
todas las tierras del Reino de España. En realidad, los grupos privilegiados antiguo regimentales, van a
seguir ostentando el predomino social y político.
Así, lo que establecería la Constitución de 1812 sería el inicio de un consenso pacífico, que haría posible
otro tipo de reformas políticas y sociales. Volviendo al pensamiento de Gramsci, para que haya una
verdadera sustitución de unas clases dominantes por otras emergentes, debe suceder una crisis de
hegemonía, una guerra de posiciones y un posicionamiento activo de los intelectuales. Una guerra de
posiciones consiste en un ataque estratégico no frontal similar a la guerra de guerrillas, distinto del
ataque frontal al poder central al Estado donde se da una confrontación social, ideológica y política, que
sólo ocurre en circunstancias excepcionales.
Como ya se ha dicho, la Constitución elaborada por las Cortes de Cádiz es fruto de unas condiciones
muy particulares que no reflejan el peso real de las fuerzas sociales y donde la progresía burguesa está
sobrerrepresentada. Así, no sorprende, a tenor de lo expuesto por Gramsci, que dicha Constitución
nunca llegara a desplegarse como una herramienta de gobierno, lo que equivaldría al gobierno de una
clase social emergente sin que sus valores e ideas fueran asumidos e interiorizados por el conjunto de la
sociedad. Para lograr esto, es necesario contar con la ayuda de determinados mecanismos sociales
especializados en la producción social de consenso activo. Los especialistas en la fabricación social de
la hegemonía son los intelectuales propios y las escuelas independientes donde puedan formarse los
cuadros necesarios
En cuanto a la primera distinción, para Gramsci los intelectuales no pueden definirse como tales por el
trabajo que hacen, sino por el papel social que desempeñan. Hay que decir que nuestro autor es generoso
a la hora de establecer quienes son intelectuales entendiendo que, en la medida en que cada persona
utiliza su capacidad cerebral en mayor o menor grado, puede ser así considerado. Lo anterior enlaza con
la segunda distinción, la que se da entre intelectuales tradicionales y orgánicos.
Todo grupo que aspira a convertirse en clase dominante no puede conseguir esa hegemonía si sólo
dispone de los intelectuales tradicionales que se vayan asimilando. Los intelectuales orgánicos tienen la
función de liderar intelectual y moralmente a la sociedad mediante la educación y la cultura, y no por la
coacción jurídica y policial tradicional. En este trabajo podemos realizar una correspondencia respecto
a las circunstancias que se dan en el momento de la elaboración de la Constitución, aunque en este caso
son las viejas clases estamentales privilegiadas las que se pretende eclipsar. Respecto a los autores de la
Carta Magna, no cabe duda que en el momento en el que los señores diputados intervienen en su
elaboración, puede decirse que no sólo son sino que también ejercen como intelectuales.
Es así hasta el punto que algunos diputados en desacuerdo con la redacción liberal de la Constitución
llegaron a manifestar reticencias a la firma de la Constitución o se negaron directamente a ello, aunque
finalmente tuvieran que hacerlo por la aprobación de una propuesta que dejaba en el ostracismo y el
destierro a aquellos que no la firmaran.
II. Contribuir para los gastos públicos, así de la federación como del Estado y municipio en que resida,
de la manera proporcional y equitativa que dispongan las leyes.
La enseñanza es libre. La ley determinará qué profesiones necesitan título para su ejercicio, y con qué
requisitos se deben expedir.
Artículo 3o. La educación será socialista Y además de excluir toda doctrina religiosa combatirá el
fanatismo y los prejuicios, para lo cual la escuela organizará sus enseñanzas y actividades en forma que
permita crear en la juventud un concepto racional y exacto del universo y de la vida social.
Soló el Estado – Federación, Estados, Municipios- impartirá educación primaria, secundaria y normal.
Podrán concederse autorizaciones a los particulares que deseen impartir educación en cualquiera de los
tres grados anteriores, de acuerdo en todo caso con las siguientes normas:
Las actividades y enseñanzas de los planteles particulares deberán ajustarse, sin excepción alguna, a lo
preceptuado en el párrafo inicial de este artículo, y estarán a cargo de personas que en concepto de
Estado tengan suficiente preparación profesional, conveniente moralidad e ideología acorde con este
precepto. En tal virtud, las corporaciones religiosas, los ministros de los cultos, las sociedades por
acciones que exclusiva o preferentemente realicen actividades educativas, y las asociaciones ligadas
directa o indirectamente con la propaganda de un credo religioso, no intervendrán en forma alguna en
escuelas primarias, secundarias o normales, ni podrán apoyarlas económicamente.
No podrán funcionar los planes particulares sin haber obtenido plenamente, en cada caso, la
autorización expresa del poder público.
El Estado podrá revocar, en cualquier tiempo, las autorizaciones concedidas. Contra la revocación no
procederá recurso o juicio alguno.
Estas mismas normas regirán la educación de cualquier tipo o grado que imparta a obreros o campesinos.
El Congreso de la Unión con el fin de unificar y coordinar la educación de toda la República, expedirá
las leyes necesarias, destinadas a distribuir la función social educativa entre la Federación, los Estados
y los Municipios, a fijar las aportaciones económicas correspondientes a este servicio público y señalar
las sanciones aplicables a los funcionarios que no cumplan o no hagan cumplir las disposiciones
relativas, lo mismo a todos aquellos que las infrinjan".5. Primera reforma del art. 3o. en 1934. (Lázaro
Cárdenas)
3.6. Segunda reforma del art. 3o. en 1946 de Ávila Camacho (la publicó Miguel Alemán).
Artículo 3o. La educación que imparta el Estado -Federación, Estados, Municipios- tenderá a desarrollar
armónicamente todas las facultades del ser humano y fomentará en él, a la vez, el amor a la patria y la
conciencia de la solidaridad internacional en la independencia y en la justicia;
I.- Garantizada por el artículo 24 la libertad de creencias, el criterio que orientará a dicha educación se
mantendrá por completo ajeno a cualquier doctrina religiosa y, basado en los resultados del progreso
científico, luchará contra la ignorancia y sus efectos, las servidumbres, los fanatismos y los prejuicios.
Además:
c) Contribuirá a la mejor convivencia humana, tanto por los elementos que aporte, a fin de robustecer
en el educando, junto con el aprecio para la dignidad de la persona y la integridad de la familia, la
convicción del interés general de la sociedad, cuanto por el cuidado que ponga en sustentar los ideales
de fraternidad e igualdad de derechos de todos los hombres, evitando los privilegios de razas, de sectas,
de grupo, de sexo o de individuos.
II. Los particulares podrán impartir educación en todos sus tipos y grados. Pero por lo que concierne a
la educación primaria, secundaria y normal (y a la de cualquier tipo o grado, destinada a obreros y a
campesinos) deberán obtener previamente, en cada caso, la autorización expresa del poder público.
Dicha autorización podrá ser negada o revocada, sin que contra tales resoluciones proceda juicio o
recurso alguno;
III. Los planteles particulares dedicados a la educación en los tipos y grados que especifica la fracción
anterior deberán ajustarse, sin excepción, a lo dispuesto en los párrafos I y II del presente artículo y,
además, deberán cumplir los planes y los programas oficiales.
IV. Las corporaciones religiosas, los ministros de los cultos, las sociedades por acciones que, exclusiva
o predominantemente, realicen actividades educativas y las asociaciones o sociedades ligadas con la
propaganda de cualquier credo religioso no intervendrán en forma alguna en planteles en que se imparta
educación primaria, secundaria y normal y la destinada a obreros o a campesinos;
VIII. El Congreso de la Unión, con el fin de unificar y coordinar la educación en toda la República,
expedirá las leyes necesarias, destinadas a distribuir la función social educativa entre la Federación, los
Estados y los Municipios, a fijar las aportaciones económicas correspondientes a ese servicio público y
a señalar las sanciones aplicables a los funcionarios que no cumplan o no hagan cumplir las
disposiciones relativas, lo mismo que a todos aquellos que las infrinjan.
3.7. Tercera reforma al art. 3o. en 1980. (José López Portillo)
Las universidades y las demás instituciones de educación superior a las que la Ley otorgue autonomía,
tendrán la facultad y la responsabilidad de gobernarse a sí mismas; realizarán sus fines de educar,
investigar y difundir la cultura de acuerdo con los principios de este artículo, respetando la libertad de
cátedra e investigación y de libre examen y discusión de las ideas; determinarán sus planes y programas;
fijarán los términos de ingreso, promoción y permanencia de su personal académico; y administrarán su
patrimonio. Las relaciones laborales, tanto del personal académico como del administrativo, se
normarán por el Apartado A del Artículo 123 de esta Constitución, en los términos y con las modalidades
que establezca la Ley Federal del Trabajo conforme a las características propias de un trabajo especial,
de manera que concuerden con la autonomía, la libertad de cátedra e investigación y los fines de las
instituciones a que esta fracción se refiere.
El Congreso de la Unión, con el fin de unificar y coordinar la educación en toda la República, expedirá
las leyes necesarias, destinadas a distribuir la función social educativa entre la Federación, los Estados
y los Municipios, a fijar las aportaciones económicas correspondientes a ese servicio público y a señalar
las sanciones aplicables a los funcionarios que no cumplan o no hagan cumplir las disposiciones
relativas, lo mismo que a todos aquellos que las infrinjan
3.8. Cuarta reforma al art. 3o. en 1992. (Carlos Salinas de Gortari)
I. Garantizada por el artículo 24 la libertad de creencias, dicha educación será laica y, por tanto, se
mantendrá por completo ajena a cualquier doctrina religiosa;
II. El criterio que orientará a esa educación se basará en los resultados del progreso científico, luchará
contra la ignorancia y sus efectos, las servidumbres, los anatismos y los prejuicios. Además:
Contribuirá a la mejor convivencia humana, tanto por los elementos que aporte a fin de robustecer en el
educando, junto con el aprecio para la dignidad de la persona y la integridad de la familia, la convicción
del interés general de la sociedad, cuanto por el cuidado que ponga en sustentar los ideales de fraternidad
e igualdad de derechos de todos los hombres, evitando los privilegios de razas, de religión, de grupos,
de sexos o de individuos;
IV. Los planteles particulares dedicados a la educación en los tipos y grados que especifica la fracción
anterior, deberán impartir la educación con apego a los mismos fines y criterios que establecen el primer
párrafo y la fracción II del presente artículo; además cumplirán los planes y programas oficiales y se
ajustarán a lo dispuesto en la fracción anterior;
"Artículo 3o.- Todo individuo tiene derecho a recibir educación. El Estado -Federación, Estados y
Municipios impartirá educación preescolar, primaria y secundaria. La educación primaria y la
secundaria son obligatorias.
La educación que imparta el Estado tenderá a desarrollar armónicamente todas las facultades del ser
humano y fomentará en él, a la vez, el amor a la Patria y la conciencia de la solidaridad internacional,
en la independencia y en la justicia.
I. Garantizada por el artículo 24 la libertad de creencias, dicha educación será laica y, por tanto, se
mantendrá por completo ajena a cualquier doctrina religiosa;
II. El criterio que orientará a esa educación se basará en los resultados del progreso científico, luchará
contra la ignorancia y sus efectos, las servidumbres, los fanatismos y los prejuicios.
Además:
c) Contribuirá a la mejor convivencia humana, tanto por los elementos que aporte a fin de robustecer en
el educando, junto con el aprecio para la dignidad de la persona y la integridad de la familia, la
convicción del interés general de la sociedad, cuanto por el cuidado que ponga en sustentar los ideales
de fraternidad e igualdad de derechos de todos los hombres, evitando los privilegios de razas, de religión,
de grupos, de sexos o de individuos;
III. Para dar pleno cumplimiento a lo dispuesto en el segundo párrafo y en la fracción II, el Ejecutivo
Federal determinará los planes y programas de estudio de la educación primaria, secundaria y normal
para toda la República. Para tales efectos, el Ejecutivo Federal considerará la opinión de los gobiernos
de las entidades federativas y de los diversos sectores sociales involucrados en la educación, en los
términos que la ley señale;
VI. Los particulares podrán impartir educación en todos sus tipos y modalidades. En los términos que
establezca la ley, el Estado otorgará y retirará el reconocimiento de validez oficial a los estudios que se
realicen en planteles particulares. En el caso de la educación primaria, secundaria y normal, los
particulares deberán:
a) Impartir la educación con apego a los mismos fines y criterios que establecen el segundo párrafo y la
fracción II, así como cumplir los planes y programas a que se refiere la fracción III, y
b) Obtener previamente, en cada caso, la autorización expresa del poder público, en los términos que
establezca la ley;
VII. Las universidades y las demás instituciones de educación superior a las que la ley otorgue
autonomía, tendrán la facultad y la responsabilidad de gobernarse a sí mismas; realizarán sus fines de
educar, investigar y difundir la cultura de acuerdo con los principios de este artículo, respetando la
libertad de cátedra e investigación y de libre examen y discusión de las ideas; determinarán sus planes
y programas; fijarán los términos de ingreso, promoción y permanencia de su personal académico; y
administrarán su patrimonio. Las relaciones laborales, tanto del personal académico como del
administrativo, se normarán por el apartado A del artículo 123 de esta Constitución, en los términos y
con las modalidades que establezca la Ley Federal del Trabajo conforme a las características propias de
un trabajo especial, de manera que concuerden con la autonomía, la libertad de cátedra e investigación
y los fines de las instituciones a que esta fracción se refiere, y
VIII. El Congreso de la Unión, con el fin de unificar y coordinar la educación en toda la República,
expedirá las leyes necesarias, destinadas a distribuir la función social educativa entre la Federación, los
Estados y los Municipios, a fijar las aportaciones económicas correspondientes a ese servicio público y
a señalar las sanciones aplicables a los funcionarios que no cumplan o no hagan cumplir las
disposiciones relativas, lo mismo que a todos aquellos que las infrinjan".
Artículo 3o. Todo individuo tiene derecho a recibir educación. El Estado -federación, estados, Distrito
Federal y municipios-, impartirá educación preescolar, primaria y secundaria. La educación preescolar,
primaria y la secundaria conforman la educación básica obligatoria.
Para dar pleno cumplimiento a lo dispuesto en el segundo párrafo y en la fracción II, el Ejecutivo Federal
determinará los planes y programas de estudio de la educación preescolar, primaria, secundaria y normal
para toda la República. Para tales efectos, el Ejecutivo Federal considerará la opinión de los gobiernos
de las entidades federativas y del Distrito Federal, así como de los diversos sectores sociales
involucrados en la educación, en los términos que la ley señale.
Los particulares podrán impartir educación en todos sus tipos y modalidades. En los términos que
establezca la ley, el Estado otorgará y retirará el reconocimiento de validez oficial a los estudios que se
realicen en planteles particulares. En el caso de la educación preescolar, primaria, secundaria y normal.
ARTÍCULO PRIMERO. Se reforma el Artículo 3o. del Decreto que autorizó al Ejecutivo Federal a
firmar, en representación del Gobierno de México, el texto del Convenio Sobre el Fondo Monetario
Internacional, aprobado en Bretton Woods, E.U.A., publicado en el Diario Oficial de la Federación del
31 de diciembre de 1945, para quedar como sigue:
Artículo 3o. El Banco de México efectuará la aportación de los Estados Unidos Mexicanos al Fondo
Monetario Internacional. La citada aportación será hasta por la cantidad equivalente a tres mil
seiscientos veinticinco millones, setecientos mil derechos especiales de giro.
ARTÍCULO TERCERO. Se autoriza al Ejecutivo Federal para que en representación del Gobierno de
México, acepte las enmiendas al Convenio Constitutivo del Fondo Monetario Internacional conforme a
las Resoluciones 63-2 y 63-3 aprobada por la Junta de Gobernadores el 28 de abril de 2008 y el 5 de
mayo de 2008, respectivamente.
3.12 Octava reforma al art. 3o en 2012 (Enrique Peña Nieto)
SE REFORMAN LOS ARTÍCULOS 3o. EN SUS FRACCIONES III, VII Y VIII; Y 73,
FRACCIÓN XXV, Y SE ADICIONA UN PÁRRAFO TERCERO, UN INCISO D) AL PÁRRAFO
SEGUNDO DE LA FRACCIÓN II Y UNA FRACCIÓN IX AL ARTÍCULO 3o. DE LA
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS.
ARTÍCULO ÚNICO.- Se reforman los artículos 3o., fracciones III, VII y VIII, y 73, fracción XXV;
y se adiciona un párrafo tercero, un inciso d) al párrafo segundo de la fracción II y una fracción IX, al
artículo 3o., de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, para quedar como sigue:
Artículo 3o.
El Estado garantizará la calidad en la educación obligatoria de manera que los materiales y
métodos educativos, la organización escolar, la infraestructura educativa y la idoneidad de los docentes
y los directivos garanticen el máximo logro de aprendizaje de los educandos.
b) Será nacional, en cuanto sin hostilidades ni exclusivismos - atenderá a la comprensión de
nuestros problemas, al aprovechamiento de nuestros recursos, a la defensa de nuestra independencia
política, al aseguramiento de nuestra independencia económica y a la continuidad y acrecentamiento de
nuestra cultura;
c) Contribuirá a la mejor convivencia humana, a fin de fortalecer el aprecio y respeto por la
diversidad cultural, la dignidad de la persona, la integridad de la familia, la convicción del interés
general de la sociedad, los ideales de fraternidad e igualdad de derechos de todos, evitando los
privilegios de razas, de religión, de grupos, de sexos o de individuos, y
d) Será de calidad, con base en el mejoramiento constante y el máximo logro académico de
los educandos;
Para dar pleno cumplimiento a lo dispuesto en el segundo párrafo y en la fracción II, el Ejecutivo Federal
determinará los planes y programas de estudio de la educación preescolar, primaria, secundaria y normal
para toda la República. Para tales efectos, el Ejecutivo Federal considerará la opinión de los gobiernos de
los Estados y del Distrito Federal, así como de los diversos sectores sociales involucrados en la
educación, los maestros y los padres de familia en los términos que la ley señale. Adicionalmente, el
ingreso al servicio docente y la promoción a cargos con funciones de dirección o de supervisión en la
educación básica y media superior que imparta el Estado, se llevarán a cabo mediante concursos de
oposición que garanticen la idoneidad de los conocimientos y capacidades que correspondan. La ley
reglamentaria fijará los criterios, los términos y condiciones de la evaluación obligatoria para el ingreso,
la promoción, el reconocimiento y la permanencia en el servicio profesional con pleno respeto a los
derechos constitucionales de los trabajadores de la educación. Serán nulos todos los ingresos y
promociones que no sean otorgados conforme a la ley. Lo dispuesto en este párrafo no será aplicable a
las Instituciones a las que se refiere la fracción VII de este artículo;
Las universidades y las demás instituciones de educación superior a las que la ley otorgue
autonomía, tendrán la facultad y la responsabilidad de gobernarse a sí mismas; realizarán sus fines de
educar, investigar y difundir la cultura de acuerdo con los principios de este artículo, respetando la
libertad de cátedra e investigación y de libre examen y discusión de las ideas; determinarán sus planes
y programas; fijarán los términos de ingreso, promoción y permanencia de su personal académico; y
administrarán su patrimonio. Las relaciones laborales, tanto del personal académico como del
administrativo, se normarán por el apartado A del artículo 123 de esta Constitución, en los términos y
con las modalidades que establezca la Ley Federal del Trabajo conforme a las características propias de
un trabajo especial, de manera que concuerden con la autonomía, la libertad de cátedra e investigación
y los fines de las instituciones a que esta fracción se refiere;
FUENTES BIBLIOGRAFICAS
Noguera Fernández, Albert (2011). ‘La teoría del Estado y el poder en Antonio Gramsci: Claves
para descifrar la dicotomía dominación-liberación’. Nómadas, Núm. 29, enero/junio, Madrid,
en http://www.ucm.es/info/nomadas/29/index.html