LAS INVERSIONES
1.- ¿Qué es una inversión?
La definición de inversión se puede resumir en la acción de colocar capital o dinero en una actividad
económica, proyecto u operación con el objetivo de obtener un rendimiento económico a largo
plazo.
Básicamente se trata de no consumir en el corto plazo los ahorros o patrimonios que tenemos, sino
ponerlos a trabajar para que nos produzcan más beneficios a lo largo del tiempo.
Esto puede hacerse a través de la compra de objetos físicos que se revalorizan, materias primas,
bienes raíces, criptomonedas, o inversiones relacionadas con la compra de acciones, fondos de
inversión o Exchange-Traded Fund (ETFs).
De esta manera hacemos rendir nuestro dinero y logramos libertad financiera sin hipotecar nuestro
tiempo.
Factores fundamentales de una inversión
Toda inversión se rige por cuatro factores que son fundamentales para evaluar si es conveniente o
no hacerla. Veamos cada uno de ellos:
Rentabilidad
Se refiere al rendimiento esperado, es decir, al beneficio que esperamos tener por nuestra
inversión. Esto se mide según el porcentaje del dinero invertido. Además, la rentabilidad
contempla la relación entre el rendimiento esperado y el riesgo asumido: es decir, a mayor
rentabilidad, mayor riesgo.
Riesgo aceptado o asumido
Esto dependerá del perfil del inversionista, y cómo puede manejar la incertidumbre sobre el
rendimiento de su inversión y la posibilidad de pérdida del capital invertido.
Por ejemplo, los inversores más conservadores optan por productos de renta fija o depósitos a
plazo fijo, por considerarlos de bajo riesgo. Mientras, otros prefieren instrumentos financieros de
renta variable y otras inversiones que les dejen mayor rentabilidad.
Plazos
Aquí miramos el horizonte temporal de la inversión, es decir, si es a corto, mediano o largo plazo.
Toma en cuenta que una inversión extendida en el tiempo genera mejor rendimiento que aquellas
que se hacen a corto o mediano plazo.
Un ejemplo claro de esto podrían ser los bonos a corto plazo o bonos gubernamentales, que
además se consideran un instrumento de inversión seguro porque están cubiertos por varios
países.
Liquidez
En este punto se analiza en cuánto tiempo podremos recuperar nuestra inversión y cuál es el costo
que tendremos al convertirla en efectivo. Por ejemplo, los depósitos a plazo fijo nos permiten saber
cuándo redimiremos esa inversión y nos aseguran un determinado nivel de interés y vencimientos
de poca duración.
Haz que tu dinero crezca más que en el
La inversión es el acto de asignar recursos para la compra o creación de activos o de capital, es
decir el acto de no consumir esos recursos ahora para satisfacer necesidades en el presente, sino de
destinarlos a satisfacer necesidades en el futuro. Por eso la inversión está relacionada con el
ahorro, que es la postergación del consumo presente en aras del futuro. Toda inversión, por tanto,
se hace con la aspiración de beneficios que no existen en el presente.
La inversión es la clave del crecimiento económico y el progreso. Imaginemos que no hubiese
habido nunca inversión: en ese caso seguiríamos en las cavernas. Hemos progresado porque
alguien en el pasado decidió no consumir lo que tenía y dedicarlo a crear un capital que pudiese
darle un rendimiento mayor con posterioridad.
La inversión puede ser en objetos físicos, en maquinaria o edificios para vivir o para producir, o en
materias primas o bienes que sirven para producir otros bienes, y también puede ser financiera,
como cuando sacrificamos el consumo para comprar acciones o bonos. Podemos decir que cuanto
más invirtamos más ricos seremos nosotros y nuestro país. Sin embargo, así como podemos
consumir mal, también podemos invertir mal, y entonces...
Tipos de inversión y ejemplos de cada una
Existen varias opciones de inversión y en los últimos años muchas se han vuelto populares, su
clasificación depende del tiempo en el que se obtiene el rendimiento, por lo que se dividen en
inversiones a corto, mediano y largo plazo.
Las primeras tienen un periodo máximo de duración de un año y ofrecen plazos fijos y seguros. En
este artículo nos enfocaremos en las de largo plazo:
Bonos
Este es un tipo de inversión de renta fija, donde el inversionista coloca capital a varios años, con
vencimiento de entre 3 y 30 años, según las condiciones de la deuda, y recibe un monto anual de
rendimiento fijo establecido previamente.
Los bonos pueden ser públicos, es decir, emitidos por el Estado y en este caso se consideran de
bajo riesgo crediticio, o de inversión privada. Al comprar un bono, el inversionista es acreedor de
una porción de las deudas de instituciones o gobiernos.
Es más recomendable para los perfiles de inversionistas conservadores.
Un ejemplo son los bonos ‘M’, emitidos por el Gobierno Federal Mexicano, que pagan intereses
cada seis meses: esa tasa está preestablecida desde que se emiten y se mantiene a lo largo del
tiempo.
Acciones
Este es uno de los tipos de inversiones más populares y es la que suelen elegir quienes se inician en
este mundo. Sin embargo, es necesario contar con la asesoría adecuada o el conocimiento
apropiado para elegir bien dónde colocar el dinero y cuándo hacerlo.
Y es que si la empresa en la que inviertes crece y su valor aumenta, obtienes rendimientos al
vender tus participaciones. Pero si sucede lo contrario, podrías sufrir pérdidas.
En el caso de las acciones de la bolsa de valores se agrupan en índices según la capitalización de las
empresas.
Fondos de inversión
Los fondos de inversión son vehículos que toman el capital de varios inversionistas y lo invierten en
una cartera de instrumentos acorde a la estrategia del fondo. Existen fondos de inversión
enfocados en instrumentos de renta fija, variable o alternativos.
Suelen ser de manejo activo, es decir que la estrategia es ejecutada por profesionales de inversión
que deciden en qué invertir y buscan lograr rendimientos superiores a los del mercado en general
para los inversionistas del fondo.
Por ejemplo, en GBM contamos con GBMINT, un fondo cuya estrategia está enfocada en empresas
del mercado estadounidense. El equipo que lo maneja decide específicamente en qué empresas
invertir para conseguir mayor rentabilidad en comparación con la bolsa de valores de Estados
Unidos.
Fideicomisos de inversión
Se trata de uno de los instrumentos financieros con más transparencia en su manejo. Ayuda
principalmente a realizar una planeación patrimonial y funciona a través de un tercero que ofrece
resguardo a nuestros activos o dinero y a su vez se encarga de que esos fondos sean utilizados
correctamente para ofrecernos mayor rendimiento.
Los bienes que se gestionan en este tipo de fideicomisos pueden ser inmuebles, recursos en
efectivo, valores, derechos de pólizas de seguro y acciones, entre otros.
Materias primas
Esta es una de las opciones de inversión para aquellos perfiles más expertos, porque se necesita
conocimiento de los distintos mercados. Pueden colocar capital en el sector agrícola o ganadero, así
como el oro o el petróleo.
Todos estos tipos de inversión son válidos y cada uno tiene sus ventajas. Lo importante a la hora de
elegir dónde colocar tus recursos financieros es que estés bien asesorado, seguro del paso que vas
a dar y que escojas según tu perfil de inversionista.
Diferencias entre ahorro e inversión
Desde el punto de vista financiero, ahorro e inversión no son lo mismo. Ahorrar es renunciar al
desembolso de tu dinero en el presente para guardarlo y usarlo en el futuro. Por lo general, se
guarda sin correr riesgos, pero debes saber que tu dinero pierde valor en el tiempo por la inflación.
¿Qué es el PIB o Producto Interior Bruto?
El Producto Interior Bruto (PIB) mide el valor de todos los bienes y servicios producidos en un
período -normalmente un año- en una economía. El PIB es un indicador que se utiliza para conocer
la riqueza que genera un país.
El PIB se calcula trimestralmente, aunque el dato que se utiliza para medir el tamaño de una
economía -y realizar comparaciones entre países- es el PIB anual.
Un país está creciendo económicamente cuando la tasa de variación del PIB aumenta, es decir,
cuando el PIB de un año es mayor que el del año anterior. Esto significa que se incrementan de
forma general tanto el consumo como el gasto y la inversión.
Por contra, cuando el PIB disminuye, cae el consumo y se reduce el empleo y la inversión. Se habla
de recesión cuando se acumulan al menos dos trimestres con tasa de variación del PIB negativa.
¿Qué tipos de PIB existen?
El Producto Interior Bruto de un país se puede expresar en términos nominales o reales. Así, el PIB
nominal es el valor, a precios de mercado, de la producción de bienes y servicios finales producidos
durante un determinado periodo, mientras que el PIB real es el valor de dicha producción a precios
constantes (a precios de un año base específico). El PIB real permite expresar mejor el crecimiento
de una economía al no tener en cuenta en el cálculo el efecto del incremento de los precios.
Por otra parte, el PIB per cápita o renta per cápita mide la relación existente entre el nivel de renta
de un país y su población. Para ello, hay que dividir el Producto Interior Bruto (PIB) de dicho país
entre el número de habitantes
Fórmula del PIB: ¿cómo se calcula?
Existen varias maneras de calcular el PIB de una economía: o sumando el gasto total de los
consumidores en bienes y servicios finales; o agregando el total de rentas pagadas por las empresas
a los propietarios de los factores de producción; o bien sumando los valores añadidos brutos de
todas las empresas.
El método del gasto.
Corresponde a la demanda agregada, la suma del gasto de los consumidores en bienes y servicios
finales durante un periodo de tiempo. La fórmula es la siguiente:
PIB = C + I + G + X – M
Donde:
C es el consumo.
I, la inversión.
G, el gasto público.
X, las exportaciones.
M, las importaciones.
El método del ingreso.
Es el resultado de la suma de los ingresos que perciben los propietarios de los factores productivos
(trabajo y capital) durante un periodo de tiempo. La fórmula es:
PIB = RA + EBE + Impuestos - Subvenciones
En donde:
RA equivale a la remuneración de los asalariados.
EBE es el excedente bruto de explotación.
El método del valor agregado.
Se suma el valor agregado bruto que se genera en la producción de los bienes y servicios de una
economía en un periodo determinado de tiempo. Su fórmula es:
PIB = VAB + Impuestos – Subvenciones
En donde:
VAB equivale al valor agregado bruto.
Cualquiera de estas tres fórmulas para calcular el PIB da el mismo resultado.
2.-METODOS DE CALCULAR PIB
Hay tres formas de hacerlo y, como parece obvio, los resultados a los que se llegue utilizando cada
uno de los métodos deben coincidir entre sí.
- Método del gasto: consiste en sumar todos los gastos finales o demanda agregada de los distintos
agentes de la economía. Es decir, se trata de sumar el valor a precio de mercado de todas las
compras realizadas de bienes y servicios finales. Esto incluye: el consumo de hogares e instituciones
sin fines de lucro (C), la inversión de las empresas y familias (I), el gasto en consumo final del sector
público (G) y el valor de las exportaciones netas (valor de las exportaciones (X) menos valor de las
importaciones (M)).
PIB = C + I +G + X – M
- Método del valor añadido: si una manera de calcular el PIB consiste en sumar los gastos, parece
lógico pensar que otro método se base en la suma de las ventas u oferta de los productores (lo que
se compra debe ser igual a lo que se vende). El problema está en que este procedimiento produciría
duplicidades; es decir, se sumaría varias veces el valor de un mismo producto, dado que los
productos finales de un productor son, a menudo, un consumo intermedio de otro. Por ejemplo, si
sumamos el valor de las ventas de una empresa de ruedas y el valor de las ventas de una empresa
de coches, el valor de las ruedas se cuenta dos veces (como ruedas y como componente del coche).
Finalmente, si restamos los Impuestos indirectos netos de subvenciones al Valor Añadido Bruto
Total, obtenemos el PIB.
PIB = VAB(total) + (Tiind - Subv)
- Método de las rentas: consiste en la suma de tres elementos: las rentas de los asalariados (RA), el
Excedente Bruto de Explotación (EBE) y los Impuestos indirectos netos de subvenciones (Tiind -
Subv).
La renta de los asalariados incluye salarios, compensaciones extra-salariales y cotizaciones de las
empresas a la seguridad social. Por su parte, el EBE refiere a intereses, alquileres y beneficios de los
inversores.
PIB = RA + EBE + (Tiind - Subv)
3.- EJERCICIOS DE CADA MÉTODO