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Antídoto en Contra de Cansarse de Hacer El Bien - Thomas Watson

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ANTÍDOTO
en contra de
CANSARSE
de hacer el bien
 
THOMAS WATSON
(c. 1620-1686)
 
 
 
 
 
 
 
 
Primera edición: octubre de 2022
Copyright © 2022 Thomas Watson
Publicado por P&D Publicaciones
 
www.parkhurstdent.com
[email protected]
 
Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este escrito podrá ser
reproducido, almacenado o trasmitido de ninguna forma ni por cualquier medio,
sea electrónico o mecánico, ni por ningún sistema de almacenamiento sin el
permiso escrito previo de la editorial, con la excepción de citas cortas o reseñas.
Las citas bíblicas utilizadas fueron extraídas de la versión RVR60, a menos que
se indique lo contrario.
 
ÍNDICE
 
 
Abreviaturas
Prefacio
Introducción
Parte 1: Exposición de la doctrina

Capítulo 1: Exhortación a que no nos cansemos


Capítulo 2: Argumentación a que segaremos a su tiempo

Parte 2: Aplicación de la doctrina


Capítulo 3: Utilidad a modo de reprensión
Capítulo 4: Utilidad a modo de exhortación
Capítulo 5: Utilidad a modo de instrucción

Glosario de autores citados


 
SERIE DE ESCRITOS PURITANOS
 
 
La serie de escritos puritanos es una recopilación de diversos escritos
específicamente puritanos que P&D PUBLICACIONES se ocupará en poner a
disposición al pueblo de Dios de habla hispana. Estos escritos comprenden
diferentes sermones, catecismos, extractos de libros olvidados, tratados
pequeños que diferentes ministros puritanos han escrito en su época, y los
cuales hicieron gran beneficio en su tiempo. Los temas de estos escritos serán
diversos, como, por ejemplo, de vida cristiana, casos de consciencia, instrucción
cristiana, etc. El propósito que esta serie busca es primeramente la edificación
de la iglesia para la gloria de Dios, pero también procura que estos escritos sean
accesibles a todas las personas, de manera que muchos no se vean abrumados
con escritos extensos, y también que sean apropiados para regalar a un amigo
cristiano e incluso a aquellas personas que todavía no conocen a Cristo.
 
 
 

ABREVIATURAS
 
BCG Biblioteca clásica gredos
LCL Loeb Classic Library
PL Patrologiae latina
PG Patrologiae graeca
 
FD Fuente desconocida
LT Latín
GR Griego
HB Hebreo
PW Paráfrasis de Watson
LXX Septuaginta
Cf. Véase o compárese
 
 
 
 
PREFACIO
1. BIOGRAFÍA DE THOMAS WATSON

THOMAS WATSON (c. 1620-1686) fue un teólogo no-conformista;


fue educado en Emmanuel College, Cambridge, donde se
destacó por sus arduos estudios. Después de residir durante
algún tiempo con la familia de MARY , la viuda de SIR HORACE
VERE , barón de Tilbury, fue designado en 1646 para predicar
en St. Stephen’s, Walbrook.
Durante la guerra civil se mostró fuertemente
presbiteriano en sus puntos de vista, al tiempo que hallaba
adhesión al rey. Se unió a los ministros presbiterianos en
una protesta a Cromwell y al consejo de guerra contra la
muerte de CHARLES . En 1651 fue encarcelado, junto con
otros ministros, por su participación en el complot de
[CHRISTOPHER] LOVE para destituir a CHARLES II . Después de
algunos meses de prisión, Watson y sus compañeros fueron
liberados al hacer una solicitud de misericordia, y el 30 de
junio de 1652 fue restituido formalmente como vicario de
St. Stephen’s, Walbrook.
Obtuvo gran fama y popularidad como predicador hasta
la Restauración, cuando fue expulsado por no-conformidad.
A pesar del rigor de las leyes contra los disidentes, Watson
continuó ejerciendo su ministerio en privado cuando
encontraba oportunidad. En 1666, tras el incendio de
Londres, al igual que otros no-conformistas, habilitó una
gran sala para la adoración pública para quienes quisieran
asistir.
Tras la declaración de indulgencia de 1672, obtuvo una
licencia para el gran salón de Crosby House, que entonces
pertenecía a SIR JOHN LANGHAM , un favorecedor del no-
conformismo evangélico. Después de predicar allí durante
varios años, su salud recayó y se retiró a Barnston, en
Essex, donde fue enterrado el 28 de julio de 1686 en la
tumba de JOHN BEADLE , antiguo rector del lugar.
Un retrato, grabado por James Hopwood, se encuentra en
Nonconformist’s Memorial [Las memorias de los no-
conformistas] de CALAMY , editado por PALMER . Otro grabado
por JOHN STURT fue añadido a su A Body of Divinity [Un cuerpo
de teología] de 1692. Y un tercer grabado por FREDERICK HENRY
VAN HOVE fue añadido a su Art of Contentment [Arte del
contentamiento] de 1662.
Watson fue un hombre de considerable erudición, y sus
obras conservaron su fama mucho tiempo después de su
muerte. Según DODDRIDGE , su Christian Soldier o Heaven
taken by Storm [El soldado cristiano o el cielo arrebatado
con violencia] [1] fue el medio para la conversión del coronel
JAMES GARDINER (1688-1745). Su obra más famosa, Un cuerpo
de teología [2] apareció después de su muerte en 1692.
Consiste en 176 sermones sobre el catecismo de la
asamblea de teólogos de Westminster. [3]
2. SOBRE LA EDICIÓN DE ESTE ESCRITO

En primer lugar, el título de este escrito fue modificado.


Originalmente es Against being weary in well-doing [En
contra de cansarse de hacer el bien]. Solamente se le ha
añadido la palabra Antídoto , por la razón de que este
escrito es tiene la intención de animarnos con las recaídas
que podamos tener.
En segundo lugar, los títulos y subtítulos interiores fueron
añadidos por el traductor, de manera que al lector le pueda
ser más fácil entender la estructura de este sermón.
En tercer lugar, este escrito es parte de una serie de
sermones de Watson adjuntados al final de su obra Un
cuerpo de teología. [4]
En cuarto lugar, a lo largo de este escrito, Watson
menciona diversos autores que para el lector pueden ser
desconocidos, por lo tanto, se ha añadido UN GLOSARIO DE
AUTORES CITADOScon el fin de que el lector pueda familiarizarse
con los personajes históricos citados.
En quinto lugar, en la edición de tapa blanda de este
escrito se ha creado y añadido un índice de referencias
bíblicas y también de referencias de las citas y términos en
latín y griego citados por el autor.
En sexto lugar, este escrito ha sido traducido en su
totalidad sin que ninguna de sus partes haya sido omitida,
de modo que también las citas originales en latín y griego
de esta han sido traducidas y añadidas al escrito.
3. SOBRE EL CONTENIDO ESTE ESCRITO

Hace varios años, existió un joven miembro de cierta iglesia.


Durante su estancia en esta iglesia este joven percibió algo
en su ministro, observó que este parecía no tener fuerzas,
desmotivado o desanimado en su obra. Lo que vio fue
confirmado por la rogativa de su ministro a la congregación
de orar por él, porque estaba experimentado cansancio por
todas las cosas que estaban en su mano. Tras lo cual, el
joven se puso a pensar en cómo ayudar a su pastor, y una
de las formas que le vino a su mente para auxiliarle fue
buscar algún material adecuado para la condición de este.
Después de largas horas de búsqueda, se encontró con este
escrito de Watson Antídoto en contra de cansarse de hacer
el bien , y al leerlo primeramente fue confrontado y
animado él mismo, pero también lo consideró como muy
adecuado para el estado de su ministro. Posteriormente, se
propuso en regalarle una copia. Y el pastor, tras leerlo,
volvió a recobrar ánimo en su obra.
Esta historia nos proporciona una noción del contenido
de este escrito. En este somos animados, confrontados,
edificados, reprendidos y exhortados a persistir y ser
perseverantes en la carrera que tenemos por delante y
nunca desmayar en este llamado que nos hizo Dios. Es una
idea errónea la que considera que una vez cristianos
podemos acostarnos en un lecho y dormir con toda
tranquilidad sin preocuparnos de nada, pero no es así. La
vida cristiana es una vida de trabajo y servicio, es una vida
de lucha y confrontaciones, etc.
Por lo tanto, ¿tienes a algún hermano o ministro que se
halla en desánimo en la obra y vida espiritual? ¿Te
encuentras a ti mismo decaído por las lujurias que te
asedian, los reproches por ser cristiano, los sufrimientos que
experimentas en este mundo, por la dificultad de ser
creyente en este mundo malo? Sin duda alguna este es un
pequeño escrito que puedes leer y regalar a alguien más.
Cobra ánimo, hermano, la recompensa la tenemos por
delante.
Recordemos la historia del gran predicador George
Whitefield, un día antes de su muerte salió de viaje en
caballo en camino para predicar en Newbury Port, pero en el
camino lo importunaron grandemente para que predicara en
Exeter. Un amigo de él lo observó en una mala condición, y
le dijo: «Señor, la condición en la que se encuentra es más
para que vaya a reposar en su cama que para predicar».
Whitefield respondió a esto de la siguiente manera: «Cierto,
señor», y luego volteó a un lado, agarró sus manos juntas,
miró arriba y dijo: «Señor Jesús, estoy agotado en tu obra,
pero no de tu obra. Si todavía no ha terminado mi recorrido,
permíteme ir y hablar para ti una vez más en los campos,
sellar tu verdad, y venir a casa a morir». El día siguiente él
se encontró con el Señor para vivir de manera
bienaventurada, terminando su carrera cristiana en la tierra
con las botas puestas.
La historia de Whitefield es una que nos humilla
enormemente en cuanto al servicio al Señor, pero
recordemos esto, mis hermanos, no sabemos cuánto el
Señor nos llamará a Su presencia, por lo tanto, no nos
cansemos de hacer el bien, y estemos siempre en Su
servicio. Sigamos la exhortación de John Wesley: «Haz todo
el bien que puedas, por todos los medios que puedas, de
todas las maneras que puedas, en todos los lugares que
puedas, en cualquier tiempo que puedas, a toda la gente
que puedas, y tanto como tú puedas».
4. NOTA PARA EL LECTOR

Queremos hacer de consideración al lector que P&D


PUBLICACIONES es una editorial autosostenida, de modo que no
dependemos económicamente de ninguna institución,
solamente de las ventas de estos escritos. De la misma
manera, el trabajo detrás de la publicación de escritos como
estos es enorme, que va desde la traducción, revisión,
corrección, edición, etc., con el fin de cada escrito pueda
llegar al lector con la mayor calidad posible. Por lo tanto,
primeramente agradecemos profundamente de antemano a
aquellos que han tenido bondad para con nosotros en
comprar este material. En segundo lugar, exhortamos a no
piratear estos materiales, dado que nos afecta grandemente
para seguir publicando dichos escritos. En tercer lugar,
pedimos sus oraciones para con la editorial para tener la
capacidad de traer estas obras edificantes. En cuarto lugar,
damos la gloria al Señor por permitirnos y darnos el
privilegio de edificar a Su pueblo en diferentes partes del
mundo de esta manera. Solo a Él sea la gloria por los siglos
de los siglos. Amén.
 
 
 
INTRODUCCIÓN
No nos cansemos de hacer bien, porque a su
tiempo segaremos, si no desmayamos.
GÁLATAS 6:9

 
 
En los versículos anteriores al texto, el apóstol había
establecido una proposición: «Todo lo que el hombre
sembrare, eso también segará» (v. 7). El que siembra
pecado, segará dolor o angustia. El que siembra las semillas
de gracia, segará la gloria. En esto se halla la propuesta.
En el texto, el apóstol hace la aplicación: «No nos
cansemos de hacer bien». Nosotros que hemos sembrado la
buena semilla del arrepentimiento y la vida santa: «No nos
cansemos de hacer bien, porque a su tiempo segaremos, si
no desmayamos». [Hay en el texto, entonces, lo siguiente]:
 
I. La exhortación: «No nos cansemos».
II. El argumento: «A su tiempo segaremos».
 
Parte 1 :
EXPOSICIÓN DE LA DOCTRINA

 
CAPÍTULO 1:
EXHORTACIÓN A QUE NO NOS CANSEMOS

I. La exhortación: «No nos cansemos { μὴ ἐκκακῶμε ν }».


 En donde encontramos lo siguiente:
1. Algo implicado: que somos propensos a cansarnos de hacer el bien.
2. Algo expresado: que no debemos cansarnos de hacer el bien.

1. LO QUE ESTÁ IMPLICADO: QUE SOMOS PROPENSOS A CANSARNOS DE


HACER EL BIEN

Esta fatiga o cansancio no proviene de la parte regenerada,


sino de la parte carnal. El hundimiento de Pedro en el agua
no fue por la fe en Cristo, sino por el temor. Este cansancio
en la carrera cristiana es ocasionado por cuatro cosas:

A. ESTE CANSANCIO ES OCASIONADO POR LAS INJURIAS DEL MUNDO

«Mis enemigos hablan contra mí» (Sal. 71:10). La inocencia


no nos protege del reproche. Pero ¿por qué esto debería
cansarnos de hacer el bien? ¿Prescindirá el soldado de su
estandarte y se quitará el escudo debido a un pequeño
disparo? ¿No sufrió Jesucristo reproche por nosotros, cuando
los judíos le pusieron una corona de espinas en la cabeza e
inclinaron la rodilla en señal de desprecio? ¿Es una deshonra
para nosotros ser reprochados por hacer aquello que es
bueno? ¿Es una denigración para una virgen ser reprochada
por su belleza y castidad? Deberíamos llevar nuestros
reproches por Cristo como una corona sobre nuestras
cabezas. En este momento el Espíritu de gloria reposa sobre
nosotros: «Si sois vituperados por el nombre de Cristo, sois
bienaventurados, porque el glorioso Espíritu de Dios reposa
sobre vosotros» (1P. 4:14). Regium est bene facere et male
audire [Es majestuoso o de reyes que se hable mal {de
nosotros} por hacer el bien]. [5] El que cercena nuestra
reputación para que pese menos, hace que nuestra corona
sea más pesada.

B. ESTE CANSANCIO ES OCASIONADO POR LOS SUFRIMIENTOS QUE NOS


ENCONTRAMOS

Lo que puede causar cansancio en hacer el bien, son los


sufrimientos presentes a los que estamos expuestos.
«Estamos atribulados en todo» (2Co. 4:8). Como un barco
que tienes piratas disparándoles por ambas partes. La cruz
es la juntura de los santos [es decir, aquello que une y que
es común a los santos]. «Y también todos los que quieren
vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución»
(2Ti. 3:12). Pero ¿por qué esto debería cansarnos de hacer
el bien? ¿No es nuestra vida una guerra? No es más extraño
encontrarnos con sufrimientos por la piedad [6] que lo que un
marinero en encontrarse con tormentas o un soldado con
balas. ¿Acaso no consideramos bajo qué condiciones
entramos en la religión? ¿Acaso no prometimos o hicimos
votos en el bautismo de luchar bajo el estandarte de Cristo?
¿No nos dice nuestro Señor que debemos tomar la cruz y
seguirle ? ( cf. Mt. 16:24). ¿No es esto parte del legado que
Cristo nos ha dado? «Estas cosas os he hablado para que en
mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad,
yo he vencido al mundo» (Jn. 16:33). Nos gustaría participar
de la gloria de Cristo, pero no de Sus sufrimientos. Además,
¿no hay muchos hombres que sufren por sus pecados? ¿No
son las concupiscencias de los hombres los que los llevan a
un final inoportuno? ¿Sufren los hombres por sus pecados, y
pensamos que es demasiado si sufrimos por Cristo? ¡Cómo
se regocijó Pablo en los sufrimientos! «Mucha franqueza
tengo con vosotros; mucho me glorío con respecto de
vosotros; lleno estoy de consolación; sobreabundo de gozo
en todas nuestras tribulaciones» (2Co. 7:4). ¡Cómo agitaba
o apreciaba sus cadenas que llevaba por Cristo! Se gloriaba
de ello ώς γύνη φιλόκοσμο ς [como una mujer que se
enorgullece de sus joyas], [7] dijo Crisóstomo. ¿Por qué los
sufrimientos deberían hacernos desmayar? ¡Quién no
estaría dispuesto a pisar unas pocas espinas para poder
seguir hacia el reino!

C. ESTE CANSANCIO ES OCASIONADO POR EL RETRASO DE LA RECOMPENSA

Lo que puede provocar el cansancio de hacer el bien, es el


aplazamiento de la recompensa. Estamos propensos a
desanimarnos y a cansarnos si no tenemos inmediatamente
lo que deseamos. Todos estamos a favor de la paga
inmediata . Pero consideren lo siguiente:
1) La recompensa es dada cuando el trabajo esté
terminado

En primer lugar, nuestro trabajo aún no ha acabado .


Todavía no hemos consumado la fe . El siervo no recibe su
paga hasta que su trabajo esté hecho. Incluso la
recompensa de Cristo fue aplazada hasta que hubiera hecho
Su obra. Cuando completó nuestra redención y dijo en la
cruz: «Consumado es», entonces entró en la gloria. Dios
considera que no es adecuado que tengamos nuestra paga
de antemano.
2) Dios aplaza nuestra recompensa para que la
atesoremos más después

En segundo lugar, Dios aplaza la recompensa para que el


cielo sea más bienvenido. Quo longius defertur eo suavius
laetatur [Cuanto más tiempo dure el aplazamiento, más
dulce será el regocijo]. Después de todas nuestras
oraciones, llantos y sufrimientos, ¡cuán dulce nos será a
nuestro gusto el vino del paraíso! Es más, cuanto más se
aplace la recompensa, más grande será. Los viajes que
duran más, retornan más grandes [de cargamento].
D. ESTE CANSANCIO ES OCASIONADO POR LA DIFICULTAD DEL TRABAJO

Lo que puede provocar el cansancio de hacer el bien, es la


dificultad del trabajo del cristiano. Superas evadere ad
auras, hic labor hoc opus est [Salir a las auras de la vida,
eso es lo trabajoso]. [8] El cristiano no tiene tiempo para
quedarse en barbecho. Tiene muchos preceptos que
obedecer, promesas que creer y tentaciones que resistir.
Toda su vida es una carrera. Él debe velar y orar. Debe
mostrar no solo diligencia, sino violencia por el cielo. Pero
¿por qué debería esto cansarnos? La dificultad despierta
una mente noble. La vida del soldado tiene sus dificultades,
pero estas le levantan más el ánimo. Ama encontrar
dificultades y soportará la sangrienta lucha por una cosecha
de oro.
Además, donde existe el menor principio de gracia , hace
que el camino de la religión sea fácil y agradable. Cuando el
imán atrae, es fácil que el hierro se mueva. Cuando el
Espíritu de Dios atrae, nos movemos por el camino de la
religión con facilidad y deleite. Spiritu Sancto accenditur
voluntas eorum [Su voluntad se halla inflamada del Espíritu
Santo]. [9] El servicio de Cristo es libertad . «Andaré en
libertad» (Sal. 119:45). Servir a Dios, amar a Dios, disfrutar
de Dios, es la libertad más dulce del mundo. Asimismo,
mientras servimos a Dios, nos gratificamos a nosotros
mismos. Así como un hombre que cava en una mina,
mientras suda obtiene oro; de la misma manera, mientras
glorificamos a Dios, promovemos nuestra propia gloria.
2. LA SEGUNDA COSA EXPRESADA: QUE NO DEBEMOS CANSARNOS EN LA
CARRERA CRISTIANA

No debemos cansarnos en nuestra carrera. «No nos


cansemos de hacer bien». La palabra griega «cansarse {
ἐκκακεῖ ν }» significa retroceder como un cobarde en la
guerra . Que no sea así con nosotros. No nos retraigamos
del estandarte de Cristo. «Sujetemos firme nuestra
profesión» (Heb. 4:14). No solo debemos hablar de nuestra
profesión, sino que debemos sujetarla firme. Non pugnanti
sed vincenti dabitur Corona [La corona no se le da al que
lucha, sino al que vence]. [10]
 
CAPÍTULO 2:
ARGUMENTACIÓN A QUE SEGAREMOS A SU TIEMPO

II. El argumento: «A su tiempo segaremos, si no


desmayamos».
Para evitar que nos desmayemos, sepan que la
recompensa prometida está muy cerca. «Ahora está más
cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos»
(Ro. 13:11). Estamos solo a unos pocos días de la marcha a
la Canaán celestial. Son solo unas pocas oraciones y
lágrimas más, ¡y seremos perfectos en la gloria! Como dijo
ese mártir, el Dr. Taylor: «Solo me queda un peldaño más
por pisar y estaré en la casa de mi Padre». ¡Esperen solo un
poco de tiempo, cristianos, y sus turbaciones habrán
terminado y llegará el día de su coronación! Cristo, quien es
el oráculo de la verdad, ha dicho: «Vengo en breve» (Ap.
22:20). Y, sin embargo, la venida de la muerte puede estar
más cerca que la venida personal de Cristo, y entonces
comienza el bendito jubileo del santo.
 
 
Parte 2 :
APLICACIÓN DE LA DOCTRINA

 
CAPÍTULO 3:
UTILIDAD A MODO DE REPRENSIÓN

Esto reprende a los que están cansados de hacer el bien.


Estas son las estrellas fugaces: «Demas me ha
desamparado, amando este mundo» (2Ti. 4:10). Demas
abandonó a Dios y, después, se convirtió en sacerdote en
un templo de ídolos. [11] «Israel desechó el bien» (Os. 8:3).
Muchos se han despojado de la librea de Cristo; han dejado
el curso santo de vida. Se han convertido en mundanos o
libertinos. «Vosotros corríais bien; ¿quién os estorbó para no
obedecer a la verdad?» (Ga. 5:7). Es como si hubiera dicho:
«¿Por qué os cansasteis de vuestra carrera?» Es triste ver a
aquellos que anteriormente parecían ser santos eminentes,
estrellas de primera magnitud, y que ahora se hayan
apartado, y se abalancen a abrazar ya sea la Misa o el
Corán. Aquello que empieza en hipocresía termina en
apostasía. «Porque mejor les hubiera sido no haber conocido
el camino de la justicia, que después de haberlo conocido,
volverse atrás del santo mandamiento que les fue dado»
(2P. 2:21).
 
CAPÍTULO 4:
UTILIDAD A MODO DE EXHORTACIÓN

A modo de exhortación : «No nos cansemos de hacer el


bien».
 
Consideren lo siguiente:
CONSIDERACIÓN 1: EL CAMINO DE LA RELIGIÓN VERDADERA ES DE BUEN

TESTIMONIO  

«Por la fe alcanzaron buen testimonio los antiguos» (He.


11:2). ¿Nos cansaremos de lo que es nuestro honor? Si
ciertamente la religión cristiana fuera algo que trajera
vergüenza o pérdida (como los caminos del pecado),
entonces tendríamos razones para abandonarla y cansarnos
de ella. Pero esta trae honor. «Adorno de gracia dará a tu
cabeza» (Pr. 4:9). Además de nuestro honor, el curso santo
de vida trae gozo y deleite interiores. «Sus caminos son
caminos deleitosos» (Pr. 3:17). ¡Qué dulce música crea el
ave de la conciencia en el corazón! «Entonces las iglesias
tenían paz por toda Judea, Galilea y Samaria; y eran
edificadas, andando en el temor del Señor, y se
acrecentaban fortalecidas por el Espíritu Santo» (Hch. 9:31).
¿Por qué entonces deberíamos estar cansados de hacer el
bien?
CONSIDERACIÓN 2: LA BELLEZA DEL CRISTIANO RADICA EN MANTENERSE
EN LA PIEDAD SIN CANSARSE

«Mnasón, de Chipre, discípulo antiguo» (Hch. 21:16). Es un


panorama hermoso ver cabellos plateados coronados con
virtudes doradas. La belleza de algo se encuentra cuando
llega a ser consumado o finalizado. La belleza de una
pintura se encuentra cuando se dibuja en sus lineamientos
completos y se coloca en sus colores indicados y ordenados.
La belleza del cristiano se encuentra cuando ha consumado
su fe: «He peleado la buena batalla, he acabado la carrera,
he guardado la fe» (2Ti. 4:7). Fue la gloria de la iglesia de
Tiatira el guardar su mejor vino hasta el final: «Yo conozco
tus obras, y amor, y fe, y servicio, y tu paciencia, y que tus
obras postreras son más que las primeras» (Ap. 2:19).
CONSIDERACIÓN 3: LOS QUE SE CANSAN, NUNCA ACTUARON CON UN
PRINCIPIO CORRECTO

Aquellos que se cansan de hacer bien, muestran una señal


de que nunca actuaron en la religión a partir de un principio
correcto. Las cosas que proceden de un principio de vida no
cesan, como el latido del pulso. Pero las cosas que se
mueven de una fuente artificial pronto terminan, como el
movimiento de un reloj. Los corazones no sanos se mueven
solo a partir de la fuente externa de los aplausos o las
preferencias. Y cuando estos faltan, su aparente condición
de gracia cesa. Los naturalistas observan de la piedra
caledoniana lo siguiente: que no mantiene su virtud más
tiempo del que está envuelta en el oro. Por lo tanto, cuando
le sacan el oro, esta pierde su virtud. Los corazones falsos
no retienen su [aparente] condición de gracia más tiempo
del que están envueltos en las preferencias doradas.
Sácales el oro y perderán toda su aparente piedad. Los que
están cansados de hacer el bien, nunca sirvieron a Dios a
partir de la elección , o un principio de fe . Si no hay agua
en una cisterna, es porque no se alimenta de la fuente. Si
no hay religión en los hombres, es porque carece de esa
fuente de gracia de la fe que la alimenta.
CONSIDERACIÓN 4: DIOS NUNCA SE CANSA DE HACERNOS EL BIEN

Por lo tanto, no debemos cansarnos de servirle. La miel de


la misericordia está continuamente cayendo sobre nosotros.
Dios nos envía provisiones frescas cada día. Él nos da el
mejor de los trigos ( cf. Sal. 147:14; 81:16). Él no se cansa
de vigilarnos, sino que mantiene una guardia continua sobre
nosotros: «Porque le has salido al encuentro con
bendiciones de bien; corona de oro fino has puesto sobre su
cabeza» (Sal. 21:3). Dios no se cansa de detectar y derrotar
los complots de nuestros enemigos. ¿Y nosotros nos
cansaremos de entregarnos a Su servicio? Un rey que está
continuamente favoreciendo a sus súbditos con regalos y
dones, esos súbditos no tienen por qué estar cansados de
servir a su príncipe.
CONSIDERACIÓN 5: SI NOS CANSAMOS, ECHAREMOS A PERDER TODO EL
TRABAJO HECHO

Si nos cansamos y abandonamos la religión, hacemos nulo y


vano todo lo que hemos hecho. «Mas si el justo se apartare
de su justicia y cometiere maldad, e hiciere conforme a
todas las abominaciones que el impío hizo, ¿vivirá él?
Ninguna de las justicias que hizo le serán tenidas en
cuenta» (Ez. 18:24). El que ha estado sirviendo a Dios y
haciendo la obra de un ángel, una vez que se cansa y
desiste, deshace toda su obra y pierde la recompensa de la
recompensa. «El que corre media carrera y luego se cansa,
pierde la guirnalda». ¡Oh, qué locura es hacer el bien por un
tiempo y luego deshacerlo todo por la apostasía! Es como si
un artista con un pincel hiciera un dibujo hermoso, y luego
viniera con su esponja y lo borrara de nuevo.
CONSIDERACIÓN 6: OBSERVEN LOS EJEMPLOS DE LOS CRISTIANOS DEL
PASADO

Consideren los ejemplos de los que han continuado su


progreso incansablemente en la carrera cristiana. El apóstol
pone ante nuestros ojos una nube de testigos: «Por tanto,
nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande
nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado
que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que
tenemos por delante» (He. 12:1). Corramos con rapidez y
constancia. ¡Cuántos nobles mártires y confesores de
antaño han andado en los caminos de Dios, aunque estén
llenos de espinas! ¡Despreciaron las preferencias, se rieron
de los encarcelamientos, y su amor por Cristo ardía más
caliente que el fuego! Cuando Policarpo se presentó ante el
procónsul y este le ordenó negar a Cristo, él respondió: «He
servido estos 86 años a Cristo y no me ha hecho daño ni
una sola vez, ¿y lo negaré ahora?» [12] Tertuliano dijo que tal
era la constancia de los santos primitivos que los
perseguidores clamaban: «¡“Qué miseria es esta { quae
miseria est haec }”, [13] que estamos más cansados de
atormentarlos que ellos de soportar el tormento!» Sigamos
sus pasos, quienes por la fe y la paciencia heredan las
promesas.
CONSIDERACIÓN 7: UNA VIDA FIEL, DEDICADA Y FIRME SERÁ DE
CONSUELO EN LA MUERTE

Será nuestro consuelo en nuestro lecho de muerte, repasar


una vida bien empleada. Era el deseo de Agustín el poder
tener una «muerte cómoda y tranquila { ἐυθανασί α }». Si
algo hace que nuestra almohada sea cómoda en la muerte,
será esto: que no nos cansamos en la obra de Dios. Esto
será un cordial en el lecho de muerte. ¿Alguna vez conociste
a alguien que se arrepintiera en la muerte de haber sido
demasiado santo? Muchos se han arrepentido de haber
seguido demasiado al mundo, pero no de haber orado
demasiado, ni de haberse arrepentido demasiado. ¿Qué es
lo que ha hecho que la muerte haya sido dulce para ellos
sino el hecho de que han terminado la carrera y guardado la
fe?
CONSIDERACIÓN 8: CONSIDEREN LA GRAN RECOMPENSA AGUARDADA:
LA GLORIA
Piensa en la gran recompensa que tendremos si no nos
rendimos o no nos cansamos, y esa es la gloria y la
inmortalidad .

A. ESTA GLORIA ES PESADA

Es llamada «peso de gloria { βάρος δόξη ς }» (2Co. 4:17).


El peso aumenta el valor. Cuanto más pesada sea una
corona de oro, más vale.

B. ESTA GLORIA ES SATISFACTORIA

«Estaré satisfecho cuando despierte a tu semejanza» (Sal.


17:15). Esta gloria recompensará abundantemente todas
nuestras labores y sufrimientos. El gozo de la cosecha
compensará todo el trabajo de la siembra . ¡Oh, qué
cosecha segarán los santos! Siempre habrá tiempo de siega
en el cielo, y esta siega será a su debido tiempo. De esta
manera el apóstol dice en el texto: «“A su debido tiempo {
καιρῷ ἰδί ῳ }” segaremos». El agricultor no desea segar
hasta que sea el tiempo. No segará su maíz mientras esté
verde, sino cuando esté maduro. Así mismo segaremos la
recompensa de la gloria a su debido tiempo . Cuando
nuestro trabajo haya culminado, cuando nuestros pecados
hayan sido purificados, cuando nuestras gracias hayan
alcanzado su pleno crecimiento, entonces será el tiempo de
la siega. Por lo tanto, no nos cansemos de hacer el bien,
sino mantengámonos en la oración, la lectura y todos los
ejercicios de piedad.
 
CAPÍTULO 5:
UTILIDAD A MODO DE INSTRUCCIÓN

Medios para no cansarnos en la carrera cristiana


 
PREGUNTA: ¿Qué medios debemos usar para no cansarnos en
la carrera cristiana?
MEDIO 1: ELIMINAR LA PEREZA ESPIRITUAL

RESPUESTA 1 : Otium excutere [sacudámonos la pereza]


espiritual. La pereza dice: «Hay un león en el camino» (Pr.
26:13). El que es perezoso pronto se cansará. Este tipo de
persona está más dispuesta a acostarse en su sofá que para
correr una carrera. Es un extraño panorama ver a un diablo
ocupado y a un cristiano ocioso.
MEDIO 2: ORAR POR LA GRACIA PRESERVADORA

RESPUESTA 2: Si no queremos cansarnos, oremos por la gracia


preservadora. Era la oración de David: «Sosténme, y seré
salvo» (Sal. 119:117). Y era la oración de Beza: Domine,
quod Coepisti perfice, ne in portu naufragium accidat
[Señor, perfecciona lo que has comenzado en mí para que
no sufra el naufragio a la vista del paraíso]. [14] Para que nos
mantengamos firmes en la carrera cristiana, trabajemos por
estas tres gracias preservadoras: fe, esperanza y amor .

A. LA PRIMERA GRACIA PRESERVADORA ES LA FE

La fe evita el desmayo. La fe da substancia a las cosas que


no se ven, y las hace, por así decirlo, como presentes : «Es,
pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo
que no se ve» (He. 11:1). Así como el telescopio hace que
las cosas que están lejanas se vean cercanas, así también lo
hace la fe. El cielo y la gloria parecen estar cerca. El
cristiano no se cansará del servicio cuando tiene la corona a
su vista.

B. LA SEGUNDA GRACIA PRESERVADORA ES LA ESPERANZA

Credula vitam spes fovet [La esperanza anima los espíritus].


[15]
La esperanza es al alma lo que la encorchadura es a la
red, que evita que se hunda. La esperanza engendra
paciencia y la paciencia engendra perseverancia. La
esperanza es comparada con un ancla: «La cual tenemos
como segura y firme ancla del alma, y que penetra hasta
dentro del velo» (He. 6:19). El cristiano nunca se hunde
excepto cuando retira el ancla de la esperanza.

C. LA TERCERA GRACIA PRESERVADORA ES EL AMOR

El amor hace que el hombre nunca se canse. El amor puede


ser comparado con la vara de mirto en la mano del viajero,
que lo refresca y evita que se canse en su viaje. El que ama
al mundo nunca se cansa de seguir al mundo; el que ama a
Dios nunca se cansará de servirle. La razón por la que los
santos y los ángeles en el cielo nunca se cansan de alabar y
adorar a Dios, es porque su amor a Dios es perfecto, y el
amor convierte el servicio en deleite. Amen a Dios en sus
corazones y correrán en Sus caminos y no se cansarán.
 
GLOSARIO DE AUTORES CITADOS

ADAM, MELCHIOR (c. 1575-1622) fue un pedagogo, lexicógrafo e historiador


literario alemán.

AGUSTÍN DE HIPONA (354-430) fue un teólogo latino, padre de la iglesia, y


prolífico escritor. Entre sus obras más clásicas encontramos Confesiones y
Cuidad de Dios.

ALBIO TIBULO (55 - 19 a. C.) fue un poeta romano, el segundo en la secuencia


clásica de grandes escritores latinos de elegías que comienza con Cornelio
Galo y continúa a través de Tibulo y Sexto Propercio hasta Ovidio. Quintiliano
consideraba a Tibulo el mejor de todos ellos.  

CRISÓSTOMO, JUAN (c. 349-407) fue un cristiano eminente, obispo de


Constantinopla, considerado como uno de los padres de la iglesia.

DOROTEO DE TIRO (c. 255 - 362) se supone que fue obispo de Tiro alrededor del
año 300 d. C. Se dice (no por los escritores contemporáneos, sino por los
martirologistas posteriores) que sufrió mucho en las persecuciones bajo
Dioclesiano, y que sufrió el martirio bajo Juliano en el año 363 d. C.

IGNACIO DE ANTIOQUÍA (35-110) es uno de los padres de la Iglesia y, más


concretamente, uno de los padres apostólicos por su cercanía cronológica
con el tiempo de los apóstoles.

PLUTARCO, LUCIO MESTRIO (c. 46 o 50 - c. 120) fue un historiador, biógrafo y


filósofo moralista griego.

POLICARPO DE ESMIRNA (69 - 155 d. C.) fue obispo griego de Esmirna y padre
apostólico que fue la principal figura cristiana del siglo II en la Asia romana
en virtud de su obra durante la aparición inicial de la literatura teológica
fundamental del cristianismo. Históricamente, constituyó un vínculo entre la
época apostólica y la patrística.

TEODORO DE BEZA (1519-1605) fue un humanista, teólogo calvinista francés y


reformador ginebrino.

TERTULIANO (c. 160-225) fue un escritor eclesiástico de los siglos II y III, siendo
hijo de un centurión al servicio del proconsulado. Teólogo latino de Cartago,
África.

VIRGILIO, PUBLIO MARÓ N   (70 a. C. - 19 a. C.) fue considerado por los romanos
como su mejor poeta, conocido por su obra la Eneida .

 
 
 
 

[1]
No hace mucho una edición y traducción completa de esta obra fue
realizada por la editorial TEOLOGÍA PARA VIVIR . Véase Thomas Watson, El Soldado
Cristiano: Extendiendo el Reino de los Cielos con violencia santa , ed. Jaime
Daniel Caballero (Teología para vivir: 2020).
[2]
La editorial ESTANDARTE DE LA VERDAD ha traducido este gran libro de Watson
en tres volúmenes. Véase Thomas Watson, Tratado de Teología (Banner of Truth:
2013). Thomas Watson, Los Diez Mandamientos (Banner of Truth: 2014).
Thomas Watson, El Padre Nuestro (Banner of Truth: 2013).
[3]
Esta biografía fue tomada de DICTIONARY OF NATIONAL BIOGRAPHY, 1885-1900 ,
Vol . 60 por Edward Irving Carlyle.
[4]
T homas Watson, « Against being weary in well-doing » en A Body of
Practical Divinity (London: 1692), pp. 994-997.
[5]
Plutarco, Moralia, 181.32F [BCG 103:44].
[6]
Literalmente: «Religión».
[7]
Juan Crisóstomo, Ad populum Antiochenum , hom. 16.4 [PG 49:467].
[8]
Virgilio, Aeneis, 6.125 [BCG 166:306]. Literalmente en LT: «Superasque
evadere ad auras, hoc opus, hic labor est».
[9]
Agustín de Hipona, De correptione et gratia liber unus , cap. 12.38 [PL
44:939].
[10]
Agustín de Hipona [FD].
[11]
Doroteo de Tiro, Synopsis de vita et morte prophetarum, apostolorum et
discipulorum Domini .
[12]
Octoginta et sex anui sunt, ex quo servio ei, nec me ulla affecit injuria;
et quomodo possim maledicere regimeo, qui salvum me fecit? [Ochenta y seis
años le he servido y nunca me hizo algún daño, ¡cómo entonces puedo
blasfemar a mi Rey y Salvador!] —Ignacio de Antioquía, Epistola Circularis [PG
5.9:1035].
[13]
FD.
[14]
Melchior Adam, «Vita Bezae» en Dignorum laude virorum, quos musa
vetat mori, immortalitas seu Vitae …  (Francofurti ad moenum: 1706), p. 118.
[15]
Albio Tibulo, Elegías , 2.6.20-21 [BCG 188:336]. Otra traducción sería:
«La esperanza alienta mi vida».

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