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Humanismo, Gestalt y Otros Enfoques Existencialistas y Fenomenólogicos.

Este documento introduce la terapia gestalt, su origen en la psicología gestalt y sus fundadores Fritz y Laura Perls. Explora conceptos clave como el campo psicofísico y enfatiza la importancia de la experiencia presente. También cubre influencias del existencialismo y la fenomenología.

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Humanismo, Gestalt y Otros Enfoques Existencialistas y Fenomenólogicos.

Este documento introduce la terapia gestalt, su origen en la psicología gestalt y sus fundadores Fritz y Laura Perls. Explora conceptos clave como el campo psicofísico y enfatiza la importancia de la experiencia presente. También cubre influencias del existencialismo y la fenomenología.

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INTRODUCCIÓN A LA TERAPIA GESTALT

_______________________________________________
Sebastián Santacruz, Psicólogo, Universidad Internacional SEK, Chile
Ximena Valiente y Loreto Velásquez, Psicólogas, UAHC, Chile
Pablo Lazcano, Psicólogo, Universidad de Concepción, Chile
_______________________________________________________________

ORÍGENES DE LA TERAPIA GESTALT

“Cuando se estableció la Psicología como ciencia en Alemania, de 1870 a 1880, se


consideró que su tarea principal consistía en el análisis de la mente en sus elementos
básicos. La Psicología de la Gestalt, fundada por Wertheimer, Kohler y Koffka poco antes
de la Primera Guerra Mundial, representó una reacción contra aquel punto de vista
tradicional de la Psicología antigua. Los gestaltistas en vez de buscar elementos mentales
prefirieron estudiar las configuraciones y patrones naturales que aparecen en la experiencia
directa. Así mismo, los gestaltistas se opusieron al behaviorismo de Watson, que analiza la
conducta partiendo de la dualidad estímulo-respuesta”. (Castanedo, 1997a, pp. 41)

En sus inicios gran parte de la Psicología de la Gestalt centró su interés en


investigaciones sobre la percepción; más tarde lo extiende a otros campos como el
aprendizaje, la conducta social y el pensamiento. Un aspecto fundamental de la Psicología
Gestalt consiste en que resulta estéril tratar de comprender los fenómenos por medio del
análisis de los elementos que la constituyen, (Castanedo, 1997a)

“La palabra Gestalt se refiere a una entidad específica concreta, existente y


organizada que posee un modelo o forma definida. Gestalt significa cómo se perciben en la
mente los objetos conocidos en la vida diaria”. (Castanedo,. 1997a , pp 44)

La Psicología de la Gestalt es también conocida como Teoría de Campo, debido a


que la Gestalt considera que la conducta tiene lugar en un medio ambiente que consiste en
un organizado sistema de tensiones y esfuerzos (fuerzas), análogos a los que se dan en un
campo gravitacional o en un campo electromagnético. (Castanedo, 1997a)

“Un concepto básico de la Psicología Gestalt es el ‘campo psicofísico’ que se


compone del ‘yo’ y el ‘medio ambiente conductual’. El campo psicofísico determina la
conducta, lo que por naturaleza es tanto psicológico como físico. Dentro del campo
psicofísico se encuentran los determinantes de las conductas que constituyen el yo y los
determinantes externos compuestos del medio ambiente conductual; del yo forma parte mi
ropa, mi familia, mi país. El medio ambiente conductual refiere a todo lo que es experiencia
o conocimientos conscientes; se determina por la distribución de fuerzas en el medio físico
o geográfico. Estas fuerzas o estímulos sensoriales actúan sobre los órganos sensoriales;
éstos a su vez sobre el sistema nervioso, y de ahí van a la mente”. (Castanedo, 1997a, pp.
45)

El enfoque Gestáltico en terapia surge de la obra de Fritz Perls. Perls nació en


Berlín en 1893 y muere en Chicago en 1970, de profesión neuropsiquiatra, se inició como
psicoanalista luego de su primer análisis con Karen Horney. En la década de los 20
desarrolla su interés por el psicodrama de Moreno y por la Psicología de la Gestalt con el
trabajo que realiza junto a Kurt Goldstein y a Lore Possner quien más tarde será su esposa
(Laura Perls). Posteriormente es influenciado por el psicoanalista Wilhem Reich. El aporte
más importante de Perls al desarrollo de la terapia Gestalt lo realiza durante su permanencia
en el Instituto Esalen en Big Sur, California, en los años 60 (Gaines, 1997, en Pizarro,
2001)

La Terapia Gestalt recoge aportes de la psicología Gestalt, del existencialismo, de la


fenomenología y del trabajo psicodramático. Los terapeutas que han desarrollado este
enfoque son Fritz y Laura Perls, Isadore Fromm, Jim Sinkin, Erving y Miriam Polster,
Joseph Zinker, Joel Latner, Gary Yontef y los chilenos Claudio Naranjo y Adriana
Schnake, entre otros. (Pizarro, 2001)

“Kurt Goldstein (1878 – 1967), psiquiatra y neurofisiólogo, puede ser considerado


como el primer teórico que extrapola nociones de la Psicología de la Gestalt o ‘de la
percepción’ al dominio de la psicoterapia. Demostró que las leyes de la forma implícitas en
la Psicología Gestalt tienen validez no sólo en el contexto fisiológico, sino también en el
organismo como un todo”. (Kris, 1990, en Gutiérrez, s/a, pp. 24)

Algunos autores vinculados a la Terapia Gestalt consideran que ésta no es el


complemento práctico de la Psicología Gestalt, sin embargo, el mismo Perls describe cómo
utiliza en su enfoque la premisa básica de la Psicología de la Gestalt: “...es la organización
de los hechos, percepciones, conductas, fenómenos y no los elementos individuales de los
cuales se componen, lo que los define y les da su significado específico y particular” (Perls,
1997, pp. 10)

“La Terapia Gestalt toma en cuenta el campo bio-psico-social en su totalidad,


incluyendo como parte básica la interacción organismo-ambiente”, “de esta forma esta
Terapia utiliza variables fisiológicas, sociológicas, cognitivas y motivacionales. Ninguna
dimensión relevante se excluye de la teoría básica del enfoque gestáltico”. (Castanedo,
1997a, pp. 32 – 33).

La noción moderna para enfatizar las situaciones de la vida presente o actual del
individuo es indiscutiblemente el “ahora”, siendo considerado éste como un concepto
funcional que se refiere a conductas ejecutadas en este preciso momento. Situar el acento
en lo inmediato, en las experiencias, conduce a una explicación del proceso de cambio.

Castanedo afirma que “Una gran mayoría de terapeutas cree que el cambio ocurre
como función del aumento de conocimiento, el insight y la toma de conciencia, difieren
entre ellos en cómo se define el conocimiento y qué clase de conocimiento necesita el
paciente. La clase de conocimiento que la Terapia Gestalt enseña se refiere a cómo una
persona distrae su atención del mundo sensorial de la experiencia inmediata. El mecanismo
con el cual el individuo sustituye el activo aquí y ahora en una situación emocional es un
objeto de estudio particular en la experimentación en Terapia Gestalt. Volviendo a darse
cuenta de este mecanismo, previamente fuera de la conciencia, la persona sometida a
Terapia Gestalt puede llegar a analizar el proceso que sirve de soporte o apoyo a su
conducta insatisfecha o inconclusa, de esta forma adquiere la capacidad de incrementar su
toma de conciencia en el futuro”. (Castanedo, 1997a, pp. 33)

La Terapia Gestalt considera la experimentación, el hacer, el vivir y el sentir, como


el eje primario del proceso terapéutico. La Terapia Gestalt es un enfoque experimental en el
sentido exacto del término: experi-mental, experimentar en uno mismo, o intentar captar
una vivencia del momento actual de la vida por medio de un hecho o hechos.

Postulados centrales de la filosofía existendalista y fenomenología

La filosofía existencial y la fenomenología constituyen el fondo más importante


para los conceptos de la psicología humanista y de la Terapia Gestalt.
Hacia mitad del siglo XX, concluye un largo período de guerras, donde el ser
humano puso su saber al servicio de la destrucción. Según Giannini (1985), en
este clima de beligerancia meramente suspendida (guerra fría), algunos filósofos
retoman como centro de su meditación el viejo tema de la vida humana y su
sentido. Vuelven a interesar Pascal, Jacobi y Kierkegaard, con lo que nace así el
existencialismo. La vida humana es percibida como breve y transitoria, lo que
implica que la vida en sí adquiere un valor intrínseco.
El existencialismo está en contra de la posición racionalista del hombre,
concretamente, contra el cartesianismo. A su vez, hace frente al idealismo
hegeliano que afirma que en la historia ocurre lo que es necesario que ocurra.
Para el existencialismo, el desarrollo de la filosofía desde Platón y Aristóteles,
hasta Hegel es desacertado, por lo que al descartarla se trata de empezar
completamente de nuevo (Quitmann, 1989).
La tesis fundamental del existencialismo es que la existencia precede a la esencia,
es decir, el hombre no posee una esencia como algo determinado, sino que la va
construyendo durante su existencia a través de su libertad.
El existencialismo pone énfasis en cómo los seres humanos viven sus vidas, en la
libertad, en la contemplación y exploración del ser humano. Su planteamiento va
en contra de las especulaciones abstractas y el cientificismo racionalista, esto implica que el
ser humano no se puede reducir a una entidad cualquiera, sea esta
la de animal racional, ser social, ente psíquico o biológico (García y García, 1996).
Soeren Kierkegaard fue el primero en llevar a cabo esta ruptura con la filosofía
tradicional en la primera mitad del siglo IXX. Propone que la verdad es la
subjetividad y que ser individuo es lo más propio e intimo del hombre, de ahí su
valor absoluto. Un siglo más tarde, Martín Heidegger retoma los planteamientos de
Kierkegaard. El filósofo esboza que el ser humano se encuentra existencialmente
en el acto de decidir o elegir: el ser humano se encuentra en cuanto tiene un
margen de libertad de movimientos que lo posibilitan, y a su vez el ser humano se
encuentra en cuanto él tiene que ser, tiene que decidir y elegir.
Martín Buber contribuye al existencialismo con su visión de dualidad del ser
humano, donde el individuo tiende a polarizarse hacia el individualismo o hacia el
colectivismo. Le da un valor especial a la relación dialogal en un encuentro
existencial. Esta relación se entiende como un diálogo existencial, donde dos
individuos se encuentran como personas, donde cada una es impactada por y
responde a la otra, una relación Yo - Tú. Para Buber no es una secuencia de
monólogos, sino una forma de contacto especializada.
En la misma línea, Jean Paúl Sartre plantea su supuesto fundamental: la libertad
humana. Desde el punto de vista del pensador, ser libre no es sinónimo de tener
éxito, sino de poder elegir; la relación con el no ser es la condición más importante
de la libertad, el ser humano debe luchar constantemente por que en la libertad
tiene que elegir. Adopta la concepción del tiempo de Heidegger, que se determina
desde el futuro: el comportamiento presente del ser humano está determinado por un
propósito, una meta, una intención, elementos situados en el futuro. La visión
Sartriana plantea que solo el ser humano está en situación de establecer una
vinculación entre lo inexistente y sus acciones momentáneas; ésta comprensión
de tiempo corresponde al pasado un significado que se determina a partir de un
futuro, es decir, los sucesos del pasado son hechos y no pueden cambiar, pero al
significado resulta el proyecto del instante sobre el futuro (Giannini, 1985).
La visión del hombre en el mundo del existencialismo nos entrega varios
conceptos clave para el modelo humanista y por ende para la TG: libertad y
miedo, elección y decisión, responsabilidad, estar en el mundo, condición
de presente. "Son aspectos del ser humano que se condicionan mutuamente, la
posibilidad y también la necesidad de la elección, la decisión y la responsabilidad
que de ella resulta, la equivalencia e intencionalidad así como estar en el mundo,
son aspectos que aparecen con diferente intensidad en los presupuestos de la
psicología humanista" (Quitmann, 1989, p. 286).
El método científico que utiliza el existencialismo es la fenomenología, o como
dice Joseph Zinker (1999, p.74), "la fenomenología es el lenguaje del pensamiento
existencia! en general". Esta tiene por objeto de estudio los hechos mismos que se
manifiestan en la realidad. Es una metodología para llegar al conocimiento de la
esencia, despojando al fenómeno de los elementos extraños que proceden del
exterior o del sujeto que conoce. Busca descubrir lo que es dado en la
experiencia, acercarse a los contenidos de la conciencia sin prejuicios ni teorías
preconcebidas por parte del observador. Aquí fue Edmund HusserI, quien continuando el
pensamiento de Franz Brentano, propone su tesis: la conciencia es siempre conciencia que
tiende a algo, es esencialmente intencional.

"Los pilares fundamentales del método fenomenológico son los conceptos


de intencionalidad de la conciencia y de reducción fenomenológica.-.La conciencia
se hace asequible al observador a través de su intencionalidad... Para lograr captar,
describir e investigar la intencionalidad de la conciencia, se hace necesaria la
reducción fenomenológica, que consiste en ser simple espectador que
ingenuamente contempla y vive su realidad, sin detenerse a reflexionar" (Capponi,
1987, p.44).

HusserI se opuso tanto al intelectualismo idealista como al empirismo


naturalista;describió el psiquismo humano como una relación con el mundo y planteó una
psicología fundamentada en lo intencional e intersubjetivo. La fenomenología,
según HusserI, no es conocimiento en sentido verdadero, sino un mirar espiritual,
una intuición (Quitmann, 1989). HusserI sostiene que la intuición inmediata es
necesaria para alcanzar la certeza, la cual a su vez sería de naturaleza distinta a
la analítica; es una certeza sin garantías donde el objeto simplemente es tal y
como se nos presenta.
El mismo autor se opone a una psicología puramente empírica y propone una
psicología eidética, que en lugar de describir los fenómenos tal como se nos dan
empíricamente y quedarnos en ellos, propone llegar hasta la esencia o "eidos" de
los mismos, donde se halla el fundamento de la verdad.
La fenomenología es un enfoque u orientación en psicología que consiste en una
exploración imparcial de la conciencia y la experiencia. "Los fenómenos son intuidos,
analizados, y descritos tal como aparecen en la conciencia sin ninguna
idea preconcebida. La intención de la psicología fenomenológica no es la de
sustituir a otros movimientos y orientaciones, sino la de complementarlos" (Misiak
y Sexton, 1973, p.42).
Una visión fenomenológica de la realidad implica una mirada en el aquí-ahora; es
una observación atenta sobre el fenómeno (donde el fenómeno observado es
inseparable del observador). Es una observación descriptiva, no interpretativa,
como lo sería el psicoanálisis y por tanto tampoco no es causalista ni pretende
explicar el pasado. Es un modo diferente al que usaría el método científico natural,
que creía que el sujeto que investiga puede ser objetivo respecto al objeto de
estudio. Giannini (1985) sostiene que la fenomenología es una disciplina que insta
a las personas a distanciarse de su forma usual de pensar, para poder apreciar la
diferencia entre lo que se está percibiendo y sintiendo realmente en el momento, y
lo que es residuo del pasado. Es la búsqueda de la comprensión basada en lo que
es obvio o revelado por la situación.

Psicología de la Gestalt y leyes de la percepción

La psicología de la Forma o Gestalt tiene su punto de partida cuando en 1910, el


psicólogo alemán Max Wertheimer (1880-1943) comienza a cuestionarse la
naturaleza de la percepción. Para él, las explicaciones convencionales de la
psicología, basadas en un supuesto mosaico de sensaciones combinadas o asociadas, no
justificaban el dato psicológico tal como se da inmediatamente y
dejaban de lado la totalidad y fluidez de la experiencia perceptual.
La Psicología del siglo XIX se había comprometido con el análisis de los
contenidos de la experiencia consciente siguiendo el ejemplo de la física, la
química y la fisiología. Estas ciencias, se habían consolidado adoptando métodos
analíticos que les llevaron a la división de sus objetos de estudio en moléculas,
átomos, tejidos y células de órganos.
Los escritos de Wertheimer sobre la percepción del movimiento aparente o
fenómeno "phi", dados a conocer en 1912, fueron la primera publicación del tema
Gestalt. Así, Wertheimer es considerado como el principal fundador de la Escuela
de la Gestalt, pero su tarea la realiza estrechamente asociado con sus colegas
Wolfgang Köhler (1887-1967) y Kurt Koffka (1886-1941). Los tres se propusieron
fundar una psicología que pudiera dar cuenta de lo significativo e inmediatamente
organizado de la experiencia psicológica consciente, conservando el espíritu
experimental y rechazando cualquier intento de descomposición de la vida
psicológica.
Los primeros gestaltistas estudian la percepción como se presenta y no forzada en
función del método de experimentación. Se acepta aquello que se presenta de
manera manifiesta; en esto consiste la actitud fenomenológica que impregna el
método de estudio adoptado por la Gestalt. Se capta inmediatamente lo genuino
de la experiencia psicológica, incluso los aspectos que no son específicamente
mensurables.
Fue en el área de la percepción donde la Gestalt produjo las contribuciones más
originales y valiosas, en particular en lo que se refiere a los principios de
organización del campo perceptivo visual. Sin embargo, su esquema teórico se
extendió también a otros aspectos cognitivos, como el aprendizaje, el
pensamiento, el razonamiento, los estudios de la personalidad, los fenómenos
grupales, entre otros.
Wertheimer, Köhler y Koffka, comenzaron con sus experimentos sobre la
percepción en la Universidad de Berlín. Entre los tres llamaron la atención a la
psicología de la época sobre la necesidad de revisar los paradigmas psicológicos
existentes, concretamente la psicología atomista experimental de Wilheim Wundt,
el asociacionismo y el conductismo de Watson.
Su idea principal consiste en que resulta improductivo tratar de comprender los
fenómenos analizando los elementos que lo constituyen. En vez de buscar
elementos mentales prefirieron estudiar las configuraciones y los patrones
naturales que aparecen en la experiencia directa. Se opusieron a estudiar algo tan
complejo como la conducta analizándola en forma de elementos, ya que
consideraban que esto destruye la unidad de los fenómenos que están siendo
estudiados. Una sintética expresión, que se convirtió en carta de presentación de
la Gestalt, permite resumir la posición que adoptan: El todo es más que la suma de las
partes
Wertheimer, Köhler y Koffka desarrollaron principios dentro del marco de la
psicología de la Gestalt como la "tendencia hacia una buena figura", "fenómeno de
figura y fondo", "campo psicofísico" y las "leyes de la Gestalt". Estos psicólogos
defendían la concepción de un campo de percepción unitario del ser humano y
diferenciaban en este campo la figura y el fondo; sobre esta base investigaron las
propiedades correspondientes a la figura y el fondo, y su dependencia mutua
(Quitmann, 1989).
"El campo psicofísico determina la conducta, significa lo que por naturaleza es
tanto psicológico como físico. Dentro del campo psicofísico se encuentran /os
determinantes de las conductas que constituyen el yo y los determinantes
externos compuestos del medio ambiente conductual. Del yo forma parte mi ropa,
mi familia, mi país. El medio ambiente conductual se refiere a todo lo que es
experiencia o conocimientos conscientes; se determina por la distribución de
fuerzas en el medio físico o geográfico" (Castañedo, 1983, p.44).
Los psicólogos de la Gestalt proponen el siguiente axioma: La percepción humana
no es la suma de los datos sensoriales, sino que pasa por un proceso de
reestructuración, que configura a partir de esa información una forma, una Gestalt,
que se destruye cuando se intenta analizar. En esencia, no percibimos conjuntos
de elementos, sino unidades de sentido estructuradas, o formas (Guillaume,
1973).
Frente a la interrogante sobre cómo se organiza la percepción, el mismo, autor
sostiene que la experiencia perceptiva es una totalidad en la cual la relación entre las partes
que la componen tiene significado a partir de las leyes de composición
de la estructura total de esa experiencia.
Partiendo de este principio de organización o estructura, los primeros gestaltistas
deducen que el valor de cada elemento que compone el campo perceptual
depende de la totalidad en la cual se halla incluido y que el mismo puede variar
cuando forma parte de otro contexto perceptivo al lograr un nuevo equilibrio. Lo
percibido, desde el inicio posee organización y significación.
Una hipótesis determinante para la comprensión de los fenómenos estudiados por
la Gestalt es la del isomorfismo, del griego (iso: aproximadamente igual y
morfismo: forma), que intenta dar cuenta de una identidad estructural entre el
plano de la experiencia consciente directa y los procesos fisiológicos subyacentes
a la misma. Köhler plantea sobre el principio del isomorfismo que "las unidades de
la experiencia corresponden a unidades funcionales en los procesos fisiológicos
subyacentes. Así, pues, también a este respecto se supone que el orden
experimentado constituye una fiel representación de un orden correspondiente en
cuanto a los procesos (fisiológicos) de los que depende la experiencia" (Köhler,
1947, p. 62). Esto quiere decir que los procesos de excitación neurofisiológica que
se encuentran en la base de los fenómenos psíquicos tienen el mismo carácter
estructural que éstos últimos, es decir, hay una correspondencia o isomorfismo
entre lo fisiológico y lo psíquico.
Los experimentos en el campo de la percepción visual y auditiva que realizaron los
psicólogos de la Gestalt, pusieron de manifiesto las leyes que nos permiten
percibir un mundo de configuraciones complejas. Estas leyes hacen énfasis en que todo lo
percibido es el resultado de procesos organizadores de la conciencia,
en donde la realidad que nos rodea no es absolutamente determinante (ver anexo
No 3). Según Köhler (1947), toda producción de conducta es una totalidad
organizada y con significado, ya que lleva consigo una cualidad estructural que no
puede reducirse a las partes que la componen.
Los psicólogos de la Forma plantean que se debe estudiar la experiencia
consciente como totalidad organizada y significativa: percibir una situación,
imaginarla, resolver un problema o producir una solución, sólo se pueden
comprender como fenómenos humanos si entendemos a la conducta como
"molar", como una totalidad organizada.
De la psicología de la Gestalt, la TG retoma la idea de fígura-fondo, entendiendo
por figura a aquella que llama nuestra atención dependiendo de la necesidad que
es predominante para nosotros en ese momento, emergiendo ésta de un fondo
indiferenciado dinámico. A su vez, la TG aplicó los principios de la Psicología
Gestáltica al postular que las personas emocionalmente saludables organizan su
campo de experiencia en necesidades bien definidas que les sirven de referencia
a la hora de organizar su conducta.

La Teoría Organísmica de Kurt Goldsteín

Influido por la psicología Gestalt, Kurt Goldstein planteó la teoría de que el


organismo funciona como un todo y la enfermedad lo modifica en su totalidad.
Consideraba al sistema nervioso central como una red, un aparato que siempre
funciona como un todo y cuya actividad se entiende cuando se utilizan los
principios de "respuesta de figura y fondo" de la psicología de la Gestalt. A su vez,
considera al mismo organismo como una totalidad o Gestalt.
Goldstein demostró que las leyes de la forma, introducidas por los psicólogos de
la Gestalt, no eran válidas sólo para estudiar la percepción en laboratorio ni se
restringían a los fenómenos fisiológicos, sino que eran útiles para entender a)
organismo como un todo. Es así que extrajo esas nociones para aplicarlas a la psicoterapia
para la cual desarrolló un concepto holístico de la autorreaiización
organísmica.
El organismo se mueve como un todo, en un estado de tensión entre "ser en
orden" y "ser en desorden" Se vive en un estado de "catástrofe", en donde se
produce una lucha productiva con el mundo. Esta vivencia permite a una persona ir hacia la
autorrealización: del desorden al orden y a un nuevo desorden.
Contrapone así un concepto freudiano de pasividad ante el mundo interior y el
entorno, en donde el organismo busca la reducción de la tensión por el displacer
que ésta le provoca. Goldstein sostiene que lo orgánico se motiva en la tensión, y
que ésta produce placer (Quitmann, 1989). "Llamamos normal o sano a aquel en
el que la tendencia a la realización sale desde dentro y al que supera las
perturbaciones, que se derivan del choque con el mundo, no por el miedo sino por
la alegría de superación" (Goldstein, 1939, en Quitmann, 1989, p.79)
La tendencia a la buena forma, según Goldstein, es una aspiración de
funcionamiento que posee todo ser vivo. El objetivo de esta tendencia es alcanzar
un estado y/o punto de equilibrio inestable, generando una variable de perpetua
oscilación, en espera de detonantes para su expansión. Todo organismo vivo
tiene la motivación de búsqueda de estímulos y condiciones que le permitan
mantener su estructura en continuo desarrollo.
Perls toma de Goldstein los conceptos de autorregulación organísmica, y el de
auto actualización: Ser lo que se es y no pretender ser otra cosa. Según Quitmann
(1989), la importancia de Goldstein para la TG se puede sintetizar en:

1. Elección y decisión como característica existencial del ser humano:


Más que la posibilidad de elegir y decidir, Goldstein plantea la necesidad de llevar a
cabo estas acciones.
2. Autorrealización como proceso organísmico unitario: El motivo
principal de la vida es la autorrealización como un proceso unitario y total.
3. Placer por la tensión: El organismo frente al entorno se presenta
como un sistema cerrado, manteniendo un contacto constante a través de sus límites.
4. Principios Gestálticos y/u holísticos: Teoría organísmica integra el
fenómeno de figura-fondo y la tendencia hacia una buena figura para todas las
funciones y fenómenos del organismo.
5. Comprensión fenomenológica de la ciencia: Análisis
fenomenológico de todo el organismo, que da paso al estudio de sus diferentes
partes bajo la premisa de su pertenencia a todo el organismo. Rechazo del
procedimiento atomístico en ciencias.

Psicoanálisis y la contribución de Wilhelm Reich

Perls en sus comienzos como terapeuta siguió los pasos de Freud, pero recibió su
formación psicoanalítica al analizarse con Karen Horney y Wilheim Reich.
Principalmente, Fritz Perls integra del psicoanálisis a la TG su noción de los
mecanismos de defensa (sobre todo el de evitación), el concepto de resistencia en
el proceso terapéutico y el trabajo con sueños. Perls no habla de la libido como tal,
pero integra este concepto en relación con la excitación o la movilización de
energía (Lafarga y Gómez del Campo, 1990).
Perls criticó al modelo Freudiano ortodoxo por su énfasis en el pasado y en el no
trabajar con el aquí y el ahora, como también por el hecho de tratar aspectos
psicológicos como si existieran aislados, no tomando al organismo como una
totalidad. ,
Para Perls (1976), el psicoanálisis es determinista, reduccionista, y le da mucha
importancia a la sexualidad. A su vez, considera que el psicoanálisis fomenta la parte
infantil del sujeto al concebir al pasado como causante de la enfermedad. El
autor considera que con el modelo psicoanalítico no se puede establecer un
contacto directo, más humano con el paciente, ni tampoco se puede tomar en
cuenta el aspecto corporal, incluyendo el contacto físico. Sostiene que el
psicoanálisis trabaja con las partes enfermas del paciente y no toma en cuenta
que se puede trabajar con las partes sanas. (Perls, 1976)
Wilheim Reich fue una de las influencias principales para el movimiento de Perls
del psicoanálisis a la teoría gestalt. Una de sus influencias es la regla de que los
recuerdos deben estar acompañados del afecto apropiado. Esta idea había sido
planteada por Freud, sin embargo fue Reich quien le dio mayor importancia y la
utiliza como elemento esencial en su terapia.
Hay varios aspectos comunes entre Reich y Perls; uno es la actitud de ambos en
cuanto a la enfermedad mental, los dos buscaban no solo la eliminación del
síntoma, sino además, que el sujeto se encuentre preparado en su futuro para
enfrentar situaciones difíciles sin de nuevo acudir a actitudes neuróticas. Para
Perls (1976), este objetivo se consigue mediante el logro del propio soporte por
parte del individuo, mientras que Reich señala que lo consigue a través de la
disolución de la armadura caracterial.
Uno de los aportes más significativos de Reich a la psicoterapia (y que fue
utilizado por Perls) fue el de tomar en cuenta el cuerpo, descubriendo la coraza
muscular como elemento de resistencia. Además, este autor introduce el, contacto
directo con el cuerpo en la psicoterapia, rompiendo así con el esquema psicoanalítico
clásico.

Budismo Zen y Taoísmo

El budismo zen y el taoísmo son dos influencias culturales importantes en TG.


Celedonio Castañedo en 1983, habla de los símbolos chinos Wu Gi (el círculo del
no comienzo) y Tai Gi (el Yin - Yan o círculo de diferenciación progresivo en
opuestos). Ambos son símbolos que le dan un sentido particular a la Gestalt, que
significan "yendo más lento" y "ponerse en contacto con".
En la TG se pretende experienciar, lo que muchas veces significa ponerse en
contacto con sentimientos primarios, indiferenciados y luego progresivamente irlos
diferenciando hasta que ambos polos son reconocidos. Se puede llegar a la idea
de que los opuestos dentro del mismo contexto están más cercanos entre sí que
cualquiera de los opuestos en relación con otro elemento fuera del contexto y aquí
se observa la paradoja de: el parecido de lo no parecido.
Una paradoja importante es la del cambio, la cual consiste en que uno crece
siendo más lo que uno es y no tratando de ser diferente. Así, Perls (1976) sostenía
que el hombre solo se puede trascender a sí mismo a través de su propia
naturaleza, donde el ser humano no puede ser otra cosa que lo que es su
naturaleza, donde tratar de ser diferente esta condenado al fracaso, ya que tal
finalidad es una violación a la integridad de la persona. Lo cual significa que el
sujeto puede decidir lo que debería ser y adaptarse a esa dirección sin de esa
forma perderse de sí mismo. Lo que debe hacer el sujeto es conocer su naturaleza
y dejar que fluya, se desarrolle y sea.
En el Taoísmo esta presente el principio de crear un vacío que permita que la
naturaleza se desarrolle en él, conociéndose esto como el proceso de quitarse del
camino de la corriente. Otro aspecto en el que se expresa la paradoja de la Gestalt
en el Tao es la forma de tratar con sentimientos o pensamientos indeseados; la
manera de eliminar estos sentimientos es aceptándolos primeros y luego
permitiendo su expresión.
Otras de las influencias del Taoísmo o del Zen en TG, es el hecho de no enfatizar
la importancia del pensar, para así evitar la racionalización, intelectualización, etc.
El pensamiento de alguna manera evita el contacto inmediato con la naturaleza y
por eso debe ser suspendido cuando este contacto sea requerido. Castañedo
(1983) plantea que algunas técnicas orientales fueron rechazadas por Perls, tales
como la meditación, que él sentía conducían a la catatonía.
En TG es importante el concepto de que el hombre siempre esta haciendo, nunca
es un ser acabado; para el Budismo lo necesario es ser antes que hacer.

Teoría de campo

“La Terapia Gestáltica es un enfoque de campo, puesto que estudia los fenómenos
que se dan en la experiencia. La teoría de campo surge y es comparable con la Teoría de
Campo Total de Einstein. Básicamente el ‘campo’ es el todo en el cual las partes están en
relación y en correspondencia inmediata unas con otras. El organismo en su medio o
espacio de vida constituye un campo (campo organismo/ambiente total)” (Henle, 1986, en
Gutiérrez, s/a, pp. 28)

El método de estudio de la teoría de campo es fundamentalmente descriptivo,


aborda los “qué” (estructura) y los “cómo” (funcionamiento). Esto es en vez de analizar el
campo como estructura con funcionamiento lineal-causalista (los “por qué”) (Yontef,
1995), y se basa en el modelo de Kurt Goldstein, uno de los pilares de la Psicología Social.

Como fenómeno figura/fondo, en la teoría de campo todos los acontecimientos y


cosas se constituyen de acuerdo a las condiciones del campo organismo/ambiente y de
acuerdo a las necesidades del preceptor. De acuerdo a esto, la realidad de cada organismo
se construye (de manera fenomenológica) según su situación, los intereses, necesidades,
recuerdos, percepciones anteriores, etc. De ese organismo (Store, 1998; Perls; 1995; 1998a,
en Gutiérrez s/a)

Yontef (1995) describe nueve características generales de la Teoría de Campo:

1) “Un campo es una red sistemática de relaciones: esto se refiere a que el campo es
definido como una totalidad de fuerzas que se influencian recíprocamente y que en
conjunto forman un todo interactivo unificado. Este todo cambia dinámicamente en
el tiempo.

2) Un campo es un continuo en el espacio-tiempo: el campo no puede ser analizado


como si fuera una estructura estática. En vez de esto se propone la concepción de
agrupación de conceptos en serie o en un continuo.

3) Todo es de un campo: las personas, los organismos y las percepciones sólo existen
como parte de un campo determinado y tienen significado solamente en la
interacción con ese campo.

4) Los fenómenos son determinados por todo el campo: cualquier evento, experiencia,
conducta u objeto es determinado por el campo al cual pertenece. El significado de
la experiencia deriva de la observación de la situación total.

5) El campo es un todo unitario: en un campo existe interacción entre todas sus partes.
El estado de una de estas partes depende de todas las demás y viceversa.

6) La realidad percibida se configura mediante la relación entre el observador y lo


observado: no existe lo absoluto ni lo objetivo. El observador afecta su objeto de
estudio y lo observado afecta también al observador.

7) El principio de Contemporaneidad: esto se refiere a que todo evento o proceso


ocurre en la actualidad del organismo, en el presente, en el aquí y el ahora. Cuando
se recuerda o se anticipa se hace desde el presente del campo.

8) Proceso: todo deviene: en el campo los fenómenos son un todo continuo más que
partículas desordenadas. El cambio, el movimiento es inherente al organismo. Todo
está en acción y en proceso.

9) Insight en constantes genotípicas: el insight es el proceso perceptivo que ocurre al


manifestarse las realidades significativas, es la formación de una Gestalt. Lo de
constante genotípica corresponde a relacionar lo que es específico al contexto
(manifestación fenotípica) con aquello que es constante de la situación”. (Gutiérrez,
s/a, pp. 29)
“La teoría de Campo es una referencia útil para estudiar un evento, una experiencia,
un organismo o un sistema. Esta teoría llama la atención sobre la totalidad y sobre el
movimiento. (Robine, 1999) El campo reemplaza la noción de partículas separadas y
aisladas. La persona en su espacio de vida constituye un campo”. (Simkin y Yontef, 1984,
en Gutiérrez, s/a, pp. 29)

Holismo de Jan Smuts

La esencia de esta idea de Smuts, utilizada por Perls en TG, es que toda la
naturaleza es una totalidad unificada o coherente. Se plantea que los elementos
orgánicos e inorgánicos del universo existen juntos en un proceso continuamente
cambiante de actividad coordinada. Una concepción holística del hombre toma en
cuenta el funcionamiento de su cuerpo, sus emociones, sus pensamientos, su cultura y sus
expresiones sociales, todo en un cuadro unificado. Esta ¡dea tiene
directa relación con la premisa de la psicología de la Gestalt en que el todo es
mayor que la suma de las partes. La TG plantea que "los elementos del universo
(orgánicos e inorgánicos) existen juntos en un proceso continuamente cambiante
de actividad coordinadora" (Latner, 1994, 15).

Teoría de la Indiferencia Creativa de S. Friedlander

Para integrar el concepto de polaridades a la TG, Perls utiliza la influencia de la


teoría de la indiferencia creativa de Sigmund Friedlander. En grandes rasgos,
ésta teoría basada en la afinidad de los contrarios, plantea que cada
acontecimiento consta de un punto cero a partir del cual surge la diferencia de
estos contrarios, los cuales demuestran en su contexto específico una gran
afinidad el uno por el otro. Encontramos ese punto cero a partir de confrontar la
diferencia de los contrarios y descubrir su simetría invisible. Su punto de unión,
el lugar en que ambos se neutralizan, el punto medio.

Psicodrama de Jacob Moreno

De Jacob Moreno, creador del Psicodrama, Perls toma para la TG el primer


método psicoterapéutico que introduce la actividad experiencia! en la sesión
terapéutica, en lugar de la exclusiva comunicación verbal. Le da gran importancia
al centramiento en lo corporal y al intercambio de roles en la terapia. Moreno es el
creador del recurso de la silla vacía utilizada en TG.

IDEAS Y CONCEPTOS FUNDAMENTALES DE LA TERAPIA GESTALT

Gestalt:

En la terapia Gestalt así como en la Psicología de la Gestalt, la característica


primordial de la función del organismo es la formación de Gestalten. El ambiente sin
diferenciar (la unidad organismo/ambiente) se denomina fondo o campo. El foco
sobresaliente de la atención y la actividad se llama formación de Gestalten o formación de
figuras. El proceso de satisfacción o de desaparición de las necesidades y de sus Gestalten
concomitantes recibe el nombre de destrucción de las Gestalten o destrucción de la figura.
“El patrón de la Gestalt es indivisible; la relación entre las partes no se puede cambiar sin
destruir esa Gestalt particular. Aunque pueden cambiar las mismas partes, si las relaciones
son las mismas, la Gestalt permanece intacta...El todo determina las partes, no es
simplemente la suma total.” (Latner, 1994, pp. 33)

En la formación de Gestalten existen ciertas cualidades que las caracterizan. Estas


se han agrupado bajo el término ‘Leyes o principios de la percepción’ o ‘leyes de la
Gestalt’. “A continuación se presentan cuatro de estas leyes:

1.Ley de la proximidad: los elementos que están más cercanos se


percibirán como un objeto coherente.

2.- Ley de la semejanza: los elementos que son vistos como similares se
percibirán como parte de la misma forma.

3.- Ley de la conclusión o cierre: la gestalt debe tener la cualidad de estar


completa de no ser así ésta buscará cerrarse.

4.- Ley de la prägnanz: en el campo se formará la mejor gestalt que


permitan las condiciones globales”. (Godoy 1999, en Gutiérrez, s/a pp.
25)

“La relación figura/fondo es la diferenciación y focalización de la atención de una


parte del ambiente en un lugar de centralidad e importancia para el organismo, sin que se
pierda el contacto de este organismo con el resto del medio. Una Gestalt es lo que resulta de
interés para el organismo y que necesita de su autorregulación, es la creación de figuras
que el organismo aprecia en el proceso de satisfacción de sus necesidades” (Latner, 1994,
en Gutiérrez, s/a pp .25). El organismo dirige su energía siguiendo a sus necesidades para
atender lo que le resulta más importante. Solamente lo que es determinante en forma
espontánea, puede provocar la concentración en un solo propósito. Este es un aspecto
necesario en la formación correcta de figuras. Seguir otro interés significa que el organismo
tiene que restringir su impulso natural. (Henle, 1986, en Gutiérrez. s/a)

“El campo o experiencia consciente, es decir, el medio ambiente conductual, se


descompone en figura y fondo”. “La figura destaca del fondo, siendo más sustancial y
compacta, mejor estructurada y más impresionante que el fondo. La figura trata de
mantener su constancia”. “Un todo organizado como una figura siempre será o llegará a ser
tan regular, simétrico, simple y estable como lo permitan las condiciones prevalentes; ésta
es la ley de prägnanz. Por otra parte una figura incompleta o abierta tiende a cerrarse o
completarse”, “este fenómeno opera en el pensamiento y en el aprendizaje”. “Un
problema no resuelto o una tarea específica no aprendida es una Gestalt incompleta que
origina tensión. Al resolver el problema, se efectúa el cierre y se descarga la tensión”.
(Castanedo, 1997a, pp. 45 – 46).
Se llama figura a la situación, objeto, sensación (interna o externa) que capta
nuestra atención en un momento dado y elimina todo lo demás de nuestra
atención, mandándolo al fondo (Amescua, 1995).
,
Una buena Gestalt es clara y la relación figura - fondo responde y es energizada
por el cambio del patrón de necesidades de la persona. Yontef (1995) plantea que una
buena Gestalt no es ni muy rígida e inflexible ni muy cambiante y sutil. El autor
advierte que el darse cuenta que logra la cura es aquel que forma una Gestalt
clara, con una figura organizada y energizada por la necesidad que domina a la
persona en cada momento.
El cierre gestáltico se refiere a la tendencia inherente al ser humano de completar
percepciones incompletas o confusas (Ley de la prágnanz, por ejemplo, una letra
hecha de puntos tiende a percibirse como si los puntos formaran una línea
continua). Celedonio Castañedo en 1983 plantea que el cierre se rige por el
principio de que el individuo lucha activamente para completar la percepción o
acción y no está satisfecho hasta conseguirlo. Es un proceso de equilibrio. Una
figura incompleta es una situación inconclusa.

Salud y enfermedad:

En toda filosofía terapéutica subyace una idea de salud, y es hacia ese lugar donde
el terapeuta orienta, de uno u otro modo, su quehacer y a su paciente. De la misma manera,
subyace una idea de enfermedad que, además de utilidades diagnósticas y pronósticas,
implica y determina toda la estructura del proceso terapéutico (Latner, 1994)

Para abordar el ‘funcionamiento anormal’ del organismo desde la Terapia Gestáltica


se hace necesario considerar dos puntos importantes. El primero es que los trastornos no
son ‘mentales’ sino del organismo. La división mente y cuerpo en Terapia Gestalt no existe.
Por lo cual a aquello que se denomina trastorno (ya sea físico o mental), es lo que en
contexto de la terapia Gestáltica se llama interferencia con el proceso de formación y
destrucción de la gestalt. Interferencias que distorsionan y desequilibran la tendencia del
organismo a la integración y el desarrollo (autorrealización) (Schnake, 1997; Yontef, 1997;
Latner, 1996 en Gutiérrez s/a). El otro punto es que estos trastornos del funcionamiento no
son categorías fijas. Si son usadas, solamente representan al paciente en referencia a los
procesos actuales. De esto, se deduce que, en Terapia Gestáltica la anormalidad es trabajada
en función de la salud. (Yontef, 1997; Kepner y Brien, 1989, en Gutiérrez s/a)

La caracterización del trastorno en la terapia Gestalt consiste, en términos de


diferencias, en la clase y calidad de la discrepancia del proceso Gestalt de formación y
destrucción de figuras en relación con su modo sano y normal. Se habla de trastornos del
contacto o apoyo, o de dificultades al permitir que persista o aparezca el punto cero, o la
incapacidad del paciente para dejar que se disuelvan las figuras después de que han dejado
de ser pertinentes. Se define anormalidad en relación con los mismos procesos que se
tienen en cuenta para describir la salud. (Latner, 1994).

En un intento por explicar la posición respecto a la “enfermedad mental” establecida


aquí, se utilizará trastorno, anormalidad, disfunción, interferencia y rompimiento en vez de
los términos tradicionales. Lo que se implica es enfermedad, es decir, ausencia del libre
funcionamiento. El funcionamiento sano, contiene en sí, vulnerabilidades. Nuestro contacto
con el medio significa que constantemente estamos expuestos a peligro. Además el proceso
de formación de la gestalt asegura que lleguemos a estar enfocados en nuestra atención en
algún punto. (Latner, 1994).

Los síntomas son expresiones de la vitalidad del organismo y ataques que se llevan
a cabo contra la propia vitalidad. Son expresiones de los conflictos de la persona. Se es al
mismo tiempo prisionero y carcelero, amo y esclavo. La gestalt está escondida, pero es tan
fuerte que aparece en forma de conducta sintomática del funcionamiento deteriorado. En la
terapia Gestalt los síntomas se entienden como intentos que se hacen para solucionar un
problema grave interno y de la mejor manera posible, dada la conciencia limitada de la
situación. De esta manera debería verse con claridad que desde el punto de vista de la
terapia gestalt los criterios aislados de salud son la capacidad continua de crear y destruir
gestalten. Si se puede abarcar el conjunto del medio y permitir a sus elementos que se
muevan a un solo ritmo, se está sano. En cambio, si el ambiente está empobrecido, las
figuras carecerán de la fuerza y la capacidad de hacer figuras puede tropezar con muchos
impedimentos. Una de las cualidades de las figuras que se hacen en dichas circunstancias
será su pobreza e inadaptación. De esta forma, la salud depende de la persona, pero también
depende de lo que el ambiente le permita a la persona. (Latner, 1994).

En cuanto a la concepción de trastorno mental, en la Terapia Gestalt no son


considerados como trastornos mentales, sino del organismo. La división en cuerpo y mente
es en sí una forma trastornada de pensar. La mente no es la que está enferma, es la persona
la que está enferma: todo el ser de la persona está enfermo. Aquello que se denomina
trastorno mental, es lo que en el contexto de la terapia Gestalt se denomina interferencia
con el proceso de formación y destrucción de la Gestalt, dichas interferencias acarrean
distorsiones y desequilibrios a nuestra integración básica. Son trastornos del
funcionamiento del yo. Estos trastornos del funcionamiento no son categorías fijas, o más
bien, las categorías son fijas pero no la conducta. En la Terapia Gestalt, se entiende que las
caracterizaciones de conducta sana y anormal son referencias de los procesos actuales.
Ellas representan al paciente en un determinado momento del tiempo, pero a medida que él
cambia, se piensa de él de forma distinta. (Latner, 1994)

En cuanto al concepto de salud, la Terapia Gestalt la refiere de la forma siguiente:


una conducta sana en los seres humanos debe ser una conducta integral. Cuando se tiene
salud se está a tono con todas las capacidades y con el proceso que hace ser lo que se es.
La persona se identifica con todas estas funciones vitales (Latner, 1994) Al funcionar
holísticamente, todo nuestro ser es una parte de nuestra actividad en movimiento.

La integración es un requisito previo para el funcionamiento satisfactorio del


desarrollo figura-fondo. Para crear Gestalt que satisfagan las necesidades, se tiene que ser
capaz de hacer una opción entre todas las posibilidades. Si no somos capaces de contar con
todas las partes de nuestro yo, nuestras gestalten serán correspondientemente débiles. Si
nuestra conducta está bien integrada, tendremos integridad, somos sinceros y auténticos.
(Latner, 1994).

La formación y destrucción satisfactorias de las gestalten es pues, otro aspecto de


una conducta sana. Esta es realmente, en la terapia Gestalt, la definición funcional de salud.
Ya que la formación de la gestalt es la función del organismo, la existencia de gestalten
claras y fuertes es el criterio central de la salud. La capacidad de formar gestalten
libremente y en forma apropiada, significa que la experiencia de vivir tendrá la profundidad
y la satisfacción que es característica de la salud. Este criterio es autónomo, coherente en sí
mismo y sin embargo común a cualquier realización concreta de una persona. No es
necesario que se comprendan o resuelvan todos los problemas y traumas que se han
acumulado en el transcurso de la vida para estar sano, ni es necesario no cometer faltas. Lo
primero no siempre es lo más atinado para la vida actual, y los errores también son
esenciales para la salud y la madurez. La capacidad de crear y destruir gestalten, ese
proceso a través del cual se vive a tono con las aptitudes, es a la vez la definición más apta
y sencilla de salud. Tener salud es poseer la capacidad de salir airosos con cualquier
situación con que se tropiece, y un buen éxito es la solución satisfactoria de las diversas
situaciones de acuerdo con la dialéctica de formación y destrucción de gestalten. (Latner,
1994).

Formar gestalten en un funcionamiento libre no quiere decir que no implique


esfuerzo. La salud no asegura que los obstáculos desaparezcan cuando se tropieza con ellos;
solo significa que hay que dedicarse a esa tarea específica con todos los recursos. Esta
actividad espontánea tampoco consiste en hacer aquello que se le antoje. Es hacer lo que se
desea cuando se está centrado, es decir, totalmente en conexión con uno mismo y con el
medio. (Latner, 1994).

Un concepto más amplio de la salud exige que se sepa lo que se necesita. La


persona se debe mantener en contacto con lo que es importante para ella. Para saber qué es
lo que se necesita, se debe saber y aceptar lo que se es en el momento presente, porque las
necesidades están enclavadas en la existencia en el aquí y ahora. Este requisito para una
buena formación de Gestalt implica su opuesto: se tiene que saber lo que no se es. Al
distinguir lo que se es y lo que no se es, la persona se puede distinguir también del resto del
campo. (Latner, 1994).

Solo cuando todos los elementos del campo existen como entidades separadas y
distintas, se pueden relacionar en forma significativa. Solamente cuando las cosas son
diferentes se pueden unir. En la interacción humana, un encuentro genuino exige que se sea
total y exclusivamente uno mismo. (Latner, 1994).

La integración incluye algo más que aceptar todos los deseos, necesidades,
procederes y aptitudes como partes de uno mismo. También exige reconocerse como parte
del ambiente. Para Perls un organismo sano, es aquel que se encuentra en contacto consigo
mismo y con la realidad (Perls, 1989) se debe vivir en una inserción creativa con el mundo
exterior y en relación armoniosa con el ambiente del que se forma parte. (Latner, 1994).
El aspecto final de un funcionamiento sano es la conciencia: sencillamente captar
con todo el alcance de los sentidos el mundo de los fenómenos que está dentro y fuera de la
persona, tal como se van presentando. La capacidad de percibir esto es la salud. Como la
formación de la Gestalt exige la organización de las partes distintas y pertinentes del
campo, un proceso implica que se tenga alguna experiencia con cada una de esas partes;
solo podemos manejar lo que conocemos. (Latner, 1994).

Lo que se requiere para la salud es tener una constante creatividad en estas circunstancias.
Ser capaz de permanecer en marcha a pesar de los obstáculos y solucionar la situación de
modo que nos satisfaga, eso es salud. Esto es, en cierto modo, un proceso con aspectos del
ambiente constantemente favorables. Al estar involucrados en la figura que se nos
presenta y en su solución se pone parte del ser en interacción con otras partes del ambiente:
otra gente, plantas, animales y objetos. En esta interacción, los autolímites están dentro de
nosotros. Estamos identificados con ellos. La relación con ellos ya no es entre un yo y un
ello. Se convierte en una relación yo y tú. En esta forma se va asimilando el medio y
transformándolo al cambiar la relación con él. El desarrollo va evolucionando de esta
manera. Constantemente la persona está reorganizándose a sí misma y su relación con el
ambiente. Esto se debe hacer si se quiere vivir, porque la vida sana es un proceso de
adaptaciones creadoras. (Latner, 1994).

El punto de vista del enfoque gestáltico acerca de la concepción de los procesos de


salud y enfermedad, se caracterizaría por incidir en tres aspectos fundamentales: un ritmo
de contacto/retirada pleno, fluido y adecuado a la necesidad dominante del individuo; la
capacidad de autorregulación del organismo; y el tránsito del heteroapoyo o apoyo
ambiental al autoapoyo, del apoyo ambiental al autosoporte.

Si bien se revisarán estos tres puntos por separado, se advierte sobre la artificialidad
de esta división. Los tres procesos no son excluyentes entre sí, se dan en un mismo
organismo y cada uno de ellos de alguna manera incluye a los otros dos.

La homeostasis y la autorregulación organísmica

De acuerdo a la teoría de la Terapia Gestáltica, el comportamiento humano estaría


regulado por el proceso llamado homeostasis. La homeostasis es el proceso por medio del
cual el organismo satisface sus necesidades y por el cual mantiene un equilibrio. (Latner,
1994)

En el actuar del organismo a cada momento existiría algún suceso que tendería a
perturbar su equilibrio y, de manera simultánea y regulada por el proceso homeostático, una
tendencia contraria surgiría para recuperar ese equilibrio. El metabolismo fisiológico es el
ejemplo más claro de la tendencia innata de cada organismo a lograr un equilibrio. Si, por
ejemplo, en el curso de sus actividades el organismo consume gran parte del agua ingerida
aparece la sed. De manera inmediata este organismo buscaría la forma de restablecer el
nivel óptimo de agua en el sistema. En los organismos vivos cuando hay deficiencias o
excesos el sistema orgánico los remedia. (Perls, 1998; Latner, 1994; Yontef, 1995)

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