Parte 1: POR QUÉ Y CÓ MO ESTUDIAR LA
BIBLIA
¿Por qué estudiar la Biblia?
1. Es esencial para el Crecimiento – 1 Pedro 2:2 – Palabra clave: “Anhelar”
2. Es esencial para la madurez espiritual – Hebreos 5:11 – 14 – Palabra clave: “tiempo”
3. Es esencial para la eficacia espiritual – 2 Timoteo 3:16 -17 – Palabra clave: “Todos”
¿Cuál es el COSTO al estudiar la Biblia?
1. Esfuerzo: cuanto mayor es el esfuerzo, mayor es la recompensa
2. Apertura a Dios – Proverbios 8:34 -35
3. Apertura al cambio: ¿realmente queremos llegar a ser como Jesús? Romanos 8:29
¿CÓMO estudiamos la Palabra de Dios?
OBSERVACIÓN
¿Que es lo que veo? ¿Cuáles son los hechos?
Términos: más que simples palabras
Estructura: más que solo gramática. La Palabra de Dios NO es aleatoria
Forma literaria: poesía, prosa, narrativa, parábolas. El Espíritu Santo utiliza todos los métodos de comunicación para hablar con
nosotros.
Atmósfera: involúcrate con el texto, la gente, la cultura y colócate dentro de la narrativa.
*Pase la mayor parte de su tiempo de estudio bíblico aquí. ¡¡Cuanto más observa, obtendrás una interpretación mejor y más precisa!!
INTERPRETACIÓN
¿Qué significa? ¿Qué me esta diciendo Dios?
Preguntas: ¡no tengas miedo de hacer preguntas! Dios quiere responder a tus preguntas. Un tonto es el que no pregunta.
Respuestas: la Biblia hace un trabajo tremendo al responder preguntas en su propio texto. Las respuestas llegan a través de la
observación.
Integración: las respuestas a las preguntas deben combinarse para alcanzar el significado.
APLICACIÓN
¿Como funciona? La Palabra de Dios siempre está obrando. SIEMPRE es relevante.
¿CÓMO funciona para MÍ? Si la Palabra de Dios no “funciona para mí”, ¿cómo puede ser transmitida a otros?
¿CÓMO funciona para los demás? La Palabra de Dios puede y tiene implicaciones para todos los aspectos de nuestras vidas.
¿Permitiremos que nos transforme?
Al comenzar a estudiar la Palabra de Dios y “vivir según el libro”, es útil:
LEER
¡No navegues! LEER. ¿Con qué frecuencia has vuelto a un pasaje que “leíste” años antes y te has dicho a ti mismo “¡GUAU, no vi
eso!”
REGISTRO
Toma notas de lo que Dios te está diciendo. Mantenga notas en un diario.
Utilice su Biblia como libro de trabajo. ¡Dios no escribió Su Palabra para colocarla en un estante y ser admirada! Él quiere que lo
usemos.
REFLEXIONAR
Tómese el tiempo para estar solo. A veces simplemente necesitamos “alejarnos” de todo aquello que pueda distraernos. Apaga el
celular. Ir a la playa o al parque. Ponte fuera del alcance de los demás y dentro del alcance de tu Padre, aunque sea sólo por una hora o
dos. Estarás muy renovado. Es posible que no obtenga respuestas a sus preguntas, pero habrá encontrado un comienzo de alivio.
Recuerde llevar una libreta de papel y un lápiz o bolígrafo. Escribe lo que tienes en mente o lo que te preocupa. Eleve esos
pensamientos a Dios como una ofrenda de su dependencia de Él. Guarde esas notas y vuelva a consultarlas después de un par de
meses y vea lo que Dios ha hecho con ellas.
Parte 2: LA IMPORTANCIA DE LA
OBSERVACIÓ N
OBSERVACIÓN
¿Qué es lo que veo? ¿Cuáles son los hechos?
Todos vemos cosas diferentes en un momento dado. No es una cuestión de quién tiene razón y quién no.
Es sólo que todos “vemos” de manera diferente. ¿Que necesitamos hacer? Necesitamos aprender a leer.
Todos sabemos MIRAR, pero ¿sabemos leer? Es como saber OÍR, pero no necesariamente ESCUCHAR.
Todos necesitamos aprender a leer...
Mejor y más rápido: no solo leer rápido por leer rápido, sino para poder COMPRENDER MÁS texto en menos tiempo.
Como si fuera la primera vez: la familiaridad puede generar ignorancia. ¿Cuántas veces, al releer un libro o artículo, pasamos
por alto aquellas partes que creemos que “sabemos”? Busque el ¡GUAU! Factor. Leer usando diferentes traducciones. Si
habla un segundo o tercer idioma, sabrá que las palabras y frases se pueden traducir de manera un poco diferente. Las
palabras pueden diferir, pero el pensamiento sigue siendo cierto. ¡La Palabra cobrará vida para ti como quizás nunca la hayas
leído!
•Como carta de amor: la Biblia, desde Génesis hasta Apocalipsis, es la carta de amor de Dios para TI. Eres SU creación, la
niña de Sus ojos, creado a Su imagen.
La observación es una disciplina. Toma tiempo. No leemos la Palabra de Dios sólo por conocimiento porque el conocimiento no es
el objetivo final. El conocimiento de la Palabra de Dios es el MEDIO para tocar a los demás.
¿Queremos ser un hongo de la noche a la mañana o un poderoso roble que crece fuerte y puede capear mejor las tormentas de la vida
durante muchos años?
El Estudio Bíblico es una de las 5 Disciplinas de las Leyes del Crecimiento Espiritual:
1. Oración
2. Llevar un diario
3. Estudio Bíblico
4. Soledad
5. Servicio
PARTE 3: CÓ MO OBSERVAR
Hay 6 claves para la observación al mirar la Palabra de Dios.
Buscamos cosas que sean:
1. Enfatizado
¿Qué se destaca en el texto? Todos y cada uno de los libros de la Biblia tienen un énfasis. También podemos llamarlos Temas o
propósitos declarados. Tome nota de cuánto espacio se dedica a un tema, orden o ubicación estratégica del material y movimiento de
menor a mayor y viceversa. ¿Dónde está el punto central del libro?
2. repetido
La repetición es una poderosa herramienta de aprendizaje y enseñanza. La repetición refuerza elementos clave.
Busque lo que se repite:
• Términos o frases
• Caracteres,
• Incidentes y circunstancias
• Patrones – como paralelos entre los personajes del Antiguo Testamento y Jesús,
• Uso del Nuevo Testamento de pasajes o profecías del Antiguo Testamento.
3. Relacionado
Cosas que tienen algún tipo de conexión o interacción entre sí. Busque lo que está relacionado:
• Movimiento de lo general a lo específico.
• Preguntas y respuestas
• Causa efecto
4. Parecido
La similitud entre 2 o más cosas o eventos atrae la atención casi instantánea. Busca lo que se parece a través de:
• Símiles: usar palabras clave como “me gusta” o “como”
• Metáforas: comparaciones que no utilizan “me gusta” o “como”
5. A diferencia
Más que similitud o comparación hay contraste. Busque cosas que sean diferentes a través de:
• La palabra “pero”
• Metáforas
• Ironía – ver Lucas 8:45, cuando en medio de una multitud apremiante, Jesús pregunta: “¿quién me tocó?”
6. Fiel a la vida
¿Cómo se puede concretar o encarnar hoy la situación o el triunfo de este personaje bíblico?
Usa tu mente para pintar una imagen mental de lo que está sucediendo en las Escrituras que estás leyendo.
¿Cómo se aplica a mí hoy esta Escritura que estoy leyendo ahora? Piense en cómo nos relacionamos con hombres y mujeres y sus
situaciones en la Biblia, como Moisés, David, Rut, Pedro, Juan y Marcos.
¿Por qué existe un prejuicio contra la lectura de la Biblia?
1. ¡No deberías tener que pensar en las cosas! Se requiere esfuerzo mental.
2. Existe una sospecha generalizada hacia la “verdad universal”, especialmente aquellas verdades que presenta la Biblia.
El estudio bíblico requiere...
1. Lectura prolongada durante un largo período de tiempo utilizando meditación y esfuerzo mental.
2. Permitir que las Escrituras tengan y proporcionen la explicación definitiva y autorizada para mi vida.
3. La voluntad de ser contracultural. Especialmente cuando la cultura actual no cree en "verdades absolutas". Para muchas personas
todo es relativo o tienen la actitud de “lo que quizás sea cierto para ti, no lo es para mí”.
PARTE 4: INTERPRETACIÓ N
Con la interpretación formulamos y respondemos la segunda pregunta: ¿Qué significa?
La CALIDAD de la Interpretación depende directamente de la CALIDAD de la observación.
La interpretación no es el fin, es sólo el medio para lograr ese fin. ¡La tarea principal de cualquier maestro de la Biblia es explicar la
Biblia!
Algo para recordar: cuanto más tiempo se dedique a la observación de la Biblia, menos tiempo Y más precisa será la interpretación.
Por el contrario, cuanto menos tiempo se dedique a la observación de la Biblia, más tiempo Y menos precisa será la interpretación.
¡Anímese! Nunca se puede entender todo lo que hay en la Biblia. ¿Cómo puede una creación humana finita comprender
completamente a un Dios INFINITO?
2 Pedro 3:15 – 18 dice: “Tened presente que la paciencia de nuestro Señor significa salvación, así como también os escribió nuestro
querido hermano Pablo con la sabiduría que Dios le dio. Escribe de la misma manera en todas sus cartas, hablando en ellas de estos
asuntos. Sus cartas contienen algunas cosas que son difíciles de entender, que las personas ignorantes e inestables distorsionan, como
lo hacen con las demás Escrituras, para su propia destrucción. Por lo tanto, queridos amigos, como ya sabéis esto, estad en guardia
para no dejaros llevar por el error de hombres sin ley y caer de vuestra posición segura.
Pero creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo”.
Incluso el apóstol Pedro sabe que la interpretación adecuada de la Biblia es importante para no distorsionar el mensaje. Pedro también
reconoce que algunas Escrituras son difíciles de entender. Es necesario explicarlo.
Hay 5 claves para la interpretación:
1. Contenido
Esta es la materia prima o base de datos.
Causa – efecto directo entre el contenido y el significado.
¿Cuáles son quién, qué, dónde, cuándo, por qué y por qué? (¿Y qué? ¿Qué diferencia hace esta verdad si la aplico en mi vida?)
2. Contexto
¡No saques simplemente un versículo de su contexto! ¿Qué se dijo inmediatamente antes Y después del versículo?
Busque los tipos de contexto:
Contexto literario: ¿cuál es el resto del párrafo o libro?
Contexto histórico: ¿qué está pasando en ese momento? ¿Qué más estaba pasando?
¿Cuáles son las influencias sociales y políticas sobre el autor y su audiencia?
Contexto cultural: comprenda la cultura y comprenderá mejor el significado de las palabras o términos.
Contexto geográfico: conocer y comprender la geografía aporta una enorme relevancia y realismo al relato.
Contexto teológico: ¿qué sabía el autor acerca de Dios? ¿Qué sabía la audiencia acerca de Dios o cómo lo adoraban? ¿Dónde
y CÓMO encaja este fragmento de la Escritura en el desarrollo total de las Escrituras?
Las sectas se basan en la distorsión al sacar los versos de su contexto. Siempre que alguien le “cite” las Escrituras y no le parezca muy
bien, pídale que siga leyendo o, si la cita comienza con las palabras “pero” o “por lo tanto”, pídale que lea el pasaje que PRECEDE al
versículo. . Obtenga el contexto completo.
Parte 5: Interpretación (Cont.)
La Reforma Protestante puso las Sagradas Escrituras –una vez sólo para los ojos de los “eruditos”– en las manos y los corazones del
hombre común. Pero aquí está el problema:
“La interpretación privada nunca significó que los individuos tengan derecho a distorsionar las Escrituras. Con el derecho a la
interpretación privada, viene la responsabilidad sobria de una interpretación precisa. La interpretación privada nos da licencia para
interpretar, no para distorsionar”.
- R. C. Sproul, “Conociendo las Escrituras”
"Muy rara vez hay que salir de la Biblia para explicar algo de la Biblia".
- Donald Gray Barnhouse
Hay 5 claves para la interpretación:
1. Contenido
Esta es la materia prima o base de datos.
2. Contexto
No simplemente saques un versículo de su contexto. ¿Qué se dijo inmediatamente antes y después del versículo?
3. Comparación
Compara Escritura con Escritura. El mejor y más grande intérprete de las Escrituras son las Escrituras. Cuanto más comparamos las
Escrituras consigo mismas, más evidente se vuelve el significado de la Biblia.
Las partes de la Biblia que estamos estudiando adquieren un significado significativo a la luz de toda la Escritura. Podemos estudiar
personajes bíblicos así como términos o palabras. Obtenemos significados más completos en cuanto a lo que Dios nos está enseñando.
4. Cultura
Comprender la cultura en la que el texto original tiene su contexto nos ayuda a comprender más plenamente el significado del texto.
Necesitamos comprender el trasfondo mientras la luz de la verdad se muestra en el texto. Si leemos la Biblia de acuerdo con nuestro
contexto cultural, eso puede distorsionar o distorsionará el contexto real. Resultado: no podemos darle el sentido adecuado al pasaje.
Comprender la cultura original da vida al texto y añade precisión a nuestra interpretación.
5. Consulta
El uso de herramientas extrabíblicas ayuda a nuestra interpretación a través de una mejor comprensión, el contexto cultural y una
mayor precisión de los términos e ideas. Las herramientas de consultoría son referencias SECUNDARIAS. Utilice siempre su Biblia
PRIMERO, luego consulte estas referencias secundarias. Proporcionan ideas que “colorean” las páginas de las Escrituras.
Las referencias secundarias para consulta incluyen:
• Biblia de estudio
• Concordancias: lo mejor es una concordancia “exhaustiva”: las de Strong o Young se consideran las mejores
• Diccionarios Bíblicos – “El Nuevo Diccionario Bíblico” editado por J. D. Douglas o W. E. Vine's
“Diccionario expositivo de palabras del Nuevo Testamento”
• Manuales bíblicos: “El manual de la Biblia de Eerdman” o “El manual de la vida en tiempos bíblicos”
• Atlas – “Atlas Moody de las Tierras Bíblicas” o “Atlas Bíblico Pictórico de Zondervan”
• Comentarios – “Comentario sobre el conocimiento bíblico” o “Comentario bíblico del expositor”
Recuerde que estas referencias secundarias están ahí para ayudarle a evaluar su estudio personal de la Biblia. No los utilices como
fuentes primarias. Sólo la Biblia misma es una fuente primaria.
Escribe en tu Biblia según te guíe el Espíritu. La Santa Biblia no es tan “santa” como para no usarla como Dios quiere que lo
hagamos. Piense en su Biblia como un “libro de texto” o “libro de ejercicios”. Escribir notas y “garabatos” en nuestras Biblias es una
forma de responderle a Dios mientras Él nos habla.
Antes de pasar al proceso de aplicacion, veamos primero el lenguaje figurado: descubramos lo figurativo. ¿Cómo sabemos cuándo la
Biblia representa la realidad en lugar de describirla?
DIEZ PRINCIPIOS PARA MANTENERNOS FUERA DE PROBLEMAS FIGURADOS:
1. Utilice el sentido literal a menos que haya alguna buena razón para no hacerlo; no intente “espiritualizarlo”
2. Utilice el sentido figurado cuando el pasaje le indique que lo haga, especialmente en sueños y visiones.
3. Utilice el sentido figurado si un significado literal es imposible o absurdo: Dios no nos confunde con tonterías, pero a menudo
utiliza el simbolismo para exponer sus puntos. Pero estos son símbolos, no absurdos. El lenguaje figurado puede ser tanto descriptivo
como preciso.
4. Utilice el sentido figurado si un significado literal implicaría algo inmoral – por ejemplo, cuando Jesús habla de comer Su carne y
beber Su sangre. Incluso los fariseos entendían esto como lenguaje figurado. Dios nunca viola Su carácter.
5. Use el sentido figurado si la expresión es una figura retórica obvia; observe cuando las palabras “como” o “como” se usan
especialmente en los Salmos o libros proféticos.
6. Utilice el sentido figurado si una interpretación literal va contraria al contexto y alcance del pasaje: “el León de la tribu de Judá”
en Apocalipsis no se refiere a una bestia de 4 patas con melena.
7. Utilice el sentido figurado si una interpretación literal va en contra del carácter general y estilo del libro – “la sombra de sus alas”;
escritos poéticos y proféticos; Dios no es una gallina.
8. Utilice el sentido figurado si una interpretación literal va en contra del plan y propósito del autor – comprenda el contexto del texto.
¿Cómo se compara el versículo con el resto del párrafo y el resto del libro?
9. Utilice el sentido figurado si una interpretación literal implica una contradicción con otras Escrituras: la Biblia está unificada en la
totalidad de su mensaje. Comparar las Escrituras con las Escrituras pone las Escrituras en perspectiva.
10. Utilice el sentido figurado si una interpretación literal implicaría una contradicción en la doctrina; nuestra interpretación debe ser
coherente con las Escrituras mismas.
Parte 6: Aplicación – ¿Cómo funciona?
Si leiéramos y estudiáramos la Palabra de Dios de manera regular y fiel, ¿qué haríamos con ese conocimiento? ¿Qué diferencia
práctica haría en nuestras vidas? La Palabra de Dios sí funciona, pero ¿CÓMO permitimos que funcione en nuestra vida diaria?
*De los 3 pasos del estudio bíblico – Observación, Interpretación y Aplicación – La aplicación es el más importante, pero el más
descuidado.
Observación + Interpretación + MENOS Aplicación = Aborto. Un aborto de los propósitos que Dios tiene en mente para sus hijos,
tanto como individuos como como cuerpo de Cristo.
La interpretación es una; La aplicación es muchas. Sólo hay una interpretación última de un pasaje de las Escrituras; no cambia. Lo
que DIOS quiso que significara Su Palabra, significa precisamente eso para siempre. Pero nunca podremos detener el proceso de
aplicar la verdad bíblica en nuestras vidas. El propósito del estudio de la Biblia no es que yo lea las Escrituras, sino que las Escrituras
entren DENTRO de mí. Aunque hayamos leído la Biblia muchas veces, ¿hemos sido cambiados?
¿Somos “conducidos a la piedad” – (Tito 1:1)? La Palabra de Dios es para transformación, no para entretenimiento.
Cuatro SUSTITUTOS para la Aplicación: errores comunes que cometemos.
1. Interpretación sustituta de la aplicación
• Nos conformamos con el conocimiento más que con la experiencia
• Somos individualmente responsables de poner la Palabra de Dios en acción (Lucas 6:46)
• Sin aplicación, pecamos
2. Sustituir la obediencia superficial por un cambio de vida significativo
• ¿Dónde están los puntos ciegos en nuestras vidas?
• ¿Nos estamos engañando en algunos aspectos de nuestras vidas?
• ¿Somos parcialmente obedientes?
3. Sustituir el arrepentimiento por la racionalización
• La transformación es difícil y antinatural: naturalmente nos resistimos al cambio en nuestras vidas.
• ¿Qué estamos haciendo con el pecado en nuestras vidas?
• ¿Nos sentimos más cómodos teniendo el pecado vivo o gobernando nuestras vidas?
4. Sustituya las experiencias emocionales por un cambio decidido.
• La Palabra de Dios puede evocar emociones, y lo hace, pero ¿cuál es el impacto?
• ¿Estamos satisfechos con sólo estar expuestos a las Escrituras o voluntariamente haremos un cambio en nuestras vidas? (Santiago
1:21 – 25)
4 pasos de aplicación
1. Conozca – la Biblia y usted mismo
• Conocer la interpretación del texto.
o ¿Hemos observado adecuadamente todo lo que dice el texto?
o Una interpretación errónea dará lugar a una aplicación errónea
o Una interpretación correcta (más probablemente) conducirá a una aplicación correcta.
o Cuanto mejor entendamos el significado del texto, mejor podremos aplicarlo a nuestras vidas a medida que nos volvamos más
parecidos a Cristo.
• Conóceme a mí mismo primero
o Comprenda sus bienes personales (lo que Dios le ha dado o ya ha hecho por usted), así como sus responsabilidades personales (las
“faltas” que Dios quiere desarrollar por la fe) – 1 Tim. 4:16
o No podemos ayudar a otros a aplicar la Verdad Bíblica a sus vidas si primero no hemos aplicado esas mismas Verdades a nuestra
propia vida.
o Rom. 12:3 – tener un conocimiento adecuado de nosotros mismos ayuda a evitar tener una visión exagerada (mejor de lo que
somos) o distorsionada (peor de lo que somos – la mentira de Satanás)
2. Relacionarse: ¿cómo nos relacionamos con los demás en nuestras esferas de influencia?
Puesto que hemos llegado a ser nuevas criaturas, 2 Cor. 5:17, debemos permitir que Jesucristo invada cada aspecto de nuestras vidas:
hogar, trabajo, cónyuge, pensamiento, etc. Nuestro crecimiento personal en Cristo es un proceso, pero es un proceso dinámico (en
constante movimiento).
“La Palabra que obra” – nuevas ideas e impactos de la Palabra de Dios en nuestras vidas:
• Nueva relación con Dios: ahora es personal e íntima
• Nueva relación con uno mismo – nos vemos a nosotros mismos como Dios nos ve ahora; salvo y correcto gracias a la Cruz de Cristo
• Nueva relación con los demás: ahora tratamos a los demás como Dios quiere que los tratemos y amemos
• Nueva relación con el enemigo – Satanás es ahora nuestro enemigo, no nuestro líder; Hemos cambiado de bando en la batalla.
• La Palabra de Dios expone nuestro pecado – la Palabra nos muestra nuestro pecado y cómo lidiar con él, 2 Tim. 3:16
• La Palabra de Dios proporciona promesas: lo que podemos esperar y confiar en que Dios hará en nuestras vidas.
• La Palabra de Dios nos da mandamientos: tenemos condiciones que debemos cumplir en nuestra relación con Dios que conducen a
la salud y la vida.
• La Palabra de Dios proporciona ejemplos: podemos ver claramente cómo otros a lo largo de la historia han “caminado por el campo
minado” antes que nosotros; qué hacer o qué no hacer • ¿Es difícil la vida cristiana? No. ¡La vida cristiana es imposible! La vida
cristiana sólo es posible mediante una completa confianza en Dios y Su Santa Palabra. Nuestras vidas deben ser sobrenaturales.
3. Meditar – el arte perdido de reflexionar
La meditación NO es vaciar la mente como en el misticismo oriental: Dios no quiso ni diseñó nuestras mentes para operar en un vacío
espiritual. La meditación permite que tu mente reflexione o analice lo que Dios nos tiene o nos está enseñando mientras leemos y
estudiamos Su Palabra. Mientras una vaca rumia para maximizar las vitaminas, minerales y otros nutrientes de los alimentos que ha
ingerido, debemos traer a nuestra mente lo que el Espíritu Santo nos está enseñando para maximizar las palabras, el significado y las
aplicaciones a medida que nos volvemos más. Como Cristo.
• La meditación debe hacerse “día y noche” – Salmo 1:1-2, Josué 1:8
• La meditación nos permite “tejer” las Escrituras en nuestra vida diaria.
• La meditación nos lleva a la prosperidad espiritual
• Agregar la memorización de las Escrituras al proceso de meditación para implantar la Palabra en nuestra mente.
4. Práctica: el objetivo del estudio bíblico
Como en cualquier disciplina de la vida: trabajo, familia, relaciones, deportes o carrera. Para volvernos competentes y expertos,
debemos practicar continuamente lo que aprendemos. ¿Qué no nos gusta hacer y que deberíamos hacer con regularidad? ¡Eso requiere
práctica! No hay nada intrascendente en lo que Dios hace: quiere provocar cambios en nuestras vidas individuales y corporativas; Su
Palabra transforma nuestras vidas.
El hambre por la Palabra de Dios es directamente proporcional a nuestra obediencia a la Palabra de Dios. El ciclo: cuanto más
entendemos la Palabra de Dios, más la usamos; y cuanto más usemos la Palabra de Dios en nuestra vida diaria, más querremos
entenderla.
El Proceso de Cambio de Vida: La Palabra de Dios centrada en nuestras vidas individuales nos permite impactar el mundo para Él. Si
no puedo permitir que las verdades de Dios afecten mi vida personal, ¿cómo puedo esperar que Dios me utilice para Sus propósitos?
Es necesario cambiar a los individuos antes de que se pueda cambiar la sociedad.
9 PREGUNTAS DE APLICACIÓN PARA HACER SOBRE LA PALABRA DE DIOS MIENTRAS LA ESTUDIAMOS:
1. ¿Existe un ejemplo a seguir?
• Los ejemplos son una de las razones claves por las que Dios usa biografías en Su Palabra
• ¿Podemos establecer paralelos entre las vidas de hombres y mujeres en las Escrituras y nuestras vidas?
2. ¿Hay que evitar el pecado?
• Las Escrituras revelan ciertos valores piadosos a nuestras conciencias.
• Recuerda que en Cristo somos nuevas criaturas, 2 Cor 5:17
3. ¿Existe alguna promesa de reclamar?
• Aquel que no puede mentir, nos proporciona promesas con las que podemos contar al 100%.
• Algunas promesas son individuales mientras que otras son corporativas (use la observación para determinar el contenido y el
contexto de la promesa)
4. ¿Hay alguna oración que repetir?
• La Palabra de Dios nos enseña CÓMO orar
• Ejemplos: Génesis 18, Nehemías 1:5-11, Salmo 51, 1 Sam. 2:1-10, Ef: 3:14-21, Lucas 1:46-53, Mateo 26:36-46, Mateo 6:5-15
• ¿Qué hay en estas oraciones que necesito orar?
5. ¿Existe un mandamiento que obedecer?
• ¡Esta no es una pregunta retórica!
• Cómo determinar la voluntad de Dios: “El 95% de la voluntad de Dios se revela en los mandamientos de las Escrituras. Si dedicas tu
tiempo a atenderlos, no tendrás muchos problemas para resolver el 5% restante”.
6. ¿Existe alguna condición que cumplir?
• Algunas promesas se basan en condiciones. “Si permanecéis en Mí y Mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que queráis y
se os hará”. Juan 15:7. ¿Hemos cumplido sus condiciones?
7. ¿Hay algún versículo para memorizar?
• Vale la pena memorizar todas las Escrituras, pero necesitamos memorizar al menos algunas para mantenerlas en nuestro arsenal.
Los beneficios para la memorización de las Escrituras son inconmensurables.
8. ¿Hay algún error que marcar?
• El estudio y la aplicación de la Biblia ayudan a minimizar el error teológico en nuestras vidas.
9. ¿Hay algún desafío que enfrentar?
• ¿Estamos convencidos cuando la Palabra de Dios entra en nosotros?
• ¿Hay algún cambio que deba hacerse en nuestras vidas?
• ¿Estamos abiertos a estos cambios?
• ¿Estamos preparados para asumir estos desafíos?
• Como solía preguntar un viejo amigo nuestro en nuestro pequeño grupo: “¿Estás dispuesto a que te lo hagan querer?”
¿Cómo establecemos la conexión entre las Escrituras antiguas y la cultura actual? 3 cosas a tener en cuenta:
1. La verdad NUNCA cambia
2. Contexto, contexto, contexto: ¿entendemos la cultura del texto tan bien como la cultura actual?
3. Debemos estudiar la cultura: debemos llegar a conocer: centros de poder, medios de comunicación, el lugar del dinero (el cómo y el
porqué de las finanzas), la etnicidad (variedad de personas en nuestra sociedad), los roles de hombres y mujeres. , generaciones y
estructura familiar, visiones del mundo y religión (cuáles son los valores fundamentales), arte: lo que se produce “creativamente” en
la sociedad, historia y tiempo (historia real así como mitos y leyendas), lugar (geografía): dónde vives colores o influencias en tu
forma de pensar.
Living By The Book | Free PDF Download
The Vital Importance of Studying the Bible - Why It Matters | Chapter 1
In "Living By The Book," Howard G. Hendricks explains the indispensable importance of personal Bible study,
emphasizing its vital role in the life of every believer. He begins by illustrating the necessity of engaging
directly with Scripture. According to Hendricks, personal Bible study is more than just a religious exercise; it is
a transformative act that shapes an individual’s faith and daily living. The Bible is not merely a historical
document or a collection of moral stories; it is the living word of God, capable of providing guidance, comfort,
and wisdom in every aspect of life. Engaging deeply with Scripture enables believers to encounter God in a
personal and profound way, leading to spiritual growth and a more authentic Christian walk. Hendricks
underscores the transformative power of Bible study by sharing testimonies of individuals whose lives have
been radically changed through a consistent and deliberate study of Scripture. He points out that the Bible has
the power to convict, inspire, and challenge individuals, leading to a marked difference in their attitudes,
behaviors, and relationships. This transformative power is accessible to anyone willing to invest the time and
effort into studying the Bible earnestly. However, Hendricks also acknowledges that there are several barriers
to effective Bible study. One common barrier is the perceived complexity of the Bible; many people feel
intimidated by its language, historical context, and cultural nuances. Additionally, busy schedules and the
distractions of modern life often leave little room for dedicated Bible study. Hendricks offers practical
suggestions for overcoming these obstacles. He advises readers to start small, perhaps with a few verses a day,
gradually building up to more extensive study sessions. Emphasizing the importance of setting aside a specific,
uninterrupted time for Bible study, he also encourages readers to minimize distractions by creating a conducive
study environment. Another significant barrier is the lack of proper techniques for studying the Bible.
Hendricks addresses this by offering a structured approach to Bible study, encouraging readers to engage with
Scripture in a systematic and methodical manner. He highlights the importance of prayerful dependence on the
Holy Spirit for understanding and applying God’s word. Recognizing that effective Bible study is a skill that
can be developed, Hendricks provides tools and techniques that can help even the most novice readers become
more adept at engaging with Scripture. In summary, Hendricks begins "Living By The Book" by articulating
why studying the Bible is crucial for every believer. He explores the transformative power of Scripture, shares
personal stories of change, and addresses the barriers that often hinder effective Bible study. By offering
practical advice and emphasizing the importance of dedication and the right approach, Hendricks sets the stage
for a deeper exploration of how to observe, interpret, and apply the Bible in the subsequent sections of his
book.
Observation: Learning to See What the Scripture Reveals | Chapter 2
Observation: Learning to See What the Scripture Reveals The foundational step of observation in
Bible study cannot be overstated. It's the bedrock upon which all subsequent interpretation and
application are built. Observation is about truly seeing what is in the text before rushing to
understand or apply it. It requires us to slow down and take a meticulous look at the Scripture,
allowing it to speak for itself rather than imposing our preconceived notions or desires onto it.
Becoming a better observer of biblical texts hinges on the cultivation of a few primary techniques.
First and foremost, one needs to read the passage multiple times, each time with a different focus.
The first read-through might be about getting the general gist of the passage, while subsequent
readings could zoom in on individual words or phrases, sentence structure, or the overall flow of
thought. Effective observation also involves asking the right questions. Here are a few key
questions to consider during the observation phase: 1. **Who?** Identify the key figures in the
passage. Who is speaking? Who are the recipients or the main characters involved? 2. **What?**
Determine what is happening in the passage. What actions or events are taking place? What are the
significant words or ideas? 3. **Where?** Understand the geographical or situational context.
Where is this taking place? Are there any specific locations mentioned that require further insight?
4. **When?** Assess the timing of the events. When is this happening relative to other key events
in the Bible? 5. **Why?** Seek out the purpose behind the events or statements. Why is this
included in Scripture? What is the author's intent? 6. **How?** Look at the manner or method of
what's occurring. How are the events unfolding? How is the author communicating the message?
Descriptive use of language, repetition, and lists are elements of the text that can provide
significant insights during observation. For instance, repeated words or phrases often underline a
text's primary themes or concepts. Lists enumerate critical elements that might be pivotal for
understanding the text's broader message. In practicing observation, it is also vital to employ a
strategy called "markup." Use a pencil or pen to underline, circle, or make notes in the margins
about interesting or significant elements within the text. This active engagement helps to crystalize
key observations and makes it easier to recall them during the subsequent steps of interpretation
and application. Moreover, another powerful technique is to identify literary forms and structures
within the text. Recognize if the passage is a narrative, poetry, a parable, or a prophecy, as this
often influences its meaning and how we should interpret its message. Observation is
fundamentally about becoming a keen reader of the Bible, honing one’s ability to notice the details
that might otherwise be overlooked. It sets the stage for a deeper understanding and richer
application of God's Word in our lives. Once we have mastered the art of observation, we are well-
prepared to move into the next step of Bible study: interpretation.
Interpretation: Understanding the Meaning of the Text | Chapter 3
Interpretation: Understanding the Meaning of the Text Once one has thoroughly observed the text,
the next critical step in studying the Bible is interpretation. This phase is about deciphering the
intended meaning behind the words and passages within Scripture. Howard G. Hendricks
emphasizes that interpretation requires more than a surface-level reading; it necessitates thoughtful
engagement and a keen understanding of context, culture, and language. The first step in
interpretation is to approach the Bible with a sense of humility and reliance on the Holy Spirit, as
it's believed every Scripture is God-breathed and spiritually discerned. Hendricks outlines several
key steps to effectively interpret the Bible. Initially, one must comprehend the historical context
and background of the text. This includes understanding the time period in which it was written,
the audience to whom it was directed, and the cultural circumstances prevailing at that time.
Following this historical grounding, the next step is to analyze the literary context. The Bible
comprises various books, and each book is part of a broader canonical context. It's crucial to
consider where a passage fits within the structure of the book, its relationship to neighboring
sections, and the overall storyline of the Bible. This helps to avoid misinterpretation by isolating
verses from their intended narrative or doctrinal framework. Another important principle is to
interpret Scripture with Scripture. This means using clearer, more explicit parts of the Bible to shed
light on more ambiguous or complex passages. It's essential to recognize the consistency across the
Bible's teachings and allow this internal harmony to guide one's understanding. The role of word
studies cannot be understated in the interpretation process. Language is a potent tool, and
understanding the original Greek, Hebrew, or Aramaic words can unveil deeper meanings not
always apparent in translation. It's beneficial to examine key terms, their root meanings, and how
they are used in various contexts throughout Scripture. Hendricks also warns of common pitfalls in
interpretation. One major error is imposing personal biases or contemporary cultural norms onto
the text, which can distort its original meaning. It's important to approach the Bible with an open
mind, allowing it to challenge and transform one's perspective, rather than twisting its messages to
fit pre-existing views. Another pitfall is overemphasis on allegorical or highly symbolic
interpretations that detach the passage from its concrete historical context. While the Bible contains
symbolic language, it's crucial to balance such interpretations with a grounded understanding of its
literal and historical elements. Ultimately, Hendricks underscores the necessity for discipline,
patience, and a systematic approach to interpretation. This effort ensures that one arrives at an
understanding that is faithful to the original intent of the Scripture. The t
Application: Putting Scripture into Practice in Daily Life | Chapter 4
Applying the truths of Scripture to everyday life is where the transformative process of Bible study
truly takes flight. While knowledge and understanding are essential, it is the application that
bridges the gap from taking in God's Word to living it out faithfully. Application is about allowing
the insights gained during observation and interpretation to influence decisions, actions, and
attitudes in a way that aligns with biblical principles. Without application, Bible study remains an
intellectual exercise devoid of practical impact. The process of application begins with asking,
"What does this passage mean for my life today?" This involves personal reflection and self-
examination in light of the Scriptures. Key questions to ponder include: - How does this truth affect
my current situation? - Are there attitudes, behaviors, or beliefs that need to change? - What
specific actions can I take to incorporate this teaching into my daily routine? - How does this truth
influence my relationships with others? Moving from understanding to action requires
intentionality and a willingness to be shaped by the Word of God. One effective approach is to set
specific, measurable, attainable, relevant, and time-bound (SMART) goals. For example, after
studying a passage about forgiveness, one might decide to reach out and mend a strained
relationship by a particular date. This transforms theoretical knowledge into tangible actions that
reflect biblical values. Another essential aspect of application is the role of the Holy Spirit in
guiding and empowering believers to live out God's Word. While human effort is necessary, it is
ultimately the Spirit who enables and strengthens individuals to obey God's commands and to
embody Christ-like virtues. Prayer is, therefore, an integral part of the application process. Seeking
divine assistance, wisdom, and strength through prayer ensures that efforts to apply Scripture are
rooted in dependence on God rather than mere self-reliance. The impact of application on personal
growth and transformation is profound. As biblical truths are consistently applied, they begin to
mold one's character and inform one's worldview. This internal transformation often leads to
noticeable changes in behavior, attitudes, and interactions with others. It cultivates virtues such as
love, patience, humility, and integrity, which slowly but surely become hallmarks of one's life.
Application also extends beyond personal growth, influencing the broader community and society.
When believers live out Scripture faithfully, they become powerful witnesses to the truth and
relevance of God's Word. Their lives serve as a testament to the transformative power of the Bible,
drawing others to explore and embrace its teachings.
Analyzing Different Biblical Genres - Understanding Context and Style | Chapter 5
Understanding the various genres found in the Bible is crucial for proper interpretation and application of
Scripture. Each genre has its unique context and style, and recognizing these differences can significantly
enhance one's comprehension and appreciation of the biblical text. The Bible comprises several genres,
including narrative, poetry, prophecy, wisdom literature, parables, epistles, and apocalyptic literature. Each of
these genres serves a distinct purpose and conveys messages in different ways. For instance, narrative passages,
such as those found in the historical books, recount events and tell stories that reveal God's character, actions,
and purposes. On the other hand, poetry, found predominantly in the Psalms, uses vivid imagery, parallelism,
and other literary devices to express emotions, worship, and deep theological truths. Narrative literature, such
as Genesis or the Gospels, requires readers to look for overarching themes, character development, and plot
progression. One should approach these texts recognizing their historical and cultural contexts to gain a fuller
understanding of the story. For instance, recognizing the patriarchal context of Abraham's story enhances the
comprehension of his response to God's commands. Poetry and wisdom literature, like Psalms and Proverbs,
employ figurative language and symbolic expressions. These texts often appeal to the emotions and should be
read with an appreciation for their artistic form. Interpreting these genres involves recognizing parallel
structures, metaphors, and the overall mood or tone conveyed by the author. Prophetic literature, found in
books such as Isaiah and Jeremiah, often includes elements of both poetry and prose. These texts convey God's
messages through His prophets, often addressing the social, political, and spiritual issues of their time.
Understanding prophecy requires knowledge of the historical context in which the prophets spoke and an
awareness of the dual layers of meaning—immediate fulfillment and future implications. Parables, primarily
taught by Jesus in the Gospels, are simple stories used to illustrate moral or spiritual lessons. Interpreting
parables involves identifying the central point of the story and understanding its relevance to the audience then
and now. It is essential not to over-analyze the details but to grasp the overarching lesson. Epistles, or letters,
such as those written by Paul, Peter, and John, provide doctrinal teachings and practical exhortations to early
Christian communities. These texts should be read with an awareness of their situational context—who wrote
the letter, to whom, and why. Understanding the issues addressed in these early churches can help modern
readers apply the principles to similar situations today.