CASO VALERIA
Valeria tiene 13 años, acude a la consulta en compañía de sus padres. La madre señala
preocupación por el estado de ánimo y las conductas de su hija, quién muestra cambios
significativos en su comportamiento desde inicios de este año.
Valeria refiere tener sensaciones intensas de ahogo, sudoración en las manos, le cuesta
concentrarse en las clases lo que la ha llevado a bajar en sus notas de forma significativa.
Comenta que hace unas semanas sacó notas bajas en tres cursos que la colocan en el puesto
15 y esto la frustra mucho porque ella quiere seguir ocupando uno de los primeros puestos.
En este aspecto los padres señalan que desde pequeña saca buenas calificaciones, lee,
investiga por iniciativa propia, llegando a tener horarios rígidos con diversas actividades
incluso algunos domingos.
Valeria refiere que hace tres meses siente mucha preocupación por todo lo que le pasa, siente
mucho temor, tiene pensamientos negativos como creer que se puede morir. Se siente
agotada de no poder estar en calma, tiene muchas ganas de comer comida chatarra y
golosinas, después se siente culpable y en dos ocasiones se provocó el vómito para devolver
todo lo que había comido. Con respecto a los pensamientos negativos menciona que sienten
que la invaden también al momento de conciliar el sueño.
Valeria dice: “Mi cabeza no puede pensar”, “tengo tantas ideas confusas”, “a veces pienso que
me estoy volviendo loca”. Cada vez que pasa esto Valeria siente que no puede respirar, le
invade el miedo, le duele la cabeza, le tiemblan los brazos y las piernas. Mientras que su
corazón late más rápido de lo habitual. Ella reconoce que ya no tiene ganas de salir con sus
amigos y prefiere estar en su casa porque se siente más tranquila allí, ya que “las crisis” como
ella las llama se han presentado en el colegio, en la calle y en su casa.
Valeria vive con sus padres: Luisa tiene 52 años, Enrique 45 y su hermana Karla tiene 8 años.
En la sesión Valeria señala que está cansada de las peleas de sus padres: “Primero me dicen
que se separaron, luego volvieron a vivir juntos… y otra vez proclamándose por temas de
pareja, discutiendo y peleando como siempre”. Al relatar estos eventos Valeria empieza a
llorar, a mover constantemente las piernas y a apretarse todos los dedos de las manos.
Los padres refieren que hace dos semanas tuvieron un conflicto grande en la casa, la esposa
junto con Valeria descubrió que el padre tenía otra relación de pareja. La esposa se mostró
muy afectada, sintiéndose engañada por su esposo. Ellos comentan que el conflicto terminó
en la comisaría, la esposa quería denunciarlo por traición y maltrato psicológico. Todo esto
sucedió en presencia de las dos hijas. Valeria señala que ya está harta de ver, escuchar y saber
de los problemas de sus padres, quisiera que esto ya termine.
La madre señala que desde ese día observa a Valeria más nerviosa, con mucha desesperación,
ella ha verbalizado deseos de lastimarse y querer morir. La madre teme mucho por lo que
Valeria pueda intentar hacer, reconoce que es muy impulsiva, desde ese día está
constantemente supervisando en sus diferentes actividades y no la deja sola.
Los padres lucen molestos en la sesión, se acusan de causar todos los conflictos en el hogar,
el padre refiere estar presente en la sesión sólo por su hija.