0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos) 2K vistas44 páginasLos Amigos de Ernestina - Enriqueta Flores
Los Amigos de Ernestina - Enriqueta Flores
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g Enriqueta Flores ©
Los Amigos
de ErnestinaMagu pre ee pls, et dude bers pte
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ster. gana cl ee rene eon prin
enh pede prt nae rcrado al Progr
"Solace Eolas eo’ plud por Capes
© Enis Fae Aen, 1995
Inca MRO: Snings de Ce
Dereon econ cron far es pales por
(© EDITORIAL UNIVERSITARIA S.A
Mata Lio Sender 047 FAX: 562 200685
cn Fos Andis lias
Inpeseres: Coes, 199
INAPAGO EN CHIE raTED RLCHHLE
ERNESTINA DE LEJOS
S care una de as tanta colies qu recon
\D esta glgantesca ciudad, esta sttuada ta
Sea donde vivo con mis paps: nos acompaa
dia y noche un panorama muy bello: lo lejos se
ve el octane Pacifico, azul o gris, con barcos que
an 0 vienen de San Francisco: cuando los veo.
pienso que alguno estuvo en Valparaiso © va
hacia Chile y me siento melancblica, algo triste,
porque no es facil vir en otro pais y acastum
barse a su forma de vida.
En la parte alla de la casa tengo una habia
cién grande para mi sola. Una de las ventanas
‘mira hacia ellejano mary la otra hacta el sur. En
tune de los muros he ido corcheteando las tarjetas.
{que me envian desde mt patra lejana los compa:
eros de la escuela, la senorita Emilia, o las que
fueron mis hermanas; asi, en cualquier momento
vuelve a ver los hugares quie un dia conoci o por
Jos que pasé sin darles importancia. En el lado
opuesto he ido colocando las postales que me
‘manda Emesto deede Alemania: tengo una gran
Coleccion, colorida y variada. Sobre la mesa don
de hago mis tareas o trabajos, mi papé me hizo
tuna tarima para colocar las fotograflas que he
:recibido; hay una en que esia (oda la familia de
Tito, y en otta, mi profesora con todos los alum:
nos que quedan de mi curso... Pero sé que, aun=
‘que no tuviera ninguna folo. los eslaria viendo
slempre, porque los llevo en mi corazon, También
‘guiarco en un cajon, muy ordenadas. las carias,
que recibo. Mi tia de Maipi, que me culdd con
tanto carifo, me eserlbe con una letra graride y
me euenta de [as “gracias” del Acordeon, que se
hha casado con una pernta negra y ya tiene cineo
‘cachornitos.
Para la altima Navidad, mis papas me regala
ron un computador con uns pantalla, disqu
yun montén de teclas que, bien pulsadas, hacen
maravillas... e borran (odo lo que une fia escrity.
Me costo bastante aprender si mane). pera con
la ayuda de un amigo de la casa —el “tio”
Freddy— he logrado vencer las mayores dificulta
deg, aungue de repente hago leceras increibles,
‘como cuando hice desaparccer para siempre cl
primer capitulo de “La maravillosa historia de
Ernesto y Emnestina’: mas de tcinta paginas se
esfumaton y ore tanto, que casi llamar aun
doctor. Estuve una semana si
‘mi computador. pero mi psinst Jon me aconseyo
‘que repasara las instrucciones, del manual y que
‘como elercitacion eseribiera lemasbreves, pa
{guardéndolos en la “memoria” de la maquina.
Nadie cs infalible, ine dijo. sobre todo cuando s¢
esta aprendiendo algo nuevo. Lo importante es
atreverme a usar,tener humfldad para reconocer nuestros exrores
‘voluntad para corregtrlos y paciencie para pers
‘verar hasta lograr lo que Geseamos,
Le hallé razdn a papa, pero me desvelé varias
noehes pensando sobre qué podria escribir, ya
que Ja novela Ia dejé para cuando dominara et
computador hasta con los ojos cerrados, Imagine
‘euentos fantastlens para ninitos, con hadas y
brujas feas, de animales fabulosos que hab!
de seres cle o1t08 mundos, de arboles que creren
hhasta aleanzatr lo hina, de principe
‘con humildes y bellas doncellas. Pero me dije ys»
la seferita Emilia nos habla contado muchas
veces historias parccidas © —cuando
mes Jeer— nes habia entregade Moros cont 1s.»
semejantes, Yo debia eseribir algo diferente, qe
adie conociera, y que por lo menos para mut
tuviera un sentido especial y fuera importante Al
recordar los eventos que conoei en la escuela,
ime vinieron a la’ mente escenas de esa eal
‘que las penas no duran mas que un rato yen |)
Ja vida de colegial est mas lena de alc
{juegos que’ de otras cosas. Empece a recouciar
rostros y volvi a ver a mls comparicros y amigas
de entonces come eran a los, stele anos. por
ejemplo, y como fueran ereciendo conmiao. Re
ordé que algunos se fueron y otros llegaron
‘cuando ibames en Cuarto © Quinto, 0 ctiando
estabams por terminar la Basica. Deeidi quc
tescribiria sobre ellos, sobre los que con el correr
de Ios anos se convertirian en verdaderos amigos.
Al principio no supe con cual de mis compane
ros empezaria y tuve temor de dejarme llevar por
Ja imaginaeion, o que el tiempo transcurrido alte
ara un poco la verdad de lo que pretendia contr.
Como a indecision persistiera Y estaba descos
de comenzar a escribir, acudi a ml mama Maria
lla me dyjo que no me preocupara st la fantasia
modificaba un poco mis recuerdos, pues no tha
hacer un trabajo de historia: y que no me compl
cara con quien empezaba 0 coneluia, pues el
‘orden no cambiaria para nada el afecto que yo.
Sentia por cada uno. Disipadas las dudas, 1c
use a escribir con entusiasino...EL PELIRROJO
ratre el llanto de ios peques, ba yo sie
tandome del delantal dela companera que
Caminaba delante. se es uno de los recuerdos
(que guardo de mi primer dia en la escuela, El otro
recuerdo es mas terrible: a media mafiana 0 me
dia (arde, no lo sé, trajeron a un nino con I
‘cahera ensangrentada. Yo me pusc@ chillar, muy
asustada. La “tia” que nos euidaba parecia so:
prendida de mi angustia y, cuando ya no me
quedaba aliento, dio con la causa, con calma, mic
fac explicando que el ehico sélo tensa el rabello de
‘un eolor encendido, pero que estaba tan sano
‘como el resto de los alumnos. Como aan no ‘0
‘creyera, ella Jo llamé para que yo conociera a un
nto colorin.
—IRojas, acércate pat
‘cerca tu cabeval *
Con desgana, pero obedieniemente. vino tas
ta mi Como era muchisime mas allo que yo. 52
tuvo que agachar. Entonees entendi que La “Ua”
estaba en lo cierto y hasta me atrevi a sonreirle al
avergonzado nino, Porque los que eran mas avis:
pados s¢ reian a gritos de mi ade él. O de ambos.
El hecho es que ese incidente convirtio a Rojas en
0
ea de
{que Emestina
I asidus companers y andaba slempre snips
endo que algisien me molestars,
Como nunca ful muy diseiplinada y tranquil,
‘@ menudo me metia en lios. Me gustaba tirarle tos.
Chapes a una chica racia que iba en Segundo y
que, cuando nadic Ja observaba, me savalza 1a
lengua, Ella era mas grande y tenia en otro curso
lun hermano que se hacia eco de sus chisines y
cada vez que podia. a la disimulada, me daba un
empujén y me deci
iEsto es por lo que le hiciste a mi hermanal
Y a ese cobarde iue precisamente « quien
Rojas le propind una golpiza en medio del patio.
Vino don Lorenzo el mspector— y a los dos se
Jog Hlevd a Ja temida Oficina, Ahora piense que
como ambos eran muy chicas no eabia “stispen-
derlos”. sino solo aconsejatlos. Pero esa accion cle
‘mi amigo Rojas me cnvalentond y me volvi qs
quillosa y algo creida, pues ninguna otra chica
ontaba con un protector mas leal y decididy,
Estabaunos en Tercero cuando Kojas empexo a
Practiear beibifutho! y, al llegar el campeonato
interescolar. metlo cantos goles que lo nombraron
‘capitan del equipo, Haciendo un juego de pala-
bras con su apelliio y el color de su peto. desile
fentonces paso a ser conocid en todo Maipis com
el Capitan Rojo. Con este ascenso de mi baci
companero. yo me sentt muy orgullosu; al tin y a
‘cabo. él me distinguia con su amistad incondicio-
ral y todo el curso sabia que el Capitan Rojo solo,tenia ojos para mi,
En ese entonces —que hoy me parece tan
IeJano— no tendria yo més de nueve afios; estaba
repleta de energias y andaba siempre a la defen-
‘iva, sobre tode cuando el Capitan se encontraba
ausente; porque cuando él estaba cerea, no per-
dia yo oportunidad ce molestar a los nitios
chicas, Con una rama de ortigas. disimulada-
‘mente, Jes hacia cosquillas en las plernas; o les
‘quitaba la pelota y se las arrojaba tras el muro: 0
ben les pegaba chicles en el pelo... Si me iban a
acusar. sélo tenia que gritar y en segulda apare-
‘cia Rojas, con cara de pocos amiges.
Relizmente para ambos, la sehorlta Emilia —que
éria nuestra profesora Jefe durante toda la Bast
ca— se dio cuenta de esta situactén y me lamé al
‘orden, No me reto nt me castigo. Sélo me hizo ver
‘que yo estaba actuarido muy mal haciendo que
tin nifo tan sano y agradable empezara a ser
temido por ml causa. En vano traté de explicar
que a mi también los chiquillos me hacian maida:
des, como tirarme las trenzas 0 pisarme los zapa-
tos, cosas que me leritaban mucho. Pero ella no
‘me hizo caso € imsistié que me estaba aprove:
‘chando de la sincera amistad de un chico tan
buicna como Rojas. No nego que me costé muchi-
‘simo dejar de molestar a los dems, pero, poco a
poco, mie ful comportando mejor, aunque el Capl-
tan sigulo stendo mi sombra protectora. Con el
tiempo, 4 se convirti6 en un astro del fatbol y.
8
‘aunque unas ninas formaron el “Fans Club de
Rojas”. el Capitan continus slendo el mismo de
stempre. Pero, repentinamente, dejé de hacer pa-
‘ses espectaculares y asta empez6 a meter auito-
goles. para espanto de sus eamaradas de equipo.
‘Juanito Castrp y Rosita, que pertenecian al Comt-
{é de Higiene y Salud, se preocuparon mucho y
‘opinaron que Rojas debia darse un atracon de
vitaminas para acabar con el “estres", Pero yo,
‘casualmente, descubri de qué mal sufria el Capi:
tan Rojo.
Cerea de la Escuela, en la esquina donde el
“Zancadilla” tenia el quiosco de diarios y el lus:
Un, se instalo una libreria, Eso no habia tendo
‘ninguna tmportancia si no hublera traide fatales
‘consecuencias para mi amigo el Capitan. El pr
‘mer sintoma de que algo empezaba a andar mal
fue cuando un nifo de otro curso me empujo y
mie lastim6 con una vanilla, pese que a mt lado tba
Rojas y, aunque me quefé muy fuerte, él se quedé
‘inmévil. Parecia sonambulo y no reaectond, En.
tonces le hice un respingo, del que jamas se
‘enters. y yo parti corriendo detras del chico,
‘Cuando iba a darle aleance, como un relampago
se me ilumind la memoria y frené mis plernas y
‘mis ansias de venganza. Los consejos de la seo
rita Emilia hicieron su efecto y, también, el hecho
{que Viera venir en sentido contrarto a dos carabi-
neros, de ésos que vigilan la salida de los colegia:
Jes para que 10 los airopellen.‘Cuando retrocedia herotcamente, divisé al Ca
pitin en una extrana actitud, ‘propia de un
niio bien ensefado y respetucso: se habia enca-
ramado en un Arbol y miraba por una ventana
‘abjerta de lo libreria. gQué podna estar espiando
con tanto disimulo? Me quedé silenelosa, apoya-
da en el acacto, esperando que Rojas bajara a
erra. Cuando me estaba cansando de aftrmar el
tronco y empezaba a oxcurecer, mi amigo 9¢
‘desliz6 como una serplente. Se sorprendi6 al ver~
—jOyel “le pregumié— Puede saberse qué
‘estabas haciendo alla arriba?
Enlonces el Capitan me hizo callar y me dijo
‘que, como era tarde, me acompanaria hasta el
puente, cerca de mi casa. Por el camino me cont6
que de repente ge habia enamprado de la joven
que atendia la Ubreria y que ella estaba absoluta-
mente perdida por él
Grei que me.estaba tomando el pelo, pero
hablaba con tal convencimiento que el corazon se
‘me encogio solo de pensar en el error cn que
habia caido, Para ninguna de nosotras, jas nifias:
del curso, era un secreto que la Joven pelirroja
‘estaba de novia con un secretario de la Munseipa-
lidad, Pero como decirselo al Capitan? Para de-
‘mostrarme cuan firme era su alecto por Andrea
(al pronunclar su nombre puso los ojos en blanco
y se puso muy colorado). me conts que toda la
‘asignacién familiar se le habia ido comprando
“
lapiées, cuadernos, pegamento y otros illes y
‘que, ya sin plata, se consolaba con verla de lejos.
‘En vano le dije que no era ninguna gracla com:
rar algo para verla, pues st era clerto que la
colorina Ie correspondia, 2por qué no salian a
asear y hacian publico el dilic?
E Capitan movié entonces la cabeza con tal
lristeza que sent! pena por él. {Acaso no sabia
que era un amor imposible? Los padres de Andrea
habian decidide casarla con un viejo y s6lo cabo
esperar un milagro,
—2¥ ti erees que el tal novio es un aneiane’?
Ula has visto? —le pregunté con harta curios:
‘dad, pues no me eabia en la cabeza tan (mente
ta historia,
Estabamos cerea de mi casa y nos despedi
mos. ¥ sin que él me lo pidlera con palabras, vi
tal suplica en su mirada que Ie juré
derecha en alto ¢ quierda en el corazon— que
asi me (orturaran, nadie me haria revelar su
seereto.
Las cosas fueron de mal en peor para el Capt
tan. Lo sacaron a dar Ia leccién de Naturales
estaba tan fucra de la tlerra, que ereyd que se
encontraba en clases de Soclales y se largo con la
batalla de Cancha Rayada: en la hoje dela prueba
de Mateméticas, en lugar de su. nombre puso
“Andrea”, y solo por descarte el profe se entero
que ésa cra la prucba de Rojas. Por suerte no lo
hhizo publico, pero lo larné aparte y parece que le
15anduvo aprelando las clavijas. Ni con eso cambio
denim, cada dia andaba més ido y melaneélico
¥y Jos companeros empezairon a sospechar que Ie
‘debia estar sucediendo algo muy malo. ¥ Ja pra-
{esora jefe la scfiorita Emilia, no tuvo mis reme
dio que citar a gu apoderada, putes el Capitan no.
solo andaba desmemoriado y ausente, sino que la
nota mas alta que habia sacado era un miserable
cuatro en aa Fisica; en los otros ramos
oe
Seats UTA sitacion y viendo que el Capl-
ete cascade a beac dM to
Ce eae ae
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‘lona ol antes nol pla el pate de Andra, S|
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Mayo a convened Ge que Angles i
Se ecu ease) cue
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(Guana cule doapte de hablar ects to
bie al buziod 2 sll Gaptin 3 desmnoraliabay
16
decidia tirarse al Zanjon de Ja Aguada? Eataba 2
punto de deetrle la verdad, cuando aparecié por
‘m{ casa. El Acordeén, que siempre andaba al
aguatte, lo recibi6 con ladridos y lengictazos muy
Uernos. Venia a pedirle permiso a mi tia para que
yo loacompanara a a plaza. Nénecesité ser bruja
para comprender que él habia reeibido et andni
‘mo, pero tuve que hacerme la lesa. Como seria el
puro, que hasta nos fuimos en micro y cuando
Hegamos, e! Capitan me tom6 por un codo y me
hizo caminar a su lado.
—iOyel le pregunté— 2Puede saberse para
qué me trajiste?
—gQuleres saberlo de verdad, Tina? Pues de
‘Seo comprobar que lo que me escribiste es cierta
Para otra vez usa otra lépiz y no una hoja de tt
cuaderno de copias. porque efes la nnica ene)
curso que tiene uno de caligrafia vertieal y un
“escriplo" verde.
Quedé sin habla. Ni siquiera intente negar lo
‘que habia hecho. Lo nico que me podia salvar de
perder la amistad del Capitan era que anduvieran,
paseando Andrea con el joven y que Rojas se diera
‘cuenta de que yo no mentia. Asi que no tuve mas
remedio que esperar un milagro. En todo caso,
algo quedaba claro: cl Capitin atin tenia salva
‘ion, porque habia empezado a dudar
‘Cuando encendicron las luces y Ie dije al Ca.
pitan que tendria que irme, este me tomo muy
fuerte del brazo y me Hlevo hasta la pileta; erei que
0me queria tirar al agua, pero era otra la catisa,
Hacla nosotros venia caminando la. pareja; la
colorina, toniada de la mano del polo}. se pard
ca seco cuando Rojas la seludé con desplante:
—jHola, Andreat ,Como te va? Te prescnto a
mm ehica... Ella es Emestina...
Animada por un leve empujén, me vi en un
‘segundo dandole la mano a la muchacha y rec
bblendo un cdlido y sonriente saludo del "viejo", 0
‘ea, del joven.
y
Tuve que someterme a una especie de repre
senlacion tealral, pero ne me quedd ofr 60s
para salvar la Gighidad de mi amigo. recuperar st:
‘umislad —auinque supe por €, mucho desputs,
due jams Ja habia perdido y darle una leeeien
2 la resca de la colori,
1 Capitan anduvo languido como wa scma
na. Yole hacia el quite, piles no me hacia graca
que ine fuera & tomar uina mano 0 a sexgir con
50 de que yo ers "sa chica’, Pero no neceske
hacer nada ms, pes lenlamente Rojas le vol
viendo 4 ser ef de antes, ¥, ewando weno me fo
esperabm, dejo sobre mi banco in partie
‘Son pura, Tina! ie sobran los lapses los
Sacapuntas, Las yomas, yi debes ronOW Fs
tte
Yilos dos nos langanios +POLOS OPUESTOS
Pen ce rte at ata
Giso, Desde epee ela
teri de los pees que no queran alas
fdas tae sine “anno conoce
dogs de cle cin s orCnT 4 Ss ay
inte po me reponav delinpcte de a cbele
Pe te de) Callin commit ci ya ala
Henle conterenion, prefunndote = te
babi (hide, Despues ac cub de este 7
fee Cae ane ae
dae Oc ape, gence tee nay ShesGieln
Ba erepece ale airy oor
ccna cae Sane
canta, Tania ene no nd naive pan
ta" que nos euidaa, ten tat en vino de
Convenecia de que oe queda qulela Desde
tse ca. ere que hasta tora, mas puco
Chopapermaneser mucho rato en Ia misma
poset tampon ta boca cerra
Pe eae tan ca ce a a
dr cumcioy eamte comiqier peste We
Bp po Gajgiies te ci ai
Nate le envdiba eta condctn de su nat
Tera, oraue no tenia exeusa para falar acl
7 »
ses. Cuando pasamos a Quinto, su conducta ih
de mal en peor y pasaba “suspendida”; pero tenia,
una mama tan cumplidora, que venia de inm:
diato a hablar com el inspector General para quc
su Chepa pudiera reintegrarse a clases. ahora
con Ia experiencia adquirida en estes catorce
anos de vida, estoy segura de que si maiia
aciuaba con Lanta rapide sblo porque no ers
capaz de resistirla metida todo el dia en la casa
Ya es0 se debia, tambien, que jamas le neg:
permiso para ir a hacer las tareas a 1a casa de
aluin companero, para asistir a algun partido de
basquetbol © participar en diversas actividades
reereativas,
La vida de nuestra amiga transcurnia pia
centeramente: Lenia “salidas” muy ingeniosis y
nadic podia seriamente disgustarse con ella, No
‘es que la Chepa fuera conscientemente mala: a!
Fevés: nunea se percald de que su presencia
hos agotaba y que tanto parloteo nos impedia
prestar atencin a la clase. Amistosa por nat
raleza. (uleaba a todo el mundo y a la senorita
Emilia le costo una barbaridad obligarla a que,
por lo menos. (ratara de usted a lis personas.
mayores. ¥ esto fue complicado, porque Chiepa
nfrarimenie a la tamensa wyeria de toe
mnos—~ hallaba “mayores” slo a quienes
tenian el cabello bianco o eran pelados. Fue asi
como varias veces le pidid al Director cosas
‘como éstas:—jOyet ePuedes prestarme tu lapiz? zCémo se
ama (u mama? gPor qué te compraste un auto
azul y no uno rojo, que es mas bonito?
Pero Ios adullos reaccionaban bien; la veian.
ingenua, franca, sin recovecos. Ademas, el trato
de Chepa los hacia sentirse jovenes. En cambio,
‘1 bueno de don José, el bibliotecarto, recibid de
‘lla silo frases muy medidas y respetuosas al
maximo, Pese a esias caracteristleas. govaba de
Ja simpatia de todos. Nadie esperaba que se
aquietara nt menos que fuera estediosa, Andaba
siempre al “tres y al cuatro” cuando te iba bien.
‘pero mds tirada a “los doses”. Sin embargo. capeo
siempre la fatidica repitencia, tal vez porque todo
<1 cuerpo decente deseaba inconscienternnte
{que terininara la Basica lo mas pronto posible
Por todas sus condiciones. vio Chepa cn la
‘Yanel y en mi a sus amigas ideales. Bl cotorreo
hos unio y Nos Separo muchas veces, porque no
habia profesor que resistlera vernos sentadas
cerva, De los chiquillos, ¢l que més queria a
Chepa, contra lode lo que se pudiera imaginar.
cra Mister Magt.. A ambos se les podia aplicar
som de duda, la ley de los polos opuestos.
De mirada seria detras de sus gruesos anteo:
Jos. cstudios0, disciplinade, nadie podia creer qn
‘el mas “mateo” del curso pudiera interesarse cr
la locuazy vivaracha Chepa, Cuando el grupo que
empezo en Primero se fue naturalmente redu
clendo, los que fuimos quedando nos tnimos mas.
2
y acabamos soportandonos mejor. Fue entonces
‘cuando motamns que Maga se portaba con la
Chepa mas que fraternalmente. Aunque no logrit
ba aquietarla del todo, la convencia para que
fucra a su casa a escuchar casetes en Inglés; le
fensend canciones antiguas de los Beatles, con
vocabulario y todo: asi fue como la Chepa emper6
a obtener en esa asignatura un legitimo cuatro.
‘Miss Martha tuvo el rato privilegto de ser Ia nica
‘persona con quien Chepa deseargaba sixs conoc
mientos hasta el extremo de querer saltt al piza:
tron a cada rato, Por esta razon, Emesto bused,
su compafiia, A mi me pareels muy mteresada 1a
‘actitud de él, pero comprensible, Estaba casi
uastomedo de tener a Magu como montior. por-
‘que fo segiia como mualo de la cabeza para meter
Je el ingles a la fuerza; en eambio, Chepa actuaba
tan espontaneamente que hasta le pasaba tas
tareas que a ella, seguramente, s¢ las hecia Mis
ter Magi. Por otra parte, como Chepa nunca tuvo
Danco fio, pues pasaba circulando segun |
necesidades de supervivencia de cada profesor.
Emesto se las arreglaba para que ella se quedat
cerea evando habia prueba del ramo. Chepa Ja:
mas lo defraudd, pues como podia le traspasaba
us basicos conocimientos del tdioma. Y cuando
yo andaba en apuros, en la época en que me puse
‘sumamente porra, me aproveché muchas veces,
‘através de lo que le copiaba a Emesto, de fo poco
que sabia la Chepa,
»Pero hubo un hecho que hize cambiar ames
{ra compaiicra. En un partido amistoso, Magi se
‘ayo y sus lentes se hicieron anicos. ewando uno
e-los jugadores los pisé sin querer. Nunca habia
nos visto a Gutiérrez sin anteojos y nos parecia
una persona absolutamente desconoeida. Fue
‘entonces cuando la Chepa s¢ revelo como una
nina capaa de actuar con sensaiez y generosidad.
Empezamos a verla preocupada de leerle a Maga
Jo que log profesores esenbian en el plzarren: ie
ayudaba a estudiar, Ieyendole las lecelones, asi
fueran de Naturales, Sociales o Castellano. ramos
que hasta ese momento nunca le simpattearon
Paro ella debid ger un real sacrficio tenet 4uc
Cconcentrarse en Semejantes materiis, Fepellis
‘euando el Mister no caplaba al tro o tomar apsan
{cs.en clases. porque Magit no podia retener todo
en sti €abeza. Fueron cerca de die” dias en que
Chepa no supo de chisme alguno, en cue todos
sus sentidos estuvieron al Servicio de Su amigo.
No le hizo caso a las tallas que Ie llovian, aunque
Jargaba unas miradas llenas de intencion. con
iciendoles a quienes la molestaban: “despues se
lg veri conmigo", Alinque otros companero
coma Cabello y Ernesto, intentaron ayudar
Magi ella les puso mala cara, Delinitivamentc,
‘quetia tener Ia exchusividad en ta noble mision
‘que se habia impuesto,
Nunca supimos hasta donde Magi se hizo
mas miope de lo que realmente era, pero se le
a
nolaba a la Iegua que habia sido una bendicion
aque sus antenjos quedaran inservibles. Creo que
és08 fueron los dias més felices de su vida ce
estudlante, pues la Chepa le dedicaba toda su
atencian. Un dia yo vi como le ponia en la boca
tun gajo de naranja; s6lo falt6 que lo sonara.
Desgractadamente para Maga llego el dia en que
tuvo que ponerse sus lentes nuevos. Hay que
reconocer que nuestro “mateo” se veia muy mejo:
rado, porque e] marco le sentaba bastante y le
daba un aire intelectual que no dejaba de ser
interesante, hecho que se permitieron comentar
las nifias Rodriguez y que a la Chepa le cayo como
bomba. A esas compafieres no las queriamos,
mucho, pues eran muy agrandadas y coquetas
‘asi que Yanet, Rosy y yo solidarizamos con la
Chepa y durante nna semana les hiciunos la ley
del hielo.
Pero ésta volvid a las andadas; retomo sus
viejo hébitos, volvié a ser Ia cotorra oficial de!
curso y el dolor de cabera de los inspectors. Pero
si notamos un cambio que (rato inuttimente de
ocular: entre sus multiples “ocupaciones” siem.
re se dejaba uempo para compartir con Maga.
Rese a quie nosotras éramos sus mejores amigas
¥y que clla Jamis podia dejar de hablar, nunea
Togramos sonsacarle qué le, estaba sucediendo
ccon el querido "mateo" del curso, Tal vez porque
habia nacide entre ambos un afecto muy espe-
ial. instintivamente, ella quiso conservarlo en.
2»toda su pureza. sin que nadie se interiorizara. Ese
fue el nico secreto que la Chepa no quiso com:
partir con nadie,
ALGUIEN MUY ESPECIAL
LUANETO CASTRO fue el primer compariero de
anco que tuye, Ambos tentamos en co-
‘man solamente nuestra baja estatura. Nada mis.
Por es0 la “tia” nos ubied, desde el comienzo. en
los dos primeros puestos de la fila de! medio, 1
Capitdn Rojo, que entonces sélo era Rojas, quedo
atras, porque siempre fue él mas alto de todos
Desde que lo conoct, me agraclo Juanito. Pare-
cia relleno de un suave algodon y su rostro palido.
gordito, a menudo sc alegreba con una dulce
‘sonrisa quie terminaba en dos simpaticos hoyue-
Tos, Algo callado para mi gusto, era un compacrero.
‘que nunca me cred problemas, aunque a menudo
yo se los creara a él. Nada de copuchento, a veces.
{tenia actitudes dignas de un santo, Durante mu.
cho Uempo, estuve segura de que mis semejaba
‘un angelito bajado del clelo que un nfo de carne
yy hueso —malé carne que osamenta. es clerto— y
esa caracteristica suya, junto a otras cualidades.
ime Nevo a quererlo muchisimo.
‘Seguramente stempre fue timido, pero eso no
Je impedia comprometerse cuando se neces!
an aluines para una colecta interna, para des:
yalezar el entomo del inmenso local escolar, 0 {
a Spara visitar‘a algtin compaiicro enfermo, Digo que
debio ser timido, pues siempre se ponia muy
colorado cuando algiin maestro lo llamaba o de-
bia dar una leccién o tenia que pedirle algo a una
nina.
Cuando éramos chicos, yo no me al cuenta de
{que Juantto era mas pobre que yo. Siempre muy
limplectto, usaba una cotona muy planchada,
con su nombre bordado con hillo rojo sobre el
bolstllo laquierdo,
‘Con el tiempo, uno repara en cosas que antes
pasahan inadvertidas 0 no se comprendian. Asi
‘me sucedié con Juanito. Sentada a su lado, s6!0
vyeia en él lo que aparentaba. Nunca me lam6 la
atenoion que sélo de vez en cuando trajera alguna
fruta o la mitad de un pan, tampoco entendt que
siempre fuera el mas apurado en llegar al come-
dor donde nos obligaban a tomar un tazén de
leche caltente en invienoy tbla en verano, Feltz-
‘mente, a veces, le agregaban avena con azticar, 0
que la hacia mas pasable, Cas\ todos Ie haciamos
el quite ala colacion de las cuatro, aunque no era
muy facil distraer al inspector Lorenzo, que apa-
recia donde menos se lo esperaba. Pero Juantto
‘no hacia remilgos y hasta aceptaba beberse, con
distmulo, la leche que algune no deseaba tragar.
Cuando ya ful mas grande, entendi que ese desa.
brido liquido era lo ultimo que comia y, a veces,
Jo tinteo. No lo supe por nadie. sino por é mismo,
Pero af e20 lo comprendi bien y me eaus6 muchapreocupaciin, no pude Jamas suber la causa por
Je que Juantto se viera Siempre gordo y salila-
bie. Tal ver ce debia a que ninea crecie demasia-
0. A al, cl cuerpo se le estiraba de a poaullo.
‘como con desgana. Después de todo, eso era
bueno, pues el uniforme Je servia para varios
anos y les rapatos también.
Cuando Juanito me conté que estaba traba-
Jano, yo lo adralré mucho, Creo que eso sueedip
Cevando eursibamos et Terero, Habla entrado de
Junior en la farmacia de su barrio, Debia estar a
Jas ocho dle la manana, barrer la calle. regar dos
arbolitos, trapear las baldosas y mantener muy
aseado el recetario: también lo mandaban a re-
partir remedios y solo de ver en cuando ese ser-
to le significaba wna propina. Lo mejor de ta
Pega. me cont, era el desayuino. Antes de abrir.
Ja dueta —que le habia tomado mucho earlAo—
Je servia una enorme taza de chocolate con una
paila de huevos con jamén o un bistec a la plan-
cha. En los ratos libres, lo dejaba estudiar y en.
mas de una oportunidad le ayudo a hacer una
tarea
Con el corer de fs dias. no habia nadie en ta
escuela que no suplera que nuestro compariero
trabajaba en la botiea. ¥ de abi a llamarlo “el
botiearto™,no medio nina semana. El acepto et
apodo, porque se sentia muy satisfecho de lo que
hacia, aunque munca tenia vacaciones 0 dias
bres. Con lo que ganaba compraba libros, cua-
x
dernosy olras cosas que necesitaba, Ademis. sin
darse cuenta, fue asimilando conocimtentos que
rninguuno de nosotros tenia. Ni siquiera los profes.
Yo of un dia que la senorita de Naturales le
‘pregunt6 qué podia tomar para el resfrio y ¢), con
‘mucha seguridad, Ie contest con una palabreja
‘sumamente larga y complicada que sonaba a algo
‘asi como una serie de formas verbales sin sentt-
do: “Ha sido hace tl sale...". Ahora que soy gran-
de, ereo que ee trataba de una vulgar aspirina
Con el tiempo, aJuanito le dieron un guarda
polvo azulino y se sentia muy orgulloso de salir a
Jos mandados con esa especie de untforme: asi
protegia, tambien, su ropa, La duefia, que nunca
dejé de quererio, le regalaba pastillas de menta y
‘gomitas de eucaliptus: por es0 s¢ podia ubicar a
Juanita hasta en la oscuridad, porque olia siem-
pre a ese penetrante aroma. El fue pasando de
‘curso, sin erecer mucho. pero haciéndose grande
‘por dentro, Yo me converti en una morena mas
alta que Juanito, ast que ya no me sentaba con.
1, A au lado quedd el Flaquito Gomez y ambos
ceontrastaban en caracter y figura. No recuerdo
que algin profesor hublera regafado a mi amigo.
por algo, ya que cumplia con las tareas y siempre
‘se mostraba dispuesto a cooperar.
‘Como a la mayoria de Jos niftos. a Juanito le
gustaba mucho el deporte y tenia una particular
faflcién por el bisquetbol. Aunque nunca logré
encestar, pese a todos los intentos que hizo, el
3profesor Pérez tuvo el buen eriterto de no recha-
zatlo y le enseio a jugar. Entre los grandotes y
atletices muchachos, velase Juanito ain mas
pequenoy deblé soportar piflas y chistes pesados:
euando ingresaba a la cancha Junto a los inte-
‘grantes del grupo... Pero, zqulén tba a sospechar
que nuestro companero, tan bajlto y gordito, 2
tba a convertir en un Jugador indispensable den-
tro del equipo de honor del colegio? Jugando, se
transformaba en una sabandija y deseoncertaba
fa los rivales por su prodigiosa habilidad para
‘parecer donde nadie lo esperaba.
Beto se hizo evidente en la final del Campeo-
nato Interescolar de Bésquetbol, En el ultimo
minuto, Juanito le quito el balon a un grandulon,
pasé entre sus plemas como por un tdnel y le
Jaro la pelota a vino de los nuestros para que
cencestara, Asi se anoté el punte dela victoria. Esa
tarde al chico lo llevaron en andas, porque sti su
partieipacion el trlunfo no habria sido postble.
Nunca més molestaron a Juantto. Diria yo
‘que desde entonces erecio en la consideracion de
Jos alumnos mayores, porque fueron los que pro-
pusieron a nuestro companero como el deportista
del afo. Juanito, con st modestia habitual, st-
_Eulo siendo el mismo. En cambio, yo me wentia “el
Ihoyo del queque” cuando tenia oportunidad de
decir que Juanito Castro me consideraba su me:
{for amiga. Y me creia la muerte cuando era 61
‘quien lo afirmaba.
2
Hace poco. recibl noticias de Juantto. En su
‘carta me cuenta que, felizmente, podra seguir
‘estudiando gracias a una brea. Adn sigue perte
neciendo al equipo de basquethol del liceo y con:
{nda trabajando en la botica del barrio. Algin dia
‘sera farmacéutica, estoy segura de ello, Por fo
menos, ya tlene hecha la practica profesionalUN CHICO GENIAL
( rN
ANDO TATA IOS reparle las estaturas,
J parece que lo hace al voleo ya muchos les
toca ser basitos hasta que, a fuerza de tragerse.en
ayunas una mezela de los tres cereales. crecen un
par de centhmetros al aie. En cambio, otros na.
cen con abono de salitre en las piernas y tienen
que hacer mandas para no alcanzar el techo de
sus easas, También en la reparticion de colores y
gorduras la suerte es esquiva con algunos y ¢xa
gerada con oes. Yo misma, aunque vivia ha.
ciéndole el quite al sol, continue siendo morena
‘oscurita, ¥ Yanet pasaba a dieta para no engor-
dar; y. ademas, se embetunaba con aceite bron:
‘ceador para ne verse con cara de pantruca.
EI Chico Ubilla, como carinosamente le decia-
moa desde que entra la escuela, te hacia ta
‘competencia a Suanito y al Flaquito Gomez en la
baja estatura. Por eso se sentaron casi siempre en
os primeros bancos. lugares nada envidiables.
pues quedaban sin ninguna protercién y al al:
‘cance de las miradas de los profes. siempre dis
puestos a tomarla con los ms cercanos.
{Cuando los que nos ubicabamos en csos lugares
fbamos a tener el valor de intentar copiar alguna
ver 0 de hacer algin desorden? Bi Chico Ubilla
‘estaba dotado de una simpatiaa flor de piel: nada
podia entristecerlo o borrar su graciosa sonrisa,
‘Aunque ingreso al eurso después que Emesto, de
Intnediato se gand un luger entre 1os compare
ros. y al eabo de poco Uempo nos parecia que
siempre habia pertenecido al grupo.
Rapidamente se dio @ conocer como muy ser:
vicial: fue el encargado ofielal de acarrear los
mapas para Clenclas Sociales y las laminas para
Naturales. Causabsa risa ver atravesar el patio. 0
subir las escaleras, a dos pleas deigadas y a un
par de brazos que a duras penas se podian las
preciadas especies Pero el Chico poseia otras
Condiciones; no s& como se las ingeniaba para
andar con uin eterno chupete de caramelo fucsia,
fal que no se le veia fin. Otra gracia del Chico era
‘su inefable tendencla a hacer la caridad eyudan.
do al desvalido de conocimientos. hecho que su
cedia a menudo, Desde su eatratégiea ubieacton.
en el primer baneo cereano a la puerta de la sala,
‘9¢ especializé en soplar con un impulso mater:
ticamente dirigido a la oreja del alumno y.
mismo tiempo, absolutamente inaudible para el
profesor, Para desgracia del sujeto que estaba
steno somietido a ta mterrogacidn det caso, los
conocimientos de Ubilla no guardaban relacion
‘alguna con sur buena intenctOn: en general eran
inversamente proporcionales. Esta buena dispo-
sicton de Ubilla hizo pensar a Gomez que cada
»nino favoreeido deberia “cooperar” con dulces
para la rifa pro-ondos del curso... Sélo que habia
Que desasnar al Chico Ubilla —lo que a csae
aituras era imposible o solleitar la colaboracton
de algano de los probaclamente “mateos” del cur:
So para que. de alguna forma disimulada, (rans
sitiera la respuesta correcta al Chico y éste. a st
vet, la hiclera legar al afeciado, Mas no cont
Jomex con la honestidad de Mister Magi y la
{raneparente conciencia de Cabello. Yo. al prinet
plo, simpaticé com Ia idea de socorrer a algan niiio
6 nifia en apuros, por eso de *hoy por ti. manana
por mi’, Pero Ernesto me hizo desist pucs una
Cosa era soplar y otra recibir un pago por hacerlo
‘aunque consistiera en un inofensivo caramelo,
Gonado por el socorride 0 socornida y el fin fuera
realmente bueno. Asi fue como la astuta idea de
Gomez se fue a las pailas y quedo el Chico Ubilla
fejerciendo su cometido con toda el alma y car
por sus semejantes en apurps,
Poscia Ubilla —y espero que nunca plerda esa
‘eualidad— una nara disposicion para ja aritniett
ta, Desde que se integr6 al curso, desplacd a 108
de
mar, reatar, multiphear y divitir sin necestdad de
papel y Lape 6 pl ba Tos vjitos
pequenos. de tess pestanas. ¥ movia impercep.
fiblemente los delgados labios yen un segundo,
aba la eifra exacta, a veces hasta con decimales
Nopasé madvertida pars el profe de la asignatura,
as olimpicamente; era como bali para stcl genio del chico y fi distinguié siempre eons una
Jwuena nota Jamas ba niaxima. porque al bia
punea le entraron los camplicacles problemas
alucbraicos 0 geométricus.
sta habtiidad Je valib ser nombrade tesorero
vilalicio. porque era, también. muy honrado,
Daba cuenta hasta del mas infimo gasto y en st
euadeno-control nadie se eseapaba de los pagos
SME NCH EE Spar aenCa
sobre ¢l moraso, esperandolo a la entrada de
Ja sala con el euaderne en «nit mano y en la otra
Ja eaja de recaudaeiones, St eso no daba resulta
do, se convertia en su sombra durante el recrco
y. ch casos graves. tba a ka casa. Declan qu
muchas veces el Chico puso dinero de su bolsillo,
‘cuando comprobaba que realmente ¢l companero
no podita caneelar las euotas.
Hace tiempo que no tengo noticias de Ubilla:
la altima ver, me eseribia que daria examen de
admisiOn para ingresara un Instittsto Comercial,
pues descaba ser contador, Ojala le haya ido
bien y se eumpla su anhelo! Lo merece.
LA CUECA CHILOTA.
a
( anno Bravos muy chicos no peda
“J mos por sentarnos junto a Carlos. v
cuando foimos més grandes siempre buseaba
tos sit compari. De pequeno tenia mucho em
comin con Juanito Castro Hasta los contin
‘atenes no ios conocian bien. Cuando leganies
Charo Pstea. Carts era conocido po St
aficldn a ln musica, Su papa contaba que antes
die saber ler, comocta las notas df lave de Sol
Jy era capar de cantarias, marcando el compas:
on asombiosa exactid, Sin dvca. poscis vin
fide privilewiada, Por eso, sis tos le repalacon
tina gultaren de segunda mano, pero gure
fin, Con tant condie¥n, form pare del conn-
{o olktrica dl Liceo y para nosotros fue sempre
tin mati de orgutlo que no se negara janis a
colnvorar en fesias, paseos varios eseatires
Sur familia ent muy conocila, por
nem toca alga fnsiramento. Taos pert
In ikdeain evangélia, és cuya caledral
tata en pleno barrlo de la Estacion Central, cer
Gquita det “persa” y de los terminates de buses
Una vez el curso fue invitado a una hermosa
ceremonia aos pareet6 que fos angries habian
x9escrndide con Sus citaras’ Lan bien (ocaren los
inos y jovencilos,
Aunque era gente muy cartnnsa. a nosotros no
hos gustaba ir a tomar ance con Cartites, porque
su casa limitaba con el cementerlo parroquial
Nos daba julepe. Por eso euanda ihamos. estaba.
‘mos solo un ratio y buseabamos cualquier pre-
texto para decir “hasta luego. muchas gracias, el
te estaba rico...” salle comendo,
La casa de Carlitos habia Ido ereciendo hacia
arriba, a medida que aumentabs la familia y que
cada une necesitaba un luxar independiente para,
censayar y cantar. A nuesiro companeré le cons-
trnyeron un simpatico altillo, algo asi como un
(ereer piso con aires de rascacielo, En esas altu
ras. decia, podia comuniearse von los inumera
bles pajaros que anidabat en las espesas frondas,
dc los arboles,
Ademas de la gui
tocaba unos instrumertos menos conocidos,
como el liquiguaayo ¥ la tarea, y le uslaba bastan-
le la composiciéin, Para el Dia de la Madre hubo
tun acto en ¢l patio del colegio. Entre todos, 6
destaco el grupd de la senorita Elba y Carlitos se
cio con ana cueca chilola, ereada por #1 expe.
cimlmente para su madre. que eta nacidla en.
Achao. Como a mi me gustara mucho, se la pedi
y él ine la mando hace tiempo y aqui la copio det
original. eserilo de pune y letra del autor. y que
0
Fra, nuestro companero
7/8 ta mujer chilota
‘hija del mart =//
//- Nacida enire las olac,
sabe dancar.://
//:Sabe danyar, mi ctelo,
como ninguna! ://
//- Como ninguna. mi alma
con graca sumal ://
//; Con gracia suma baila
la nitia de Achao: //
//:-con el pasite corto
vel zapateado, -//
iChilota, ya me voy.
le digo adios!
Me acuerdo, como si hubiera sucedido ayer, que
Lautaro allo con una chiea de otro curso 1a
cuieea erenda por Carlitos, quien la acompane con
Su guitarra, mientras otro nifio Locaba el bombo.
Fn las Ullimas vacaciones de invierno que
eatuve en el colegto, vino a mi casa Emesto a
avisarme que la mama de Carlitos habia fallecido
repentinamente y que la habian enterrado on s\
Iejana Achao, Cuando supimos que fa familia
habla regresad del sur. fimos a dale 6) pésa’
men/Nuincd antes tubes Necho una visita dé
ese lipo y Hegamos cohibides. callados. sin saber
‘qué decir. No estaba el papa en casa. pero si los
hijos. Carlitos bajé a recibimnos. para extraneza
nuestra, con un rostro sonriente y su habitual
”cordialidad. Una tia nos afreci6 (ecito y no pudl
‘mos evitar aceptarlo: En la easa, aparentemente,
todo estaba como antes y la conversacién con los
hermanos verso sobre el viaje reciente y. cuando
meneionaron a Ia mamé, Jo hicleron con serenl-
dad, En cambio, Ernesto y yo esiabamos muy
imeomndos. Cuando empezibamos a despedir-
‘nos, Carlitos nos pidié que lo acompanaramos un
rato mas. pues nos notaba tristes. Y, para ani
‘mamos, trajo su guitarra y empezd a cantar una
fonada, Para no ser menos, su hermana menor se
acere6 y lo acompané con su hermosa you. Aun-
que nolo esperabamos, vino el otro hermano con.
‘Su acordeon. Fue imposible entonces, no sumar-
nos con nuestras voces a ese coro familiar.
Pese a que era tarde, Carlitos dijo quie deseaba
tocar algo que a su madre le gustaba mucho. A
‘mi se me Ilcnaron los ojos de lagrimas cuando
lescuché los primeros acordes de la cueea chilota,
Cuando concluyd, muy tranquilo, Carlitos me
aio:
Tina, a los muertos no se les llora; se les,
canta, se piensa en ellos. se ora por sus almas.
Mi mama nos ensehé que nunca debemos hacer
Norar a nadie o ser causa de su tristeza... ¥ yo
‘seguiré cantando para alegrar a los demas, igual
‘que cuando mi mamé estaba con nosotros...
Al volver era de noche. y tuvimos que pasar
‘con Ernesto por la calle del Cementerio, Desde la.
‘casa de nuestro amigo nos llegaban los acordes
»
de una gultarra y, por primera vez, no nos dio
miedo la cercanta de los muertos.
aYANET-JEANETTE
LU nstesse casein pra
ia anterior habla side mi cumpleanos
niimiero siete— la seforte Emilia nos presenté a
‘una nueva companera, Quedamos mudos al ver
Ia, Aunque vestia un delantal rosado identico al
que usabames Ins ntas, en ella semejaba seca:
1 cimtillo Blane, que sujetaba sus ondeados
cabellos castaios, paresia una diadema de per
Jag: de hermesas faeciones. el albor de su rostro
hhacfa resallar sus almendracos ojos dorados: Ia
boca pequcia. como Un bot6n de rosa. nos 990.
reia amistosamente. Por Si estatura. la profesora
Ja ubieé atras, junto a Rojas. El se puso colorado
hasta Jas orejas. pero ella no se dio cuenta, nt
{ampoco se asusié por el hecho que su compane-
rode banco fuera colorin En el primer reereo nos
peleamos por acercamnos a Ja Yanel: hasta su
nombre era diferente y todos nos sentimos fase:
nnados por esa ninita mas bella que un hada y que
fe mosiro, desde.el comiervo. risuena y dispuesta
a jugar, correr, cantar y bailar, sin agotarse ja
mas.
Desde siempre, la Yanet fue la reina oficial det
curso: nunca tuvimos que complicarnos con vo-
“
tactones secretas, pues ninguna chica podia pen-
sar eiquiera en competi con ella. Sin embargo.
{uvimos que esperar michos aies para que fuera
clegida Reina ce colegio. Mlentras tanto, ef ls
Fepresentaciones dramaticas ‘vo siempre los
papeles mas importantes; fue sucesivamente le
Bella Durmiente, Rapuncel, Rietos de Oro. Cape
rucita Roja, Dlancanieves y Julieta, Aunque al
resto de as ninas nos (ocaba ser bruja espan
{apajaros o las hermanas feas y envidioeas de ia
Cenicienta, nos gustaba que nuestra amiga y
companera fuera el centro de atencion ¥ de los
aplausos. Con naturales condiciones para la dan
2a, su esbelta figura se hizo infaltable en las alas
simndsticas de fin de ato
‘Aimedida que pasatuamos de curse, con Yanet,
Rosita y fa Chepa formamos in grupo ds verda
deras amigas, aunque ¢rames distinias en mu-
has cosas, pero nos aceptatamos con rivestros
defeclos y virtudes, Como estuvimos. siempre
tnuy cerea de la Yanet, no le teniamos envidi,
‘hungue @ mi me huubiera gustado ser blanca
como élla, cuando velamos 10s sacrifcios. que
hacia para conservarse esbelta dl tersa de piel
yy Alempre: muy hermosa, preferimos. lejos. que
arnos tal cual nos habia hecho Dies. Mittra ta
Rosy. en ead recreo, se comia tin pan rellene cot
palta jameén y queso y yo me deletaba con algu
nas sopaipillas blandas y amarilas, la Yane! se
hacia Ta que no nos veia v partia a tomarse 19
%vaso de aug. Jannts acepiaba un chocolate y. a
Jo mas, ge conformiaba con unas migas de algin,
queque. Como nadie esta conforme con lo que es.
‘nuiesira amiga hublera dado Gon gusto su cadena
de plata por adquirir un tinte tostado: para lo
arto, se compraba una Coca-Cola y se lavaba
ears y manos con el dulzon liquido: le quedaba ta
piel Lesa, pero janis (uvo éxito, Hacia clen aeré-
‘bgeas cada manana y. como al fin era humana,
Into ejereicio le daba apetiio y decin que to
calmalsa eomigndese una ranaboria. En cambio,
yo. cuando ibamos con el curso a la piseina de
Maipa. le andaba haciendo el quite al sol para no
ponerme negra curiche: por suerte la linda som:
Dilla que me re«ail Ernesto me protegia maravi-
HHasamente. Atin la levo cuando bajoa la playa de
Malibu,
Lat Chepa, auc pecaba de francola. Ie decia a
Jn Yanet que preteria tener un pastel con crema
con cl estomagy wn kello mas en la cintura.a tener
que andar preocupada de las calorias. Claro que
hhablaba asi, porque siempre fue delgaducha. La,
Rosita quedabase muda, quizés porque habia
‘perdido “Ia linea” hacia mucho tiempo y sin espe-
fants de eneontrarla. Es cierto que Yanet era
vaniciosa y preocupadisima de su apartencia en la.
‘medida que crecia,, pero no le haeia dao a nadie.
demas. pese a ser tan bella, no le gustaba que
Jos chiquillos la molestaran con suspiros. cartitas
y silbidos de admiraciin enando pasaba. Ella
“
enia muy claras sus aspiraciones: ser reina del
colegio. de la comuna. de Chile y luego salir Miss
Mundo 0 Mise Universo, Si eso le fallaba, ibaa ser
avafata de aviones y asi conoceria (odo cl plancta:
lo otro era estudiar teatro y legar a ser actriz
famosa en Hellywood, Cuando la Chepa le pre
untaba si no estaba en sus planes casarse, lla
Iecontestaba —eon bastante razon— que $1 loa.
ba realizar alguno de sus sucios cuando fucra
grande, los pretendientes le Hoverian. poxtria re:
0d
rico y sin niecesidad de amuletos para la suerte.
sto lo agregaba Yanet, porque hubo un tiempo
‘en que vivio esclava de los horéscopos y “contras
para e| mal de ojo". Fue nuestro companerd Go-
mea, que poseia un sentido comercial increible
quien le vendia “al casio palitos de palqui en
rray, medallitas de plata pura con una cinta roy
patas de conejo, phimas del ave del Paraiso, sa:
quitos con pelos ae gato negro, us de la gran
bestia o eon incienso. ¥ la Yanet, temerosa de la
envidia de las nifas de cursos superiorcs, aca:
rreaba en sti mochila todos los antidotos para las
malas Intenciones: en vano Ie deeiamos que 6503
‘eran putras leseras, pero el Gamer juraba que 10.
[pues él estaba asesorndo por tn tio espirilisia
(Cabello de Angel. como Hamibamos a un cont
panero que tenia deseos de ser sacerdate. fie
quien logr6 que nucsira amiga abandonara css
tonlas supersticienes. Yano! nos conto que una
1 clelir al mie buenmozo. inteligente y
atarde Cabello la leva hasta un galpén. detras de
la casa del cutdador de la escuela, donde estaba
el Gomez. Seguro de que nadie lo observaba. 3
habia sacado un zapato y el respectivo calcetin:
yy, con mucho euidado, se empezd a cortar la wha
del dedo gordo del pie; nego. echandio los pedacl-
{os en una bolsa plastica, la habia sellado. Des-
pues, se habia metido al gallinero y, con mucha
habilidad, le habia arrancado tres plumas a una
xallina negra... No se quedaron para ver mas. Por
supucsto, conté la Yanet. que todas las “coniras”
fueron a dar al arro basurero y se aeabaron para
siempre los poderes magicos dela “una de la gran.
bestia" y del “ave del Paraiso”. Al Gomez Lambien
se le Lermino fa suerte y (uvo que buscarse otro9
‘mediios para hacerse de unos pesitos. Desde en:
tonces, macié enire 1a Yanet y el Cabello una
‘buena amistad, quealgunos tomaron por pololeo.
YY no falté el picado que le puso “el Angel de la
Guarda’: pero cl Cabello lo tomé con pacieneia de
santo. No tenia alternativa: por algo iba a ser
cura, ¥ quizas llegaria a obispo.
Cuando empezamos Séptimo Basico, tuvimos
la primera clase de Francés: el profe sacé al
pizarrén a la Yanet y le pidké que escribiera su
nombre de pila ¥ ella. con harta mala letra. puso
JEANETTE. Jamas sospechamos que la Yanet se
llamara asi ni menos que fuera tan enredado
escribirlo! Pero este hecho inspiré a Cabello de
‘Angel, encargado oficial ie la campafia para cle
8
girla Reina det licen: él inisino hizo unos afiches
‘enormes donde se leia: "Vota X Jeanette, Tun
que", Esto, unido al “charme” de la candidata,
logro que nuestra amiga obiuviera el 90% de ies
sufragios. Asi cumplié ella uno de sus deseos y
todo el curso celebr6 el éxito merecidamente ob:
tenido, La mejor fue que el dia de la coronacion le
hhleieron entrega de un premio fantastico: uni es:
peje dorado, con pie de porcelania, y dos lunas. de
‘aumento y normal. Ese dia hubo baile de distra
ces y Yanei bailo con el Rey Feo, un joven de
Cuarto Medio que no estaba nada de mal. Des:
pues la vinieron a buscar sus papas y ella
despidio levando junto'a sir corazin ¢] maranillo:
‘50 espejo, Todos pensamos que mas que !a coro:
nna de reina.a Yanet le habia fascinado su premio,
‘el regalo juste para una nina tan hermosa como
ella, y que —ademas— adormaria su dormitorio
como sina joya
Poco antes de la Navidad, era costumbre que
Ja Cruz Roja de Maipu organizara una quermese
pera reunir fondos para ir en aytida de los ninos
mas pobres o cnfermiles. Por supuesto que me
Giovon permiso para ix con la Meiga. que mie papo
la entrada, Cuando ya era de noche, vino la parte
nirelenida: el sorteo de objetos doniades por
la comunidad. Como tercer premio mostrar un
espejo idéntico al que habia recibido la Yanet, Se
Io saco una sefora gorda. que quedo muy feliz
con su suerte. Semanas depués. fui a ver a mi
ryamiga. Pasamos a conversa a su dormitorte y, al
ho ver el espejo por ningiin lado, Je pregunte
donde estaba Se puso muy nerviosa y guarde
silencio. Entendi entonees que la Yanet que todos
‘conociamos y amabamos, aunque vanidasa, lle
vaba dentro a una Jeanette capaz de dar en
silencio, anénimamente, un cbjeto simbolo de un
Irfunfo largamente esperado y del que debid serie
‘muy dificil desprenderse, Miré a mi amiga y la
hhallé mas hermosa que nunca antes.
FUERA DE SERIE
‘ALLADO, TiMIDO, con los parpados amenu-
do bajos, Lautaro leg a nucsiro curso
‘euando ibamos en Segundo, y su ingreso fue todo
‘un acontecimiento. Bstabamos convencidos de
que era extranjero, por si apellido que nos sona-
ba tan enredado. Eramos aun muy chicos para
‘comprender que en un mismo territorio pueden
habilar otras razas con un apellido coman chile
Habia una senonta en la escuela que nos
ayud6 mucho a entender que en las diversas
reglones de nuestro pals habia pueblos con cos-
tumbres diferentes y hasta con una fonina de
hablar distinta, La macsira cra gordita, enériea,
‘con 1a ter del rostro sin asomo de maquillaje y
luna sonrisi: generosa, Al prinelpio le (emiamos
lun poco, pues decian que ni aceplaba a fos
chistinsos nia Tos Mojo. Se Hamabya Elba y ten
su eargo la actividad de oxpresion artisticn, que
cera Wine, yt ba cial se aaistis tos sibados. Lat
primera que no titubed ni un segundo fue fa
Yanet: ella se inscribié en seuida con... Lautaro!
Yo nunca pensé que los varones pocian tener
_gusios parecides a los de las nias, pero. cuando,
3empenamios 10s ensayos. vi que la presencia de los
nisios no podia faltar. Aprendimos danvas de Iu
ares Lan Tejanos como la Isia de Pascua. el Alt
plano. Chloe y la region de La Frontera, Habia
alumpos de distintos curses y. sin embargo, nos
sentiamos muy unides por el mismo desco. de
salir adelante para-aprencler pasos 0 movimientos.
de manos y del cuerpo: segiin el baile que inter
ramos. Nancupil se distinguid muy pronto
nite los demas nifios, porque lenin muy buen
do v dispostetin para el baile. En canibio Garth:
os, aunque le pons hartoempeno, quiedé defini
vamenie en el grupo musical
Como el nimero ce mujeres superaba al de
arones, la senorita Elba nes preparp en el baile
‘de lag Cullacas", Yanet se eonvirtid en nuestra
‘caporala’. guslando nuestros pasos 2
campanilla, mientras nosotras’(renzibamos tas
fas en una vara eoloeada en ¢l centro. ¥ tos
hiquillos del grupo musieak von quenas, un
bombo y una ¢aja. nos acampanaran con mucho
empeno, Para representar a la zona central. alu
as parejas tuvieran que aprendera bailar cucca:
desde unos eabritos dei Kinder hasta los'grandit
Jones de a Media, lo hacian eon gracia v
pleardlia. Yo Itt Selecetoniada para aprender “Sau
au” por mi tipo moreno, Hasta hey. cuando estoy
{an lejos tle Chile, ne parece escuchar ese extra
ho dialecto que se queda para siempre adherido
fl ofdg’ “Sau-sau reva sau reho vark: enia simo-
2
son de int
simo-simo: pow pow karl, era miakinakt mat
jihure hia...” Lautaro sabia un “pert
sea unit danza mapuche. ¢ interpreta et “lonko:
perun”. el bolle del jefe. Bn Ja gala de fin de aao.
€lfuc el mas aplaudido y las parejas que bailaron
sinlla”. com todos los aiuenddos elites. se “pa:
Durante varios anos se hizo habitual el nome
ro de Nancupil. Cuando aun vivia su hermanito,
Jos dos locaban instruntentos mapuches ¥ ento:
aban eantos tristes, cuya melodia os diferente a
toxlas. A ellos siempre fos eatalan solicitando,
part algun acto civico, asi como al confunto de
Carlitos
Lautaro no solo se dedieaba a la danza, No cra
imal alunine, pero era eapaz de deyar todo botado
por un partide de futbol. Nancupil ehuteaba
eam S| hubiera miekdo para crack. y cuando
queria Weirse. delante de unas ehiquillas. que
ormabain la barra elel colewio. x© poniay a hacer
Tintas muy complieadsis: entonees los amigos te
_usitahain: “iViva Laitorano Nanpelé!” ¥ no parane
se parser & Zamorano 6 3 Pelé. sino porque
ilautive era
Ranieupil le hacks a toda sb de trabajar se
mejor que les dos juntos!
Aralaba: nunc Faltalna 4 clases, pero se las ne
vce pair barscarse “pololites” que te act
Hel dea, Fue muy eomicy eu.
ego a clasess con tanat bufanda que le dejaba al
aire solo tas ojos: hacia bastante calor y. al prit
3cipio.ereimos que andaba restrtado, Por ta frente
Ie corria la gota y pensamos que la flebre 10,
cconstimia, Rosita se prevcups tanto por él, que no.
pudo dejar de aceredrsele para ofrecerle ayuda. y
iuanito. tan eoniedido con siempre, le garrapa:
{ed una recela con nw y todo. Cuando Mege el
profe de Majenatica y Hamé a Loutaro a resolver:
un problema en el pizarron. apenas sc le enten-
iat fan {pada tenia ta boea. Los ehicquillos aije-
fot) qiie andaba afonice y muy enfermo: pero,
para extranesa nuestra y del profesor. Lautaro
nego con la cabera. No le gustaba mentir, asi que
se acercé al profe y. levantandose la bufanda que
Jo tenta eas sofecado, le dijo en voz alta:
—Es por esto, senior que ando tapadc...
o
F] senor de Matrmaticas fue siempre muy
serio, pera vimos que lo que estaba mirando le
habia provocade sorpresa y una fugar sontisa,
que sp le [ue para los pequenos ojos. que se le
reian solos, mientras disimulaba, preguntand
-2Se puede saber, Laularo, por qué andas
‘Todos explotamos en risas cuando vimos s0-
bre su labio un extrano, diminito y poblado bigo-
te nepro, Despues Naneupil nos conto que estaba
contratado cle Chaplin para hacerle propaganda
fauna lienda, y qe esa manana habia sido su
primer dia, pere que por inexpertencia te habia
puesto demasiado peyamento al bigote y ahora no
ppodia saedirselo, a menos que se arrancara la piel
ese a sii percanee, a Leiutaro tambien le dio risa
‘au situacibn y, mientras el profe se to permit.
hos fire qzar sitnulanda que andaba con bas
on, (onan. y les ples theta amber. Con esa act:
uid franca, Lautare pudo sacare tn chalina
hasta que la soltieton vino de Juuanite Castro,
Pldid periniso y se ue al botiguin y proparé in
vena, que mas semejaba compresa. y se la pea
Nancupil encima det bigote con tela selbexiva,
neste, despues, que hubo que seme,
tera ro aun complica operarion de
cir ites fue hnposible despegarle
con A bysore y ka vena, Charo que
nadie le creyé a Emiesto y Nancupil siguio ganan:
do anos pesitas can su Simpxitice disfraz
Py(tra gracia que poseia Laut
do conecimiento de Ia historia y costumbres de
‘sus antepasados, sabia cl significado de todos los
nombres de pueblos. ni0s y lagos del sur. ¥, por
supuesto, conocia muy bien jos insirumentos
musicales mapuches. Cuando nos correspondio
estudiar "La musica araucana”, nuestra profesc:
ra califico a Nancupil con la nota maxima en
todas las pruebas, $0 no paso con nadie mas.
pues esa materia era difiellisima, con 10s n
bres que pareeian trabalenguas.
‘Aparte de estas gracias que poseia por heren.
cia. Lautara era sactificade. Cuando se entero de
que el *Zancadilla” tba a abrir un quicsco de
diarios y revistas en la esquina, al tiro se fue a
blrecer para ayndarte a repattitlos (empranilo. El
buen hombre acept, porque asi pudo aumentar
considerablemente su clientela., El profesor de
Educacion Fisica, cuando supo que su alumno
‘madrugaba para camplir bien ta tazea que se
habia impuesto. le presio su bicicleta de lunes a
viernes. Espero que a estas alluras de suvida
Lautaro ya tenga algun medio de moyilizacion
propio, adquiride con su esfuerzo. Las personas:
com el siempre obtienen lo que ee proponen,
putes son fuera de serie, ¥ Nancupil lo era soba
amente
era su profane
APRENDIZ DE MAGO
OSE PEREZ no lenia nada que ver con la
Yanel. Pura casualidad tener el mismo ape=
Ilido. Tampoco se parecian de fisico nt de carac~
er. José es1uvo clesce siempre con nosotros, pero
nunca comprendimos como se las arreglaba para
salvarse afo tras ao, Nadie dud6 jamas que nos
la ganaba a (odes en lo Mojo, pues hasta para
caminar parecia pedirle permiso 2 um pie para
‘mover el otro, Devian que eatar cansado,era su
estado constante. en clases siempre entrecerraba
196 ojos. y cualquiera habria jurado que estaba
profundaniente concentrado en las explicaciones
el profesor, pero solo dormitaba. Su mama cast
vivia en Ia Inspectoria General, pues no habia
maestro que no la eitara por las malas notas que
‘acaba su Pepito, como lo Hamaba ella con mu-
cho cari.
Pepe poseia ina natural simpatia y tralo: ja
mas pude pelearme con él y con es0 lo digo todo.
Afable, lierno. se ganaba el afecto hasta del mas,
duro y por €s0 nunca podiamos negamos a
echarle una manito. Como el Chico Ubila te tenia
particular voluntad. cuando salia José a dar
‘guna lecciOn, se esmersba en mandarle por vie
”wives Ma respues!
que, con Ta buena su
© de
Pope resiltatia a1 menudo correcta, Sentado de
por vida junto a Mags
for situaetbn eel Jose hei
ba on eualrite pars
sien muy quere
ibujos de Artes.
Nawurale:
‘You vrres le sople, aunque me daba p
sete se sbkuidaba evan
crisis y necesita
arse Rosita, que fue
que
Helo a fines cle anno, snientras otros
repeimn curse «
dienle que np Se a)
ecb conereio
‘alga da, con fo bien auc
¥en su, eusti, Jowe iba a hie. Dicer qe tas
dials aseveran que dle cada,
ade st howsr 0 hace ta
Cimarra, que nie « Jo mismo pero parecida. Por
Suipueste qirequicn se marcha de su casa regress
en euuinty siente hunnbre «ine. Pera eso no stiee~
{40 cun Jase. Sus papas, despues de and
xuiandy por (odo Maipuy San Bertairdo, donde
Vivian los abuclitos, Uivieren que dar cuenta
Cayabineros. 1 senorita Emil. may preocupe
dla, huaay uns Camscjo de Curse expecial par ver st
In dabamos alu pista. Magu, que Io conocia
1as que los demas, aventuro nina posibilidad
jo que Jase tenia que estar cn un lugar donde
se pasara muy blen, con comida buena y entre
tencion asegurade. ¥ donde hasta el trabajo fuera
38
veelabi
Feglamento permitia. Ed
que mune in
con ahgann amo pen
anamos que
pasaba en la excucla
cesraisticas au
divertido, Emtonces ta Chepa, que nada tombs
(en sero, pete:
“Tipebe estar en el Cielo! Seguro que hizo eso
‘a San Pedro y paso sin que fo vera!
‘algunos se eron, pero la cara que puso ta
sefiorila fue tan lernible. que nos quiedanes mu
Gos. Rosita, que siempre fue muy sensible. s
putto'a imotear solo de pensar que Jost catuvie
a enel Mas Alli.
Pero la idea de Masi no eayd en saco role
Recuerdo que Emesto ron Nancupil anduvicron
seereteardose, luego de hablar un buen rato con
Mister Magi. Las aifas (ratamos en van0 de
averiguar qué (ramaban: yo le hice un cole al
“Tio, pies no me gustaba que anduviera ocullan
dome cosns, Pero me dijo que los uramentos cran
saurados y que jamas revelaria nada en benelicio
de [a snvestigacion en marcha. Como diez dias
“copes aparectd Josd. Los excelente investiga
tdores habian dado von su paradero.
"Todo {ue como ce pela. La penetrante pst
cologia de! mnatco Ma les sinvid a Ernesto ya
Lautaro para hacer un istado de lugares terreno
tes donde pudiera estar Pérez. Descartaron a los
fitanos, 21 los papeleros. 9 @ los chinchineren
ore vosé quetaba cle a timpiez, li bucess
omic ¥ blanila cama. EL hecho cs gue 2 Me
abuelita de Es
encontrar al perdido, La sefiora no hallo mata la
Tincada y les proporciand los mesios para llevaria
pesto Ie costé un dineral ayudar4a cabo, Fue asi come Lautaro y Tite 46 pexar:
tun slricon de funciones clrcenses, hasta que
descubrieron al fugitive. Fue en una de Tas carpas.
Genieral Velisquez con la Alameda
donde to hallaron, transiormado en ayucante del
mayo chino Chin-Chu Li. Bstaba irreconocible:
de bata roja, con un dragon pintado en la espal
da, llevaba coleta y los ojos estirados con tela
adhesiva, No era un cireo de animales salvajes:
Alli s6lo habia perros sabios, que Sabian las ope
clones aritmeticas mejor que el Ubilla, Katos
acrabtas y loros parlantes, Un aviso pegado en.
tun poste le dllo la idea a Jose de dedicarse a las
payasadas’ solo que en el circo necesitaban a
alguien muy despierto para suplie al asistente del
mago y no habla lugar para tonis. Sin embargo.
can dos dias de ensayos. nuesira companero
queds en condiciones de colaborar en la aparicion.
y desapanteton de pelotas dle colores. antinalltos
ec fiero, pafiuclos de seda y friglles quitasoles.
B} Imico consistia en tener dos ejemplares ident
‘cas de cada objeto: cuando Chin-Chu-Li mostra:
ba un balon rojo y se lo inetia por una manga,
Pepe se hacia el alorado y se lo sacabi del pecho:
yatsi con cada cosa. Habia que estar alerta ante
cualqmicr impreviste. pcs veces no era tat ctl
sacar Ln quitasol abierto desde el espinavz:
‘bien: habia que anclar cosiendo los veinte botsillos
del kimono, pues con el peso de los objetos ten-
dian a descoserse Eso le pasé en la noche de su
estreno y el payaso Tintin Tonton. que andaba
husmeande, s¢ dio cuenta de que a Pepe se le
estaban deslizando gallos y ranas de terciopclo y
salvé la situacién lirdndose al suelo y brineando,
para que el pablico se distrajere.
Contaba José que le habia torado compartir el
carro con el chinito, que era mas chileno que los
porotos, y con un malabarista auterticamente
coreano: la sefiora del dueno del eireo, muy gorda
y simpatica, hacia unos sabros0s platos para
algunos de los artistas varones: mientras co
lla tes contaba de los dias en que bailaba sobre
tun alambre tensado al maximo y en que cruzaba.
la pista sin red proteclora; hasta que una noche
algo fallé y nunica mas pudo ejecutar su niimero.
Eso habia sido muy triste, Por eso Pepe habia
elegide un arte cuyo tnico peligro estaba en el
ppublico, st se pereataba del engano,
Cuando aparecié nuestro companero en ta
‘sala, aplaudimos con ganas: y él, habituado ato
‘que habia estado haciendo, nos hizo una reveren.
fa absolulamente oriental. La verdad es que la
hazafta del Pepe conmovie al colegio cntero y la
diligencia de los detectives Emesio y Lau
pash inadvertica, Pese a que los papas de Pepe no
Ie hallaron gracia alguna a lo hecho por su hyo.
éste no cambw. Se puso mas transportado. mas.
flojo. y como tun mes despues volvio a perderse.
Solo que esta vez detectives de verdad lo trajeron
soplado desde Talagante. Dicen que Chin-Chu-Li
6se jubilb muy pronto, pues ne pude t
ante mas aug inteligente que slose
HIJA UNICA
tan enna. edonatay fae a de
citi commu cel eo, pes sue con
cee i Unnerada algun a Coe eranes
se maa marie w sa sein furs kine»
Seer es sats omg lt de seman
‘estabamos.
‘AL principio, Rosita tenia ky misinia estaturt
iia: solo que yo cra el vive ejemplo de le esvasex.
por lo aca. y ella ela abunchaneta. Unis eg
fas rotas cle un Tereore fe gritrban “chupadita
Yy la pobre Rosia se ponia Morar, Hasta (qe le
seitorita Bnnilia puso fin al asunto y In dejaron
Iranguila, Bra bontia: nuestra companeras blan:
‘ea, songonada, «ke hermosos jes color aaa cle 16
puny corte, Sujeto eon un pinche.
iki tutor y wennerosa. papalnt por i
1
fcon ella el misino banco, pues los profesores
tienen la idea equivocadi cle que el desordenado.
¥ Mlojo se vuelve disciplinado y eatudioso con s6lo
Sentarse junto a um nine bueno: generalmente cl
6malulo sigue igual y €l que se contagix cs cl otre:
Pero con Rosita no pasaba eso: yo me aburria
‘soberanamente a su lado, porque nunca se dee:
‘media en nadia: ast que me dedicaba @ molestar a
Jos que estaban ubleados detras mio ol otro lado.
pasillo, Recuerdo, como si hublera sueedido
ayer, cuando a Emesto y a mi nos separaron y él
asd a sentarse con Rosita y yo con el “cabeza de
vanahoria”, como jo tlamaba Tito. Yo no la pase
mal con ef Capitén Rojo, pero Ernesto si que se
lateaba con sit stlenciosa companiera. ¥ esa cua
lidad de Rosita se mantuvo siempre: aunque ju
aba y se reia cn cémara lenta, pasaba por
comedida y poseedora de un gran sentido de
solidaridad. Tenia a cargo, con Juanito, el bot
‘quin. y poseia tuna mano de dngel para hacer
‘curaciones simples: la quisimos desde un princi:
pio por Io llcma y buena companera, aunque
para soplar no servia. pues s
perdia en el espacio.
Desde que entramos al colegio. Rosita osien.
faba un “record de Guiness” —como decia miss
Martha, nuestra estricta profesora de Inglés— y
aquél consistia en que era “hija unica” Yo tam:
bién (enia la condicion de hija dinfea, pero me vi
obligarta a guardar ese secreto, pues no podia
andar contando que mis hermanas eran postizas,
Pero en el curso habia otros casos, aunque al
revés, Uno de los que mas hermanos tenia era
Gomer. Su casa semejaba una hospederia, pues
o
toda la familia vivia junta y los menores eran
centre ai tioa, eobrinos, primos y hermanos de
‘nuiestro companero; ni él mismo sabia sf cra cl
hijo niimero ocho © siete: sblo tenia claro que
‘estaba entremedio y que para pronto se anuncia-
ban trllizos. Lautaro, en cambio, era el mayor
centre doce. Seguramente por esta razén estos dos
‘companeros fueron siempre tan busquillas y da~
dos a trabajar’ en lo que fuera, porque debieran
‘estar muy corisclentes de los enormes sacrificios
que hacian sus padres para mantener a tantos
hijos.
‘Creo que envidiabamos a Rosita. Vivia en una
‘casa muy bonita y tenia una linda pleza para ella
sola: ademas, le hacian festa de cumpleaos en.
grande y para la Pascua reeibia mas regalos que
nningxina de nosotras. Comia cosas ricas y por eso
rho podia guardar Ia linea. ¥. como si es0 fuera
poco, s¢ notaba a la legua que sus padres la
regaloneaban mas de la cuenta. Cuando habia
reunlon de apoderados, la unica mama que venia
‘con marido era la de Rosita. Porque lo normal
‘stempre fue que aparecieran solo las madres,
‘como si todas hubleran sido viudas. Tambien
Rosy andaba con el uniforme Impeque, pucs no
tenia que heredar el jamper. los zapatos 0 el buzo
de gimnasia, Esa ventaja —asi se lo haciamos ver
‘a menudo— no tenia precio. Porque en cl curso
‘cast no habia alumno que no anduviera con alig-
za prenda de algun hermano o hermana.
8
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