La Psicología como Pilar Fundamental
en la Atención de Enfermería
Introducción
En el ejercicio profesional de la enfermería, comprender al ser humano de manera integral
resulta esencial. La psicología, como ciencia que estudia la conducta y los procesos
mentales, brinda herramientas fundamentales para comprender el comportamiento de los
pacientes, sus reacciones frente a la enfermedad y su adherencia al tratamiento. Este ensayo
analiza cómo la psicología contribuye a mejorar la calidad del cuidado desde la práctica de
enfermería, abordando conceptos clave como temperamento, carácter, conducta y modelos
de atención en salud.
La Psicología y su Relación con la Enfermería
La psicología, nacida como disciplina científica en el siglo XIX, se ha convertido en una
ciencia indispensable en contextos de salud. Desde la enfermería, su valor radica en la
capacidad de interpretar las manifestaciones conductuales y emocionales de los pacientes,
permitiendo intervenciones más humanas y eficaces. El enfermero o enfermera no solo
debe conocer procedimientos técnicos, sino también comprender las dinámicas mentales y
emocionales que condicionan la recuperación del paciente.
Temperamento, Carácter, Conducta y Comportamiento
El análisis del comportamiento humano desde la psicología distingue entre características
innatas y adquiridas. El temperamento, de base genética y biológica, condiciona la
reactividad emocional del individuo. El carácter, por otro lado, se forma a través del
aprendizaje social y representa la expresión singular del individuo ante diversas
situaciones. La conducta hace referencia a acciones observables influenciadas por normas y
valores, mientras que el comportamiento implica respuestas más automáticas ante
estímulos del entorno.
Estas diferencias son cruciales en la práctica de enfermería. Comprender, por ejemplo, que
un paciente es evasivo no por rebeldía sino por un carácter ansioso, permite adaptar la
comunicación para lograr mayor cooperación.
Modelos de Atención: Biomédico vs. Biopsicosocial
Tradicionalmente, el modelo biomédico ha sido el dominante en la atención sanitaria,
enfocándose en la enfermedad como una alteración orgánica susceptible de diagnóstico y
tratamiento. Sin embargo, este enfoque ha demostrado ser limitado en enfermedades
crónicas o en contextos donde los factores emocionales y sociales tienen un peso
importante.
El modelo biopsicosocial, en cambio, propone una visión integral del paciente, considerando
los factores biológicos, psicológicos y sociales. Desde esta perspectiva, la enfermería se
transforma en un acto de cuidado holístico, en el que la empatía, la escucha activa y la
educación para la salud son tan importantes como la administración de medicamentos.
Aplicación Clínica: Casos de Ana y María
Los casos de Ana y María, presentados en el documento, ilustran cómo el análisis
psicológico permite entender mejor el comportamiento del paciente. Ana, una mujer
perfeccionista y organizada, refleja un carácter responsable pero autocrítico, lo cual puede
llevar al agotamiento. María, en cambio, presenta un patrón de evitación y falta de
adherencia al tratamiento de su diabetes, condicionado por factores emocionales y de
personalidad. En ambos casos, la intervención de enfermería se enriquece al aplicar
principios psicológicos para fomentar cambios positivos.
Bases Biológicas de la Conducta
Comprender la estructura y funcionamiento del sistema nervioso es esencial para los
profesionales de la salud. La conexión entre estímulos, percepción, respuesta y emociones
se fundamenta en procesos neurofisiológicos que involucran neurotransmisores como la
dopamina, serotonina o GABA. Enfermedades como la depresión, esquizofrenia o Parkinson
tienen una explicación desde la neuropsicología, lo que permite intervenciones más eficaces
y humanizadas.
Conclusión
La integración de la psicología en la formación y práctica de la enfermería es indispensable.
Esta ciencia no solo ayuda a entender al paciente como ser biopsicosocial, sino que permite
planificar cuidados centrados en la persona, con énfasis en su bienestar emocional y mental.
La psicología ofrece herramientas para anticipar conductas, explicar respuestas y
acompañar procesos de salud-enfermedad desde una mirada compasiva y científica. En un
mundo donde la salud mental cobra cada vez más importancia, el rol del personal de
enfermería como agente de cuidado integral se potencia gracias al conocimiento
psicológico.