Universidad Mariano Gálvez de Guatemala
Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales
Extensión Nueva Santa Rosa
Catedrática: Licda. María del Rosario Valenzuela Bonilla
Cátedra: Derecho Mercantil III
LOS CONTRATOS ATIPICOS
Integrantes: Carné:
Betzaida Julissa Donis Moreira 6050-
Rita Melisa Chajón Solares 6050-09-3507
Katherin Julisa Herrera García 6050-19-5557
Ashly Jisel Urias Solares 6050-
Sandra Franco 6050-
Nueva Santa Rosa, 08 de octubre de 2022
INTRODUCCIÓN:
LOS CONTRATOS ATÍPICOS EN GUATEMALA
Contratos atípicos e innominados
Los contratos atípicos son aquellos en que las partes, en uso de la autonomía de
la voluntad, regulan de forma novedosa y desconocida por el ordenamiento
jurídico, sus relaciones jurídicas, no ciñéndose, por tanto, a ningún modelo de
contrato preestablecido.
Un contrato atípico es aquel para el cual no se ha desarrollado una normatividad
especifica en la que se indique las características, esencia, forma, origen y
ejecución del mismo, este tipo de contrato se rige fundamentalmente por las
normas generales de los contratos, así como las normas que rigen para contratos
parecidos, de una misma naturaleza esencial o de naturaleza similar.
Es decir que en un contrato atípico predomina la voluntad contractual, debido a
que no se encuentra asiento en ninguna disposición legal específica
El contrato atípico no tiene normatividad, y es ejecutado bajo características que
han sido establecidas bajo la costumbre, la doctrina y la jurisprudencia de los
principios que le son aplicables, además de las normas que aplican en general a
los contratos, sumado a esto aplica especialmente el principio de la autonomía de
la voluntad, la cual permite que las partes pacten sus acuerdos en el marco de lo
legal.
Atípicos, son los que carecen de ubicación en el ordenamiento jurídico sustantivo,
debido a que las relaciones económicas del hombre, intensas y variadas, crean
situaciones jurídicas no previstas por el legislador.
Características
Los contratos atípicos son aquellos que no encuentran su "sede" dentro de la ley,
aquellos que carecen, no ya de un nombre , sino de una estructura o regulación
legal. Son el producto de la libertad contractual y de las necesidades de la vida
jurídica: no nacen de la fantasía de los juristas o de la inventiva de los legisladores
sino de la necesidad práctica que plantea el tráfico negocial (el contrato de garaje
o dehospedaje).
A su vez, dentro de esta última categoría la doctrina distingue: contratos atípicos
puros que son aquellos que no encajan en ninguna de las figuras con específica
regulación legal y tampoco responden a una combinación de elementos
correspondientes a figuras contractuales típicas (Ej. contrato de franchising) y los
contratos atípicos mixtos que implican no una pluralidad de contratos sino uno
solo, con elementos pertenecientes a otros tipos de contratos, aunque ligados de
manera que constituyen un todo unitario. Son entonces una combinación no de
contratos completos, sino de elementos contractuales, total o parcialmente
regulados por disposiciones relativas a diversas especies típicas de contratos (por
Ej. el contrato de garaje).
La contratación atípica es muy frecuente, ya que los particulares y empresarios no
se atienen, al pensar sus negocios, a los moldes jurídicos tradicionales sino que
generan nuevas operaciones y modos de contratación que no encuadran en los
que el Legislador ha previsto.
En nuestra legislación se reconoce la libertad contractual al señalar en el Artículo
1517 que “hay contrato cuando dos o más personas convienen en crear, modificar
o extinguir una obligación”; por lo cual existe la posibilidad de celebrar contratos
que estén estructurados o regulados por un ordenamiento legal. O bien las partes
pueden determinar libremente su contenido.
Diferencias
Los contratos atípicos desde el punto de vista legislativo se diferencian de los
contratos típicos, previstos y regulados por las normas del ordenamiento jurídico,
sea en el Código Civil, de Comercio o en diversas leyes, precisamente pues no
son formas jurídicas modeladas por la ley, sino combinaciones de ellas o
estructuras convencionales totalmente novedosas.
Si bien inicialmente se relacionaba la nominatividad con la denominación, la causa
y la acción que le corresponda, con posterioridad se la vincula con el hecho de
estar disciplinados normativamente. En ese sentido, es contrato atípico el que
carece de regulación legal especifica. El contrato no deja de ser atípico por tener
una denominación legal. La designación o no por la ley es en sí intrascendente;
ella no agrega ni quita nada. Tanto da que un contrato atípico esta designado por
la ley que no lo este. Mantiene su categoría de atípico.
Ventajas y desventajas
El primer problema en el contrato atípico se puede decir que consiste en deducir
aquellos limites dentro de los cuales el contrato es admisible, debiendo
considerarse valido y eficaz, disponiendo la protección del ordenamiento jurídico.
El segundo problema es que se debe determinar cuál es la disciplina, a la cual
tales contratos deben estar sometidos, esto a falta de una norma legal y
puntualizar la manera de como deben de ser interpretados e integradas algunas
deficiencias.
Ahora bien, la ventaja más grande es que no ata a los particulares al
estancamiento de la legislación para pactar sobre asuntos que no están
legislados, es decir, que permite adecuar a la evolución de la sociedad los actos
de comercio, de manera que, se pueda pactar aunque no exista norma jurídica
que así lo permita, en desarrollo de la libertad de hacer lo que la ley no prohíba,
garantizado por la carta magna.
Clasificación de contratos atípicos
Los contratos atípicos los podemos clasificar de la siguiente manera:
Atípicos puros, son aquellos que tienen un contenido extraño con relación a los
moldes legales.
Mixtos o complejos, son aquellos que son resultado de una combinación o
mezcla de prestaciones y elementos que corresponden a contratos típicos.
También son conocidos como atípicos impropios, existiendo tres clases de este
tipo:
Combinados o gemelos, son aquellos en que la prestación de una de las partes
pertenece a varios contratos típicos y la contraprestación de la otra es de un
solo contrato típico.
Mixtos, cuando a determinado contrato típico se le añaden las artes, un
elemento o prestación de un contrato típico.
De doble tipo, aquellos en que el contrato puede ser encuadrado totalmente dentro
de dos contratos típicos.
• Los contratos atípicos están regidos:
• Por la voluntad de las partes;
• Por las normas generales sobre contratos y obligaciones;
• Por las disposiciones correspondientes a los contratos típicos afines que sean
compatibles entre sí y se adecuen a su finalidad;
• Se considera que tienen tipicidad social los contratos correspondientes a una
categoría de negocios que son realizados habitualmente en el lugar de
celebración; y,
• En subsidio de la voluntad de partes, están regidos prioritariamente por los usos
del lugar de celebración.
Para ilustrar el tema de los contratos atípicos se pueden citar algunos de los más
comunes:
El Contrato de Leasing
El Contrato de Factoring
El Contrato de Underwriting
El contrato de Franquicia
El Contrato de Joint Ventures
El Contrato de Concesión Comercial
El Contrato de Tiempo Compartido y Clubes de Campo
El Contrato de Asistencia Administrativa
CONTRATOS DE JOINT VENTURES
La expresión joint adventure ya era utilizada en los antecedentes judiciales del
siglo XIX y tiene su origen en la época del imperio británico mediante la cual se
designaba a corporaciones, cuyo objeto estaba destinado a la colonización de
nuevos territorios, las cuales estaban integradas por los caballeros aventureros
(gentleman adventurers).
Luego, el uso de la expresión joint adventure en las decisiones judiciales de los
tribunales norteamericanos fue cercenando la denominación a joint venture.
Antecedentes históricos
La expresión Joint Venture se remonta a la época de formación del imperio
británico cuando para la colonización de territorios en ultramar, pequeños grupos
de personas decidían asociarse con el fin de ir al mar en busca de una aventura.
Para ello, quienes participaban en la travesía, realizaban algún tipo de aporte, de
tal suerte que al culminar ésta, repartían las ganancias obtenidas.
Los joint ventures se originaron como empresas comerciales o marítimas con fines
de intercambio. Efectivamente, son una de las maneras más antiguas de hacer
negocios y ya recurrían a figuras similares los mercaderes del antiguo Egipto,
Babilonia, Fenicia y Siria para realizar operaciones comerciales, a menudo en el
extranjero. Los mercaderes del Reino Unido se manejaron con joint ventures en
los siglos XV y XVI y compañías de aventureros desocupados fueron organizadas
a través de tales emprendimientos para hacer negocios y explotar los recursos de
diferentes lugares del mundo.
Durante la década de 1,950, los joint ventures se volvieron muy populares en los
Estados Unidos como vehículo para la iniciativa comercial, y en 1,959, por lo
menos 345 joint ventures locales eran manejados por las 1,000 empresas más
grandes de dicho país. Estos primeros joint ventures a menudo eran acuerdos
entre dos o más competidores para compartir costos de la producción. Las
empresas se repartían entre sí la capacidad del proveedor pues el nivel mínimo de
eficacia de una planta en crecimiento solía ser tan grande que ninguna firma podía
utilizar sola su producción total. Además, no se producía lo necesario al hacer
funcionar dichas fábricas por debajo de su capacidad.
Podemos concluir diciendo que a medida que los riesgos en los negocios y la
competencia se vuelven más sutiles, las firmas o empresarios han ido adoptando
con frecuencia criterios cooperativos, pues la mejor estrategia consiste en aunar
fuerzas para obtener resultados provechosos en aquellos asuntos que sin la
intervención de otro o varios participantes no pudiese tener éxito
Definición
El autor Ghersi citado por el doctor Villegas Lara conceptúa este contrato mercantil
como: “Aquel por el cual el conjunto de sujetos de derecho (naturales o
internacionales), realizan aportes de las más diversas especies, que no implicarán
la pérdida de la identidad e individualidad como persona jurídica o empresa, para
la realización de un negocio común, pudiendo ser éste desde la creación de
bienes hasta la prestación de servicios, que se desarrollará dentro de un lapso
limitado, con la finalidad de obtención de beneficios económicos (financieros,
monetarios o simplemente de apreciación patrimonial”.
Naturaleza jurídica
La noción y el análisis histórico de la institución objeto del presente trabajo de
investigación constituyen las premisas suficientes para entender cual es la
naturaleza jurídica de este contrato.
Se trata de un contrato atípico, de naturaleza jurídica propia, que tiene
lineamientos claros en el derecho comercial comparado. La relación que se
establece entre las partes en estos contratos no constituye una sociedad ni una
asociación, precisamente porque no hay búsqueda de una utilidad sino un
esfuerzo conjunto para obtener producción.
La vinculación entre los partícipes es contractual cuya finalidad es la constitución
del acuerdo en miras de concretar un determinado negocio.
En tal sentido, conforme a las realidades contractuales modernas, podemos
calificar al contrato de emprendimiento conjunto dentro de:
• Los contratos denominados de colaboración empresarial: entendiendo por ellos a
los que tienen una función de cooperación entre las partes en miras de lograr un
objetivo en común. Los contratos de colaboración tienen por partícipes,
particularmente a las empresas.
• Contratos asociativos: dentro del gran género de los contratos de colaboración,
la especie serían los contratos asociativos. El concepto de contrato asociativo es
abarcativo sin contornos delineados. En búsqueda de la concreción de la finalidad
se asocian, pero haciendo la salvedad de que esa vinculación se lleva a cabo sin
conformar una sociedad. En consecuencia, podemos decir que es un contrato
asociativo no societario, puesto que los participantes se asocian pero sin
absorberse individualmente ni creando un sujeto de derecho distinto de ellos.
CONTRATO DE LEASING
Origen histórico:
El arrendamiento financiero constituye una figura jurídica que se originó en los
Estados Unidos, su creación se le atribuye a D.P. Boothe, Jr. en 1952 fabricante
de productos alimenticios en California y cuando recibió un importante pedido por
parte del ejercito teniendo la necesidad de adquirir maquinaría adecuada para
envasar los productos, pero su capital le era insuficiente por lo que la arrendo
después de mucho esfuerzo. Esto lo llevo a pensar que muchas empresas podían
estar pasando por lo mismo, así que fundo la UnitedStates Leasing Corporation;
de esta manera surgió, una nueva modalidad de Leasing, que no tiene nada que
ver con los fabricantes, al configurarle aquellas como agentes de Leasing
(brokersLessors), que son verdaderos intermediarios financieros, compradores y
arrendadores de la maquinaria, dando así vida al Leasing Financiero.
Según Segurado, J. “existen antecedentes históricos de Leasing operativo, como
las empresas norteamericanas que explotaban el ferrocarril; ellas ya recurrían a
esta operación para financiar gran parte de su material rodante, la
UnitedStatesShoesMachinery arrendaba maquinaria a los fabricantes de zapatos a
mediados de la década de los cuarenta y la empresa Bell TelephoneSystem,
coloco sus teléfonos en explotación mediante su arrendamiento y ofreciendo
colateralmente asistencia técnica basada en alquiler, también IBM arrendaba
máquinas de escribir y de cálculo, la Rank Xerox con fotocopiadoras, son algunas
de las empresas que practicaron esta fórmula antes de la aparición de Leasing
Financiero”.
Por lo que se concluye que fue el desarrollo tecnológico y la consecuente
necesidad de un reequipamiento más frecuente en un contexto de carencia de
capitales en las propias empresas por un lado, y de créditos a medio plazo por el
otro, fueron los factores que originaron las primeras sociedades de Leasing.
Definición:
El doctor Ricardo Sandoval López define el contrato de Leasing Como “una
operación financiera mediante la cual la empresa de leasing adquiere de un
fabricante o proveedor de ciertos bienes de capital productivo, elegidos por un
usuario determinado, con la finalidad de ceder su uso, por un plazo convenido, a
este último, mediante un pago periódico y facultándolo para optar al término de la
misma, por la compra de los bienes por un precio predeterminado, por la
renovación del uso bajo otras condiciones, por la devolución de los bienes u otra
opción que se estipule”.
El vocablo “leasing” proviene del inglés del verbo “tolease” que significa arrendar.
Este término en el campo de la actividad económica se utiliza para designar un
tipo de arrendamiento con características específicas que lo diferencian del
alquiler puro, al cual se le denomina en inglés “torent”, cuyo significado en español
es alquilar. Desde el punto de vista financiero, el leasing se trata de un modo de
financiar inversiones que permite a las empresas industriales y comerciales
equiparse sin tener que movilizar sus fondos.
Similar idea toma la Asociación Española de leasing que lo define como una
moderna formula de financiamiento que facilita al empresario y al profesional
utilizar los bienes de capital productivos necesarios, mediante el pago de un
alquiler, con la posibilidad de adquirir su propiedad por un precio establecido de
antemano.
El dador adquiere un producto o una mercancía de un proveedor a nombre propio,
concediéndoselo a otra denominada tomador o beneficiario quien se obliga a
usarlo y pagar una cantidad de dinero en los periodos y forma que se pacte por
cierto tiempo para que, al vencimiento de éste, el tomador tenga la opción de
comprar el producto o mercadería, prorrogue el contrato, o bien tenga una
participación en el precio que se obtenga de su venta.
Naturaleza jurídica:
Este contrato contiene varios elementos: de orden económico, operativo y jurídico.
Los juristas no se han puesto de acuerdo, ni en el modo de llamarlo, menos en su
naturaleza jurídica. Unos dicen que es un puro contrato de arrendamiento con
opción a compra, otros no ocultan sus variaciones y dicen que su naturaleza es
compleja y que tiene algunos matices de arrendamiento y una opción y compra a
favor del arrendatario sin obviar que se trata de un contrato de crédito. “Otra teoría
expone que es un nuevo contrato, único y autónomo que es el criterio de la
mayoría.”
Por lo que se concluye que; ninguna duda puede caber sobre la naturaleza
mercantil del arrendamiento financiero puesto que la empresa arrendadora
deviene intermediaria en la operación por cuanto, compra la mercancía para darla
en arrendamiento y proponer su venta, con inocultable propósito de especulación
comercial y, por otra parte, si como arrendador aparece el propio fabricante o
proveedor habitual por hipótesis, es titular de una negociación mercantil y de ese
modo, tampoco suscita problema alguno la calificación de mercantil que debe
atribuirse al contrato.
Características:
La celebración de un contrato atípico se fundamenta en la autonomía de la
voluntad para establecer su régimen, las partes se obligaron mediante cláusulas
que regirán sus respectivas prestaciones, teniendo como limites la ley, en este
caso la que regula el contrato general, la moral, el orden público o las leyes
prohibidas expresas, en los términos previstos en los artículos 1271y 1301 del
Código Civil. Sin embargo, como este contrato suele formalizarse en contratos por
adhesión, deben tenerse en cuenta las reglas doctrinarias para interpretarlos y que
en parte recoge el artículo 672 del Código de Comercio.
Es Atípico: En Guatemala es un contrato atípico, se define en la ley de Garantías
mobiliarias pero no está regulado en cuento a su estructura y efectos.
Es principal: porque existe por sí mismo y no requiere de otro para su
subsistencia.
Es formal: porque debe ser otorgado por escrito. Se formaliza por medio de
documento privado o bien por escritura pública si fuera sujeto de inscripción. Los
contratos de arrendamiento financiero deberán otorgarse por escrito y ratificarse
ante la fe de notario público podrán inscribirse en el registro público de comercio, a
solicitud de los contratantes, sin perjuicio de hacerlo en otros registros que las
leyes determinen.
Es de adhesión: porque su clausulado es establecido de manera unilateral por la
arrendadora financiera.
Es de tracto sucesivo: porque las prestaciones se otorgan de momento a momento
durante todo el tiempo del arrendamiento y sus prorrogas, en su caso.
Es bilateral: porque las partes tienen obligaciones y derechos recíprocos.
Es oneroso: porque contiene provechos y gravámenes recíprocos para las partes.
Obtienen un beneficio económico.
Es conmutativo o aleatorio: porque las prestaciones, provechos y gravámenes que
derivan del contrato son plenamente conocidas por las partes desde su
celebración.
Elementos Esenciales del Contrato de Leasing:
Algunos autores coinciden en que los elementos esenciales del contrato de
leasing en cualquier modalidad son los siguientes:
1. Bienes: Muebles o inmuebles arrendados.
2. Plazo: por lo general depende de la vida útil del bien arrendado.
3. Canon: es la renta periódica que el arrendatario cancela al arrendador por
el uso del bien. Depende de algunas variables como el valor del bien, la
amortización en el tiempo, el plazo del contrato y el valor de rescate.
4. Derecho de Uso y Goce: derecho que tiene el arrendatario a la explotación
económica del bien mientras dure el contrato y esté cumpliendo las
obligaciones.
5. Opciones al vencimiento del contrato: si es leasing financiero el arrendatario
ejerce la opción de compra pactada desde el inicio. Por el contrario, si es
operativo el arrendatario tiene la opción de renovar el bien, extender el
plazo del arrendamiento y adquirir el bien al valor comercial.
Clases de leasing:
En el estudio realizado por Barreira, E. el leasing se clasifica de la siguiente forma:
A) Por sus modalidades: bajo el concepto de leasing se agrupan varias
operaciones de carácter económico financiero que pueden revestir diversas
modalidades. Todos tienen en común el poner a disposición de una persona o
empresa un equipo mediante arrendamiento, previendo algunos la opción de
compra al finalizar el contrato de arrendamiento.
1. Leasing Operativo: es el arrendamiento de equipo promovido por los mismos
fabricantes durante un plazo relativamente corto pudiéndose rescindir el contrato
en cualquier momento, siempre y cuando se dé un preaviso.
2. Leasing Financiero: en esta modalidad interviene una compañía arrendadora
que adquiere los bienes para sí del proveedor del bien, por pedido expreso del
usuario. Una vez que adquiere el equipo deseado, cede el uso del mismo al
empresario, mediante un título de arrendamiento y por un plazo determinado. Al
concluir el contrato de arrendamiento financiero, se puede hacer lo siguiente:
a) Comprar el bien arrendado a su valor residual.
b) Renovar el contrato bajo nuevas condiciones.
c) Devolverle el bien a su propietario.
B) Por su objeto
1). Leasing mobiliario:
En la gran mayoría de las operaciones de leasing se trata sobre bienes muebles.
2). Leasing inmobiliario:
Tiene por objeto bienes inmobiliarios de uso profesional, generalmente se utiliza
este tipo de financiamiento para la construcción de edificios. Es mucho más
complejo que el leasing mobiliario, porque para cada operación debe constituirse
una sociedad inmobiliaria entre el industrial y la empresa arrendadora. La
sociedad inmobiliaria obtendrá la financiación del empresario de leasing, y con ella
hará la construcción del edificio de acuerdo a las indicaciones del industrial-socio,
quien se comprometerá a tomarlo en arrendamiento.
Sujetos:
a) Arrendador, arrendadora, arrendante.
Es la persona, patrimonios o entes que entregan el o los bienes en calidad de
leasing, a uno o más arrendatarios, en los términos y condiciones acordados por
las partes en el respectivo contrato de leasing (Inciso a, del artículo 2 de la Ley de
Leasing).
Derechos y Obligaciones (Artículo 8 de la Ley de Leasing):
i. El arrendador debe hacer del conocimiento del arrendatario si el bien objeto
de leasing tiene gravámenes, anotaciones, limitaciones o desperfectos que
afecten los derechos del arrendatario, sometiéndose en todo caso al
saneamiento por evicción o por vicios ocultos que afecten los bienes objeto
del contrato de leasing.
ii. El arrendador debe entregar el bien objeto de contrato libre de gravámenes,
anotaciones, limitaciones o contingencias judiciales o administrativas, en
caso el arrendatario ejerza el derecho de opción de compra.
iii. El arrendador puede enajenar o negociar todos o parte de los derechos de
crédito que le corresponden en virtud del contrato de leasing. Esta cesión
de derechos de crédito no está afecta al pago de impuesto alguno.
iv. El arrendador debe cumplir con las obligaciones tributarias que se derivan
del contrato de leasing.
v. El arrendador debe cumplir con las demás obligaciones acordadas por las
partes.
vi. El arrendador debe inscribir el contrato de leasing en el Registro de
Garantías Mobiliarias del Ministerio de Economía, si el o los bienes objeto
de leasing son bienes muebles. También debe inscribir la cesión de
derechos del arrendador o del arrendatario, el subarrendamiento o
cualquier modificación de las anteriores.
b) Arrendatario.
Es la persona, entes o patrimonios que, al celebrar contrato de leasing, obtiene
derecho al uso, goce y disfrute del bien objeto de leasing, en los términos y
condiciones acordados por las partes en el respectivo contrato de leasing (Inciso
b, del artículo 2 de la Ley de Leasing).
Derechos y Obligaciones (Artículo 9 de la Ley de Leasing):
i. Pagar la renta y cualquier otra cuota suscrita en el contrato de leasing en la
forma, plazo y lugar convenidos.
ii. Es responsable por la pérdida, destrucción y deterioro de la cosa, a partir del
momento en que recibe sin objeción el bien objeto de leasing.
iii. Es el único responsable penal y civilmente, por cualquier daño o perjuicio que
se cause a terceros o a sus bienes, con ocasión del uso, disfrute o posesión
del bien, incluyendo bienes que se destinen para uso y medios de transporte.
Por tanto, cualquier daño o perjuicio que se cause a un tercero o a sus bienes
en virtud del uso y disfrute del bien objeto de leasing, es compensado
exclusivamente por el arrendatario como poseedor del bien objeto de leasing,
sin importar si el daño se causó Intencionalmente o por descuido, imprudencia,
negligencia o impericia del arrendatario, sus familiares, empleados, directores,
personeros o cualquier persona contratada por él o a quien él hubiera
entregado el bien objeto de leasing. Esta responsabilidad no alcanza al
arrendador, aunque sea el propietario del bien, al que no le aplica el artículo
1651 del Código Civil, Decreto Ley Número 106 del Jefe de Gobierno de la
República de Guatemala.
iv. El arrendatario tiene la posesión del bien objeto de leasing, su uso, goce y
disfrute. Salvo pacto en contrario, es el responsable de su mantenimiento,
cuidado y uso de acuerdo con su naturaleza y destino, siendo propietario de
los frutos naturales o civiles que provienen del uso del bien durante el plazo del
contrato de leasing. Es el responsable de los daños que el bien o bienes objeto
de leasing sufren por su negligencia, imprudencia, impericia o falta de
diligencia, la de sus empleados, personeros, directores o cualquier persona a
quien el arrendatario permite usar el bien.
v. Al finalizar el plazo del contrato de leasing si no ejerce la opción de compra, el
arrendatario debe devolver el bien al arrendador en estado de servir y con el
deterioro razonable de acuerdo con su uso. No puede, en ningún caso, solicitar
que se le devuelva lo que pagó como cuota o renta, salvo que hubiere sido
expresamente pactado en el contrato de leasing.
vi. Salvo pacto en contrario, corresponden al arrendatario todos los gastos
ordinarios, extraordinarios y necesarios para la conservación, uso y para todos
aquellos que se generen con ocasión de la posesión del bien, incluyendo
gastos de mantenimiento, seguros, impuestos y tasas que se generen respecto
del bien objeto de leasing.
vii. En los contratos de leasing, el arrendatario es responsable de pagar todos los
tributos, impuestos, tasas, multas, sanciones, recargos. Infracciones o
penalizaciones que graven la tenencia, posesión, explotación o circulación de
los bienes dados en leasing. Si se trata de bienes inmuebles, salvo pacto en
contrario, corresponde al arrendatario el pago del Impuesto Único sobre
Inmuebles.
viii. Únicamente cuando cuente con el consentimiento expreso del arrendador, el
arrendatario puede subarrendar el bien, ceder el derecho de usar el bien o
cualquier otro derecho que le corresponde por el contrato de leasing; los
contratos que celebre el arrendatario vencen al finalizar el plazo del contrato de
leasing.
ix. El arrendatario debe notificar al arrendador de cualquier hecho que menoscabe
o afecte los derechos o acciones del arrendador sobre los bienes objeto de
leasing, desde el momento en que tiene conocimiento de este.
x. En los casos en que el arrendador haya adquirido los bienes por medio de
sustitución del arrendatario en un convenio de importación celebrado entre el
arrendatario y un proveedor del extranjero, el arrendador no responderá por la
obligación de entrega ni por garantía de evicción o vicios ocultos. Corresponde
al arrendatario reclamar al proveedor todos los derechos que surgen del
convenio de importación y del contrato de compraventa.
xi. Es obligación del arrendatario contratar una póliza de seguro que cubra los
riesgos asegurables inherentes a la naturaleza y uso de los bienes objeto del
contrato de leasing.
c) Proveedor.
Es la persona individual o jurídica, nacional o extranjera que transfiere al
arrendador la propiedad del bien objeto del contrato de leasing. El proveedor
puede ser una persona que se dedica habitual o profesionalmente a la venta de
bienes, o una persona que ocasionalmente adquiere o enajena un bien. El
proveedor puede ser el mismo arrendador (Inciso j, del artículo 2 de la Ley de
Leasing).
Derechos y Obligaciones (Artículo 7 de la Ley de Leasing):
i. Obligación de declarar al arrendador si los bienes objeto de leasing tienen
gravamen, anotación, limitación o desperfecto.
ii. Salvo pacto en contrario, el proveedor es el obligado a prestar garantía del
buen funcionamiento de los bienes objeto de leasing.
iii. Salvo pacto en contrario, debe aceptar del arrendador o del arrendatario, los
reclamos que se hagan por desperfectos, mal funcionamiento o vicios ocultos
que tengan los bienes objeto de leasing.
iv. Responder al arrendador o al arrendatario por los reclamos cubiertos por las
garantías que otorga el fabricante o el distribuidor, sobre los bienes objeto de
leasing y proveer de la información necesaria para hacer reclamos en caso de
desperfectos, descompostura, devolución o cambio del bien.
v. Entregar el bien objeto de leasing al arrendador, o al arrendatario cuando el
arrendador así lo autorice, en la forma y términos acordados, debiendo hacer
constar la entrega del bien en cualquier forma escrita o digital.
vi. Cumplir con cualquier otra obligación que asuma en virtud del contrato de
leasing, contrato con el arrendador o que deba cumplir de conformidad con la
ley.
Bienes Aplicables
Este contrato es aplicable a bienes muebles e inmuebles, tanto en el mercado
nacional como en el internacional, desde equipos para oficinas, maquinaria
especializada, software, vehículos, viviendas nuevas, usadas o sobre planos,
entre otros.
Función
Desarrollar la economía nacional, proveyendo a los individuos nuevos métodos de
obtención de fondos por medio de figuras legales simples y acorde a sus
necesidades. Fomentar la inversión y establecer mecanismos de acceso a crédito,
especialmente para las micro, pequeñas y medianas empresas, favoreciendo a las
empresas al permitiéndoles adquirir un bien con una ventaja comparativa en
contraposición a la de los préstamos convencionales.
Formalidad Del Contrato
El contrato de leasing debe constar por escrito, en cualquier forma que aparezca
que las partes deciden vincularse por medio de un contrato de leasing. Cuando el
contrato de leasing tenga por objeto un bien inmueble, un buque o una aeronave,
el contrato debe formalizarse en escritura pública para los efectos de su
inscripción en el Registro de la Propiedad. (Artículo 10 de la Ley de Leasing)
Disposiciones Tributarias
Rentas o cuotas de leasing.
El valor de las rentas o cuotas de arrendamiento facturadas por el arrendador,
serán registradas por el arrendatario como gasto deducible de su renta bruta para
el cálculo del ISR del periodo fiscal correspondiente, durante la vigencia del
contrato.
Intereses, diferenciales de precios y otros cargos financieros.
Cuando como consecuencia de un contrato de leasing sobrevengan intereses,
diferenciales de precios, factoraje u otros cargos financieros, estos se
contabilizarán por el arrendador como ingresos habituales y por el arrendatario
como gastos deducibles.
Bienes en arrendamiento financiero.
Cuando el arrendatario incorpore los bienes, objeto del leasing a su balance, éste
deberá contabilizarlos como bienes en arrendamiento financiero por el total del
contrato y amortizará conforme a las rentas o cuotas del periodo fiscal al que
corresponda.
Opción de compra.
Cuando el arrendatario ejerza la opción de compra, éste debe contabilizarla como
adquisición de activo fijo y aplicar a partir de ese momento, las depreciaciones
conforme al tipo de bien que se trate de conformidad con lo estipulado en el Libro I
Impuesto Sobre la Renta de la Ley de Actualización Tributaria.
Efectos para el arrendador.
El arrendador debe registrar los bienes que mantiene en arrendamiento dentro del
balance general y presentarlos como una cuenta por cobrar amortizable en el
plazo del contrato. También éste deberá facturar la renta o cuota pactada y
calcular el IVA sobre el total facturado; de éste monto total facturado menos el
monto amortizable del bien, constituirá renta bruta afecta para efectos del ISR en
el período impositivo en que se devengue.
Efectos en caso de devolución del bien.
Si el bien objeto de leasing es devuelto al arrendador por cualquier circunstancia,
se deberá proceder de la forma siguiente:
De permanecer el bien como propiedad del arrendador y de no volverse a
dar dicho bien en leasing, el bien se contabilizará como activo fijo y se
depreciará conforme lo estipulado en el Decreto 10-2012 Ley de
Actualización Tributaria.
De permanecer el bien como propiedad del arrendador y volverse a dar el
mismo bien en leasing, el bien se amortizará sobre la base al plazo del
nuevo contrato.
En los casos en que el arrendador decida poner a la venta el bien devuelto,
deberá tratarse como un inventario en activos extraordinarios hasta su
venta y cualquier ganancia o pérdida que se genere en esta operación, será
tratado como ganancia o pérdida de operación habitual del giro de negocio
de arrendador.
Entidades bajo vigilancia de la SIB.
Para el caso de entidades bajo vigilancia y supervisión de la Superintendencia de
Bancos, lo relativo a las disposiciones fiscales reguladas en el Título V de la Ley
de Leasing, se aplicará en lo pertinente, lo establecido en el Decreto 27-92 Ley de
Impuesto al Valor Agregado y los manuales contables correspondientes.
Régimen Procesal
A. Incumplimiento del arrendatario (Artículo 38 Ley de Leasing): En caso de
incumplimiento de las obligaciones por parte del arrendatario, el arrendante,
puede a su elección:
a. Iniciar el proceso de ejecución judicial por medio de juicio ejecutivo, con el
objeto de obtener el pago de todos los saldos adeudados por el
arrendatario, más los intereses generados, costas procesales, otros gastos
y otras indemnizaciones si existieran; o
b. Demandar mediante juicio sumario la inmediata desocupación, devolución o
entrega de los bienes objeto de leasing, ya sea que se trate de bienes
muebles o bienes inmuebles; pudiendo en este caso además el arrendador,
demandar el pago de las rentas que se encuentran atrasadas y pendientes
de pago hasta el fin del plazo forzoso del leasing o las que se deban hasta
la efectiva desocupación y entrega del bien.
c. Iniciar el procedimiento abreviado de desocupación, devolución y entrega
inmediata de los bienes muebles o bienes inmuebles, bajo la forma que
indica la Ley de Leasing.
d. Para el caso de leasing de bienes muebles, en caso de incumplimiento del
arrendatario y si el arrendador quiere recuperar el bien dado en leasing, las
partes pueden acordar en el contrato de leasing o posteriormente en una
modificación al mismo, que se acogen al proceso de ejecución voluntaria
contenido en la Ley de Garantías Mobiliarias, Decreto Número 51-2007 del
Congreso de la República, sea este judicial o extrajudicial.
Excepciones (Artículo 40 Ley de Leasing): En los procesos de ejecución
originados por contratos de leasing, solo son admisibles las excepciones de pago
y de prescripción. En caso de la excepción de pago, el ejecutado debe presentar:
a. El documento emitido por el arrendante con el que acredite que se ha pagado
la cantidad que motiva la ejecución; o,
b. Certificación de un tribunal de la resolución que apruebe el pago por
consignación.
Terminación Del Contrato
El leasing reserva para el final del plazo algunos de sus rasgos típicos en beneficio
de la empresa usuaria, como aquel que le permite a su sola decisión, elegir
cualquiera de las siguientes alternativas:
a) Devolver el bien.
b) Celebrar nuevo contrato por el pago de una contraprestación menor.
c) Sustituir el bien por otro más moderno, o;
d) Adquirir el bien, haciendo efectiva la opción de que goza por haberse pactado
así en contrato.
Otros autores señalan que al finalizar el contrato el usuario tiene tres opciones:
1. Prorrogar el contrato
2. Restituir el bien
3. Comprar el bien
CONCLUSIONES:
1. Los contratos atípicos son aquellos en los que las partes, regulan sus
relaciones jurídicas de forma novedosa en base a su voluntad, debido a que
estos contratos no son regulados por ninguna ley, lo que les otorga el nombre
de atípicos, ya que las partes los desarrollan siguiendo las normas de los
contratos en general, o bien de los contratos que son análogos a la relación
que quieren establecer.
2. Si bien los contratos atípicos no tienen una normatividad, en nuestra legislación
se reconoce la libertad contractual, de conformidad al artículo 1517 del Código
Civil indicando “hay contrato cuando dos o más personas convienen en crear,
modificar o extinguir una obligación”, por lo que las partes pueden determinar
libremente el contenido o la relación objeto del contrato.
3. Debido a la frecuencia con la que las personas individuales y las personas
jurídicas dan uso a este tipo de contratos, estos son ejecutados bajo
características establecidas por la costumbre, doctrina y jurisprudencia,
siguiendo estrictamente el principio de la autonomía de la voluntad, el cual
permite que sean las partes quienes pacten sus acuerdos.
4. En Guatemala se ha realizado poco El contrato mercantil joint venture, por la
falta de conocimiento de los profesionales de derecho de esta figura
contractual.
5. Es necesario considerar al joint venture como un vehículo para acelerar el
desarrollo en países como Guatemala.
6. La forma de operar de esta fusión de socios es que, una empresa cede el
derecho de usar su secreto profesional, de cómo vender un producto u ofrecer
un servicio, pero a cambio de una retribución.
7. El contrato de Leasing es un contrato de alquiler o arrendamiento con opción a
compra, a través del cual el arrendatario puede optar por adquirir la propiedad
del bien objeto del contrato al finalizar el plazo de la renta.
8. La función principal del contrato de Leasing en Guatemala es impulsar la
economía, ya que indica que este tipo de contratos ofrecen a las personas
individuales y jurídicas nuevos métodos de obtención de fondos por medio de
figuras legales simples y acorde a sus necesidades.
RECOMENDACIONES:
1. Es necesario que exista la posibilidad de efectuar la regulación de estos
contratos en el código de comercio, ya sea de los contratos atípicos
conocidos o de los nuevos acuerdos, lo cual podría traer grandes ventajas a
la economía y a las estrategias de contratación y comercio.
2. Organizar un taller o clínica a las diferentes universidades del país para
proporcionar una aportación concreta para constituir un entendimiento más
completo sobre este tema.
BIBLIOGRAFÍA:
Decreto número 2-2021 Ley de Leasing
EGRAFÍA:
http://biblioteca.usac.edu.gt/tesis/04/04_7375.pdf
http://recursosbiblio.url.edu.gt/tesisjrcd/2018/07/01/Tecum-Thelma.pdf
https://www.aguilarcastillolove.com/articles/2021/4/5/nueva-ley-de-leasing-en-
guatemala
https://gt.andersen.com/es/boletines/ley-de-leasing
https://www.pronacom.org/2021/02/15/leyleasingguatemalacompetitiva/
https://www.vesco.com.gt/blog/ley-de-leasing-en-guatemala-decreto-2-2021/
#:~:text=contrato%20de%20leasing.-,Contrato%20de%20Leasing.,quedan
%20definidos%20en%20esta%20Ley.
https://www.prensalibre.com/economia/leasing-como-funciona-en-guatemala-la-
alternativa-a-los-prestamos-para-comprar-equipo-o-vehiculos/