lLa guitarra de Luis Alfredo Gavilano
Bellas obras del repertorio guitarrístico como el Capricho Árabe,
Recuerdos de la Alhambra y otras composiciones de Francisco Tárrega, lo
mismo que obras de Falla, Albéniz y tantos otros, figuran en el repertorio del
concertista paceño Luis Alfredo Gavilano, pero desde un tiempo atrás él está
dedicado al estudio y la interpretación de la obra integral de Alfredo
Domínguez (1936-1980) -autodidacta, nacido en Tupiza, maestro de la
guitarra- y al atesorado legado musical que dejó a su muerte acaecida en
Ginebra donde residía.
Su firme empeño en que se conozca y se difunda la obra de
Domínguez, no solo en Bolivia sino en todo el mundo, y que se valore y se
interprete su música, trasciende cualquier barrera y todo límite, y es esta
devota entrega y la pasión que pone en su trabajo de investigación la clave
del enorme éxito de sus conciertos en Europa.
En Italia, España, Suecia y otros países europeos se ha encontrado con
una diversidad de auditorios que nunca habían escuchado sonidos ni
conocían los ritmos de Bolivia y que reaccionaban entusiasta y
positivamente ante esa nueva experiencia. La receptividad de esos públicos
no pudo haber sido mayor y ello le impulsa a seguir en su empeño de
conseguir una amplia difusión de la música de Alfredo Domínguez y de
realizar su próximo proyecto que es la grabación discográfica de este
repertorio que domina y del que está tan imbuido.
A su breve paso por Madrid, mi esposo, yo y parte de la familia y
algunos buenos amigos tuvimos el privilegio de escuchar un concierto con el
repertorio “todo Domínguez-guitarra sola” que ocupó su gira internacional.
Si el maestro Domínguez mismo podría escucharle, seguramente que
aprobaría con creces el resultado de una interpretación cuidada, meticulosa,
inspirada, con un profundo conocimiento de la intención y el contenido de
cada una de las piezas. Antes de cada interpretación, Luis Alfredo ofrece una
breve introducción sobre algún pasaje de la vida del autor, lo que resulta en
una fascinante biografía que luego ilustra la música. Algunas tiernas y otras
dramáticas historias de un niño pastor que descubrió el mundo de la música
que dio sentido a su vida y que le mostró el camino a seguir.
Todos los intérpretes del instrumento de la guitarra en Bolivia, conocen
a Domínguez. Gran parte de su legado musical fue rescatado por el querido y
malogrado maestro Fernando Ardúz Ruíz, quien cual amanuense realizó el
trabajo titánico de transcribir al pentagrama, nota a nota, cada una de las
obras, partiendo de las grabaciones discográficas que el maestro Domínguez
dejó. Toda esta música está editada en el Libro XIV de mi *Colección
Compositores Bolivianos* que registra también el Primer Festival
Boliviano de Guitarra Clásica, Homenaje a Alfredo Domínguez de
noviembre de 2002.
Domínguez compuso páginas como El Pastor, El Secreto, Feria, La
Agonía del Ave, La Muerte del Indio, La Rueda y tantos otros títulos que
cuentan historias de su vida, de su región, de su país.
Luis Alfredo es el narrador de capítulos fascinantes y auténticos con su
guitarra y sus magníficas interpretaciones.
Madrid, agosto de 2024
Ma. Teresa Rivera de Stahlie