Alan García
(Alan García Pérez; Lima, 1949) Político peruano que fue en dos ocasiones presidente del
Perú (1985-1990 y 2006-2011). Hijo de Carlos García Ronceros y de Nitha Pérez de García,
no conoció a su padre hasta los cinco años, debido a que éste había permanecido en prisión
por su militancia aprista. Estudió en la Gran Unidad Escolar José María Eguren de
Barranco.
Alan García, que había militado desde su adolescencia en movimientos
vinculados al aprismo, conoció en 1962, en un campamento juvenil,
a Víctor Raúl Haya de la Torre, a quien seguiría vinculado hasta la muerte del
famoso dirigente aprista. Alan García fue escalando posiciones dentro de
su partido, pasando de secretario nacional de organización (durante la
campaña presidencial de Armando Villanueva, en 1980) a secretario
general en 1982. En 1978 fue secretario del Congreso Constituyente,
que presidió Haya de la Torre; en 1980 fue elegido diputado.
Además de ser un encumbrado representante de una nueva y brillante
generación de políticos peruanos, Alan García contaba con el valor
añadido de su imponente oratoria. Fue así como, a una edad
inusualmente temprana para tal responsabilidad, fue elegido candidato a
la presidencia de la República en 1985; tenía entonces 36 años.
El 14 de abril de ese año se impuso en las elecciones, con el 52 por
ciento de los votos, y juró el cargo presidencial el 28 de julio. Alan
García declaró su intención de orientar el gobierno a la atención de las
necesidades más urgentes del Perú y de su población, además de hacer
frente a la deuda externa y a los preocupantes índices de inflación y
desempleo. Defendió la posición de los países latinoamericanos frente a
las imposiciones de la gran banca internacional y se propuso reforzar el
sistema financiero del Perú.
En agosto de 1987 propuso la ley de nacionalización del sistema
financiero y bancario, que fue mal acogida por un amplio sector de la
población. Mientras, en el Ejército crecía el malestar, provocado por el
control civil del Ministerio de Defensa y por una serie de atentados
perpetrados por el grupo maoísta Sendero Luminoso. Como
consecuencia de estos problemas, la popularidad de García cayó a un
nivel muy bajo; cesó además como presidente de la APRA por una crisis
en el partido.
Presionado por los sectores de centroderecha, abandonó su política
contraria al FMI, y anunció el inicio de conversaciones con el Banco
Mundial, lo que no impidió que al final de su mandato en 1990, la
situación económica y social del país fuera crítica: la inflación alcanzó
niveles que prácticamente colapsaron la economía nacional. En 1990 fue
sucedido en el cargo por Alberto Fujimori.
Alan García Perez nació el 23 de mayo de 1949 en la ciudad de Lima, en Perú, de padres
de clase media. Fue originalmente llamado Alan Gabriel Ludwig Garcia Perez. Sus dos
padres eran miembros del grupo rebelde Alianza revolucionaria estadounidense y popular,
también conocido como APRA. Su padre era el secretario de este grupo.
Como estudiante, García estaba completamente dedicado a lo académico. Se unió a la
Pontificia Universidad Católica de Lima, para continuar sus estudios de derecho. Alan se
graduó de la Universidad Nacional Principal de San Marcos de Lima, en 1971.
El joven Pérez se trasladó a ciudades como París y Madrid para seguir estudiando.
Regresó al Perú, su patria poco después. Allí siguió los pasos de su padre y, en 1971, se
unió al partido revolucionario APRA.
En un lapso de cuatro años, sacudió los cimientos del partido con sus habilidades de
liderazgo. Pronto fue elegido como miembro del Congreso peruano.En 1985, disputó las
elecciones presidenciales. Aunque no logró alcanzar la mayoría, fue promulgado
presidente, ya que el líder Alfonso Barrantes del "Partido de la Izquierda Unida", que
también estaba en la carrera, expresó su desinterés por el puesto. Fue un acontecimiento
histórico para su partido. No solo el grupo revolucionario llegó al poder por primera vez,
sino que su candidato presidencial se convirtió en el hombre más joven en ser elegido
líder.
Sin embargo, la administración de García enfrentó fuertes críticas por parte del público
peruano. Su decisión de nacionalizar los bancos y la prohibición de pagar la deuda externa
llevaron a la desestabilización de la economía de la nación. Otro inconveniente de su
administración fue el aumento de la pobreza. Según encuestas realizadas por
organizaciones como Naciones Unidas y el Instituto Nacional de Estadística e Informática,
el porcentaje de la población que vivía en la pobreza aumentó de 41 a aproximadamente
55%.
La dificil situación de Perú allanó el camino para las tensiones sociales en la nación. El
Partido Comunista del Perú provocó altercados en varios lugares del Perú, especialmente
en Lima. Vandalizaron torres eléctricas en diferentes partes de Lima, provocando muchos
apagones. García tuvo que retirarse del poder en 1990. Fue reemplazado por Alberto
Fujimori.
El gobierno de Fujimori acusó a García de varios delitos durante el mandato de este último
como presidente, y planeó un atentado contra él en 1992. Esto lo obligó a abandonar el
país y buscar refugio en países como Colombia y Francia.
Después de permanecer alejado de Perú por casi 8 años, regresó en 2001, tras la caída
del gobierno de Fujimori. A su regreso, volvió a probar suerte con las elecciones
presidenciales. Apeló al público tratando de mostrar que era una persona cambiada, que
había aprendido de sus errores pasados y que debería tener una segunda
oportunidad. Además de convencer al público, enfrentar a rivales políticos como Fernando
Olivera fue el otro gran desafío que enfrentó durante este período.
García logró ganar aproximadamente el 25% de los votos en las elecciones presidenciales
de 2006. El único otro candidato que logró ganar un margen significativo fue Ollanta
Humala. Se llevó a cabo una segunda vuelta entre los dos candidatos, en la
que García salió victorioso con el 53% de los votantes en esta segunda competencia.
García perdió su poder presidencial a principios de 2007. El motivo fue su apelación al
congreso peruano de que los miembros del grupo rebelde Sendero Luminoso debían ser
ejecutados por llevar a cabo conflictos internos en Perú. Sin embargo, su solicitud fue
rechazada por el Congreso. Aunque su primer mandato como presidente fue ampliamente
criticado, introdujo algunos cambios positivos en la gobernabilidad del país durante su
segundo mandato. El más importante fue el intento de mantener relaciones cordiales entre
Perú y Chile. La fricción entre las dos naciones había empeorado durante el mandato de
Fujimori, predecesor de García .
García también fue bastante persistente en que los violadores debían recibir la pena
capital, y propuso una ley en apoyo de esto. Fue elogiado por este pensamiento que había
expresado incluso durante la campaña presidencial.
Alan García ha escrito una docena de libros basados en las experiencias de su vida
política. Entre estos se destacaron El Futuro Diferente y El Nuevo Totalismo.