LA PERSONA DESDE EL PUNTO DE VISTA JURÍDICO
Como vimos en el tema anterior el ser humano es un ser gregario por naturaleza; la vida en
sociedad es lo que hace de él una persona en todo el sentido de la palabra. En contacto con
otros humanos, el individuo va adquiriendo hábitos, valores, costumbres, ideas e incluso las
formas de ser, sentir y actuar del grupo que lo rodea, y así mediante el proceso de
socialización va forjando su personalidad. Interactúa permanentemente durante toda la
vida, y de esta forma nunca deja de aprender. Como resultado va desarrollándose como ser
único, con características propias, pero que a su vez se ve inmerso en una sociedad con
otros humanos, lo cual requiere necesariamente una organización. Dicha organización se da
mediante normas de conducta, entre ellas encontramos las morales, las sociales, las
religiosas y las jurídicas. Estas últimas son las que establece el Estado. Es mediante ellas
que el Estado garantiza el orden social, estableciendo límites al actuar humano,
estableciendo derechos y deberes a las “personas” que son miembros de esa comunidad, y
en caso de incumplimiento se aplica una sanción pudiendo obligar a los sujetos a cumplir
con ellas aún en contra de su voluntad.
Establecimos que la persona, se desarrolla mediante la interacción social, pero ¿qué
significa ser persona para la ley o desde el punto de vista legal?, pues para que ese ser
humano esté dotado de derechos y deberes en sociedad es necesario que el Estado lo
reconozca como tal. Además no debemos olvidar que como el individuo forma parte de
diversos grupos sociales, en todos ellos contrae derechos y deberes, muchos de ellos
reconocidos por la ley.
PERSONA desde el punto de vista jurídico (el sujeto de derecho)
La palabra persona proviene del latín “personae”, en la antigüedad era la máscara que
usaban los actores griegos en escena para representar a los personajes de la obra, y este
término fue utilizado luego desde el punto de vista legal en sentido figurado para expresar
el papel que el individuo pueda representar en la sociedad
Con el transcurso del tiempo ‘personae’ se refería al rol, ya no a la máscara. Y con el
devenir del tiempo incluso el significado de rol se perdió, actualmente con persona ya nos
referimos al ser humano. Y por esa figura del lenguaje y de la vida real se considera que
cada ser humano cumple un rol en la vida. es así que en materia jurídica se usó el término,
para dar a entender que lo verdaderamente relevante para el Derecho no es el sujeto en sí
mismo, sino todos esos roles o papeles que esa persona desempeña en sociedad y que
requieren una regulación jurídica (madre, estudiante, trabajadora, contribuyente, etc).
Así esta palabra es utilizada también en el lenguaje jurídico, por ende Persona es aquel ser
o ente, a quien el ordenamiento jurídico le reconoce voluntad para ser titular de derechos
subjetivos y de deberes. Persona es aquel ser o ente con voluntad que tiene derechos y
deberes fruto de su relación con sus semejantes. La “personalidad jurídica” es la aptitud
legal de una persona para ser titular de esos derechos y deberes. La personalidad es una
condición para ser titular de esos derechos y deberes, es entonces esa aptitud que le otorga
el ordenamiento jurídico a la persona.
Determinación de las personas
Con esto nos referimos: quienes son personas, o sea quienes tienen voluntad para
relacionarse con sus semejantes y provocar obligaciones. La ley reconoce dos tipos de
personas, las personas físicas y las jurídicas. El art. 21 del Código Civil establece: “Son
personas todos los individuos de la especie humana. Se consideran personas jurídicas,
y por consiguiente capaces de derechos y obligaciones civiles, el Estado, el Fisco, el
Municipio, y la Iglesia y Corporaciones , establecimientos y asociaciones, reconocidas
por la autoridad pública”. Estas últimas son agrupaciones o asociaciones de personas
físicas y/o bienes afectados a un fin común, lícito y reconocido por el ordenamiento
jurídico; son entes ficticios que por una razón de conveniencia jurídica son considerados
sujetos de derecho. A las personas jurídicas las crea el ser humano para satisfacer sus
necesidades que no pueden ser satisfechas en forma individual.
PERSONAS FISICAS: son todos los individuos de la especie humana, que por la
simple condición de tales son sujetos de derecho, o sea titulares de derechos subjetivos y
deberes jurídicos, pero no siempre fue así ya que en la antigüedad los esclavos por ejemplo
no eran considerados sujeto, sino objeto de derecho.
Si todos los individuos son “personas” para la ley, lo que debemos hacer es determinar
desde qué momento poseen esos derechos y deberes, o sea cuándo se inicia la personalidad
jurídica en las personas físicas. Con respecto a este punto existen tres teorías:
a) Teoría de la concepción: somos personas desde el nacimiento, su fundamento está en el
hecho de que Uruguay ratificó el Pacto de San José de Costa Rica en el año 85, y en el año
98 ratifica el Pacto de Derechos del Niño de la O.N.U. según los cuales “se es persona
desde la concepción”.
b) Teoría del Nacimiento: Fundamentos Art. 21 del C. Civil “Son personas todos los
individuos de la especie humana……”. Individuo cuando nace y se separa de su madre.
Hay dos situaciones en la que el Código Civil se maneja con un criterio diferente, para
recibir por testamento o donación aplicamos el art. 835 C. Civil.
c) Teoría ecléctica o también llamada de la viabilidad: exige 3 requisitos para el
reconocimiento de la personalidad jurídica al sujeto: nacimiento, viabilidad, y vivir 24
horas de vida natural (o sea se computa desde el momento mismo del nacimiento)
Art. 835 C. Civil “....son incapaces para recibir testamento:1- el que no estuviera
concebido al tiempo de abrirse la sucesión o aunque concebido no naciera viable, esto es de
vida, y que no haya vivido 24 horas de vida naturales” Este artículo solo se aplica a los
concebidos no nacidos, para J. Andrés Ramírez para los demás casos se aplica el art. 21 .La
viabilidad hace referencia a la madurez, tiempo de gestación ( tiempo mínimo 180 días), y
el otro sentido que se entiende por viabilidad si la criatura tiene aptitud orgánica para
sobrevivir fuera del seno materno (por ej. Si nace sin cerebro).
La teoría moderna tiende a aceptar que el concebido es sujeto de derecho y en nuestro país
se entiende en general que se es persona desde ese momento, a no ser en el caso de la
filiación y la herencia en cuyo caso habrá que hacer un juicio que reconozca la
personalidad. La ley de herencia es la única que establece condiciones para ser reconocido
como persona, los cuales son que nazca vivo, viable (esto es sin ninguna enfermedad que le
impida tener posibilidades de seguir viviendo) y vivir 24 horas de vida natural.
Fin de la personalidad jurídica: con la muerte.
CAPACIDAD JURÍDICA: Es la cualidad del agente que realiza el acto, exigida por la ley
que le permite extraer consecuencias jurídicas de sus actos; es la aptitud para poseer
derechos y está implícita en la personalidad. Hay dos tipos de capacidad:
a) de goce: todos la tenemos pues implica la aptitud para poseer derechos y si el Código
Civil establece que todos los individuos de la especie humana son personas (sujetos de
derecho), entonces todos somos capaces.
b) de ejercicio: es la posibilidad de ejercer esos derechos por nosotros mismos, sin tener
que actuar a través de otros, y no todos la tenemos. Cuando el sujeto no puede ejercer
sus derechos la ley lo declara incapaz, En ese caso la ley lo protege colocándole como
custodia institutos que los representan y los asisten en la vida jurídica (Patria potestad y
Tutela; ambas ejercidas sobre menores de edad, y Curatela; ejercida sobre incapaces
mayores de edad). La incapacidad deriva entonces de algún impedimento legal que la
ley establece para aquéllos que no pueden valerse por sí mismos ya sea por falta de
edad o por alguna enfermedad que afecta en el sujeto su capacidad de razonar. La
capacidad es la regla y la incapacidad es la excepción. La capacidad plena o absoluta se
adquiere a los 18 años de edad, pues no solo poseemos los derechos, sino podemos
ejercer nuestros derechos por nosotros mismos salvo que tengamos alguna incapacidad
legal; la capacidad relativa la adquiere el menor cuando contrae matrimonio a partir de
los 16 años (puede dirigir su vida y administrar sus negocios pero con ciertas
restricciones).
INCAPACIDAD JURÍDICA: es la falta de la capacidad de ejercicio en la persona. Hay
dos tipos de incapaces:
a) Incapaces absolutos: Regulado en el art. 1279 del Código Civil, son aquellas
personas cuyos actos no producen efectos jurídicos, ni tampoco pueden contraer
ningún tipo de obligación, ni civiles, ni obligaciones naturales (son aquellas que no
son exigibles en juicio, que no dan lugar al acreedor a reclamar al deudor pero una
vez cumplidas el acreedor puede retener el pago) y no admiten caución ( caucionar
significa garantir, el legislador ha impedido que la persona que garante la obligación
de un incapaz absoluto sea compelido a cumplir con la obligación), sus actos no
tienen ningún valor y la nulidad no se puede subsanar.
Ellos son:
1. los dementes (toda persona que sufre una enfermedad mental que la imposibilita
para obrar reflexivamente, no puede producir con sus actos o manifestaciones de
voluntad, consecuencias de derecho). El Código Civil en el Art. 435 establece
que en el caso de los dementes el juez previo a dictar sentencia deberá escuchar
al supuesto incapaz y a dos peritos siquiatras que ayuden a determinar la
incapacidad del sujeto.
2. los sordomudos que no pueden darse a entender por escrito, ni por el lenguaje
de señas según la ley (requieren juicio, el juez será asistido por el intérprete de
señas que lo ayuda a determinar la incapacidad)
En ambos casos, se requiere declarar al sujeto interdicto. El interdicto es la
persona mayor de edad demente o sorda que no dándose a entender por escrito
ni por la lengua de señas, ha sido declarada incapaz por un juez y ha sido
inscripta la sentencia en el Registro de Actos Personales, Sección Interdicciones
(art. 438 del C. Civil). Cuando se trata de anular el acto de un interdicto y su
incapacidad ya está comprobada por la autoridad judicial, sus actos no tienen
valor, en cambio frente a una persona que no ha sido motivo de un juicio de
incapacidad, habrá que demostrar que en el momento de realizar el acto estaba
afectado de demencia y que la misma existía en forma evidente y pública; dicha
prueba se exigirá con una serie de requisitos y garantías dada la gravedad de
estas situaciones. El Código Civil establece que en el caso de los dementes el
juez previo a dictar sentencia deberá escuchar al supuesto incapaz y a dos
peritos siquiatras que ayuden a determinar la incapacidad del sujeto.
3. los menores impúberes, establecido en el art. 1280 del Código Civil (es el
varón menor de 14 años y mujer menor de 12 años.).
b) Incapaces relativos: son aquéllos cuyos actos son relativamente nulos o sea, sus
actos tienen validez en las circunstancias que establece la ley. La nulidad de sus
actos se puede subsanar (enmendar, corregir), ya sea por ratificación de los padres,
o por transcurso del tiempo (4 años desde que el menor se transformó en mayor).
Ellos son los menores púberes (varón de 14 años hasta cumplir 18 años y mujer de
12 a hasta cumplir 18 años), durante el período de la incapacidad relativa el menor
se encuentra habilitado para la realización de ciertos actos, por ej: celebrar
matrimonio, celebrar capitulaciones matrimoniales, otorgar testamento, administrar
su peculio profesional e industrial. Además, sus actos producen obligaciones
naturales (aquellas que no son exigibles en juicio, pero una vez que se cumplen el
acreedor puede retener el pago).
Por último, no debemos olvidar que la incapacidad legal por la que pasamos todos los
individuos, o sea la normal, es la que deriva de la minoría de edad. Si se toma en cuenta que
el sujeto no nace con autoconciencia, sino que ésta se va desarrollando a lo largo de la vida
en forma progresiva, es lógico que la ley si bien nos considere a todos sujetos de derecho
desde que nacemos, e incluso desde antes de nacer, no nos permita contraer obligaciones
por nosotros mismos hasta alcanzar los 18 años de edad. Es una presunción que hace el
legislador, que a los 18 años salvo que el sujeto tenga alguna enfermedad que afecta su
capacidad de razonamiento ya posee autoconciencia plena, o sea la madurez suficiente para
reflexionar acerca de lo que está haciendo y por lo tanto hacerse cargo de sus actos. No
olvidemos que la autoconsciencia se desarrolla progresivamente, por lo que es lógico hablar
de menores impúberes como incapaces absolutos y menores púberes como incapaces
relativos.