Universidad Nacional del Chaco Austral
Licenciatura en Educación
Cátedra: Filosofía de la Educación
Profesores:
Dr. Daniel Lesteime
Prof. Alejandro Surriable
Trabajo Práctico Integrador
Estudiantes:
Contreras, Malena Ayelén DNI 38123338
Huguenin, Alejandra Sofía DNI 43146906
Lovato, Francisco DNI 42223731
Inclusión educativa
El presente escrito pretende hacer una revisión del campo de estudio de la filosofía y su incidencia
en la educación, para luego, seguir con un conjunto de razonamientos en torno a inclusión
educativa, como uno de los temas trascendentales que ha puesto en vilo al sistema educativo.
La filosofía es una práctica reflexiva que es inherente a todo ser humano, por el cual, los docentes
deben poder realizar esa práctica a diario. Pero lo anteriormente descripto, sería lo ideal, pero el
docente pocas veces tiene tiempo para sentarse a reflexionar acerca de los fundamentos que
regulan su práctica, debido a las múltiples problemáticas que enfrenta a diario.
Uno de las temáticas que más ha resonado en las escuelas este último tiempo es la inclusión
educativa. Pero ¿Por qué preguntarnos acerca de este término? En la actualidad su tratamiento no
es el más adecuado, por lo que reflexionar sobre ella, nos permitirá conocer un poco más de lo que
implica y así poder mejorar su tratamiento. Así lo sostiene el autor Adolfo Carpio (2004),
entendiendo que “Cuando más conocemos la realidad, más posibilidades tenemos de sobrevivir a
las dificultades que se nos presentan; en cambio, cuantos más ignorantes somos, también somos
más vulnerables a nuestro entorno”1
¿Por qué nace la necesidad de la inclusión educativa? El acceso a la educación, se ha extendido a
lugares a la que antes no llegaba, con el fin de que todos puedan educarse. Pero esto no salvo de
que no haya más desigualad. Los alumnos que pertenecen a hogares vulnerables o aquellos poseen
1
Carpio, A. (2004). Principios de Filosofía: una introducción a su problemática, Cap. I y Cap. III, Bs As. Glauco.
alguna dificultad en cuanto al aprendizaje, se vieron afectados, ya que los docentes poseían una gran
carga de estudiantes, con necesidades distintas, a los que les fue imposible atender por completo.
De ahí la sociedad demanda a la escuela, atender estas cuestiones, con la necesidad de recuperar a
aquellos estudiantes que anteriormente fueron excluidos del sistema, de ahí nace la idea de
inclusión educativa. Pero ¿En qué consiste? Cuando hablamos de inclusión educativa nos referimos
a un proceso que busca garantizar el acceso a una educación de calidad para todos los estudiantes,
sin importar sus habilidades, necesidades o discapacidades. Pero en la actualidad, pocas veces, las
escuelas son inclusivas. Esto no significa que la escuela esté retrocediendo en términos de las
demandas que la sociedad impone, sino que está en proceso de ser una escuela que alberge a todos
los estudiantes, fomentando la igualdad de oportunidades.
Pero ¿qué es la igualdad? En educación la igualdad es un concepto que busca garantizar que todas
las personas, independientemente de su origen social, económico, étnico, género, discapacidad o
cualquier otra característica, tengan las mismas oportunidades de acceder a una educación de
calidad y puedan desarrollar todo su potencial. Según el autor Colella, L (2014) establece a la
igualdad “como punto de partida, como un principio dispuesto a ser verificado en todo acto
educativo”2 Todo lo anteriormente planteado acerca del concepto de igualdad, parece ser, muy fácil
lograrlo en educación, pero en la práctica muchas veces se complica.
La escuela, en un intento por albergar a todos, muchas veces no logra que todos puedan desarrollar
sus potencialidades, debido a múltiples factores. Una de los motivos es que, ella funciona bajo
supuestos que la vuelven normalizadora, la cual prioriza la uniformidad y eficiencia, por sobre la
diversidad y creatividad. Por ejemplo, todos los estudiantes deben aprender de la misma manera y
ritmo, el docente es la única figura de autoridad dentro del aula, la disciplina y el orden son
esenciales, currículos rígidos, etc.
¿Qué es la diversidad? ¿Qué tipos existen? ¿Siempre ha existido? La diversidad se refiere a la
variedad de características, experiencias y perspectivas que los estudiantes, docentes y
comunidades traer al entorno escolar, siempre ha existido y el cual se manifiestan de múltiples
maneras, ya sea diversidad sexual, cultura, económica, cognitiva, etc. Pero esta, no es tomada para
enriquecer los aprendizajes en el aula, para fomentar la empatía y la comprensión entre todos o
para preparar a los estudiantes para una sociedad diversa y globalizada, solo cuando se presenta
adquiere una concepción de problema o dificultad. En vez de que la escuela sea un lugar donde la
diversidad sea considerada como valor constitutivo de lo humano, solo “procura que la normalidad
sea permanente y así neutralizar cualquier efecto disruptivo”3 Colella, L (2015). De este modo solo
acentuaría aún más la crisis existente en torno a la inclusión.
¿Cómo se atiende a la diversidad en las aulas? En la práctica docente, se transmiten saberes que
anteriormente fueron seleccionados por el docente y a los que considera válidos para ser
enseñando, para que el estudiante “se adapte a una comunidad y al sentido de la realidad que es
propio de ella” (Kusch, R)4. Pero esta selección aislada de las demás personas, incluidas en el acto
2
Colella, L (2014) Igualdad y diversidad en la educación. Un abordaje desde el concepto de emancipación
intelectual de Jacques Ranciaré. Ciudad, Buenos Aires. Pais, Argentina.
3
Collela, L (2015) Un análisis ontológico de la educación a partir de los aportes de Badiou y Rancière. Ciudad,
Buenos aires. País, Argentina.
4
Kusch, Rodolfo (1976) Geocultura del hombre americano
educativo y el, cual solo refleja una ínfima parte de la realidad, solo estaría negando la diversidad de
conocimientos que existen, muchas veces derivados de la experiencia cotidiana. También, cuando
en el aula se presenta una diferencia, por ejemplo, dificultades en el aprendizaje, el docente se
encuentra sin herramientas para poder satisfacer sus necesidades educativas, por lo que deriva al
alumno a un tratamiento psicopedagógico, segregándolo del aula. Este mecanismo solo acentuaría
aún más la falta de inclusión.
En la labor cotidiana, tenemos una idea cerca de la inclusión, de esta manera, “suponiendo una
serie de verdades sobre las cuales generalmente no nos preguntamos”5 Carpio, A. (2004). Al no
cuestionarnos nuestras formas de atender a la inclusión, solo recaeríamos en prácticas que no
contribuyen a que la escuela sea un lugar en la que todos, sin importar sus dificultades, puedan
desarrollar todas sus facultades.
¿Qué desafíos enfrentan las escuelas para lograr ser inclusivas? A pesar de los esfuerzos para lograr
una educación inclusiva, aún existen barreras que impiden su plena implementación, algunas son:
Falta de capacitación docente, existen muchos docentes sin capacitación para adaptar sus métodos
de enseñanza en las necesidades actuales. Esto sucede por varios factores: falta de motivación por
perfeccionarse, falta de recursos propios, ya que muchas veces tienen que pagarlos ellos mismos,
escasa inversión de los establecimientos en la capacitación docente, y falta de tiempo para dedicar a
la actualización pedagógica. Generalmente, la sobrecarga de trabajo y el excesivo tiempo que se
utiliza fuera de las horas de clases para planificarlas, afectan directamente en la motivación por
perfeccionarse y muchas veces la cantidad de años que lleve un docente ejerciendo, también influye
en la toma de decisiones que involucran intervenir en la capacitación.
Adaptar la enseñanza y el currículum para atender las necesidades de todos los estudiantes es otro
desafío de la inclusión escolar. Los educadores deben encontrar formas de enseñar de manera
efectiva a estudiantes con diferentes estilos de aprendizaje y ritmos de desarrollo. Esto requiere
estrategias pedagógicas flexibles y una atención personalizada para maximizar el potencial de cada
estudiante.
Falta de recursos, es la mayor barrera de muchos establecimientos, sobre todo en la educación
pública, esta escasez se observa en el material pedagógico que necesitan los docentes, en los
insumos para llevar a cabo una clase más didáctica o incluso acceso a plataformas digitales, ya que
no cuentan con un buen servicio de internet. Por esto, la brecha educativa es inmensa si
comparamos un establecimiento privado con uno público. Lamentablemente el nivel
socioeconómico influye en la calidad de la educación, situación que debe cambiar lo más pronto
posible para equiparar las oportunidades y crear un ambiente inclusivo.
Falta de apoyo familiar: los padres deben ser considerados como socios en el proceso educativo,
participando activamente en la toma de decisiones y trabajando en conjunto con los educadores
para apoyar las necesidades individuales de los estudiantes. La voz de los estudiantes también debe
ser valorada y tenida en cuenta en el diseño y la implementación de las políticas educativas.
Actitudes y prejuicios arraigados en la sociedad, estereotipos y discriminación pueden obstaculizar el
pleno desarrollo de una cultura inclusiva en las escuelas. Es necesario promover la sensibilización y
5
Carpio, A. (2004). Principios de Filosofía: una introducción a su problemática, Cap. I y Cap. III, Bs As. Glauco.
educación sobre la importancia de la inclusión para superar estos obstáculos y construir
comunidades educativas inclusivas y respetuosas.
Estos aspectos obstaculizan la necesidad de implementar la inclusión en plenitud en las
comunidades educativas. Para generar el cambio deseado, estas barreras deben, en primer lugar,
identificarse claramente para poder trabajar en el proceso de derribarlas en su totalidad, camino
complejo, ya que involucra muchos agentes, tanto internos como externos al establecimiento. Todo
proceso de cambio, debe comenzar con la intención y motivación de querer cambiar y ver las
posibilidades reales de llevar a cabo la inclusión efectiva.
Para concluir, es de extrema necesidad reflexionar sobre la inclusión educativa en el contexto
actual, donde la filosofía juega un papel fundamental en la práctica docente. A pesar de los
esfuerzos por garantizar una educación inclusiva, persisten barreras significativas, como la falta de
capacitación docente, recursos limitados y actitudes discriminatorias. La inclusión no solo debe ser
un objetivo, sino un proceso continuo que requiere la colaboración activa de todos los actores
involucrados, incluyendo docentes, familias y la comunidad en general. Para lograr una educación de
calidad que respete y valore la diversidad, es imperativo identificar y derribar las barreras existentes,
fomentando así un entorno donde cada estudiante pueda desarrollar su potencial sin importar sus
circunstancias. La transformación del sistema educativo hacia una verdadera inclusión es un desafío
complejo que demanda compromiso, reflexión y acción coordinada.
Bibliografía
Carpio, A. (2004). Principios de Filosofía: una introducción a su problemática, Cap. I y Cap. III,
Bs As. Glauco.
Colella, L (2014) Igualdad y diversidad en la educación. Un abordaje desde el concepto de
emancipación intelectual de Jacques Ranciaré. Ciudad, Buenos Aires. Pais, Argentina.
Collela, L (2015) Un análisis ontológico de la educación a partir de los aportes de Badiou y
Rancière. Ciudad, Buenos aires. País, Argentina.
Kusch, Rodolfo (1976) Geo cultura del hombre americano.