Lista de textos bíblicos de la cuaresma
1. Mateo 6:1-6, 16-18
1
«Cuidad de no practicar vuestra justicia delante de los hombres para
ser vistos por ellos; de lo contrario no tendréis recompensa de vuestro
Padre celestial.
2
Por tanto, cuando hagas limosna, no lo vayas trompeteando por
delante como hacen los hipócritas en las sinagogas y por las calles, con
el fin de ser honrados por los hombres; en verdad os digo que ya
reciben su paga.
3
Tú, en cambio, cuando hagas limosna, que no sepa tu mano izquierda
lo que hace tu derecha;
4
así tu limosna quedará en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te
recompensará.
5
«Y cuando oréis, no seáis como los hipócritas, que gustan de orar en
las sinagogas y en las esquinas de las plazas bien plantados para ser
vistos de los hombres; en verdad os digo que ya reciben su paga.
6
Tú, en cambio, cuando vayas a orar, entra en tu aposento y, después
de cerrar la puerta, ora a tu Padre, que está allí, en lo secreto; y tu
Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.
16
«Cuando ayunéis, no pongáis cara triste, como los hipócritas, que
desfiguran su rostro para que los hombres vean que ayunan; en verdad
os digo que ya reciben su paga.
17
Tú, en cambio, cuando ayunes, perfuma tu cabeza y lava tu rostro,
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para que tu ayuno sea visto, no por los hombres, sino por tu Padre
que está allí, en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te
recompensará.
Primer domingo de cuaresma
Lucas 5:1-11
1
Estaba él a la orilla del lago Genesaret y la gente se agolpaba sobre él para
oír la Palabra de Dios,
2
cuando vio dos barcas que estaban a la orilla del lago. Los pescadores habían
bajado de ellas, y lavaban las redes.
3
Subiendo a una de las barcas, que era de Simón, le rogó que se alejara un
poco de tierra; y, sentándose, enseñaba desde la barca a la muchedumbre.
4
Cuando acabó de hablar, dijo a Simón: «Boga mar adentro, y echad vuestras
redes para pescar.»
5
Simón le respondió: «Maestro, hemos estado bregando toda la noche y no
hemos pescado nada; pero, en tu palabra, echaré las redes.»
6
Y, haciéndolo así, pescaron gran cantidad de peces, de modo que las redes
amenazaban romperse.
7
Hicieron señas a los compañeros de la otra barca para que vinieran en su
ayuda. Vinieron, pues, y llenaron tanto las dos barcas que casi se hundían.
8
Al verlo Simón Pedro, cayó a las rodillas de Jesús, diciendo: «Aléjate de mí,
Señor, que soy un hombre pecador.»
9
Pues el asombro se había apoderado de él y de cuantos con él estaban, a
causa de los peces que habían pescado.
10
Y lo mismo de Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de
Simón. Jesús dijo a Simón: «No temas. Desde ahora serás pescador de
hombres.»
11
Llevaron a tierra las barcas y, dejándolo todo, le siguieron.
Segundo domingo de cuaresma Lucas 4:1-13
1
Jesús, lleno de Espíritu Santo, se volvió del Jordán, y era conducido por el
Espíritu en el desierto,
2
durante cuarenta días, tentado por el diablo. No comió nada en aquellos días
y, al cabo de ellos, sintió hambre.
3
Entonces el diablo le dijo: «Si eres Hijo de Dios, di a esta piedra que se
convierta en pan.»
4
Jesús le respondió: «Esta escrito: No sólo de pan vive el hombre.»
5
Llevándole a una altura le mostró en un instante todos los reinos de la tierra;
6
y le dijo el diablo: «Te daré todo el poder y la gloria de estos reinos, porque a
mí me ha sido entregada, y se la doy a quien quiero.
7
Si, pues, me adoras, toda será tuya.»
8
Jesús le respondió: «Esta escrito: Adorarás al Señor tu Dios y sólo a él darás
culto.»
9
Le llevó a Jerusalén, y le puso sobre el alero del Templo, y le dijo: «Si eres
Hijo de Dios, tírate de aquí abajo;
10
porque está escrito: A sus ángeles te encomendará para que te guarden.
11
Y: En sus manos te llevarán para que no tropiece tu pie en piedra alguna.»
12
Jesús le respondió: «Está dicho: No tentarás al Señor tu Dios.»
13
Acabada toda tentación, el diablo se alejó de él hasta un tiempo oportuno.
Tercer domingo de cuaresma
Lucas 9:28-36
28
Sucedió que unos ocho días después de estas palabras, tomó consigo a
Pedro, Juan y Santiago, y subió al monte a orar.
29
Y sucedió que, mientras oraba, el aspecto de su rostro se mudó, y sus
vestidos eran de una blancura fulgurante,
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y he aquí que conversaban con él dos hombres, que eran Moisés y Elías;
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los cuales aparecían en gloria, y hablaban de su partida, que iba a cumplir
en Jerusalén.
32
Pedro y sus compañeros estaban cargados de sueño, pero permanecían
despiertos, y vieron su gloria y a los dos hombres que estaban con él.
33
Y sucedió que, al separarse ellos de él, dijo Pedro a Jesús: «Maestro, bueno
es estarnos aquí. Vamos a hacer tres tiendas, una para ti, otra para Moisés y
otra para Elías», sin saber lo que decía.
34
Estaba diciendo estas cosas cuando se formó una nube y los cubrió con su
sombra; y al entrar en la nube, se llenaron de temor.
35
Y vino una voz desde la nube, que decía: «Este es mi Hijo, mi Elegido;
escuchadle.»
36
Y cuando la voz hubo sonado, se encontró Jesús solo. Ellos callaron y, por
aquellos días, no dijeron a nadie nada de lo que habían visto.
Cuarto domingo de cuaresma Lucas 13:1-9
1
En aquel mismo momento llegaron algunos que le contaron lo de los galileos,
cuya sangre había mezclado Pilato con la de sus sacrificios.
2
Les respondió Jesús: «¿Pensáis que esos galileos eran más pecadores que
todos los demás galileos, porque han padecido estas cosas?
3
No, os lo aseguro; y si no os convertís, todos pereceréis del mismo modo.
4
O aquellos dieciocho sobre los que se desplomó la torre de Siloé matándolos,
¿pensáis que eran más culpables que los demás hombres que habitaban en
Jerusalén?
5
No, os lo aseguro; y si no os convertís, todos pereceréis del mismo modo.»
6
Les dijo esta parábola: «Un hombre tenía plantada una higuera en su viña, y
fue a buscar fruto en ella y no lo encontró.
7
Dijo entonces al viñador: "Ya hace tres años que vengo a buscar fruto en esta
higuera, y no lo encuentro; córtala; ¿para qué va a cansar la tierra?"
8
Pero él le respondió: "Señor, déjala por este año todavía y mientras tanto
cavaré a su alrededor y echaré abono,
9
por si da fruto en adelante; y si no da, la cortas."»