Paloma-González - López - RESPUESTA A LA PRUEBA DE EVALUACIÓN CONTINUA - V3
Paloma-González - López - RESPUESTA A LA PRUEBA DE EVALUACIÓN CONTINUA - V3
TEXTOS CONTEMPORÁNEOS
CURSO 2020-2021
ALUMNA: Paloma González López
DNI: 02507311N
FECHA: 10 de Abril 2021
Primera pregunta
A lo largo de los años nos encontramos mucha novelas que tratan el tema
de la guerra y la posguerra. Si nos referimos a los autores estudiados en la
asignatura, debemos nombrar a dos: Camilo José Cela y Almudena Grandes.
Camilo José Cela es una autor que, aún siendo de ideología conservadora, es
capaz de reflejar con crudeza la miseria de la posguerra, especialmente en
dos de sus novelas más importantes: La Familia de Pascual Duarte y La
Colmena.
. Sobre La Familia de Pascual Duarte (1942), su primera novela, comenta
Zamora Vicente (1962:23-50): “la crítica vio en ella una novela de valores
positivos, pero, en general, la matizó de inclinación exagerada a lo morboso,
a lo truculento”. Esto fue debido no solo a la brutalidad del protagonista
sino también al retrato descarnado de la España rural de la posguerra.
Y, en el fondo, toda esta gente vive bajo una gran sombra, una amenaza: el espectro de la
guerra civil, con su cambiante cara. Unas veces es el pasado horror, las privaciones; otras,
las consecuencias, la represión, el terror de igual cariz y distinto signo. Lo de menos es esa
necesidad de andar comerciando con las ruines raciones del suministro, o hacer
malabarismos para convertir los chicharros fritos en excelente plato, o la triste sonrisa de
hablar de sobrealimentación a base de un huevo frito o de un poco de leche -seguramente
adulterada-. El Madrid hambriento y enfermizo de la postguerra, los ojos brillantes, el
aliento acezante, sale a cada paso
La Guerra Civil fue un hecho brutal y traumático que Neruda supo plasmar,
como extranjero, desde su propio horror, pues le alcanzó de lleno. La
posguerra supuso en primer lugar dolor y miseria y, a largo plazo, el
aislamiento de España y como consecuencia, un retraso cultural, social y
económico difícil de remontar, aún en la actualidad. Voces de distinto signo
político han sido capaces de retratar lo que ha supuesto y muchos
escritores siguen escribiendo sobre el tema, quizá porque la herida aún no
se ha cerrado.
Segunda Pregunta
Respecto a su función, no cabe duda que se trata del profeta que escribe la
historia de la familia y del mundo de Macondo, desde su inicio a su destino
final, mostrando que todo está determinado. La escribe en sanscrito y
además cifrada, como corresponde a la literatura apocalíptica. Contribuye
de manera decisiva a la circularidad de la historia, escrita dos veces, por
García Márquez y por él, que empieza con la escena de los imanes, en la que
Melquiades es protagonista y acaba con sus predicciones interpretadas por
Aureliano Babilonia.
Respecto a los recursos estilísticos analizo cada una de las partes del
Soneto:
- Primer cuarteto
Empieza el cuarteto con dos versos llenos de exclamaciones, en los que el
poeta urge a su amante. Las exclamaciones expresan sentimiento y
permiten iniciar el poema con intensidad.
La referencia a la guirnalda es muy interesante. Salazar Rincón(1999:495-
519) en su artículo sobre las guirnaldas se refiere al uso de esta palabra en
el soneto que comentamos, afirmando que “la corona vegetal es al mismo
tiempo el emblema del amor y la enseña de la muerte”. En el verso segundo
Lorca exhorta a su amante “¡Teje deprisa!”, y entiendo que lo que debe tejer
es la guirnalda, por lo que me inclino a pensar, que en este caso, es más un
símbolo de la unión de amantes entrelazados o “entretejidos” que de
muerte.
Pero no cabe duda que la muerte esta presente en el mismo verso con la
exclamación directa ¡que me muero!, que, si bien podría tomarse como
signo de impaciencia también puede ser una referencia directa a la muerte,
pues en el verso tercero y cuarto escribe “que la sombra me enturbia la
garganta /y otra vez y mil la luz de enero”. Esta “sombra” es, en mi opinión,
la misma “sombra en la cintura” de la gitana del “Romance Sonámbulo” es
decir, la muerte.
La muerte enturbia la garganta en una original sinestesia que comunica
sensación de angustia, y además, la muerte enturbia la luz de enero, una y
mil veces, hipérbole que aporta intensidad.
Hay que destacar el contraste de los dos primeros versos que expresan
sentimiento vivo y urgente con los dos segundos que trasmiten la angustia
de la muerte y su oscuridad. Esta antítesis comunica dramatismo a este
cuarteto de inicio.
- Segundo cuarteto
Empieza Lorca el cuarteto en un tono más equilibrado que el primero. En el
verso quinto introduce una variación verbal del tiempo querer que parece
una referencia al romance en el que abundaban este tipo de construcciones.
Sirve para insistir en el tema del amor, dándole un toque popular.
La estructura bimembre se repite en el siguiente verso proporcionando
armonía a ambos versos. A esta armonía contribuyen también las
construcciones paralelas “aire de estrellas”, “temblor de planta” y “espesura
de anémonas”. Estas tres construcciones, además de armonía traen al lector
tres imágenes del amor que Lorca quiere plasmar: el “aire de estrellas” nos
lleva a lo más alto, en antítesis con “temblor de planta”, que baja a la tierra,
comunicando estremecimiento y emoción a través del temblor. La
“espesura de anémonas” sugiere color y abundancia de sentimientos en
forma de flores, como metáfora, que es capaz de levantar el amor, de esta
manera personificado.
Y acaba el cuarteto “con oscuro gemir un año entero”. La palabra “oscuro”,
que hace referencia a la pérdida de claridad que provoca el amor, la utiliza
aquí Lorca en referencia al gemido de amor que dura un año, acabando de
esta manera el segundo cuarteto en hipérbole, como el primero.
- Primer terceto
Continúa la descripción del amor comenzada en el segundo cuarteto. Lorca
presenta su amor como un paisaje y le pide a su amante que lo goce y lo
quiebre. El terceto se desarrolla en un juego de contrastes a través de las
palabras:
Con la idea de aflicción y de enfermedad que sugiere el amor como obsesión loca
llegamos a uno de los nexos más fundamentales y más profundos de la concepción
petrarquista del amor: el amor como sufrimiento, como enfermedad, y en íntima
vinculación con la muerte[…] así lo encontramos también en la poesía de Lorca (y no
solo en la tardía), quien deben inspirarse tanto en la tradición popular como en varias
tradiciones cultas en “En Casida del amor herido por el agua” leemos “¡Ay que furia
del amor, que hiriente filo!” ;en “Llagas del amor” el poeta está en su cama herido en
¡Ay voz secreta del amor oscuro” al glosar el primer verso el poeta exclamación
sencillamente “¡hay herida!”
El verso 13 “boca rota de amor y arma mordida” insiste en la idea del amor
que duele y es un juego de palabras, la boca que puede morder esta rota y el
alma inasequible está mordida, formando una sinestesia inesperada que
impacta con una imagen pasional del amor vivido por Lorca.
Como resumen final del análisis destacaría que se trata de un soneto cuyo
tema recuerda al tópico Carpe Diem de los clásicos, siguiendo además la
misma métrica que ellos utilizaban, pero contrastando su delicadeza al
referirse al amor y al paso del tiempo con la intensidad de Lorca, en un
soneto de erotismo evidente en el que amor, dolor y muerte se
entremezclan.
BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA
VARGAS LLOSA, Mario [2007] “Cien años de soledad. Realidad total, novela
total” Cuadernos Hispanoamericanos, núm. 681.
Edición digital disponible en
http://www.cervantesvirtual.com/obra/cien-aos-de-soledad-realidad-
total-novela-total-0/