Hijos de Dios o Hijos Del Diablo para Cuestionario
Hijos de Dios o Hijos Del Diablo para Cuestionario
Juan 8.37-47.
Solo a través de la salvación en Jesucristo se puede encontrar la seguridad
verdadera y eterna (Romanos 8:38-39). Satanás ofrece la religión falsa que es
mortal (2 Corintios 4:3-4; 11:13-15), engaña a las personas para que piensen que
están bien con Dios cuando en realidad no lo están.
Dios es solo el Padre de aquellos que tienen al Hijo como su vida, lo conocen
y lo aman (Juan 8:42). El diablo tiene como distintivos: el asesinato y la corrupción,
y la corrupción tiene dos aspectos, la codicia y la mentira.
a. La auténtica filiación (v.37-40). La verdad sana y nutre los corazones de
aquellos que la reciben. Los verdaderos hijos de Dios son los que creen y obedecen
como Abraham lo hizo.
1. Los descendientes de un hombre piadoso (v.37-38). Además de ser libres
del error, los verdaderos discípulos son liberados del pecado. Dios quiere que vivamos
para Él por el poder del Espíritu Santo.
i. Descendencia reconocida (37a). Son descendientes genéticos, pero no
espirituales.
ii. Corazón criminal (37b). ¿Por qué tratan los judíos de matar a Jesús? porque
su palabra no tiene lugar en ellos, no progresa, ni avanza.
iii. Palabra rechazada (37c). La palabra de Dios debe tener cabida en el
creyente, en una posición interna de honor, confianza, autoridad, amor y de
forma permanente.
2. Conciencia sacudida (v.38). El Padre de Jesús es Dios. Él siempre revela
con el fin de redimir. El juicio que trae la luz está destinado a guiarnos a la salvación,
no a la condenación.
b. Su afirmación de ser hijos espirituales de Abraham (v.39-40). La salvación
no se basa en el esfuerzo legalista, la afiliación religiosa o el origen étnico
(Filipenses 3:1-7). Uno se convierte en un hijo de Dios solo a través de la fe en el
Señor Jesucristo.
1. Los verdaderos hijos de Dios (v.39). Abraham obedeció la voz de Dios y siguió
sus requisitos, mandamientos, decretos y leyes (Genesis 26:5).
Para comprobar si somos hijos de Dios realicemos una prueba:
i. Razonable: un árbol es conocido por sus frutos.
ii. Imparcial: todos pueden juzgarse a sí mismos y formar una evaluación de su
verdadero carácter.
iii. Irrefutable: la fe es el principio que santifica el alma.
2. Los descendientes pero no hijos (v.40). Buscaban apagar un fuego divino,
ahogar una voz celestial, rechazar y pisotear a un Mensajero sagrado.
c. Su afirmación de ser hijos de Dios (8:41-47). Cristo es el legado y el gran don
de Dios. La santidad moral de Cristo está a toda prueba. Los judíos responden con
un insulto, diciéndole que es samaritano y que tiene demonio.
El diablo:
(i) Es un asesino (Romanos 5:13).
(ii) Ama la falsedad. La persona que destruye la verdad está haciendo la
obra del diablo:
1. Hay un diablo, no es un producto de la imaginación humana.
2. Es un ser caído. Pecó cuando no pudo permanecer en su alto
llamado.
3. Es un ser limitado, no omnisciente, no omnipotente, no omnipresente,
como Dios.
El Señor desafió con dos preguntas retóricas:
1. ¿Quién de vosotros me convence de pecado? Aquí se sustenta la
impecabilidad de Cristo; su absoluta santidad y separación del pecado.
2. ¿Por qué no me creéis? El que es de Dios escucha las palabras de Dios;
no lo oyeron; por lo tanto, no eran de Dios (Lucas 3:8). Los dos caminos se
encuentran ante cada individuo.
1. Los líderes religiosos vuelven a cuestionar el linaje de Jesús (v.41-43).
Afirman que son legítimos hijos de Dios, no son nacidos de fornicación. El amor a
Cristo es una prueba de nuestra relación con Dios. ¿Amamos:
1. Su persona? Para los que creen, él es precioso y preciado.
2. Sus caminos? El que tiene mis mandamientos y los guarda, es el que me ama.
3. Su salvación? amar su glorioso plan de salvación que nos ha revelado, y gloriarnos en
la cruz.
4. Su gloria? su nombre sea conocido, su salvación disfrutada, y su gloria sea exaltada en
toda la tierra.
¿Cuáles son las características de los hijos del diablo? Satanás utilizó su
obstinación, su orgullo y sus prejuicios para impedirles creyesen en Jesús. La
habilidad para escuchar y creer su palabra es un don por el que uno debería
estar agradecido (1 Corintios 2:14).
2. Jesús revela la identidad de su verdadero Padre (v.44-47). ¿Qué hace a un
verdadero discípulo? Los que han confiado en Cristo pueden comprender las
verdades de la Palabra de Dios, creer en ellas y obedecerlas.
i. Jesús proclama (v.44). Ellos son del diablo. Jesús representa el campo
de la verdad y de la vida. Estos dos aspectos de la verdad están unidos en
Jesús, quien es la verdad (14:6) y habla la verdad (8:40).
ii. Jesucristo recrimina (v.45). Ellos rechazaron a Jesús porque les dijo la
verdad que no querían escuchar. No porque dijera mentiras. Lo rechazan porque
aman más las tinieblas que la luz (3:19-20) y la falsedad en vez de la realidad.
iii. Jesucristo desafía (v.46). ¿Quién de vosotros me redarguye de pecado?
La ausencia de pecado incluye la ausencia de falsedad.
¿Por qué no me creéis? Tienen un corazón malo que:
1. No indaga lo que oye. Dejan la verdad sin explorar, dudan de su excelencia o
niegan su existencia.
2. Reacio a la verdad. La deshonestidad prevalece y se niega a admitir verdad.
3. Se aferra a sus deseos. El pecado siempre significa "contrariedad a la
voluntad de Dios", ofensa moral, no defecto intelectual.
Acusaron a Jesús de samaritano y de poseso. La inocencia de Jesús ha sido
también importante, es el justo, que ha padecido sin motivo alguno; aquí se sustenta la
infalibilidad de la muerte expiatoria y vicaria de Jesús .
Los judíos tenían una manera maravillosa de pensar en el Espíritu de Dios. Creían
que tenía dos funciones: la de revelar la verdad de Dios, y la de capacitar a las
personas para reconocer y captar la verdad. Escucha significa oír con la
intención de obedecer. Ellos tendrían que experimentar un cambio radical de
corazón para poder comprender, apreciar y obedecer la verdad que liberta.
El desafío de Jesús sacaba a la luz las dos razones más frecuentes que las personas
pasan por alto cuando se encuentran con El:
(1) nunca aceptan su desafío de ponerlo a prueba,
(2) lo ponen a prueba, pero no están dispuestos a creer lo que descubren.
Resumen final (v.47). Su identidad es clara:
i. El que oye (47a). Acepta, creer y vivir de acuerdo con ella.
ii. El que no oye (47b). La obediencia era el indicador de la audición.
Conclusión. ¿Quién manda realmente aquí y de quién somos hijos? La
verdad o "lo verdadero" es siempre la realidad de Dios y la identidad con su
profeta - testigo Jesús. La verdad es la voluntad revelada de Dios en cuanto a
la salvación de los hombres por Jesucristo. La naturaleza del pecado y la
mentira, personificadas en el diablo quedan al descubierto y se contraponen
con la verdad y la vida que representa Jesús. Las acciones y comportamiento
revelan la verdadera filiación espiritual basadas en la fe y la obediencia.