DECLARANDO LO QUE ESTÁ

ESCRITO EN EL LIBRO DE LA
VERDAD
Domingo, 18 de abril del 1999
Monterrey, Nuevo León, México
 NOTA AL LECTOR

Es nuestra intención hacer una transcripción lo más fiel y

exacta posible de este Mensaje y dejarlo tal como fue
predicado; por lo tanto, cualquier error en este escrito es
estrictamente error de audición, transcripción o impresión, y
no debe interpretarse como error del Mensaje.
Esta conferencia escrita puede ser verificada con la
grabación original en video o en audio.
Se recomienda usar este folleto solamente para propósitos
personales de estudio y repaso.
 DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO
EN EL LIBRO DE LA VERDAD
Por: William Soto Santiago

Domingo, 18 de abril de 1999

(Primera Actividad)
Monterrey, Nuevo León, México

Muy buenos días, amados hermanos y amigos presentes

aquí en Monterrey, Nuevo León. Es para mí un privilegio
grande estar con ustedes en esta ocasión para compartir con
ustedes unos momentos de compañerismo alrededor de la
Palabra de Dios y Su programa correspondiente a este tiempo
final, para así ver lo que Dios tiene que declararnos en este
tiempo final con relación a lo que está escrito en el Libro de la
Verdad.
Y nosotros deseamos ver qué está escrito en el Libro de
Dios, el Libro de la Verdad, para este tiempo final; porque no
va a suceder otra cosa, sino lo que está escrito en el Libro de
la Verdad, en el Libro de Dios.
Quiero leer en el Libro del profeta Daniel [capítulo 10],
versos 4 al 21, donde dice:
“Y el día veinticuatro del mes primero estaba yo a la orilla
del gran río Hidekel (o sea, se encuentra Daniel en Babilonia,
allá, estaba allí a la orilla del río).
Y alcé mis ojos y miré, y he aquí un varón vestido de lino,
y ceñidos sus lomos de oro de Ufaz.
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DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

Su cuerpo era como de berilo, y su rostro parecía un

relámpago, y sus ojos como antorchas de fuego, y sus brazos
y sus pies como de color de bronce bruñido, y el sonido de
sus palabras como el estruendo de una multitud.
Y sólo yo, Daniel, vi aquella visión, y no la vieron los
hombres que estaban conmigo, sino que se apoderó de ellos
un gran temor, y huyeron y se escondieron.
Quedé, pues, yo solo, y vi esta gran visión, y no quedó
fuerza en mí, antes mi fuerza se cambió en desfallecimiento, y
no tuve vigor alguno.
Pero oí el sonido de sus palabras; y al oír el sonido de sus
palabras, caí sobre mi rostro en un profundo sueño, con mi
rostro en tierra.
Y he aquí una mano me tocó, e hizo que me pusiese sobre
mis rodillas y sobre las palmas de mis manos.
Y me dijo: Daniel, varón muy amado, está atento a las
palabras que te hablaré, y ponte en pie; porque a ti he sido
enviado ahora. Mientras hablaba esto conmigo, me puse en
pie temblando.
Entonces me dijo: Daniel, no temas; porque desde el
primer día que dispusiste tu corazón a entender y a
humillarte en la presencia de tu Dios, fueron oídas tus
palabras; y a causa de tus palabras yo he venido.
Mas el príncipe del reino de Persia se me opuso durante
veintiún días; pero he aquí Miguel, uno de los principales
príncipes, vino para ayudarme, y quedé allí con los reyes de
Persia.
He venido para hacerte saber lo que ha de venir a tu
pueblo en los postreros días; porque la visión es para esos
días.
Mientras me decía estas palabras, estaba yo con los ojos
puestos en tierra, y enmudecido (estaba yo con los ojos
puestos en tierra, y enmudecido).
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DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
Pero he aquí, uno con semejanza de hijo de hombre tocó
mis labios. Entonces abrí mi boca y hablé, y dije al que
estaba delante de mí: Señor mío, con la visión me han
sobrevenido dolores, y no me queda fuerza.
¿Cómo, pues, podrá el siervo de mi señor hablar con mi
señor? Porque al instante me faltó la fuerza, y no me quedó
aliento.
Y aquel que tenía semejanza de hombre me tocó otra vez, y
me fortaleció,
y me dijo: Muy amado, no temas; la paz sea contigo;
esfuérzate y aliéntate. Y mientras él me hablaba, recobré las
fuerzas, y dije: Hable mi señor, porque me has fortalecido.
Él me dijo: ¿Sabes por qué he venido a ti? Pues ahora
tengo que volver para pelear contra el príncipe de Persia; y
al terminar con él, el príncipe de Grecia vendrá.
Pero yo te declararé lo que está escrito en el Libro de la
verdad; y ninguno me ayuda contra ellos, sino Miguel vuestro
príncipe”.
Y ahora, nuestro tema para esta ocasión es:
“DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO DE LA VERDAD”.
Dios envió al Arcángel Gabriel al profeta Daniel para que
le declarara lo que está escrito en el Libro de la Verdad. Y el
Arcángel Gabriel le declaró las cosas que sucederían al
pueblo hebreo en los días postreros. Dice que la visión…:
“He venido para hacerte saber lo que ha de venir a tu
pueblo en los postreros días; porque la visión es para esos
días”.
¿Y qué son los postreros días? Los postreros días delante
de Dios para los seres humanos son los Milenios postreros,
que son el quinto Milenio, sexto Milenio y séptimo Milenio.
Por eso es que en la profecía dada por el Arcángel Gabriel
al profeta Daniel, encontramos esas diferentes etapas por las
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DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

cuales el pueblo hebreo pasaría. Encontramos aún la Venida

del Mesías, Su ministerio de tres años y medio, y a la mitad
de la semana la vida le sería cortada al Mesías. Todo eso está
en la profecía traída por el Arcángel Gabriel, ¿tomada de
dónde? Del Libro de la Verdad.
Y vean ustedes, la Venida del Mesías y Su muerte en la
Cruz del Calvario a la mitad de la semana número setenta, era
para los días postreros, porque siendo que los días postreros
delante de Dios para los seres humanos son los milenios
postreros, cuando Jesús tenía de 4 a 7 años de edad comenzó
el quinto Milenio, y, por consiguiente, comenzaron delante de
Dios los días postreros, que para los seres humanos son los
milenios postreros: quinto milenio, sexto milenio y séptimo
milenio, de Adán hacia acá.
Y ahora, tenemos las profecías tomadas del Libro de la
Verdad, tomadas por el Arcángel Gabriel, al cual le fueron
dadas por Dios para traerlas, estas Palabras reveladas, al
profeta Daniel, pero reveladas en estos términos simbólicos
que le fueron dados al profeta Daniel.
Aún el reino de los gentiles fue mostrado al profeta Daniel
en esas bestias, cuatro bestias, que fueron vistas en visión por
el profeta Daniel, las cuales representaban también lo que el
rey Nabucodonosor había visto en la estatua o imagen que él
vio en sueños, y que le interpretó el profeta Daniel.
Y ahora, en la estatua que vio el rey Nabucodonosor,
también él vio una piedra no cortada de manos que vino e
hirió a la imagen en los pies. O sea, que esa Piedra no cortada
de manos, que es la Venida del Señor, en Su Primera Venida
fue en la etapa de las piernas de hierro y de barro cocido, pero
en esa etapa no hirió a la estatua en las piernas de hierro, sino
que las piernas de hierro, el imperio romano, hirió a Cristo allí
en la Cruz del Calvario.
Pero para el Día Postrero, el reino o imperio de los
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DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
gentiles, que tiene cuatro etapas, y la cuarta etapa tiene dos
partes; la cuarta etapa, que es el imperio romano, tiene dos
partes muy importantes, y la primera parte está representada
en las piernas de hierro, la cual estaba cumpliéndose en el
tiempo de Jesús bajo el imperio romano.
Luego, la segunda parte de esa cuarta etapa del imperio de
los gentiles corresponde a los pies de hierro y de barro cocido.
Esa etapa ha estado cumpliéndose también, y en este
tiempo en el cual vivimos el reino de los gentiles se encuentra
en la etapa de los pies de hierro y de barro cocido. Y es en la
etapa de los pies de hierro y de barro cocido del reino de los
gentiles que el rey Nabucodonosor vio una piedra no cortada
de manos que vino e hirió a la imagen en los pies de hierro y
de barro cocido.
Esa Piedrecita o Piedra cortada del Monte de Dios es la
Segunda Venida de Cristo, la Venida de la Piedra Angular, la
Venida de la Piedra del Ángulo, la Venida de la Piedra que
los edificadores desecharon en Su Primera Venida allá en
medio del pueblo hebreo.
Pero en Su Segunda Venida Él viene como el León de la
Tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de señores en Su
Obra de Reclamo.
En Su Primera Venida Él vino como el Cordero de Dios
para quitar el pecado del mundo; por eso es que Él no hirió a
la estatua en las piernas de hierro, porque no era el tiempo
para herir a la estatua en las piernas de hierro, sino que eso
corresponde al tiempo final, en donde el Día de venganza del
Dios nuestro será manifestado.
Y ahora, cuando se habla de “venganza”, toda persona
entiende que para venir una venganza tiene que ser por algo
que alguien haya hecho. Por eso es que Dios ha dicho
siempre, tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo
Testamento, Jesús lo repitió también, San Pablo también:
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DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

“Mía es la venganza, yo pagaré”.

Por eso Él enseñó a que las personas no se vengaran ellos
mismos, sino que dejaran eso para Dios hacerlo, porque Dios
en el Día de venganza del Dios nuestro realizará la venganza
contra todos aquellos que han hecho mal, tanto al pueblo
hebreo, como a Su Iglesia, la Iglesia del Señor Jesucristo,
como también el pueblo hebreo, pues el pueblo hebreo
representa a la Iglesia del Señor Jesucristo, porque el pueblo
hebreo es el Israel terrenal y la Iglesia del Señor Jesucristo es
el Israel celestial.
Y ahora, la promesa a Abraham, a Isaac y a Jacob, fue:
“Los que te bendigan… el que te bendiga será bendito, y el
que te maldiga o los que te maldigan, serán (¿qué?) malditos”.
Y es Dios el que hace realidad esa promesa. Son benditos los
que bendigan al Israel terrenal o al Israel celestial. Y la
bendición viene de parte de Dios. Pero son malditos los que lo
maldigan, los que hagan algo en contra del Israel terrenal o
del Israel celestial.
Y hacer algo en contra de un miembro del pueblo hebreo o
de un miembro de la Iglesia de Jesucristo, es obrar en contra
del Israel terrenal o del Israel celestial; por lo tanto, eso tiene
una recompensa de parte de Dios, una recompensa de juicio
divino, de maldición divina. Pero los que obran bien en favor
del pueblo hebreo o en favor de la Iglesia de Jesucristo, tienen
una bendición.
Por eso es que en San Mateo, capítulo 25, donde nos habla
del juicio de las naciones, está el por qué muchas personas
van a ser bendecidas y van a entrar, van a entrar a la vida
eterna; y también ahí nos menciona de otras que serán
maldecidas, y van a entrar, pero al lago de fuego, donde será
el lloro y el crujir de dientes. Capítulo 25, [Mateo] verso 31 al
46, dice:
“Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos
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DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de
gloria,
y serán reunidas delante de él todas las naciones” …
De esto habla el profeta Zacarías, diciéndonos que serán
reunidas todas las naciones, y esto será para Dios derramar Su
juicio divino.
Vamos a ver si encontramos… Isaías también nos habla de
esta reunión de todas las naciones. Por ahí, por el capítulo 27
al 28 de Isaías, nos habla algo...
Y serán juntadas todas las naciones en cierto territorio, o
sea, sus ejércitos serán juntados, y va a venir sobre esas
naciones representadas en esos ejércitos, y también sobre las
naciones les llegará también ese juicio divino. Y esos juicios
vendrán a causa de hechos efectuados por esas naciones.
O sea que, así como Dios juzgará a cada persona como
individuo, también aplica el mismo juicio, la misma forma de
juicio, a las naciones.
Y Dios va a traer el juicio divino sobre individuos, pero
también sobre naciones. Y esto es muy importante conocerlo,
para así poder comprender lo que estará sucediendo en el
tiempo final.
Vean, en el capítulo 14 y verso 12 en adelante [Zacarías],
dice:
“Y esta será la plaga con que herirá Jehová a todos los
pueblos que pelearon contra Jerusalén: la carne de ellos se
corromperá estando ellos sobre sus pies, y se consumirán en
las cuencas sus ojos, y la lengua se les deshará en su boca.
Y acontecerá en aquel día que habrá entre ellos gran
pánico enviado por Jehová; y trabará cada uno de la mano
de su compañero, y levantará su mano contra la mano de su
compañero”. Ahí podemos ver lo que sucederá. Luego dice:
“Y Judá también peleará en Jerusalén. Y serán reunidas
las riquezas de todas las naciones de alrededor: oro y plata,
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DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

y ropas de vestir, en gran abundancia.

Así también será la plaga de los caballos, de los mulos, de
los camellos, de los asnos, y de todas las bestias que
estuvieren en aquellos campamentos”.
Eso no es otra cosa sino la radioactividad destruyendo esos
ejércitos, con los animales también, caballos y mulos, que
tengan allí.
“Y todos los que sobrevivieren de las naciones que
vinieron contra Jerusalén, subirán de año en año para
adorar al Rey, a Jehová de los ejércitos, y a celebrar la fiesta
de los tabernáculos.
Y acontecerá que los de las familias de la tierra que no
subieren a Jerusalén para adorar al Rey, Jehová de los
ejércitos, no vendrá sobre ellos lluvia.
Y si la familia de Egipto no subiere y no viniere, sobre
ellos no habrá lluvia; vendrá la plaga con que Jehová herirá
las naciones que no subieren a celebrar la fiesta de los
tabernáculos.
Esta será la pena del pecado de Egipto, y del pecado de
todas las naciones que no subieren para celebrar la fiesta de
los tabernáculos.
En aquel día estará grabado sobre las campanillas de los
caballos: SANTIDAD A JEHOVÁ; y las ollas de la casa de
Jehová serán como los tazones del altar.
Y toda olla en Jerusalén y Judá será consagrada a Jehová
de los ejércitos; y todos los que sacrificaren vendrán y
tomarán de ellas, y cocerán en ellas; y no habrá en aquel día
más mercader en la casa de Jehová de los ejércitos”.
Ahora, miren todo lo que sucederá en el tiempo final, en el
Día Postrero, en donde el Día de venganza del Dios nuestro
vendrá sobre la raza humana.
También el profeta Malaquías, en el capítulo 4, habló del
Día de venganza del Dios nuestro, cuando dijo:
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DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
“Porque he aquí, viene el día ardiente como un horno, y
todos los soberbios y todos los que hacen maldad serán
estopa; aquel día que vendrá los abrasará, ha dicho Jehová
de los ejércitos, y no les dejará ni raíz ni rama”.
Ese es el juicio de la gran tribulación que vendrá para la
cizaña.
“Mas a vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol
de justicia, y en sus alas traerá salvación; y saldréis, y
saltaréis como becerros de la manada.
Hollaréis a los malos, los cuales serán ceniza bajo las
plantas de vuestros pies, en el día en que yo actúe, ha dicho
Jehová de los ejércitos.
Acordaos de la ley de Moisés mi siervo, al cual encargué
en Horeb ordenanzas y leyes para todo Israel.
He aquí, yo os envío el profeta Elías, antes que venga el
día de Jehová, grande y terrible.
Él hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y
el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que yo venga
y hiera la tierra con maldición”.
La gran tribulación es el Día de venganza del Dios nuestro,
o sea, la venganza del Dios nuestro en el Día Postrero, o sea,
en el séptimo Milenio. Es el Día de venganza del Dios
nuestro, en donde Dios hablará el juicio, la maldición, sobre
los que han obrado en contra del pueblo hebreo y en contra de
la Iglesia del Señor Jesucristo.
Esos dos pueblos son como la niña de los ojos de Dios. Y
quien los bendiga serán benditos, y quienes los maldigan, y
hagan algo en contra de ellos, serán malditos.
Y ahora, estos juicios de las naciones, vean ustedes, no es
el juicio final después del Milenio, sino antes del Milenio.
Sigue diciendo:
“… y serán reunidas delante de él todas las naciones; y
apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las
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DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

ovejas de los cabritos.

Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su
izquierda.
Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos
de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde
la fundación del mundo.
Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me
disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis;
estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis;
en la cárcel, y vinisteis a mí.
Entonces los justos le responderán diciendo: Señor,
¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y
te dimos de beber?
¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y
te cubrimos?
¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a
ti?
Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en
cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más
pequeños, a mí lo hicisteis.
Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de
mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus
ángeles.
Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y
no me disteis de beber;
fui forastero, y no me recogisteis; estuve desnudo, y no me
cubristeis; enfermo, y en la cárcel, y no me visitasteis.
Entonces también ellos le responderán diciendo: Señor,
¿cuándo te vimos hambriento, sediento, forastero, desnudo,
enfermo, o en la cárcel, y no te servimos?
Entonces les responderá diciendo: De cierto os digo que
en cuanto no lo hicisteis a uno de estos más pequeños,
tampoco a mí lo hicisteis.
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DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
E irán estos al castigo eterno, y los justos a la vida
eterna”.
Aquí podemos ver que éste es el juicio de las naciones, en
donde muchas naciones con sus habitantes serán castigadas.
El juicio divino, la maldición divina, caerá sobre ellos; los
juicios divinos, las plagas de la gran tribulación, caerán sobre
ellos.
Y en la historia de las naciones se encuentra registrado
todo lo que esas naciones que recibirán el juicio divino han
hecho en contra de Dios y en contra del pueblo hebreo y en
contra de la Iglesia del Señor Jesucristo.
Y vean ustedes, que aquí se trata de: “por cuanto lo
hicisteis o no lo hicisteis a uno de estos mis pequeñitos”. O
sea, que se trata de la actitud asumida frente a los hermanos
pequeñitos de Jesús, que son los miembros de la Iglesia de
Jesucristo. Él había dicho: “Cualquiera que diere un vaso de
agua fresca a uno de estos mis pequeñitos, no perderá su
recompensa”. Y su recompensa es vida eterna; aquí lo
muestra.
Ahora, estas personas y naciones que aparecen aquí y que
entrarán, unos al castigo del infierno preparado para el diablo
y sus ángeles, vean ustedes, esas personas y naciones obraron
mal en contra de los pequeñitos, en contra de los hermanos
menores de Jesús. O sea que obraron mal en contra de los
miembros de la Iglesia del Señor Jesucristo.
Por lo tanto, les espera el fuego preparado para el diablo y
sus ángeles, porque fueron instrumentos del diablo y sus
ángeles, se dejaron usar por el diablo y sus ángeles; y en la ira
del diablo y sus ángeles en contra de Dios y en contra del
programa de Dios, y en contra de todos los hijos de Dios,
vean ustedes, millones de seres humanos, y muchas naciones,
fueron instrumentos del diablo para tratar de destruir a la
Iglesia del Señor Jesucristo.
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DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

Y ahora, hubo también otras personas que ayudaron a los

hijos e hijas de Dios. Y esas personas, como individuos, serán
bendecidos.
Y las naciones, vean ustedes, aquí naciones también van a
recibir bendición divina, y principalmente las que estarán en
el tiempo final, que estarán ayudando a los hijos e hijas de
Dios en la etapa final de la Iglesia de Jesucristo, que es la
etapa de la Edad de la Piedra Angular en este entrelace
dispensacional.
La bendición de Dios de Edad en Edad ha estado donde
está o donde ha estado cada Edad siendo cumplida, pero luego
se ha movido la bendición de Dios para otro territorio, donde
Dios envía el Ángel mensajero para esa otra Edad y para ese
otro territorio, y ahí está la bendición de Dios. Y un color del
arco iris ha sido manifestado de Edad en Edad en la Iglesia
del Señor Jesucristo y en el territorio donde se ha cumplido
cada Edad.
Y para este tiempo final, en la manifestación de Cristo
enviando Su Ángel mensajero, el arco iris, o sea, el arco iris
completo, o sea, el círculo completo, estará con sus siete
colores en el territorio donde se estará cumpliendo la Edad de
la Piedra Angular. ¿Y cuál es ese territorio? Nuestro territorio:
La América Latina y el Caribe.
Para los demás territorios, ya les pasó, a esas naciones, el
tiempo de Redención; por lo tanto, el juicio divino vendrá
sobre ellas.
Pero a la América Latina y el Caribe no le ha pasado su
tiempo de Redención, porque este es el tiempo donde Dios
está obrando en la América Latina y el Caribe, y está con
latinoamericanos y caribeños creando una Edad, la Edad de la
Piedra Angular, y está Dios haciendo un entrelace
dispensacional.
La Dispensación del Reino se está entrelazando con la
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DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
Dispensación de la Gracia. ¿Dónde está sucediendo ese
entrelace? En la América Latina y el Caribe, en el Occidente.
Y ahora, los siete colores del arco iris, y el arco iris es el
Pacto divino, están esos siete colores en la América Latina y
el Caribe, en la Iglesia del Señor Jesucristo, en la Edad de la
Piedra Angular.
La Edad de la Piedra Angular, siendo que es una Piedra de
diamante...; cuando se le aplica (a una piedra angular, a un
diamante cortado en forma de piedra angular, ustedes verán
que) cuando se le aplica un foco de luz, se pasa luz a través de
esa piedra angular, ¿qué sucede? Los colores del arco iris, los
siete colores, aparecen; y eso es lo que está sucediendo en la
América Latina y el Caribe.
Dios está pasando Su Luz, y Dios es Luz, y está pasando
esa Luz divina Dios en y por la Edad de la Piedra Angular; y,
por consiguiente, los siete colores del arco iris están siendo
manifestados en la América Latina y el Caribe, están siendo
manifestados en la Iglesia de Jesucristo en la Edad de la
Piedra Angular.
Y eso es lo único que puede ayudar a la América Latina y
el Caribe y sus habitantes para que el juicio divino no caiga
sobre la América Latina y el Caribe, o que al menos sea lo
mínimo; y pueda la América Latina y el Caribe entrar al
Reino Milenial de Cristo, el cual está muy cerca, está a muy
poco tiempo para comenzar ese Reino Milenial. Pero primero
tiene que venir el juicio divino de la gran tribulación.
Ahora, todas estas cosas están escritas en el Libro de la
Verdad. Por eso es que el Arcángel Gabriel, un Ángel con
apariencia de hombre, un hombre de la sexta dimensión, es el
que le revela a Daniel todas estas cosas. Él también apareció
por el tiempo allá de Ezequiel; Ezequiel tuvo visiones,
visiones como las tuvo el profeta Daniel, y ustedes
encontrarán esos mismos personajes de otra dimensión en las
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DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

visiones del profeta Ezequiel. Por eso el Libro del profeta

Daniel es el Apocalipsis del Antiguo Testamento, y lo
complementa el Libro del profeta Ezequiel.
Pero vean, todos los profetas tuvieron visiones y sueños, y
vieron en otras dimensiones, y vieron las personas de otras
dimensiones, como a los Arcángeles Gabriel y Miguel, que
son hombres, pero de otra dimensión; y son Príncipes, y si son
Príncipes, son personas bajo las cuales están, quizás, millones
de huestes celestiales.
Y ahora, los principales Arcángeles (hay más, pero los
principales) son: Gabriel y Miguel, son los que están delante
de la presencia de Dios. Son los mismos que vinieron con
Elohim el día antes de la destrucción de Sodoma y de
Gomorra, y fueron con Elohim a la mesa de Abraham a comer
un ternero o un becerro tierno, con tortillas, o tortas, o arepas,
y leche, y queso, y todas las cosas que se le ponen a un
becerro tierno asado; y comieron con Abraham.
Luego le hablaron acerca del hijo prometido, y le dijo
Elohim que Sara tendría el niño el próximo año; o sea, que le
habló hasta la venida del niño que iba a tener para el próximo
año.
Por lo tanto, ellos serían rejuvenecidos en ese año en que
estaban, para poder tener el hijo prometido el próximo año;
pues Abraham tenía 99 años de edad y Sara tenía 89 años de
edad. ¿Y quién va a estar esperando tener un hijo a través de
una mujer de 89 años? Pero Abraham sí lo estaba esperando,
porque Dios se lo prometió. Y si por causa de la edad y
condición de Sara no podía tener el niño, pues Dios tenía que
rejuvenecer a Sara y Abraham para tener al niño; ¿o es que
acaso hay alguna cosa imposible para Dios?
Después de esa conversación de Elohim con Abraham,
encontramos que los Ángeles se fueron; ella habló algo o se
rio en el corazón, y eso no le agradó a Dios, porque fue una
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DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
risa, en el corazón, de incredulidad. Es como… miren, le dice
que va a tener un niño, esto es muy importante... Eso está por
el capítulo 18 del Génesis, ya esta promesa Dios se la había
dado a Abraham en el capítulo 15 también; en el capítulo 15
le había dicho que iba a tener un niño, pero ahora le
reconfirma esa promesa. Y dice en el capítulo 18 del Génesis,
verso 9 en adelante, dice:
“Y le dijeron: ¿Dónde está Sara tu mujer? Y él respondió:
Aquí en la tienda.
Entonces dijo…”.
Recuerden que ellos estaban fuera de la tienda, fuera de la
casa de campaña, la carpa. Sara estaba dentro de la carpa,
estaba haciendo sus quehaceres, pero Abraham con Elohim,
Gabriel y Miguel, estaban bajo la sombra de un árbol; o sea,
que tenían un día de…, así de campo, de comer en el campo,
al aire libre.
Y Elohim pregunta, y los Arcángeles también, dónde
estaba Sara. Y ahora, Abraham le dice: “Está en la tienda”;
“Está en la tienda”, le dice Abraham.
“Entonces dijo: De cierto volveré a ti; y según el tiempo
de la vida, he aquí que Sara tu mujer tendrá un hijo. Y Sara
escuchaba a la puerta de la tienda, que estaba detrás de él”.
O sea, que Sara y la puerta de la tienda estaban detrás de
Elohim. Y como algunas señoras, y jovencitas, y jovencitos
también, les gusta escuchar las conversaciones de los mayores
y pegan su oído o su oreja a la pared, o cerca de la puerta para
escuchar, porque no los invitaron a estar allá, pero no se
quieren perder la conversación; y Sara estaba detrás de
Elohim y estaba a la puerta con su oreja parada, sus orejas
paraditas, escuchando la conversación; y miren lo que
sucedió:
“Y Abraham y Sara eran viejos, de edad avanzada…”.
Y ahora, vean, a dos viejos de edad avanzada Dios le está
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DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

prometiendo de nuevo el niño; no les había cumplido todavía

la promesa que les había dado hacía tiempo, y ahora, cuando
están viejitos, vuelve Dios y le aparece y le reconfirma Su
promesa. Por el tiempo de la vida, Dios vendría y le daría un
hijo a Abraham por medio de Sara.
Por lo tanto, Sara tenía que volver a la vida de una mujer
que puede concebir, o sea, que Sara tenía que ser rejuvenecida
y estar en una condición en que podía tener hijos. Y eso tiene
que ver con algunas condiciones en el cuerpo de la mujer. Eso
es lo que ella piensa, vean ustedes:
“… y a Sara le había cesado ya la costumbre de las
mujeres”.
O sea, que ya no podía concebir, ya había entrado a la
menopausia, y ya de ahí en adelante la mujer no puede
concebir. Algunas entran a los 40 años y otras entran a los 50
años, quizás; no sabemos a los cuántos años le comenzó esa
etapa a Sara.
Pero ya a los 89 años, cualquiera sabe que ya esa etapa
vino a ella, y salió de esa etapa, y de ahí en adelante ya no
puede concebir más; aun estando en esa etapa, tampoco puede
concebir; o sea… y eso es a lo que se refiere cuando dice:
“… y a Sara le había cesado ya la costumbre de las
mujeres.
Se rio, pues, Sara entre sí (o sea, en su corazón), diciendo:
¿Después que he envejecido tendré deleite, siendo también mi
señor ya viejo?
Entonces Jehová dijo a Abraham: ¿Por qué se ha reído
Sara diciendo: Será cierto que he de dar a luz siendo ya
vieja? (Miren todo lo que significaba lo que ella pensó y por
lo cual ella se rio en su corazón).
¿Hay para Dios alguna cosa difícil? (No la hay) Al tiempo
señalado volveré a ti, y según el tiempo de la vida, Sara
tendrá un hijo”.
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DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
Sara y Abraham fueron rejuvenecidos.
Luego encontramos que después de esa visita, que fue
durante el día, luego ya en la tarde se fueron Gabriel y Miguel
para Sodoma, donde estaba viviendo Lot, y Elohim se quedó
con Abraham. Recuerden que estaban en cuerpos físicos,
cuerpos como nuestros cuerpos que Dios había creado: Uno
para Gabriel, otro para el Arcángel Miguel y otro para Sí
mismo, para poder comer con Abraham.
Y ahora, vean cómo Dios con Sus Arcángeles descendieron
en carne, carne humana, comieron con Abraham, y después se
fueron a Sodoma, donde el juicio divino iba a caer.
Pero Elohim se quedó un poco más de tiempo con
Abraham para revelarle las cosas que iban a suceder en aquel
día en Sodoma y Gomorra; “porque no hará nada el Señor
Jehová, sin que antes revele Sus secretos a Sus siervos Sus
profetas”. Y Abraham era un profeta, y de los grandes;
Abraham era un profeta dispensacional, y sigue siendo un
profeta dispensacional, porque los santos no mueren.
Y ahora, Abraham, siendo un profeta dispensacional,
recibe la revelación de Elohim, de Dios, de las cosas que iban
a suceder. Dios en la forma de un hombre, Dios visitando a
Abraham en un cuerpo físico, le reveló lo que iba a hacer.
Y ahora, vean ustedes, lo que le dijo Abraham era correcto,
Abraham intercedía por Lot pidiendo misericordia para las
ciudades de Sodoma y Gomorra. Y le dijo: “No destruirás al
justo con el injusto. No haga así el Dios, el Juez de toda la
Tierra”. Recuerden que está como Juez allí Dios, porque
viene para el juicio de las naciones Sodoma y Gomorra, y
ciudades cercanas o ciudades… para el juicio de las ciudades
de Sodoma y Gomorra y demás ciudades. Viene como Juez de
toda la Tierra; por lo tanto, puede dictar el juicio divino sobre
Sodoma, Gomorra, y demás ciudades. Habían llenado los
requisitos para recibir la maldición, el juicio divino, la ira de
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DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

Dios.
Siempre que va a venir la ira de Dios sobre la Tierra, sobre
una ciudad o nación o continente, los Arcángeles Gabriel y
Miguel están al tanto de todo, y son las personas que, con
Dios, vean ustedes, con Dios ven todo lo que ha de suceder. O
sea que Dios determina lo que ha de suceder, y los Arcángeles
Gabriel y Miguel están con Dios, y saben todas esas cosas.
Y ahora, ¿quiénes destruyeron a Sodoma y Gomorra? Los
Arcángeles Gabriel y Miguel. Eso es lo que ellos mismos
dicen: que van a destruir a Sodoma y a Gomorra.
Vamos a ver si lo encontramos por aquí… Capítulo 19,
verso 10 en adelante, dice:
“Entonces los varones alargaron la mano, y metieron a
Lot en casa con ellos, y cerraron la puerta.
Y a los hombres que estaban a la puerta de la casa
hirieron con ceguera desde el menor hasta el mayor, de
manera que se fatigaban buscando la puerta.
Y dijeron los varones a Lot: ¿Tienes aquí alguno más?
Yernos, y tus hijos y tus hijas, y todo lo que tienes en la
ciudad, sácalo de este lugar;
porque vamos a destruir este lugar” …
¿Quiénes destruyeron a Sodoma y Gomorra? Los
Arcángeles Gabriel y Miguel.
En los cambios de... en las diferentes etapas del imperio de
los gentiles, en el Libro del profeta Daniel, aparecen los
arcángeles Gabriel y Miguel peleando en contra del imperio y
del rey que tiene que ya dejar su término, para que entre otro
imperio de los gentiles, y así se cumpla la otra etapa del reino
de los gentiles; y así va pasando por etapas. O sea, que los que
controlan todo ese programa, es Dios con Sus Arcángeles.
Y ahora, vean:
“… porque vamos a destruir este lugar, por cuanto el
clamor contra ellos ha subido de punto delante de Jehová;
 21
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
por tanto, Jehová nos ha enviado para destruirlo”.
O sea, que Dios es amor, pero también es fuego
consumidor. Y cuando llega el tiempo de venganza del Dios
nuestro para una ciudad, o una nación, o un continente, los
Arcángeles Gabriel y Miguel son enviados, y Sus ejércitos
celestiales aparecen en la Tierra. También en el diluvio hubo
una intervención de otra dimensión.
Ahora, hay ángeles en otras dimensiones los cuales están a
cargo de hacer la voluntad de Dios en lo que les sea ordenado.
Y ellos de seguro no sienten como sienten los seres
humanos; o sea, no están con el “ay bendito” de los seres
humanos. Ellos cumplen lo que Dios les ordena. Y por eso es
que ustedes ven en medio del pueblo hebreo que cuando Israel
se portaba mal, aparecía el Ángel de Jehová con Su espada
desenvainada, y morían miles de personas; ¿cómo sucedía
eso? Eso sucedía desde otra dimensión, de lo cual no vamos a
hablar en la actualidad; la cosa es que morían.
Podían morir…, un solo ángel podía aparecer y miles de
personas morir. Si buscamos la historia del pueblo hebreo,
encontraremos todas esas cosas sucediendo desde otra
dimensión.
Pero cuando el pueblo hebreo se portaba correctamente y
cumplía con las ordenanzas divinas, también aparecen ángeles
de Dios, y el Arcángel Gabriel y el Arcángel Miguel trayendo
bendiciones de parte de Dios para el pueblo hebreo. O sea que
las bendiciones divinas o las maldiciones vienen de otra
dimensión.
Ahora, podemos ver que los Arcángeles Gabriel y Miguel
son instrumentos de Dios.
Ahora, miren lo que dice… lo que le siguen diciendo a Lot:
“Entonces salió Lot y habló a sus yernos, los que habían
de tomar sus hijas, y les dijo: Levantaos, salid de este lugar;
porque Jehová va a destruir esta ciudad. Mas pareció a sus
 22
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

yernos como que se burlaba”.

Es lo mismo en nuestro tiempo: anunciar que la ira de Dios
ha de caer sobre la Tierra muy pronto, muchas personas
quizás pueden burlarse, y decir: “Desde hace miles de años
están anunciando que viene el fin del mundo, que viene el fin,
que viene el juicio divino”.
Pero recuerden que Noé estuvo anunciando por 100 o 120
años que vendría un diluvio, pero vino siempre el diluvio. Y
el que Dios no lo enviara rápido era una bendición, era una
extensión de Su misericordia hacia Noé y su familia, que no
habían terminado la construcción del arca.
Y ahora, ¿por qué no ha venido el juicio divino que está
siendo anunciado desde hace miles de años para la raza
humana? Porque la misericordia de Dios está extendida a
Cristo y Su Iglesia, y por cuanto no se ha completado el
número de los escogidos de Dios, no se ha completado el
número de la Iglesia de Jesucristo, Dios no puede enviar la
maldición, el juicio divino, sobre el planeta Tierra, porque
destruiría también a los escogidos, a los primogénitos, que
están escritos en el Cielo, en el Libro de la Vida del Cordero.
Tienen que ser llamados, juntados y colocados en el Cuerpo
Místico de Cristo cada escogido en la Edad que le toca vivir.
Y ahora, el juicio divino que y del cual habló Cristo, y del
cual hablaron los profetas del Antiguo Testamento, y del cual
hablaron los apóstoles, y del cual habló San Pablo en sus
Cartas, y del cual hablaron los siete ángeles mensajeros, del
cual habló el reverendo William Branham también, ese juicio
divino, el cual parece como que se ha atrasado, (y gracias a
Dios) por eso, porque nosotros no deseamos que el juicio
divino venga sobre la Tierra, nosotros deseamos la bendición
de Dios para los seres humanos.
Y ahora, ¿qué ha estado sucediendo en cuanto a la parte
física acá en la Tierra? Dios dice en Isaías, capítulo 48, verso
 23
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
9, vamos a ver…
“Por amor de mi nombre diferiré mi ira, y para alabanza
mía la reprimiré para no destruirte”.
Y ahora, diferir no quiere decir que ‘queda suspendida’,
sino que ‘Él la aguanta por un tiempo más’.
Pero ya el Día de venganza del Dios nuestro está
determinado desde antes de la fundación del mundo, y está en
el corazón de Dios. Vean dónde lo dice, en el capítulo 63
[Isaías], verso 4 en adelante, dice:
“Porque el día de la venganza está en mi corazón, y el año
de mis redimidos ha llegado”.
Es en el Año de los Redimidos, que es el Año del Jubileo,
que representa el ciclo divino de la Edad de la Piedra Angular,
donde los redimidos de Jehová, que son los miembros de la
Iglesia de Jesucristo, serán resucitados en cuerpos eternos los
que ya han partido, y nosotros los que vivimos seremos
transformados.
Ahora, el Día de venganza se efectuará, la ira de Dios
caerá, cuando ya nosotros tengamos el nuevo cuerpo. O sea,
que por el momento las cosas no están como van a estar en la
gran tribulación; aunque en algunas naciones están muy
difíciles las cosas, como por allá por Asia Menor,
Macedonia... ¿A dónde pertenece Macedonia, Miguel? Ese
territorio donde hay guerra en estos días, pero “guerra
caliente”, como decimos.
Ahora, miren, por el Asia Menor hay guerra, por todo ese
territorio, y por allá fue que comenzó la primera Edad de la
Iglesia gentil, de la cual San Pablo fue su mensajero.
¿Recuerdan el varón macedonio que le apareció en visión a
San Pablo, y le dijo: “Pasa a Macedonia y ayúdanos”?
Ahora, podemos ver que por ahí las cosas están difíciles,
no sabemos si la mecha está por ahí por encenderse
completamente, porque por el Medio Oriente es que la mecha
 24
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

de la tercera guerra mundial se va a prender. O sea, por donde

mismo se cumplió la Primera Venida de Cristo y por donde
comenzó, por donde nació, la Iglesia de Jesucristo, y por el
territorio donde comenzó la primera Edad de la Iglesia gentil,
por ahí también el juicio divino va a prenderse.
Y ahora, eso será una tercera guerra mundial. Por eso es
que la gente está tan asustada en estos días, porque saben que
ese territorio es un territorio muy explosivo, y que puede
ocasionar una tercera guerra mundial todos esos problemas de
ese territorio.
Y cuando ven que el pueblo hebreo está por ahí, y que
tiene ciertos enemigos, cuando ven que pasa algo con el
pueblo hebreo, la gente se asusta más, las naciones se asustan
más, porque saben que hay profecías relacionadas al pueblo
hebreo; y les leí la de Zacarías, y hay otras, de Isaías, y otros
lugares, donde nos habla de que van a ser reunidas las
naciones —por supuesto, las naciones representadas en sus
ejércitos— en ese territorio, y va a suceder una guerra. Ahora
de ahí, pues, se extenderá hacia las naciones que están
representadas en esos ejércitos.
Ahora, podemos ver que actualmente las cosas están
difíciles para el reino de los gentiles.
Pero para los escogidos cada día están mejores, porque
cada día la fe de los escogidos va en aumento; “auméntanos la
fe”, dice uno a Jesús. ¿Y cómo nos va a aumentar la fe? La fe
viene por el oír de la Palabra de Dios. Y a medida que Dios
nos da más Palabra revelada, nos aumenta más y más la fe,
porque obtenemos más y más revelación divina, conocimiento
divino, de todo Su programa.
Y ahora, para ser declarado lo que está escrito en el Libro
de la Verdad, Dios le envió al Arcángel Gabriel al profeta
Daniel; y vean, le habló de todas estas cosas que estarían
sucediendo en este tiempo final y de las cosas que ya han
 25
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
sucedido desde los días de Daniel, hasta este tiempo final.
Luego, a Juan el apóstol Jesucristo le envió Su Ángel para
que le diera a conocer (pero en esta forma simbólica del
Apocalipsis) le diera a conocer todas las cosas que iban a
suceder. Y luego quedaron selladas y cerradas todas esas
cosas, o sea, quedaron ahí colocadas en símbolos, quedaron
como profecías, pero sin entenderse el significado de esos
símbolos, que son los mismos símbolos del Libro del profeta
Daniel.
Y ahora, Dios le dijo a Daniel que esas Palabras estaban
cerradas y selladas hasta el tiempo del fin.
Vean, capítulo 12, verso 4 en adelante, dice, (de Daniel):
“Pero tú, Daniel, cierra las palabras y sella el Libro hasta
el tiempo del fin. Muchos correrán de aquí para allá, y la
ciencia se aumentará.
Y yo Daniel miré, y he aquí otros dos que estaban en pie,
el uno a este lado del río, y el otro al otro lado del río”.
O sea, a un lado estaba el Arcángel Gabriel y al otro lado
estaba el Arcángel Miguel.
“Y oí al varón vestido de lino, que estaba sobre las aguas
del río, el cual alzó su diestra y su siniestra al cielo, y juró
por el que vive por los siglos, que será por tiempo, tiempos, y
la mitad de un tiempo. Y cuando se acabe la dispersión del
poder del pueblo santo, todas estas cosas serán cumplidas”.
Ese que está sobre las aguas del río es el Ángel de Jehová,
el Ángel del Pacto, el Espíritu Santo. El Varón vestido de lino
aquí es el mismo Varón vestido de lino de la profecía de
Ezequiel, capítulo 9: el Varón que viene con el tintero de
escribano en su cintura para sellar en sus frentes a los que
escaparían del juicio divino.
Y ahora, en Apocalipsis, capítulo 7, viene un Varón, un
Ángel, con el Sello del Dios vivo, para llamar, juntar y sellar
en sus frentes a 144.000 hebreos, 12.000 de cada tribu. Un
 26
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

Ángel mensajero que viene con el sello del Dios vivo, o sea,
con el Espíritu Santo, viene con el Ángel de Jehová en él
manifestado para llamar y juntar 144.000 hebreos. Por medio
de ese Ángel que sube de donde nace el sol es que el Ángel de
Jehová, el Ángel del Pacto, Elohim, estará manifestado en el
Día Postrero, llamando y juntando a Sus escogidos del pueblo
hebreo en el tiempo final.
Pero antes de eso, aparecerá a la Iglesia del Señor
Jesucristo para llamar y juntar a los escogidos del Día
Postrero y colocarlos en la Edad de la Piedra Angular, en la
Iglesia de Jesucristo, que es la Edad de Oro para la Iglesia de
Jesucristo, la Edad en donde reciben la fe para ser
transformados y raptados, y llevados con Cristo a la Cena de
las Bodas del Cordero.
Y ahora, en este tiempo final, vean ustedes, el Ángel del
Pacto, el Ángel de Jehová, que es el mismo Elohim, el Dios
de Abraham, de Isaac y de Jacob, el cual se ha manifestado
por medio de Sus profetas de etapa en etapa, y por medio de
Sus profetas le ha hablado al pueblo, estará en este tiempo
final enviando a Su Ángel mensajero, el mismo Ángel
mensajero que envió a Juan el apóstol.
Para aquel tiempo lo envió en Espíritu a Juan el apóstol, y
le dio a Juan el apóstol la revelación apocalíptica en esa forma
simbólica; y ese mismo Ángel, pero en un cuerpo de carne
humana, es enviado por Jesucristo en el Día Postrero a la
Iglesia del Señor Jesucristo. Apocalipsis, capítulo 22, verso
16 dice: “Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio
de estas cosas en las iglesias”.
Ese es el Ángel mensajero a través del cual Cristo, el
Ángel del Pacto, estará manifestándose y ungiéndolo, y
hablándole al pueblo, a Su Iglesia, y después al pueblo
hebreo, por medio de ese Ángel mensajero.
Pero ese Ángel no es el Señor Jesucristo, él es el profeta de
 27
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
la Dispensación del Reino con el Mensaje del Evangelio del
Reino, enviado por Jesucristo, primeramente a Su Iglesia para
darle a conocer todas estas cosas que deben suceder pronto y
luego darle a conocer estas cosas también al pueblo hebreo.
Ahora, este Ángel del Señor Jesucristo, ¿de dónde tomará
esta revelación divina, estas Palabras, que le estará hablando a
la Iglesia del Señor Jesucristo? Del Libro de la Verdad, del
Libro de los Siete Sellos, de Apocalipsis, capítulo 5, verso 1
al 10, el cual está a la diestra del que está sentado en el Trono;
y cuando llega el tiempo para ese Libro ser tomado y abierto,
aparece Cristo, el León de la Tribu de Judá, el cual también es
el Cordero de Dios que quitó el pecado del mundo; toma ese
Libro de la diestra del que está sentado en el Trono, y luego lo
abre en el Cielo, y luego en Apocalipsis, capítulo 6, verso 1 al
17, y Apocalipsis, capítulo 8, verso 1, abre esos Siete Sellos.
Y luego en Apocalipsis, capítulo 10, desciende Cristo, el
Ángel Fuerte, el Ángel del Pacto, el mismo que libertó al
pueblo hebreo, desciende envuelto en una Nube y con el arco
iris alrededor de Su cabeza, y con Sus ojos como llama de
fuego.
Recuerden, es el mismo que vio el profeta Daniel con Sus
ojos como llama de fuego; es el mismo que vio Daniel
también en una nube o sobre una nube, el cual era…, vamos a
ver en Daniel, capítulo 7, verso 13 al 14, dice:
“Miraba yo en la visión de la noche, y he aquí con las
nubes del cielo venía uno como un hijo de hombre, que vino
hasta el Anciano de días, y le hicieron acercarse delante de
él.
Y le fue dado dominio, gloria y reino, para que todos los
pueblos, naciones y lenguas le sirvieran; su dominio es
dominio eterno, que nunca pasará, y su reino uno que no será
destruido”.
Es el Ángel del Pacto, el Ángel de Jehová, Jesucristo, el
 28
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

Hijo del Hombre, apareciendo.

Y ahora, vean cómo lo que vio Daniel en el capítulo 7,
verso 13 al 14, de su Libro, lo vio Juan el apóstol. Juan el
apóstol, vean ustedes, ve a Cristo, el Cordero de Dios,
tomando de la diestra del que está sentado en el Trono el
Libro de los Siete Sellos, y al tomarlo, está tomando autoridad
y poder, como nos dice Apocalipsis, capítulo 5; pues al tomar
ese Libro, está tomando el Título de Propiedad.
Dice, capítulo 5, verso 8 en adelante:
“Y cuando hubo tomado el Libro, los cuatro seres
vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del
Cordero; todos tenían arpas, y copas de oro llenas de
incienso, que son las oraciones de los santos;
y cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno eres de
tomar el Libro y de abrir sus sellos; porque tú fuiste
inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de
todo linaje y lengua y pueblo y nación;
y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y
reinaremos sobre la tierra.
Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono,
y de los seres vivientes, y de los ancianos; y su número era
millones de millones,
que decían a gran voz: El Cordero que fue inmolado es
digno de tomar el poder, las riquezas, la sabiduría, la
fortaleza, la honra, la gloria y la alabanza”.
Esto también lo encontramos en Apocalipsis, capítulo 12,
versos 7 en adelante, donde dice:
“Después hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus
ángeles luchaban contra el dragón; y luchaban el dragón y
sus ángeles;
pero no prevalecieron, ni se halló ya lugar para ellos en el
cielo.
Y fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua,
 29
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo
entero; fue arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron
arrojados con él.
Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: Ahora ha
venido la salvación, el poder, y el reino de nuestro Dios, y la
autoridad de su Cristo; porque ha sido lanzado fuera el
acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante
de nuestro Dios día y noche.
Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero
y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus
vidas hasta la muerte.
Por lo cual alegraos, cielos, y los que moráis en ellos” …
¿Quiénes son los que moran en los Cielos? Las personas
que han partido de esta dimensión terrenal. Están los que
resucitaron con Cristo y ascendieron con Cristo, y están
también los santos del Nuevo Testamento, los cuales están en
la sexta dimensión en sus cuerpos teofánicos, y también están
los ángeles y los arcángeles, los querubines, los serafines,
todas esas huestes celestiales.
Y ahora, veamos lo que a continuación, dice:
“Por lo cual alegraos, cielos, y los que moráis en ellos.
¡Ay de los moradores de la tierra y del mar! porque el diablo
ha descendido a vosotros con gran ira, sabiendo que tiene
poco tiempo”.
Ahí podemos ver que, para este tiempo final, el diablo será
echado del Cielo y estará en la Tierra manifestado en toda su
plenitud.
Y ahora, vamos a ver cómo el reverendo William Branham
muestra este evento, porque el diablo estará en la Tierra,
como dice ahí Apocalipsis, capítulo 12. Pero vamos a ver la
forma que él estará en la Tierra; y luego también vamos a ver
cómo Dios, el Ángel del Pacto, el Ángel de Jehová, el Espíritu
Santo, vamos a ver cómo estará en la Tierra.
 30
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

Dice el reverendo William Branham en la página 146 del

Libro de “Los Sellos”:
“Y al mismo tiempo que el diablo cae del Cielo y se
encarna en un hombre” …
O sea que cuando es echado del Cielo, el diablo es echado
por Miguel, el Arcángel Miguel, y sus ángeles, o sea que una
batalla se lleva a cabo en el Cielo, en otra dimensión; y la
pierde el diablo y la gana el Arcángel Miguel con sus ángeles,
ese gran Príncipe que está de parte del pueblo hebreo.
Por eso es que, en Daniel, capítulo 12, verso 1, dice:
“En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe
que está de parte de los hijos de tu pueblo; y será tiempo de
angustia, cual nunca fue desde que hubo gente hasta
entonces; pero en aquel tiempo será libertado tu pueblo,
todos los que se hallen escritos en el Libro”.
Todos los que se hallen escritos en el Libro de la Verdad,
en el Libro de la Vida. Ahí están escritos los 144.000 hebreos.
Y ahora, vean que esa batalla que se lleva a cabo en el
Cielo produce la derrota del diablo en el Cielo, y es echado a
Tierra, y se encarnará en un hombre. Por eso dice: “¡Ay de los
que moran en la tierra! porque el diablo ha descendido con
grande ira, sabiendo que le queda poco tiempo”.
Porque le quedará el tiempo de la gran tribulación, tres
años y medio, y él sabrá que después de esos tres años y
medio será encadenado, será colocado preso, y no podrá hacer
nada en la Tierra, porque no tendrá instrumentos a los cuales
usar para engañar a la gente; “porque la tierra será llena del
conocimiento de la gloria de Jehová, como las aguas cubren el
mar”. Y la gente, cuando obtienen el conocimiento de la
verdad, el diablo no los puede engañar con la mentira. Y
ahora:
“Y al mismo tiempo que el diablo cae del Cielo y se
encarna en un hombre” ...
 31
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
O sea, se encarnará en el hombre de pecado, en el
anticristo, en la bestia, y tratará de destruir al pueblo hebreo, y
tratará de destruir a las vírgenes fatuas, y las matará durante la
gran tribulación, y matará también a los 144.000 hebreos, y
matará a muchos hebreos más en adición a los 144.000
hebreos.
Sigue diciendo… Ahí dice que en ese mismo tiempo:
“Y al mismo tiempo que el diablo cae del Cielo y se
encarna en un hombre, el Espíritu Santo sube y viene
encarnado en un hombre” …
O sea, que en medio de la raza humana estará la
encarnación del Espíritu Santo en un hombre, y estará la
encarnación del diablo en otro hombre; eso es lo que nos
muestra aquí.
En la página 277, dice el reverendo William Branham,
orando:
“Pedimos que el Espíritu Santo venga ahora mismo, el
Jinete del verdadero caballo blanco, mientras Su Espíritu, el
Espíritu de Cristo, entre en confrontación con el anticristo, y
Él llame los Suyos”.
Habrá una confrontación. Así como hubo una batalla en el
Cielo en donde el diablo fue derrotado, habrá una
confrontación aquí en la Tierra y el diablo será derrotado
también.
Y luego, Cristo tomará los reinos de este mundo y
establecerá Su Reino Milenial, y tendremos un Reino de paz,
de amor, de armonía y de felicidad, para los que entrarán a ese
glorioso Reino Milenial, donde entrarán naciones. Y
esperamos que las naciones latinoamericanas entren al Reino
Milenial de Jesucristo, nuestro Salvador.
Cristo está llamando a los suyos en este tiempo final.
Cristo, el Espíritu Santo, el Ángel del Pacto, está llamando a
los suyos con la Gran Voz de Trompeta, los está juntando y
 32
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

los está colocando en el Cuerpo Místico de Cristo, en la Edad

de la Piedra Angular.
Y ahora, vean cómo todos estos misterios de las cosas que
deben suceder pronto en este tiempo final están en estos dos
Libros: El Libro del profeta Daniel y el Libro del apóstol San
Juan: el Apocalipsis; aunque ninguno de ellos… la revelación
no es de ninguno de ellos, sino que es la revelación contenida
en el Libro de la Verdad; y es dada a Daniel por el Arcángel
Gabriel; a San Juan por el Ángel de Jesús; y a la Iglesia del
Señor Jesucristo le es abierto todo este misterio de las cosas
que deben suceder pronto en este tiempo final, por el Ángel
del Señor Jesucristo, enviado por Jesucristo en este tiempo
final, el cual es un profeta dispensacional, “porque no hará
nada el Señor Jehová sin que antes revele sus secretos a sus
siervos sus profetas”.
En la página 301 del Libro de “Los Sellos”, y 302, dice el
reverendo William Branham:
“Y noten bien: En el tiempo cuando Dios iba a librar al
mundo antes del diluvio, Él mandó un águila (o sea, un
profeta, el cual fue Noé). Cuando decidió librar a Israel,
también mandó un águila (¿A quién? A Moisés). ¿No cree
Ud. que cuando Juan estaba en la Isla de Patmos, este
mensaje era tan perfecto que aún no podía ser confiado a un
Ángel? Ahora, un ángel es un mensajero, pero ¿sabía Ud.
que aquel mensajero era un profeta? ¿Lo creen? Vamos a
probarlo. Veamos Apocalipsis 22, verso 9 para ver si no fue
un águila. Él era un ángel, un mensajero, pero era un
profeta, el cual reveló a Juan completamente este Libro de
Apocalipsis”.
Ahora, hemos visto que era un profeta este Ángel del Señor
Jesucristo.
Y luego lee capítulo 22, verso 8 el 9, lo cual ustedes
pueden leer luego.
 33
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
Sigue diciendo en la página 302:
“Ahora, el Libro era tan importante, y es la Palabra de
Dios. ¡Cuidado! Cuando la Palabra de Dios es revelada,
tiene que ser traída por el profeta, porque solamente a él
llega la Palabra de Dios”.
O sea, que una persona no puede decir: “Yo me voy a
meter a estudiar la Biblia, y voy a obtener toda la revelación
de todas las cosas que han de suceder en este tiempo final”.
Eso no es así con Dios. La persona se enredaría tanto con
todas esas profecías, que cuando termine de leer la Biblia,
estará más confundido que cuando comenzó, porque no es un
profeta, y no es el profeta asignado para hacer esa labor;
“porque no hará el Señor Jehová sin que antes revele sus
secretos a sus siervos sus profetas”.
Cualquier persona puede decir: “No, yo voy a buscar a
Dios para que Dios me revele esos secretos”. Tiene que ser a
un profeta y tiene que ser el profeta asignado para ese tiempo.
Y aquí el profeta asignado para este tiempo final es el Ángel
del Señor Jesucristo. Y él va al Libro de la Verdad, lee ahí,
busca ahí, y obtiene toda la revelación ahí contenida y la da a
conocer a la Iglesia del Señor Jesucristo.
¿Vieron lo sencillo que es? Es sencillo para el Ángel del
Señor Jesucristo enviado por Jesucristo: “Yo Jesús he enviado
mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las
iglesias”. ¿Y de dónde las va a tomar? Del Libro de la
Verdad.
Jesús dijo…, Jesucristo dice en Apocalipsis, capítulo 4,
verso 1: “Sube acá…”, habla con esa Voz de Trompeta, y
dice: “Sube acá, y yo te mostraré las cosas que han de
suceder después de estas”, o sea, después de las que ya han
sucedido en todo este tiempo que ha transcurrido de Cristo
hacia acá.
Y ahora, las cosas que van a suceder en este tiempo final,
 34
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

en el Día Postrero, Cristo las va a dar a conocer con esa Voz

de Trompeta. Con esa Gran Voz de Trompeta del Evangelio
del Reino que gira alrededor de la Segunda Venida de Cristo
serán dadas a conocer todas las cosas que han de suceder.
Y para dárselas a conocer a Su Iglesia, miren el orden
divino, y Dios no se sale de ese orden, y la Iglesia de
Jesucristo tampoco puede salirse de ese orden para buscar la
revelación divina del Día Postrero, de las cosas que van a
suceder después de las que ya sucedieron en el pasado, no se
puede salir de ese orden divino.
No puede buscar a otra persona, y decir: “Es que esta otra
persona es un buen predicador, o es un gran hombre que ha
estudiado mucho y tiene sus doctorados, tiene sus doctorados
en teología”. No se puede salir ninguna persona, ni la iglesia
de Jesucristo, del orden establecido por Cristo.
Él dice: “Yo Jesús he enviado a mi ángel para daros
testimonio de estas cosas en las iglesias”. Por lo tanto, lo
único que podemos hacer es conseguir a ese Ángel para que
nos dé a conocer todas esas cosas que debemos conocer
nosotros, las cuales Jesucristo envía por medio de Su Ángel.
¿Vieron lo sencillo? La solución es sencilla.
Ahora, vean todas estas cosas que Cristo dice que nos dará
a conocer: “Sube acá y yo te mostraré las cosas que han de
suceder pronto”, miren cómo las da a conocer a Su Iglesia.
Capítulo 22, verso 6 de Apocalipsis dice:
“Y me dijo: Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el
Señor, el Dios de los espíritus de los profetas, ha enviado su
ángel (¿a quién ha enviado?) a su ángel, (¿para qué?) para
mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto”.
Las cosas que deben suceder pronto son mostradas a la
Iglesia de Jesucristo por medio de Su Ángel mensajero de
Apocalipsis, capítulo 22, verso 6; y Apocalipsis 22, verso 16;
y Apocalipsis, capítulo 1, verso 1 al 3, el Ángel que fue
 35
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
enviado a Juan, con toda la revelación de Jesucristo para
dársela a Juan.
Y ahora, ese mismo Ángel es enviado a la Iglesia del Señor
Jesucristo en este tiempo final en carne humana, para que así
le hable a Su Iglesia.
Pero recuerden que es un profeta dispensacional. Y han
transcurrido unos dos mil años que Dios no enviaba un
profeta dispensacional. Antes de este Ángel mensajero de
Jesucristo ser enviado, el profeta dispensacional anterior a él,
¿quién fue? Nuestro amado Señor Jesucristo; y antes de Jesús,
¿quién fue el profeta dispensacional? Moisés.
O sea, que Dios nos envía cada cientos de años, otras veces
miles de años… porque solamente Dios tiene, ¿cuántos
profetas dispensacionales? Solamente Dios tiene siete profetas
dispensacionales: Adán, Set, Noé, Abraham, Moisés, Jesús, y
el Ángel de Jesús.
Pero con siete basta, porque son siete Dispensaciones,
¿dónde vamos a acomodar otro ángel dispensacional?
Solamente hay siete Dispensaciones para siete profetas
dispensacionales.
Ahora, hemos visto que para la declaración de lo que está
escrito en el Libro de la Verdad, para ser declarado en este
tiempo final, Jesús dice: “Yo Jesús he enviado mi ángel para
daros testimonio de estas cosas en las iglesias”.
Y todas estas cosas están escritas en el Libro de la Verdad
de Dios, están escritas en el Libro de la Vida del Cordero en
el Cielo, el Libro de los Siete Sellos. Y todas esas cosas que
están allí están transmitidas por el Espíritu Santo a través de
Sus profetas a la raza humana, y están escritas en la Biblia.
Por lo tanto, el Ángel del Señor Jesucristo vendrá tomando
las Palabras del Libro de la Verdad, y estará abriendo esas
Palabras dando a conocer el significado de ellas, y así estará
abriéndonos las Palabras de la Biblia, todas estas profecías
 36
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

bíblicas estará abriéndolas, porque estas profecías bíblicas

vienen del Libro de la Verdad.
Ahora, ¿vieron lo sencillo que es todo? El enviado para
estar declarando lo que está escrito en el Libro de la Verdad,
tomará la Biblia, predicará lo que está en la Biblia, y abrirá
esos misterios de la Biblia, y así estará hablándonos lo que
está escrito en el Libro de la Verdad, y así estaremos
obteniendo el conocimiento de todas estas cosas que deben
suceder pronto en este tiempo final.
Ahora, veamos un poquito más acerca de estas dos
manifestaciones grandes prometidas para ser cumplidas en
este tiempo final; la manifestación del Espíritu Santo en toda
Su plenitud viniendo en carne humana en un hombre de este
tiempo final; y el espíritu del diablo, el diablo, encarnándose
en otro hombre. Por lo tanto, habrá un enfrentamiento.
Y ahora, vean lo que será: Será la Venida del Jinete del
Caballo Blanco de Apocalipsis 19, la Venida del Espíritu
Santo.
Leímos lo que dijo el reverendo William Branham orando:
“Pedimos que el Espíritu Santo” … página 177, donde dice…
277 del Libro de “Los Sellos”, donde nos dice:
“Pedimos que el Espíritu Santo venga ahora mismo, el
Jinete del verdadero caballo blanco, mientras Su Espíritu, [el
Espíritu de Cristo], entre en confrontación con el anticristo, y
Él llame los Suyos”.
O sea, que habrá una confrontación. Pero Él llamará los
suyos luego que haya completado Su Iglesia y termine Su
Obra de Intercesión en el Cielo, luego Cristo sale del Trono
de Intercesión, reclama todo lo que Él ha redimido con Su
Sangre preciosa, y resucita a los muertos en Cristo y nos
transforma a nosotros.
Y Cristo estará manifestado en toda Su plenitud en este
Ángel mensajero de Jesucristo, este profeta dispensacional de
 37
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
Apocalipsis, capítulo 22, verso 16, el Ángel que Él envía para
dar testimonio de estas cosas en las iglesias; lo adoptará, le
dará un cuerpo eterno, como también a todos los escogidos
que viven en este tiempo final.
Y a través de ese Ángel el Espíritu Santo estará
manifestado en toda su plenitud. Será la manifestación de
Jesucristo en toda su plenitud a través de Su Ángel mensajero,
y eso será el Espíritu Santo viniendo en carne humana en el
Día Postrero.
Pero ese Ángel, ese hombre, no es el Señor Jesucristo, él
solamente es el instrumento de Jesucristo, a través del cual
Cristo se manifestará, y llamará y juntará los 144.000 hebreos
(12.000 de cada tribu), luego que haya terminado Su labor con
Su Iglesia, y haya llamado y juntado Sus escogidos de Su
Iglesia y los haya transformado.
Cuando se complete el número de los escogidos, ya Cristo
terminará Su Obra de Intercesión, y entonces resucitará a los
muertos en Cristo y a nosotros nos transformará. Y luego todo
el programa de Dios pasará para el pueblo hebreo.
Durante ese tiempo, ya transformados nosotros, estaremos
todavía en la Tierra de 30 a 40 días ya transformados; y será
un grupo de jóvenes representando de 18 a 21 años de edad, y
con nosotros estarán los santos que resucitarán en cuerpos
eternos y glorificados, cuerpos jovencitos también. Así que
habrá una gran reunión juvenil en este planeta Tierra. Y como
invitados tenemos a los jóvenes que están en la sexta
dimensión, los creyentes en Cristo que han partido; y aunque
algunos de ellos eran ya ancianos, en el Paraíso están
jovencitos, en el Paraíso ellos están en cuerpos jovencitos,
para pronto regresar y estar con nosotros de nuevo en cuerpos
eternos.
Ahora, todo esto es dado a conocer a la Iglesia de
Jesucristo, declarándole a la Iglesia de Jesucristo lo que está
 38
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

escrito en el Libro de la Verdad.

Ahora, hemos visto el Ángel que declara todas estas cosas,
y están escritas en el Libro de la Verdad, hemos visto que se
las declara ¿a quién? A la Iglesia del Señor Jesucristo en este
Día Postrero.
El mismo Ángel que le reveló a Juan toda esta revelación
apocalíptica en símbolos, estando en espíritu, luego estando
en cuerpo de carne, Cristo lo envía a Su Iglesia para que le
declare todas estas cosas que están escritas en el Libro de la
Verdad. Así como le envió al profeta Daniel al Arcángel
Gabriel, Dios lo envió para declararle las cosas que estaban
escritas en el Libro de la Verdad, pero quedaron cerradas y
selladas hasta el tiempo del fin.
Y para el tiempo del fin es que Jesús dice: “Yo Jesús he
enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las
iglesias”. En la misma forma en que Dios envió a Gabriel al
profeta Daniel, Jesucristo envía Su Ángel mensajero a Su
Iglesia, ungido con el Espíritu Santo, para darnos a conocer
todas estas cosas que deben suceder pronto y así declararnos
lo que está escrito en el Libro de la Verdad.
Y en lo que está escrito en el Libro de la Verdad, nos
declara quiénes somos nosotros en el programa de Dios,
quiénes somos nosotros en la América Latina y el Caribe. Y
hemos visto quiénes somos de acuerdo a lo que está escrito en
el Libro de la Verdad.
Y todas las cosas que él estará revelándole a la Iglesia de
Jesucristo será el contenido escrito en el Libro de la Verdad,
para así tener la fe, la revelación, para ser transformados y
raptados, que es la fe, la revelación, de la Segunda Venida de
Cristo como el León de la Tribu de Judá, como Rey de reyes y
Señor de señores, en Su Obra de Reclamo, para ser
transformados y volver a la juventud los que ya están
ancianos, y los adultos venir a ser jóvenes de 18 a 21 años, y
 39
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
los jóvenes ser jóvenes, pero en un nuevo cuerpo.
Y esa juventud no pasará, esa juventud no es vanidad,
porque es eterna. La juventud en el cuerpo mortal es vanidad,
porque es temporal. Usted la tiene por algunos años y después
se mira en el espejo, y se fue, se va con los años.
Y ahora, en el nuevo cuerpo tendremos juventud eterna;
por lo tanto, la juventud en el nuevo cuerpo no es vanidad.
Ahora, estamos viviendo en un tiempo como el de
Abraham. Recuerden que Cristo dijo que sería, la Venida del
Hijo del Hombre como en los días de Lot, y en los días de Lot
estaba Abraham, y en los días de Lot fue que le apareció
Gabriel, Miguel y Elohim, a Abraham, y les habló de la
venida del hijo prometido, y fueron rejuvenecidos Abraham y
Sara, para recibir al hijo prometido el próximo año. O sea, que
de aquel tiempo en que le apareció el Ángel, a la venida del
hijo prometido, pasaría un año; o sea que sería el próximo año
de los días de Abraham.
Ahora, vean ustedes, una mujer de 89 años, en la
actualidad: ¿diría usted que es una jovencita? ¿O diría usted
que es una mujer de mediana edad? Más bien diría que es una
anciana.
Y ahora, miren ustedes cómo luego de esa aparición de los
Ángeles a Abraham, luego se fueron a otro territorio Abraham
y Sara, y un rey (¿quién fue Miguel? ¿Abimelec?) se enamoró
de Sara. Era de Gerar, (¿por ahí?) De un territorio ahí gentil;
de Gerar.
Ahora, ¿qué rey se va a enamorar de una señora de 89
años, ya para 90 años? Pero como Sara había sido
rejuvenecida para poder tener un hijo, había vuelto a la vida
de mujer que puede tener hijos, pues el rey, cuando la vio, se
enamoró de ella. Y Abraham era también una persona joven,
por lo tanto, podía tener un hijo por medio de Sara.
Pero ahora, vean ustedes, un rey se mete por medio ahí, y
 40
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

ahora como que se ve en peligro la venida del hijo prometido.

Porque por medio de Sara, si se casaba ese rey con Sara...;
porque Sara había dicho que Abraham era su hermano, ese era
el convenio que ellos tenían, pues Sara era una mujer muy
hermosa.
Ya había sucedido algo parecido, y unos 25 años más o
menos, atrás, 25 o 30 años atrás, como 25 años atrás allá en
Egipto; ella tenía como 65 años, y el rey de Egipto, el Faraón,
también se enamoró de ella, y la había apartado como hacían
los reyes, la apartaban por una cantidad de tiempo para
después casarse, pero Dios no lo permitió.
Y ahora, cuando Sara es rejuvenecida, ahora otro rey se
enamoró de ella y quiere casarse con ella, otro rey gentil. Pero
Dios interviene también, porque por medio de Sara vendría el
hijo prometido para Abraham, y ya Abraham sabía que para el
próximo año el hijo prometido lo tendría.
Siempre hay luchas para el pueblo de Dios, para los hijos
de Dios. Siempre hay luchas, en donde el enemigo trata de
impedir que se cumpla lo que Dios les ha prometido a Sus
hijos.
Pero Dios cumplirá lo que Él ha prometido a todos
aquellos que permanecen con su fe puesta en Cristo, creyendo
lo que Él ha prometido; porque para Dios no hay ninguna
cosa imposible, y para el que cree no hay ninguna cosa
imposible, todas son posibles.
Y ahora, hablar de la venida del Hijo prometido, el cual
allá era Isaac, y es tipo y figura de la Segunda Venida de
Cristo para este tiempo final; hablar de la Segunda Venida de
Cristo para este tiempo final para algunas personas quizás sea
locura, pensarán que es una locura pensar; pero otros dirán:
“Como están los tiempos y con todas las señales cumplidas, lo
único es la Segunda Venida de Cristo; eso es lo que
necesitamos que Dios cumpla”.
 41
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
Y la esperanza de la Iglesia de Jesucristo es la Segunda
Venida de Cristo. Sin la Segunda Venida de Cristo no hay
resurrección de los muertos en Cristo, no hay transformación
para nosotros, y no hay rapto o arrebatamiento al Cielo para ir
a la Cena de las Bodas del Cordero. Así que, todo espera a
Cristo en Su Segunda Venida.
Y ahora, la Segunda Venida de Cristo es la Venida del Hijo
prometido, el Hijo prometido. Y vino a Abraham por medio
de Sara.
Y ahora la Iglesia del Señor Jesucristo es la que tiene la
promesa del Hijo prometido; así como la Primera Venida de
Cristo, la promesa del Hijo prometido a la Iglesia hebrea bajo
la Ley se cumplió en medio del pueblo hebreo a través de una
virgen descendiente del rey David.
Pero ahora, para el tiempo final, la que tiene la promesa de
la Segunda Venida de Cristo es la Iglesia del Señor Jesucristo.
Por lo tanto, a la Iglesia de Jesucristo y en medio de la Iglesia
de Jesucristo, será que se cumplirá la Segunda Venida de
Cristo.
Página 57 del Libro de “Los Sellos”, dice el reverendo
William Branham, hablando del Ángel Fuerte que desciende
del Cielo, que es la Venida del Señor, dice:
“Y vi otro ángel fuerte descender del cielo, cercado de una
nube, y el arco celeste sobre su cabeza.
Ahora, si usted se fija bien notará [CORTE EN LA
CINTA]
… el Ángel de Apocalipsis capítulo 1? Este es el mismo.
Un ángel es un mensajero, y él es un mensajero a Israel. ¿Ve
usted? La Iglesia está a punto de ser raptada, Él viene por Su
Iglesia”.
El Ángel del Pacto, el Ángel de Jehová, el cual se hizo
carne dos mil años atrás en el velo de carne llamado Jesús,
para este tiempo final vendrá nuevamente ese mismo Ángel
 42
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

del Pacto que había libertado al pueblo hebreo; y vendrá por

el pueblo hebreo, pero antes tiene que venir a la Iglesia del
Señor Jesucristo, porque la Iglesia ha llegado al tiempo final
en donde tiene que ser raptada, llevada a la Cena de las Bodas
del Cordero; y para eso tienen que los muertos en Cristo ser
resucitados, y nosotros los que vivimos ser transformados,
para luego tener una manifestación Dios, en Su Iglesia, de 30
a 40 días con la cual estremecerá al mundo entero, y luego
nos iremos con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero.
Luego veremos a Cristo, cuando estemos transformados,
veremos a Jesucristo en Su cuerpo glorificado.
Pero antes estaremos viendo al Ángel del Pacto, a
Jesucristo en Espíritu Santo, manifestado a través de Su Ángel
mensajero dándonos a conocer todas estas cosas que deben
suceder pronto. Porque por medio de Su Ángel mensajero
enviado a Su Iglesia para darle a conocer estas cosas, para
darle testimonio de estas cosas que deben suceder, es que
Jesucristo en Espíritu Santo estará manifestado en medio de
Su Iglesia, y estará declarando lo que está escrito en el Libro
de la Verdad. Cristo lo estará declarando por medio de Su
Ángel mensajero a Su Iglesia.
Para eso es que Él envía Su Ángel mensajero, para eso es
que Dios siempre envía un profeta mensajero, para ungirlo
con Su Espíritu Santo, colocar Su Palabra en el corazón y en
la boca de ese profeta, y usar a ese profeta hablándole al
pueblo. Y ese profeta habla ungido con el Espíritu Santo esas
Palabras, que son la Palabra divina, son las Palabras de Dios
fieles y verdaderas para el pueblo de Dios.
Ahora, hemos visto quién es el que viene en el Día
Postrero en medio de la Iglesia de Jesucristo, declarando lo
que está escrito en el Libro de la Verdad.
Ahora, Dios ha usado muchos profetas en el Antiguo
Testamento y en el Nuevo Testamento también, y usó a los
 43
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
apóstoles, y usó a los siete ángeles mensajeros, en los cuales
estuvo Cristo en Espíritu Santo manifestado en la porción
correspondiente a cada Edad, y habló por medio de ellos, y
por medio de ellos reveló lo que tenía que revelar en aquellos
días.
Pero ahora las cosas que deben ser reveladas en este
tiempo final, las cosas que deben suceder pronto son las que
tienen que ser reveladas en este tiempo final, y son las que
vendrá —Jesucristo, el Espíritu Santo, el Ángel del Pacto, el
Espíritu Santo— revelando a Su Iglesia por medio de Su
Ángel mensajero. Y así tendremos a Cristo en Su Ángel,
manifestado, declarando lo que está escrito en el Libro de la
Verdad.
Las personas van a estar viendo un hombre, pero con ese
hombre estará Cristo en Espíritu Santo, ungiéndolo, ese será
el ungido de Cristo, de Dios, en el Día Postrero, y será la boca
de Jesucristo, la boca de Dios, para hablarle a Su Iglesia, y
después al pueblo hebreo; ¿hablarle qué? Las cosas que están
escritas en el Libro de la Verdad, todas estas cosas que deben
suceder pronto en este tiempo final. Y así se estará
cumpliendo todo lo que Dios ha prometido a Su Iglesia y
también al pueblo hebreo para este tiempo final.
Y ahora, siendo que el Ángel del Señor Jesucristo es el
enviado de Jesucristo, del cual Cristo dijo: “Yo Jesús he
enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las
iglesias”, el Ángel del Señor Jesucristo podrá decir, en el
tiempo en que él desee: “Yo he venido en Nombre de mi
Señor Jesucristo, para declarar a ustedes lo que está escrito en
el Libro de la Verdad; declarar a ustedes todas estas cosas que
deben suceder pronto”.
Él no pensará: “¿Será que lo van a creer o no lo van a
creer?”. Él no pensará en eso, él solamente pensará en hablar
lo que Cristo le diga que hable. Cristo, el Ángel del Pacto,
 44
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

pondrá en la boca de Su Ángel mensajero, y en el corazón, lo

que él debe hablar. ¿Y qué debe hablar en este tiempo final?
Debe hablar, debe declarar, lo que está escrito en el Libro de
la Verdad.
Eso es lo que debe declarar, y por eso su Mensaje será
visto en la explicación o como la explicación de lo que hemos
visto en el Libro del profeta Daniel y en el Libro del
Apocalipsis, porque él viene declarando lo que está escrito en
el Libro de la Verdad; y viene declarando, abriendo, las
profecías correspondientes al tiempo final.
Y al ser abiertas esas profecías, los entendidos entenderán,
no importa la edad que tengan. Si es un ancianito o una
ancianita, entenderá; si es una persona adulta que no haya
llegado a ser anciano todavía, también entenderá si es un
escogido; si es un joven, también entenderá; si es un niño,
también entenderá, de acuerdo al nivel de entendimiento
correspondiente a un niño.
Y algunas veces nuestros niños nos sorprenden cuando nos
hablan cosas que algunas veces ni nosotros las habíamos
pensado; y algunas veces saben más algunos niños que los
mismos padres. ¿Por qué? Porque se ocupan de estar
escuchando. Porque la fe, la revelación, viene por el oír de la
Palabra de Dios para el tiempo en que la persona está
viviendo.
Padres: no dejen que sus hijos se le adelanten,
manténganse ustedes al día. Y ustedes, padres, no dejen que
sus niños se atrasen, mantengan a sus niños al día recibiendo
la enseñanza de la Palabra de Dios correspondiente a este
tiempo final.
Y ustedes que tienen padres ancianitos, no dejen que sus
padres ancianos se atrasen; ayuden a sus padres ancianos para
que se mantengan al día con la revelación de todas estas cosas
que deben suceder pronto en este tiempo final.
 45
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
Porque estas son las cosas que el Espíritu Santo a través de
Su Ángel nos declara en este tiempo final y son tomadas del
Libro de la Verdad, para así, cada persona que tiene su
nombre escrito en el Cielo, en el Libro de la Vida del
Cordero, escuchar la Voz de Cristo: “Mis ovejas oyen mi voz
y me siguen”.
Y ahora, llegamos al tiempo final. No sabemos en qué año
los muertos en Cristo van a resucitar en cuerpos eternos; y no
sabemos en qué año nosotros vamos a ser transformados. Pero
sabemos una cosa, y es que estamos viviendo en el fin del
tiempo, en el tiempo final. Estamos viviendo nosotros en el
fin del siglo, conforme al calendario que se usa entre los
gentiles, llamado “el calendario gregoriano” o “calendario
cristiano”, y solamente le falta una cantidad de meses
pequeña, unos 8 meses y algo, para terminar el año 1999 y
comenzar el 2000.
Algunas personas y algunas naciones dicen que cuando
lleguemos al día primero de diciembre del año 2000, hemos
llegado al próximo Milenio y hemos llegado al siglo XXI para
comenzarlo.
Sin embargo, hay otras personas y también otras naciones
que dicen que cuando lleguemos al primero de enero del año
2001, hemos llegado al primer mes y primer año del siglo
XXI, y primer mes y primer año del próximo Milenio.
Vean, ni las naciones ni sus sabios están de acuerdo.
Algunos cuentan el tiempo y el calendario gregoriano, el
tiempo del calendario gregoriano lo cuentan desde que Jesús
nació; pero algunos comienzan el calendario con el año cero,
y otros lo comienzan con el año uno, y ahí está la diferencia
de 12 meses. Pero para Dios no hay ningún problema.
Y siendo que el calendario está atrasado, pues miren, las
discusiones que tengan, no importa que sea en el año 2000 o
sea en el año 2001 que comienza el siglo XXI, y que
 46
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

comience el próximo Milenio, si le añadimos al calendario los

años de atraso que tiene, y Dios —el calendario de Cristo
hacia acá y de Adán hacia acá— lo cuenta con 360 días al
año, todos los calendarios están mal y el único que está bien
es el de Dios.
Así que, de acuerdo al calendario de Dios es que se van a
cumplir las cosas, ya sea que Dios lo esté tomando el año con
360 días, o lo esté tomando con 365 días y 1/4 de día. La cosa
es que el programa de Dios se va a cumplir de acuerdo a
como Dios lo ha determinado.
Así que no hay ningún problema, después le cuadramos el
calendario a los hechos, al cumplimiento de lo que Dios ha
prometido, y no hay ningún problema.
O sea, no hay motivo para estar discutiendo de que si
comienza en el año 2000 o si comienza en el año 2001 el
próximo siglo y el próximo Milenio. No hay ningún
problema.
Lo importante es estar escuchando: LA DECLARACIÓN
DE LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL LIBRO DE LA
VERDAD, porque con esa declaración son abiertas las
Escrituras proféticas del Día Postrero, y es abierto el
entendimiento y el corazón de los hijos de Dios para entender
todas estas cosas que deben suceder pronto, y son llamados y
juntados todos los escogidos de Dios, y somos preparados
para ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de las
Bodas del Cordero.
Ahora, hemos visto qué es lo más importante en este
tiempo final: Es estar escuchando la declaración de lo que está
escrito en el Libro de la Verdad. Y hemos visto por medio de
quién viene la declaración de estas cosas si están escritas en el
Libro de la Verdad, para este tiempo final: vienen por medio
del Ángel de Jesucristo enviado por Jesucristo y ungido con el
Espíritu de Cristo para este tiempo final en medio de la Iglesia
 47
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
de Jesucristo.
¿Dónde vamos a buscar al enviado con la declaración de
todas estas cosas que están escritas en el Libro de la Verdad?
Lo vamos a buscar en la Iglesia de Jesucristo en la Edad de la
Piedra Angular, en el entrelace de un nuevo Día
dispensacional.
O sea, que no lo vamos a buscar en la primera Edad, ni en
la segunda Edad, ni en la tercera Edad, ni tampoco en el
territorio donde se han cumplido esas Edades; ni lo vamos a
buscar en la tercera, cuarta, quinta, sexta o séptima Edad. Lo
vamos a buscar más arriba, vamos a subir más arriba, no
vamos a bajar para ninguna de las Edades. Cristo en
Apocalipsis, capítulo 4, dice: “Sube acá”; no dice: “Baja
acá”.
Bajar es uno bajar al pasado. Subir es uno subir al
presente, donde Cristo está manifestado revelando estas cosas
que deben suceder pronto por medio de Su Ángel mensajero
en la Edad de la Piedra Angular. Ahí es donde somos
llamados a subir en el Cuerpo Místico de Cristo; esa es la
posición de la Iglesia de Jesucristo en este tiempo final; y esa
es la Edad de Oro para la Iglesia de Jesucristo, a tal grado que
vamos a ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de
las Bodas del Cordero.
Ahora, hemos visto que esta Edad de Oro, la Edad de la
Piedra Angular, tendrá todas las profecías que corresponden
al tiempo final siendo cumplidas y siendo declaradas, dadas a
conocer, a los hijos e hijas de Dios.
Así estará el Ángel del Señor Jesucristo en la Edad de la
Piedra Angular, ungido con el Espíritu Santo, declarando lo
que está escrito en el Libro de la Verdad.
¿Y cómo estarán los escogidos de Dios en la Edad de la
Piedra Angular en este tiempo final? Escuchando la Voz de
Cristo por medio de Su Ángel mensajero; escuchando la
 48
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

declaración de lo que está escrito en el Libro de la Verdad; y

así recibiendo la fe, la revelación, para ser transformados y
raptados en este tiempo final.
Y eso es estar escuchando la Gran Voz de Trompeta, que
es la Voz de Cristo, la Voz del Alfa y Omega, en Apocalipsis,
capítulo 1, verso 10 al 11; y Primera de Corintios, capítulo 15,
verso 50 al 55; y Primera de Tesalonicenses, capítulo 4, verso
13 al 17.
Esa Gran Voz de Trompeta o Trompeta Final, o Trompeta
de Dios, es la Voz de Cristo, el Ángel del Pacto, hablándole a
Su Iglesia por medio de Su Ángel mensajero, y declarándole
lo que está escrito en el Libro de la Verdad.
Ha sido para mí un privilegio grande estar con ustedes en
esta ocasión, dándoles testimonio de lo que está escrito en el
Libro de la Verdad, y mostrándoles a ustedes la posición de
ustedes como latinoamericanos y caribeños, la posición en la
cual ustedes están en el Libro de la Verdad. Están en la mejor
posición que nación alguna puede estar. Y luego le toca al
pueblo hebreo en la bendición divina contenida en el Libro de
la Verdad.
Que las bendiciones de Jesucristo, el Ángel del Pacto,
nuestro Salvador, sean con todos ustedes y conmigo también;
y pronto se complete el número de los escogidos de Dios, y
pronto los muertos en Cristo resuciten y nosotros los que
vivimos seamos transformados, y tengamos esa manifestación
plena de Cristo en medio nuestro, en medio de Su Iglesia, por
30 o 40 días, y después seamos llevados con Cristo a la Cena
de las Bodas del Cordero en el Cielo. En el Nombre eterno del
Señor Jesucristo. Amén y Amén.
Y esto será así como hemos pedido a Cristo, porque es
conforme a Su voluntad, conforme a lo que Él prometió para
nosotros para este tiempo final. Pero hay que pedir lo que Él
prometió, hay que pedirle que Él lo cumpla. Recuerden eso.
 49
DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
Él nos da las peticiones de nuestro corazón. Con el corazón se
cree, pero con la boca se hace confesión para salud, para
salvación, para que se materialice lo que Dios ha prometido.
De eso hablaremos en otra ocasión.
Para la próxima actividad estaré nuevamente con ustedes
en el tema correspondiente, el cual el reverendo Miguel
Bermúdez Marín les anunciará, y también les anunciará la
hora en que estaremos nuevamente reunidos.
“DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO DE LA VERDAD”. Y nosotros escuchando lo que
está escrito en el Libro de la Verdad. Esa es la posición de la
Iglesia de Jesucristo: escuchando lo que está escrito en el
Libro de la Verdad, siendo declarado por el Espíritu Santo a
través de Su Ángel mensajero.
¿Vieron lo sencillo que es todo? ¿Y vieron la bendición tan
grande que hay para nosotros en este tiempo final? Es un
tiempo de bendición en abundancia, que lo único que
podemos decir es que ¡tiempo es lo que nos falta para recibir
más y más bendición de parte de Dios!
Pero recuerden que toda bendición se recibe: creyéndola; y
para tener fe, la fe se recibe: oyendo, oyendo la Palabra de
Dios. Y oyendo la Palabra de Dios vamos recibiendo más y
más fe, la fe se aumenta, y las bendiciones se aumentan para
nosotros; porque como uno cree, así le viene de parte de Dios.
Bueno, vamos a pasar por aquí al que me pasó a mí aquí,
¿fue Tirzo? Tirzo fue, pues vamos a pasar a Tirzo, para que él
luego le pase al reverendo Miguel Bermúdez Marín.
Que Dios les bendiga, que Dios les guarde, amados amigos
y hermanos presentes. Y adelante, escuchando la declaración
de lo que está escrito en el Libro de la Verdad.
Nuestro tema ha sido: “DECLARANDO LO QUE ESTÁ
ESCRITO EN EL LIBRO DE LA VERDAD”.
Vamos a dejar por aquí al reverendo Tirzo Ramiro Girón
 50
DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

Pinzón, para finalizar nuestra parte; y luego pasarle al

reverendo Miguel Bermúdez Marín. Que Dios les bendiga y
les guarde a todos…
“Con la fe puesta en Cristo”, caminamos nosotros en este
Día Postrero escuchando la declaración de las cosas
contenidas en el Libro de la Verdad. O sea, que escuchar esa
declaración de las cosas contenidas en el Libro de la Verdad,
nos afirma más en Jesucristo, nuestro Salvador; afirma más
nuestra fe en Cristo. Y podemos cantar con toda nuestra alma
que “con la fe puesta en Cristo” caminaremos todos los días
de nuestra vida, por el Milenio y por toda la eternidad.
Conocer las cosas contenidas en el Libro de la Verdad
afirma nuestra fe ¿en quién? En Jesucristo, nuestro Salvador.
“Con la fe puesta en Cristo” ...
Hablemos de Cristo, el Rey de reyes es. Y esto es conforme
a lo que está escrito en el Libro de la Verdad. “Hablemos de
Cristo” ...
Escuchando de Cristo, hablando de Cristo, y con la fe
puesta en Cristo, seguimos a Jesucristo. O sea, que todo va
bien combinado, bien atado, lo uno con lo otro.
Seguimos a Cristo, pues Él es nuestro Salvador. Hablamos
de Cristo, dando a conocer las cosas contenidas en el Libro de
la Verdad.
Está la Venida de Cristo y Su Obra de Redención en la
Cruz del Calvario, la Venida del Espíritu de Cristo, y está
también Su Segunda Venida, en el Libro de la Verdad. Y de
todas esas cosas nosotros hablamos al hablar de Cristo. Y
mantenemos la fe puesta en Cristo.
Y oramos por los demás, y le damos la Palabra, para que
también ellos pongan su fe en Cristo; porque Cristo es la
única esperanza para el ser humano. Y en este tiempo final,
para la humanidad la única esperanza es Jesucristo en Su
Segunda Venida. No hay otra esperanza para la raza humana.
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DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO…
Las naciones no le pueden dar esperanza a los seres
humanos, pues las naciones, con todos los problemas que
tienen, lo único que pueden hacer es decirle a la gente “que se
porten bien” para que no causen más problemas.
Y las naciones están llenas de problemas. Pero Isaías 45,
verso 23, dice: “Mirad a mí todos los términos de la tierra, y
sed salvos”. Y habrá naciones que recibirán bendición en este
tiempo final, mirando a Cristo, es la única esperanza para los
seres humanos y para las naciones.
La Segunda Venida de Cristo es la única esperanza. Y las
naciones que mirarán a la Segunda Venida de Cristo serán
bendecidas, y las personas también.
Y nosotros decimos: “Yo sigo a Cristo”, y le enseñamos a
los demás todas las cosas de Cristo, para que también sigan a
Cristo.
Yo sigo a Jesucristo, mi Salvador. “Sigo, sigo a
Jesucristo”.
“DECLARANDO LO QUE ESTÁ ESCRITO EN EL
LIBRO DE LA VERDAD”.