0% encontró este documento útil (0 votos)
53 vistas22 páginas

Libro Rarito

no se vvs lo escribi en desocupe
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como DOCX, PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
0% encontró este documento útil (0 votos)
53 vistas22 páginas

Libro Rarito

no se vvs lo escribi en desocupe
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como DOCX, PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 22

Indice

 Prologo.....................................................................................................3

 El dolor de tu ausencia.............................................................................4

 Por ti.........................................................................................................6

 Sin importarte lo que di por ti..................................................................6

 ¿Cómo se controla los sentimientos?.......................................................7

 JULIO......................................................................................................9

 August....................................................................................................11

 Never mine.............................................................................................13

 Un amor que no me pertenecía, pero se sentía real...............................14

 ¿El cielo o el infierno?...........................................................................16

 Siempre lo supiste..................................................................................17

 Entre la ausencia y la duda....................................................................18

 ¿El final?................................................................................................20
Prologo
Este libro lo escribí a lo largo de estos meses, en tiempo real, en cada
momento en el que te extrañaba y deseaba hablar contigo, recurría a escribir,
dejando en estas páginas lo que llevaba dentro. En cada bloque de este libro,
verás las fechas, que marcan el momento exacto en que mis emociones se
plasmaban en palabras, hasta llegar al día de hoy, en el que finalmente te
mostrarte lo que mucho significó tu ausencia para mí y el impacto que genero
sobre mí.

Este proceso en el que dure escribiéndolo fue una mezcla de catarsis y


sinceridad. Cada palabra que aquí encontrarás fue una manera de procesar
todo lo que me hiciste sentir: la felicidad que alguna vez me brindaste, el dolor
de que me dejo tu ausencia y, sobre todo, el vacío que dejaste cuando ya no
estabas. En muchos momentos, era mi única manera de poner en orden mis
pensamientos y no dejarme consumir por lo que estaba experimentando. Este
libro se convirtió en un reflejo de cada emoción que me sobrepasaba, cuando
hablar ya no era una opción contigo.

No te lo tomes a mal si en algunas partes sientes que te hago responsable o si


te afectan los sentimientos que reflejo. Recuerda que muchas veces escribía
estando enojada, influenciada por lo que personas que ambos conocemos me
contaban sobre ti. En esos momentos, la rabia y la tristeza se mezclaban, y
aunque a veces las palabras pueden parecer duras, son solo el reflejo de lo que
sentía en ese instante. También debes tener en cuenta que todo fue escrito en
tiempo real, capturando cada emoción cruda y sin filtros. Luego, cuando lo
pasé a este formato digital, hice algunas pequeñas modificaciones, pero
mantuve la esencia intacta.

Este no es solo un libro, es una ventana a mi corazón durante estos meses sin
ti. Es un testimonio de cómo me dolió perder a quien consideraba mi
compañero de vida. Puede que haya momentos en los que sientas que te juzgo
o que te hago ver como el causante de mi sufrimiento. Pero también quiero
que recuerdes que, aunque el dolor es parte de esta historia, hubo mucho amor
en su origen. Lo que vivimos dejó una marca profunda en mí, y este libro es
mi manera de mostrarte lo que fue estar de este lado, viviendo la ausencia de
alguien tan importante como lo eras tú para mí.

Así que te invito a leerlo con el mismo cuidado con el que lo escribí. No
busques culpables, sino verdades. Cada página es una reflexión, un
diálogo conmigo misma, y ahora, contigo. Tal vez, a través de estas
palabras, puedas entender un poco mejor lo que significó todo para mí.

El dolor de tu ausencia
Aunque creo que esto no me está doliendo tanto como yo creía en
parte pienso que es por todo lo que me contaron de ti tus amigos, el
pensar que todo lo que me apoyabas, tus consuelos, las veces que me
escuchaste, y que me decías linda, todo eso era falso y no significó
nada para ti; solo fui una "chica más" y más que todo las veces que
yo te escuchaba tampoco significaban nada para ti. Ojalá algún día
puedas sanar ese vacío que solo lo llenan todas las niñas bonitas con
las que juegas y sé que ellas también te quieren porque al igual que
yo se quedaron calladas con tal de estar a tu lado. Ya no eres ese
chico que yo conocía, es más, ya no eres el chico del que yo me
enamoré. Ya no eres Julio, pero la verdad es que no soy nadie para
juzgarte, ponerte contra la pared y culparte por todo sería algo
injusto ya que yo de verdad también tuve parte de la culpa en esto y
tal vez solo estés tratando de devolverme el daño que algún día te
provoqué, lo acepto, pero como yo estoy pagando, sé que tú también
lo harás Y tal vez peor porque no cargas solo con mi dolor, sino el
de cuántas más, y en ese momento vulnerable te aseguro que
ninguna va a sentir lastima por ti, pero yo sí te quería al fin de al
cabo. Tú también la hiciste conmigo y si puede que todo haya sido
falso, pero en algo me equivoqué y no soy una persona rencorosa
con lo que algún día fue el que me hizo media tonta. Sí, me pareces
una persona tan hipócrita y falsa, y tú dices ser una persona fiel y me
engañabas. Si yo decía que no te iba a ser fiel sabiendo que tú no
tienes ni el derecho de decirle. Me acusabas de tener varios mozos
negando todo y acusándome de ser la mala por todo. Los dos
tenemos la culpa de lo de nosotros dos, nadie tiene la mayor culpa,
tenemos una conexión única pero un daño irreparable con esta carta
muere cualquier esperanza de volver a tener algo contigo. Solo digo
que, aunque yo sea una loca para muchos, yo sí me hice a un lado.
Tal vez no te seguiré amando, pero siempre tendrás una ayuda por
parte mía.

9/7/24

Ya hace meses que escribí esto y creo que mi opinión todavía no


cambiaría, pero sí siento eso que me dejaste que pensé no iba a durar
tanto. Después de todo "nunca fuiste mío", pero al parecer yo sí fui
tuya, pero no lo suficiente. Los últimos días te he visto muy
apagado. A veces me gustaría hablarte para poder ayudarte, pero
sería humillarme demasiado, aunque sí me han dicho que te hable,
pero así los dos estamos bien. Los dos. Pero para qué, si extraño
hablar contigo y más esos sábados donde me quedaba doliéndome la
barriga y de lo único que tenía ganas es de estar contigo. La verdad
es que ya me estoy poniendo muy romántica. La nostalgia me está
haciendo mal porque toda esa bonita imagen con la que recuerdo
que eres, sé que no lo eres, que todo fue falso porque mientras yo era
capaz de desvestirme por ti, tú ni me hablabas de lado, de hablar, y
eso de que me dejaste de hablarme porque no querías que la gente
hablara, por favor, nunca te importó. Tal vez no querías que la gente
supiera la verdad sobre ti, de que de verdad no es que la gente no te
valore, tú dejas de amar a esa persona y le das la entrada a otra,
manoseas, y poco a poco te alejas de esa persona. Nadie jamás se le
olvida escribirle a la persona que ama o la ghostea. Para ti resulta
fácil ser infiel y desentenderte de las personas, pero te juro que es
más horrible eso a solo hablar y terminarlo. Hablar, algo que parece
que no conoces, y siento que no me hablaste las cosas porque sabías
que no serías capaz y volverías, o es mi pensar.
Por ti
Al final del día eso lo decides tú. Me parece tan irreal que dijeras
que jamás te quise y que yo era una boba que se ilusiono sola,
¿enserio?, yo que me desviví por ti, guarde silencio ante al engaño
sabiendo que eso no era lo que yo quería ser, pero lo fui por ti, de
verdad , yo que solo a ti me he abierto emocionalmente, por que si
yo te decía que tu eras “ mi lugar seguro” no era por decir, por que
yo odiaba demasiado estar en mi casa y por esos días yo tambien
odiaba ir a porristas algo que era raro por que yo amo mi deporte
pero en esos momentos a lo único que amaba era a ti, él único que
yo llegaba toda emocionada a contarle mi todo mi día, y ¿Por qué?
Porque cada vez que yo estaba contigo era la niña más linda de este
mundo, que con una sonrisa en la cara iba a contarle a mis amigas lo
mucho que había mejorado gracias a ti. Contigo no solo conecte
emocionalmente, el yo dejarte y darte la confianza de tocarme, fue
un gran paso de superación de mi trauma en el cual me salte muchas
etapas, pero tambien volví a creer en un amor apasionado y tal vez
de esto no entiendas, espero algún día contarte y no terminar
traicionada por que te haría entender demasiadas cosas o dudas de el
porque yo era así contigo y todo el amor que yo te llegue a dar.

Sin importarte lo que di por ti.


Te agradezco por ayudarme a cerras demasiadas heridas del pasado
y no lastimarme para abrir nuevas, a veces me pongo a pensar y no
eres tan malo como creo pero de la manera que me desechaste sin
importarte ni un poquito mis sentimientos, sabiendo lo que yo daba
por ti de mi parte no tiene perdón en lo absoluto porque yo metí las
manos al fuego por ti y termine quemada y como una payasa a causa
de la horrible manera en la que me humille por ti y a pesar de esto
mi corazón ansia estar a tu lado de nuevo por que te amo pero no
quiero volver a convertirme en una persona débil que deja que se
aprovechen de su intensa forma de amar por que a pesar de todo lo
que me hagas, siempre estaré ahí en las buenas o en las malas, o en
las casi buenas, casi malas ya que mi amor por ti no cambiara por un
buen rato pero mientras eso pasa tengo que aprender a amarme a mi
misma y no te voy a mentir tu fuiste una pieza clave en mi proceso
de recuperación y me ayudaste demasiado, pero ahora este se me a
complicado más por que tu no estas, sin embargo no tengo porque
estarte rogando porque estuviste ahí si fue tu elección ayudarme,
quedarte, apoyarme, aunque no haya sido suficiente amor para que
te quedaras conmigo a pesar de todo lo que hiciste por mi a causa de
eso me parece irreal todo lo que me dice la gente de ti por que
conmigo tú eras demasiado bueno, por esos motivos tu excusa para
dejarme me parece algo super patético de tu parte porque ambos
sabemos que sin mi o conmigo la gente iba a hablar, sigues siendo el
mismo chico que va de mujer en mujer mendigando amor, solo que
conmigo fue diferente por que te ame con tanto amor que no supiste
ni como ocultarlo, o como manejarlo y lo único que se ocurrió hacer
fue dejarme de la nada sin explicación sin darme tus motivos
sinceros, sin importarte lo mucho que eso me podría afectar a mi o a
mi proceso que aunque era mi responsabilidad porque tu no tenias
nada que ver con mis problemas en esos tiempos, tu decidiste ser
parte de ella y aunque eras una parte demasiado importante no te
importo cuando te dijeron que me estabas haciendo daño y en cierta
parte eso nos diferencia mucho porque ambos sabíamos que íbamos
a ser daño a la otra persona yo te dije por qué antes de irme y me
preocupe por ti aunque nunca lograste ver todo lo que yo llegue
hacer por ti por que la gente se dedicó a inventarte cosas que yo no
había hecho y que lo único que estaba haciendo es desahogarme por
lo mal que lo estaba pasando y es unas de las razones por las cuales
yo no me dejaba llevar sobre lo que la gente decía de ti hasta que me
toco presenciarlo en verdad lo que tu eras y tu actitud que me
demostró que lo único que yo había hecho era idealizarte.
¿Cómo se controla los sentimientos?
Tú no hiciste nada para tenerme, mientras yo hice hasta lo imposible
para que tú fueras mío. Pero para que eso se hiciera realidad, se
necesitaban dos personas interesadas por el mismo amor. Yo contigo
no quería algo serio, porque sabía que, por más que yo quisiera, tú ni
de chiste me ibas a querer, porque en tu cabeza yo solo era un
simple pasatiempo, una diversión que podías tener cuando quisieras,
o una segunda opción. Por más que mi corazón me nublara la
realidad, siempre lo supe. Sabía que no podía tener sentimientos por
ti porque los tuyos no eran los mismos que los míos, y que eso era lo
mejor para mí. Pero dime, ¿cómo controlo al corazón? ¿Cómo dejo
de sentir? ¿Cómo no creerte cuando me tratabas como siempre lo
había deseado? ¿Cómo no amarte cuando me ayudaste tanto?
Explícame, ¿cómo no darle una segunda oportunidad al amor si
contigo no solo conecté románticamente, sino también físicamente?
Sabiendo que soy una niña de 14 años, que debería estar viviendo su
primer amor sincero, no su primera vez, cuando ni mental ni
físicamente estoy lista para vivirlo.

Pero no puedo culparte por eso, porque no es tu culpa que el mundo


ya me haya tratado tan mal. Aun así, el hecho de que no solo conecté
contigo románticamente, sino de todas las formas posibles, hizo que
fuera muy difícil controlar mis sentimientos, para evitar sentir
demasiado por ti. Y luego vienes a decirme que no sienta nada por
ti, o le dices a todos que "ella se ilusionó sola." ¿En serio? Si los dos
dimos señales de que nos queríamos. Si pasó lo que pasó, fue porque
ambos lo permitimos. Para mí, se notaba el interés de las dos partes,
aunque no fuera el mismo. Y ambos sabemos que tú fuiste el
primero en empezar a tratarme de maneras que no eran solo de
"amigos." Y sí, yo accedí, y ambos acordamos dejar que las cosas
"fluyeran." No sé ni por qué acepté, sabiendo que estaba mal y que
no era lo que yo realmente quería. Pero te vi tan convencido, tan
decidido, que quise intentarlo. Ese fue mi error: seguir el juego,
porque en serio no te quería perder.
Entonces, sí, parte de la culpa la tenemos los dos. Y si fue de los
dos, ¿por qué solo yo quedé como la boba ante todos? Tal vez
porque yo fui la única que no estaba mintiendo. Me esforcé tanto por
corregir mis errores del pasado contigo, por mostrarme lo más real
posible en esa especie de "recocha" que teníamos, porque ni relación
era. Por eso conociste una versión de mí que muy pocas personas
conocen: la parte más vulnerable de mí. La Hita que deja que las
personas le hagan daño sin dejar de amarlas, porque esas personas
son su luz en una vida llena de oscuridad y tragedias. Y nunca dejaré
de creer en ellas, incluso si todos están en su contra; si es así, yo
estaré en contra de todos.

En mi vida solo hay tres hombres a los que les he entregado mi amor
incondicional, y tú eres uno de ellos. Pero a veces pienso que no te
mereces todo el amor que te doy sin medida. De cierta manera,
entiendo que no puedas manejar lo que te ofrezco, que te parezca
abrumador. Pero esa es mi estúpida forma de amar. Te amé
demasiado, y no pude evitar darte la mejor parte de mí. Lo siento
por no saber manejar mi manera de amar. Y sé que no se trata de
merecer, sino que cada persona da lo que tiene en su corazón. Y si el
destino quiso que tú conocieras esa parte de mí, no soy nadie para
decir que no deberías estar ahí, porque lograste que me quedara, y
los únicos que han logrado eso son mis tres lucecitas.

JULIO.
Dicen por ahí que uno “Jamás se encuentra a la misma piedra
cuando vuelve al mismo rio” y cuando lo escuche por primera vez
me hizo entender muchas cosas, en mi caso “volvió a ser julio, pero
esta vez tú ya no eres ESE Julio” y te entiendo yo tampoco soy la
misma que conociste ese julio, de la cual te enamoraste. De la cual
querías algo “lindo y duradero” pero eso es la vida un lugar de
diversos cambios que para bien o para mal los debemos hacer para
crecer como personas.
Hay mucho de mí que la gente no conoce por que solo conocen lo
que yo quiero que sepan, realmente la veces ni se lo que soy, pero
creo que eso está bien apenas soy una adolescente creando su
personalidad que lamentablemente he pasado por muchas
situaciones que me ha llevado a ver la muerte muchas veces a pesar
de lo Joven que soy y que todavía me hace falta demasiado por vivir
creo que sabes lo suficiente sobre mi como para saber todo el
sufrimiento que he llegado a pasar pero creo que he sido fuerte
gracias al apoyo de muchas personas que puede que no estén en mi
vida pero les sigo guardando demasiado cariño por salvarme la vida
en el momento que lo necesite, una de esas personas. eres tú,
Gracias por que en el momento en el que lo necesite estuviste
conmigo y lograste salvarme y alegrarme la vida más veces de las
que te imaginas tal vez después de todo no todo tiene que ser malo
tú me quisiste y me ayudaste mucho en su momento o así me gusta
verlo a mí, y por hacerme saber que aunque sea el peor día hay gente
que me quiere porque siendo la peor, tú me quisiste.

Me encanto ser tu moza. sin importar todo lo que paso, lo único que
me sacaba de lo horrible que me sentí con tan solo un abrazo eras tú,
tu compañía me hacía sentir tan bien que aunque estaba sola no lo
notaba por que estabas tan presente en mí que era lo único que yo
necesitaba, pero tal vez estaba me acostumbre tanto a tu compañía
que no sabía lo sola que estaba y no pensé en las consecuencias que
todo eso traía y ahora las estoy viviendo. He estado conociendo
gente y empezando a conocer un poco más de mundo los últimos
dos años y jamás pensé que personas como tú o tu prom me podrían
llegar a marcar tanto como lo hicieron y me siento feliz de estar
aquí, de estar viva para ver a ustedes cumplir lo que tanto les costó y
a pesar de que verlos ir es lo que más me cuesta y se lo mucho que
me va a doler ese es el ciclo de vida de todos y amar tambien
significa poder dejar ir y yo a ustedes, los amo con todo mi corazón,
te quiero a ti, y te quiero ver cada día siendo mejor aunque no sea a
mi lado y trate de ignorar tu simple existencia para no quererte o al
menos intentar no hacerlo tan seguido…
22/07/24 (Tu ausencia me atormenta día tras día)
Porque tú eres una de los principales causantes de mis desvelos, el
hecho de que siempre estés en mi mente, me atormenta todos los
días, no me de vivir ni disfrutar nada de lo que debería de hacerme
feliz, cada decaída, cada logro, me recuerda que todo sería mejor si
tú estuvieras aquí, que sí pudiera compartir contigo mis problemas
tal vez no serían tan difíciles o si estuvieras aquí mis logros tendrían
tú nombre y apellido y sería mucho más satisfactorios por tener con
quien celebrar. Tú ausencia me atormenta día tras día, no me deja
dormir, tal vez para ti no sea nada y yo soy una exagerada y
dramática, pero tú nunca has temblado por días por la ansiedad, ni
tampoco te has tragado la tristeza porque si no soy una boba que se
dejó enamorar de alguien que no más la quería de moza, menos has
dejado de comer porque la tristeza te ha ganado, nunca no has
podido Concentrarte en clase porque tu cabeza solo está pensando
todos los días en tu idea que me persigue y no puedo desaparecer la
imagen tuya de mi mente y que pagaría lo que fuera para poder estar
en paz. No tengo ni la más mínima idea de cómo lo voy a hacer
porque desde que te fuiste de mi vida no te he podido sacar ni de mi
mente ni de mi corazón porque en alguna parte de mi ser siempre
estarás y no te recuerdo con enojo o rencor porque no soy de esas
personas a pesar de todo lo que me hiciste.

August 2/08/24
Ahora agosto empezó con una gran Sorpresa que de verdad jamás
me imagine que pasara aunque para que te miento yo ya había
soñado que pasaba ocho días antes pero no me lo creí porque para
mí era imposible que tú me pidieras perdón, era lo que más deseaba
pero lo creía imposible y es un acto que siempre agradeceré, ahora
que lo pienso bien después tambien me llenaste de mentiras entonces
no se para que te llenas la boca de disculpas si lo vas a seguir
haciendo.
En ese instante que me llamaste por primera vez yo no quería voltear
no porque no quisiera verte o hablar contigo porque te vengo a ser lo
más sincera de el mundo y eso que hiciste era lo que mis deseaba en
este mundo pero ya no, ya no quería quedar como una "boba" Para
todos, a pesar de eso no quería ignorarte, mi corazón no me daba
para hacerlo, y en ese momento que me detuviste sentí como si el
mundo se hubiera parado y lo único que había era nosotros dos con
tu voz diciendo "Perdón por todo” que cuando lo escuche me rompió
completamente, trate de no demostrarlo pero todo me ganó y me
permití sentir lo que tenía atrancado desde hace mucho tiempo y
después de meses por fin sentí como una carga que había cargado
todo este tiempo se iba disminuyendo, me di cuenta que era algo que
necesitaba y mientras te abrazaba tantas cosas se me vinieron a la
cabeza, la que más se repetía era el “Por favor quédate un rato más,
no me vuelvas a dejar sola”, desde ahí me pude dar cuenta de
muchas cosas que a veces no lograba entender, una que fue una de
las que más me dolió darme cuenta porque toda mi vida se ha
tratado de ella y es que “puedes amar a quien más te hizo daño” es
tan cierto que siempre me dan ganas de llorar al ver al punto a el que
puedo llegar solo por querer a una persona que aunque esa persona
me haga y haga y haga daño, jamás voy a poder odiar a esa persona
y la seguiré queriendo a pesar de todo y tranquilo tampoco me
hiciste tanto daño.

Y otra de ellas es mi lucha constante de que “perdonar es más difícil


que odiar” es algo que siempre me han regañado por serlo, pero la
verdad no saben que cuando uno perdona se quita un peso de encima
y ya por fin puedes soltar a esa persona o talvez, arreglar las cosas y
eso no está mal porque somos humanos y vivimos cometiendo
errores, no está mal, ya que cada uno merece una segunda
oportunidad nos.

Ya no quema mirarte a los ojos y al final de todo cuando uno intenta


ser fuerte es cuando más débil se ve. Te quiero demasiado, espero
que sea muy feliz con quien estés, te valore como el gran hombre
que eres, se que te falta por pagarle al karma algunas cosas, pero
siempre estaré para ti mi vida.

21/08/24

la verdad no esperaba o bueno no creía que no te iba a volver a


escribir otra página pero bueno aquí estamos de nuevo, ya no puedo
con la tristeza de nuevo, yo de verdad te creí ese día, pensé que al
final de todo si me habías querido, Si había Significado algo para ti
o lo seguía Siendo pero resulto siendo la misma mierda peor
perdonarte y no poder estar a tu lado me ha desgastado tanto pero no
lo sé tal vez tienes derecho a llevarte mi brillo, bueno tal vez mi
felicidad, que es lo que has estado haciendo todos estos meses y no
puedo comprender de verdad como esperas que “sea feliz” con todo
lo mierda que me dejaste. Y lo que más me duele de todo esto es que
tú lo sabes, tú sabes el daño que me hiciste, sabes que lo sigues
haciendo, y que me dejaste con todo el amor en las manos y a pesar
de todo nunca te importo, no te importo ni un poco toda la confianza
que te entregue, el amor, el tiempo, o bueno todo eso que importa si
nunca fuiste mío

Never mine
Nunca fuiste mío, pero de alguna manera lograste algo mucho más
profundo: hiciste que volviera a confiar en otra persona, que me
sintiera capaz de dejarme tocar por un hombre sin miedo. Contigo se
desvanecieron esos fantasmas que me hacían temer el contacto
físico, que me alejaban del calor humano. Volviste a despertar en mí
esas ganas de vivir, de ver la vida con ojos diferentes, de recuperar
una sonrisa que sentía perdida desde hacía tanto tiempo. Me
ayudaste a dejar atrás esos deseos oscuros de desaparecer, a soltar
las ganas de morir que me habían acompañado por tanto tiempo.

En ese proceso, intenté algo que había creído imposible: aprender a


quererme a mí misma. No fue fácil, porque detrás de cada avance,
seguían presentes las cicatrices de lo que viví. A veces me parecía
increíble que, después de haber sufrido tanto, después de todo el
dolor que me marcó y que casi me llevó a quitarme la vida, pudiera
volver a sentir algo tan puro y real. Pero ahí estabas tú, y de alguna
manera, lograste ser parte de esa sanación.

Sin embargo, al final de todo esto, me quedo con una pregunta que
no deja de dar vueltas en mi cabeza: ¿Fuiste mío, aunque fuera por
un instante? ¿Tengo derecho a demostrar este dolor que siento por ti,
a llorarte como lo haría cualquier otra persona que sufre por
alguien? Porque, aunque todo lo que vivimos fue a escondidas,
incluso mi dolor ha tenido que ser oculto. No pude siquiera
mostrarme vulnerable, por miedo a que otros me llamaran "boba",
por miedo a que no entendieran la magnitud de lo que significaste
para mí. Nadie más pudo ver ni el 10% de lo que realmente viví
contigo.

Sé que para los demás lo que vivimos fue algo fugaz, breve y
prohibido, pero para mí fue mucho más que eso. Fueron momentos
que me devolvieron a la vida, momentos que me recordaron lo que
es sentir y ser humano. Y aunque no duró tanto como hubiera
querido, y aunque estaba condenado desde el principio a ser algo
clandestino, te juro que valió la pena. Cada segundo contigo valió la
pena. Y nunca me arrepentiré de haber sido esa “boba” que amó en
silencio, porque lo que sentí fue lo más hermoso que he
experimentado.

Incluso ahora, mientras enfrento el dolor de tener que alejarme de ti,


de dejar atrás todo lo que significabas para mí, no me pesa lo vivido.
El dolor es grande, sí, pero el amor y los momentos compartidos
fueron mucho más fuertes. Y al final, eso es lo que me queda: la
certeza de que, aunque dolió, valió cada instante.
Un amor que no me pertenecía, pero se sentía real
20/09/24

Nuevamente te vuelvo a pensar, y con cada pensamiento siento


cómo este dolor se clava más profundo en mi corazón, como si una
estaca se enterrara un poco más cada vez que te veo, o alguien me
habla de ti. Es una herida que no puedo sacar, porque sé que, si lo
intento, derramaré más sangre de la que ya he perdido. Es como si
estuviera atrapada en este ciclo doloroso, donde no puedo dejar de
pensar en ti, y cada recuerdo duele más que el anterior.

Me siento tan, pero tan boba, ingenua, estúpida. Sé que no debería


ser tan dura conmigo misma, pero no puedo evitarlo. Entiendo que
todo esto viene de mi absurda manera de amar, de dar sin límites, sin
condiciones. Lo sabía. Sabía que lo que me estabas haciendo no era
justo, que en el fondo había algo mal, que lo que recibía de ti era
solo una parte, un 30% de lo que realmente estabas dando. Pero aun
así, me conformaba. Aceptaba que me dabas las sobras de tu amor,
esas migajas que dejabas al final del día. Sabía que no me pertenecía
por completo, pero lo poco que me dabas se sentía más real que
muchos otros amores que fueron "correspondidos".

No entiendo por qué llegué a darte tanto de mí, por qué me entregué
al 100% solo para recibir lo que te sobraba. Pero lo hacía, y lo hacía
con felicidad. Adoraba cada momento contigo, porque ¿cómo no iba
a creer en la persona que me quiso en mi peor momento? En
aquellos días oscuros, tú estuviste ahí, y me aferré a la idea de que
eso significaba algo más. Creí que merecías mi mejor versión, que te
había ganado ese derecho con tu bondad. Pero ahora me pregunto:
¿yo merecía tu peor versión? ¿Acaso fue el karma, o el destino, o
simplemente fui yo quien se cegó ante la verdad?

No lo sé. Lo único que sé con certeza es que te amo, y eso es lo que


más me está matando ahora mismo. Amo a alguien que ya no está,
alguien a quien no puedo correr a contarle mis alegrías, a pesar de
que estuvo presente en mis tristezas. Antes, solía pensar que eso
bastaba, que tu presencia en los malos momentos compensaba la
falta de todo lo demás. Pero ahora veo las cosas de otra manera. Me
doy cuenta de que, al final, no fue suficiente. Porque aunque
estuviste en mis tristezas, ya no estás aquí para compartir mis
alegrías.

Y eso duele. Duele tanto saber que, mientras yo sigo pensando en ti,
en lo que fuimos, en lo que pude haber sido para ti, tú ya me has
olvidado. Me consume esta sensación de vacío, este silencio que
quedó entre nosotros. Y aunque me duele admitirlo, me estoy
quedando sin fuerzas para seguir luchando contra este sentimiento,
contra este amor que me sigue atando a ti, a pesar de todo.

¿El cielo o el infierno?

Y, a pesar de haber llorado en tu pecho, no te importó. No sé qué


esperaba de ti. Si ni siquiera cuando supuestamente me amabas te
importé, ¿cómo iba a ser diferente ahora? Lo que sucedió el 1 de
agosto sigue siendo una incógnita para mí. No sé si fue un alivio o
una tortura más. Volviste, como siempre lo hacías, para romperme
de nuevo, como si fuera una promesa más que te sentías con el
derecho de quebrar. Lo hiciste con una crueldad tan casual, con la
excusa de "pedir perdón" y ser "honesto", como si eso fuera
suficiente para que yo pudiera "ser feliz". ¿Cómo pudiste decir eso,
sabiendo que mi felicidad siempre fuiste tú, y que sin ti no la
encontraría?

Ha pasado tiempo, y lo sé. La magia se ha ido, lo veo, lo siento.


Podría estar bien, debería estar bien, pero no lo estoy. Y aquí entre
nosotros, me pregunto: ¿lo nuestro te dolió tanto como me dolió a
mí?

Sé que aún tienes mis cartas, las de aquellos primeros meses en los
que todo parecía tan nuevo y puro. No puedes deshacerte de ellas
porque te recuerdan a mí, a esa inocencia que en algún momento
viste en mí. No importa lo que pase, no puedes soltarlas porque
contienen recuerdos que no puedes borrar. Tú me mantuviste como
un secreto, pero yo te guardé como un juramento sagrado, uno que
nunca rompí.

Me aferro a tu ausencia, aunque sea lo que me está matando


lentamente, porque tu presencia era lo único que me mantenía viva.
Me enseñaste colores que ya no puedo ver sin ti, sombras que ahora
cubren todo lo que fue brillante. Eras lo más bonito que tenía, y
todavía me cuesta creer cómo puedes decir que amas a alguien sin
darte cuenta de que, frente a ti, esa persona se está muriendo por
dentro.

Incluso en mis peores días, merecía algo mejor que el infierno al que
me arrastraste después de haberme mostrado lo que creía que era el
cielo.

Siempre lo supiste
Aunque en el fondo quise que no te quedaras con culpa, siempre lo
supiste. Desde el principio sabías que no querías estar conmigo, y
aun así, me dejaste enamorarme de ti. Fue un acto tan cruel, porque
no te importó el tiempo, mis sentimientos, ni mi corazón. Nada de
eso importaba porque desde el primer "te quiero", desde la primera
carta, el primer abrazo, la primera vez que te invité a mi casa, y
desde el primer beso, sabías que ya me tenías.

Capturaste el brillo de mis ojos sin pensar siquiera en razones para


intentarlo de verdad. No te importaba si sufría, si lloraba. Tomabas
partes de mí sin mirar atrás, sin detenerte en ningún momento, solo
hasta que ya no tenías más que destruir de mí.

Yo, por otro lado, hubiera detenido el tiempo si eso significaba


quedarme contigo. Pero tú no me detuviste. No lo hiciste en ese
momento exacto en que ya sabías que me romperías el corazón.
Porque nunca pensaste en mí, ni siquiera en aquellas noches en las
que éramos nuestra única compañía. En esas noches en las que tú
parecías ser mi única motivación para seguir adelante, nunca hiciste
nada por salvarme.

Me sacaste de la miseria solo para volver a hundirme. Y por alguna


razón, espero que nunca tengas que sentir lo que yo he sentido, ni
experimentar el dolor que me hiciste pasar. Y peor aún, el dolor que
le hiciste sentir a todas las demás.

Entre la ausencia y la duda


¿Tienes idea de cuánto daría por volver a esos momentos en los que
lo único que me importaba eras tú? Aquellos días en los que no
podía dejar de sonreír, en los que mi corazón latía tan rápido solo
con verte. Me aferraba a cada instante a tu lado, ignorando todo lo
malo, porque en esos momentos lo único que importaba eras tú. Y
ahora me pregunto: ¿valió la pena? ¿Valió la pena arriesgarlo todo
por lo que tenemos ahora, por lo que queda de todo aquello?

Tu respuesta siempre ha sido el silencio, un vacío que me devora. Sé


que eres leal y que entregas cariño, amor y comprensión, pero lo que
más me atormenta es que, lamentablemente, no fue conmigo. Esa es
la razón por la que mis días y mis noches se han vuelto
insoportables, la causa de mis lágrimas.

¿Por qué ella y no yo? ¿Por qué a ella sí le ofreciste todo lo que a mí
me negaste? ¿Por qué con ella no te importó lo que dijera la gente,
pero conmigo sí? ¿Por qué a ella le disté tu amor sin reservas, y yo
nunca fui merecedora de tus flores? Estas preguntas me persiguen,
me atormentan, y cada día siento como si llevara una daga clavada
en el alma desde que te fuiste.

Sigo preguntándome por qué, pero la respuesta nunca llega. Tal vez
ya la sé, pero no quiero aceptarla. Y, una vez más, me enfrento a esa
eterna duda: ¿por qué no fui suficiente para ti?
La cortada más profunda
La verdad, todo esto me ha dolido más que cualquier corte que
alguna vez me hice. Cada recuerdo, cada pensamiento sobre ti, es
como una herida abierta que nunca deja de sangrar. No hay color
que me cause más nostalgia que el que se asocia a tu presencia, y
ahora, a tu ausencia. A veces me pregunto qué quedó de ese chico
que una vez pensé que sería mi refugio, mi lugar seguro. Ese niño al
que creí que podía confiarle todo, el único hombre que creía bueno
de verdad. Pero me equivoqué. Y aunque sé que cometer errores es
parte de la vida, lo que realmente duele es no aprender de ellos. Lo
que está mal es seguir haciéndole daño a los demás, como tú lo
hiciste conmigo, sin mostrar un mínimo de arrepentimiento.

En el fondo, siempre lo supe. Supe desde el principio lo que me ibas


a hacer. Sabía que me ibas a destrozar, que me iba a costar una
eternidad sacarte de mi cabeza. Sabía que esto sería un infierno, que
lo iba a pasar horrible, porque desde el primer momento me quedó
claro que no querías un compromiso conmigo. Para ti, yo no era más
que un juego, una pieza más en tu tablero, alguien con quien pasar el
tiempo sin mayor responsabilidad. Sabía que no me estabas dando ni
la mitad de lo que yo te estaba entregando, y aun así seguí ahí,
engañándome a mí misma.

Mentías, lo sabía. Sabía que lo que decías y hacías no era


completamente sincero, pero no quería verlo. Sabía que no debía
regresar a ti, que era una mala idea, que me estaba condenando.
Pero, aun así, el dolor no disminuye. Porque lo más cruel de todo es
que tú también lo sabías. Sabías que yo te amaba más de lo que tú
me amabas a mí, sabías que me lastimarías, que me destrozarías por
completo, y aun así no hiciste nada para evitarlo. Me dejaste seguir
adelante, me dejaste enamorarme más, y nunca te detuviste a pensar
en lo que eso me haría.

Cuando nos veíamos en Macarthur, todo era perfecto, o al menos


eso creía yo. Eran esos momentos los que me hacían pensar que tal
vez, solo tal vez, tú también sentías algo real por mí. Lo pasábamos
bien, reíamos, y yo sentía que cada segundo contigo valía la pena.
Para mí, esos encuentros lo eran todo. Pero para ti, nunca fue más
que un juego. Un juego cruel, en el que cada día enterrabas más
cuchillos en mi corazón con tus ausencias, con tus mentiras, con tus
excusas baratas, con los rumores que escuchaba de ti, con tu
constante indecisión.

El simple hecho de que me soltaras tan fácilmente es lo que más


duele. No solo me dejaste, sino que lo hiciste sin mirar atrás, sin
darte cuenta de lo que me estabas haciendo. Ese abandono, esa
indiferencia, dejó una marca en mí que no puedo borrar. Es una
herida que me quema por dentro, que me obliga a hacer mil cosas
para no pensarte, para ocupar mi mente con algo más que tú. Pero,
aun así, todos los días, de alguna manera, logras hacerme sentir
triste. Logras invadir mis pensamientos, mis emociones, y me
encuentro ahogada en este vacío que dejaste.

Lo más irónico de todo es que, incluso en mis momentos de alegría,


en mis logros, sigues estando presente de una forma u otra. No
puedo disfrutar plenamente de nada porque sé que no puedo correr a
contártelo, que ya no eres parte de mi vida para compartir esos
momentos. Tu ausencia lo empaña todo, y saber que no estás ahí
para celebrar conmigo lo que he conseguido, lo hace todo
incompleto. Es como si tus sombras estuvieran siempre ahí,
recordándome lo que pudo haber sido, lo que nunca fue, y lo que
jamás volverá.

¿El final?
Después de todo lo vivido, de las palabras no dichas y las emociones
que me sobrepasaron, me encuentro aquí, dejando estas líneas como
testimonio de lo que significaste para mí. Ha sido un camino lleno
de altibajos, de amor no correspondido como esperaba, pero real en
cada uno de sus momentos. Me he dado cuenta de que, a pesar del
dolor, he aprendido mucho más de lo que imaginaba. He descubierto
una fortaleza dentro de mí que no conocía, una que me ha permitido
llegar hasta aquí, a este punto donde te perdono.

Te perdono por todo lo que pasó, por lo que hiciste y lo que no


hiciste, por los silencios y por las palabras que nunca dijiste. No
porque haya olvidado, sino porque he entendido que el amor no
siempre se manifiesta como uno lo espera. A pesar de todo, te sigo
amando, y ese amor, aunque diferente, aún tiene fuerza. Sé que esta
no es una despedida, ni tampoco un cierre definitivo. Tal vez
nuestras vidas se crucen nuevamente, o tal vez no, pero lo que viví
contigo sigue siendo parte de mí, y eso nunca cambiará.

No es fácil decir adiós a lo que todavía vive en mi corazón. Quizás


tú también lo sientes de alguna forma, aunque no lo digas. Porque,
aunque la distancia nos separa ahora, el tiempo dirá qué será de
nosotros.

Te sigo llevando conmigo, aunque las palabras que ahora escribo no


sean más que un eco de lo que algún día fuimos.

¿Continuara…?
1. Canciones
2. Piénsalo – Junior H
3. Ella dijo - Estelares
4. Extssy model – Junior H
5. Flores en anonimo – Eladio Carrion
6. Te amo, Te extraño – Guayacán Orquesta
7. Where are you now – Faded
8. Ya no hace falta – Sen Senra
9. Lo siento BB:/ - Bad Bunny, Julieta Venegas, Tainy 0:11- 0:43
10. Somewhere only know
11. Deja vu – Olivia Rodrigo
12. Glimpse of us – Joji

También podría gustarte