100% encontró este documento útil (3 votos)
658 vistas112 páginas

Juicio Ordinario de Mayor Cuantía

Este documento resume las principales características y etapas del juicio ordinario de mayor cuantía según el Código de Procedimiento Civil chileno. El juicio ordinario es el procedimiento declarativo de mayor cuantía y aplicación general para resolver conflictos en primera instancia. Se caracteriza por ser escrito, no concentrado y regirse por el sistema de prueba legal. Sus etapas son la discusión, conciliación, prueba y sentencia. La etapa de discusión comprende la presentación de la demanda, su notificación, la contestación y réplicas

Cargado por

Jose León
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
100% encontró este documento útil (3 votos)
658 vistas112 páginas

Juicio Ordinario de Mayor Cuantía

Este documento resume las principales características y etapas del juicio ordinario de mayor cuantía según el Código de Procedimiento Civil chileno. El juicio ordinario es el procedimiento declarativo de mayor cuantía y aplicación general para resolver conflictos en primera instancia. Se caracteriza por ser escrito, no concentrado y regirse por el sistema de prueba legal. Sus etapas son la discusión, conciliación, prueba y sentencia. La etapa de discusión comprende la presentación de la demanda, su notificación, la contestación y réplicas

Cargado por

Jose León
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 112

- DERECHO PROCESAL -

JUICIO
ORDINARIO DE
MAYOR CUANTÍA
Abusleme | Pinto Interrogadores

Apunte elaborado por Magdalena Gómez y Florencia Pando para Abusleme | Pinto Interrogadores, en
base a la selección y sistematización de los manuales referidos en la Bibliografía. Actualizado a marzo
de 2022.
Los siguientes apuntes, han sido elaborados en base a extractos de diversos tratados,
manuales de estudio y apuntes de Derecho Procesal.

De los tratados, manuales y apuntes empleados se deben destacar los siguientes:

1. BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El


Juicio Ordinario de Mayor Cuantía, Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson
Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014.
2. MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal,
Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, 2018.
3. MONTERO L, Raúl. Derecho Procesal II. Departamento de Derecho Procesal,
Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, 2017.
4. RODRÍGUEZ P, Ignacio. Procedimiento Civil, Juicio Ordinario de Mayor Cuantía.
Editorial Jurídica, de Chile, Séptima Edición actualizada por Cristián Maturana
Miquel, 2006.
5. UBILLA P, Nicolás. Juicio Ordinario de Mayor Cuantía.
Capítulo I - Introducción

I. REGLAMENTACIÓN

El juicio ordinario civil de mayor cuantía se encuentra regulado en el Libro II del CPC, desde
los art. 253 al 433.

Cuando se hace referencia a juicio ordinario, sin más, se está aludiendo al juicio ordinario de
mayor cuantía.

II. CONCEPTO

“El juicio ordinario es el procedimiento declarativo o de cognición, de mayor cuantía, de general


aplicación, supletorio respecto de los otros procedimientos, escrito, de lato conocimiento, en el cual rige
la apreciación de la prueba conforme al sistema de la prueba legal, y está destinado a resolver en primera
instancia los conflictos que dentro del mismo se promuevan”1.

III. CARACTERÍSTICAS

A) Procedimiento declarativo o de cognición: En oposición a un procedimiento


ejecutivo. Puede ser meramente declarativo (declaración del derecho aplicable a un
asunto, por ejemplo, declaración de nulidad de un contrato), constitutivo
(constitución, modificación o extinción de una situación jurídica, por ejemplo, acción
de divorcio, nulidad de matrimonio), de condena (imposición del cumplimiento de
una prestación, pago de una indemnización, del precio en la compraventa)
B) Procedimiento de mayor cuantía: Se aplica a la solución de conflictos cuya cuantía sea
superior a las 500 UTM. Los menores a 500 pero mayores a 10 constituyen los de menor
cuantía (art. 698 a 702 CPC) y los menores de 10 UTM se rigen por el procedimiento
de mínima cuantía (art. 702 a 726 CPC). También se aplica a los asuntos que el
legislador considera de cuantía indeterminada, puesto que de acuerdo a lo previsto en
los art. 130 y 131 COT se consideran de mayor cuantía.
C) Procedimiento ordinario o de aplicación general: Según el art. 2 CPC, todo conflicto
respecto del cual no exista un procedimiento especial, deberá someterse a
procedimiento ordinario.
D) Procedimiento supletorio: De acuerdo al art. 3 CPC se aplica el procedimiento
ordinario en todas las gestiones, trámites y actuaciones que no estén sometidos a una
regla especial diversa.

1
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. p.2.
Así, por ejemplo, los requisitos de la demanda, no se encuentran mencionados en cada
uno de los juicios especiales. Por ello, aplicando la supletoriedad, se debe aplicar el
artículo 254 CPC en los juicios especiales que no tengan una regla diversa.

La supletoriedad se extiende siempre y cuando el procedimiento sea de la misma


naturaleza, no siendo posible la remisión cuando la regulación del procedimiento se
rija por principios diversos. Por esta razón, la supletoriedad se ha visto mermada por
la existencia de nuevos procedimientos especiales orales (por ejemplo, en materia de
familia).

El carácter supletorio se extiende hasta el procedimiento penal antiguo por crimen o


simple delito de acción penal pública de acuerdo al art. 489 ACPP. En el NCPP no
existe una regla similar, no obstante, tratándose de la demanda civil, el artículo 60 del
CPP se remite al artículo 254 del CPC.

E) Procedimiento escrito, de lato conocimiento y no concentrado: Escrito porque la gran


mayoría de las actuaciones y peticiones de las partes deben constar por escrito, y,
además, constituye la forma del tribunal de comunicarse con las partes. Es no
concentrado debido a que se tramita en una serie de actuaciones y trámites de forma
separada y fuera de audiencia.

Excepciones a esta regla:

- Audiencia de Conciliación
- Inspección personal del tribunal
F) Reciben aplicación el principio dispositivo, de aportación de parte, mediación,
escrituración y el sistema de prueba legal o tasada.
G) Procedimiento de primera instancia: Porque se contempla la procedencia del recurso
de apelación en contra de la sentencia definitiva de primera instancia.

IV. ETAPAS

Dentro del juicio ordinario podemos distinguir a grandes rasgos las siguientes fases:

A) Periodo de discusión: Comprende el trámite de presentación de la demanda


(pudiendo iniciarse con medida prejudicial), la notificación de esta, el término de
emplazamiento, la contestación de la demanda, la réplica y la dúplica, y en el caso de
existir reconvención la dúplica de la reconvención.
B) Período de conciliación obligatoria2: Se compone de la audiencia de conciliación.

2
Incorporado por la Ley N° 19.334 de 1994.
C) Período de prueba: Se inicia con la dictación de la resolución que recibe la causa a
prueba, y se compone del término probatorio ordinario, extraordinario o especial, y
del escrito de observaciones a la prueba.
D) Período de sentencia: Se inicia con la dictación y notificación de la resolución que cita
a las partes a oír sentencia, se compone del trámite de las medidas para mejor resolver
y la dictación de la sentencia definitiva.

V. ETAPAS DE UN PROCEDIMIENTO ORAL

En los procedimientos orales las fases son las siguientes:

A) Período de discusión
B) Audiencia preparatoria o preliminar
C) Audiencia de juicio
D) Sentencia

Actualmente se encuentra en tramitación un Proyecto de Nuevo Código Procesal Civil ante el


Congreso Nacional, en el cual se contemplan procedimientos orales para permitir la
resolución de los conflictos civiles con la celeridad y eficacia que requieren los tiempos
modernos. Dichos procedimientos se rigen por el principio de contradictorio o bilateralidad
de la audiencia, dispositivo, impulso del tribunal, primacía de la presentación de partes,
oralidad, publicidad, inmediación, concentración, continuidad, sistema de sana crítica y la
consiguiente fundamentación de las sentencias.
Capítulo II – Etapa de discusión

La primera etapa del juicio ordinario se compone de diversos trámites. Comienza con la
presentación de la demanda por parte del actor, tal como lo señala el artículo 253 del Código
de Procedimiento Civil. Ahora bien, el mismo artículo menciona que el juicio ordinario podría
iniciarse en forma previa por una medida prejudicial, las que se encuentran reguladas en el
Título IV del mismo Libro II y que serán estudiadas más adelante.
Posteriormente, la demanda debe ser notificada. Se otorgará al demandado un término de
emplazamiento, dentro del cuál podrá oponer excepciones dilatorias. Ahora bien, las
defensas de fondo deberán hacerse valer en la contestación de la demanda, escrito del cual se
dará traslado al demandante para replicar. Posteriormente el demandado tendrá oportunidad
para duplicar. En el caso en que el demandado haya deducido reconvención, se agregará el
trámite de la dúplica de la reconvención.

I. LA DEMANDA

El legislador no ha otorgado una definición del concepto demanda, sin embargo, la doctrina
ha elaborado diversas acepciones al respecto. Entre las más relevantes encontramos la de
Couture, quien define la demanda como "el acto procesal introductivo de instancia por virtud de la
cual el actor somete su pretensión al juez, con las formas requeridas por la ley, pidiendo una sentencia
favorable en su interés." El profesor Ignacio Rodríguez señala que “con la palabra demanda se
designa el acto inicial de la relación procesal, ya se trate de un juicio ordinario o de un juicio especial;
es decir, la primera petición que resume las peticiones del actor”3. Mario Casarino como aquel “acto
procesal del actor mediante el cual ejercita una acción tendiente a la declaración, en sentido amplio, por
parte del tribunal, de un derecho que le ha sido desconocido o menoscabado”.

En este sentido, conviene distinguir algunos conceptos:


(1) Acción: facultad de poner en movimiento la actividad jurisdiccional del Estado.
(2) Demanda: acto material que da nacimiento al proceso y que encierra dentro de sí la
pretensión procesal.
(3) Pretensión: petición fundada que formula el actor solicitando del órgano
jurisdiccional una actuación frente a una determinada persona y constituye el
fundamento objetivo del proceso.
(4) Libelo: denominación que se daba antiguamente al escrito de la demanda.

3
RODRÍGUEZ P, Ignacio. Procedimiento Civil, Juicio Ordinario de Mayor Cuantía. Editorial Jurídica, de Chile, Séptima Edición
actualizada por Cristián Maturana Miquel, 2006. P.21.
A. Casos en que la demanda es obligatoria

Por lo general, nadie está obligado a demandar. Lo anterior se fundamenta en que el Juicio
Ordinario se informa principalmente por el principio dispositivo. Sin embargo, existen
algunas situaciones en que la demanda es obligatoria, estableciendo el legislador
consecuencias jurídicas adversas para el evento de que no se entablen. Estos casos son:

i) Artículo 21 CPC: “si la acción ejercida por alguna persona corresponde también a otra
u otras personas determinadas, podrán los demandados pedir que se ponga la
demanda en conocimiento de las que no hayan concurrido a entablarla, quienes
deberán expresar en el término de emplazamiento, si adhieren a ella”.

Si existen varias personas determinadas a quienes corresponde la acción ejercida por


una de ellas, el demandado puede pedir que se ponga en conocimiento de aquellas que
no la hubieren entablado, para que estas señalen si adhieren o no bajo los
apercibimientos del artículo 21. Cabe señalar que para el demandado aquello
constituye únicamente una facultad. Para los futuros posibles demandantes en cambio,
implica que se verán afectados por el resultado del juicio en atención a que ya no
podrán entablar individualmente sus demandas.

Al respecto los notificados podrían tomar las siguientes actitudes: (1) declarar su
resolución de no adherirse: caduca su derecho para entablar la acción con
posterioridad. El demandado podrá hacer valer la excepción de cosa juzgada. Es un
verdadero desistimiento de la demanda.; (2) No decir nada dentro del término legal:
se verán afectados por el resultado del juicio, pero sin nueva citación. Si bien no se
transforman en parte, tampoco pierden el derecho de comparecer posteriormente
respetando todo lo obrado. (3) Adhiere a la demanda: Se forma un litis consorcio
activo y debe designarse procurador común.

Esta institución tiene como fundamento evitar que el demandado tenga que sufrir la
interposición de diversas y sucesivas demandas sobre una misma materia y así
también evitar que se dicten sentencias contradictorias

En relación a la tramitación de la solicitud, esta debe formularse dentro del término


de emplazamiento y antes de contestar la demanda. No se trata de una excepción
dilatoria, por tratarse de un procedimiento válido el que se sigue contra el demandado.
Se tramita como incidente de previo y especial pronunciamiento, suspendiéndose el
procedimiento mientras no se pronuncie acerca de la solicitud el tribunal. Si se accede
a la solicitud del demandado, se pone en conocimiento de las personas a quienes
también les corresponde la acción y que no hubieren demandado, suspendiéndose el
procedimiento hasta que la demanda sea notificada a los demás titulares para que se
adhieran a la demanda dentro del término de emplazamiento.

ii) Jactancia: Couture la define como la acción y efecto de atribuirse por persona capaz de ser
demandada, derechos propios sobre bienes de otro o asegurar ser su acreedor. El artículo 269
señala que cuando alguna persona manifiesta corresponderle un derecho de que no
está gozando, todo aquel a quien su jactancia pueda afectar podrá pedir que se la
obligue a deducir demanda, dentro del plazo de 10 días, bajo apercibimiento de que si
no lo hace, no será oída después sobre aquel derecho.

Es decir si una persona dice tener derechos de los que no está gozando, puede ser
obligado por el afectado a interponer la demanda correspondiente a los derechos de
que se jacta.

Conforme al art. 270 CPC, se puede deducir demanda de jactancia en los siguientes
casos:
- Cuando la manifestación del jactancioso conste por escrito.
- Cuando la manifestación del jactancioso se haya hecho de viva voz, a
lo menos delante de dos personas hábiles para declarar en juicio.
- Cuando una persona haya sido parte en proceso criminal del cual
pueden emanar acciones civiles contra el acusado, para el ejercicio de
dichas acciones.

La acción de jactancia, para que se declare la obligación del jactancioso de demandar,


prescribe en 6 meses desde los hechos en que se funda, y se tramita de conformidad
al procedimiento sumario (art. 272 CPC). Si se da lugar a la demanda, el jactancioso
tiene 10 días para demandar, ampliable a 30 por motivo fundado, so pena de
declararse que no será oído posteriormente sobre tal derecho (incidente del
procedimiento de jactancia). Si el jactancioso demanda dentro de plazo, se inicia el
juicio correspondiente.

iii) Citación de Evicción: Situación que se da propiamente en los contratos onerosos y


especialmente en la compraventa. Recordemos que una obligación de la naturaleza de
la compraventa es el saneamiento de la evicción. Si el comprador se ve expuesto a
sufrir evicción, esto es, perder todo o parte de la cosa comprada por la interposición
de una acción judicial en su contra motivada en una causa anterior a la venta, debe
citar a su vendedor para que le defienda. Dicha citación debe ser efectuada antes de
contestar la demanda, dentro del término de emplazamiento (arts. 1843 y 1844 CC y
art. 584 CPC).

Al respecto pueden ocurrir diversas situaciones:


a. Si el comprador cita de evicción a su vendedor antes de contestar la demanda,
dentro del término de emplazamiento y este concurre, el proceso se sigue en
contra de éste (quien pasará a ser la parte demandada), pero conservando el
comprador el derecho de intervenir en la calidad de tercero coadyuvante.
b. Si el comprador no cita de evicción al vendedor, aquel no resultará responsable
si la cosa se ve evicta.
c. Si el comprador cita al vendedor, éste no comparece y la cosa se ve evicta, el
vendedor deberá indemnizar por el precio de la cosa, las costas legales del
contrato, el valor de los frutos que el comprador se vio obligado a restituir al
dueño, las costas judiciales y el aumento del valor de la cosa, siempre que el
comprador no pierda el juicio por no haber opuesto una defensa o excepción
propia.

iv) Medida prejudicial precautoria: El artículo 280 del Código de Procedimiento Civil
señala que quien ha obtenido una prejudicial precautoria está obligado a deducir
demanda en el término de 10 días (que pueden ser aumentados a 30 días por motivos
fundados), desde la concesión de la misma, bajo la sanción de alzarse dicha medida y
quedar responsable de los perjuicios causados, considerándose doloso su
procedimiento.

v) Reserva de acciones en el juicio ejecutivo: el artículo 474 del CPC dispone que el
ejecutado que se reserva excepciones en el juicio ejecutivo para ser defendidas en un
posterior juicio ordinario, debe presentar su demanda en el término de 15 días,
contados desde la fecha en que se le notifique la demanda definitiva, bajo la sanción
de procederse a ejecutar dicha sentencia sin previa caución o quedará ipso facto
cancelada si se hubiera otorgado.

vi) Verificación de Créditos en el Procedimiento Concursal de Liquidación: En un


procedimiento concursal de liquidación, los acreedores sólo tendrán derecho a
concurrir al reparto de dividendos si han comparecido al tribunal a verificar su crédito.
Los acreedores tendrán un plazo de treinta días contado desde la notificación de la
Resolución de Liquidación para verificar sus créditos y alegar su preferencia ante el
tribunal que conoce del procedimiento, acompañando los títulos justificativos del
crédito e indicando una dirección válida de correo electrónico para recibir las
notificaciones que fueren pertinentes. Vencido este plazo, se entenderá de pleno
derecho cerrado el período ordinario de verificación de créditos, sin necesidad de
resolución ni notificación alguna. Existe una oportunidad extraordinaria de verificar
créditos.

B. Requisitos de la demanda

Los requisitos que deben verificarse son dobles; a saber, los generales de todo escrito y los
especiales propias del escrito de demanda.

i) Requisitos comunes a todo escrito:


1) Suma que indica su contenido.
2) Constitución de patrocinio y poder, en caso de ser la 1° presentación.

El artículos 5° de la Ley General sobre Tramitación Electrónica de los Procedimientos


Judiciales regula la forma en que en la actualidad, deben presentarse las demandas y escritos
por vía electrónica “El ingreso de las demandas y de todos los escritos se hará por vía electrónica a
través del sistema de tramitación electrónica del Poder Judicial, para cuyos efectos los abogados o
habilitados en derecho se registrarán en los términos que se regulen en el auto acordado que la Corte
Suprema dictará al efecto. En casos excepcionales, cuando las circunstancias así lo requieran o se trate
de una persona autorizada por el tribunal por carecer de los medios tecnológicos necesarios, los escritos
podrán presentarse al tribunal materialmente y en soporte papel por conducto del ministro de fe
respectivo o del buzón especialmente habilitado al efecto. Los escritos presentados en formato papel serán
digitalizados e ingresados a la carpeta electrónica inmediatamente”

ii) Requisitos especiales de la demanda que debe ser presentada por OJV: presuma que
indique:

1. Procedimiento del juicio.


2. Materia del pleito.
3. Nombre completo del o de los demandantes con su RUT.
4. Nombre del abogado patrocinante con su RUT.
5. Nombre del apoderado con su RUT.
6. Nombre de el o los demandados con el RUT, si fuera conocido.

iii) Requisitos especiales contemplados en el art. 254 CPC: La demanda debe contener:

1. La designación del tribunal ante quien se entabla. Esto consiste en el tratamiento de


estilo que corresponde a la jerarquía del tribunal.
a. Señor Juez de Letras. Corresponde a un tribunal civil de primera instancia.
b. Ilustrísima Corte. Corresponde a una Corte de Apelaciones.
c. Excelentísima Corte. Corresponde a la Corte Suprema

2. El nombre, domicilio y profesión u oficio del demandante y de las personas que lo


representen, y la naturaleza de la representación.
Debe individualizarse en forma precisa al actor. En el caso de personas jurídicas o
incapaces, debe individualizarse al representante de las mismas, indicando si la
representación es legal o convencional.
El nombre tiene importancia para que el demandado pueda oponer determinadas
defensas y excepciones, así como también saber a quiénes afectará, con la autoridad
de la cosa juzgada, la sentencia llamada a resolver el conflicto. Respecto al domicilio,
este tiene importancia para las notificaciones.

En este punto es importante mencionar que la Ley N° 21.394, que introduce reformas
al sistema de justicia para enfrentar la situación luego del estado de excepción
constitucional de catástrofe por calamidad pública, dispone “Incorpórase, en el numeral
2 del artículo 254, a continuación de la palabra “representación”, la frase “, además de un medio
de notificación electrónico del abogado patrocinante y del mandatario judicial si no lo hubieren
designado”.

3. El nombre, domicilio y profesión u oficio del


demandado.
El nombre del demandado es indispensable, para saber quién será el sujeto pasivo,
determinar su capacidad, determinar la competencia relativa en razón del territorio ya
que, si su domicilio se encuentra fuera del territorio jurisdiccional, podrá oponer la
excepción dilatoria de incompetencia del tribunal. El domicilio también es
trascendente para los efectos de facilitar la notificación personal.
Al igual que en el caso anterior, también es relevante para apreciar los efectos de la
cosa juzgada.
En caso de haberse iniciado el juicio por medida prejudicial es conveniente, aunque
no obligatorio volver a individualizarlo.

4. Exposición clara de los hechos y fundamentos de derecho en que se apoya.


Este requisito dice relación con la substancia misma del juicio. Se trata de los elementos
que configuran la pretensión. Permite determinar la competencia del tribunal,
establecer el carácter de controvertidos de los hechos, fijar cuáles hechos serán objeto
de prueba, facilita al tribunal el establecimiento de los hechos en la sentencia definitiva.
La exposición clara de los fundamentos de derecho, en cambio, tiene por objeto
facilitar la calificación jurídica que posteriormente hará el juez. Aquello se satisface
expresando las razones jurídicas que, a juicio del actor, justifican la declaración del
derecho sustancial reclamado. No es necesario indicar los preceptos legales aplicables,
pues dicha tarea la efectuará el tribunal al momento de dictar sentencia.

5. La enunciación precisa y clara, consignada en la conclusión de las peticiones que se


sometan al fallo del tribunal.
El actor puede deducir una pluralidad de pretensiones, pudiendo ser dicha pluralidad:
a. Simple: las distintas pretensiones se reclaman en forma conjunta.
b. Alternativa: la verificación de una de las múltiples pretensiones, basta para
satisfacer al actor. Si el tribunal satisface todas, incurre en ultrapetita.
c. Eventual o subsidiaria: se solicita una actuación del tribunal, pero luego
subordinadamente, para el caso de que la primera sea denegada, se formula
otra pretensión. El Artículo 17 CPC señala que: “En un mismo juicio podrán
entablarse dos o más acciones con tal que no sean incompatibles. Sin embargo, podrá
proponerse en una misma demanda dos o más acciones incompatibles para que sean
resueltas una como subsidiaria de la otra”.

El N° 5 del 254 se refiere a la parte petitoria de la demanda la cual contiene las


pretensiones del demandante, la que junto a las excepciones que opone el demandado
configuran la competencia específica del tribunal. El tribunal tiene la obligación de
pronunciarse en la sentencia definitiva acerca de las pretensiones que el actor hace
valer en la parte petitoria de la demanda. La omisión de fallar alguna de las
pretensiones, sin que se encuentre facultado para dicha omisión (como ocurre cuando
el tribunal acoge una pretensión, respecto de las incompatibles), origina una causal del
Recurso de Casación en la Forma.

No es obligatorio que la demanda se presente con los documentos en que se funda. Sin
embargo, según lo dispuesto en el artículo 255, en caso que el actor acompañe en la
demanda voluntariamente documentos, el demandado tiene el plazo del término de
emplazamiento para impugnarlos.

C. Efectos de la demanda
i. Queda abierta la instancia y el juez está obligado a conocer de las peticiones
del actor e instruir el proceso. En caso de no hacerlo incurre en el delito de
denegación de justicia.
ii. Se entiende que el actor prorroga tácitamente la competencia, en los casos en
que esta prórroga proceda, y queda fijada la competencia del juez con relación
al actor (respecto del demandado debemos recordar que todavía podría alegar
la incompetencia del tribunal).
iii. Fija la extensión del juicio, determinando las defensas del demandado, ya que
solo podrá referirse a lo sostenido en la demanda, a menos que deduzca
reconvención. Así también, limita los poderes del juez, quien podrá referirse en
la sentencia únicamente a lo expuesto en la demanda.
iv. Produce efectos respecto al derecho: Así, por ejemplo, en los juicios sobre
alimentos, estos se deben desde la primera demanda (331 CC); en el caso de las
obligaciones alternativas, la demanda individualiza la cosa debida cuando la
elección es del acreedor (artículo 1502 inc 2° CC).

D. Providencia que recae en la demanda

Una vez presentada la demanda por el actor, el tribunal la examinará desde un punto de
vista formal. El legislador establece casos en que, justamente por defectos de forma, el
tribunal se encuentra facultado para, de oficio, no darle curso.

i. Podrá no dar curso a la demanda que no contenga las indicaciones ordenadas en


los tres primeros números del artículo 254 CPC (artículo 256). En este caso el actor
deberá cumplir con lo ordenado por el tribunal mediante un escrito que corrija la
omisión. Ahora bien, si los requisitos que se hubieren omitido se refieren a los
números 4 y 5, el tribunal no se encuentra facultado para no dar curso a la
demanda, dichos defectos de forma sólo podrán alegarse por la parte demanda a
través de la excepción dilatoria de ineptitud de libelo.

ii. El tribunal puede declarar de oficio su incompetencia absoluta para conocer de la


demanda.

iii. El tribunal puede, de oficio, no dar curso a la demanda, si no se ha dado


cumplimiento a la constitución del patrocinio y del poder y se trata de la primera
presentación.

Por el contrario, si el juez no hace este examen, o bien éste resulta satisfactorio, admitirá la
demanda a tramitación y conferirá traslado de ella al demandado para que la conteste (art.
257 CPC)

El artículo 257 del CPC señala que: admitida la demanda, se conferirá traslado de ella al demandado
para que la conteste. Se trata, de una resolución de mero trámite, de un decreto, providencia o
proveído ya que es una resolución destinada únicamente a dar curso progresivo a los autos.
Esta resolución deberá contener:
1. Lugar y fecha exacta.
2. A la petición principal, por interpuesta la demanda, traslado, o simplemente traslado.
3. Se proveen como correspondan los demás otrosíes.
4. Firma electrónica avanzada del juez y del secretario.

E. Retiro, modificación y desistimiento de la demanda

i. Luego de presentada la demanda y antes de la notificación de esta, el actor puede


retirarla, sin que sea necesario presentar ningún escrito. En dicho caso, la demanda
se entiende como no presentada, tal como lo dispone el artículo 148 del CPC. Se
trata de un acto material en que se deja constancia en el libro de ingresos. Así
también podría modificarla, ampliarla o restringirla mediante un nuevo escrito
durante este tiempo. No existe impedimento alguno para deducir una nueva
demanda, ya que la relación jurídica procesal aún no se encuentra perfeccionada
en este momento.
ii. Notificada la demanda, pero antes de su contestación, podrá el demandante hacer
en ella las ampliaciones o rectificaciones que estime convenientes. Estas modificaciones
se considerarán como una nueva demanda para efectos de su notificación
(personalmente), y solo desde la fecha en que esta diligencia se practique correrá
el término para contestar la primitiva demanda, señala el artículo 261 CPC.
Así también, según el artículo 148 del CPC, luego de notificada la demanda, el
actor puede presentar un escrito de desistimiento. La sola presentación de este escrito
no pone término al juicio, sino que requiere tramitación incidental. Será necesario
que el juez, luego de dicha tramitación, emita una resolución que acoja dicho
desistimiento (interlocutoria de primer grado). Por ello, es que no debemos
confundir el retiro con el desistimiento, ya que en el primero se mantiene vigente
la pretensión y no se requieren facultades especiales del mandatario judicial.
iii. Luego de contestada la demanda, el actor no podrá modificarla en forma alguna,
únicamente tendrá la opción de desistirse de ella en las condiciones y formas que
establece el Título XV del Libro I. Excepcionalmente, el actor puede ampliar,
adicionar o modificar la demanda en el escrito de réplica, pero con las limitaciones
que indica el artículo 312 del CPC, por lo que no podrá alterar cuestiones que
sean objeto principal del pleito.

II. EL EMPLAZAMIENTO

Benavente señala que “el emplazamiento es una notificación a la cual se le agrega la orden de que el
demandado comparezca al tribunal a causa de que hay una demanda interpuesta en su contra4”. El
profesor Ignacio Rodríguez menciona que “el emplazamiento consta de dos elementos: 1° la
notificación hecha en forma legal; y 2° el transcurso de término que la ley señala al demandado para que

4
BENAVENTE, Darío. Juicio Ordinario y Recursos Procesales. Editorial Universitaria SA, Universidad de Chile, Escuela de
Derecho, 1959. P. 43.
comparezca al tribunal”5. Es la notificación que se le hace a la parte para que dentro de un plazo
determinado, haga valer sus derechos. En el juicio ordinario de mayor cuantía, el término de
emplazamiento es la oportunidad que tiene el demandado para contestar la demanda, pero
también es el plazo para oponer excepciones dilatorias.

A. Elementos del emplazamiento

i) Notificación válida de la demanda

Respecto del demandante, la resolución recaída en la demanda debe notificarse por el Estado
Diario. Respecto del demandado, la resolución recaída en la demanda, se notificará (1)
personalmente si se trata de la primera gestión recaída en juicio, (2) o por estado diario, en
caso de que no sea la primera (por ejemplo, si el juicio se inició con una medida prejudicial).
Sin perjuicio de aquello, el tribunal puede disponer en dicho caso la notificación personal de
la resolución recaída en la demanda. Recordemos que la notificación personal, por su
perfección, puede usarse en todo caso.

El profesor Maturana menciona que, no basta que la demanda sea notificada, sino que ella
debe notificarse en forma legal. Si aquello no ocurre, todo lo actuado será nulo, por faltar un
presupuesto en la relación procesal. Maturana sostiene que desde el momento en que se notifica
válidamente la demanda, nace la relación procesal, produciéndose efectos sustantivos y procesales.

1. Efectos de la notificación válida de la demanda


a. Efectos procesales:
● El proceso pasa a tener existencia legal, creándose un vínculo entre las
partes y con el juez.
● Radicación de la competencia respecto del demandante (el demandado aún
puede alegar la incompetencia del tribunal).
● Preclusión de la facultad del demandante para retirar “materialmente” la
demanda deducida ante el tribunal. Sólo puede desistirse de la demanda,
lo que producirá cosa juzgada.
● Las partes deben realizar actuaciones para que el proceso avance. Si
permanecen inactivas sin realizar gestiones útiles para dar curso al
procedimiento, por un lapso que exceda los 6 meses contados desde la
última resolución recaída en gestión útil, el demandado puede pedir el
abandono del procedimiento. Éste no extingue las pretensiones, pero
genera la pérdida de todo lo obrado en el procedimiento, incluida la
notificación de la demanda, con las consecuencias que ello tiene para
interrumpir civilmente la prescripción.
● La sentencia declarativa produce efectos desde que se notifica la demanda.
La sentencia constitutiva produce efectos desde que se notifica la sentencia
misma.
● Se genera el estado de litispendencia (art. 303 CPC). Se puede oponer como

5
RODRÍGUEZ P, Ignacio. Procedimiento Civil, Juicio Ordinario de Mayor Cuantía. Editorial Jurídica, de Chile, Séptima Edición
actualizada por Cristián Maturana Miquel, 2006.P.33.
excepción dilatoria.

b. Efectos civiles:
● Constituye en mora al deudor: interpelación judicial (art. 1551 N°3 CC). La
excepción la componen los juicios de alimentos, puesto que surgen las
obligaciones provisionales desde presentada la demanda y establecen una
pendencia jurídica.
● Transforma en litigiosos los derechos para efectos de su cesión (1911 CC)
● Se interrumpe civilmente la prescripción (arts. 2503, 2518 y 2523 CC)
● Transforma la prescripción extintiva de corto tiempo en largo tiempo (art. 2523
CC).
● Impide que el pago por consignación sea calificado por el tribunal en gestión
voluntaria, debiendo efectuarse en el juicio que se hubiere iniciado o se
encontrare pendiente.

ii) Transcurso del plazo para hacer valer los derechos

Características del término de emplazamiento: es un plazo legal, fatal, improrrogable,


discontinuo y común ya que, si hay pluralidad de demandados, el término corre para
todos a la vez hasta que expire el último término parcial. El plazo comienza a correr
individualmente para cada uno de los notificados, pero se extiende hasta que expira el
último plazo.

El plazo se cuenta desde la notificación de la demanda y su extensión varía de acuerdo


al procedimiento de que se trate. En el juicio ordinario es importante determinar el
lugar donde el demandado es notificado de la demanda y no el de su domicilio u otro. En
este sentido deben distinguirse las siguientes situaciones:
1) 15 días: demandado es notificado dentro de la comuna donde funciona el
tribunal
2) 15 días + 3 días: demandado notificado dentro del territorio jurisdiccional,
pero fuera de los límites de la comuna que sirve de asiento al tribunal
3) 18 días + tabla de emplazamiento que cada 5 años confecciona la Corte
Suprema, tomando en consideración las distancias y facilidades o dificultades
que existen para las comunicaciones: si el demandado es notificado fuera del
territorio jurisdiccional, sea dentro o fuera del territorio de la República. En
este último caso, la notificación debe hacerse por medio de exhorto nacional o
carta rogatoria internacional según el caso, a través del tribunal nacional o
extranjero.

En este punto, nuevamente resulta es relevante tener en cuenta lo dispuesto por la Ley N°
21.394, que introduce reformas al sistema de justicia para enfrentar la situación luego del
estado de excepción constitucional de catástrofe por calamidad pública, dispone “a)
Reemplázanse, en el inciso primero, la palabra “quince” por “dieciocho”, y la frase “en la comuna donde
funciona el tribunal” por “en el territorio jurisdiccional del tribunal en que se haya presentado la
demanda”. b) Suprímese el inciso segundo”. Por lo tanto, se eliminan los 3 días de
emplazamiento extra en caso de funcionar el tribunal en una comuna distinta pero dentro
del territorio jurisdiccional (art. 258 CPC). Pero el término de emplazamiento aumenta de
15 a 18 días, por regla general.

B. Efectos del emplazamiento

El principal efecto del transcurso del término de emplazamiento es que permite que se tenga
por cumplido un trámite esencial para la validez del proceso.
De no cumplirse con el debido emplazamiento es posible reclamar:

i) Por excepción dilatoria


ii) Por incidente de nulidad
iii) Por recurso de casación en la forma

Una vez que se haya notificado la demanda y transcurrido el término de emplazamiento, sea
que se haya contestado efectivamente o de manera ficta la demanda (rebeldía), se constituye
válidamente la relación procesal.

La notificación de la demanda genera para el demandado la carga de la defensa.

III. LA DEFENSA DEL DEMANDADO

El concepto de defensa, entendido en un sentido amplio, se refiere a la posibilidad que


tiene el demandado de oponerse a la pretensión que el actor ha formulado frente a él y
ante al órgano jurisdiccional. Corresponde a un derecho a la acción, también entendido de
forma genérica.
Gonzalo Cortéz señala que “la notificación practicada en forma legal de la demanda crea para el
demandado la carga procesal de comparecer para defenderse. La defensa del demandado puede
articularse de diversos modos, de suerte que frente a una demanda se abren para el demandado una
variedad de conductas defensivas posibles”6. En este sentido, el demandado puede adoptar
distintas actitudes frente a la notificación de la demanda las que van desde adoptar una
actitud pasiva, hasta una beligerante.

A. Posibles actitudes del demandado frente a la demanda

i) No hacer nada (silencio): Esta situación es conocida como rebeldía o contumacia.


El demandado asume una actitud pasiva, manteniéndose inactivo, sin comparecer en
el proceso. Debido a que el término de emplazamiento es fatal, este precluye por el
solo hecho de que la facultad de contestar la demanda por el demandado no se haya
ejercido en el plazo establecido para aquello.

6
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. P.135.
Ahora bien, ¿cuál es el efecto jurídico que se sigue de la rebeldía? La rebeldía no
importa una aceptación por parte del demandado de la pretensión hecha valer por el
actor en la demanda, “porque en derecho quien calla no otorga, sino que sencillamente no
dice nada”7, por el contrario, implica una contestación ficta de la demanda en la que se
tienen por negados genéricamente los fundamentos de su pretensión. Si el
demandado no contesta dentro del plazo, el tribunal de oficio o a petición de parte,
procede a declarar precluido el derecho del demandado a contestar la demanda, y
conferirá traslado al actor para replicar.(artículos 64, 78 y 79 CPC). En este caso la
providencia a dictar por el tribunal debería ser: “declárase precluida la facultad del
demandado para contestar la demanda por no haberse ejercido dentro del plazo fatal establecido
al efecto; traslado para replicar”.

Lo anterior implica que el actor será quien deberá probar los hechos en que funda su
pretensión (artículo 318 CPC inciso 1).

Además, en primera instancia el demandado rebelde debe ser considerado para todos
los trámites, notificándole las diversas resoluciones que se dicten y debe acusársele las
rebeldías respecto de cada trámite cuando ello sea procedente por tratarse de plazos
no fatales para que el demandado realice sus actuaciones.

El demandado rebelde conserva el derecho de comparecer en cualquier momento a


la instancia, pero debiendo respetar todo lo obrado antes de su comparecencia, salvo
que formule un incidente de nulidad de todo lo obrado por falta de emplazamiento. Si
éste se acoge, el proceso comienza a tramitarse nuevamente.

ii) Reacción: Si el demandado comparece en el proceso, puede asumir las siguientes


actitudes:

1) Allanamiento:
Según Eric Chávez “Es aquella figura procesal que se produce cuando notificada la demanda
en forma legal al demandado, éste acepta en todas o algunas de sus partes la demanda de la
contraria”8. El artículo 313 del CPC señala que es aquella situación que se produce si el
demandado acepta llanamente las peticiones del demandante. Por lo tanto puede
definirse al allanamiento como una aceptación expresa del demandado a la
pretensión hecha valer por el sujeto activo. Ahora bien, esta situación tampoco
implica la terminación inmediata del proceso. Según el artículo 313, el efecto que
produce el allanamiento es que el tribunal mandará citar a las partes para oír sentencia
definitiva, liberándolo de la obligación de recibir la causa a prueba una vez concluida
la etapa de discusión.

Es relevante mencionar que para que un mandatario judicial se allane, requiere de la

7
RODRÍGUEZ P, Ignacio. Procedimiento Civil, Juicio Ordinario de Mayor Cuantía. Editorial Jurídica, de Chile, Séptima Edición
actualizada por Cristián Maturana Miquel, 2006. P.40.
8
CHÁVEZ C, Erick. Procedimientos Juzgados Laborales. Práctica Forense y Jurisprudencia, Tofulex Ediciones Jurídicas. Novena
Edición, 2021. P.27.
facultad especial del inciso 2° del art. 7° del CPC

El allanamiento puede ser total o parcial. Será total cuando se extiende a todas y cada
una de las pretensiones del actor, y parcial cuando se refiera a una o más de las
pretensiones, pero no a todas. De esta forma, si hay allanamiento total, es decir, existe
una aceptación de todos los fundamentos de hecho y de derecho de la pretensión
contenida en la demanda, no habrá fase de prueba y el tribunal citará a oír sentencia (313
CPC). Excepcionalmente, ni siquiera producirá este efecto de omitir los trámites de
prueba cuando se trate de procesos en que exista un interés público comprometido: ej.
Nulidad de matrimonio. Si hay allanamiento parcial, eso sólo se producirá respecto
de los puntos donde haya allanamiento, debiéndose recibir la causa a prueba por el
resto de los puntos, si hay controversia.

No debe confundirse el allanamiento, con la situación en que el demandado no


contradice los hechos, a la cual también se refiere el artículo 313 del CPC. En el caso
del allanamiento el sujeto pasivo reconoce los hechos y el derecho invocados en la
pretensión del actor. En cambio, en el segundo caso el legislador se limita a decir que
el demandado no contradice substancial y pertinentemente los hechos sobre los que
versa el juicio. Ahora bien, en ambos casos el tribunal conferirá traslado de la
contestación al demandante para que replique. Una vez que se evacua el trámite de la
réplica, se confiere traslado para la dúplica, y luego y luego de evacuada ésta, el
tribunal debe citar a las partes para oír sentencia, omitiéndose los trámites de la
prueba. Según lo dispuesto en el artículo 326, en caso que se estime improcedente la
resolución que cita a las partes para oír sentencia, por estimar erradamente que existe
allanamiento o aceptación de los hechos, procede el recurso de apelación, debido a que
se estaría negando el trámite de recepción de la causa a prueba.

2) Oposición a la pretensión: El demandado reclama la no actuación de la pretensión


que formula el actor. Esta oposición admite diversas formas:

a) La defensa negativa. Esta forma de oposición no conlleva ninguna afirmación


sobre hechos nuevos, el demandado únicamente se limita a negar de manera
genérica la pretensión sostenida por el actor en su demanda. Lo anterior tiene
como consecuencia que la carga de la prueba recaerá en el demandante, puesto
que el demandado no introduce hechos nuevos que tengan por objeto destruir
la pretensión. Estas defensas no deben ser analizadas en lo dispositivo del fallo,
sino sólo en la parte considerativa.
b) Las excepciones. Las excepciones son las peticiones del demandado, basadas
en elementos de hecho y de derecho que tienen por objeto corregir vicios del
procedimiento o provocar una eficacia extintiva, impeditiva o invalidativa, del
efecto jurídico afirmado como fundamento de la pretensión. Se clasifican en:
dilatorias, perentorias, mixtas y anómalas.

● ¿Existe alguna diferencia entre el concepto de defensa y de excepción?


Lo anterior ha sido objeto de discusión. El propio legislador en ocasiones utiliza
los conceptos como sinónimos indistintamente ( ej. 170 No. 3.) , y en otros casos
les atribuye un significado especial (ej. 309 No. 3 ). La Corte de Apelaciones de
Santiago ha dicho “Toda excepción es defensa, pero no toda defensa es
excepción”.
Héctor Santos señala que la defensa es la “oposición del demandado para
contradecir y desvirtuar las pretensiones del fondo del actor. Es el derecho con que
cuenta el demandado para atacar el fundamento o la razón de la pretensión. 9” En este
sentido, Nicolás Ubilla afirma que consiste en “contestación de la pretensión que
hace el demandado y en la que procede a negar el elemento de hecho (alegación) o de
derecho que sirve de fundamento a la pretensión. Consiste en la mera negativa que no
lleva consigo ninguna afirmación respecto de un nuevo hecho.”10 Como veíamos, lo
anterior tiene como consecuencia que la carga de la prueba corresponde al
actor, pues el demandado no incluye hechos nuevos que deban probarse.
Por otro lado, el mismo autor sostiene que el concepto de excepción consiste
en el “medio de defensa en el cual el demandado introduce al proceso un hecho nuevo
destinado a excluir la pretensión, por tener respecto de ellas un efecto invalidatorio,
modificativo o extintivo. Introduciendo nuevos hechos al proceso”. Por lo tanto, en
este caso será el demandado quien deberá probarlos.

● Excepciones dilatorias:

El profesor Rodríguez señala que “son las defensas de forma del demandado.
Mediante ellas el demandado se abstiene de contestar la demanda, no entra al fondo de
la cuestión, sino que solicita previamente que se corrijan los vicios de que a su juicio
adolece el procedimiento”11. Por su parte, la Corte Suprema ha dicho que “las
excepciones dilatorias, como su nombre lo indica, retrasan la entrada misma al pleito
mientras no se subsane el defecto, pero no enerva el derecho del actor”.12
Las excepciones dilatorias se encuentran enumeradas en el artículo 303 del
Código de Procedimiento Civil. De la lectura numeral 6 del artículo 303 se
puede concluir que son aquellas que tienen por objeto corregir vicios del
procedimiento sin afectar el fondo de la acción deducida. Se afirma que el artículo
303 es taxativo pero genérico, justamente por la causal contemplada en su
último número.

● Excepciones dilatorias expresamente reguladas por el legislador:

○ Incompetencia del tribunal ante quien se ha presentado la demanda (303


N°1).
En el juicio ordinario, la forma de hacer valer la incompetencia del tribunal por
vía incidental a través de la declinatoria de la competencia es mediante esta
excepción dilatoria. Recordemos que es “aquella incidencia que se propone ante el
tribunal que se cree incompetente para conocer de un negocio que le esté sometido,
indicándole cuál es el que se estima competente y pidiéndole que se abstenga de dicho

9
SANTOS AZUELA, Héctor; Ob. cit.; p. 88
10
UBILLA P, Nicolás. Juicio Ordinario de Mayor Cuantía. P.18.
11
RODRÍGUEZ P, Ignacio. Procedimiento Civil, Juicio Ordinario de Mayor Cuantía. Editorial Jurídica, de Chile, Séptima Edición
actualizada por Cristián Maturana Miquel, 2006.P. 41.
12
CS Rev. XXXI.1°-80.-
conocimiento”13. Por esta vía puede alegarse tanto su incompetencia absoluta
como relativa ya que la ley no distingue.

El tribunal es incompetente absolutamente cuando se produce una infracción


a las reglas de la competencia absoluta, en atención a los elementos cuantía,
materia, y fuero. En este caso el tribunal puede y debe declarar su
incompetencia de oficio (artículo 84 CPC). Lo anterior debido a que, de
continuar, en cualquier momento las partes podrían reclamar de la nulidad de
la relación procesal, trayendo como consecuencia la nulidad de todo lo obrado,
lo que tiende a evitar la ley.

El tribunal es incompetente relativamente cuando se produce una infracción


a las reglas de la competencia relativa, en razón al elemento territorio. Cuando
esto sucede, el tribunal no puede declarar su incompetencia de oficio, pues los
preceptos del COT facultan a las partes para prorrogar la competencia al
tribunal relativamente incompetente (artículos 181 y ss.).

En caso de violarse las normas de la distribución de causas, Maturana sostiene


que debería fundarse la excepción dilatoria en el No. 6 y no en el No. 1, debido
a que se trataría de una norma administrativa y no a una norma que determine
la competencia.

¿Puede alegarse la falta de jurisdicción como excepción dilatoria basada en


el N°1 del artículo 303?

El profesor Maturana sostiene que “la excepción de falta de jurisdicción no puede


tener por objeto corregir vicios del procedimiento, sino que va al fondo mismo del
asunto.14” La oportunidad procesal para oponer la excepción de falta de
jurisdicción es al contestar la demanda. La Corte suprema ha dicho “La
excepción opuesta a una demanda fundada en la falta de jurisdicción de los tribunales
chilenos para conocer de ella, es una excepción perentoria, puesto que conduce al
rechazo absoluto y definitivo de la demanda por falta de acción en el demandante para
ocurrir a los tribunales de justicia”15.

○ Falta de capacidad del demandante, o de personería o representación legal


del que comparece a su nombre (303 N°2)
Como primera cuestión, puede apreciarse que se trata de situaciones que
afectan la comparecencia procesal del actor, no del demandado. La falta de
personería o representación del demandado debe ser articulada a través del
numeral sexto del 303.

El precepto contempla 3 situaciones:

13
ABUSLEME; PINTO, Interrogadores. Apunte de Derecho Procesal Orgánico, Abusleme y Pinto Abogados, 2018. P.66.
14
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. p.45.
15
CS Rev. IV-II-1°-581
(1) La falta de capacidad. Para interponer una acción se requiere capacidad, es
decir, habilidad para parecer en juicio por sí mismo, sin el ministerio,
autorización o intervención de otra (falta de capacidad de ejercicio).
(2)La insuficiencia o falta de representación convencional o personería del
actor, como por ejemplo, si este demanda a nombre de un tercero en virtud de
un poder que no le faculta para ello; o si un socio acciona a nombre de la
sociedad sin estar facultado en el pacto social.
(3)La falta de representación del actor, como la que tienen los padres sobre el
hijo no empancipado, el curador del demente sobre este último, etc.

El CPC no contiene normas que se refieran a esta materia por lo que deben
aplicarse las reglas generales que establecen las leyes sustantivas.

Queda excluido lo que se conoce como falta de legitimación activa del


demandante, toda vez que esta se refiere a una cuestión de fondo, que excede
de los límites de una excepción dilatoria. La Corte Suprema ha señalado que
“La legitimación activa -que no implica otra cosa que la aptitud para ser parte de un
proceso concreto y obtener una sentencia favorable a su pretensión- dice relación con
una cuestión de fondo, constituye un presupuesto de toda acción, lo que difiere de las
excepciones dilatorias, que tienen por objeto la corrección del procedimiento sin afectar
el fondo de la acción deducida”16.

Gonzalo Cortés afirma que “se ha considerado que esta excepción pertenece a aquella
cuyos defectos resultan perfectamente subsanables y, por ende, no ponen término al
juicio”17.

○ Litispendencia (303 N°3)

Si bien el legislador no definió lo que se entiende por litis pendencia, la


jurisprudencia se ha encargado de determinar sus requisitos. La Corte Suprema
ha dicho que “la excepción tiene lugar cuando concurren dos litigios entre las mismas
partes, seguidos ante el mismo o diverso tribunal, siempre que versen sobre idéntico
objeto pedido y con demandas basadas en la misma causa a pedir”18. Así también, el
máximo tribunal ha dicho que “la finalidad de la litispendencia radica en la
necesidad de evitar la duplicidad de la actividad jurisdiccional y de que no haya más de
una relación procesal entre las mismas personas y sobre el mismo objeto”19.

En este sentido, para que concurra la excepción de litispendencia, es necesario


que se verifiquen los siguientes requisitos:
(1) Existencia de dos procesos jurisdiccionales que se encuentren pendientes.
Así, queda excluido el supuesto de que alguno de los procesos aún no se
hubiere iniciado o hubiere finalizado mediante sentencia firme. Según

16
CS, 5 de enero de 2010. rol N° 2033-2010.
17
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. p.168.
18
CS, 17 de marzo de 2011. rol 158-2011.
19
CS, 9 de diciembre 1981.
Maturana, para que existan procesos pendientes no es necesario que se haya
trabado la litis, sino que basta con que se haya notificado la demanda, pues en
ese momento se origina la relación procesal.
(2) Que entre los dos procesos concurran las necesarias identidades subjetivas,
objetivas y de causa: identidad legal de partes, cosa pedida y causa de pedir.
(3) Que en el proceso en el que se haga valer la litispendencia haya comenzado
con posterioridad al que la origina.

○ Ineptitud del libelo por razones de falta de algún requisito legal en el modo
de proponer la demanda (303 N°4)
Como veíamos, la demanda debe contener todos los requisitos mencionados
en el artículo 254 del CPC. Si se omite alguna de las primeras tres menciones,
el juez puede, de oficio, desecharla. Ahora bien, podría ocurrir que pese a
aquello el juez le de curso. Así también, podría suceder que se hubiere omitido
el requisito del N°4 o 5 del artículo 254. En cualquiera de esos casos se podrá
oponer la excepción de ineptitud del libelo. Rodríguez menciona que “para que
proceda dicha excepción la demanda debe ser vaga, ininteligible, faltarle precisión en lo
que se pide, faltarle alguna de las menciones del 254 o estar éstas mal expuestas”20.

Aceptada la excepción de ineptitud del libelo, el tribunal debe abstenerse de


pronunciarse respecto de las excepciones de fondo por tener éstas el carácter
de incompatibles.

En atención a que el juez no puede desestimar la demanda de oficio cuando


faltan alguno de los requisitos 4 o 5 del artículo 254, la ineptitud del libelo se
enarbola como la manera de alegar dichos defectos.

○ Beneficio de excusión (303 N°5)


Según el artículo 2.357 del Código Civil, el beneficio de excusión es el derecho
del fiador en virtud del cual puede exigir que, antes de proceder contra él, se
persiga la deuda en los bienes del deudor principal, y en las hipotecas o
prendas prestadas por éste para la seguridad de la misma deuda.

○ En general las que se refieran a la corrección del procedimiento sin afectar al


fondo de la acción deducida (303 N°6)
Este numeral le da el carácter de genérico o ejemplar a la enumeración del
artículo 303. Típicos defectos procesales que pueden ser denunciados a través
de esta excepción son la inadecuación del procedimiento, como si se
pretendiera tramitar conforme al procedimiento ordinario una pretensión que
debe ser sustanciada conforme al procedimiento sumario; la defectuosa
acumulación de pretensiones, como quien pretende articular en una misma
demanda y en forma conjunta dos peticiones incompatibles; la defectuosa

20
RODRÍGUEZ P, Ignacio. Procedimiento Civil, Juicio Ordinario de Mayor Cuantía. Editorial Jurídica, de Chile, Séptima
Edición actualizada por Cristián Maturana Miquel, 2006. P.52.
conformación del litisconsorcio activo, como cuando varios actores entablan
conjuntamente acciones que tienen causas de pedir diversas.

● Excepciones dilatorias que pueden oponerse en segunda instancia


Puede oponerse en segunda instancia las excepciones dilatorias de
incompetencia del tribunal y de litispendencia, en forma de incidente (artículo
305 inc final).

● Forma y oportunidad en que deben hacerse valer las excepciones dilatorias


Deben oponerse:
(1) dentro del término de emplazamiento.
(2) antes de contestar la demanda.
(3) todas en un mismo escrito.

● Tramitación de las excepciones dilatorias:

De acuerdo a lo previsto en el artículo 307 del Código de Procedimiento Civil,


las excepciones dilatorias se tramitan como un incidente de previo y especial
pronunciamiento, es decir, se suspende la tramitación del procedimiento
principal hasta su resolución.

Hechas valer por el demandado, el tribunal dará traslado al demandante por


el término de 3 días para que exprese lo que estime conveniente. Vencido el
plazo, haya o no evacuado el trámite, resolverá el tribunal la cuestión, si a su
juicio no hay necesidad de rendir prueba (por ejemplo si se trata de la
excepción de ineptitud del libelo). Ahora bien, si el juez considera necesaria la
prueba, abrirá un término probatorio de 8 días, concluido el cual deberá fallar
inmediatamente o dentro de tercero día.

Dado que las excepciones dilatorias deben promoverse conjuntamente, en


principio, todas ellas deben resolverse del mismo modo. Sin embargo, si entre
las excepciones opuestas figura la incompetencia, y el tribunal la acepta, se
abstiene de pronunciarse sobre las demás, lo que parece lógico, dado que, de
acuerdo a lo resuelto por el propio tribunal, carece de la aptitud procesal para
pronunciarse sobre ellas (306 CPC).

El artículo en comento no se pronuncia acerca de la naturaleza jurídica de la


resolución que falla las excepciones dilatorias. Sin embargo, se ha estimado que
es una sentencia interlocutoria de primer grado, pues al fallar el incidente,
establece derechos permanentes para las partes. Refuerza este argumento el
mismo artículo 307, al señalar que la resolución que las rechaza es apelable (en
el solo efecto devolutivo).
La resolución que acoge una excepción dilatoria de efectos permanentes es
susceptible de ser impugnada mediante casación forma, porque pone término
al juicio o hace imposible su continuación (766 CPC).

● Efectos
La regla general es que los efectos de las excepciones dilatorias sean solo
temporales, porque los defectos en que se fundan son esencialmente
enmendables, y en virtud de la economía procesal, el principio general en la
materia es la posibilidad de subsanación. Sin embargo, no todos los defectos
que se acusan mediante las dilatorias permiten subsanación. Algunas de las
excepciones dilatorias, en el evento de ser acogidas, producen efectos
permanentes, lo que significa que su estimación hace imposible la continuación
del proceso (por ejemplo, la incompetencia, litispendencia, el beneficio de
excusión). Otras excepciones en cambio, al estar fundadas en defectos
procesales subsanables, permiten la continuación del proceso una vez que tales
defectos han sido corregidos (por ejemplo, la ineptitud del libelo). A estos
últimos está referido el art 308 CPC cuando señala “subsanados los defectos de
que adolezca la demanda”.

Por lo anterior, podrían darse distintas situaciones respecto al fallo de las


excepciones dilatorias:
(1) El tribunal acoge las excepciones presentadas y se trata de vicios
insubsanables: el proceso concluye.
(2) El tribunal acoge las excepciones presentadas y se trata de vicios
subsanables: el actor debe corregir los defectos que sirvieron de
fundamento a la excepción, debiendo hacerse notar que el demandante
no tiene plazo para efectuar dicha corrección, lo anterior porque la
carga de dar curso progresivo al proceso recae en el demandante (no
ocurre lo mismo respecto del actor reconvencional). Desde que se
notifica por el estado diario la resolución que se pronuncia respecto del
acto subsanatorio, el demandado tiene un plazo de 10 días para
contestar.
(3) El tribunal desecha las excepciones presentadas: si este es el caso, el
demandado debe contestar la demanda en un plazo de 10 días,
cualquiera sea el lugar donde haya sido notificado.

Se ha dicho que el plazo de 10 días señalado en la disposición es un


plazo individual, referido al demandado que opuso excepciones
dilatorias21.

● La Excepción dilatoria y el incidente de nulidad


Las excepciones dilatorias pueden hacerse valer, como tales, dentro del
término de emplazamiento. Ahora bien, esta no es la única oportunidad en que
aquellas se pueden hacer valer ya que el art. 305 inciso 2º, al remitirse a los arts.
85 y 86, está aceptando expresamente que las excepciones del 303 puedan servir
de base para plantear incidentes de nulidad de todo lo obrado en el proceso.
Esto se explica porque los 4 primeros números del art. 303, corresponden a los
elementos o presupuestos de la relación procesal. En la actualidad, la
posibilidad de alegar con posterioridad una excepción dilatoria es restringida
pues justamente se limita el plazo para deducir un incidente de nulidad: 5 días

21
Ca Antofagasta 28 julio 2021, Cita Westlaw: CL/JUR/4412/2010
desde que aparezca o se acredite que quien deba reclamar la nulidad tuvo
conocimiento del vicio, salvo que se trate de la incompetencia absoluta del
tribunal.

c) La contestación de la demanda
Una tercera alternativa que tiene el demandado que comparece es contestar la
demanda. Gonzalo Cortés afirma que “la contestación es el acto procesal por el que
el demandado se opone expresamente a la pretensión del actor, es decir, es el medio por
el que pide que no se dicte contra él sentencia estimatoria de la pretensión”.

Las excepciones que opondrá el demandado en la contestación son las


perentorias. Estas se definen de modo negativo, como aquellas que no son
dilatorias, esto es, aquellas que no se refieren a la corrección del procedimiento
sino que afectan el fondo de la acción deducida. Buscan que se dicte una
sentencia sobre el fondo que desestime la pretensión procesal interpuesta. Las
alegaciones contenidas en la contestación contribuyen a delimitar el objeto del
proceso y, por tanto, ha de considerarse a la hora de comprobar el
cumplimiento del deber de congruencia en la sentencia.

La defensa del demandado puede fundarse en la alegación de hechos nuevos,


que tienden a desvirtuar los invocados por el actor, que la doctrina ha
clasificado en hechos impeditivos, extintivos o excluyentes . Lo anterior tiene
relevancia para efectos probatorios.

Las excepciones perentorias no están enumeradas e indicadas en el CPC y son


tantas cuantas imagine el demandado. Generalmente serán los modos de
extinguir las obligaciones, tratadas en los Códigos sustantivos; sin embargo,
pueden ser otras. Por ejemplo, el demandado podrá atacar los elementos de la
acción o alegar que el actor no tiene las condiciones necesarias para ejercitar la
acción que conduce.

● Forma y contenido de la contestación de la demanda

La contestación, al igual que la demanda, debe reunir los requisitos comunes a


todo escrito y los especiales del 309. Como generalmente será la primera
presentación del demandado, salvo si hubiere opuesto dilatorias, debe dar
cumplimiento al artículo 1 y 2 de la ley 18.120.

Debe hacerse por escrito y reunir los siguientes requisitos:


1° La designación del tribunal ante quien se presenta.
2° El nombre, domicilio y profesión u oficio del demandado.
Aquello tiene relevancia para los efectos de las notificaciones y de la cosa
juzgada. Respecto de las notificaciones debe tenerse en cuenta que el artículo
49 dispone que todo litigante deberá, en su primera gestión judicial, designar
un domicilio conocido dentro de los límites urbanos del lugar en que funcione
el tribunal respectivo, y si no lo hace incurre en la sanción del art 53, es decir,
todas las resoluciones que deben notificarse por cédula se harán por el estado
diario.
3°. Las excepciones que se oponen a la demanda y la exposición clara de los
hechos y fundamentos de derecho en que se apoyan;
Esta disposición, al igual que el art 312, al usar la palabra “excepciones”, se
refiere tanto a ellas, a las excepciones strictu sensu, como a las defensas,
conceptos que, como veíamos, son diferentes.
4°. La enunciación precisa y clara, consignada en la conclusión, de las
peticiones que se sometan al fallo del tribunal.
El 309 es solo ordenatorio de la litis y no contiene ningún precepto de fondo,
por lo cual no procede fundar en su infracción un recurso de casación en el
fondo, ya que carece de influencia en lo dispositivo del fallo.
El contenido de la contestación se refiere a las alegaciones o defensas y a las
excepciones que puede oponer el demandado a la acción del actor. También el
demandado se puede defender atacando al demandante a través de la
reconvención, lo cual será analizado más adelante.

● Excepciones anómalas
Lo normal es que las excepciones perentorias se opongan en la contestación de
la demanda; sin embargo, el artículo 310 permite que las excepciones de
prescripción, cosa juzgada, transacción y pago efectivo de la deuda cuando
ésta se funda en un antecedente escrito, puedan oponerse en cualquier estado
del juicio hasta antes de la citación para oír sentencia en primera instancia o de
la vista de la causa en segunda.

Respecto a la prescripción, según se ha sostenido en reiteradas oportunidades,


se refiere únicamente a la prescripción como excepción, esto es, como un modo
de extinguir acciones y derechos ajenos, no a la prescripción como acción, por
cuanto la misma requiere que se someta al pronunciamiento del tribunal una
pretensión propia del demandado, excluyente de la principal del juicio,
circunstancia inadmisible de conformidad a lo dispuesto en los artículos 309 y
312 del CPC.

Si las excepciones anómalas se oponen antes de recibir la causa a prueba, se


tramitarán conjuntamente con la cuestión principal y la resolución que recibe
la causa a prueba también se referirá a estas excepciones anómalas. Si se
oponen después de recibida la causa a prueba, se tramitarán incidentalmente,
y en tal evento, se podrá recibir el incidente a prueba, el que será fallado en la
sentencia definitiva. Si la excepción anómala se opone en segunda instancia, se
le dará tramitación incidental, entonces podrá o no haber prueba y será en la
sentencia definitiva donde el tribunal se pronunciará en única instancia
respecto de la excepción.
● Excepciones mixtas
Las excepciones de cosa juzgada y la de transacción, no obstante ser
perentorias, pueden promoverse del mismo modo que las excepciones
dilatorias, esto es, antes de contestar la demanda, dentro del término de
emplazamiento (art 304).
Se les ha denominado por la doctrina como excepciones mixtas porque
participarían de los caracteres de ambos tipos de excepciones. Lo cierto es que
se trata de excepciones perentorias, que tienen una oportunidad y forma de
tramitación distintas de otras defensas de fondo.

En cuanto al procedimiento aplicable para su substanciación, como estas se


promueven y tramitan como las dilatorias, se rigen por el procedimiento
incidental. Sin embargo, si son de lato conocimiento, es decir, precisan de un
examen más detallado, su fallo puede reservarse para la sentencia definitiva,
siguiendose con la tramitación ordinaria del juicio.

d) La Reconvención
En la contestación, considerada esta vez como trámite procesal, el demandado
puede, además de formular la resistencia, incorporar contra el demandante
otra pretensión. Por lo anterior se inicia un nuevo proceso que se resolverá en
el mismo procedimiento, y a través de una única sentencia, que contendrá
tantos pronunciamientos como pretensiones ejercitadas. Gonzalo Cortés
afirma que “la reconvención es la interposición por el demandado de una pretensión
contra la persona que lo hizo comparecer en juicio, que se entabla ante el mismo tribunal
y se substancia en el mismo procedimiento en que se tramita la pretensión del actor,
para que sea resuelta en una misma y única sentencia”22. Se trata de una supuesto
de acumulación de pretensiones sobrevenida, que a diferencia de la inicial, se
produce después de iniciado el proceso y su fundamento radica en la economía
procesal.

Lo que distingue a la reconvención de la contestación es que con la


reconvención se sobrepasa el objeto del proceso fijado por el actor, añadiendose
un objeto diferente, otra pretensión.

● Presupuestos de la reconvención
En cuanto al objeto de la reconvención, el CPC no exige conexión objetiva
alguna entre las pretensiones acumuladas, por lo que es posible que el actor
reconvencional pretenda un objeto completamente desvinculado del fijado en
la demanda inicial, admitiendo lo que la doctrina conoce como reconvención
inconexa.

Respecto del ámbito subjetivo, la regla es que la reconvención tiene eficacia


entre quienes son parte en el proceso y en calidad inversa a la que presentaban
al inicio, esto es, por la reconvención, el demandado que ejercita una pretensión
se coloca como actor en el proceso reconvencional, y el actor originario pasa a
ser demandado en el proceso reconvencional.

La reconvención requiere que el tribunal tenga competencia para conocer de


la reconvención estimada como demanda (artículo 315 CPC, y artículos 111 y

22
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. P.189.
124 COT) y que la contrapretensión se encuentre sometida al mismo
procedimiento de la demanda. Esta última condición no se establece en la ley,
pero sí lo hace la jurisprudencia, esto porque el artículo 316 del CPC establece
que la reconvención se sustancia y falla conjuntamente con la demanda
principal. Si bien es tratada a propósito del juicio ordinario de mayor cuantía,
tiene aplicación en otros procedimientos, con ciertas y determinadas
limitaciones, debido al carácter supletorio de aquel.

En cuanto a la oportunidad, la reconvención debe deducirse en el escrito de


contestación de la demanda. En este caso, el escrito de contestación contiene
dos materias perfectamente diferenciadas: contestación misma (En lo
Principal) y reconvención (Otrosí). Dado que es una nueva demanda, debe
satisfacer todos los requisitos del artículo 254, tal como la demanda principal
.
● Tramitación de la Reconvención
De acuerdo al artículo artículo 316 del CPC la reconvención se sustancia y falla
conjuntamente con la demanda principal. Esto significa que presentada la
contestación de la demanda y deducida la reconvención, el tribunal provee
confiriendo traslado para contestar la demanda reconvencional (y replicar la
contestación a la demanda principal), resolución que se notifica por el estado
diario. El plazo para contestar la demanda reconvencional es de 6 días.

Es posible que, en contra de la demanda reconvencional, se formulen


excepciones dilatorias, que se sujetan a la tramitación general dada para las
mismas, con una notable salvedad: si la excepción dilatoria es acogida y se trata
de defectos subsanables, el demandante reconvencional debe subsanar los
defectos de que adolezca la reconvención dentro de los 10 días siguientes a la
fecha de notificación de la resolución que haya acogido la excepción, bajo
sanción de que si así no lo hiciere, se tendrá por no presentada la reconvención
para todos los efectos legales, por el solo ministerio de la ley. Recordemos que
en el caso de las dilatorias deducidas en contra de la demanda principal, no
existe un plazo para que el demandante subsane los vicios bajo sanción.

Cuando las excepciones dilatorias interpuestas en contra de la reconvención


son desechadas, o los vicios subsanados, el demandado reconvencional
(demandante) tiene que replicar y contestar la reconvención en el plazo de 6
días contados desde que se notifica por el estado diario la resolución que
desecha las excepciones dilatorias o tiene por subsanados los vicios.

IV. LA RÉPLICA

Por medio de este escrito el actor intenta afianzar sus posiciones. La réplica es el acto propio
del demandante por el que procede a manifestar lo que estime pertinente frente a la
contestación de la demanda, pudiendo ampliar, adicionar o modificar sus acciones, pero sin
alterar las que sean objeto principal del pleito.
Una vez transcurrido el término para contestar la demanda, el tribunal dictará la resolución
“Traslado para replicar”, la cual se notifica por el estado diario. Así, el actor dispone de 6 días
para replicar y, si se ha presentado demanda reconvencional, para contestarla. Una vez que
transcurre este plazo, sin réplica, se entenderá precluído el derecho por el sólo ministerio de
la ley, y el tribunal, de oficio o a petición de parte, declarará extinguido el derecho y conferirá
traslado al demandado para duplicar. El escrito de réplica se provee “traslado para duplicar”.

V. LA DÚPLICA

Mediante este escrito el demandado intenta afianzar sus correspondientes posiciones. La


dúplica es el acto propio del demandado en el que manifiesta lo que estima conveniente frente
a la réplica realizada por el demandante, pudiendo ampliar, adicionar o modificar sus
excepciones con la limitación de modificar el objeto principal del juicio, en igual condición
que el demandante.

Transcurrido el término para replicar, el tribunal dictará la resolución “traslado para


duplicar”, la que se notificará por el estado diario. El demandado dispone de 6 días para
duplicar y deberá evacuar la réplica en caso de haber presentado demanda reconvencional.
Vencido el plazo sin que se haya presentado el escrito de dúplica, se entenderá precluido el
derecho por el sólo ministerio de la ley, y el tribunal, de oficio o a petición de parte, proveerá
lo conveniente para la prosecución del juicio.

En el evento de que haya existido reconvención, debe darse traslado al demandante para que
evacue la dúplica reconvencional, según lo dispone el artículo 316 del CPC, con cuya
presentación efectivamente se pone fin a esta etapa.

Con estos 4 escritos principales: (1) demanda, (2) contestación de la demanda, (3)réplica y (4)
dúplica, se pone término al primer periodo del juicio ordinario, es decir, al periodo de
discusión (en caso de reconvención, agregar dúplica reconvencional).
Capítulo III – Etapa de conciliación

Mediante la Ley N°19.344, publicada en el Diario Oficial de 7 de octubre de 1994, se introdujo


a continuación del periodo de discusión y antes de la recepción de la causa a prueba, el trámite
obligatorio del llamado a las partes a conciliación. Hoy es necesaria en casi todos nuestros
procedimientos civiles. En dicho sentido, el artículo 262 señala que “ En todo juicio civil, en
que legalmente sea admisible la transacción, con excepción de los juicios o procedimientos
especiales de que tratan los Títulos I, II, III, V y XVI del Libro III, una vez agotados los trámites
de discusión y siempre que no se trate de los casos mencionados en el artículo 313, el juez
llamará a las partes a conciliación y les propondrá personalmente bases de arreglo”.
“Para tales efectos, las citará a una audiencia para un día no anterior al quinto ni posterior al
decimoquinto contado desde la fecha de notificación de la resolución. Con todo, en los
procedimientos que contemplan una audiencia para recibir la contestación de la demanda, se
efectuará también en ella la diligencia de conciliación, evacuado que sea dicho trámite”.
“El precedente llamado a conciliación no obsta a que el juez pueda, en cualquier estado de la
causa, efectuar la misma convocatoria, una vez evacuado el trámite de contestación de la
demanda”.

Para que proceda este trámite obligatorio o necesario del llamado a conciliación en un juicio
civil es menester que concurran los siguientes requisitos:

I. QUE SE TRATE DE UN JUICIO CIVIL

Excepcionalmente no procede el llamado a conciliación, por ejemplo en el Juicio Ejecutivo de


obligaciones de dar, hacer y no hacer, respecto del Derecho Legal de Retención, en la Citación
de Evicción ni en los Juicios de Hacienda. Se contempla el trámite obligatorio del llamado a
conciliación en el procedimiento por crimen o simple delito de acción penal privada (404
NCPP).

II. SEA ADMISIBLE LA TRANSACCIÓN

En general, se ha señalado que son susceptibles de transacción todos los derechos y relaciones
jurídicas sobre las cuales las partes tienen plena libertad de disposición. Por lo tanto, no se
puede transigir sobre los derechos indisponibles:
A) Aquellos que por su naturaleza no pueden concebirse sino en relación a un solo
determinado sujeto (derecho de la personalidad, de la familia, etc.).
B) Aquellos que, independiente de su naturaleza son puestos al servicio de un
determinado sujeto por una norma legal inderogable.
C) Tampoco pueden ser objeto de transacción bienes o derechos que por diversas razones
la ley taxativamente los considera ineptos para tal efecto. Los artículos 2449 a 3455 del
CC se encargan de establecer algunos casos en los cuales no es admisible la
transacción.

III. QUE NO SE TRATE DE LOS CASOS EN QUE NO DEBA RECIBIRSE LA CAUSAS


A PRUEBA EN EL PROCEDIMIENTO

Los casos mencionados en el artículo 313 en que no es procedente el trámite obligatorio a


conciliación para el juez son:
A) Si el demandado acepta llanamente las peticiones del demandante.
B) Si el demandado no contradice en materia substancial y pertinente los hechos sobre
que versa el juicio.
C) Si las partes piden que se falle el pleito sin más trámite.

El juez debe en un juicio ordinario civil en que concurran los requisitos anteriores, evacuado
los trámites del periodo de discusión, citar a las partes a una audiencia de conciliación para
un día no anterior al quinto ni posterior al decimoquinto contados desde la fecha de
notificación de la resolución. Esta notificación debe efectuarse por cédula, puesto que ordena
la comparecencia personal de las partes.

A la audiencia de conciliación deberán concurrir las partes por sí o por apoderados. No


obstante, el juez podrá exigir la comparecencia personal, sin perjuicio de la asistencia de sus
abogados.

En los procesos en que hubiere pluralidad de partes, la audiencia se llevará a efecto aunque
no asistan todas. La conciliación operará entre aquellos que la acuerden y continuará el juicio
con las que no hubieren concurrido o no hubieren aceptado la conciliación (264).

En la audiencia el juez obrará como amigable componedor y tratará de obtener un


avenimiento total o parcial en el litigio (263). Para tal efecto, el juez debe proponerle a las
partes las bases de arreglo y las opiniones que emita no lo inhabilitan para seguir
conociendo de la causa.

Si las partes lo piden, la audiencia se suspenderá hasta por media hora para deliberar. Si el
tribunal lo estima necesario postergará la audiencia para dentro de tercero día, salvo que las
partes acuerden un plazo mayor, y se dejará constancia. A la nueva audiencia estas
concurrirán sin nueva notificación (265).
De la conciliación total o parcial se levantará acta, que consignará sólo las especificaciones del
arreglo, la cual subscribirán el juez, las partes que lo deseen y el secretario, y se estimara como
sentencia ejecutoriada para todos los efectos legales.

Si se rechaza la conciliación o no se efectúa el comparendo, el secretario certificará este hecho


de inmediato, y entregará los autos al juez para que éste, examinándolos por sí mismo,
proceda en seguida a dar cumplimiento a lo señalado en el artículo 318 (268).

El fracaso del llamado del juez a conciliación no obsta a que éste pueda, en cualquier estado
de la causa, efectuar la misma convocatoria (262 inc final). El llamado a conciliación en este
caso es facultativo para el tribunal, el que puede efectuarlo en cualquier estado de la causa,
luego de evacuado el trámite de contestación de la demanda.

El llamado a conciliación, en los casos que sea obligatorio de acuerdo a la ley, constituye un
trámite o diligencia esencial en la primera o en a única instancia de los juicios de mayor
cuantía y en los juicios especiales, cuya omisión genera nulidad conforme a lo prescrito en los
artículos 768 N°9 y 795 N°2.

Al respecto, resulta nuevamente relevante mencionar que la Ley N° 21.394, que introduce
reformas al sistema de justicia para enfrentar la situación luego del estado de excepción
constitucional de catástrofe por calamidad pública, dispone Incorpórase un artículo 3º bis,
nuevo, del siguiente tenor: “Artículo 3º bis.- Es deber de los abogados, de los funcionarios de la
administración de justicia y de los jueces, promover el empleo de métodos autocompositivos de
resolución de conflictos, como la conciliación, la mediación, entre otros. Estos métodos no podrán
restringir, sustituir o impedir la garantía de tutela jurisdiccional.”Adquiriendo de este modo, gran
importancia la institución estudiada en este apartado.

Terminado el periodo de la discusión y el trámite del llamado a conciliación obligatorio en los


casos en que es procedente de acuerdo a la ley, generalmente sigue el de prueba.

Capítulo IV – Etapa de prueba

La etapa de prueba, la cual es eventual, comienza una vez finalizada la etapa de discusión y
concluida la etapa de conciliación, sin resultado o con un resultado parcial.

El artículo 318 CPC establece “Concluídos los trámites que deben preceder a la prueba, ya se proceda
con la contestación expresa del demandado o en su rebeldía, el tribunal examinará por sí mismo los
autos y si estima que hay o puede haber controversia sobre algún hecho substancial y pertinente en el
juicio, recibirá la causa a prueba y fijará en la misma resolución los hechos substanciales controvertidos
sobre los cuales deberá recaer.

Sólo podrán fijarse como puntos de pruebas los hechos substanciales controvertidos en los escritos
anteriores a la resolución que ordena recibirla”.

De acuerdo a este artículo entonces, luego del trámite obligatorio de conciliación el tribunal
puede determinar:

I. CITAR A LAS PARTES A OÍR SENTENCIA

A) Cuando el demandado acepta llanamente las peticiones del demandante (art. 313 inc.
1).
B) Si en sus escritos el demandado no contradice de forma substancial y pertinente los
hechos sobre los que versa el juicio (art. 313 inc. 1).
C) Cuando las partes pidan que se falle el pleito sin más trámite, aun cuando existan
hechos pertinentes, sustanciales y controvertidos (art. 313 inc. 2)

En contra de las dos primeras resoluciones del tribunal citando a las partes a oír sentencia
procede el recurso de apelación, ya que el tribunal puede estimar erróneamente que no existen
hechos sobre los que rendir prueba.

En cambio, de acuerdo al artículo 326 inc. 1 no es apelable la resolución que cita a las partes a
oír sentencia luego de que las partes solicitaron al tribunal que falle sin más trámite. El
fundamento de esto se encuentra en que no puede existir un agravio para las partes en este
caso, ya que ellas mismas solicitaron que se fallara sin más trámite.

II. RECIBIR LA CAUSA A PRUEBA

A) Solicitud

El artículo 318 CPC está redactado en términos tales que parece indiscutible que la iniciativa
para recibir la causa a prueba corresponde al juez de oficio, sin embargo, no acontece así en la
práctica, de modo que, se solicita mediante un escrito que se proceda al recibimiento de la
causa a prueba.

B) Naturaleza jurídica:

La resolución que recibe la causa a prueba (mal llamado auto de prueba), es una sentencia
interlocutoria de segunda clase, debido a que resuelve un trámite que ha de servir de base
para el pronunciamiento de una sentencia definitiva.

C) Contenido:

i. Menciones de la esencia:
1) Recepción de la causa a prueba: Con esta mención se da cumplimiento a un
trámite esencial, cuya omisión da lugar a la nulidad del procedimiento (art.
795 N3 y 768 N°9 CPC).
2) Fijación de hechos sustanciales, pertinentes y controvertidos sobre los que
deberá rendirse la prueba: Los hechos son extraídos de los escritos que las
partes presentaron durante la etapa discusión (demanda, contestación, réplica
y dúplica, y en caso de haber reconvención, los relativos a ella) y determinan
el objeto de prueba del juicio. No cumple el tribunal con fijar estos hechos
cuando hace referencia de manera genérica a aquellos contemplados en los
escritos de discusión.

Excepcionalmente el legislador acepta que se rinda prueba sobre hechos


acaecidos con posterioridad a la etapa de discusión, según el artículo 321 del
CPC: "No obstante lo dispuesto en el artículo anterior, es admisible la
ampliación de la prueba cuando dentro del término probatorio ocurre algún
hecho substancialmente relacionado con el asunto que se ventila. Será
también admisible la ampliación a hechos verificados y no alegados antes de
recibirse a prueba la causa, con tal que jure el que los aduce que sólo entonces
han llegado a su conocimiento"
Nuestra legislación no ha definido qué es un hecho pertinente, sustancial y
controvertido, no obstante, para la jurisprudencia consisten en lo siguiente:

- Substancial: Aquel que integra en forma tan esencial el conflicto de manera


que, sin su prueba, no se puede adoptar resolución alguna.
- Pertinente: Aquel que sin integrar esencialmente el conflicto se vincula a él y
su prueba coadyuva a la resolución por parte del órgano jurisdiccional.
- Controvertido: Aquel respecto del cual existe discrepancia entre las partes
acerca de la existencia o de la forma en que él ha acaecido.

El legislador no conoce la diferencia entre punto de prueba y hecho de prueba.


Pero para la doctrina, los puntos son las circunstancias específicas respecto de
un determinado hecho.

ii. Mención de la naturaleza:


El término establecido por ley para rendir prueba (20 días), el cual se encuentra
suplido por el legislador.

iii. Mención accidental:


Indicación de los días en que va a recibirse la prueba testimonial. Si no se
contiene la mención es necesario que las partes le soliciten al tribunal que fije
un día y una hora para el efecto.

D) Notificación de la resolución

La resolución debe notificarse por cédula conforme al artículo 48 del CPC. La resolución que
recibe el incidente a prueba se notifica por Estado Diario.

E) Recursos que proceden en su contra


En contra de la resolución que cita a las partes a oír sentencia, procede el recurso de apelación,
a excepción del caso en que se haya solicitado que se falle sin más trámite por las partes.

En contra de la resolución que recibe la causa a prueba procede el recurso de reposición con
apelación en subsidio.

El objetivo que se persigue con el recurso puede ser el siguiente:

i. Que se agreguen hechos que no han sido contemplados por el tribunal (art. 319 inc. 1, 2da.
parte).

ii. Que se eliminen uno o más de los hechos incluidos en la resolución.

iii. Que se modifiquen hechos sustanciales, pertinentes y controvertidos (art. 319 inc. 1).

Este recurso de reposición es sumamente especial, ya que, en primer lugar, procede en contra
de una sentencia interlocutoria (RG es que la reposición proceda en contra de autos y
decretos), y, en segundo lugar, debe ser deducido en un plazo de tres días (RG es 5 días).

No es necesario fundamentar ni formular peticiones concretas respecto del recurso de


apelación deducido en forma subsidiaria a la reposición, siempre que éste último cumpla con
ambas exigencias. Además, se otorga en el solo efecto devolutivo (art. 319 inc. final). Esto es
importante ya que la causa seguirá tramitándose en primera instancia, por lo que al fallarse el
recurso de apelación podemos encontrarnos con las siguientes situaciones:

i. El tribunal de alzada rechace el recurso de apelación: En este caso, no se modifica la


resolución y no se produce problema alguno.

ii. El tribunal de alzada acogiendo el recurso de apelación, modifica o agrega hechos: En este
caso, nos encontraremos con dificultades ya que en primera instancia el término probatorio
puede ya haberse vencido, sin embargo, de acuerdo al artículo 339 inc. 4 CPC, puede fijarse
un término especial de prueba el que de ningún modo podrá exceder de los 8 días para probar
los hechos agregados.

iii. El tribunal de alzada acogiendo el recurso de apelación, elimina hechos: En este caso,
bastará con que sean eliminados los hechos y la prueba que se haya rendido respecto de ellos.

F) Ampliación de la prueba

i) Procedencia: De acuerdo al artículo 321 inc. 2 CPC, se refiere a hechos nuevos, que
ocurran en primera instancia, dentro del término probatorio y a hechos verificados y
no alegados en los escritos pertinentes antes de recibirse la causa a prueba.
ii) Tramitación: Debe ser a solicitud de parte que se tramita según las reglas de los
incidentes. La parte debe pedir la ampliación cuando tenga conocimiento de los hechos
nuevos y sobre todos ellos simultáneamente. La resolución que acoge la ampliación es
inapelable. (art. 326 CPC, inc. 2).
iii) Acogimiento: Se concede un término especial de prueba que se regirá por las normas
del artículo 90 CPC, durando como máximo 15 días.

G) Término probatorio

De acuerdo al profesor Cristián Maturana, el término probatorio es “el periodo o espacio de


tiempo que la ley señala a las partes para rendir prueba en el juicio y, particularmente, para rendir la
prueba testimonial, como para ofrecer las pruebas si no hubieren sido pedidas con anterioridad a su
iniciación”.

i) Características:

1) Eventual, depende de que se reciba la causa a prueba.


2) Legal, ya que de acuerdo al artículo 328 CPC, dura 20 días. Sin perjuicio de que puede
también ser judicial (términos especiales) o convencional.
3) Común, de acuerdo al artículo 327 CPC.
4) Fatal, para ofrecer y rendir la prueba testimonial (art. 340 CPC), acompañar
documentos y solicitar la realización de otras diligencias probatorias.
5) Partes pueden reducirlo (artículo 328 inc. 2 CPC).
6) No se suspende, salvo expresa solicitud de todas las partes, artículo 339 CPC.

ii) Clasificación:
1) Ordinario: Tiene una duración de 20 días, salvo que las partes convengan en reducirlo
de acuerdo al artículo 328 inc. 1 CPC.
2) Extraordinario: Aquellos casos en que sea necesario rendir prueba fuera del territorio
jurisdiccional del tribunal, sea dentro o fuera del país. El cual puede a su vez
subclasificarse:
a) Término probatorio extraordinario para rendir prueba dentro del territorio de
la República
b) Término probatorio extraordinario para rendir prueba fuera del territorio de la
República

3) Término probatorio especial: Ante diversas situaciones especiales contempladas por


el legislador

H) Término Probatorio Ordinario

Constituye la regla general, establecido por el artículo 328 inc. 1, teniendo una duración de 20
días, salvo que las partes convengan en reducirlo.

Las partes pueden: 1. Reducir el plazo (art. 328 inc. 1 CPC) 2. Renunciar al plazo (art. 313 inc.
2 CPC) 3. Diferir su inicio o suspenderlo (art. 339 CPC).

Durante este período puede rendirse toda clase de pruebas, ya sea dentro del territorio
jurisdiccional o fuera. En todo caso, para rendir prueba ante otro tribunal es necesario un
exhorto.

Para determinar cuándo ha de comenzar el término probatorio debemos distinguir si las


partes han o no deducido recurso de reposición:

i) Si las partes no lo han deducido: Comienza el término probatorio a correr desde la


última notificación de la resolución que recibe la causa a prueba.
ii) Si las partes lo deducen: Comienza a correr desde la última notificación de la
resolución que se pronuncia acerca de la última reposición, cuya notificación es
normalmente efectuada por Estado Diario.

I) Término Probatorio Extraordinario

Regulado en los artículos 329 y siguientes. Este aumento debe solicitarse antes de vencido el
término ordinario, determinando el lugar en que dicha prueba debe rendirse (art. 332 CPP).
Corre de forma inmediata a continuación del término probatorio ordinario. El aumento
depende del lugar en donde se rendirá la prueba, según el número de días fijado en la tabla
(arts. 329 y 333 CPC). Este término es improcedente en todo procedimiento especial o
extraordinario respecto del cual no se haya previsto expresamente su existencia por parte del
legislador (se ha previsto en, por ejemplo, JO de menor cuantía, incidentes, sumario, etc.).

La solicitud del aumento extraordinario debe solicitarse antes de vencido el término ordinario,
determinando el lugar en que dicha prueba debe rendirse.

i) Término probatorio extraordinario para rendir prueba dentro de la República, pero


fuera del territorio jurisdiccional del tribunal: El tribunal debe otorgarlo por el solo
hecho de que se pida, salvo que haya justo motivo para creer que se pido con el objeto
de demorar el juicio, según lo señalado en el artículo 330 CPC. Dicha actuación judicial
se decreta con citación, por lo tanto, el tribunal tendrá que fallar el incidente cuando la
contraparte se oponga al aumento dentro de los 3 días. No exige caución para su
otorgamiento.
ii) Término probatorio extraordinario para rendir prueba fuera del territorio de la
República: Esta solicitud no se concede por el solo hecho de pedirlo, sino que hay que
acompañar antecedentes que hagan verosímil la existencia de medios probatorios,
según el art. 331 CPC. Esta actuación judicial se decreta con audiencia, es decir, se
genera un incidente con la solicitud, el que debe ser tramitado según las reglas
generales. Se debe rendir caución, según el artículo 338 inc. 1, la cual será perdida por
la parte otorgante en los casos en que i. No ha hecho diligencia alguna para rendir la
prueba ii. Testigos señalados no tenían conocimiento de los hechos, ni se han hallado
en situación de conocerlos iii. Testigos o documentos no han existido nunca en el país
en que se ha pedido. Además, el art. 377 (aplicable a ambos términos extraordinarios)
contempla que si la parte no rinde la prueba o rinde una impertinente será obligada a
pagar a la otra los gastos en que haya incurrido.
J) Término Probatorio Especial

En virtud de que pueden presentarse diversas situaciones en que no sea posible rendir prueba
sin culpa de las partes, el legislador contempla este término probatorio, con el objetivo de
recuperar los días en que no se haya podido rendir la prueba. Las razones para otorgar este
término especial son las siguientes:

i) Artículo 339 inc.2 CPC: Cuando ocurre un entorpecimiento que imposibilite la


recepción de la prueba de forma absoluta o relativa, podrá otorgarse por el tribunal un
término especial por el número de días que haya durado el entorpecimiento y solo
para rendir aquella prueba que no haya podido rendirse.
ii) Artículo 339 inc. final CPC: Cuando se acoge la apelación subsidiaria que recibe la
causa a prueba y que agrega o modifica uno más hechos fijados por ella. Si el tribunal
de primera instancia rechaza la reposición, pero que el superior acoge la apelación
subsidiaria y ordena agregar otros hechos substanciales, pertinentes y controvertidos,
puede suceder que a ese momento haya transcurrido el término probatorio ordinario.
El legislador dispone que en este caso el juez deberá conceder un término especial de
prueba por el número de días que fije prudencialmente, pero que no podrá exceder de
ocho.
Con respecto a la prueba ya producida, y que no esté afecta a la resolución del tribunal
de alzada, tiene pleno valor.
iii) Artículo 340 inc. segundo CPC: Término especial para rendición de prueba de testigos
iniciada oportunamente. La prueba testimonial debe rendirse dentro del plazo fatal
del término probatorio, lo cual provoca que el examen de testigos haya iniciado en
tiempo hábil pero que no se haya podido concluir por razones ajenas de la parte
afectada.
iv) Artículo 340 inc. final CPC: Término especial por inasistencia del juez de la causa.
Siempre que lo que imposibilite la recepción de la prueba sea la inasistencia del juez,
el secretario, a petición verbal de cualquiera de las partes, certificará dicho hecho, y
con el mérito de la certificación se fijará por el tribunal un nuevo día para la recepción
de la prueba.
v) Artículo 376 CPC: Prueba de tachas. La prueba de tachas, por regla general se rinde
dentro del término concedido para la cuestión principal, sin embargo, si está vencido
o lo que resta es insuficiente, el tribunal fijará un término especial.
vi) Artículo 402 inc. 2 y 3: Prueba de error para fundamentar la retractación de la
confesión.
vii) Artículo 159 inc. 3: Medidas para mejor resolver. Si en la práctica de estas medidas
aparece de manifiesto la necesidad de esclarecer nuevos hechos indispensables para
dictar sentencia, podrá el tribunal abrir un término especial de prueba no superior a 8
días, limitado a los puntos que el mismo tribunal designe. En este evento se aplicará
lo dispuesto por el inc. 2 del art. 90 CPC. Vencido el término probatorio, se deberá
dictar sentencia.
Capítulo V – Medios de prueba

PRUEBA INSTRUMENTAL

I. GENERALIDADES

Couture sostiene que un sentido amplio, documento es todo objeto, normalmente escrito, en
cuyo texto se consigna o representa alguna cosa apta para esclarecer un hecho o se deja constancia
de una manifestación de voluntad que produce efectos jurídicos. Chiovenda afirma que se
trata de toda representación material destinada e idónea para reproducir una cierta
manifestación de pensamiento: como una voz grabada eternamente. Como el medio común
de representación material es la escritura, los documentos más importantes son las escrituras.
“La prueba documental es conocida por algunos como la regina probatorum”23.

En Chile, los conceptos de documento e instrumento son sinónimos,pues, a causa de la


influencia del Código de Procedimiento Civil, nuestro legislador únicamente se encargó de
regular los documentos como representaciones escritas, sin otorgarles el carácter de
instrumentos a las demás manifestaciones del pensamiento. Es más, el propio texto positivo
utiliza como expresiones análogas las de instrumentos y documentos.

Tomando en cuenta el carácter estricto o restrictivo de nuestra legislación, podemos afirmar


que documento o instrumento es todo escrito en que se consigna algo.

Es de gran trascendencia la prueba instrumental pues no merece los reparos de la testimonial.


Montesquieu afirmaba “la escritura es un testigo que difícilmente se corrompe”. Sin embargo,
es un medio de prueba escaso, porque generalmente los conflictos no quedan en un
documento, salvo en el juicio ejecutivo, en el que se requiere como presupuesto la existencia
de un título.

Conviene hacer presente que, pese a la confusión generalizada entre los conceptos “título” y
“documento”, existe diferencia. El primero se refiere a la fuente creadora de derechos, el acto
jurídico del cual emanan derechos y obligaciones. Por su parte, el documento es donde consta
ese acto jurídico o fuente creadora de obligaciones.

II. CARACTERÍSTICAS

La prueba documental es un medio de prueba (1) pre-constituido, (2) indirecta, y que (3)
produce generalmente plena prueba si se reúnen los requisitos que el legislador establece al
efecto (otorgamiento con las solemnidades legales, en el caso del instrumento público; o haber
sido reconocido, en el caso del privado), a través del cual se introduce al proceso un
instrumento.

23
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. P.297.
III. CLASIFICACIÓN

A) Según el motivo de su otorgamiento:


i) Ad Probationem (o por vía de prueba): aquel otorgado para dar cuenta
de la existencia de un acto. Si el acto jurídico no es solemne y se deja
constancia de él en un documento escrito, se está extendiendo en un
documento que sólo tendrá efectos de carácter probatorio. En dicho
caso, ante la falta del mismo, podrá recurrirse a los otros medios de
prueba enunciados por el legislador. Si no se otorga, el acto no dejará
de ser válido, sino que sólo faltará este medio de prueba para lograr
acreditarlo.
ii) Ad Solemnitatem (o por vía de solemnidad): otorgados por las partes
para generar válidamente un acto o contrato. Se trata de documentos
que constituyen elementos de la esencia del acto jurídico. En este caso,
la nulidad o falta del documento otorgado por vía de solemnidad no
sólo afecta al medio de prueba, sino que genera la nulidad del acto o
contrato, el que no podrá ser acreditado por ninguno de los otros
medios que establece la ley. Ej. 1701 CC: La falta de instrumento público
no puede suplirse por otra prueba en los actos y contratos en que la ley
requiere esa solemnidad.

B) Según su relación con el Acto o Contrato:


i) Fundantes: Son aquellos de los cuales emana directamente la
pretensión o excepción hecha valer en juicio.
ii) Probatorios: No acreditan directamente las razones o motivos
inmediatos de la pretensión o excepción hecha valer, sino que sólo
pretenden justificar su existencia.
Esta distinción se hacía en virtud del antiguo art. 255 CPC, que exigía
acompañar los documentos fundantes a la demanda y la contestación de la
demanda, pero hoy no se contempla

C) Según la naturaleza jurídica del instrumento:


i) Público o auténtico (artículo 1699 CC): Es el autorizado con las
solemnidades legales por el competente funcionario. Dentro del género
de instrumento público, se encuentra una especie que es la escritura
pública, cuyo elemento distintivo es que el funcionario competente es
un Notario, y que la solemnidad esencial además de lo indicado en los
arts. 404 a 414 COT, es su incorporación en el protocolo o registro
público.
ii) Privado: Documentos escritos, otorgado sin solemnidad alguna.

Esta clasificación importa desde distintos puntos de vista, siendo los principales:
1) Determinación del valor probatorio: El instrumento público conlleva en sí una
presunción de autenticidad, recayendo la carga de la prueba en la parte contra
la cual se hace valer. En cambio, el instrumento privado no conlleva la
presunción de autenticidad, razón por la cual su valor probatorio se supedita
al reconocimiento de la parte que los otorgó, sea expresa o tácitamente, o que
éste, se verifique judicialmente.
2) Determinación de la forma como se acompañan al proceso.

IV. EL INSTRUMENTO PÚBLICO

El artículo 1699 CC lo define como aquel “autorizado con las solemnidades legales por el competente
funcionario.” A partir de la definición legal, podemos inferir sus requisitos:

1. Debe encontrarse autorizado por funcionario público: Respecto a este punto


cabe señalar que, no reviste el carácter de funcionario público aquel que se
encuentra inhabilitado o suspendido en el ejercicio de sus funciones,
adoleciendo los instrumentos públicos que ellos otorguen de nulidad. Sin
perjuicio de aquello, se discute en algunos casos por parte de la doctrina y la
jurisprudencia, la procedencia del error común (error comunis facit ius) en
relación a funcionarios inhábiles.
2. El funcionario público que lo otorga debe ser competente: es necesario que el
funcionario:
i. Sea aquél determinado por la ley para autorizar o dar fe del
instrumento público.
ii. El funcionario debe actuar dentro del territorio que la ley le hubiere
fijado para desempeñar sus funciones.
3. Debe ser otorgado con las solemnidades legales: Para determinar si un
instrumento público cumple con estas solemnidades, es preciso examinar la
legislación que regula cada una de las especies de instrumento público, ya
que la ley no ha regulado uniformemente las distintas naturalezas de
aquellas.

Como ejemplos de instrumento público, encontramos los siguientes:


1. Certificados de dominio vigente, de hipoteca y gravámenes y de prohibiciones e
interdicciones otorgados por el CBR;
2. Copia de la demanda que el Receptor debe entregar al notificarla;
3. Escritura pública otorgada por Notario u Oficial del Registro Civil competente con las
solemnidades legales;
4. Partidas o certificados de nacimiento, matrimonio y defunción que otorga el Oficial de
Registro Civil.

Como mencionamos, dentro de la categoría de instrumentos públicos se encuentra una


especie de éste: la escritura pública. Por su significación y especial regulación la trataremos a
continuación en forma separada.

A) LA ESCRITURA PÚBLICA

El artículo 403 COT define Escritura pública como “el instrumento público o auténtico otorgado
con las solemnidades que fija esta ley, por el competente Notario, e incorporado a su protocolo o registro
público”.
i. Requisitos de la escritura pública

1) Ser otorgada por competente notario: Recordar que éstos son auxiliares de la
administración de justicia, debiendo existir uno al menos en cada territorio
jurisdiccional de juzgados de letras. Finalmente, el Notario no puede intervenir
autorizando las escrituras públicas que contengan disposiciones o estipulaciones en
favor suyo, de su cónyuge, ascendientes, descendientes o hermanos. La escritura
pública que hubiere sido autorizada con este vicio adolecerá de nulidad (artículo 412
COT).
2) Ser otorgada con las solemnidades legales: Los arts.404 a 414 del C.O.T. se encargan
de establecer las diversas solemnidades que deben ser cumplidas por el Notario para
extender válidamente una escritura pública. La falta de cumplimiento de esos
requisitos afecta la validez de la escritura pública de acuerdo a lo establecido en los
arts.412 y 426 Nos.3 a 6 del C.O.T

La escritura pública debe cumplir con las siguientes formalidades:

a) Deben ser otorgadas ante notario competente.


b) Las escrituras públicas deben ser escritas íntegramente en idioma castellano. Si
no es así, la escritura no se considera pública. Además, no deben contener
abreviaturas, cifras, u otros caracteres que no sean los de uso corriente. Pueden
usarse palabras de otro idioma, siempre que su uso sea generalizado o sea
propio de una determinada ciencia o arte. Lo importante es que sean
redactadas en un estilo claro y preciso.
c) Las escrituras públicas pueden ser manuscritas o mecanografiadas, y deben ser
escritas con tinta indeleble. Si no, no se considerarán escrituras públicas.
d) Deben contener las siguientes menciones:
● Lugar y fecha de su otorgamiento.
● Identificación de los comparecientes. A lo menos, ellos deben señalar, además
de sus nombres: nacionalidad, estado civil, domicilio, cédula de identidad o
documento de identificación que aplique.
e) Deben contener en cada una de sus hojas la firma del notario que las autoriza.
El notario inutilizará con su firma y sello el reverso no utilizado de las hojas de
la escritura.
f) Las partes concurrirán ante el notario, quien procederá, si cualquiera de ellas
lo desea, a leerles en voz alta la escritura. Luego de esto, las partes firmarán la
escritura con tinta indeleble.

3) Ser incorporada al protocolo o registro público del Notario que la extiende: Todo
Notario deberá llevar un protocolo, el que se formará insertando las escrituras en el
orden numérico que les haya correspondido en el repertorio. Esas escrituras originales
son las que constituyen la matriz de la escritura pública, en la cual aparecen las firmas
del notario y de las partes. Además, el Notario puede otorgar a las partes tantas copias
cuantas se soliciten de la escritura otorgada. Actualmente, constituye título ejecutivo
cualquier copia autorizada de escritura pública y no sólo la primera copia de ella como
ocurría con anterioridad.
Documentos protocolizados e instrumentos privados autorizados ante notario

La sola intervención de un Notario que concurre en estos 2 tipos de instrumentos no permite


otorgarles a éstos el carácter de escrituras públicas, debido a que no se dan en ellos
cumplimiento a todos los requisitos señalados anteriormente para encontrarnos en presencia
de una escritura pública.

A. Documentos o instrumentos Protocolizados:

La protocolización es una institución muy importante regulada en el Código Orgánico de


Tribunales. Según lo dispuesto en el artículo 415 del COT, consiste en agregar un documento
al final del registro de un notario, a pedido de quién lo solicite. Resulta fundamental destacar
que la protocolización no transforma al instrumento privado en público. En la práctica, la
protocolización se realiza levantando un acta que firman el solicitante y el notario en la que
se indica el contenido del documento y sus indicaciones esenciales. Esta acta es un
instrumento público, pero el instrumento privado no deja por ello de ser privado. Las piezas
protocolizadas no forman parte integrante del protocolo24, sino que van anexas, agregadas a
él.

Ventajas de la protocolización:

1) El documento adquiere fecha cierta, respecto de terceros.


2) Los instrumentos establecidos en el artículo 420 COT pasan a valer como
públicos:
a. Testamentos cerrados y abiertos en la forma legal.
b. Testamentos solemnes abiertos otorgados en hojas sueltas, siempre que
se protocolicen a más tardar al día siguiente hábil de su otorgamiento.
c. Testamentos menos solemnes o privilegiados no autorizados por
notario, previo decreto judicial.
d. Actas de Oferta de Pago.
e. Instrumentos otorgados en el extranjero, así como, las traducciones.
3) Conservación de los documentos.

B. Instrumento Privado autorizado ante Notario:

La sola autorización del notario tampoco es suficiente para transformar al instrumento en


público.Es más, en las Actas de la Comisión Mixta que revisó el Proyecto del Código de
Procedimiento Civil, al tratarse el art.342 (335) se señaló que dicha intervención notarial no
convertía al instrumento en público y que el notario en tal caso no es más que un testigo
calificado respecto a su otorgamiento. Pues bien, en eso radica el beneficio: existirá un testigo
preconstituido y abonado de su existencia en caso de ser objetado en juicio.

En ciertos documentos, sin embargo, la autorización de la firma del otorgante en un


instrumento privado autorizado por notario, produce el efecto de que la ley le otorga mérito

24
Revisar el artículo 429 del COT para profundizar acerca del protocolo.
ejecutivo, sin necesidad de reconocimiento previo. En el caso de los títulos de crédito, la
autorización los transforma en títulos ejecutivos, pero no en instrumentos públicos (P.Ej.
Art.434 Nº4 inc.2º del C.P.C. Letra de cambio, pagaré o cheque en que la firma del obligado al
pago estuviere autorizada ante Notario; contrato prenda compraventa cosas muebles a plazo
art.2 Ley 4.702 y contrato prenda industrial art.27 Ley 5.687).

V. ASPECTOS PROCEDIMENTALES

A) Iniciativa en la prueba instrumental

La iniciativa para rendir la prueba instrumental dentro del proceso puede ser de parte o del
tribunal.

i) Iniciativa de parte:

Voluntaria: cuando la parte en forma libre y discrecional decide acompañar un


documento al proceso en la oportunidad que señala la ley, lo cual constituye la regla
general.
1) Forzada: las partes soportan la carga de aportar su prueba instrumental, bajo pena de
producirse los efectos que la ley señala, por haber sido requeridos para ello por el
tribunal, a petición de la contraria.

Los casos de iniciativa forzada son los siguientes:

a) Documentos que se deben exhibir dentro de la gestión de una medida


prejudicial propiamente tal (artículo 273 N°3, 4 y 5):

El artículo 273 CPC dispone que: “El juicio ordinario podrá prepararse, exigiendo el
que pretende demandar de aquel contra quien se propone dirigir la demanda:

N° 3: La exhibición de sentencias, testamentos, inventarios, tasaciones, títulos de


propiedad u otros instrumentos públicos o privados que por su naturaleza puedan
interesar a diversas personas”.

La iniciativa es del futuro demandante, dirigiéndose contra el futuro demandado y se


decreta cuando a criterio del tribunal es indispensable para que el demandante pueda
entrar a demandar. Si concurre el demandado, el demandante puede pedir copia de lo
que se le exhiba.

Si no concurre el demandado o se niega a exhibir los documentos mencionados en el


N° 3 del 273 del CPC, señala el Código las siguientes sanciones:

● Respecto del medio de prueba no exhibido la parte pierde el derecho de hacerlo


valer con posterioridad, salvo que: (1) La contraparte lo haga valer en su defensa;
(2) Se justifique o aparezca de manifiesto que no pudieron exhibirse antes; (3) Si
los documentos se refieren a hechos distintos a aquellos que motivaron la solicitud
de exhibición
● Se pueden solicitar los apremios que establece el art.276 del C.P.C.

El N° 4 del artículo 273 permite preparar el Juicio Ordinario exigiendo el que pretende
demandar de aquel contra quien se propone dirigir la demanda la “Exhibición de los
libros de contabilidad relativos a negocios en que tenga parte el solicitante, sin
perjuicio de lo dispuesto en los artículos 42 y 43 del Código de Comercio”.

Sólo corresponde al futuro demandante y se dirige contra el futuro demandado y no


contra terceros, siempre que el tribunal considere indispensable para que el
demandante pueda iniciar su acción. Se aplican las mismas sanciones anteriormente
señaladas. Recordar que los libros de contabilidad constituyen plena prueba entre los
comerciantes.

Luego, el N° 5 de la misma disposición permite preparar el Juicio Ordinario exigiendo


el que pretende demandar de aquel contra quien se propone dirigir la demanda “ El
reconocimiento jurado de firma, puesta en instrumento privado”.

Como medida prejudicial, presenta las siguientes características: (1) Es común a


futuros demandantes y demandados; (2) Se decreta a petición de partes siempre, sin
que el Tribunal entre a calificar la procedencia de la solicitud; (3) Se refiere
exclusivamente a la firma puesta en instrumento privado.

Puede ser que se niegue la firma, terminando ahí la medida prejudicial, sin producir
ningún efecto. Si se reconoce en cambio, el documento privado hace las veces de
instrumento público en cuanto a su valor probatorio.

El citado puede no comparecer o dar respuestas evasivas, teniéndosele en tal caso por
reconocida la firma a petición de parte. Se hace extensiva la gestión preparatoria de
reconocimiento de firma del procedimiento ejecutivo para los efectos de llevar a cabo
la medida prejudicial, mas no para los efectos que genera.

b) Posibilidad de una parte de exigir dentro del juicio de la contraparte o de un


tercero la exhibición de documentos que se encuentran en su poder siempre
y cuando tengan relación directa con la cuestión debatida y no sean secretos
profesionales (artículo 349 CPC):

Los gastos de la exhibición son de cuenta de quién la solicita, sin perjuicio de lo que se
resuelva por las costas. En caso de rehusarse a la exhibición, sin existir justa causa, la
sanción será no poder hacerlos valer, sin perjuicio de las multas, arrestos o
allanamientos. Si se trata de un 3º se aplican multas y arrestos. Cuando la exhibición
haya de hacerse por un tercero, podrá éste exigir que en su propia casa u oficina se
saque testimonio de los instrumentos por un ministro de fé.

Cuando se da esta situación, lo normal es que se confiera traslado o se decrete con


citación para que la otra parte se pueda oponer a la exhibición ya sea porque el
documento no está en su poder, no dice relación con el asunto controvertido o tiene el
carácter de reservado o secreto. El tribunal decide sobre la procedencia de la
exhibición.

En la práctica, lo que se hace es pedir una copia, y exigir que durante la exhibición, se
encuentre presente un ministro de fe (secretario del tribunal) que tome testimonio de
los documentos que se van a exhibir y autorice las copias. Con la entrega de la copia
se evita el extravío de los originales.

ii) Iniciativa judicial:

En nuestros procedimientos civiles, esta opción se manifiesta exclusivamente a través de las


medidas para mejor resolver, las cuales deberán efectuarse dentro del plazo que tiene el
tribunal para dictar sentencia definitiva, luego de citadas las partes para oír sentencia.

En relación a la prueba instrumental, las medidas para mejor resolver se encuentran en el


artículo 159 N°1 y N°6 del CPC.

Artículo 159 CPC: “Los tribunales, sólo dentro del plazo para dictar sentencia, podrán dictar de oficio
medidas para mejor resolver. Las que se dicten fuera de este plazo se tendrán por no decretadas. Sin
perjuicio de lo establecido en el inciso 1° del art. 431, podrán dictar alguna o algunas de las siguientes
medidas”:

“1° La agregación de cualquier documento que estimen necesario para esclarecer el derecho de los
litigantes”.

Los términos son muy amplios, pudiéndose agregar documentos públicos y privados.
Respecto de los privados, sólo comprende los que emanan de las partes y no de terceros, por
ser éstos inoponibles a las partes en el proceso.

Hay que mencionar que esta medida para mejor resolver no puede vulnerar los derechos
adquiridos de las partes, perjudicándolas en cuanto al efecto de preclusión que pudo operar,
principalmente en lo que dice relación con el apercibimiento del artículo 349 CPC.

“6° La presentación de cualesquiera otros autos que tengan relación con el pleito”.

Se aplica respecto al artículo 37 CPC y la remisión de los expedientes.

B) Oportunidad legal para rendir la prueba instrumental

i) Antes del Procedimiento:


A través de las medidas prejudiciales probatorias contempladas en los números 3 a 5
del artículo 273 CPC.
ii) Conjuntamente con la Demanda:
El actor puede acompañar los documentos a la demanda y en tal caso el demandado
tiene para objetarlos el término de emplazamiento, lo cual implica que la objeción se
hará en la contestación de la demanda, usualmente en un otrosí del escrito de
contestación de la demanda o de las excepciones dilatorias, pero nada impediría que
se haga en documento separado.
iii) Durante el Procedimiento:
Por regla general, se pueden acompañar en cualquier estado del juicio, hasta el
vencimiento del término probatorio en la primera instancia y hasta la vista de la causa
en segunda instancia. Si los documentos se acompañan en segunda instancia, en el
momento preciso de la vista de la causa, ésta no se suspende. Sin embargo, el tribunal
no puede fallarla mientras no se ha vencido el plazo para que la contraparte formule
las observaciones a estos documentos.
iv) Después de la Oportunidad Procesal:
Como medida para mejor resolver, el tribunal determinará qué documentos se
acompañarán.

C) Documentos en lengua extranjera

Para acompañarlos al proceso, puede optar por una de las siguientes alternativas:

i) Acompañarlos sin la correspondiente traducción: el tribunal dispondrá que el


instrumento se traduzca por el perito que él designe, a costa del que lo presenta, sin
perjuicio de lo resuelto por las costas.
ii) Acompañarlos con su traducción: ésta valdrá, salvo que la contraparte exija que sea
revisada dentro del plazo de 6 días (artículo 347 CPC).

D) Instrumentos que deben ser considerados públicos en juicio

El artículo 342 CPC señala que “serán considerados como instrumentos públicos en juicio, siempre
que en su otorgamiento se hayan cumplido las disposiciones legales que dan este carácter:”

“1° Los documentos originales”


Son aquellos que corresponden al otorgamiento y que son suscritos por las partes y/o el
funcionario público.

“2° Las copias dadas con los requisitos que las leyes prescriban para que hagan fe respecto de toda
persona, o, a lo menos, respecto de aquella contra quien se hace valer”.

El profesor Maturana señala que “Si se acompaña una copia y el registro o matriz ha
desaparecido se puede presentar una duda acerca de la autenticidad del instrumento. Para
este caso el legislador contempló el llamado Cotejo”25.
Al respecto es relevante destacar que existe un cotejo de dos tipos:

i. Cotejo instrumental: confrontación de un instrumento público con sus matrices o


registros (art.344 del C.P.C).
ii. Cotejo de letras: prueba caligráfica cuando se ha impugnado un instrumento privado

25
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P. 121.
por falta de autenticidad o uno público que carezca de matriz o registro sin que pueda
ser reconocido por el funcionario que lo expidió. (art.350, 351, 352, 353 y 354 del
C.P.C.).

“3° Las copias que, obtenidas sin estos requisitos, no sean objetadas como inexactas por la parte
contraria dentro de los 3 días siguientes a aquel en que se le dio conocimiento de ellas”.

Cuando el instrumento público consta en una copia sin mayores formalidades debe
notificársele a la contraparte el hecho de su presentación para que formule sus observaciones
dentro del plazo fatal de 3 días. Si no lo objeta dentro de este plazo, la copia adquiere valor de
instrumento público en juicio.

“4° Las copias que, objetadas en el caso del número anterior, sean cotejadas y halladas conforme con sus
originales o con otras copias que hagan fe respecto de la parte contraria”.

Cotejo instrumental realizado por el funcionario que haya autorizado la copia, por el
secretario del tribunal o por otro ministro de fe designado por el tribunal (344 CPC).

“5° Los testimonios que el tribunal mande agregar durante el juicio, autorizados por su secretario u
otro funcionario competente y sacados de los originales o de copias que reúnan las condiciones indicadas
en el número anterior”.

La expresión “testimonios” se refiere a copias.

“6° Los documentos electrónicos suscritos mediante firma electrónica avanzada”.

Relacionado con esto, se encuentra la audiencia de percepción, contenida en la siguiente


disposición, incorporada por la Ley N°20.217:

Artículo 348 bis del CPC:

”Presentado un documento electrónico, el Tribunal citará para el 6° día a todas las partes a una
audiencia de percepción documental. En caso de no contar con los medios técnicos electrónicos
necesarios para su adecuada percepción, apercibirá a la parte que presentó el documento con tenerlo por
no presentado de no concurrir a la audiencia con dichos medios.

Tratándose de documentos que no puedan ser transportados al tribunal, la audiencia tendrá lugar donde
éstos se encuentren, a costa de la parte que los presente.

En caso que el documento sea objetado, en conformidad con las reglas generales, el Tribunal podrá
ordenar una prueba complementaria de autenticidad, a costa de la parte que formula la impugnación,
sin perjuicio de lo que se resuelva sobre pago de costas. El resultado de la prueba complementaria de
autenticidad será suficiente para tener por reconocido o por objetado el instrumento, según corresponda.

Para los efectos de proceder a la realización de la prueba complementaria de autenticidad, los peritos
procederán con sujeción a lo dispuesto por los artículos 417 a 423.
En el caso de documentos electrónicos privados, para los efectos del artículo 346, N°3, se entenderá que
han sido puestos en conocimiento de la parte contraria en la audiencia de percepción.

En el caso que los documentos electrónicos acompañados puedan ser percibidos directamente en la
carpeta electrónica, el tribunal podrá omitir la citación a audiencia de percepción, debiéndose entender
que han sido puestos en conocimiento de la parte contraria desde que se notifica la resolución que los
tiene por acompañados bajo el apercibimiento correspondiente”.

El artículo 343 señala la forma de completar los instrumentos públicos acompañados en


juicio en forma parcial.

Art.343. "Cuando las copias agregadas sólo tengan una parte del instrumento original cualquiera de
los interesados podrá exigir que se agregue el todo o parte de lo omitido, a sus expensas, sin perjuicio de
lo que se resuelva sobre el pago de costas”.

E) Instrumentos públicos otorgados en el extranjero y sus efectos en Chile

El artículo 17 CC señala que “la forma de los instrumentos públicos se determina por la ley del país
en que hayan sido otorgados. Su autenticidad se probará según las reglas establecidas en el Código de
Enjuiciamiento (CPC). La forma se refiere a las formalidades externas y la autenticidad al hecho de
haber sido realmente otorgados y autorizados por las personas y de la manera que en los tales
instrumentos se exprese”.

Es decir, para que el documento otorgado en el extranjero tenga valor en Chile, es necesario
que la forma se ajuste a la legislación del país en el cual se extendió el instrumento, y que se
acredite la autenticidad del mismo.

Nuestro legislador ha establecido 3 trámites, respecto de los instrumentos públicos otorgados


en el extranjero, para equipararlos u homologarlos a los instrumentos públicos nacionales:

i) Legalización:
Es el trámite mediante el cual se establece la autenticidad del documento otorgado en
el extranjero. Se verifican dos aspectos: (1) Que en los documentos conste el carácter
de públicos y (2) Que conste la verdad de las firmas de las personas que los han
autorizado. Esta autenticidad se obtiene mediante el atestado (testimonio prestado por
altas autoridades) otorgado por alguno de los funcionarios establecidos en el artículo
345 CPC.

La legalización puede realizarse:


1) Directamente en el momento de otorgarse el instrumento: La legalización se verifica
mediante el atestado de un agente diplomático o consular chileno, acreditado en el
país de donde el instrumento procede, y cuya firma se compruebe con el respectivo
certificado del Ministerio de RREE.
2) A posteriori, una vez que el documento se encuentra en Chile: La legalización se
verifica mediante el atestado de un Agente diplomático extranjero acreditado en Chile
por el gobierno del país de procedencia del instrumento, certificándose su firma por el
Ministerio de RR.EE. de Chile. El proceso se compone de dos actuaciones: (1) la
acreditación de la firma del funcionario extranjero por parte de un agente diplomático
o consular, y (2) la acreditación de la firma de dicho diplomático por parte del
Ministerio de RR EE. de Chile.
1. En caso de no existir representación diplomática entre ambos países:
La legalización se verifica mediante el atestado de un agente
diplomático o consular de una nación amiga acreditado en el mismo
país (de procedencia del instrumento), a falta de funcionario chileno,
certificándose en este caso la firma por conducto del Ministerio de
RREE del país a que pertenezca el agente o del Ministro Diplomático de
dicho país en Chile, y además por el Ministerio de RREE de la República
en ambos casos.

La jurisprudencia ha dicho que los instrumentos públicos otorgados fuera no


debidamente legalizados no se pueden considerar como prueba en juicio.

ii) Traducción:
La traducción oficial normalmente es realizada por un intérprete del Ministerio de
Relaciones Exteriores, según lo señalado en el artículo 63 CPC. Para acompañarlos al
proceso, puede optar por una de las siguientes alternativas:
1) Acompañarlos sin la correspondiente traducción: el tribunal dispondrá que el
instrumento se traduzca por el perito que él designe, a costa del que lo presenta, sin
perjuicio de lo resuelto por las costas.
2) Acompañarlos con su traducción: ésta valdrá, salvo que la contraparte exija que sea
revisada dentro del plazo de 6 días.

iii) Protocolización:
Como veíamos, es el hecho de agregar un documento al final del registro de un notario,
a pedido de quien lo solicita. El artículo 420 N°5 del COT menciona como uno de los
casos en que valdrá como instrumento público, por el hecho de la protocolización, el
instrumento otorgado en el extranjero con las correspondientes formalidades ya
analizadas. El artículo 420 no distingue entre instrumentos, sino que es necesario,
según el tenor de la ley para todo instrumento otorgado en el extranjero.

Existe una sentencia de la Corte Suprema de 1970 en que se niega lo anterior,


afirmándose que el instrumento público no requiere más que la legalización para que
produzca efectos en Chile26.

Excepcionalmente, se advierte una situación en la cual no se necesita ninguno de estos


tres trámites, a pesar de haber sido otorgado el instrumento en el extranjero. Se trata
de los instrumentos otorgados por los cónsules, ya que de acuerdo al reglamento
consular del Ministerio de Relaciones Exteriores, estos tienen la facultad de ser
ministros de fe, pudiendo otorgar instrumentos públicos. No obstante, igualmente es
preciso que la firma del cónsul sea verificada por el Ministerio de RREE de Chile.

26
Corte Suprema Revista de Derecho y Jurisprudencia T. 67. SEC. 1 PAG 326.
Trámite para que tenga valor en Chile un documento público otorgado en el extranjero en
un país que forma parte de la Convención de la Haya: La apostilla

Con fecha 30 de agosto de 2016, la Convención de La Haya que Suprime la Exigencia de


Legalización de Documentos Públicos Extranjeros ("Convenio de la Apostilla"), entró en
vigencia internacional para Chile. En idéntica fecha también cobraron vigor tanto la Ley N°
20.711 (publicada en el Diario Oficial el 2 de enero de 2014) que implementa la citada
Convención, como el Decreto Supremo N° 81 (publicado en el Diario Oficial el 28 de
noviembre de 2015) que aprueba el reglamento de esta ley.

La apostilla es una certificación única que produce exactamente los mismos efectos que la
legalización de documentos públicos, aunque simplificando el procedimiento a un solo acto.
Suprime la cadena de trámites que permite la legalización de un documento cuyo origen o
destino sea un país en que se aplique el Convenio de la Apostilla.

La característica de la apostilla chilena es la de carácter electrónica o del tipo “e- Apostilla”, lo


que significa que la certificación del documento será realizada a través de firma electrónica
avanzada y podrá ser verificada en cuanto a su autenticidad a través de un sistema de consulta
en línea. Los documentos emitidos en Chile para ser utilizados en un país miembro del
Convenio de la Apostilla que hayan sido certificados mediante una Apostilla, deberán ser
reconocidos en cualquier otro país del Convenido sin necesidad de otro tipo de certificación.
Asimismo, los documentos que ingresan Apostillados a Chile (desde los países parte del
Convenio) deberán ser reconocidos sin necesitar de una certificación adicional.

F) Forma de acompañar los Instrumentos Públicos al Juicio:

Si bien no se establece expresamente en el CPC, por interpretación de diversas normas del


mismo código, se ha establecido que los documentos, por regla general, deben acompañarse
"con citación". Inclusive, aun existiendo regulación especial, esta debe adicionarse a la
citación, todo lo cual se desprende de las siguientes normas:
i. Artículos 795 Nº4 y 800 Nº2 CPC: A propósito del Recurso de Casación en la Forma,
establecen como trámites esenciales de la primera y segunda instancias, "la agregación
al proceso de los documentos presentados oportunamente con citación".
ii. Artículo 342 Nº3 CPC: A propósito de qué documentos se deben considerar como
públicos en juicio, se establece un plazo de 3 días para objetarlos, plazo que se iguala
con el de citación.
iii. Artículo 348 inciso 2° CPC: la agregación de los documentos presentados en 2ª
instancia, no suspenderá en ningún caso la vista de la causa; pero el tribunal no podrá
fallarla, sino después de vencido el término de la citación, cuando haya lugar a ella.

En consecuencia, para los efectos de tenerse por acompañado un instrumento público al


proceso, es necesario que la parte presente un escrito que dirá en la suma “Acompaña
documento, con citación”. Siendo un trámite esencial, si es omitido, podrá ser casada en la forma.
De conformidad con el artículo 6° de la Ley de Tramitación Electrónica27, titulado Presentación
de documentos, dispone que los documentos electrónicos se presentarán a través del sistema
de tramitación electrónica del Poder Judicial o, en caso de requerirlo así las circunstancias, se
acompañarán en el tribunal a través de la entrega de algún dispositivo de almacenamiento de
datos electrónicos.

G) Valor probatorio de los instrumentos públicos:

Esta materia se encuentra regulada en los artículos 1700 y 1706 del Código Civil.

El artículo 1700 CC señala que “el instrumento público hace plena fe en cuanto al hecho de haberse
otorgado y su fecha, pero no en cuanto a la verdad de las declaraciones que en él hayan hecho los
interesados. En esta parte no hace plena fe sino contra los otorgantes. Las obligaciones y descargos
contenidos en él hacen plena prueba respecto de los otorgantes y de las personas a quienes se transfieran
dichas obligaciones y descargos por título universal o singular”.

A su vez, el artículo 1706 CC señala que “el instrumento público o privado hace fe entre las partes
aun en lo meramente enunciativo, con tal que tenga relación directa con lo dispositivo del acto o
contrato”.

Para analizar con mayor detención el valor probatorio del instrumento público, debemos
distinguir si éste se hace valer respecto de uno de los otorgantes o respecto de un tercero y las
materias que mediante el instrumento pretenden ser acreditadas.

i. Valor probatorio del instrumento público respecto de los Otorgantes:


1) El hecho de haberse otorgado el instrumento: hace plena fe entre ellas.
2) La fecha del instrumento: plena fe tanto respecto de las partes como de terceros.
3) El hecho de haberse formulado las declaraciones que en el instrumento público
aparecen por el funcionario público y las partes: hace plena prueba por estar
atestiguado en éste por el funcionario público.
4) Veracidad de las declaraciones contenidas en el instrumento: En este punto
nuevamente debemos distinguir:

a) Respecto a la veracidad de las declaraciones del funcionario público


● Acerca de hechos propios: plena fe. El profesor Maturana da como

27
Art 6 LTE: Los documentos cuyo formato original no sea electrónico podrán presentarse materialmente en el tribunal y
quedarán bajo la custodia del funcionario o ministro de fe correspondiente. No obstante, los títulos ejecutivos cuyo formato
original no sea electrónico deberán presentarse materialmente en el tribunal y quedarán bajo la custodia del funcionario o
ministro de fe correspondiente, bajo apercibimiento de tener por no iniciada la ejecución. Sin perjuicio de lo dispuesto en el inciso
anterior, los documentos y títulos ejecutivos presentados materialmente deberán acompañarse con una copia en formato digital
a través del sistema de tramitación electrónica del Poder Judicial o, en caso de requerirlo así las circunstancias, en el tribunal, a
través de la entrega de algún dispositivo de almacenamiento de datos electrónicos. Si no se presentaren las copias digitales de
los documentos o títulos ejecutivos, o si existiere una disconformidad substancial entre aquellas y el documento o título ejecutivo
original, el tribunal ordenará, de oficio o a petición de parte, que se acompañen las copias digitales correspondientes dentro de
tercero día, bajo apercibimiento de tener por no presentado el documento o título ejecutivo respectivo. En casos excepcionales,
cuando se haya autorizado a una persona para presentar escritos materialmente por carecer de los medios tecnológicos, no será
necesario acompañar copias digitales. En este caso, los documentos y títulos ejecutivos presentados en formato que no sea
electrónico serán digitalizados e ingresados inmediatamente por el tribunal a la carpeta electrónica. A la oportunidad, la forma
en la cual se debe proceder a acompañar y percibir el documento electrónico y su valor probatorio nos referiremos más adelante
en un párrafo especial.
ejemplo la declaración del Notario de haber dado lectura al testamento
abierto.
● Acerca de hechos que percibe por sus propios sentidos: plena fe.
Maturana menciona el caso de la declaración del Notario de haber
firmado las partes en presencia suya o que el precio fué pagado en el
acto de otorgarse la escritura
● Acerca de hechos que no son propios ni los ha percibido por él
mismo, pero los ha comprobado por los medios que la ley le
suministra: plena prueba. En este caso, el ejemplo que nos da el autor
antes citado es el siguiente: El Oficial de Registro Civil debe certificar la
identidad del padre que recaba la inscripción de nacimiento de un
menor para reconocerlo como hijo natural de acuerdo a lo establecido
en los arts 271 N*1 del C.Civ y 32 de la Ley de Registro Civil. Dicha 132
identidad la atestigua el oficial de Registro Civil no por ser un hecho
suyo y que haya podido apreciar por sus sentidos, sino porque lo debe
comprobar requiriendo la cédula de identidad al requirente.
● Acerca de hechos confiando en el dicho de otras personas: no
producen plena prueba. Por ejemplo las relativas a la edad, al estado
civil o la nacionalidad de las partes.
● Aquellas declaraciones que hace y que importan meras apreciaciones:
tampoco hacen plena fe. Por ejemplo, la declaración del notario en que
dice que el testador compareció ante él estando en su sano juicio.

b) Respecto a la veracidad de las declaraciones de las partes:


● Declaraciones dispositivas:
Se refiere a la parte del instrumento donde se deja constancia de los
elementos esenciales del hecho jurídico del cual ha querido
proporcionarse prueba escrita. No se pueden suprimir sin destruirlo o
al menos desnaturalizarlo. Por ejemplo en un contrato de compraventa
serían aquellas en las cuales se manifiesta la voluntad de celebrar ese
contrato, se determina la cosa, se fija el precio y su forma de pago.

Hace plena fe en cuanto al hecho de haberse formulado las


declaraciones, pero no en cuanto a la verdad de las mismas
declaraciones, no obstante que se presuma la verdad mientras no se
demuestre lo contrario. Porque lo normal es que los actos jurídicos que
se otorguen sean reales y no simulados; en consecuencia, quien
sostenga que esas declaraciones dispositivas son simuladas, no reales,
deberá acreditarlo.

No obstante, parte de la doctrina no concuerda con dicho criterio,


puesto que las declaraciones dispositivas contenidas en el instrumento
público no se presumen verdaderas, sino que ellas constituyen plena
prueba respecto de los declarantes en cuanto a su contenido, sea que se
invoque la declaración por una parte contra la otra, o que la haga valer
un tercero contra el declarante, basándose en lo dispuesto en el artículo
1700.
● Declaraciones simplemente enunciativas: constituyen elementos
accidentales del hecho jurídico que el instrumento tiene por objeto
acreditar, pudiendo ser suprimidas sin que se modifique la sustancia
del mismo. Ocupando el mismo caso de la escritura de compraventa, el
profesor Maturana da como ejemplo de declaración simplemente
enunciativa que el precio fue pagado por el comprador con dineros
entregados por un tercero.
Del artículo 1706 CC, se puede distinguir:
▪ Simplemente enunciativas directamente relacionadas con lo
dispositivo: cuando refieren hechos que contribuyen a
determinar o precisar el objeto o causa de la declaración
dispositiva o que extinguen en todo o parte o modifican los
derechos nacidos de ésta. En este caso el instrumento público
hace plena fe del hecho de haberse formulado estas
declaraciones, pero no en cuanto a la verdad. Por ejemplo,
aquella que se formula en la compraventa de que el precio fue
pagado anticipadamente.
▪ Simplemente enunciativas que no guarden relación con lo
dispositivo: no hace plena prueba entre las partes. Sin embargo,
contra la parte que la emite, ella constituye una confesión
extrajudicial que, según el artículo 398: revestirá el carácter de
presunción grave, por haber sido prestada en presencia de la
parte que la invoca.

La declaración enunciativa no puede constituir prueba a favor de quién la emite,


puesto que nadie puede transformar sus propios dichos en un medio de prueba en su
favor.

ii. Valor probatorio del instrumento público respecto de terceros:


El instrumento público tiene una fuerza probatoria absoluta en cuanto a la
materialidad, puesto que sería absurdo que el mismo instrumento fuese auténtico para
las partes y no para los terceros.

El artículo 1700 CC establece que el instrumento público hace plena fe erga omnes del
hecho de haberse otorgado, haberse formulado las declaraciones y de la fecha del
instrumento público. También hace plena fe la declaración del funcionario público,
sobre hechos propios, hechos ajenos constatados por él con sus propios sentidos y los
acreditados con los medios que la ley suministra.

Las declaraciones dispositivas se presumen verdaderas respecto de terceros, en razón


de que lo normal se presume. Las declaraciones enunciativas directamente ligadas con
lo dispositivo, también deben presumirse verdaderas respecto de terceros. La
declaración simplemente enunciativa nunca puede tener valor probatorio en contra de
un tercero.
H) Presunción de autenticidad del instrumento público

Dada la intervención de un funcionario público competente en su otorgamiento, el


instrumento público lleva envuelta una verdadera presunción de autenticidad.

Elementos de la autenticidad:
i. Que se haya otorgado realmente el instrumento por las personas que aparecen
en el instrumento.
ii. Que se haya autorizado por el funcionario que se señala en el instrumento.
iii. Que las declaraciones que hubieren prestado las partes a su otorgamiento sean
las que el instrumento consigna.

En virtud de esta presunción, si se acompaña al juicio instrumento público, la contraparte


para destruirlo debe tener un papel activo.

I) La impugnación de un instrumento público

La impugnación de un instrumento público consiste en la destrucción de su fe probatoria.


Palomo afirma que “el onus probandi corresponde a la parte que plantea algún reparo
respecto a la autenticidad del instrumento público acompañado, que se presume 28”.

Los instrumentos públicos pueden impugnarse por tres causas:

i. La nulidad del instrumento:


El instrumento público, debe cumplir con los requisitos del artículo 1699 CC, es decir,
funcionario público competente y solemnidades legales. El incumplimiento de estos
requisitos (funcionario incompetente o no cumplir con las solemnidades legales)
acarrea la nulidad.

La escritura pública requiere ser otorgada por notario competente, con las
solemnidades legales e incorporada al protocolo o registro público.

La omisión de cualquiera de los requisitos establecidos para los instrumentos públicos


y para la escritura pública en particular, genera la nulidad absoluta del mismo,
privándola de todo valor probatorio, salvo que se encuentre firmada por las partes y
no constituya la solemnidad del acto o contrato. El artículo 1701 inciso 2° del CC señala
que “fuera de los casos indicados en este artículo, el instrumento defectuoso por incompetencia
del funcionario o por otra falta en la forma, valdrá como instrumento privado su estuviere
firmado por las partes”.

La nulidad del instrumento se puede probar por todos los medios de prueba que
señala la ley, incluyendo la prueba de testigos, sin que rijan las limitaciones de los
artículos 1708 a 1711, por tratarse de acreditar hechos materiales y no actos o contratos.
En relación a la generalidad de los instrumentos públicos tampoco rige la limitación

28
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. P.310.
del art. 429 del C.P.C. por estar establecida aquella para acreditar la falta de
autenticidad de la escritura pública en particular.

Es importante distinguir la nulidad del acto y del instrumento. Maturana afirma que
“El acto jurídico es algo abstracto que resulta de la voluntad de los otorgantes y el
instrumento es lo concreto, la forma en que se materializa esa voluntad de las partes y
las cosas o declaraciones sobre que versa”29. Sin embargo, en el caso de los actos
solemnes, el acto mismo se confunde con el instrumento público, por lo que si se
obtiene la nulidad del instrumento público consecuencialmente también será nulo el
acto o contrato solemne.

ii. La falta de autenticidad o falsedad material del instrumento:


Por una interpretación a contrario sensu de lo dispuesto en el artículo 17 del CC se
concluye que el instrumento público falso es el que (1) no ha sido realmente otorgado,
(2) el que no ha sido autorizado por el funcionario u otorgado por las personas que en
él se expresa; (3) o que las declaraciones que consigna no corresponden a las efectuadas
por las partes al otorgarse el instrumento.

La situación del instrumento falso es distinta de la del instrumento nulo. Por ejemplo,
una escritura pública otorgada por Notario incompetente es un instrumento público
auténtico pero nulo. La distinción entre instrumento no auténtico e instrumento nulo
puede observarse en los artículos 704 N°1 y 3 del CC; artículo 1876 CC; artículos 464
N°6 y N°14 del CPC.

Asimismo, se ha afirmado por parte de la jurisprudencia que "por la sinonimia señalada


no puede sostenerse que la falta de autenticidad de un documento equivalga la falsedad del
mismo. Un instrumento público o auténtico puede ser falso, sin dejar por ello de ser documento
público o auténtico, aunque falsificado, en caso de que haya sido materia de alguna de las
falsedades que designan los artículos 193 y 194 del Código Penal; y a la inversa, un instrumento
privado puede ser verdadero, a pesar de no haber sido reconocido o autentificado, si no se ha
cometido en él ninguna falsedad”30.

En este caso tampoco rigen las limitaciones de los arts.1708 y siguientes del Código
Civil por no recaer en la especie ese medio de prueba sobre actos y contratos, pudiendo
por lo tanto valerse las partes de todos los medios de prueba establecidos en la ley.

Tratándose de la impugnación por falta de autenticidad de una escritura pública, el


legislador ha establecido una especial reglamentación, respecto de la prueba
testimonial en el art. 429 CPC:
Para que pueda invalidarse con prueba testimonial una escritura pública, se requiere:
1) La concurrencia de 5 testigos.

29
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P. 137.

30
Corte Suprema 27. 12. 1945. Revista de Derecho y Jurisprudencia T. 43. Sec. 1 Pág. 337.
2) Que todos los testigos estén contestes en el hecho y sus circunstancias esenciales, sin
tacha, legalmente examinados, que den razón de sus dichos y que sus declaraciones
no hayan sido desvirtuadas por otra prueba en contrario.
3) Que los testigos acrediten que la parte que dice haber asistido personalmente al
otorgamiento o el escribano o alguno de los testigos instrumentales ha fallecido con
anterioridad o ha permanecido fuera del lugar en el día del otorgamiento y en los 70
días subsiguientes.

Esta prueba es apreciada por el tribunal según las reglas de la sana crítica, por
disposición expresa del legislador.

Cabe destacar que el artículo 429 CPC sólo se aplica a la escritura pública y no al
instrumento público. Asimismo se refiere a la falta de autenticidad y no a la nulidad o
impugnación de la sinceridad de las declaraciones.

iii. La falsedad ideológica o falta a la verdad en las declaraciones que él contiene:


No se trata de una impugnación del instrumento público, ya que éste se ha otorgado
dando cumplimiento a todos los requisitos legales. Maturana nos recuerda que “la fe
pública que emana del instrumento se refiere a lo material de éste y no a la verdad de las
declaraciones prestadas por las partes”31. Lo que se pretende con la impugnación de la
verdad de las declaraciones de las partes, no es sostener que dichas declaraciones no
fueron formuladas, sino que aquellas contenidas en el instrumento público no
corresponden a la voluntad real de los otorgantes, sea por error, dolo o simulación.

Los terceros pueden atacar el instrumento público por falsedad en las declaraciones
dispositivas y enunciativas relacionadas con las dispositivas, las cuales se presumen
verdaderas. Para acreditar la falsedad, se pueden valer de todos los medios de prueba
que establece la ley. Las meramente enunciativas, no tendrían interés para los terceros
en objetar por falsedad, por no tener valor probatorio respecto de ellos.

Las partes que participaron en el otorgamiento del instrumento público pueden


formular impugnación por falsedad de las declaraciones dispositivas y de las
enunciativas relacionadas con lo dispositivo contenidas en el instrumento, a pesar de
que produzcan plena prueba en su contra. Para ello, es necesario que rindan otras
pruebas que produzcan plena prueba, a fin de que el juez, en la apreciación
comparativa, pueda restarles valor.

Un caso muy importante de analizar es el artículo 1876 CC, al señalar que “la resolución
por no haberse pagado el precio no da derecho al vendedor contra terceros poseedores, sino en
conformidad a los arts. 1490 y 1491. Si en la escritura de venta se expresa haberse pagado el
precio, no se admitirá prueba alguna en contrario sino la de nulidad y falsificación de la
escritura, y sólo en virtud de esta prueba habrá acción contra terceros poseedores”.

31
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P. 139.
La Corte de Apelaciones de Santiago32 ha dicho al respecto que “Los terceros adquirentes
quedan a salvo de toda acción real en el caso de que se trata; pero esto no significa que las partes
contratantes no puedan, entre ellas, probar su falta de veracidad, como podría suceder en el
supuesto de celebrarse un contrato simulado o de no ser efectivo el pago. El art.1876 está
destinado a proteger a los terceros adquirentes de la cosa vendida y no al comprador de ella33”.
En este sentido, los terceros solo se verían afectados en la hipótesis de nulidad o
falsificación de la escritura. Pero entre las partes, nada impide que prueben la no
autenticidad de sus declaraciones. Como afirma el profesor Maturana “Una plena
prueba puede destruirse con otra plena prueba”34.

Es importante distinguir estas tres causales de impugnación. Generalmente se ha


sostenido que cualquiera sea la causal, la contraparte tiene un plazo de 3 días fatales
para hacerlas valer. Sin embargo, el profesor Maturana es de la postura de que
únicamente en el caso de que la causal invocada sea la falta de autenticidad aquella
puede impugnarse dentro del término de citación. La nulidad o la simulación (falta de
veracidad en declaraciones) se deben impugnar a través de un juicio de lato
conocimiento y no en un procedimiento incidental.

J) Procedimiento de impugnación de un instrumento público

Conforme a lo señalado, la impugnación puede hacerse por 2 vías, de forma principal y de


forma incidental

i. Principal
Consiste en iniciar un juicio completo que recae sobre la nulidad, simulación o falta de
autenticidad del instrumento público. Debiera ser juicio ordinario de mayor cuantía,
toda vez que no hay procedimiento especial y el asunto no susceptible de apreciación
pecuniaria.

ii. Incidental
Cualquiera que sea el estado del juicio en que se acompañe el instrumento público,
debe impugnarse en un plazo de tres días, generándose el incidente con la parte que
impugna. Algunos sostienen que la vía incidental se puede utilizar para alegar
cualquiera de las causales, en tanto que para otros, solo se puede utilizar para alegar
falta de autenticidad, toda vez que las otras dos deben alegarse en juicio ordinario.

32
Alessandri está por el alcance absoluto de la disposición, criticando algunos fallos que han acogido la doctrina que admite la
prueba, cuando la cuestión está circunscrita a las partes (aceptando tales fallos que por medio de la confesión del comprador, se
destruya el contenido de la escritura pública): “Rechazamos en absoluto esta doctrina y los fallos que la consagran por
considerarlos violatorios del artículo 1876 que, en nuestro modesto criterio, niega la prueba contra esta declaración [de haberse
pagado el precio] tanto entre las partes como respecto de terceros. Ese artículo es terminante en el sentido de no admitir prueba
alguna contra esa declaración sin distinguir si es entre las partes o respecto de terceros. Si la ley no distingue tampoco nosotros
podemos distinguir. La ley no admite ninguna prueba en contra de esa declaración y al decir alguna manifiesta que rechaza aún
la propia confesión del comprador, si con ella se pretende destruir lo dicho en el contrato”.
ORREGO A, Juan. El Contrato de Compraventa. P.125.
33
Corte de Apelaciones de Santiago. 11. 9. 58. Revista de Derecho y Jurisprudencia t. 58. sec. 2. Pág. 21
34
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.140.
VI. EL INSTRUMENTO PRIVADO

“Es todo escrito que deja constancia de un hecho, otorgado por los particulares sin intervención del
funcionario público en el carácter de tal”.

Por regla general, se requiere que esté firmado por el otorgante. Es un presupuesto que se
encuentra en los artículos 1701 inciso 2°, 1702 y 1703 CC. No obstante lo anterior, los artículos
346 N°1 y 2 CPC en relación con el 352 N°3 dan a entender que la firma no sería requisito de
la esencia, sino que bastaría con que estuviera escrito.

En todo caso, existen excepcionalmente ciertos documentos que pueden valer como
instrumentos privados, aún sin firma. Por ejemplo, los mencionados en los artículos 1704 y
1705 CC.

Por último, aun cuando no se acepte la tesis que sostiene que la firma es de la esencia de los
documentos privados, existen casos en que la suscripción es de la esencia tanto para la
existencia como para la validez (letra de cambio, cheque y pagaré).

A) Autenticidad del instrumento privado

La gran diferencia con los instrumentos públicos, es que los instrumentos privados no están
amparados por la presunción de veracidad que reviste a los primeros, y en consecuencia
requieren ser reconocidos en juicio por la parte contra quien se presenta, o se haya mandado
a tener por reconocido en los casos y con los requisitos prevenidos por la ley. Los instrumentos
privados no hacen fe por sí mismos. Mientras no sea reconocido o se pruebe que es auténtico,
el instrumento privado carece de todo valor probatorio.

B) Reconocimiento del instrumento privado

El reconocimiento de los instrumentos privados se encuentra expresamente regulado en el


artículo 346 CPC, el cual distingue varios casos:

i. Reconocimiento Expreso: se contiene en 2 números:


Artículo 346 CPC: “Los instrumentos privados se tendrán por reconocidos:
1° Cuando así lo ha declarado en el juicio la persona a cuyo nombre aparece otorgado el
instrumento o la parte contra quien se hace valer.

2° Cuando igual declaración se ha hecho en instrumento público o en otro juicio diverso.

ii. Reconocimiento Tácito:


Artículo 346 CPC: “Los instrumentos privados se tendrán por reconocidos:
3° Cuando puestos en conocimiento de la parte contraria, no se alega su falsedad o falta de
integridad dentro de los seis días siguientes a su presentación, debiendo el tribunal, para este
efecto, apercibir a aquella parte con el reconocimiento tácito del instrumento si nada expone
dentro de dicho plazo”.
Los motivos para objetar el documento privado son la falta de autenticidad (se crea
uno que no existe o se altera uno existente) y la falta de integridad (se produce
respecto de aquellos documentos a los cuales les falte alguna de sus partes).

Para que juegue el mencionado apercibimiento es necesario que al presentarse el


escrito se solicite clara y expresamente que se tenga por acompañado el documento y
que se tenga por reconocido si no fuere objetado dentro de 6° día por los motivos de
falsedad o falta de integridad. Es necesario que el tribunal en la resolución que lo tiene
por acompañado indique igualmente el apercibimiento. En caso de acompañarse el
documento con la demanda, se tendrá todo el término de emplazamiento, en virtud
del artículo 255 CPC.

Si se hubiera citado a las partes para oír sentencia en primera instancia o se hubiere
visto la causa, ello no impide que se puedan presentar escritos impugnando los
instrumentos privados, en caso que estuviere pendiente el plazo.

Si la contraparte objeta el documento se genera el incidente correspondiente, siendo el


juez quien debe resolver en definitiva si es auténtico o no.

El reconocimiento tácito no aplica respecto del instrumento privado emanado de


terceros, sino sólo respecto del instrumento privado emanado de parte. El
reconocimiento expreso del instrumento privado que emana de terceros se produce
por medio de su concurrencia al juicio en calidad de testigo, reconociendo allí la
integridad y autenticidad del instrumento privado.

iii. Reconocimiento Judicial:


Artículo 346 CPC: “Los instrumentos privados se tendrán por reconocidos:
4° Cuando se declare la autenticidad del instrumento por resolución judicial”.

Es aquel en que se manda por tener reconocido un instrumento privado en virtud de


una resolución judicial, fallando el incidente que se ha generado como consecuencia
de su objeción por falta de autenticidad o integridad. Debemos recordar que lo que
deberá acreditarse en caso de objeción, será la autenticidad del instrumento privado y
quien tiene la carga de probar es la parte que presenta el instrumento privado y no
aquella que lo objeta por falsedad. El reconocimiento judicial se produce cuando
habiendo sido objetado por falso un documento privado acompañado, el Tribunal
por una resolución posterior establece que el instrumento es auténtico. Si la
resolución establece que el instrumento no es auténtico se termina la prueba
instrumental, no tiene valor probatorio el instrumento.

El artículo 346 N°4 CPC sólo habla de objeción por falta de autenticidad y no por
integridad. Si se objeta por falta de integridad, se requiere para tenerlo por reconocido,
que se falle el incidente que aquella alegación genere de acuerdo a las reglas generales
de los incidentes.

C) Forma de acompañar los instrumentos privados en juicio


La ley no indica disposiciones expresas. Se debe distinguir:
i. Instrumentos privados emanados de terceros: con citación (artículo 795 N°4, 800 N°3
y 348 inciso 2° del CPC).
ii. Instrumento privado emanado de las partes: con conocimiento y bajo el
apercibimiento señalado en el artículo 346 N°3 CPC.

Respecto al apercibimiento, la parte dispone de un plazo de 6 días para formular


observaciones al documento acompañado. Si no formula observaciones, opera el
reconocimiento tácito, quedando reconocido por el sólo ministerio de la ley sin necesidad de
que se dicte resolución alguna. Otro sector de la doctrina considera que es necesario que se
dicte una resolución posterior. El prof. Maturana considera improcedente la exigencia de una
resolución judicial, atendido el carácter fatal del plazo para objetar. De exigir una resolución
judicial, estaríamos transformándolo en un reconocimiento judicial. Nada obsta a que se dicte
la resolución, la cual tendrá únicamente un carácter meramente declarativo.

D) La impugnación de un instrumento privado

Es la actividad destinada a lograr la destrucción o refutación de la fe probatoria de éstos. Las


causales para impugnar un instrumento privado son:
i. Falta de autenticidad: no ser otorgados en la forma y por quien o quienes aparecen
otorgándolos.
ii. Falta de integridad: por no ser completos.

E) Valor probatorio del instrumento privado

i. Valor probatorio de los instrumentos que emanan de parte:


Si el instrumento privado emanado de parte no es reconocido o mandado tener por
reconocido por alguna de las vías del artículo 346 CPC, no tiene valor alguno. Si el
instrumento privado reconocido o mandado a tener por reconocido, tiene el mismo
valor probatorio que el instrumento público respecto de las partes que lo hubieren
reconocido o se ha mandado tener por reconocido (artículo 1702 CC).

Respecto a los terceros, algunos sostienen que el instrumento privado carece de todo
mérito probatorio, ya que el artículo 1702 CC, se refiere sólo a su valor respecto de las
partes; y en consecuencia respecto de los terceros carecería de valor. A contrario sensu,
Claro Solar y Vodanovic señalan que, establecida la autenticidad del instrumento
privado, su valor es el mismo respecto de las partes que terceros, sin perjuicio que
éstos pueden rendir prueba en contrario.

ii. Valor probatorio del instrumento emanado de un tercero:


La jurisprudencia ha señalado que “para que los documentos privados emanados de terceros
tengan valor probatorio en juicio, es indispensable que quienes los han emitido declaren como
testigos en el juicio mismo, reconociéndolos en cuanto a su procedencia y dando fe de la verdad
de su contenido”. Es decir, el documento pasa a formar parte de la testimonial y tiene el
valor que la ley le asigna a ésta.
F) Fecha del instrumento privado

i. Respecto de las partes: tiene la fecha que en él se indica, pero sólo cuando se ha
reconocido o mandar tener por reconocido.
ii. Respecto de terceros: tendrá fecha cierta desde que se produzca alguna de las
circunstancias del artículo 1703 CC. En este caso, la fecha de un instrumento privado
no se cuenta respecto de terceros sino desde:
1) El fallecimiento de alguno de los que le han firmado.
2) Desde el día en que se ha copiado en un registro público.
3) Desde el día en que conste haberse presentado en juicio.
4) Desde el día en que el funcionario competente haya tomado razón de él o lo haya
inventariado en carácter de tal.

G) El cotejo de letras

Consiste en comprobar si la letra del documento que se pone en duda, es la misma que la de
un documento indubitado, o sea, de un instrumento del cual no hay menor duda de que es
auténtico. Procede siempre que se niegue por la parte a quien perjudique o se ponga en duda
la autenticidad de un instrumento privado o la de cualquier instrumento público que carezca
de matriz. En caso que el instrumento público posea matriz, procede el cotejo instrumental
(art. 344.) .

Procedimiento del cotejo de letras

Si se objeta un documento privado por falta de autenticidad, es menester que la parte que lo
presenta proceda a probar su autenticidad. Por el contrario, en caso de objetarse uno público,
que carece de matriz, la parte que formula la objeción es la que debe solicitar el cotejo, porque
se presume auténtico. Para proceder al cotejo de letras hay que indicar el o los instrumentos
indubitados con que deberá hacerse el cotejo.

El Artículo 352 CPC señala que “se considerarán indubitados para el cotejo:
1° Los instrumentos que las partes acepten como tales, de común acuerdo.
2° Los instrumentos públicos no tachados de apócrifos o suplantados
3° Los instrumentos privados cuya letra o firma haya sido reconocida de conformidad a los números 1
y 2 del art. 346 (por tanto no pueden usarse como indubitados los que hayan sido reconocidos
tácitamente o judicialmente).

El encargado de efectuar el cotejo de letras será un perito designado conforme a las reglas
generales (art. 350 inc. 2.), los que generalmente deberán tener la especialidad de calígrafos.
El artículo 353 prescribe que, además del peritaje, el tribunal debe proceder por sí mismo a la
comprobación después de oír a los peritos, sin que sea obligatorio el dictamen de éstos. La
Corte de Apelaciones ha dicho que “el cotejo de letras practicado por los peritos carece de fuerza
probatoria si el tribunal no practica, además por sí mismo, la comprobación ordenada por el art.353”35.

35
Corte de Apelaciones de Talca. 17. 10. 1910. Gaceta 1910 . 2 sem. N* 987 Pág. 571.
Según lo dispuesto en el artículo 354, el cotejo de letras no constituye por sí prueba suficiente;
pero podrá servir de base para una presunción judicial. En consecuencia, y de conformidad
con el artículo 355, el tribunal apreciará el cotejo de letras y los demás medios de prueba que
se hubieren rendido aplicando las reglas sobre apreciación comparativa de los medios de
prueba.

H) Especies de instrumentos privados en el Código Civil

i. Asientos, registros y papeles domésticos: se dirigen a la propia información y uso


privado de su dueño para llevar el curso de los negocios. Interviene una persona
que los firma y escribe (artículo 1704 CC):
1) Están destinados a hacer prueba en contra de la persona que los lleva y no a su favor.
2) Para que se produzca esta prueba es necesario que ella se haga valer por una persona
distinta de la que lleva estos documentos.
3) Hacen prueba sólo respecto de los hechos que aparezcan con toda claridad en ellos.
4) Su mérito probatorio es indivisible: harán fe tanto en lo que favorece a la persona que
los hace valer en su favor como en lo que le favorezca a aquel que los lleva.

ii. Notas escritas o firmadas por el acreedor en una escritura (artículo 1705 CC):
1) Puede consistir en una nota escrita o firmada por el acreedor a continuación, al margen
o al dorso de una escritura que siempre ha estado en su poder;
2) En una nota escrita o firmada por el acreedor, a continuación, al margen o al dorso del
duplicado de una escritura, encontrándose dicho duplicado en poder del deudor.

Estas notas están destinadas a hacer prueba en contra del acreedor, una vez que se
haya reconocido ella por éste. Igualmente tiene un mérito probatorio indivisible:
cuando el deudor quiere favorecerse de ella, deberá igualmente aceptar lo que resulte
desfavorable. No requieren firma para tener valor probatorio.

iii. Las contraescrituras:


El artículo 1707 CC señala que “las escrituras privadas hechas por los contratantes para
alterar lo pactado en escritura pública, no producirán efecto contra terceros. Tampoco lo
producirán las contraescrituras públicas, cuando no se ha tomado razón de su contenido al
margen de la escritura matriz cuyas disposiciones se alteran en la contraescritura, y del traslado
en cuya virtud ha obrado el tercero”.

Respecto al alcance de la norma, hay que distinguir:

1) Sentido restringido: todo escrito destinado a permanecer secreto entre las


partes y que contradice a estipulaciones anteriores realizadas entre ellas de una
manera ostensible. El profesor Maturana sostiene que “Las contraescrituras
serían el medio que tendrían las partes de demostrar su real intención respecto a otro
acto que se ha otorgado en forma simulada”36. Es decir, sólo pueden considerarse

36
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P. 151.
contraescrituras los instrumentos respecto de los cuales concurran dos
requisitos: (1) Que la nueva escritura tenga por objeto manifestar la simulación
real o parcial de un acto o convención ostensible. (2) La contraescritura no
expresa una convención nueva.
2) Sentido amplio: Alessandri R. sostenía que, contraria a la legislación francesa,
la chilena, considera la palabra “contraescritura” en su acepción amplia, ya que
el artículo 1707 CC no ha restringido el alcance. Es por ello, que este autor
plantea que se entienden incorporados en el concepto aquellas escrituras e
instrumentos en el que las partes modifiquen o alteren en todo o parte, en sus
elementos esenciales o accidentales, los contratos celebrados, sea para dejarlos
totalmente sin efectos, o para modificarlos sustancialmente o en el detalle.

La jurisprudencia se inclina por una acepción amplia, y no restringida a los casos de


simulación.

Valor probatorio de las contraescrituras


En su calidad de instrumentos, se rigen por las normas generales de éstos, pudiendo
ser públicas o privadas:
a) Efecto respecto de las partes: las contraescrituras producen pleno valor probatorio y
las partes deben regirse por lo que en ellas se establece, debiendo primar la voluntad
real, conforme disponen los artículos 1545 y 1560 del CC.
b) Efecto respecto de los terceros: por regla general no producen efectos. Solo los
producirán, cuando concurran los presupuestos del artículo 1707 CC, esto es:
● Las contraescrituras que constan en instrumento privado destinadas a
modificar lo establecido en instrumento público, no producen efectos
respecto de los terceros.
● Las contraescrituras que constan en instrumento público destinadas a
modificar lo establecido en otro instrumento público, producen efectos
respecto de éstos, siempre que:
▪ Se tome nota de la contraescritura al margen de la matriz.
▪ Se tome nota de la contraescritura en la copia de la escritura
pública que se altera y en cuya virtud actúa el tercero.
LA CONFESIÓN37

I. CONCEPTO

El profesor Cristián Maturana define la confesión como “el reconocimiento expreso o tácito que
hace una de las partes en su perjuicio respecto de hechos controvertidos, sustanciales y pertinentes38”.
Por otro lado, Couture lo define como “acto jurídico consistente en admitir como cierto, expresa o
tácitamente, dentro o fuera de juicio, un hecho cuyas consecuencias de derecho son perjudiciales para
aquel que formula la declaración”.

II. CARACTERÍSTICAS

37
En los procedimientos orales, no se habla de confesión, sino más bien de declaración de parte.
38
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.160.
A) Prueba circunstancial: Se produce durante el juicio.
B) Medio de prueba directo.
C) Unilateral: No requiere aprobación de la parte contraria.

III. REQUISITOS

A) Declaración unilateral de voluntad de una de las partes del proceso (Capacidad): Al


ser un acto jurídico unilateral, debe estar exento de vicios, por lo cual tiene plena
aplicación las reglas del Código Civil respecto de los vicios del consentimiento. El CPC
solo reguló específicamente el error de hecho como vicio del consentimiento, que
permite la revocación de la confesión. Además, la confesión debe ser prestada por una
persona capaz, siguiendo las reglas generales de capacidad.
B) Debe recaer sobre hechos precisos y determinados, trascendentes para la resolución
del conflicto (objeto): La confesión versa sobre hechos y no sobre derecho. además
puede recaer sobre hechos personales o no personales de la parte que lo presta, lo cual
será determinante a la hora de establecer su valor probatorio. Finalmente, la confesión
no puede recaer sobre hechos eventuales o hipotéticos, puesto que ahí no existe
determinación del hecho de parte del declarante.
C) Reconocimiento de los hechos debe perjudicar a la parte que formula la declaración:
No existirá confesión sis es que en ella solo se reconocen hechos en favor del que presta
la declaración, puesto que ello importaría reconocer la posibilidad de crearse por este
su propia prueba39.
D) Reconocimiento debe efectuarse con intención consciente y dirigida del confesante de
reconocer un hecho que le perjudica (voluntad) "animus confitenti". Es decir, la
intención consciente y dirigida del confesante de reconocer un determinado hecho que
le perjudica y favorece al contendor No toda declaración de la parte es confesión si no
concurre el factor intencional.

IV. OBJETO

Debe tratarse de hechos, excluyéndose las normas jurídicas. Además, deben ser hechos que
perjudiquen a la parte confesante ya que el legislador estima que cuando una de las partes
reconoce libre y espontáneamente un hecho que le es perjudicial, será debido a que
normalmente ese hecho será cierto (Ramos, F). Los tribunales también han exigido que se trate
de hechos verosímiles y lícitos. Por último, de acuerdo al artículo 1713 CC y 399 CPC, puede
ser respecto de hechos personales o no personales, lo cual tiene importancia para el valor
probatorio de la declaración. El hecho objeto de la confesión debe ser:

A) Controvertido
B) Desfavorable al confesante
C) Verosímil
D) Lícito
E) Recaer sobre hechos precisos y determinados

39
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.167.
V. SUJETO

Debe emanar de una de las partes del proceso (demandante, demandado, terceros
independientes, coadyuvantes o excluyentes), es decir, una persona natural o persona jurídica
(la presta el representante legal) que sea capaz. También puede hacerlo el mandatario judicial
si es que se le ha conferido la facultad del artículo 7 inc. 2 del CPC, y no se hubiese solicitado
que sea la parte la que comparezca personalmente.

VI. TRIBUNAL ANTE EL QUE SE RINDE

Según el art. 397 CPC inc. 2:

A) Absolvente reside dentro del lugar del juicio: ante el tribunal de la causa.
B) Absolvente reside fuera del territorio jurisdiccional del tribunal: Ante el tribunal de su
residencia (por exhorto).
C) Absolvente reside fuera del territorio de la República: ante el respectivo agente
diplomático o consular chileno de donde reside el absolvente.

Ante quién se presta: Ante el Tribunal (juez), quien puede delegar en el secretario u otro
ministro de fe, además, se puede solicitar que tome la declaración el tribunal, quien debe
proceder así.

VII. NATURALEZA JURÍDICA

Existen dos posiciones en la doctrina (i) para algunos se trata de una declaración de voluntad
(ii) para otros se trata de una mera declaración de conocimiento. No obstante, la posición que
prima en nuestra legislación y en nuestra doctrina es considerar que la confesión es una
declaración de voluntad que emana de una parte con conciencia de que está reconociendo un
hecho que le perjudica y favorece a la contraria. Este factor subjetivo denominado animus
confitendi debe estar siempre presente.

VIII. CLASIFICACIÓN

A. Según ante quién se preste:

i. Confesión judicial: Se realiza dentro del juicio, ante el tribunal de la causa o


ante el tribunal exhortado. La confesión judicial puede ser espontánea o
provocada. Será espontánea cuando se verbalice de forma voluntaria por la
parte, no lo será cuando estemos ante una confesión provocada mediante el
requerimiento de la otra parte por la vía del procedimiento formal que consiste
la absolución de posiciones o por las medidas para mejor resolver.
ii. Confesión extrajudicial: Aquella que se realiza fuera del proceso en cuestión,
incluyendo la que se realiza en otro litigio. Esta confesión será siempre expresa.
A su vez, si es verbal, puede acreditarse mediante testigos (de oídas), si fue
realizada de forma escrita puede acreditarse mediante prueba instrumental.
La importancia de esta clasificación dice relación con el diverso valor probatorio según los
arts. 398, 399 y 400 del CPC y 1713 CC.

B. Según su forma:

i. Confesión expresa: Aquella que se presenta en términos categóricos y


explícitos.
ii. Confesión tácita o ficta: Aquella que se produce como consecuencia de que se
cumplan las hipótesis previstas por el legislador en el marco del procedimiento
de absolución de posiciones.

Esta clasificación solo tiene importancia respecto de los requisitos que deben concurrir para
su generación, teniendo ambas igual valor probatorio.

C. Según cómo se presenta:


i. Confesión verbal
ii. Confesión escrita

Esta clasificación tiene importancia respecto a la forma en que debe ser acreditada cada una.

D. Sobre los hechos que recae:

i. Confesión sobre hechos personales


ii. Confesión sobre hechos no personales

Esta clasificación según los artículos 1713 CC y 402 del CPC tiene importancia respecto del
valor probatorio, ya que según nuestra jurisprudencia, cuando una confesión se refiere a un
hecho personal del confesante, no procede prueba en contrario. Por el contrario, si es
admisible la prueba cuando se refiere a un hecho no personal40.

E. Según su contenido:

i. Confesión pura y simple: Aquella en que se afirma o niega categóricamente un


hecho.
ii. Confesión compleja: Aquella en que se reconoce el hecho material del cual se
interroga, pero se agregan otros hechos enteramente desligados del primero
(compleja de primer grado), o bien ligados o modificatorios del mismo
(compleja de segundo grado).
iii. Confesión calificada: Aquella en que el confesante reconoce categóricamente el
hecho, pero le agrega algún hecho que viene a alterar su naturaleza jurídica.

Esta clasificación tiene importancia respecto de la divisibilidad de la confesión.

F. Según su divisibilidad:

40
Corte Suprema 23. 10. 1930. Revista de Derecho y Jurisprudencia T. 28. Sec. 1 Pág. 345
i. Confesión divisible: Aquella en que pueden separarse los hechos que
perjudican al confesante de aquellos que le son favorables.
ii. Confesión indivisible: Aquella en que no se pueden separar los hechos que
perjudican al confesante de aquellos que le favorecen.

G. De acuerdo a sus efectos o valor probatorio:

i. Confesión eficaz: Aquella que se genera en los casos en que la ley lo permite.
ii. Confesión ineficaz: Aquella que no produce efectos por no ser permitida por la
ley.

IX. INICIATIVA

La confesión judicial provocada es de iniciativa de las partes. Puede solicitarse antes del juicio
como medida prejudicial probatoria (art. 284 CPC) y como medida prejudicial propiamente
tal (art. 273 N°1 CPC). Durante el juicio, según el artículo 385 CPC se puede solicitar en
cualquier estado del proceso, desde que se encuentre contestada la demanda y hasta el
vencimiento del término probatorio en primera instancia y hasta la vista de la causa en
segunda instancia. En primera instancia se puede ejercer hasta por dos veces, y si se alegan
hechos nuevos, puede solicitarse una vez más. En segunda instancia una vez, pero si se alegan
nuevos hechos puede ejercerse una vez más. Además, puede materializarse como una medida
para mejor resolver, la que de acuerdo al artículo 159 N°2 CPC faculta al tribunal para
disponer la confesión judicial de cualquiera de las partes sobre hechos que consideren de
(influencia en la cuestión y (ii) que no resulten probados.

X. REQUISITOS SOLICITUD

Demandante o demandado deberán presentar un escrito solicitando la práctica de la prueba


acompañando un sobre que contiene el pliego de posiciones (lista de preguntas) que deberá
absolver la parte contraria, el cual se debe pedir que se mantenga en reserva y custodia en la
Secretaría del Tribunal hasta el día de la práctica de la diligencia probatoria (art. 387 CPC). En
el exterior del sobre se debe individualizar el proceso al cual se refiere. Respecto del pliego,
las preguntas deben ser expresadas en forma asertiva o interrogativa41, pero siempre en
términos claros y precisos, de modo que sean entendidas sin dificultad refiriéndose a hechos
objeto del proceso (art. 385 CPC). La importancia de la distinción entre asertiva o interrogativa
dice relación con las consecuencias de la respuesta evasiva o bajo el apercibimiento en caso de
inconcurrencia en 2° citación, las cuales veremos a continuación.

El pliego a su vez también debe tener la individualización del proceso, el cual debe ser firmado
por la parte solicitante.

En el escrito se debe solicitar un día y hora, y deberá solicitar que comparezca personalmente
(si no se solicita puede absolver posiciones el mandatario judicial que tenga la facultad para

41
Ejemplo pregunta asertiva: Diga el absolvente cómo es cierto y efectivo que el día 26 de noviembre concurrió a Talca. Ejemplo
pregunta interrogativa: Diga el absolvente qué hizo el 26 de noviembre.
Incluso pueden formularse preguntas asertivas e interrogativas, ejemplo, diga el absolvente cómo es efectivo que el 26 de
noviembre de 2021 se encontraba en Talca. En el evento que lo negare, diga el absolvente en qué lugar se encontraba ese día.
ello). Además, el escrito puede solicitar que el tribunal reciba por sí mismo la declaración de
la parte, si es que se desea que no delegue la diligencia.

El tribunal proveerá el escrito dando curso a la solicitud, ordenando la reserva y custodia y


que sea notificada por cédula al mandatario judicial de la parte, quien estará obligado a hacer
comparecer a su mandante bajo el apercibimiento legal (art. 397 CPC). Por ejemplo: “Como se
pide, se fija al efecto la audiencia del quinto día posterior a la notificación, a las 10:00 horas”.

XI. ADMISIBILIDAD

Según los artículos 1713 y 385 CPC la regla general es que la confesión sea admisible en todos
los procesos. Sin embargo, en ciertos casos será declarada inadmisible, como por ejemplo:

A) Falta de instrumento público no puede suplirse por otra prueba (incluida confesión)
en actos y contratos en que ley requiere esa solemnidad (Art.1701 CC)
B) No puede probarse una causal de divorcio perpetuo o de nulidad de matrimonio, a
través de la confesión. Esto implicaría admitir el divorcio o la nulidad de matrimonio
por mutuo consentimiento.
C) En juicios de separación de bienes por mal estado de los negocios del marido, la
confesión de éste no hace prueba (Art.157 C.C)
D) La declaración de uno de los cónyuges que afirme ser suya o debérsele una cosa
perteneciente a la sociedad conyugal, ni la confesión del otro, ni ambas juntas, se
estimarán suficiente prueba, aunque se hagan bajo juramento, ya que la ley presume
que pertenecen a la sociedad. (Art.1739 -2 C.C)
E) En prelación de créditos la confesión del marido, padre o madre de familia, tutor o
curador fallidos, no hará prueba por sí sola contra los acreedores (Art.2485 C.C)
F) Confesión extrajudicial verbal sólo debe considerarse en los casos en que es admisible
la prueba de testigos (Art 398-1 CPC)
G) En materia penal, “no se podrá condenar a una persona con el sólo mérito de su propia
declaración” (art 340 final CPP)

XII. DEBERES DEL ABSOLVENTE

A) Deber de comparecer: De acuerdo al artículo 385 CPC constituye la regla general, sin
perjuicio de las excepciones establecidas por el legislador, como, por ejemplo, las
personas que pueden declarar en su domicilio (art. 389) o el absolvente que resida
fuera del territorio jurisdiccional (art. 388 CPC).
B) Deber de prestar declaración: El absolvente debe absolver las posiciones que se le
hayan formulado, sin que existan excepciones para ello.
C) Deber de decir la verdad: De acuerdo al artículo 390 CPC antes de proceder a la
interrogación deberá tomársele juramento al tenor de la fórmula prevista para la
prueba testimonial (art. 363 CPC). No obstante, en este caso no existe la sanción penal
en caso de infracción a este deber.

XIII. PRÁCTICA

La absolución de posiciones se realiza en audiencia.


A) Absolvente no comparece: En este caso, se debe solicitar al receptor que certifique el
hecho de la inasistencia. Con ella, se puede volver a solicitar una citación para absolver
posiciones bajo el apercibimiento del artículo 394 CPC. Esta resolución deberá ser
notificada por cédula al mandatario quien estará obligado a hacer comparecer a su
mandante, bajo el apercibimiento.

Si el absolvente no comparece a la 2° audiencia, o compareciendo se niega a responder


o da respuestas evasivas: se dará lugar a la confesión tácita o ficta, contemplada en el
art. 394 CPC.

B) Absolvente comparece (ya sea a la primera o segunda citación): Estaremos ante una
confesión provocada y expresa.

i. Contacto con receptor: Son ellos quienes deben actuar como ministros de fe
(art. 390 COT)
ii. Declaración: De acuerdo al art. 388 CPP, el juez puede delegar la diligencia,
siendo en la práctica el receptor quien la dirige. Además pueden estar presentes
el absolvente, su abogado y mandatario judicial, la parte que solicitó la prueba,
su abogado y mandatario judicial.
iii. Desarrollo: El absolvente debe prestar juramento bajo la fórmula del art. 390
CPC. Una vez prestado el juramento, se abre el sobre que contiene el pliego de
posiciones. De acuerdo al art. 391 CPC la declaración debe prestarse
inmediatamente de palabra y en términos claros y precisos. Si se trata de
hechos personales debe afirmarlos o negarlos. Podrá, sin embargo, el tribunal
podrá admitir la excusa de olvido de los hechos en los casos calificados, cuando
se funde en circunstancias verosímiles y notoriamente aceptables. En caso de
ser sordo o sordomudo podrá escribir su declaración o aplicarse el art. 382 CPC.
Las cuestiones relativas a la claridad o a la procedencia de las preguntas,
generarán un incidente de resolución inmediata.

Según el art. 394 CPC el interrogado podrá solicitar un plazo razonable para
consultar sus documentos antes de responder, el cual será otorgado por el
tribunal cuando estime indispensable o consienta en ello la parte que ha
solicitado la declaración.

iv. Documentación del acto: Se aplica el artículo 395 CP en relación al art. 370 CPC.

XIV. CONFESIÓN TÁCITA

Consiste en una ficción ya que se produce una vez que se cumplen las hipótesis previstas por
el legislador en el desarrollo de la prueba de absolución. Este tipo de confesión opera en las
siguientes hipótesis:

A) Confesante comparece a la audiencia fijada por el tribunal y se niega a declarar o da


respuestas evasivas: La negativa a su vez puede ser positiva o expresa. Las respuestas
evasivas son aquellas que buscan eludir la pregunta. Se ha fallado que se debe solicitar
al tribunal que declare las respuestas evasivas y dicte una resolución teniendo por
confesa a la parte, sin que proceda de oficio42.
B) Absolvente no comparece en la segunda citación bajo apercibimiento del art. 394
CPC: La parte interesada deberá presentar un escrito por el cual se pide que se tenga
por confeso al absolvente respecto de las preguntas formuladas de forma asertiva. Si
las preguntas están formuladas de forma interrogativa, recibe aplicación el art. 394
CPC, disponiendo de multas o arrestos y suspensión del pronunciamiento de la
sentencia hasta la confesión de la parte.

XV. VALORACIÓN

A) Confesión extrajudicial verbal: sólo es admisible en los casos en que sea admisible la
prueba de testigos y en tal caso puede ser base de una presunción judicial (art. 398 inc.
1 CPC).
B) Confesión extrajudicial escrita: tiene el valor de prueba instrumental.
C) Confesión extrajudicial prestada ante juez incompetente pero que ejerza jurisdicción:
será estimada siempre como presunción grave para acreditar los hechos confesados
(art. 398 inc. 2 CPC).
D) Confesión extrajudicial en presencia de la parte que la invoca: será estimada siempre
como presunción grave (art. 398 inc. 2 CPC).
E) Confesión extrajudicial prestada en otro juicio diverso: será estimada siempre como
presunción grave para acreditar los hechos confesados (art. 398 inc. 2 CPC).
F) Confesión extrajudicial prestada en otro juicio diverso, pero seguido entre las partes
que litigan: podrá dársele el mérito de prueba completa habiendo motivos poderosos
para estimarlo así (art. 398 inc. 2 CPC).
G) Confesión judicial (expresa o tácita) sobre hechos personales: de acuerdo al artículo
399 inc. 1 CPC produce plena prueba, en el mismo sentido, el art. 1713 CC. No obstante,
en el artículo 402 CPC señala que en contra de ella no se recibirá prueba en contrario,
por lo que a juicio de una mayoría doctrinaria y jurisprudencial esta prueba primaría
por sobre cualquier otra, por lo que ante pruebas contradictorias para acreditar un
hecho siempre habrá de optarse por ella 43. Esta circunstancia se ha denominado
máxima ómnium probationum o probatio probatissima, de la cual se deriva el
aforismo jurídico “a confesión de parte, relevo de prueba”.

Sin perjuicio de ello, esta conclusión ha sido negada por algunos autores y
jurisprudencia los cuales estiman que no cabe dar por acreditado el hecho que en ella
se reconoce si existen otros medios probatorios de igual valor, que se encuentren más
conforme a la verdad, por lo que debe aplicarse el artículo 428 CPC.

H) Confesión judicial (expresa o tácita) sobre hechos no personales: de acuerdo al artículo


399 CPC tiene valor de plena prueba. Sin embargo, respecto de esta confesión no recibe
aplicación el inciso primero del art. 402 del CPC, por lo que sí es posible rendir prueba
en contrario.

42
Corte Suprema 6. 9. 1954. Revista de Derecho y Jurisprudencia T. 51. Sec. 1. Pág. 428
43
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.186.
XVI. VICIOS DEL CONSENTIMIENTO

Por regla general, la confesión judicial una vez prestada en juicio es irrevocable, es decir, no
puede con posterioridad retractarse de ella o dejarla sin efecto 44. Sin embargo, El animus
confitendi, elemento subjetivo o intencional de la confesión, debe estar siempre presente. Por
eso, si la confesión ha sido otorgada con un vicio del consentimiento, puede ser revocada
aplicando las reglas de la nulidad procesal. Nuestra legislación en el artículo 402 CPC se hace
cargo del caso en que la confesión se haya fundado en un error de hecho, permitiendo su
revocación. Esta regla resulta aplicable tanto para la confesión judicial acerca de hechos
personales como para los que no.

XVII. DIVISIBILIDAD

La confesión por regla general es indivisible según el artículo 401 CPC, lo que significa que la
parte no puede aceptar todo aquello que la beneficie y rechazar aquello que le sea
desfavorable.

Ahora bien, esta regla es atenuada en algunos casos:

A) Confesión simple: Confesante afirma un hecho contrario a su interés sin efectuar


agregaciones o modificaciones. Esta confesión es naturalmente indivisible.

Ejemplo: Absolvente reconoce que recibió la suma de dinero a título de mutuo.

B) Confesión calificada: El confesante afirma un hecho que es contrario a su interés pero


lo califica jurídicamente. También se trata de una confesión indivisible.

Por ejemplo: Absolvente reconoce que recibió la suma de dinero, pero agrega que la recibió a
título de donación y no de mutuo.

C) Confesión compleja: Confesante afirma un hecho contrario a su interés pero le agrega


otros hechos que le son favorables. A diferencia de la calificada, aquí tenemos un hecho
nuevo que se agrega.

i. De primer grado: Se agregan hechos que pueden existir con independencia del
hecho controvertido.

Ejemplo: El absolvente reconoce haber recibido la suma de dinero, pero que


nada debe puesto que la contraparte también recibió tal suma a título de mutuo
y ha operado la compensación.

ii. De segundo grado: Se agregan hechos que no pueden existir sin el hecho
controvertido. Se considera que esta no puede dividirse ya que las
circunstancias adicionales constituyen un solo todo.

Ejemplo: El absolvente reconoce que recibió la suma de dinero que se le señala,

44
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.188.
pero agrega que ya la pagó.

El artículo 401 CPC señala que podrá dividirse la confesión cuando:

A) Comprenda hechos diversos enteramente desligados entre sí (caso de la confesión


calificada de primer grado)
B) Comprenda varios hechos ligados entre sí o que se modifiquen los unos a los otros
(caso de la confesión calificada de segundo grado), la contraparte pruebe la falsedad
de las circunstancias que según el confesante alteran o modifican el hecho confesado.

XVIII. PROBLEMAS DE LA PRUEBA ACTUAL

A) La autoinculpación: objeto de la prueba de confesión judicial provocada. La única


finalidad que tiene esta prueba es autoinculpatoria, por lo que si se fracasa en ese
propósito, la prueba pierde su utilidad.
B) Procedimiento encorsetado por la regla de la escritura. La regla escrita impone una
serie de trámites que son prescindibles bajo un modelo de prueba oral, siendo el pliego
de posiciones lo que constituye el alma de la prueba. Durante el desarrollo de la prueba
el protagonismo lo tiene el receptor.
C) La propuesta en el proyecto de reforma al código de procedimiento civil apunta a
solicitar la prueba de declaración de las partes sobre hechos y circunstancias de las que
tengan noticia y que guarden relación con el objeto del juicio. No hace referencia eso
sí a interrogar respecto de hechos no personales al interrogado o a terceros. Prevé un
interrogatorio sin admisión de pliegos, entregando mayor libertad y flexibilidad.

PRUEBA PERICIAL

I. CONCEPTO

Para el profesor Cristián Maturana el informe de peritos consiste en “la opinión emitida en un
proceso, por una persona que posee conocimientos especiales de alguna ciencia o arte, acerca de un hecho
sustancial, pertinente y controvertido o de alguna circunstancia necesaria para la adecuada resolución
de un asunto45”.

Para Couture, “Perito es el auxiliar de la justicia que, en el ejercicio de una función pública o de su
actividad privada, es llamado a emitir parecer o dictamen sobre puntos relativos a su ciencia, arte o
práctica, asesorando a los jueces en las materias ajenas a la competencia de éstos 46”.

II. NECESIDAD

La necesidad de recurrir al perito está en relación con aquellos casos en los cuales es necesario

45
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.245.
46
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.245.
ilustrarse en torno a conocimientos técnicos o científicos especiales que van más allá de la
cultura media. Aunque el juez tenga formación y calificación técnica, no puede rechazar la
solicitud de esta diligencia probatoria.

En particular, las funciones del perito son informar al tribunal los principios generales
fundados en la experiencia o los resultados de su ciencia, por ejemplo, que el estómago e
intestino de un recién nacido se llenan de aire después de aproximadamente seis horas.
Comprobar hechos que únicamente pueden ser observados o comprendidos exclusivamente
en virtud de conocimientos profesiones, por ejemplo, que el intestino del bebé asesinado no
contiene aire. Además, extraer conclusiones de hechos que únicamente pueden ser
averiguados en virtud de conocimientos profesionales, por ejemplo, que el bebe ha sido
asesinado dentro de las primeras seis horas después del nacimiento.

III. FUNGIBILIDAD

Esta es la principal diferencia con la prueba testimonial, en donde los peritos son sustituibles,
debido a que no tienen un contacto directo con los hechos, como sí ocurre con los testigos.

IV. NATURALEZA JURÍDICA

La doctrina extranjera ha discutido desde hace años la naturaleza jurídica de esta prueba,
planteándose la discusión en torno a si estamos frente a un medio de prueba o un auxiliar del
juez. Los que señalan esta última postura consideran que el perito no suministra los hechos
sobre los que ha de fundarse la resolución, sino que sobre hechos ya dados, complementando
la capacidad del juez proporcionándole máximas de la experiencia especializadas, como
argumento normativo de esto encontramos el art. 412 CPC que permite el informe de peritos
dispuesto de oficio por el juez de forma amplia. Por otro lado, se afirma que estamos ante un
medio de prueba ya que tenemos una persona con conocimientos especializados que los
aporta al proceso, como argumento normativo, nuestro art. 412 CPC lo incorpora dentro de
los medios de prueba.

V. DERECHOS

Cobro de honorarios: De acuerdo al artículo 411 CPC el pago de los honorarios corresponde
a la parte que lo haya solicitado y en caso de que lo haya hecho el juez, deberá pagarse por
ambas partes en mitades.

VI. DEBERES

El deber fundamental es desempeñar fielmente su cargo, con arreglo a sus especiales


conocimientos, por eso el art. 417 CPC mandata a que el perito lo debe declarar así.

VII. INICIATIVA

Primeramente, las partes pueden solicitarla como medida prejudicial probatoria (art. 281
CPC). Dentro del proceso y de acuerdo al art. 412 CPC el informe de peritos puede ser
dispuesto por el juez en cualquier momento, pero las partes sólo pueden pedirlo dentro del
término probatorio. Además, se contempla esta prueba como medida para mejor resolver (art.
159 N°4 CPC), otorgándole incluso a las partes la posibilidad de apelar cuando el juez la
decrete como MMR, concediéndose en el solo efecto devolutivo. En segunda instancia no
procede, de acuerdo a lo previsto en el art. 207 CPC.

Además, existen casos en que la rendición de la prueba pericial puede ser obligatoria o
facultativa:

A) Obligatoria: El art. 409 CPC, establece que se oirá el informe de peritos en todos
aquellos casos en que la ley así lo disponga”. La ley lo dispone en variados casos, como
por ejemplo, Arts.314, 460, 848, 855, 1335, 1998, 2002 y 2397 del Cód. Civil y arts. 347,
350, 438 Nº2, 571, 602, 657, 761 y 865 del C.P.C.

A su vez, la omisión del informe de peritos en aquellos casos en que la ley lo establece
como obligatorio, producirá la nulidad de este.

B) Facultativa: El art. 411 CPC, señala que “podrá oírse el informe de peritos:

1. Sobre algún punto de hecho para cuya apreciación se requieran los conocimientos especiales
de alguna ciencia o arte.

2. Sobre algún punto de derecho referente a alguna legislación extranjera”

VIII. PROCEDIMIENTO

Los artículos 414 a 417 del C.P.C. establecen el procedimiento que ha de seguirse para la
designación del perito, la importancia de estas normas reside en que también se aplican para
el nombramiento de árbitros y partidores de bienes.

Presentada la solicitud o decretada de oficio, el tribunal debe proceder a citar a las partes por
cédula a una audiencia. La apelación que se deduzca en contra de la resolución que cita a las
partes a la designación de perito, no impide que se proceda a la designación y sólo después
de efectuada ella se llevará adelante el recurso.(Art. 414 inc. 2°).

Si asistiendo las partes a la audiencia, llegan a un acuerdo, será esto lo que primará. Si no
llegan a un acuerdo, será el propio tribunal quien designe al perito y resuelva los demás
aspectos. En particular, el legislador dispone que el nombramiento cuando lo hace el juez, no
puede recaer sobre ninguna de las dos primeras personas que hayan sido propuestas por cada
parte. Además, el juez deberá realizar la designación de entre los peritos de la especialidad
requerida que figuren en las listas que contempla el art. 417 CPC. La designación se
comunicará a las partes, quienes tendrán tres días para deducir su oposición. Vencido este
plazo, se entenderá aceptado.

El art. 413 CPC recoge las condiciones que deben reunir los peritos, por lo que si no cumplen
estas condiciones pueden ser tachados por las partes. Luego de esto, se notificará por cédula
al Perito para que manifieste si acepta o no el cargo. Se le debe informar lo que debe ser objeto
de su informe y el plazo en que debe emitirlo. Si acepta el cargo, deberá jurar desempeñarlo
con fidelidad (art. 417 CPC). Si no acepta, el juez procederá a nombrar a otra para su
reemplazo.

IX. PERITAJE PROPIAMENTE TAL


Durante el procedimiento pericial podemos distinguir tres etapas:

A) Etapa previa de aceptación, juramento y citación.


B) Reconocimiento, es decir, el acercamiento al objeto del informe.
C) Dictamen o informe mismo.

El reconocimiento:

Este trámite consiste en las distintas actuaciones que realiza el perito para conocer y recopilar
antecedentes respecto de la persona, cosa o hecho de la cual debe realizar el informe.

El perito debe señalar dónde va a realizar el reconocimiento, fijando día y hora para que las
partes concurran si así lo desean (art. 417 CPC). De todo lo obrado se levantará acta, en la cual
se consignarán los acuerdos celebrados por los peritos (art. 419 CPC).

El informe o dictamen:

Una vez realizado el reconocimiento el perito debe evacuar un informe por escrito en el plazo
que haya fijado el tribunal. Se ha fallado que el plazo para el perito no es fatal, pero faculta al
tribunal a apremiar con multas, pudiendo incluso, prescindir del informe o decretar el
nombramiento de un nuevo perito. Si se hubieren designado varios peritos y existiere
discordia entre ellos, podrá el Tribunal, a su arbitrio si lo estima necesario para la mejor
ilustración de las cuestiones que debe resolver, disponer que se proceda a la designación de
un nuevo perito de acuerdo con las reglas generales. (Art.421)

La ley nada señala respecto del contenido del informe, no obstante, en la práctica se hace llegar
el informe con citación, encontrándose las partes facultadas para formular objeciones. Se
considera que estas objeciones deben decir relación con aspectos formales o procesales y no
con el mérito probatorio, que es una cuestión que debe valorar el juez. Si se desea atacar el
valor de fondo, debe hacerse en las observaciones a la prueba.

X. VALORACIÓN

El art. 425 del CPC establece que el informe de peritos se aprecia según las reglas de la sana
crítica. Con esto el legislador está considerando y entendiendo que aunque el juez carezca de
estos conocimientos, está habilitado para valorar sus fundamentos, sin encontrarse vinculado
al informe. La CS ha excluido el control de la valoración del informe pericial por vía de la
casación al considerar que su valoración constituye una cuestión de hecho, soberana de los
jueces de instancia 47.

PRUEBA TESTIMONIAL

I. CONCEPTO

Couture define al testigo como “la persona que, habiendo tenido presumiblemente conocimiento de

47
Así por ejemplo: CS 20 de enero de 2010, Rol 7013-08.
un hecho que ha caído bajo la acción de sus sentidos, es llamado luego para prestar declaración en juicio
acerca del mismo48”.

También se ha definido la prueba testimonial como “la declaración sobre un hecho relevante para
el objeto de la prueba, realizada por un sujeto que afirma tener conocimiento de tal hecho 49” A este
sujeto que presta declaración se le conoce bajo la denominación de testigo.

II. REQUISITOS

A) Debe tratarse de un tercero indiferente dentro del proceso: por tanto, no podrán ser
testigos ni las partes de un proceso, ni los terceros coadyuvantes, independientes o
excluyentes.
B) Debe declarar sobre hechos precisos: estos hechos sobre los que declaran deben ser de
carácter fáctico, no jurídico.
C) Debe conocer los hechos por haberlos percibido por sus propios sentidos o el dicho de
otros.

III. CARACTERÍSTICAS

A) Prueba personal, donde el elemento representativo es un testigo, es decir, una persona


natural.
B) Prueba circunstancial, no preconstituida, se produce en el curso del pleito.
C) El testigo es un tercero extraño, o sea un sujeto que no es ni puede ser parte del juicio.
Tampoco pueden ser testigos los terceros interesados.
D) La declaración testimonial siempre recae sobre algo que ya aconteció.
E) El testimonio debe referirse a hechos que ha percibido y de los cuales tiene
conocimiento, sin que tenga relevancia las opiniones o apreciaciones.
F) Medio de prueba indirecto.
G) Prueba eminentemente formalista, puesto que se encuentra reglamentada al máximo
por el legislador.

IV. ADMISIBILIDAD

En general, el legislador desconfía de la prueba testimonial y ello queda en evidencia con lo


señalado por Andrés Bello en el Mensaje del Código Civil, donde explica la conveniencia de
limitar lo más posible esta prueba. Así también, por la serie de normas en que el CC la excluye
o la limita, como por ejemplo:

A) Art. 1708 CC: “No se admitirá prueba de testigos respecto de una obligación que haya debido
consignarse por escrito”.
B) Art. 1701 CC: “La falta de instrumento público no puede suplirse por otra prueba en los actos
y contratos en que la ley requiere esa solemnidad; y se mirarán como no ejecutados o celebrados
aun cuando en ellos se prometa reducirlos a instrumento público dentro de cierto plazo, bajo

48
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.193.
49
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. P.329.
una cláusula penal: esta cláusula no tendrá efecto alguno.
C) Fuera de los casos indicados en este artículo, el instrumento defectuoso por incompetencia del
funcionario o por otra falta en la forma, valdrá como instrumento privado si estuviere firmado
por las partes”
D) Art. 1709 CC: “No será admisible la prueba de testigos en cuanto adicione o altere de modo
alguno lo que se exprese en el acto o contrato, ni sobre lo que se alegue haberse dicho antes, o al
tiempo o después de su otorgamiento, aún cuando en algunas de estas adiciones o modificaciones
se trate de una cosa cuyo valor no alcance a la referida suma”.

V. CLASIFICACIÓN

A) En cuanto a la aproximación sensorial que pueden tener los testigos respecto de los
hechos:

i. Testigos presenciales: aquellos que presenciaron física y mentalmente los


hechos.
ii. Testigos de oídas: aquellos que toman conocimiento de los hechos por lo dicho
por una de las partes o terceros.

B) En cuanto a si están o no de acuerdo en el hecho y sus circunstancias esenciales:

i. Testigos contestes: aquellos que están de acuerdo en el hecho y sus


circunstancias esenciales.
ii. Testigos singulares: aquellos que están de acuerdo sobre el hecho pero difieren
sobre las circunstancias esenciales.

A su vez, según el profesor Cristián Maturana50, la singularidad puede ser:

- Diversificativa: las declaraciones de los testigos no son excluyentes.


- Acumulativa: las declaraciones de los testigos se complementan.
- Adhesitiva u obstativa: las declaraciones de los testigos se oponen.

C) En cuanto a su idoneidad:

i. Testigos hábiles: aquellos que reúnen los requisitos legales para que su
declaración produzca efectos.
ii. Testigos inhábiles51: aquellos que no reúnen los requisitos para que su
declaración tenga valor en juicio.

La importancia de la declaración de los testigos dice relación con el valor probatorio de esta.
El máximo valor lo tendrán dos testigos contestes, presenciales y hábiles, los cuales pueden
constituir plena prueba.

50
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.196.
51
En el nuevo sistema procesal penal no existen testigos hábiles e inhábiles.
VI. IDONEIDAD O CAPACIDAD

La idoneidad de los testigos dice relación con las inhabilidades que se contemplan para
algunas personas, haciendo excepción a la regla general que indica que pueden ser testigos
todas las personas (art. 365 CPC).

A) Inhabilidades absolutas (art. 357 CPC): En este caso el juez tiene la facultad de repeler
de oficio, sin necesidad de tomarle declaración, aun cuando no se haga valer tacha
alguna, al testigo que adolezca de una notoria inhabilidad absoluta. Las personas
comprendidas en estos casos, no pueden declarar en ninguna clase de juicio.

i. Menores de catorce años.. Sin embargo, el legislador permite al juez aceptar las
declaraciones de los menores de catorce años, sin imponerles previo juramento
y estimándolas como base para una presunción judicial, cuando tengan
discernimiento suficiente.
ii. Interdicto por demencia.
iii. Privados de la razón, por ebriedad u otra cosa. Cabe hacer notar que la
privación de la razón puede ser al tiempo de declarar o al tiempo de verificarse
los hechos.
iv. Los que carecen de sentido necesario para percibir los hechos al momento de
verificarse estos.
v. Sordos o sordomudos que no pueden darse a entender claramente.
vi. Los que en el mismo juicio hayan sido cohechados, o hayan cohechado o
intentado cohechar a otros.
vii. Vagos. Es decir, los que no tienen ocupación u oficio conocido. No se refiere a
alguien que se encuentre cesante, se refiere a una condición inherente a la
persona.
viii. Condenados por delito que en concepto del tribunal sean indignos de fe.
ix. Jureros. Los que hagan de su profesión testificar en juicio.

B) Inhabilidades relativas (art. 358 CPC): Las inhabilidades de este artículo no podrán
hacerse valer cuando la parte a cuyo favor se hallan establecidas presente como
testigos a las mismas personas a quienes podrían aplicarse dichas tachas (denominado
purga de tachas).

i. Cónyuges y parientes hasta el cuarto grado de consanguinidad y segundo de


afinidad de la parte que los presenta como testigos.
ii. Pupilos y guardadores.
iii. Empleados y trabajadores de la parte. La ley procesal se refiere a los
dependientes y ha considerado conveniente definirlos: el que preste
habitualmente servicios retribuidos al que lo haya prestado como testigo,
aunque no viva en su casa.
iv. Trabajadores y labradores dependientes.
v. Interés en el pleito. Este interés, según la ley, puede ser directo o indirecto y ha
sido interpretado por la jurisprudencia como pecuniario, estimable en dinero,
cierto y material52.
vi. Amistad o enemistad. Se considera que el simple disgusto entre dos personas
no es suficiente para configurar esta causal.

INHABILIDAD INHABILIDAD
ABSOLUTA RELATIVA

Forma y momento en que Tribunal puede acogerla de Tribunal no puede acogerla


tribunal se pronuncia oficio en el caso en que de oficio. Además, se falla
respecto de la inhabilidad aparezca de forma notoria e en la sentencia definitiva,
impedir que la persona encontrándose obligado el
preste su declaración. tribunal a recibir la
declaración.

Purga de las tachas No se purgan Puede purgarse, en el caso


de que ambas partes
presente testigos afectos a
las mismas inhabilidades
(art. 358 CPC)

Renuncia No se puede Sí se puede

VII. DEBERES Y DERECHOS DE LOS TESTIGOS

A) Deberes:

i. Deber de comparecer (art. 359 CPC): Toda persona, cualquiera que sea su
estado o profesión, está obligada a declarar y a concurrir a la audiencia que el
Tribunal señale con este objeto. Cuando se exija la comparecencia de un testigo
a sabiendas de que es inútil su declaración, podrá imponer el tribunal a la parte
una multa.

Excepciones al deber de comparecencia: testigo que reside fuera del territorio


jurisdiccional en que se sigue el juicio, hipótesis en la cual la declaración
testimonial se realizará ante el tribunal que corresponda, a quien se remitirá,
vía exhorto. La otra excepción dice relación con quienes pueden declarar en el
domicilio53 (art. 361 CPC).

52
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. P.335.
53
Por ejemplo: El Presidente de la República, los Ministros de Estado, los Senadores y Diputados, los Subsecretarios, los
Intendentes Regionales, los Gobernadores y los Alcaldes, dentro del territorio de su jurisdicción, los jefes superiores de Servicios,
los miembros de la Corte Suprema o de alguna Corte de Apelaciones, los Fiscales Judiciales de estos tribunales, los Jueces
ii. Deber de prestar declaración (art. 359 CPC): Sin embargo, el CPC establece
ciertas excepciones como por ejemplo, el secreto profesional respecto de
abogados y médicos, determinados estados como el cónyuge o padre o el
principio de no autoincriminación (art. 360).

Además, no están obligados a comparecer ni a declarar los que gocen de


inmunidad diplomática, en conformidad a los tratados vigentes sobre la
materia (art. 362 CPC).

iii. Deber de decir la verdad: Es por esto que de acuerdo al art. 363 CPC, antes de
la examinación de los testigos, éstos deben prestar juramento según la fórmula
religiosa ahí dispuesta, la cual establece que "antes de examinar a cada testigo, se
le hará prestar juramento al tenor de la fórmula siguiente : ¿Juraís por Dios decir la
verdad acerca de lo que se os va a preguntar ?. El interrogado responderá : Si juro.,
conforme a lo dispuesto en el artículo 62". Además, el art. 209 del Código Penal
tipifica el delito de falso testamento.

Se exceptúa la obligación de prestar juramento al testigo menor de edad.

B) Derechos

i. Derecho a que se le cite a declarar para un día preciso y determinado.


ii. Derecho de reclamar de la parte que lo presenta al pago de los gastos que le
impone la comparecencia, el cual será ejercido según lo dispuesto en el art. 381
CPC.

VIII. INICIATIVA

La iniciativa corresponde a las partes, en función del principio dispositivo y el de aportación


de parte. Excepcionalmente, el legislador contempla una actuación de oficio que se materializa
mediante una medida para mejor resolver, por la cual dispone la comparecencia de testigos
que hayan declarado en el juicio con finalidad de que aclaren o expliquen sus dichos obscuros
o contradictorios (art. 159 N°5 CPC). La prueba testimonial como medida para mejor resolver
se encuentra fuertemente limitada, haciendo imposible que exista prueba testimonial sin
iniciativa de parte, ya que aun en los casos del art. 159 solo se puede citar a los testigos que ya
hayan comparecido y declarado.

La prueba testimonial, antes del juicio puede solicitarse como medida prejudicial probatoria
de testigos (art. 286 CPC), siendo común para el futuro demandante y demandado. Durante
el juicio en primera instancia, solo se puede practicar dentro del término probatorio, teniendo
en cuenta los casos de aplicación de prueba del art. 321 CPC y los términos especiales
vinculados a la prueba testimonial el art. 340 CPC. En segunda instancia, rige lo establecido
por el art. 207 CPC, el cual exige la concurrencia de 4 requisitos para su solicitud: (i) Que sea
decretada como medida para mejor resolver (ii) Que no haya sido posible rendir prueba
testimonial en primera instancia (iii) que la prueba testimonial recaiga sobre hechos que no

Letrados, el Fiscal Nacional y los fiscales regionales, los Oficiales Generales en servicio activo o en retiro, los Oficiales Superiores
y los Oficiales Jefes; el Arzobispo y los Obispos, los Vicarios Generales, los Provisores, los Vicarios y Provicarios Capitulares; y
los Párrocos, dentro del territorio de la parroquia a su cargo.
figuren en la prueba rendida (iv) que los hechos sean a juicio del tribunal, estrictamente
necesarios para la resolución del juicio. Además, de acuerdo al art. 159 n°5 solicitarse como
medida para mejor resolver.

La parte que quiere rendir la prueba debe cumplir con los requisitos que al efecto ha impuesto
el legislador:

A) Lista de testigos, debidamente individualizados (nombre y apellido, domicilio,


profesión y oficio). Sin embargo, la jurisprudencia ha estimado que un error sobre las
menciones de la lista que no impida la individualización no es un impedimento para
la rendición de la prueba. Si no se presenta la lista de testigos no se puede rendir la
prueba testimonial.
B) Minuta de los puntos de prueba sobre los que piense rendirla, enumerados y
especificados con claridad y precisión (art. 320 CPC). Si no se acompaña la minuta, se
estima que no existe sanción, sino que los testigos serán interrogados al tenor de los
hechos fijados en la resolución que recibe la causa a prueba.

El legislador no limita el número de testigos que puede ser incluido en la lista, sin embargo,
el artículo 372 CPC establece que solamente podrán declarar hasta seis testigos por cada parte,
sobre cada uno de los hechos que deban acreditarse.

Serán admitidos a declarar solamente los testigos que figuren en la lista, sin perjuicio de que
se faculta al tribunal en casos calificados a admitir otros testigos en casos calificados y jurando
la parte que no tuvo conocimiento de ellos al tiempo de formular la nómina.

Existe un plazo fatal de cinco días que se cuenta desde la última notificación de la resolución
que recibe la causa a prueba y en los casos en que se interpone el recurso de reposición con
apelación en subsidio, comienza desde que se notifica a las partes la resolución recaída sobre
el último recurso. Aunque en los casos en que habiéndose interpuesto los recursos, se hubiese
presentado la lista de testigos y la minuta por las partes, no será necesario presentarla otra
vez, salvo que a consecuencia de los recursos interpuestos la parte considere pertinente
modificarla (art. 320 CPC).

IX. PRÁCTICA

A) Fijación de día y hora para la realización de la audiencia

Según el artículo 369 CPC atendido el número de testigos y los puntos de prueba el tribunal
señalará una o más audiencias para su examen.

B) Citación de testigos

La ley no exige la citación de los testigos, sino que cada parte lleva a sus testigos a la referida
audiencia. Con todo, si la parte no está segura de que su testigo podrá asistir podrá solicitar
su citación judicial en el mismo escrito en el cual cumple con la nómina y minuta, y el que no
comparece habiendo sido citado incurre en el delito de no colaboración con la justicia (art. 380
CPC).
C) Contacto del receptor

De acuerdo al artículo 390 COT ellos son los ministros de fe en esta prueba.

D) Juramento del testigo

La omisión del juramento invalida la prueba testimonial, el cual debe hacerse al tenor del
artículo 363 CPC.

E) Deposición del testigo

Los testigos de cada parte son examinados de forma separada, empezando por los del
demandante, sin que puedan presenciar las declaraciones de los otros. El tribunal debe
adoptar las medidas conducentes para evitar que los testigos que vayan declarando puedan
comunicarse con los que no hayan prestado declaración.(Art.364 del C.P.C). La declaración
constituye un acto que no puede interrumpirse sino por causas graves y urgentes.

A pesar de que el artículo 365 CPC señala que los testigos deben ser interrogados
personalmente por el juez, en la práctica es el receptor judicial quien realiza el interrogatorio.
Esto ha contribuido a la desconfianza en este medio probatorio, que ha mediatizado el
conocimiento del juez de las declaraciones, conociendo de ella recién al momento de dar
lectura al acta que debe levantarse.

Los testigos no pueden llevar escrita su declaración y deben responder de forma clara y
precisa, expresando la causa de los hechos aseverados (dar razón de sus dichos) según el
artículo 367 CPC.

Si el testigo no supiere el idioma castellano, será examinado por medio de un intérprete mayor
de dieciocho años, quien prometerá bajo juramento desempeñar bien y fielmente el cargo.

Si el testigo fuere sordo, las preguntas le serán dirigidas por escrito; y si fuere mudo, dará por
escrito sus contestaciones.

i. Preguntas de tachas

Las tachas son el mecanismo para hacer valer las causales de inhabilidad (absolutas y
relativas) que podían afectar a una persona para declarar, ya sea respecto de cualquier juicio
o de uno en particular.

El sujeto activo de la tacha, es la parte en contra de la cual se presenta el testigo. Se puede


renunciar de forma expresa o tácita a ejercer la tacha. De forma expresa cuando a a pesar de
saberse las causales de inhabilidad no se hacen saber, y de forma tácita cuando se deja
transcurrir la oportunidad procesal.

En cuanto a la oportunidad procesal para hacerlas valer, hay que distinguir dos situaciones:

1) Testigos comprendidos en la lista de testigos: la oportunidad procesal para hacer valer


la tacha va desde la presentación de la lista hasta que comienza su declaración. Una
vez que comienza, precluye el derecho para hacerla valer. En la práctica se tacha al
testigo en la misma audiencia de prueba antes de la declaración de testigo.
2) Testigos que no figuren en la lista de testigos, pero son admitidos a declarar
cumpliendo los requisitos legales: de acuerdo al art. 373 CPC el plazo se amplía,
incluyendo los 3 días posteriores al examen del testigo.

El artículo 373 CPC dispone que pueden oponerse antes de que los testigos declaren, en
consecuencia, la parte que no ha presentado al testigo le formulará a través del juez (receptor)
las preguntas para establecer las causales de inhabilidad legal que puedan oponerse54. Luego,
el receptor preguntará a la parte si va a formular tacha contra el testigo, si la respuesta es
afirmativa, debe proceder a formularla según el artículo 373 CPC, invocando alguna de las
causales de inhabilidad de los art. 357 y 358 del CPC y señalando con claridad y precisión los
hechos que la configuran. De la tacha se confiere traslado a la parte que presentó al testigo la
cual puede a su vez tomar dos posiciones, la primera, solicitar que se omita la declaración del
testigo y que se reemplace por otro de la lista (art. 374 CPC) o segundo, puede solicitar el
rechazo de la tacha por las razones de hecho y de derecho que le parezcan convenientes. La
tacha formulada no impide la declaración del testigo, sino que se debe resolver en la sentencia
definitiva (art. 379 CPC), salvo la posibilidad de repeler de oficio a los que aparezcan
notoriamente comprendidos en alguna de las causales de inhabilidad absoluta.

Si el tribunal acoge la tacha, la declaración del testigo no tendrá validez. La resolución de las
tachas está comprendida en la sentencia definitiva, aunque esta no tiene las características de
tal, sino que es una sentencia interlocutoria injertada en una sentencia definitiva. Por esto, la
resolución de las tachas se rige por las reglas de la sentencia interlocutoria.

En caso de que sea necesario puede recibirse prueba sobre las tachas, las que suelen rendirse
dentro del término probatorio, pudiendo solicitar además el aumento extraordinario del art.
329 CPC.

ii. Preguntas sobre los hechos

Superadas las preguntas de tachas, debe darse inicio a la declaración del testigo sobre los
hechos de la causa. Primero se realizan las preguntas que formula el receptor ajustándose a
los puntos de prueba fijados en la resolución que recibe la causa a prueba. Además, se puede
pedir al testigo que rectifique, esclarezca o precise las aseveraciones (art. 365 CPC). Segundo,
vienen las llamadas repreguntas, pidiéndole la parte que presenta al testigo que rectifique,
esclarezca o precise los hechos. Tercero, se procede al contra examen por aquella parte que no
presentó al testigo, buscando desacreditar al testigo o al testimonio, acreditar sus pruebas
propias o desacreditar las de la contraparte. Frente a las preguntas es posible que se planteen
objeciones, incidentes que se promueven en la audiencia con el objeto de impugnar una
determinada pregunta (por sugestivas, engañosas, impertinentes, etc.), de la cual se da
traslado a la otra parte y en caso, de desacuerdo resolverá el tribunal. En la práctica esto
implica una pausa en la audiencia, donde el receptor se ausenta y le expone de la objeción al
juez, regresando con la resolución. La resolución que se pronuncia por el tribunal es apelable
en el sólo efecto devolutivo.(Art.366 inc.2). A esta oposición a la formulación de una pregunta
se le da la tramitación de un incidente, por lo que si en la audiencia se perdieren dos o más

54
Ejemplo: Que diga el testigo si tiene un vínculo de parentesco con la parte.
incidentes por una parte se podría aplicar lo previsto en el art.88 del C.P.C.

iii. Documentación del acto

De acuerdo al artículo 370 CPC, las declaraciones se consignan por escrito, a pesar de hacerse
de forma verbal, conservando en cuanto sea posible las expresiones utilizadas por el testigo,
reducidas al menor número de palabras. Después serán leídas por el receptor en voz alta y
ratificadas por el testigo, luego firmadas por el juez, declarante y partes.

X. VALORACIÓN

A) Las declaraciones de los testigos menores de catorce años pueden estimarse como base
para una presunción judicial cuando tengan discernimiento suficiente.
B) Respecto a los testigos de oídas, el artículo 383 CPC distingue según de quién escuchó
el testigo. La regla general es que este testigo solo puede estimarse como base para una
presunción judicial, no obstante, cuando éste conoció de los hechos a través del dicho
de una de las partes, tales declaraciones serán válidas siempre que sirvan para
establecer el hecho de que se trata.
C) Respecto a los testigos presenciales, el artículo 384 CPC entrega reglas que deben ser
consideradas por el juez:

i. Declaración de un testigo imparcial y verídico constituye una presunción


judicial, que el tribunal apreciará de acuerdo a la gravedad y precisión.
ii. Declaración de dos o más testigos contestes, sin tachas, que hayan sido
legalmente examinados y que den razón de sus hechos, podrán constituir plena
prueba cuando no haya sido desvirtuado por otro medio de prueba.
iii. Declaración de testigos de una parte contradictorias con otra: tendrán por
cierto lo que declaren aquellos que aun siendo menor número, parezca que
dicen la verdad por estar mejor instruidos en los hechos, o por ser de mejor
fama, más imparciales y verídicos, o por hallarse más conformes sus
declaraciones con otras pruebas del proceso (de ahí viene el clásico aforismo
jurídico de que los testigos se pesan, no se suman)
iv. Cuando los testigos de una parte y otra reúnan iguales condiciones
(imparcialidad y veracidad), tendrán por cierto lo que declaren el mayor
número.
v. Cuando los testigos de una y otra parte sean iguales en circunstancias y
número de tal modo que la sana razón no pueda inclinarse a dar más crédito a
los unos que a los otros, se tendrá por no probado el hecho.
vi. Cuando sean contradictorias las declaraciones de los testigos presentados por
una misma parte, las que favorezcan a la contra parte se considerarán como
presentadas por esta.

Se ha fallado por la jurisprudencia de la Corte Suprema, que la apreciación y


decisión de cuáles de los testigos están mejor informados de los hechos y
conformes con sus declaraciones es una cuestión de hecho, entregada a los
jueces de fondo55.

XI. EL JUEZ EN LA PRUEBA TESTIMONIAL

El juez dentro de la producción de la prueba testimonial no tiene prácticamente ningún rol,


de acuerdo al texto legal, los receptores judiciales debiesen ser actuarios y ministros de fe de
este medio probatorio, pero en los hechos la dirigen. El juez sólo intervendrá cuando sea
necesario resolver por ejemplo las incidencias.

XII. TESTIGO PERITO

Casos en que el testigo que declara posee una determinada calificación técnica, ¿podría
manifestar su opinión o parecer técnico?

En el marco de la regulación vigente la respuesta es negativa, aunque en la doctrina moderna


se admite que estos testigos puedan dar valoraciones técnicas cuando no sea posible separar
dichas valoraciones de una forma pura y simple nación de los hechos56.

INSPECCIÓN PERSONAL DEL TRIBUNAL

I. CONCEPTO

La Inspección Personal del Tribunal encuentra regulación en el Código de Procedimiento Civil


en los artículos 403 a 408 y en el Código Civil en los artículos 1698 y 1714. Así también el
artículo 377 del Nuevo Código Procesal Penal se refiere a una situación particular que será
analizada en el estudio de dicha materia.

Couture lo define como “Medio de prueba por percepción, consistente en que el magistrado examine
por sí mismo o acompañado de peritos las personas, cosas o situaciones de hecho que constituyen objeto
de prueba en un juicio”. Por su parte, el profesor Maturana sostiene que se trata del “Examen que
el tribunal realiza por sí mismo de hechos o circunstancias materiales controvertidas en el pleito para
adquirir la convicción acerca de su verdad o exactitud”57. Así, el profesor Ignacio Rodríguez afirma
que se trata del “examen que el juez hace por sí mismo de la cosa litigiosa, con el objeto de establecer
la verdad o falsedad de los hechos discutidos en el pleito”58.

Dos son los elementos configuradores de este medio de prueba:


A) Los hechos que se acreditan a través de este medio de prueba son sólo los apreciados
directamente por el tribunal;
B) La inspección personal del tribunal sólo puede ser utilizada para apreciar

55
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.243.
56
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. P.350.
57
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P. 261.
58
RODRÍGUEZ P, Ignacio. Procedimiento Civil, Juicio Ordinario de Mayor Cuantía. Editorial Jurídica, de Chile, Séptima Edición
actualizada por Cristián Maturana Miquel, 2006. P. 227
circunstancias o hechos materiales

II. CARACTERÍSTICAS

A) Es un medio de prueba directo: encontramos en este medio de prueba una


manifestación del principio de inmediación en materia civil, pues es de la esencia que
los hechos a acreditarse sean apreciados directamente por el tribunal y nunca a través
de un tercero.
B) Es un medio de prueba circunstancial: se genera dentro del proceso y nunca a través
de conocimientos personales que el juez pueda tener con anterioridad a la iniciación
del proceso.
C) Es un medio de prueba que constituye plena prueba siempre y cuando se cumplan
los requisitos exigidos por la ley.
D) Constituye una diligencia obligatoria en determinados procedimientos especiales ,
como en la denuncia de obra ruinosa y en los interdictos especiales (Art 571 y 577
CPC), además de ser un medio probatorio común a todos los procedimientos.

III. CLASIFICACIÓN
La inspección personal del tribunal admite diversas clasificaciones:

A) De acuerdo a la manera en que se practica:

i. Inspección extrajudicial: se lleva a cabo fuera del proceso, careciendo de una


resolución judicial alguna que la ordene. La inspección que se lleve a cabo en
dicho contexto carece de todo valor probatorio.
ii. Inspección judicial: se lleva a cabo en el contexto de un proceso judicial previa
dictación de una resolución del tribunal, que posteriormente es notificada a las
partes. Es esta la diligencia probatoria que se encuentra reglamentada por el
legislador y que, concurriendo las circunstancias que la ley prevé es posible
otorgarle el carácter de plena prueba.

B) De acuerdo al sujeto que la origina: En este punto, es necesario señalar que la


iniciativa para efectuar una inspección personal del tribunal puede descansar en la ley,
ser decretada de oficio por el tribunal, o por iniciativa de las partes.

i. Iniciativa Legal: En determinados casos, es la propia ley la que manda a la


inspección personal del tribunal. En dicho sentido, el artículo 571 del CPC
prescribe que “Si se pide la demolición o enmienda de una obra ruinosa o peligrosa, o
el afianzamiento o extracción de árboles mal arraigados o expuestos a ser derribados por
casos de ordinaria ocurrencia, el tribunal practicará, a la mayor brevedad, asociado
de un perito nombrado por él mismo y con notificación de las partes y asistencia de la
que concurra, una inspección personal de la construcción o árboles
denunciados”.
ii. Iniciativa de Partes: Dos son las oportunidades en que las partes pueden
solicitar la inspección personal del tribunal:
a) Como medida prejudicial probatoria: El artículo 281 del CPC establece que
podrá pedirse prejudicialmente la inspección personal del tribunal cuando exista
peligro inminente de un daño o perjuicio o se trate de hechos que puedan
fácilmente desaparecer. Para la realización de esta medida se notifica a la futura
contraparte, cuando ésta se encuentra en el lugar en que se decreta la medida o
en el lugar en que deba cumplirse. En su defecto se le notifica al defensor de
ausentes. Según el 288, aquella puede ser solicitada tanto por el futuro
demandante como por el futuro demandado.
b) Durante el curso del juicio: No se establece dentro del Libro II del CPC una
oportunidad especial para que las partes soliciten dicha diligencia. En vista de
aquello, debemos recurrir a las normas generales establecidas en el inciso
primero del artículo 327º en virtud del cual esta debe ser solicitada por las partes
dentro del término probatorio. Así también debe destacarse que, según el
artículo 207, no procede en segunda instancia.

C) Iniciativa del Tribunal: El tribunal también podrá decretar la inspección personal en


dos casos:
i. Durante el curso del juicio como diligencia probatoria propiamente tal:
Según lo dispuesto en el artículo 403, fuera de los casos expresamente
señalados por la ley, la inspección personal del tribunal sólo se decretará
cuando éste la estime necesaria.
ii. Inspección personal del tribunal como medida para mejor resolver: se
encuentra prevista en el artículo 159 N°3 del Código de Procedimiento Civil.

IV. PROCEDENCIA

La inspección personal del tribunal es procedente en las siguientes situaciones:


A) En todos los casos en que la ley establece su realización en forma perentoria (recae en
hechos o circunstancias materiales controvertidos en el pleito).
B) En todos los casos en que sea necesario acreditar las circunstancias materiales
mediante el examen directo por el tribunal, pero en este caso la procedencia se
encuentra entregada a la apreciación del tribunal. Por lo tanto será procedente la
inspección personal del tribunal cuando: (1) Ella recaiga sobre hechos o circunstancias
materiales controvertidos en el pleito.(art.408); (2) El tribunal estime su realización
necesaria (Art.403).

V. GASTOS

El artículo 406 del CPC señala que la parte que solicita la inspección debe depositar, en manos
del secretario del tribunal, la suma necesaria para los gastos, y si se decreta de oficio o es
ordenada por la ley, el depósito se hará por mitades entre demandantes y demandados.

VI. PROCEDIMIENTO

Si el sujeto que origina la inspección personal del tribunal es alguna de las partes, la práctica
de la diligencia debe ser solicitada a través de un escrito en el cual se designe cuáles son los
hechos materiales que pretenden que sean constatados por el tribunal a través de ella y la
razón por la cual es necesaria su realización. Si el tribunal estima que concurren los requisitos
para su procedencia, fijará con la debida antelación, el día y hora para proceder a ella, a fin
de que puedan concurrir las partes con sus abogados. El profesor Bordalí afirma que, “en la
práctica, se notifica por el estado diario”59.

El artículo 404 dispone que, si las partes lo estiman necesario, podrán pedir que se oigan
peritos en el acto del reconocimiento. El tribunal lo decretará si a su juicio es necesaria dicha
medida para el éxito de la inspección y se ha solicitado con la debida anticipación. En tal caso
se procederá a su designación conforme a las reglas generales.

El día y hora fijado para que se lleve a cabo la inspección, deberá el tribunal constituirse en
el lugar de los hechos conjuntamente con el secretario del tribunal, a quien le corresponderá
autorizar el acta que debe levantar de la actuación que se realizará. Si el tribunal es colegiado,
podrá comisionar para que practique la inspección a uno o más de sus miembros. Además,
pueden concurrir las partes, los abogados y los peritos, no siendo su asistencia un requisito
para que se pueda llevar a cabo la actuación, puesto que, conforme al artículo 405, esta se
puede verificar en ausencia de ellas

En relación al lugar en que puede verificarse la inspección personal del tribunal, advertimos
una excepción a la base orgánica de la territorialidad, pues, en virtud del artículo 403 inciso
2° "la inspección podrá verificarse aún fuera del territorio señalado a la jurisdicción del
tribunal”. En todo caso, se trata de una mera facultad para el tribunal, puesto que podría
decretar que se lleve a cabo a través de un exhorto.

El artículo 407 prescribe que de la diligencia debe levantarse un acta dejándose constancia de
todas las circunstancias o hechos materiales que el tribunal observe, sin que puedan dichas
observaciones reputarse como una opinión anticipada sobre los puntos que se debaten. Las
partes pueden pedir, durante la diligencia, que se consignen en el acta las circunstancias que
ellos estimen pertinentes. El profesor Maturana menciona que “dicha acta deberá ser suscrita por
el juez y las demás personas que hubieren asistido, y como actuación judicial que es, deberá ser además
autorizada por el Secretario del tribunal”60.

VII. VALORACIÓN

El artículo 408 del CPC establece su valor probatorio. El profesor Maturana lo califica como
“uno de los valores probatorios más reglamentados por el CPC”. Dispone la mencionada
disposición legal que “la inspección personal constituye prueba plena en cuanto a las circunstancias
o hechos materiales que el tribunal establezca en el acta como resultado de su propia observación”.

Por lo tanto, para que produzca plena prueba será necesario que: (1) La inspección personal
recaiga sobre hechos o circunstancias materiales; (2)Estos hechos o circunstancias materiales

59
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. P. 386.
60
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.265.
sean asentados de acuerdo a las observaciones del tribunal; (3) Que se haya dejado constancia
de ellos en el acta.

Se ha fallado que “si bien la inspección personal constituye plena prueba en cuanto a los hechos
materiales o circunstancias materiales que el tribunal establece en el acta como resultado de su propia
observación, no tiene valor probatorio respecto de conclusiones que supongan la posesión de
conocimientos especiales y que no toquen a lo material o físico de las circunstancias”61.

PRESUNCIONES

I. CONCEPTO

El profesor Maturana afirma que “Es un medio de prueba que supone una actividad lógica; una
actividad deductiva. Las presunciones están desarrolladas por la propia ley en el caso de las presunciones
legales o es el propio Tribunal el que deduce en el caso de las presunciones judiciales” 62. Diego Palomo
se refiera a ellas como “una operación intelectual que supone una labor deductiva que afirmada o
sostenida en un hecho que ya ha sido introducido al proceso permiten la fijación formal como cierto de
otro hecho. Esta cuestión no puede ser desatendida: la presunción se apoya siempre en un hecho base
que ha sido introducido al proceso con anterioridad, y que ha resultado fijado, a los efectos del juicio,
por algún medio de prueba”63. Por su parte, la Corte Suprema ha sostenido que "Consiste en el
empleo por la ley o el tribunal de hechos o antecedentes conocidos para deducir o inferir de ellos hechos
desconocidos sustanciales, pertinentes y contradictorios del proceso64”.

Maturana menciona que es pertinente esbozar las distintas vinculaciones que la doctrina y
jurisprudencia han atribuido entre los conceptos “presunción” e “indicio”.
A) En una primera acepción, para algunos, el indicio es igual a la presunción,
reservándose el término presunción para el derecho civil y utilizando el término
indicio para denotar el mismo concepto en el derecho penal o bien se reserva por otros
el término indicios para referirse con ello a las presunciones judiciales como acontece
en el inciso 2º del art. 486 del C.P.P. En este mismo sentido, se nos señala que en una
primera acepción, típica de la doctrina menos reciente, indicio es sinónimo de
presunción (y de conjetura), en la medida que indica el razonamiento o el argumento
mediante el que se vinculan dos hechos, extrayendo de uno de ellos las consecuencias
para el otro.
B) En una segunda acepción, indicio es lo que no llega a ser una verdadera presunción
simple. El indicio se distingue de presunción en la medida en que haría referencia a
aquellos elementos de prueba que, a pesar de no carecer de eficacia probatoria, no

61
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. .P389.
62
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.267.
63
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. P.390.
64
Corte Suprema 1. 09. 1965. Revista de Derecho y Jurisprudencia T. 62. Sec. 4. Pág. 387
presentan los requisitos exigidos por la ley para la utilización de las presunciones
simples. Se trataría, por tanto, de algo parecido a las presunciones simples, pero más
débil, incapaz de dar lugar a una verdadera presunción en sentido estricto.
C) En una tercera acepción, el indicio es el hecho base y la presunción es la inferencia que
se realiza a partir del hecho base. El indicio hace referencia al hecho conocido o a la
fuente que constituye la premisa de la inferencia presuntiva: así pues, es un indicio
cualquier cosa, circunstancia o comportamiento que el juez considere significativo en
la medida en que de él puedan derivarse conclusiones relativas al hecho a probar.
Entre presunción e indicio hay, pues, la misma diferencia que se da entre un
razonamiento y la premisa de hecho que le sirve de punto de partida.

II. REGULACIÓN

Tanto el Código Civil en el artículo 1698, como el Código de Procedimiento Civil en el artículo
341, reconoce a las presunciones como un medio de prueba. Su regulación particular se
encuentra en los artículos 47 y 1712 del primer cuerpo legal en cuestión, y también en los
artículos 426 y 427 del CPC. Sin perjuicio de aquello, lo cierto es que, parte de la doctrina
cuestiona que pueda afirmarse que se trate de un medio de prueba propiamente tal. Lo
anterior, atendiendo a las características peculiares que envuelven las presunciones, por
ejemplo, las presunciones no resultan de la actividad de las partes, sino que de una
construcción que realiza el juez o el legislador. En ese sentido Palomo afirma que “somos de la
opinión que respecto de estas no puede hablarse de medio de prueba (...)Bien se ha señalado que si se
considerarán un medio de prueba de verdad, habría que advertir que serían un medio de prueba bastante
particular: que no se propone, no se admite ni se practica (De la Olivia, A). Además, a diferencia de lo
que ocurre con todos los verdaderos medios de prueba, las presunciones carecen de normas específicas
de procedimiento, pues no las necesitan (Ramos, F). Lo que sí hay es construcción y utilización de
razonamiento presuncional en la sentencia en caso que concurran las condiciones legales para ello
(Ortells, M)”65.

III. UTILIDAD

Palomo comenta que, verificando el legislador o el mismo juez que la acreditación de un


determinado hecho no es posible o muy difícil a través de una prueba directa, puede servirse
de la presunción para realizar la labor de deducción que lo lleve a determinar a los fines del
proceso, su existencia. Se apunta que este tipo de actividad presuncional es también muy
importante para lograr establecer la verdadera significación de hechos que en apariencia
inducen a consecuencias jurídicas propias de una determinada figura, pero que en realidad
encubren otra diversa.

IV. ELEMENTOS

Las presunciones se componen de tres elementos:

A) El hecho o circunstancia conocida, lo que constituye la base o premisa de la

65
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. P.390.
presunción.
B) El elemento lógico que se realiza a partir del hecho conocido para unirlo con el hecho
desconocido.
C) El hecho presumido, que era desconocido y que como consecuencia del juego de los
elementos anteriores pasa a ser determinado.

V. CLASIFICACIÓN

A) En atención a quien las establece: podemos distinguir entre presunciones legales y


judiciales.

i. Legales: es el legislador el cual establece el hecho presumido partiendo del hecho base
o premisa. Estas presunciones dispensan de la prueba del hecho presunto a la parte a
la que este hecho favorezca. De allí que se afirme que estas presunciones suponen un
cambio del objeto de la prueba: en vez de tener que recaer la prueba en el hecho
presunto, tendrá que recaer en el hecho base. Las presunciones legales admiten una
subclasificación, dependiendo de si admiten o no prueba en contrario.

ii. Judiciales: es el juez quien efectúa esta labor. Aquellos hechos desconocidos que
deduce el juez a partir de ciertos antecedentes que constan en el proceso. A estas
presunciones se refiere el artículo 341 del CPC al mencionar los medios de prueba.

B) En atención a si se puede o no rendir prueba en contra del hecho presumido


legalmente. El artículo 47 del Código Civil se refiere a esta distinción:

i. Presunciones de derecho iuris et de iure o absolutas: son aquellas que no admiten


prueba en contrario que ponga en cuestión la fijación del hecho presumido una vez
establecido el hecho base. Debemos recordar que siempre será necesario rendir prueba
para acreditar el hecho base o premisa, pero que acreditado éste existirá una exclusión
de prueba respecto del hecho presumido, puesto que éste siempre deberá ser
establecido de acuerdo con el mandato legal, sin ser posible rendir prueba alguna en
contrario. Ejemplos de este tipo de presunciones son que de la época de concepción
que se colige a partir del nacimiento (art 76 CC) y la mala fe a partir del error en materia
de derecho (art 706 CC).

ii. Presunciones simplemente legales iuris tantum o relativas: En este caso es posible
rendir prueba con el fin de destruir el hecho presumido por el legislador, lo que nunca
será admisible en la presunción de derecho. Pueden ser contrarrestadas, sea probando
que el hecho presumido no es cierto, como que el enlace establecido entre el hecho
base y el presunto, en el caso concreto, no existe. Algunos autores destacan que se trata
de un caso de inversión de la carga de la prueba, ya que el hecho presunto queda fijado
como cierto a menos que la parte a quien perjudique pruebe que no existió. Ejemplos
de este tipo de presunción son aquella contenida en el artículo 1654, en la cual se
presume la remisión o condonación de deuda cuando el acreedor entrega
voluntariamente al deudor el título de la obligación, o lo destruye o cancela, con ánimo
de extinguir la deuda. (Art.1.654 del C.C), o la clásica contenida en el artículo 700 inc
2° del CC “el poseedor es reputado dueño mientras otra persona no justifique serlo”.
VI. LAS PRESUNCIONES JUDICIALES

Serán presunciones judiciales aquellas en las cuales el enlace entre el hecho base y el hecho
presunto lo efectúa directamente el juez, sin que exista una predeterminación y fijación a
priori por el legislador. Couture define a la presunción judicial como "Acción y efecto de
conjeturar el juez, mediante razonamientos de analogía, inducción o deducción, la existencia de hechos
desconocidos partiendo de los conocidos ". La Corte Suprema ha dicho que: “las presunciones
judiciales son los razonamientos por los cuales los jueces del fondo establecen la verdad de un hecho
desconocido por la relación entre éste y otros hechos conocidos. Para establecer una presunción judicial
se requiere la existencia de un hecho real y debidamente probado que sirve de base para deducirla; un
hecho desconocido cuya existencia se pretende averiguar, y una relación que es la que determina el juez
mediante estos razonamientos”.

El artículo 1712 del Código Civil en su último inciso prescribe que, para constituir plena
prueba las presunciones judiciales deben ser graves, precisas y concordantes, es decir, deben
ser dos o más, pues emplea los términos en plural. Lo anterior, difiere de lo señalado en el
artículo 426 inciso 2° del Código de Procedimiento Civil, el cual modifica el artículo 1772 del
CC, por cuanto permite que una sola presunción judicial pueda constituir plena prueba,
cuando a juicio del Tribunal tenga caracteres de gravedad y precisión para formar su
convencimiento. Las presunciones judiciales son propias de un sistema de prueba legal, lo que
justifica el hecho de que en el Código Procesal Penal no se contemple reglamentación al
respecto.

A) Bases de las presunciones judiciales

Son creadas por el propio juez, aunque en varias ocasiones es el legislador en la propia ley
quien establece la base sobre la cual se ha de constituir la presunción judicial. Podemos
encontrar ejemplos de aquello en diversas disposiciones: el artículo 383 del CPC establece que
servirá de base de presunción judicial el testimonio de oídas, así también la declaración de un
menor de 14 años según lo dispuesto el art.357; Por otro lado el artículo 398 inciso 1° del mismo
cuerpo legal le otorga dicho valor a la confesión extrajudicial verbal.

La base de la presunción judicial la constituyen los hechos no probados en forma plena por
las partes. En el antiguo proceso penal, las declaraciones de testigos tachados constituyen una
base de presunción judicial o indicio.

B) Ámbito de aplicación de las presunciones judiciales

Es muy amplio, con la sola limitación de que no podrá probarse por medio de presunciones
judiciales los actos o contratos que no puedan acreditarse por los hechos o circunstancias que
sirven de base a la presunción. Por ejemplo, no puede probarse la compraventa de Bienes
Raíces por medio de presunciones judiciales fundadas en declaraciones de testigos. La
amplitud de las presunciones judiciales está limitada por los actos o contratos solemnes que
deben probarse por la solemnidad.
C) Valor probatorio de las presunciones

Como anticipamos, el artículo 1712 del CC señala que para que las presunciones judiciales
constituyan plena prueba, deben ser graves, precisas y concordantes, es decir, deben ser 2 o
más, por emplearse términos plurales.

Se ha fallado que las presunciones son graves cuando los hechos que se deducen son
convincentes y concluyentes. Serán precisas cuando todas ellas encaminan a la conclusión que
se trata de probar y no adolecen de ambigüedad o vaguedad; son concordantes, cuando
guarden relación y conexión entre sí, sin que se adviertan contradicciones que pudieran
destruirlas. Conforme a lo dispuesto en el artículo 426 del CPC se ha resuelto que en materia
civil la multiplicidad de presunciones no es requisito vital, pues basta con una sola, bastando
que tenga caracteres de gravedad y precisión bastantes para lograr la convicción del tribunal.

También se ha fallado de manera uniforme que “presumir, para el juez, es una labor
enteramente personal y subjetiva. De las probanzas producidas deduce el juez hechos en uso
de las facultades que la ley le otorga. Si de los hechos pretendidos demostrar en el proceso no
resulta posible para el juez deducir presunciones que le permitan llegar al convencimiento de
la existencia de otro hecho, no puede legalmente sostenerse que haya infringido las llamadas
reglas reguladoras de presunciones. En consecuencia, la gravedad, precisión y concordancia
de las presunciones es apreciada soberanamente por los jueces del fondo y no es revisable por
casación”66.

Finalmente en el art 427 CPC se encuentran dos presunciones simplemente legales que
constituyen medios específicos de prueba que señala el legislador. Dicho precepto dispone
que “Sin perjuicio de las demás circunstancias que, en concepto del tribunal o por disposición
de la ley, deban estimarse como base de una presunción, se reputarán verdaderos los hechos
certificados en el proceso por un ministro de fe, a virtud de orden de tribunal competente,
salvo prueba en contrario. Igual presunción existirá a favor de los hechos declarados
verdaderos en otro juicio entre las mismas partes”.

APRECIACIÓN COMPARATIVA DE LOS MEDIOS DE PRUEBA

De acuerdo a las diversas normas que el legislador ha establecido en materia probatoria,


podríamos señalar el orden que debe seguir el tribunal para valorar los medios de prueba,
que pueden haberse producido en el expediente para dar por establecidos los hechos:

I. Examinar si existe disposición legal que contemple un medio de prueba en específico,


que por sí solo, permita dar por establecido un hecho, excluyendo los demás. Por
ejemplo, la escritura pública en los contratos en que la ley la requiere como formalidad
(art. 1701 CC)

66
Corte Suprema 10. 01. 1973. Revista de Derecho y Jurisprudencia T. 70. Sec. 4 Pág 25
II. Examinar si respecto de un determinado hecho la ley excluye algún medio de prueba,
y en caso de haberse rendido, restarle todo valor probatorio. Por ejemplo, la prueba
testimonial respecto de una obligación que haya de consignarse por escrito (art. 1708
y 1709 CC)
III. Si el hecho está o no asistido por una presunción de derecho, si existe la presunción y
se ha acreditado el hecho base, el tribunal debe dar por establecido el hecho
presumido.
IV. Debe examinar si el hecho está amparado por una presunción simplemente legal y si
se ha acreditado el hecho base y no se ha rendido prueba para destruir la consecuencia
de la presunción, debe darse por establecido el hecho presumido.
V. Examinar si existe o no confesión de una o ambas partes sobre hechos personales. Si
existe esta clase de confesión, el tribunal deberá dar por establecido el hecho.
VI. Agotado este orden, deberá el tribunal entrar a la valorización comparativa de los
diversos medios de prueba.

A) Existe diferencia en cuanto a la calidad de las pruebas o son de distinto valor

Si existen medios de prueba de distinto valor: deberá dar por establecido el hecho de acuerdo
al mérito de los medios de prueba al que la ley le otorga mayor valor, por ejemplo, inspección
personal del tribunal y testimonio de oídas.

Si existe un mismo medio de prueba pero de distinta calidad: debe dar por establecido el
hecho según el medio de prueba de mayor calidad. Por ejemplo, entre testigos contradictorios
debe optar por los de mayor calidad.

Si existen medios de prueba de igual valor y calidad, pero de distinto número: debe dar por
establecido el hecho según el medio de prueba de mayor número. Por ejemplo, entre dos
pruebas de testigos contradictorios y de igual calidad, debe optar por los de mayor número.

Si existen medios de prueba de igual valor probatorio, calidad y número: el tribunal debe dar
por no establecido el hecho. Por ejemplo, en el caso en que concurran dos pruebas
testimoniales de igual calidad y número.

B) Existen pruebas contradictorias de igual valor probatorio

Para resolver este problema, debe darse aplicación al artículo 428 CPC, en el que se exige la
concurrencia de los siguientes requisitos:

1.- Que existan dos o más pruebas contradictorias

2.- Que sean de igual valor probatorio; y


3.- Que la ley no resuelva el conflicto en forma expresa.

Y en el cual, se mandata al tribunal a preferir aquella que crea más conforme a la verdad.

El profesor Cristián Maturana, menciona que este artículo no es una aplicación del sistema de
la libre convicción, sino que, de la sana crítica, sin que se trate de que el tribunal acepte la
prueba más conforme con la verdad de forma arbitraria, sino que a través de una adecuada
fundamentación del fallo. Este artículo, que constituye la regla de cierre de nuestro sistema
procesal civil, además constituye una atenuación del sistema de prueba legal o tasada, en
conjunto a, por ejemplo, el art. 425 CPC y el art. 429 CPC.

Cabe mencionar que respecto de la apreciación comparativa de la prueba confesional con


otros medios de prueba que igualmente tengan valor de plena prueba se han formulado dos
posiciones.

Por un lado, están aquellos que señalan que en virtud de lo establecido en el artículo 1713 del
CC, la confesión primaría sobre el resto de los medios de prueba y que no cabría aplicar el art.
428.

Por otro lado, están los que sostienen que cuando concurre la confesión con otro medio de
prueba de igual valor, el tribunal debe aplicar el artículo 428 CPC, y estar a la que crea más
conforme con la verdad.

La violación a las normas mencionadas anteriormente, constituye una infracción a las leyes
reguladoras de prueba, dando lugar a la causal del recurso de casación fondo.

No obstante, la jurisprudencia67 ha restringido la procedencia del recurso de casación fondo


respecto de las leyes reguladoras de la prueba únicamente cuando dicen relación con:

i) Se admiten medios de prueba desconocidos, repudiados o prohibidos por el


legislador.
ii) Se desestima un medio de prueba autorizado por ley.
iii) Se altera o desconoce el valor probatorio que otorga la ley.
iv) Se invierte la carga de la prueba.

Además, en este caso excepcional, se permitiría a la Corte Suprema cuando acoge del recurso
de casación fondo por infracción a las leyes reguladoras de la prueba, entrar a modificar los
hechos contenidos en la sentencia de 2da instancia, cuestión que no puede realizar en ningún
otro caso.

67
UBILLA P, Nicolás. Aspectos Generales de la Prueba. P. 43.
MEDIOS MODERNOS DE PRUEBA

I. GENERALIDADES

Como se ha analizado en los apartados anteriores, el artículo 341 del CPC y el 1698 inciso
segundo del Código Civil mencionan los medios de prueba que pueden hacerse valer en
juicio. Sin embargo, lo cierto es que, luego de la dictación del Código de Procedimiento Civil,
los avances tecnológicos han generado nuevos medios de prueba que no encuentran
consagración expresa en las disposiciones normativas mencionadas. Sin perjuicio de aquello,
el uso masivo de los mismos, exige que se lleve a cabo un análisis al efecto.

El profesor Casarino sostiene que los modernos medios de prueba consisten en “aquellos
elementos probatorios que el avance de nuestra civilización, de nuestra tecnología, ha ido creando como
nuevas formas para atestiguar los hechos y las situaciones”68. Juan Agustín Figueroa Yávar ha
efectuado un análisis orgánico del tema sobre todo en relación a las fotocopias y la grabación
fonográfica, por lo tanto en lo que sigue, se utilizará como fuente lo sostenido por dicho jurista.
A continuación se analizarán (1) las fotocopias, (2) grabación mecánica de voz, (3) microcopia
y (4) el documento electrónico.

II. LAS FOTOCOPIAS

En la actualidad, constituyen un medio de uso habitual, sin embargo, produce cierto grado de
desconfianza por cuanto no resulta difícil realizar montajes y fraudes que en definitiva
difieran del documento original. Para su análisis conviene distinguir si nos encontramos
frente a la fotocopia de un instrumento público o a uno privado.

A) Fotocopia de instrumento público

Para concluir si una fotocopia puede ser considerada instrumento público es necesario
analizar los diversos números del artículo 342 y determinar si podrían subsumirse dentro de
alguno de éstos:

i. Art. 342 N°1: Los documentos originales.


1. Si el instrumento se extiende a través de una fotocopia y es suscrita por
el funcionario autorizante será un documento original, a menos que la
ley hubiere establecido la forma material de exteriorizarse esa
manifestación de voluntad y la fotocopia no se contemple dentro de
aquellas. Respecto a la escritura pública, atendido el art. 405 COT, su

68
CASARINO, Mario. Manual de Derecho Procesal, Editorial Jurídica de Chile, Sexta Edición, 2010. P.
matriz no es posible que sea otorgada mediante una fotocopia.
ii. Art. 342 N°2: Las copias dadas con los requisitos que las leyes prescriben para que
hagan fe respecto de toda persona o, a lo menos, respecto de aquella contra quien se
hacen valer.

En este caso, si la fotocopia del instrumento público se encuentra firmada de


puño y letra por el funcionario competente tendrá el carácter de instrumento
público en juicio.

Cabe recordar que los arts. 37 y 197 CPC demuestran que el legislador otorga
a las fotocopias de un instrumento público original debidamente certificadas
en cuanto a su autenticidad, el carácter de instrumento público en juicio.

Respecto a las escrituras públicas, el art. 422 establece que las copias podrán
ser fotocopiadas, expresándose que son testimonio fiel de su original, llevando
la fecha, firma y sello del funcionario autorizante. Quien debe dar esas copias
es el notario autorizante, el que lo subroga o sucede o el archivero a cuyo cargo
está el protocolo respectivo. En ese caso, tendrá el carácter de instrumento
público en juicio.

Hay que analizar, por último si es o no es instrumento público la fotocopia


autorizada por un Notario de la copia de una escritura pública otorgada ante
un Notario diferente: El Notario puede certificar que una fotocopia
corresponde al original o copia autorizada que se le exhibe, pero en dicho caso
no la convierte en instrumento público.

iii. Art. 342 N°3: Las copias que, obtenidas sin estos requisitos, no sean objetadas como
inexactas por la parte contraria dentro de los tres días siguientes a aquel en que se
dio conocimiento de ellas. En este número se comprende las fotocopias.

La fotocopia de un instrumento público, acompañada con o sin autorización


de un Ministro de fe, cae ello dentro del concepto de las copias obtenidas sin el
cumplimiento de los requisitos legales. En consecuencia, dentro de este
número se comprende, como señala el profesor Figueroa, en forma amplia e
irrestricta la fotocopia.

iv. Art. 342 N°4: Las copias que, obtenidas en el caso del número anterior, sean
cotejadas y halladas conforme con sus originales o con otras copias que hagan fe
respecto de la parte contraria.

El profesor Maturana señala que si la fotocopia de un instrumento publico


otorgada sin los requisitos legales es objetada dentro de tercero día , es posible
que se efectúe el cotejo instrumental y de verificarse su conformidad con el
original u otra copia autorizada se le deberá otorgar pleno valor probatorio.
B) Fotocopia de instrumento privado

Un instrumento privado, para ser tal, ha de estar escrito o firmado por la persona a quien se
atribuye, conforme a lo dispuesto en los artículos 1703, 1704 y 1705 del Código Civil. En
consecuencia, con un criterio estrictamente legalista, una fotocopia de un instrumento
privado no reviste el carácter de tal, porque en sí misma no se encuentra escrita ni firmada.
No obstante, como el CPC no exige para su reconocimiento que éstos se encuentren firmados,
no existiría inconveniente para que respecto de la fotocopia opere el reconocimiento de
parte, expreso o tácito, siempre que se trate de un documento emanado de ella.

El problema se presenta en caso de impugnación: si la fotocopia es objetada carecerá de valor


probatorio, puesto que no se podrá verificar el reconocimiento judicial al no haber forma de
hacer entre la fotocopia impugnada y un original indubitado el cotejo de letras
correspondiente. Aquello se ha señalado por un acuerdo internacional de peritos caligráficos.

III. LA GRABACIÓN MECÁNICA DE LA VOZ

El timbre de voz es propio de cada persona y permite la determinación del sujeto que la emite.
La voz sería análoga a la firma puesto que el timbre de aquélla es un atributo personalísimo
de cada persona, inimitable.

En las nuevas legislaciones se ha admitido la grabación de la voz humana como un medio de


prueba autónomo, siempre que haya sido reconocido por la parte a quien perjudica, y en caso
de ser negada la autenticidad debe procederse a su comprobación pericial.

En Chile no existe una reglamentación en tal sentido, pero puede ser subsumido dentro de la
prueba confesional -si es reconocido por la parte- y pericial -si fuere negado. Este criterio
respecto a que es necesario un reconocimiento de la grabación para que tenga valor probatorio
se encuentra contemplado en el art. 330 CPP. Finalmente, cabe añadir que las grabaciones
ilícitas y subrepticias deben ser excluidas del proceso. En dicho sentido El Consejo General
del Colegio de Abogados, en Circular de 12 de Septiembre de 1960, estableció que “No será
lícito, sin embargo, su uso para grabar conversaciones o entrevistas con abogados, cliente, o parte
adversaria, a menos que se advierta a todos ellos y se cuente con su expreso consentimiento”.

IV. MICROCOPIA

La ley 18.845 de 3 de noviembre de 1989 estableció el sistema de la microcopia o


micrograbación de documentos. El artículo primero de dicha ley señala que debe entenderse
por microforma cualquier alternativa de formatos de películas fotográficas, microfilmes u
otros elementos análogos que contengan imágenes de documentos originales como producto
del proceso de microcopia o micrograbado y que sean susceptibles de ser reproducidos.
El método que se emplee debe garantizar la duración, indelebilidad, integridad, legibilidad y
fidelidad de las microformas.

Para establecer su valor probatorio hay que distinguir entre:

A) Microformas de documentos pertenecientes a la administración pública y registros


públicos.
Para estos documentos, el proceso de microcopia debe hacerse en presencia del funcionario
encargado del archivo o registro respectivo, quien actuará como ministro de fe. El proceso
debe comprender un acta de apertura, en el cual se dejará constancia de la fecha de la
diligencia, del ministro de fe, quien deberá certificar el estado de conservación de los
documentos originales; y un acta de cierre, emanada del ministro de fe.
La impugnación de la microforma y sus reproducciones se sujetan a las normas de la
impugnación de los documentos, sirviendo como medio de prueba de autenticidad e
integridad, las actas ya mencionadas. El valor probatorio de las microformas, si son hechas
conforme a la ley, será el mismo del documento original. Sin embargo, el artículo 4 de esta ley
prescribe que, si los originales no hubieren sido destruidos y existiere disconformidad entre
éstos y sus microcopias, se estará al documento original.

B) Microformas pertenecientes a archivos privados.

El artículo 5 dispone que, estas tendrán el mismo mérito que los documentos originales,
siempre y cuando:
i. La microcopia haya sido efectuada por alguna persona o entidad inscrita en el registro
respectivo y que cumplan con las formalidades de la ley.
ii. Se otorgue acta de apertura y cierre emanada de un ministro de fe. Las letras de
cambio, pagarés a la orden, cheques, certificados de depósitos y cualquier título de
crédito o inversión, sólo podrán hacerse valer invocando el instrumento original, sin
perjuicio de las disposiciones que autoricen la obtención de un segundo ejemplar en
los casos de extravío, hurto o pérdida del original.

1) Destrucción de documentación

Todo este proceso de microformas tiene por objeto permitir la destrucción de documentación,
salvo norma expresa en contrario.
Al efecto, se establece respecto de las prohibiciones de destrucción que:
a) Queda prohibido destruir documentos de valor histórico o cultural, aunque haya sido
microcopiado o micrograbado.
b) Mientras estén pendientes los plazos del art. 200 del Código Tributario, será aplicable
lo dispuesto por el art. 97 N° 16 del mismo cuerpo legal, respecto a la pérdida o
inutilización de los libros de contabilidad, aun cuando hayan sido microcopiados.
c) Las entidades sujetas a la superintendencia directiva, correccional y económica de la
Corte Suprema podrán acogerse a las disposiciones de esta ley, previa autorización de
dicha Corte.

2) Sanción penal

El artículo 8 prescribe que la falsificación de microformas y su uso malicioso se castigarán de


acuerdo a los párrafos 4 y 5 del Título Cuarto del Libro Segundo del Código Penal.

V. DOCUMENTO ELECTRÓNICO

La ley N°19.799 Sobre documentos electrónicos, firma electrónica y servicios de certificación


de dicha firma de 12 de abril de 2002, estableció el reconocimiento de este tipo de documentos.

A) Conceptos
El artículo segundo de esta ley define una serie de conceptos, como : electrónico, certificado
de firma electrónica, certificador o prestador de servicios de certificación, documento
electrónico, entidad acreditadora, firma electrónica, firma electrónica avanzada, titular o
usuario y fecha electrónica. Para estos efectos, conviene detenerse en el concepto de
documento electrónico.

La letra d) del artículo 2 señala que, documento electrónico es toda representación de un


hecho, imagen o idea que sea creada, enviada, comunicada o recibida por medios electrónicos
y almacenada de un modo idóneo para permitir su uso posterior.

De acuerdo a los conceptos señalados en la mencionada ley, existen tres tipos de documentos
electrónicos:

i. Documentos electrónicos que no contengan firma.


ii. Documentos electrónicos que contengan firma electrónica simple. En este caso, las
partes acuerdan usar una firma que permita al receptor de un documento identificar
al menos formalmente a su autor, sin que concurra un certificador.
iii. Documentos electrónicos que contengan firma electrónica avanzada. En este caso,
en cambio, la firma es certificada por un prestador acreditado, la cual ha sido creada
usando medios que el titular mantiene bajo su exclusivo control, de manera que se
vincule únicamente al mismo y a los datos a los que se refiere, permitiendo la detección
posterior de cualquier modificación, verificando la identidad del titular e impidiendo
que desconozca la integridad del documento y su autoría.

B) Alcance de la utilización de la firma electrónica en un documento electrónico


Según lo dispuesto en el artículo 3 y 7 de esta ley, la regla general será que los actos o contratos
celebrados y suscritos por medio de firma electrónica, serán válidos de la misma manera y
producirán los mismos efectos que los celebrados por escrito y en soporte de papel. Se
reputarán como escritos, en los casos en que la ley exija que los mismos consten de ese modo,
y en todos aquellos casos en que la ley prevea consecuencias jurídicas cuando constan
igualmente por escrito. La firma electrónica se considerará como firma manuscrita para todos
los efectos legales.

Esta regla, sin embargo, no tendrá aplicación respecto de ciertos actos o contratos:
i. Aquellos en que la ley exija una solemnidad que no sea susceptible de cumplirse
mediante documentos electrónicos.
ii. Aquellos en que la ley requiera la concurrencia personal de alguna de las partes.
iii. Aquellos relativos al derecho de familia.

Asimismo, esta regla general no tendrá aplicación respecto de los actos y contratos y
documentos expedidos por órganos del Estado:
i. Aquellos en que la CPR o la ley exija una solemnidad que no sea susceptible de
cumplirse mediante documento electrónico
ii. Aquellos en que la ley requiera la concurrencia personal de la autoridad o funcionario
que deba intervenir en ellas.

Sin perjuicio de lo anterior, el artículo 4 dispone que los documentos electrónicos que tengan
la calidad de instrumento público deberán suscribirse mediante firma electrónica avanzada ,
y el artículo 7 menciona que los actos, contratos y documentos de los órganos del Estado, para
que tengan la calidad de instrumento público o surtan los efectos propios de éste, deberán
suscribirse mediante firma electrónica avanzada.

C) Valor probatorio
Conforme a lo prescrito en el artículo 4, los documentos electrónicos que tengan la calidad de
instrumento público deberán suscribirse mediante firma electrónica avanzada.

Respecto del valor probatorio de los documentos electrónicos presentados en juicio como
medio de prueba, se dispone lo siguiente:

i. Los documentos electrónicos que tengan la calidad de instrumento público


y se encontraren suscritos mediante firma electrónica avanzada, tendrán el
carácter de instrumento público y según el artículo 5 N°1 harán plena prueba
de acuerdo con las reglas generales.
ii. Los documentos electrónicos que tengan la calidad de instrumento privado
y hayan sido suscritos mediante firma electrónica avanzada, tendrán el
mismo valor probatorio de un instrumento público y se les aplicarán las reglas
generales que regulan el valor probatorio de estos documentos. Añade el N° 2
del artículo 5 que sin embargo, no harán fe respecto de su fecha, a menos que
ésta conste a través de un fechado electrónico otorgado por un prestador
acreditado.
iii. Los documentos electrónicos que tengan la calidad de instrumento privado
y hayan sido suscritos mediante una firma electrónica simple o no contengan
firma electrónica, tendrán el valor probatorio que corresponda según las reglas
generales, esto es, son instrumentos privados que para poseer valor probatorio
deberán ser reconocidos en las formas previstas por la ley, por no encontrarse
amparados por la presunción de autenticidad.

Capítulo VII –Trámites


posteriores

a la
I. OBSERVACIONES A LA PRUEBA

El artículo 430 del CPC señala que, una vez vencido el término probatorio, y dentro de los 10
días siguientes, las partes pueden hacer por escrito las observaciones que el examen de prueba
les sugiera. La Corte suprema ha dicho que, si hubo lugar a un término probatorio
extraordinario o se concedió término especial de prueba, debe entenderse que el plazo para
las observaciones a la prueba comienza al vencimiento de alguno de estos plazos69.

A través de estos escritos se concede a las partes la oportunidad de formular alegaciones


conducentes sobre la prueba rendida en el proceso y tratar de este modo de convencer al
tribunal de la bondad de su causa, en lo que a la actividad probatoria se refiere.

La utilidad de estos escritos radica en que en ellos el juez encuentra recapitulados en forma
metódica los hechos en que las partes fundan sus pretensiones, la prueba que a cada uno se
refiere y las razones que se aducen para demostrar el derecho. Pese a lo anterior, ellos no
constituyen una pieza fundamental del procedimiento y su no presentación no acarrea ningún
perjuicio o sanción, salvo una inferior defensa.

II. AGREGACIÓN DE LA PRUEBA

69
CS, 13 de mayo de 2013 Rol N° 6991-2012.
El artículo 431 se hace cargo de regular la situación que podría producirse ante la necesidad
de rendir prueba fuera del territorio de competencia del tribunal, mediante exhorto.

Disponiendo que no será motivo para suspender el curso del juicio ni será obstáculo para la dictación
del fallo el hecho de no haberse devuelto la prueba rendida fuera del tribunal, o el de no haberse practicado
alguna otra diligencia de prueba pendiente, a menos que el tribunal, por resolución fundada, la estime
estrictamente necesaria para la acertada resolución de la causa. En este caso, la reiterará como medida
para mejor resolver y se estará a lo establecido en el artículo 159. En todo caso, si dicha prueba se
recibiera por el tribunal una vez dictada la sentencia, ella se agregará al expediente para que sea
considerada en segunda instancia, si hubiere lugar a ésta.

III. CITACIÓN A OÍR SENTENCIA

A) Oportunidad y recursos

La resolución que cita a las partes a oír sentencia pone término al debate, y por regla general
impide que las partes puedan presentar escritos. Esta resolución puede dictarse en dos
oportunidades diferentes:

i. Luego de evacuado el trámite de la dúplica: en caso que el demandado se allane a la


demanda, no controvierta los hechos invocados por el demandante o si las partes
piden que se falle el pleito sin más trámite. Esta resolución es apelable, por cuanto
explícita o implícitamente niega el trámite de la recepción de la causa a prueba
(artículo 326).
ii. Luego de vencido el término para realizar las observaciones a la prueba: El artículo
432 dispone que, vencido el plazo de 10 días para realizar las observaciones a la
prueba, se hayan o no presentado estos escritos, y existan o no diligencias pendientes,
el tribunal citará a oír sentencia. Las partes serán notificadas por el estado diario. En
este caso, el recurso procedente es la reposición, el que deberá fundarse en un error
de hecho y deducirse dentro de tercero día. La resolución que resuelva la reposición
será inapelable.

La omisión de la citación a oír sentencia es causal de casación en la forma (artículo 768 N°9
en relación con el 795 N°7 del CPC), por cuanto faltaría un trámite o diligencia calificado como
esencial por el legislador. En dicho caso estaremos frente a una sentencia nula, cuya nulidad
deberá solicitarse mediante el recurso señalado.

B) Efectos

Como anticipamos, la resolución que cita a las partes a oír sentencia pone fin al debate
quedando la causa en estado de fallo. El artículo 433 inciso 1° prescribe que, por regla general,
ya no se admiten escritos ni pruebas de ninguna especie, salvo los casos de excepción que
analizaremos en el apartado siguiente. La Corte Suprema ha dicho que “desde que se cita a las
partes para oír sentencia, la labor de éstas, como sujetos activos de la relación procesal ha terminado y
nada les queda por hacer sino esperar la labor del tribunal, esto es, la sentencia que decida la litis 70”

El art. 162, inc 3° señala que la sentencia definitiva en el juicio ordinario deberá pronunciarse
dentro del término de 60 días, contados desde que la causa quede en estado de sentencia.
Agrega el inciso 4º de la disposición citada que "Si el juez no dicta sentencia dentro de este
plazo, será amonestado por la Corte de Apelaciones respectiva, y si a pesar de esta
amonestación no expide el fallo dentro del nuevo plazo que ella le designe, incurrirá en la
pena de suspensión de su empleo por el término de treinta días, que será decretado por la
misma Corte".

C) Peticiones que se admiten una vez que la causa se encuentra en estado de fallo

Como anticipamos, existen algunas presentaciones escritas que podrán ser admitidas luego
de citadas las partes a oír sentencia, conforme lo establece el inciso segundo del artículo 433:

i. Conforme al artículo 83 y 84 del CPC, el incidente de nulidad procesal y la


posibilidad del juez de corregir de oficio los errores que observe en la tramitación
del proceso y tomar las medidas necesarias que tiendan a evitar la nulidad de los actos
del procedimiento.
ii. Las medidas para mejor resolver (artículo 159 CPC). Justamente esta es la oportunidad
para que el juez las decrete, siendo en todo caso facultativo.
iii. Las medidas precautorias, que de acuerdo al artículo 290, pueden ser solicitadas en
cualquier estado del juicio.

Además de estos casos es posible que se formulen otras peticiones y que se realicen otras
actuaciones:

iv. La acumulación de autos (art. 98 CPC)


v. La solicitud de privilegio de pobreza (130 CPC)
vi. El desistimiento de la demanda (art 148 CPC)
vii. El artículo 433 inc.2° añade que los pazos de objeción o revisión documental
contenidos en los artículos 342 N°3, 346 N°3 y 347, que hayan comenzado a correr al
tiempo de citar a oír sentencia, continuarán corriendo sin interrupción, pudiendo las
partes dentro del plazo correspondiente, ejercer el derecho de impugnación, que se
tramitará en cuaderno separado para ser resuelta en la sentencia definitiva.

IV. LAS MEDIDAS PARA MEJOR RESOLVER

A) Concepto
Según el profesor Maturana “Las medidas para mejor resolver son aquellas diligencias probatorias
establecidas en la ley y que puede decretar de oficio el tribunal, luego de dictada la resolución citación
para oír sentencia, con el fin de acreditar o esclarecer alguno de los hechos que configuran el conflicto,

70
CS, 8 de junio de 1961, en Rev. Der. y Jur., T. 58, sec. 1°, p. 153.
para la adecuada y justa decisión de éste.71”

Andrés Bordalí Salamanca, propone analizar a las MMR desde una perspectiva crítica
afirmando que “deben ser criticadas, pues pueden suponer una irrupción oficiosa del juez en el proceso
que pueden traer como resultado sorprender a las partes de la contienda afectando así su derecho de
defensa y sus estrategias defensivas”72. En vista de aquello es que deben interpretarse de una
forma compatible con la igualdad de las partes y el principio de contradicción. Afirma que
“No deben suponer una alteración o perturbación ni de los elementos básicos de la noción misma de
debido proceso ni de los principios dispositivos y de aportación de parte que gobierna al proceso civil
(...) En esta lógica las MMR únicamente debieran utilizarse para adquirir certeza acerca de los hechos
alegados que, pese a haberse comportado diligentemente la parte gravada con la carga de probarlos,
permanecieron dudosos. El problema está en que ni la norma del artículo 159 CPC ni su aplicación
judicial han asegurado el éxito de una interpretación como la que se postula.”73.

B) Sujeto

El tribunal es el sujeto a quien le corresponde exclusivamente decretar las medidas para mejor
resolver. Observamos pues, una manifestación nítida del principio inquisitivo dentro del
juicio ordinario. Si bien las partes podrían solicitar al tribunal la realización de una o más
MMR, carecen en realidad de medios para compelerlo, por lo tanto las peticiones que
formulen respecto de ellas no podrán ser consideradas más que meras sugerencias. El derecho
de las partes a generar prueba ha precluido.

Así mismo, debemos recordar que el propósito de las MMR es permitir la mejor resolución
del conflicto, misión que se halla reservada en forma exclusiva al órgano jurisdiccional, siendo
lógica consecuencia de ello que la iniciativa para decretarlas le corresponda sólo a éste.

Sin embargo, como se anticipó con la postura de Andrés Bordalí, la posición respecto de las
medidas para mejor resolver no es un tema pacífico en doctrina. Se advierten tres tendencias:

i. Abolicionistas: no deben ser contempladas dentro de la legislación procesal por ser


inconstitucionales al infringir el racional y justo procedimiento. No es función del juez
probar. Ello es de resorte exclusivo y excluyente de las partes, las cuales deben diseñar
sus estrategias probatorias y rendirlas en la oportunidad procesal que tienen 74.
ii. Amplias: debe otorgarse una mayor latitud a la intervención del juez a través de las
medidas para mejor resolver, aceptando que se supla la prueba que no se produjo por
negligencia de las partes. Las medidas para mejor resolver se entienden no a favor o
en contra de un litigante determinado, sino que, en interés de la justicia, y éste no
puede ser sacrificado por la presunta negligencia de una de las partes75.

71
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P.292.
72
BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía,
Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014. P.407.
73
Ídem.
74
BOTTO O, Hugo. Inconstitucionalidad de las medidas para mejor resolver. Editorial Fallos del Mes. 2001.CASARINO, Mario.
Manual de Derecho Procesal, Editorial Jurídica de Chile, Sexta Edición, 2010. Pp.303 y 304.
75
PIEDRA BUENA R, Guillermo. Las medidas para mejor resolver como institución común a todo procedimiento. Editorial Jurídica de
Chile. 1960.Pp.52 y 53.
iii. Restringidas: nuestra Corte de Apelaciones de Santiago en su fallo de marzo de 1979,
señala que las medidas para mejor resolver pueden decretarse con el fin de
complementar o adicionar la prueba rendida por las partes; pero no para reemplazar
las que éstas no han rendido oportunamente; de ser así favoreciendo indebidamente
la negligencia de la parte a quien correspondía el onus probandi.

C) Oportunidad para decretarlas

Según lo dispuesto en el artículo 159, la oportunidad para que el tribunal decrete las medidas
para mejor resolver es sólo dentro del plazo para dictar sentencia", es decir, dentro de los 60
días después de citadas las partes para oír sentencia.

Se trata de un plazo es legal y se encuentra contemplado para la realización de actuaciones


propias del tribunal. Dicho esto, por aplicación del artículo 64 deberíamos concluir que se
trata de un plazo no fatal, posibilitando que, transcurrido el término señalado, aun pudieren
decretarse. Sin embargo, con el fin de impedir que el tribunal determine medidas para mejor
resolver más allá del referido plazo, el legislador procedió mediante la dictación de la Ley Nº
18.882, a modificar el inciso 1º del art.159, estableciendo que "las que se dicten fuera de este
plazo se tendrán por no decretadas".

D) Medidas

Las medidas para mejor resolver que puede decretar el tribunal se encuentran expresa y
taxativamente enumeradas en el artículo 159 y ellas son:

i. La agregación de cualquier documento que estimen necesario para esclarecer el


derecho de los litigantes: Al no distinguir la ley la especie de documento a la que se
refiere, podrá recaer en instrumentos públicos y/o privados, se encuentren en poder
de una parte o de terceros.
ii. La confesión judicial de cualquiera de las partes sobre hechos que consideren de
influencia en la cuestión y que no resulten probados: Se trata de una confesión
judicial provocada a iniciativa del tribunal y no de la contraparte, pero deberá llevarse
a cabo según el procedimiento establecido en el artículo 394 CPC.
iii. La inspección personal del objeto de la cuestión
iv. El informe de peritos
v. La comparecencia de testigos que hayan declarado en el juicio, para que aclaren o
expliquen sus dichos obscuros o contradictorios: La medida para mejor resolver es
muy limitada respecto de la prueba testimonial, puesto que el tribunal no puede
ordenar la comparecencia de testigos que no hubieren declarado con anterioridad en
el proceso. Además, respecto de aquellos que hayan comparecido, el único objeto de
la diligencia puede consistir en que aclaren sus dichos obscuros o contradictorios, pero
no hacerlos declarar sobre hechos nuevos respecto a aquellos sobre los cuales hubiesen
depuesto.
vi. La presentación de cualesquiera otros autos que tengan relación con el pleito: Se
trata de un caso de prueba documental especial, puesto que los expedientes entran en
la categoría de instrumentos públicos.
Conforme al artículo 431 inc 1° CPC, además de estas medidas enumeradas en el
artículo 159, el tribunal puede decretar, como medida para mejor resolver, la remisión
de alguna prueba rendida fuera del tribunal y que no hubiere sido agregada al proceso,
o la realización de una prueba pendiente, siempre que lo estime necesaria para la
acertada resolución de la causa.

E) Notificación de la resolución que las decreta

Conforme al inciso 3° del artículo 159, la resolución que se dicte que el tribunal ordenando
medidas para mejor resolver deberá ser notificada por el estado diario a las partes. El
legislador ha guardado silencio respecto a la forma en que se debe notificar a terceros que
eventualmente deban comparecer a la realización de alguna de las medidas decretadas, por
tanto, conforme a las reglas generales, corresponde que se les notifique por cédula.

F) Recursos

Las resoluciones que decreten las medidas para mejor resolver son inapelables.
Excepcionalmente, procede el recurso de apelación, el que deberá conocerse en el solo efecto
devolutivo, en contra de la resolución que dicte el tribunal de primera instancia disponiendo
que se lleve a cabo el informe de peritos como medida para mejor resolver.

G) Plazo para su cumplimiento

Como veíamos, la oportunidad para que el tribunal decrete las medidas para mejor resolver
es dentro de los 60 días después de citadas las partes para oír sentencia. Ahora bien, una vez
decretadas por el tribunal, estas deben cumplirse dentro del plazo de 20 días contados desde
la fecha de la notificación de la resolución que las decrete. La sanción si es que no se llevan a
cabo en dicho término está dispuesta en la parte final del inciso 2º del artículo 159 señalando
que: "Vencido este plazo, las medidas no cumplidas se tendrán por no decretadas y el tribunal
procederá a dictar sentencia sin más trámite".

H) Hechos nuevos y términos especiales de prueba

Finalmente, dispone el artículo 159 CPC que si en la práctica de alguna medida para mejor
resolver aparece de manifiesto la necesidad de esclarecer nuevos hechos indispensables para
dictar sentencia, podrá el tribunal abrir un término especial de prueba, no superior a 8 días,
que será improrrogable y limitado a los puntos que él designe. . Si las partes requieren rendir
prueba de testigos, la presentación de la lista debe hacerse dentro de los 2 primeros días
(artículo 90 inc°2).

Vencido el término de prueba, deberá dictar sentencia el juez sin más trámite. En contra de
esta resolución que abre el término especial cabe la apelación, debiendo concederse en el sólo
efecto devolutivo.
Andrés Bordalí sobre este punto afirma que “del propio tenor literal de la disposición queda en
evidencia el carácter restringido y excepcional que debe tener la aplicación de esta posibilidad que brinda
el legislador, consciente de los evidentes riesgos de reabrir con amplitud en esta fase del proceso, el debate
y la actividad probatoria”.

Capítulo VII – Etapa de sentencia

La regla general es que el juicio ordinario en primera instancia culmine mediante una
sentencia definitiva, es decir, “el acto por el cual el juez pone término a la litis admitiendo o
rechazando las pretensiones del actor o del demandado, si ha formulado reconvención; o, como la define
la ley, la que pone fin a la instancia, resolviendo la cuestión o asunto que ha sido objeto del juicio (art.
158, inc. 2º)76”

Debe entonces, para ser sentencia definitiva, (i) poner fin a la instancia (ii) resuelva la cuestión
o asunto controvertido. Una sentencia que resuelve un asunto, es aquella que se pronuncia
sobre todas las acciones y excepciones interpuestas por las partes en tiempo y forma.

Sin embargo, podría terminar por otros medios, denominados medios “anormales”:

- Conciliación.

- Avenimiento.

- Desistimiento de la demanda.

- Abandono del procedimiento.

- Transacción.

- Contrato de compromiso o arbitraje.

I. COMPETENCIA DEL TRIBUNAL AL DICTAR SENTENCIA

Según el art. 160 CPC, las sentencias se pronunciarán conforme al mérito del proceso, y no
podrá extenderse a puntos que no hayan sido expresamente sometidos a juicio por las partes,
salvo los casos en que las leyes manden o permitan a los tribunales proceder de oficio.

En el caso de la sentencia definitiva, si el tribunal excede dicho ámbito, la resolución es

76
MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal, Facultad de Derecho de la Universidad de
Chile, 2018. P. 297.
anulable mediante el recurso de casación en la forma, por la causal de ultrapetita.

II. CONTENIDO DE LAS SENTENCIAS DEFINITIVAS 1° O ÚNICA INSTANCIA (o


de segunda, modificatorias o revocatorias):

“Artículo 170.

Las sentencias definitivas de primera o de única instancia y las de segunda que


modifiquen o revoquen en su parte dispositiva las de otros tribunales, contendrán:

1°. La designación precisa de las partes litigantes, su domicilio y profesión u oficio;

2°. La enunciación breve de las peticiones o acciones deducidas por el demandante y de sus
fundamentos;

3°. Igual enunciación de las excepciones o defensas alegadas por el demandado;

4°. Las consideraciones de hecho o de derecho que sirven de fundamento a la sentencia;

5°. La enunciación de las leyes, y en su defecto de los principios de equidad, con arreglo a
los cuales se pronuncia el fallo; y

6°. La decisión del asunto controvertido. Esta decisión deberá comprender todas las
acciones y excepciones que se hayan hecho valer en el juicio; pero podrá omitirse la
resolución de aquellas que sean incompatibles con las aceptadas”

Además, el Auto Acordado respecto de las formas de las sentencias agrega dos requisitos en
la parte expositiva; (i) consignar si se ha recibido o no la causa a prueba (ii) consignar si las
partes fueron citadas a oír sentencia. Agrega también, tres requisitos en la parte considerativa
(i) indicar los hechos sobre los cuales las partes están de acuerdo (ii) ponderar y valorar la
prueba (iii) si hay controversia sobre la procedencia de la prueba, debe resolverla antes.

III. NOTIFICACIÓN

La sentencia definitiva de primera instancia se notifica por cédula, la de segunda instancia,


por estado diario.

IV. RECURSOS

Procede en contra de la dictada en primera instancia, el recurso de apelación, casación forma


y aclaración rectificación o enmienda. Además, respecto de la dictada en segunda instancia,
podría proceder el recurso de casación fondo, revisión y queja cumpliendo con el resto de los
requisitos y causales específicas.

En materia civil y penal, no procede la reposición en contra de la sentencia definitiva.

V. INJERTO DE OTRA SENTENCIA

En variados casos los tribunales dejan para resolver en la sentencia definitiva, algunas
incidencias que se hayan desarrollado durante el curso del procedimiento, existiendo en esos
casos, una sentencia definitiva que tendrá un injerto de interlocutoria en aquella parte que
resuelve el incidente, por ejemplo, tachas o costas.

En dichos casos, la resolución del incidente se regirá por las reglas de las sentencias
interlocutorias, pudiendo interponerse los respectivos recursos de acuerdo a ellas.

VI. EFECTOS DE LA SENTENCIA DEFINITIVA

A. Cosa Juzgada.
B. Desasimiento del tribunal (art. 182 CPC).
BIBLIOGRAFÍA

1. BENAVENTE, Darío. Juicio Ordinario y Recursos Procesales. Editorial Universitaria SA,


Universidad de Chile, Escuela de Derecho, 1959.
2. BORDALÍ S, Andrés; CORTÉS M, Gonzalo; PALOMO V, Diego. Proceso Civil. El
Juicio Ordinario de Mayor Cuantía, Procedimiento Sumario y Tutela Cautelar, Thomson
Reuters. Segunda Edición Revisada, Ampliada y Actualizada, 2014.
3. BOTTO O, Hugo. Inconstitucionalidad de las medidas para mejor resolver. Editorial Fallos
del Mes. 2001.CASARINO, Mario. Manual de Derecho Procesal, Editorial Jurídica de
Chile, Sexta Edición, 2010.
4. CHÁVEZ C, Erick. Procedimientos Juzgados Laborales. Práctica Forense y Jurisprudencia,
Tofulex Ediciones Jurídicas. Novena Edición, 2021.
5. MATURANA M, Cristán. El Juicio Ordinario, Departamento de Derecho Procesal,
Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, 2018.
6. MONTERO L, Raúl. Derecho Procesal II. Departamento de Derecho Procesal,
Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, 2017.
7. PIEDRA BUENA R, Guillermo. Las medidas para mejor resolver como institución común a
todo procedimiento. Editorial Jurídica de Chile. 1960.
8. RODRÍGUEZ P, Ignacio. Procedimiento Civil, Juicio Ordinario de Mayor Cuantía.
Editorial Jurídica, de Chile, Séptima Edición actualizada por Cristián Maturana
Miquel, 2006.
9. UBILLA P, Nicolás. Juicio Ordinario de Mayor Cuantía.
10. UBILLA P, Nicolás. Aspectos Generales de la Prueba.

También podría gustarte