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La Humillación Actitud Que Mueve El Trono de Dios

El documento enfatiza la importancia de la humillación como actitud fundamental para acercarse a Dios y recibir Su gracia y misericordia. A través de la oración, la búsqueda del rostro de Dios y el arrepentimiento, se promete que Dios escuchará, perdonará y sanará a Su pueblo. Se destaca que la verdadera humillación es voluntaria y necesaria para experimentar un avivamiento y la restauración en la vida de los creyentes.

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La Humillación Actitud Que Mueve El Trono de Dios

El documento enfatiza la importancia de la humillación como actitud fundamental para acercarse a Dios y recibir Su gracia y misericordia. A través de la oración, la búsqueda del rostro de Dios y el arrepentimiento, se promete que Dios escuchará, perdonará y sanará a Su pueblo. Se destaca que la verdadera humillación es voluntaria y necesaria para experimentar un avivamiento y la restauración en la vida de los creyentes.

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LA HUMILLACIÓN ACTITUD QUE MUEVE EL TRONO DE DIOS

TEXTO: 2 Crónicas 7:1-16

INTRODUCCIÓN: Todo esfuerzo de oración y ayuno tiene un propósito y es mover


al cielo. Las respuestas para todo lo que un país, una iglesia y un creyente necesitan
están en el cielo, en el trono de Dios.

Hay una necesidad muy grande dentro del cristianismo y es el entender la


importancia de crecer, de madurar en forma continua, para salir de una actitud de
niño y poder tomar las bendiciones que nos pertenece.

2 Crónicas 7:14 “si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y


oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo
oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.”

No hay manera de alcanzar la gracia y la misericordia de Dios, sino a través de


lo que para Dios es la actitud más hermosa y sublime en el ser humano, la
humillación...
Es reconocer que hicimos mal, confrontándonos a nosotros mismos con
valentía, y enfrentándonos al Cristo de la gloria, quien no vino a condenar sino a
salvar, haciendo de esa forma, la paz con Dios.
Isaías 57:15 "Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo
nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y
humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el
corazón de los quebrantados."
>> Nosotros siempre estamos pidiéndole a Dios que nos bendiga en todas las
situaciones de la vida, pero tristemente no estamos dispuestos a ser humildes y a
humillarnos ante Él.
>> Muchas veces demostramos nuestra soberbia cuando nos llama Dios a un servicio
por medio de algún hermano o líder de la iglesia y nosotros no mostramos el más
mínimo gesto de humildad, no estamos dispuestos a sacrificarnos por los demás, no
nos gusta que nos ordenen que hagamos algo.
>> Es demasiada la soberbia en que vivimos, pero aun así siempre estamos pidiendo
a Dios privilegios, cosas que quisiéramos, pero todo sin humillarnos.
Todo empieza por la santidad, no pertenecemos a nosotros, fuimos sacados del
mundo, libertados de las tinieblas y sacados a la luz, ahora pertenecemos a Jesús.
Nunca seremos especiales para Dios a menos que seamos santos.

DIOS NOS NECESITA:

 ¡Somos un pueblo santo!

 Somos la luz del mundo y la sal de la tierra.


 Tenemos el privilegio de llevar la Palabra de Dios y en ese nombre ejercer su
autoridad en el mundo.
 Cuando honremos el nombre de Dios, su poder vendrá sobre nosotros para
sanar y restaurar.
 Dios está buscando un pueblo santo que este comprometido con su obra,
santidad y su misión de honrarle, porque somos sus embajadores en la tierra,
somos llamados a honrarle.

 El cielo no tiene comunión con el orgullo, la avaricia y la independencia, eso


debe salir de nosotros para que agrademos a Dios. Él está buscando corazones
contritos y humillados. Dios no recibe a cualquier corazón, esa fue la diferencia
entre David y Saúl, David pecó más, pero se arrepintió y deseaba ser corregido
y ayudado por Dios.

Ezequiel 36:23 “Y santificaré mi grande nombre, profanado entre las naciones, el


cual profanasteis vosotros en medio de ellas; y sabrán las naciones que yo soy
Jehová, dice Jehová el Señor, cuando sea santificado en vosotros delante de sus
ojos.”

Pero ¿qué quiere Dios cuando dice: “Si se humillare mi pueblo”?


I. Es algo que Dios demanda de nosotros
Según el diccionario de la lengua española humillarse significa rebajarse
voluntariamente ante determinada situación o persona.
Pero veamos qué quiere decir Dios cuando dice “Si se humillare mi pueblo”
1. Pero ante Dios sucede otra cosa: Él nos puede humillar cuando él quiera, ó somos
nosotros quienes voluntariamente podemos humillarnos ante Él.
2. Ante todo Dios demanda una humillación voluntaria, de su pueblo.
3. Pero ¿Por qué? En el presente pasaje se debe a la petición de Salomón. Si vemos
el contexto del versículo 7:12 “Y apareció Jehová a Salomón de noche, y le dijo:
Yo he oído tu oración, y he elegido para mí este lugar por casa de sacrificio.
4. Pero Dios le hace una advertencia:
V.13 “Si yo cerrare los cielos, para que no haya lluvia, y si mandare a la
langosta que consuma la tierra, o si enviare pestilencia a mi pueblo”
Dios está diciéndole a Salomón que Él puede hacer como a Él le plazca, por tal razón
demanda que su pueblo debe de humillarse ante Él.
II. Dios quiere saber que tan depuestos estamos a humillarnos ante Él.
Para esto nos dice:
1. “Si se humillare mi pueblo”
Él quiere que su pueblo esté dispuesto a humillarse, humilde y
voluntariamente, ante Él.
2. “sobre el cual mi nombre es invocado”
>> Dios quiere decirle a su pueblo “Yo me haré conocer a mí mismo cuando mi
nombre sea invocado”. Pero también nos está dando un anticipo de Cristo, porque
cuando dice: “Sobre Él Cual mi nombre sea invocado” se refiera al tiempo futuro a la
presente dispensación de la Gracia, después que Jesús ya hizo su obra en la cruz.
Porque en el tiempo presente cuando invocamos a Dios lo hacemos en el nombre de
Cristo Jesús, cumpliéndose la promesa que nuestra invocación sea en el nombre de
Cristo.
3. “y oraren”
La oración, la intercesión y el quebranto son las herramientas divinas para ver
cambios sustanciales en nuestra nación. ¿Cuándo fue la última vez que invertimos
unas cuantas horas en la noche o en la mañana para interceder por nuestra nación?.
Dios le dijo a Salomón: ¡Si mi pueblo se humilla y ora!. Dos primeros elementos vitales
en el sendero de la recuperación de nuestra nación y esos dos elementos comienzan
en mi y en ti.
4. “y buscaren mi rostro”
Buscar su rostro significa que debemos buscarlo de corazón sometiéndonos a Él.
>> Una nación se sana cuando buscamos el rostro.
¿Qué es buscar su rostro? No es lo mismo que orar?.
No, No es lo mismo. Usted y yo podemos orar sin buscar el rostro de Dios. Buscar
el rostro de Dios es un grado más de profundidad en la comunión con el Padre.
Uno puede orar sin buscar su rostro. Así como usted puede hablar con alguien sin
mirar su rostro. Para poder mirar el rostro de alguien uno tiene que sentirse libre de
culpa.
Mirar el rostro es estar dispuesto a ser confrontado. Y es ahí donde muchas veces
huimos fácilmente escondiéndonos aún en la misma oración para no ser
confrontados por el Dios Eterno.
No puede prevalecer el rostro humano ante el rostro divino. Uno tiene que
rendirse.
 Como Isaías lo hizo:
Isaías 6: 1,5. “Vi yo al Señor sentado sobre su trono alto y sublime y sus
faldas llenaban el templo…. Entonces dije: ¡Ay de mi! Que soy muerto; porque
siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene
labios inmundo, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos”
 Pedro ocultó su rostro ante Jesús. Sintió la confrontación del Maestro:
Luc 5:8 “Viendo esto Simón Pedro, cayó de rodillas ante Jesús diciendo:
Apártate de mí, Señor, porque soy hombre pecador”.
 Gedeón exclamó un grito de muerte:
Jueces 6:22 Y viendo Gedeón que era el ángel del Señor, dijo: Ah, Señor
Jehová, que he visto el ángel de Jehová cara a cara.
 Abraham escondió su rostro muriendo así a sus planes y su identidad
cambió.
Gen 17:3-5 Y siendo Abraham de edad de noventa y nueve años, se le
apareció El Señor y le dijo: Yo soy el Dios Todopoderoso; anda delante de mi,
y sé perfecto. Y pondré mi pacto entre mi y ti, y te multiplicaré en gran
manera. Entonces Abraham cayó sobre su rostro y Dios habló con él
diciendo: He aquí mi pacto contigo, serás padre de muchedumbres y no se
llamará más tu nombre Abraham, sino que será tu nombre Abraham porque te
he puesto por padre de muchedumbre de gentes”.
 Jacob fue marcado por el rostro de Dios.
Gen 32:30,31 Y llamó Jacob el nombre de aquel Lugar Peniel: Porque vi a
Dios cara a cara y fue librada mi alma. Y cuando había pasado Peniel, le
salió el sol; y cojeaba de su cadera”.
 Moisés ocultó su rostro para morir a su vida sin propósito.
Éxodo 3:5,6.Y dijo: No te acerques acá: quita tus zapatos de tus pies, porque
el lugar en tú estás, tierra santa es. Y dijo: Yo soy el Dios de tu Padre, Dios de
Abraham, Dios Isaac, Dios de Jacob. Entonces Moisés cubrió su rostro,
porque tuvo miedo de mirar a Dios.
 Elías no pudo mantener su rostro mientras huía.
I Rey 19:13.Y cuando lo oí Elías, cubrió su rostro con su mano, y salió, y se
pudo a la puerta de la cueva. Y he aquí vino a él una voz diciendo: Qué haces
aquí Elías?
Ahora podemos ver la razón por la cual en 2 Crónicas 7, Dios habla primero de
humillarse, luego habla de orar y nos sube a un tercer escalón al hablarnos de
buscar su rostro. Por eso el rey David dijo:
Escudríñame Oh Dios y ve si hay en mí camino de perversidad.
Nuestra nación comienza a sanarse cuando nosotros mismos, quienes conocemos
a Dios personalmente no evadimos la confrontación divina luego de humillarnos y
orar. En nuestras manos cae tremenda responsabilidad.
.
5. “Y se convirtieren de sus malos caminos”
Y que cambiemos nuestra vida, que dejemos de pecar.

III. ENTONCES NOS HACE UNA PRECIOSA PROMESA:


1. “Entonces yo oiré desde los cielos”
Nos promete que escuchará nuestras peticiones.
2. “Y perdonaré sus pecados”
Nos perdonará. Antes en el Antiguo Testamento esto era lo único que tenía que hacer
una persona para ser perdonados (por supuesto tenía que ofrecer un sacrificio la
persona).
Hoy es diferente, lo único que tenemos que hacer es recibir a su Hijo como nuestro
Señor y Salvador personal, a nuestro Señor Jesucristo, es se debe a que vivimos en
una dispensación diferente, que es, La Gracia.
3. “Y sanaré su tierra”
Nos restaurará todo lo que tengamos dañado. Esto puede ser salud, economía,
matrimonios rotos, hijos descarriados, etc.
En el Antiguo Testamento, Dios promete una restauración completa. En aquel tiempo
la tierra significaba su modo de vida.
IV. ENTONCES ÉL SE COMPROMETE A ALGO REALMENTE GRANDE:
V.7:15-16 “Ahora estarán abiertos mis ojos, y atentos mis oídos, a la oración
en este lugar: 16 Porque ahora he elegido y santificado esta casa, para que
esté en ella mi nombre para siempre; y mis ojos y mi corazón estarán ahí para
siempre.”
 Se compromete a concederle a Salomón su petición, así como nos
concederá a nosotros lo que le pidamos, toda vez estemos dispuestos a
humillarnos ante Él. Porque la advertencia que él hace a Salomón aplica a
nosotros también. Muchas veces Dios no nos concede lo que le pedimos
porque no estamos dispuestos a humillarnos ante Él.

 A Salomón le promete que Él estará pendiente de su oración para


concederle lo que él le pida, le está garantizando que el templo estará donde
Salomón le está solicitando.

 Ahora nos promete a nosotros lo mismo, pero como no existe el templo


físico, nos garantiza que Él nos está santificando porque ahora Él está
dentro de nosotros, que somos su templo y morada. Y que sus ojos y su
corazón estarán dentro de nosotros. Esto es real pues tenemos su Santo
Espíritu.

 Desde el momento en que recibimos a Cristo como nuestro Salvador


somos sellados con su Santo Espíritu, y Dios nos ha santificado y sus ojos
y su corazón estarán dentro de nosotros por siempre.

Este es un pueblo que se humilla, que ora y busca el rostro de Dios, se convierte de
sus malos caminos y se aparta de su conducta perversa.

La consecuencia de todo esto, es que Dios derramara sobre nosotros un gran


avivamiento.
VERSICULOS BIBLICOS

Daniel 10:12 “Entonces me dijo: Daniel, no temas; porque desde el primer día que
dispusiste tu corazón a entender y a humillarte en la presencia de tu Dios, fueron
oídas tus palabras; y a causa de tus palabras Yo he venido.”

Santiago 4:9-10 Afligíos, y lamentad, y llorad. Vuestra risa se convierta en lloro y


vuestro gozo en tristeza.

1 Pedro 5:6 Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que El os exalte
cuando fuere tiempo.

Lucas 18:13-14 Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al
cielo sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé propicio a mí, pecador. Os
digo que éste descendió a su casa justificado antes que el otro; porque cualquiera
que se enaltece, será humillado; y el que se humilla será enaltecido.

Miqueas 6:8 Oh, hombre, Él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de
tí: solamente hacer justicia, y amar misericordia y humillarte ante tu Dios.

2 Crónicas 32:26 Pero Ezequías, después de haberse enaltecido su corazón, se


humilló, él y los moradores de Jerusalén; y no vino sobre ellos la ira de Dios en los
días de Ezequías.

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