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Reporte de Lectura Sobre Etica Del Docente

Este documento discute el rol del docente y la importancia de la ética en la enseñanza. Explica que enseñar es una tarea que dignifica y que los estudiantes aprenden reconstruyendo saberes culturales con la influencia de otros. También destaca que los docentes deben facilitar el aprendizaje, prepararse para enseñar de manera eficaz, y contemplar cualidades éticas al ejercer su profesión. Finalmente, concluye que los docentes deben ser ejemplos a seguir, facilitar el pensamiento crítico en los estudiantes
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Reporte de Lectura Sobre Etica Del Docente

Este documento discute el rol del docente y la importancia de la ética en la enseñanza. Explica que enseñar es una tarea que dignifica y que los estudiantes aprenden reconstruyendo saberes culturales con la influencia de otros. También destaca que los docentes deben facilitar el aprendizaje, prepararse para enseñar de manera eficaz, y contemplar cualidades éticas al ejercer su profesión. Finalmente, concluye que los docentes deben ser ejemplos a seguir, facilitar el pensamiento crítico en los estudiantes
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INTRODUCCIÓN

Enseñar es una tarea que dignifica la persona, el logro de una enseñanza capaz
de proporcionar a los estudiantes la posibilidad de aprender a aprender adquiere
una importancia de primer orden.
El alumno no aprende solo, sino con la actividad auto estructurante del sujeto que
estará mediada por la influencia de los otros, y por ello el aprendizaje es en
realidad una actividad de reconstrucción de los saberes de una cultura.
El rol central del docente es el de actuar como mediador o intermediario entre los
contenidos del aprendizaje y la actividad constructiva que despliegan los alumnos
para asimilarlos.
Sin dejar de reconocer que la enseñanza debe individualizarse en el sentido de
permitir a cada alumno trabajar con independencia y a su propio ritmo, también es
importante promover la colaboración y el trabajo grupal.
El docente como facilitador entre el alumno y el aprendizaje debe estar preparado
para dimensionar la labor que realiza, por lo tanto, el resultado obtenido
dependerá de la eficacia empleada.
El alumno necesita aprender a resolver problemas, analizar la realidad
críticamente y transformarla, aprender a pensar, aprender a hacer, aprender a
ser, aprender a convivir y por último aprender a descubrir el conocimiento de una
manera amena, interesante y motivadora.
Sabiendo que el docente es un profesional, debe contemplar ciertos requisitos y
cualidades éticas y morales que se exigen para ejercer honestamente su
profesión.
“Los valores están en los seres humanos y se solidifican o modifican dentro de las
esferas sociales.” Restrepo 2001

En el devenir de los tiempos, en el transcurso de todas las edades póstumas y


aún hoy, la educación del hombre, se ha transformado en un hecho relevante con
necesidades profundas de reflexión y en un escenario multidinámico con disímiles
horizontes, que cambian de acuerdo al razonamiento o la ideología de la sociedad
que los concierne y los glosa. En este orden de ideas, es oportuno analizar el
compendio referido a la ética, en esta oportunidad, desde el campo profesional,
sabiendo bien que toda persona que labora en cualquier área, debe tener una
cuota de ética, y en el campo de la educación no es la excepción, allí los docentes
deben ser pioneros en el manejo de la ética para desempeñarse integralmente
como profesionales.

Enseñar es una tarea que dignifica la persona, el logro de una enseñanza capaz
de proporcionar a los estudiantes la posibilidad de aprender a “aprender” adquiere
una importancia de primer orden. El alumno no aprende solo, sino con la actividad
auto estructurada del sujeto que estará mediada por la influencia de los otros, y
por ello el aprendizaje es en realidad una actividad de reconstrucción de los
saberes de una cultura.

El docente como facilitador entre el alumno y el aprendizaje debe estar preparado


para dimensionar la labor que realiza, por lo tanto, el resultado obtenido
dependerá de la eficacia empleada. El alumno necesita aprender a
resolver problemas, analizar la realidad críticamente y transformarla, aprender a
pensar, aprender a hacer, aprender a ser, aprender a convivir y por último
aprender a descubrir el conocimiento de una manera amena, interesante y
motivadora; cuando todo eso se logra, se dice que el docente es de vocación y
que desempeña su labor con toda la eficacia, entereza y vocación.
Sabiendo que el docente es un profesional, debe contemplar ciertos requisitos y
cualidades éticas y morales que se exigen para ejercer honestamente su
profesión. El objeto de la ética profesional es mucho más amplio de lo que
comúnmente se supone. No es otra cosa que preguntarse como
docente, profesor, pedagogo, licenciado, frente a sus alumnos, a la sociedad y al
país "¿estoy haciendo con mi trabajo lo propio que beneficia a estos alumnos, lo
necesario que beneficia a la sociedad donde estoy inserto, lo trascendente para
mi país?". Es por ello que siguiendo con los principios y normas éticas el
profesional docente no sólo debe ejercer su trabajo, sino que debe ejercerlo bien,
ya que éste tiene un fin social, que consiste en atender adecuadamente cada una
de las necesidades que la sociedad debe satisfacer, para contribuir así al bien
común.

En virtud de culminar, es propicio expresar que, la educación integral debe


constituir metas, fines y propósitos educativos dirigidos al perfeccionamiento
humano. Cada individuo tiene su propio patrón de valores, por esto se hace
imperativo que cada quien compatibilice sus valores individuales con los valores
expresados en los principios éticos. Por esta razón, es que existe el
convencimiento de que la educación no puede reducirse a la generación de puro
conocimiento. Se considera de suma importancia la toma de conciencia en cuanto
a que la vivencia de lo valores (la educación, la libertad, la dignidad), es
auténticamente esencial para ayudar a los profesionales de la docencia a
fundamentar con razones de carácter ético las decisiones que han de tomar.
CONCLUSIÓN
En primer lugar el profesor deber ser una persona abierta, serena y tolerante, que
asuma ante sus alumnos el papel de mediador y consejero, que domine las
nuevas tecnologías, que sea un buen pedagogo, que tenga capacidad para el
trabajo en equipo, que sea capaz de orientar personalmente y profesionalmente a
los alumnos, que tenga un alto grado de adaptabilidad a las situaciones
conflictivas y cambiantes del aula y del contexto social; y, sobre todo, debe poseer
tres cualidades: la ejemplaridad, la autoridad moral y la madurez afectiva.
Una misión prioritaria de la escuela debe ser facilitar a los estudiantes la
capacidad de reflexión crítica y ayudarles a formar capacidades de pensamiento,
que les permitan tomar posiciones ante temas como la naturaleza, la sociedad, la
política, la cultura, la religión, su propia vida, el trabajo, etc. En definitiva, una
prioridad de la actividad educativa de los docentes en la sociedad actual es
facilitarles el desarrollo autónomo de su capacidad de reflexión y de actuación.
Podemos decir que enseñar y aprender constituyen procesos que interactúan,
pero al mismo tiempo, se refieren a dos procesos paralelos e independientes que
presentan características específicas que los distinguen. Tanto la escuela como el
docente son consecuencias sociales e influyen decisivamente en la sociedad que
estructuraran las generaciones futuras, es por eso que el educador debe tener
"ética", tanto profesional como personal.

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