Factores Victimógenos
Son las condiciones o situaciones que hacen a un individuo más propenso a
convertirse en víctima.
• Factor victimógeno: Facilita o favorece la victimización, pero no la causa
directamente.
• Causa victimógena: Produce necesariamente el efecto; al eliminar la causa,
se elimina el efecto.
Clasificación de Factores
Existen varias clasificaciones de factores victimógenos, algunos los llaman
"predisposiciones" o "factores de riesgo". Para Stanciu, los factores que explican la
victimización se dividen en:
• Factores endógenos: Deficiencias orgánicas.
• Factores exógenos: Factores sociales.
Factores Exógenos
Son aquellos que provienen del entorno del individuo, y pueden ser de diversa
naturaleza: telúricos, espaciales, temporales, sociales, etc.
• Estado Civil: Determina la victimización en delitos como adulterio o
bigamia, y puede influir en otros delitos, especialmente sexuales.
Solteros, Casados, Divorciados, Viudos.
• Escolaridad: La escuela, como factor social, puede ser tanto un medio
victimógeno como un instrumento de protección contra la victimización.
• Procedencia: Los extranjeros son más vulnerables por su
desconocimiento del entorno, costumbres e idioma, y pueden ser víctimas
de discriminación y xenofobia, especialmente los trabajadores
indocumentados.
• Familia: Aunque se enfoca más en la victimización externa, la violencia
intrafamiliar (como el maltrato infantil o la violencia de género) es un
problema preocupante con alto potencial victimológico.
• Profesión: Algunas profesiones conllevan mayor riesgo de victimización,
como policías, taxistas, cajeros o cobradores. Las profesiones
"intocables", como médicos o sacerdotes, generalmente están más
protegidas.
• Espacio y Tiempo Victimales: La victimización ocurre en un lugar y tiempo
específicos. Existen zonas victimógenas donde se produce la
victimización, diferentes de las zonas criminógenas (donde se origina la
criminalidad). Las zonas urbanas presentan una mayor tasa de
victimización que las suburbanas y rurales. Para los hombres, la calle es
más peligrosa; para las mujeres, el hogar, el trabajo y la escuela son los
lugares más riesgosos.
Factores Endógenos
Son aquellos que provienen del interior del individuo, y se dividen en dos
grupos: biológicos y psicológicos.
Factores Biológicos
• Estado físico de la víctima: La debilidad física hace más probable que
alguien sea víctima. Según Hentig, los más vulnerables son los menores, los
ancianos, y aquellos con debilidad de espíritu.
• Edad: La edad influye en la victimización. El 53.7% de las personas
recuerdan haber sido víctimas entre los 10 y los 20 años. Los jóvenes suelen
ser víctimas de otros jóvenes.
• Sexo: Existen diferencias en los tipos de victimización según el sexo. Las
mujeres son más víctimas de delitos como violación, robo e injurias, mientras
que los hombres predominan en lesiones.
Factores Psicológicos
• Procesos Cognitivos: Las deficiencias sensoriales y cognitivas hacen a las
personas más vulnerables:
➢ Poca sensibilidad cutánea aumenta el riesgo de ser víctima de
carteristas.
➢ Deficiencias auditivas o visuales facilitan la victimización.
➢ La falta de atención o distracción incrementa la probabilidad de ser
víctima.
➢ La falta de memoria puede llevar a olvidar cerrar una casa o coche.
➢ Las deficiencias intelectuales también facilitan la victimización.
• Esferas Afectiva y Volitiva: Las motivaciones emocionales pueden llevar a
la victimización, como en casos donde se busca obtener una ganancia o se
tienen sentimientos como esperanza, compasión o nacionalismo que pueden
ser aprovechados por los victimarios.
• La Personalidad: Según la teoría psicoanalítica, la personalidad se divide
en:
➢ Yo: En contacto con la realidad, su mal funcionamiento puede llevar a
problemas victimógenos.
➢ Ello: Los instintos y deseos impulsivos del individuo pueden llevar a la
victimización, pues no evalúan consecuencias.
➢ Superyó: La ausencia o rigidez del superyó puede generar falta de
adaptabilidad, lo que puede llevar a la victimización.
Los Instintos
Los instintos básicos, como el de conservación (propio, de la especie y del grupo de
pertenencia), son fundamentales en la naturaleza humana y pueden influir en la
probabilidad de ser víctima dependiendo de cómo se gestionen.
Relaciones entre víctima y victimario
Aunque tradicionalmente se ve al criminal como agresor y a la víctima como
inocente, la victimología muestra que las culpas son relativas y ambos se
influyen mutuamente.
Gibrán Jalil afirma que la relación es más compleja de lo que la ley reconoce,
y a veces los roles se invierten.
Di Tullio afirma que el comportamiento de la víctima es clave en la
criminogénesis, pues puede reforzar el impulso del criminal. En la dinámica
víctima-victimario, la víctima puede intervenir de cuatro formas:
a) La víctima puede ser la causa directa de la infracción (vinculación
personal).
b) La víctima puede ser solo un pretexto para la infracción (relación de mero
contacto).
c) La víctima puede ser el resultado de un consenso entre víctima y victimario
(relación durante el hecho).
d) La víctima puede ser el producto de una coincidencia fortuita (anonimato
interpersonal).
Pareja Penal
Mendelsohn usa el término "pareja penal" para describir la relación entre el criminal
y la víctima, diferenciándola de la pareja criminal. En algunos casos, como el incesto
o pactos suicidas, no siempre es fácil distinguir quién es el victimario y quién es la
víctima.
Sengstock y Liang proponen tres modelos para estudiar estas relaciones:
a) Modelo de precipitación victimal: La víctima seduce o provoca al
agresor para que cometa el acto ilegal.
b) Modelo de conflicto victimal: El agresor y la víctima están involucrados
en un conflicto prolongado, alternando roles de agresor y víctima.
c) Modelo de disponibilidad victimal: El agresor observa a la víctima y
puede predecir su comportamiento, mientras que la víctima no tiene
conocimiento previo del agresor.
La Relación Víctima-Criminal
Para analizar la relación entre la víctima y el criminal, se usan dos variables: el
conocimiento mutuo y la actitud de cada uno hacia el otro. En cuanto al
conocimiento, hay cuatro posibilidades:
a) El criminal y la víctima se conocen, como en el caso de delitos como
el estupro.
b) El criminal conoce a la víctima, pero ella no lo conoce, como cuando
el agresor ha estado "cazando" a la víctima.
c) La víctima conoce al criminal, pero éste no la conocía antes.
d) La víctima y el criminal son desconocidos, común en hechos de
tránsito.
e) En algunos crímenes, el conocimiento previo es clave, mientras que,
en otros, no habría victimización si no hubiera habido un conocimiento
previo entre ambos.
En cuanto a la actitud, se proponen tres variables: atracción, rechazo o
indiferencia, lo que puede dar lugar a diferentes situaciones:
a. La víctima y el criminal se sienten atraídos, lo que puede
explicar delitos como el estupro o pactos suicidas.
b. El criminal se siente atraído por la víctima, pero ella lo rechaza,
como en los crímenes pasionales.
c. Ambos se rechazan, lo que puede llevar a riñas, venganzas o
violencia.
d. El criminal se siente atraído por la víctima, pero ella es
indiferente, lo que puede generar situaciones trágicas.
e. Ambos son indiferentes, como en victimización culposa
(accidentes de tráfico) o cuando el criminal roba sin interés
personal, y la víctima también es indiferente.
Percepción del Criminal por su Víctima
La percepción entre criminal y víctima muestra la dinámica de la pareja penal. La
víctima siente "coraje o rabia" y el criminal, temor, generando odio, rabia y miedo.
Sin embargo, algunas víctimas pueden admirar al criminal, como en el Síndrome
de Estocolmo.
Percepción de la Víctima por el Criminal
La percepción del criminal sobre la víctima depende de su elección y del acto. Para
evitar culpabilidad, muchos criminales se desensibilizan, usando alcohol o drogas
para reducir inhibiciones y justificar el crimen.
Similitudes entre Criminal y Víctima
En ciertos delitos violentos, víctimas y agresores tienen más similitudes que
diferencias, como en edad, estrato socioeconómico o proximidad geográfica.