ANATOMIA
TEMA:
CARTILAGO Y HUESOS
INTEGRANTES:
DANY MAYELY ARMERO LOPEZ
VICKY ANDREA BENAVIDES LUNA
DORA ELISABETH CHAVEZ
PAULA CATALINA DIAZ CUCARDO
MONICA LILIANA PASTUZAN
INTRUCTOR:
ANA MARIA CRUZ
SERVICIO NACIONAL DE APRENDIZAJE SENA
GESTION DE LA SEGURIDAD Y SALUD EN EL TRABAJO
22 - MARZO - 2024
PASTO (NARIÑO)
CARTILAGO Y HUESOS
Cartílago
Tejido fuerte y flexible que reviste las articulaciones y da estructura a la nariz, los oídos, la
laringe y otras partes del cuerpo. Carece de vasos sanguíneos y nervios (excepto el
cartílago articular) y está formado por una matriz flexible que le permite soportar fuerzas
mecánicas. Se relaciona con tres diferentes tipos de células:
Células condrogénicas.
Condroblastos.
Condrocitos.
Células condrogénicas: Son células pequeñas y fusiformes.
Condroblastos: son células derivadas de las células condrogénicas mediante
diferenciación. Los condroblastos localizados en la periferia de las placas de cartílago
comienzan a sintetizar matriz, lo que propicia el crecimiento del cartílago. Este proceso se
conoce como crecimiento aposicional.
Condrocitos: son las células ovaladas, de núcleo prominente, cuya membrana presenta
una gran cantidad de microvellosidades.
De manera característica, los condrocitos que sufren una o dos divisiones mitóticas se
organizan en pequeños grupos atrapados en lagunas denominados grupos isógenos, que
continúan con la producción de una matriz cartilaginosa de glucosaminoglucanos altamente
sulfatados, que recibe el nombre de matriz territorial encargada del crecimiento intersticial
del cartílago.
Tipos de cartílagos
1. El cartílago hialino contiene fibras de colágeno de tipo II en la matriz, que es el cartílago
más abundante del organismo y tiene muchas funciones.
2. El cartílago elástico contiene, además de fibras de colágeno de tipo II, una gran cantidad
de fibras elásticas dispersas en la matriz, que le dan más flexibilidad.
3. El fibrocartílago posee fibras de colágeno densas y gruesas de tipo I en la matriz, que le
permiten soportar fuerzas de tracción intensas.
HUESOS:
Los huesos proporcionan sostén a nuestros cuerpos y ayudan a darles forma. Aunque sean
muy ligeros, los huesos son lo bastantes resistentes como para soportar todo nuestro peso.
Los huesos también protegen los órganos de nuestros cuerpos. El cráneo nos protege el
cerebro y conforma la estructura de la cara. La médula espinal, un canal de intercambio de
mensajes entre el cerebro y el cuerpo, está protegida por la columna vertebral (o espina
dorsal). Las costillas forman la caja torácica, que alberga el corazón y los pulmones en su
interior, y la pelvis ayuda a proteger la vejiga, parte de los intestinos y, en las mujeres, los
órganos reproductores.
Los huesos están compuestos por un armazón proteico de colágeno, calcio Y la vitamina D.
Los huesos están compuestos por dos tipos de tejido óseo:
El hueso compacto (o hueso cortical): es la parte sólida, dura y más externa del hueso.
Tiene el aspecto del marfil y es sumamente resistente. Su interior está lleno de orificios y
canales, atravesados por vasos sanguíneos y nervios.
El hueso esponjoso: que, como indica su nombre, se parece a una esponja, y se
encuentra dentro del hueso compacto. Está formado por un entramado en forma de malla
compuesto por pequeños trozos de hueso llamados trabéculas óseas. Aquí es donde se
encuentra la médula ósea.
TIPOS DE HUESOS
Hay cinco tipos de huesos en el esqueleto: planos, largos, cortos, irregulares y
sesamoideos.
1. Los huesos planos protegen órganos internos
Hay huesos planos en la estructura ósea de la cabeza (occipital, parietal, frontal, nasal,
lagrimal y vómer), la caja torácica (esternón y costillas) y la pelvis (ilion, isquion y pubis). La
función de los huesos planos es proteger los órganos internos como el encéfalo, el corazón
y los órganos pelvianos. Los huesos planos son algo aplanados y pueden brindar
protección, como un escudo; los huesos planos también pueden proporcionar áreas
grandes para la unión de los músculos.
2. Los huesos largos soportan el peso y facilitan los movimientos
Los huesos largos, más largos que anchos, incluyen el fémur (el hueso más largo del
cuerpo), así como huesos relativamente pequeños en los dedos de las manos. La función
de los huesos largos es soportar el peso del cuerpo y facilitar los movimientos. Los huesos
largos se ubican principalmente en el esqueleto apendicular e incluyen huesos en los
miembros inferiores (la tibia, el peroné, el fémur, los metatarsianos y las falanges) y huesos
en los miembros superiores (el húmero, el radio, el cúbito, los metacarpianos y las
falanges).
3. Los huesos cortos tienen forma de cubo
Los huesos cortos tienen aproximadamente la misma longitud que ancho. Los huesos
cortos se ubican en las articulaciones de la muñeca y el tobillo y proporcionan estabilidad y
permiten algunos movimientos. Los huesos carpianos en la muñeca (escafoides, hueso
semilunar, piramidal, hueso ganchoso, pisiforme, hueso grande, trapezoide y trapecio) y los
tarsianos en los tobillos (calcáneo, astrágalo, navicular, cuboides, cuneiforme lateral,
cuneiforme intermedio y cuneiforme medial) son ejemplos de huesos cortos.
4. Los huesos irregulares tienen formas complejas
Los huesos irregulares varían en forma y estructura y, por lo tanto, no caben en ninguna
otra categoría (planos, cortos, largos o sesamoideos). Con frecuencia tienen una forma
bastante compleja, que ayuda a proteger órganos internos. Por ejemplo, las vértebras,
huesos irregulares de la columna vertebral, protegen la médula espinal. Los huesos
irregulares de la pelvis (pubis, ilion e isquion) protegen órganos de la cavidad pelviana.
5. Los huesos sesamoideos refuerzan tendones
Los huesos sesamoideos son huesos que están incluidos en tendones. Estos pequeños
huesos redondos habitualmente se encuentran en los tendones de las manos, rodillas y
pies. La función de los huesos sesamoideos es proteger los tendones del estrés y el
deterioro. La rótula, comúnmente denominada patela, es un ejemplo de hueso sesamoideo.
Diáfisis: es el cuerpo o porción cilíndrica principal del hueso. Los huesos de mayor longitud
del cuerpo se localizan en aquellas regiones que fueron diseñadas para realizar la mayoría
de los movimientos. Esas estructuras son las siguientes: el cúbito, radio, húmero, fémur,
tibia, peroné, clavícula, las falanges, metacarpianos y metatarsianos. Entonces, la diáfisis es
la zona media que pertenece a esos elementos óseos.
Epífisis: son los extremos proximal y distal del hueso. Se ubican solo en los huesos de
mayor longitud del cuerpo, es decir en tibia, peroné, fémur, húmero, cúbito y radio. Además,
es la zona que está más alejada de la diáfisis o cuerpo óseo.