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Copia de Etchegoyen - Notas Sobre La Historia de La Escuela Inglesa

El documento analiza el desarrollo histórico del psicoanálisis, centrándose en la escuela inglesa y su evolución a través de figuras clave como Melanie Klein y Anna Freud. Se discuten las diferencias en sus enfoques sobre el análisis infantil y el complejo de Edipo, así como la influencia de la British Psychoanalytical Society en la formación de nuevas teorías. A lo largo del texto, se destacan las contribuciones de Klein al entendimiento del superyó y la técnica del juego, marcando una clara divergencia con las ideas de Freud y Anna Freud.

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Copia de Etchegoyen - Notas Sobre La Historia de La Escuela Inglesa

El documento analiza el desarrollo histórico del psicoanálisis, centrándose en la escuela inglesa y su evolución a través de figuras clave como Melanie Klein y Anna Freud. Se discuten las diferencias en sus enfoques sobre el análisis infantil y el complejo de Edipo, así como la influencia de la British Psychoanalytical Society en la formación de nuevas teorías. A lo largo del texto, se destacan las contribuciones de Klein al entendimiento del superyó y la técnica del juego, marcando una clara divergencia con las ideas de Freud y Anna Freud.

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Materia: INGLESA ‘ Cétedra: SLAPAK Docente: ECHEGOYEN Titulo: UNA _HISTORI. LA I GLES: El desarrollo de la investigacién peicoanalitica se comprende mejor con una perepectiva historica que revele cémo se geaten ¥ desenvuelven las teorias, cuéndo se superponen o se contraponen fal der cuenta de loa miemos problemas, cémo los viejos interrogantes reaparecen en el cuerpo de las ideas nuevas. La historia nos permite discriminar, también, los avatares del movimiento peicoanalitico de las conquistee de la cdencis peicoanalitica, que a veces se confunden, sobre todo cuando confluye la biequeda de la verdad con el legitimo deseo de preserver el legado de Freud. Estae reflexiones se aplican vélidamente a Ja escuela inglesa que, en cuento abarca diversas teorias y diferentes autores, tiene més unidad histérica que doctrinaria. Vamoe a tratar de comprenderle, siguiendo el proceso que tiene por escenario la British Revabo-Analvtical Society; y, cuando ileguence de esa historia al presente, nos encontraremos con un haz de ideas, variadas y valiosas, que no caben ya en una delimitacién geogréfica. 3 En la década del veinte, cuando funda el International dournal y dirige con mano maestra la Sociedad Briténica, Ernest Jones echa lae bases de un gran desarrollo dei psicoandlieis. donde aparecen ideas renovadoras y originales que comprenden el @eearrollo peicosexual infantil, sobre todo la etapa anal, la eexualidad femenina, la teorfa del cerécter, la neturaleza de la angustia, el origen del Superyé y otros temas no menos importantes. El punto de partida de lo que va a ser la escuela inglesa puede vubicarse en la convergencia de esas investigacionee con la llegada de Melanie Klein a Londres en i926, invitada por Jones. Melanie Klein ya habia elaborado, en Budapest ¥ Berlin, su técnica del juego para el anélieic de nifioe. La clave de eata técnica, como es sabido, estriba en analizar el juego como ai fuera un ouefio, integréndolo con le conducta verbal y no verbal del nific equivalentes a las ascciaciones librea dei adulto. Muchos analistas de aquella época rechazaron abiertamente este procedimiento y lo criticaron con severidad, pero hoy dia casi todos lo aceptan, si bien no aiempre con el mismo entusiasmo. la influencla de Helanie Klein en Londres fue inmediata y profunda, como lo prueba el Simposio sobre el andlisie del nifio que tuvo lugar en la Sociedad Briténica el 4 y ei 18 de mayo de 1927. Melanie Klein lo abrié con un trabajo riguroso sobre su técnica del Juego, en el que campeaba un tono fuerte de polémica frente al libro de Anna Freud, “Palcoandliaia del nifia”, recién publicado, Todos los que hablan en el Simposio, Joan Riviére, MN. Searl, Ella F. Sharpe, Edward Glover y Erneet Jone, se declaran a favor de la técnica iddica y reprueben la fase pedegégica propuesta por Anna frend para poner en marcha él anéligis de nifios. Ye sabemos que Freud se molest6 por le publicecién de este Simposio y, en septiembre de 1927, ae lo hizo saber a Jones (Jones, 1955/57, 3: 152). El Simposio marca una diferencia clara entre Londres y Vieha en cuanto el andlieie de nifios, una diferencia de fondo, que va desde la técnica a la clinica y dsede la clinica a la teoria. Melanie Klein efirma que ya en la primera infancia existen fenémenos de transferencia y que ls situacién analitica se establece y deearrolla igual que con el adulto ef, como exige Freud (1}, no ia perturbamos con consejos u opiniones. Anna Froud pienea que mal puede darse una “segunda edicién” cuando todavia no eeté agotada la primera ~ esto os, la relacién del nifio con los padres- y que, carente todavia de Superyé, el nifio necesita que el enalista ces también educador. E] analista debe guiar al nifio, atraerlo al tratamiento, hacerlo tomar conciencia de enfermedad: s6lo entonces podr4 analizarlo. Lo miemo habia postulado la vienesaa Hermine von Mug-Hellmuth en un trabajo pionero presentado en el VI Congreso Internacional de La Haya en septiembre de 1920. Mientras que Anna freud evita les sentimientos negativos del nifio (y aqui juega su actitud educadora), Melanie Klein loe abarca, los trata como (1) “En cambio, ei adoptemos desde un principio una actitud ave no sea éeta de carificso interés y simpatia y nos mostramos rigidamente moralizantes o aparecemos ante los ojos del paciente como representantes o mandatarics cs otras personas, de a ecényuge 0 gue padres, por ejemplo, destruiremos toda posibilidad a cemejante resultado positive”. (“La inictacién del tratamiento”, 19is. 0... 135), trenateridos y los interpreta (2). La idea da que tanto ls transterencia positive como la negativa deben intgrpretaree equidietantemente, segin aparezoan y mde alld de toda eetrategia, es la base de la técnica kleiniana, no sélo en. el anélisie del nifio eino también del adulto y del psicético Melanie Klein ee declara partidaria de la interpretacién profunda, busca tomar contacto con el inconsoiente del nifio e interpreta el complejo de Edipo exhauativaments. Segin Klein, el complejo de Edipo se inicia mucho antes de lo Freud sefialé y con 61 el Superyé, tanto més severo cuanto més temprano. Aqui la diecrepancia ce absoluta e irreductible. Anna Freud considera, como eu padre, que el Superyé es el heredero del complejo de Edipo y sélc se inatituye con eu én (Freud, 1923, 1924). Melenie Klein no pone en duda gue ©] Superyé ee origina por la introyeceién de los padres edipicos; pero eostiene que el proceso eo gradual y empieza mucho antes. Como en otros campos de su investigacién, Melanie Klein prefiere adherir aqui a las teoriae de Freud antes que construir las propias, si bien es ‘cierto que, en este caso, carece todavia de loe instrumentos conceptuales necesarios, eeto » una teoria del mundo interno y de los objetos introyectadce En "Los principios peicolégicos del anélieia infantil” as: ), un afio antes del Simposic, Melanie Klein habla comunicado por primera vez sue observaciones sobre el Superyé temprano (el elefante de Rita), afirmando que eus hellazgos en (2) H. Hug-Hellmuth recurre oin heeltar a toda clase de factos para lograr la colaboracién del pequefie paciente, pero no rehiye interpreter la transferencia negative. sda contradecian la afirmacién freudiana de que el Superyé eiva de la introyeecién de los padree edipicos, ya que ese eeerrollo lleva afios. Y agrega “El andlisis. de nifioe muy. squefioe mugetra que, tan pronto como surge el complejo de jipo, los nifice comienzan a elaborarlo y, por tanto, a vearrollar su Superyé (3). En eu documentado libro “La obra de alanie Klein", Elea del Valle (1979) considera que este rticulo, basado en una conferencia leida en la Sociedad sicounalitica de Berlin en dicienmbre de 1924, es la primera xposicién ordenada de la doctrina de Melenie Klein, en cuanto eecribe con claridad eu técnica del juego y desarrolla la zoria del complejo de Edipo temprano y el Superyé precoz (pags. 3/56). Vale la pena destacar que en ese miemo afio (1926) Jones scribe un trabajo eumamente importante sobre 21 Superyo, donde ubraya la importancia de los factores innatos en eu formacién y efiala texativamente que su severidad deriva de los impuleos fdicos del nifie, un punto que, a partir del Simposio, va a ser na clave del pensamiento kleiniano. Aunque Melanie Klein no ite este trabajo de Jones, autores como dlizabeth R. Zetzel 1986) y Harold Stewart (1979), aubrayan la coincidencia que, en u eepontaneidad, marca claramente las bases doctrinarieas de 1a eouela ingleaa. 7 Todavia durante algunoe fics, Melanie Klein seguiré esteniendo que ©l Superyé depende del complejo de Edipo. 3) “The analysis of very young children showe that, as soon ae he Oedipus’ Complex ar ses, they begin to work it through and 133). hereby to develop the Superego". (Writings, Aunque algunas afirmaciones de esos afioe implican que el Superyé aparece (como el Yo) desde el comienzo, la verdad es que Melanie Klein vacila en afirmarlo. En wna nota del Capitulo @ de EL pelooandliie de nifies (Writings, 2: 127) dice que el objeto imcorporads sume el papel de un Superys, y en 1995 afirma que los objetos’ incorporatos tempranamente forman la base del Superyé entran en ou estructura (Writings, J: 267), que no es lo mismo que decir coneretamente que el, desarrollo del Superyé es previo ¢ independiente del Edipo, como afirma en 1948. Aa pues, mientras que para Freud el complejo de Edipo determina el origen y la eatructura del Supery6, para Melanie Klein, al contrario, la naturaleza de éste condiciona el desarrollo de aquel. En el X Congreso Internacional de Innsbruck (septiembre de 1927) le controversia .Londres-Viena ce plantes en doo frentes, la semvalidad femenina y e] anélisie de nifios, a travée de tres rabajgos memorsbles que leen Jones ("El desarrollo temprano de la sexualidad femenina”), Melanie Klein ("Estadio tempranos del conflicto edipico”) y Anna Freud ("Sobre le teoria del andlisis de nifios"). E1 trebajo de Anna Freud expone ldcidamente lo ya dicho en su libro: para adaptarse a la peculiar condicién de su paciente, el analista de nifios debe unir a la actitud snelitica la pedagésica, En la medida en que el Superyé no ha slcanzado ev completa independencia, el trabajo analitico debe influirlo desde 1 exterior. En 1946, cuando se reedite eu libro, y més tarde en el prélogo de sus “Writings” (1965), Anna Freud modifica algunos de sue puntos de vista. Dice, por ejemplo, que puede cuprimirse la fase introductoria pedagégica si se analizan adeouademente las defeneas dei Yo infantil, dado ave le actitud del medio social frente al andlieis del nifio ee ha modificado. Piensa, asimiemo, que el nifio de primera infancia es analizgble y que en 61 se encuentran frecuentes fenémenos de traneferencis, #4 bien no una neurosis de transferencia. Melanie Klein mostré en Innebruck su vena deecubridora: reafirma que el complejo de Edipo ee inicia antes de la etapa genitel o fdlica y lo describe en relacién al cuerpo de la madre, dando especial importancia a lo que llama la_fese femenina, una identificacién con ia madre en le etapa anal-sédica que se presenta tanto en la nifia como en el nifio a partir de 1a conjuncién del impulso epistemefilico y el deseo de tomar posesién y atacar el cuerpo materno y eve contenidos. Kata fase femenina es un aspecto del complejo de Edipo temprano y tiene profunda influencia en ia definicién sexual y en la construccién del Supery6. Luego del Congreso de Innebruck, Melanie Klein (1929) propone una teoria del juego infantil basada en el fen6meno de la Pereonificacion, que explica por un doble mecaniemo de identificacién y proyeccién, y cuya finalidad ee disminuir ei conflicto intersistémico. Se ha acercado ya notoriamente ai soncepto de mundo interno, ofrece una vereién original de la transferencia y esboza el concepto de identificacién proyectiva. En julio de 1929 Melanie Klein présenta al Congreso de Oxford su hermoso trebajo sobre e1 simboliemo, donde eigue la ruta abierta por Ferenczi (1912, 1913) y por Jones (1916) a partir del genial descubrimiento de Freud en los ausiioa” (1900). La ponencia de Oxford se basa en el an@lisis de Dick, un nifio paicético de 4 afice, en quien el proceeo ¢: simbolizacién estaba interferido por una angustia extrema. Con su ensayo, Melanie Klein abre el camino para el anélieis de la peicosie y expone una teoria del simbolismo y del funcionamiento yoleo, que va a desarrollar después eu discipula Hanna Segal (4957, 1978). Apoyada en ia teorfa del signo desCharles Morris (1938), Hanna Segal propone una explicacién del eimbolo que tiene en cuenta a la vez la teoria de las posiciones y de 1s ntifieacién (proyectiva e introyectiva). En 1932 Melanie Klein publica "El_peicoandlisis de nifios”, que comprende todos los descubrimientos realizados con le nica del juego; Jones, por eu parte, presenta al XII Congreso ge Wiesbaden, en Septiombre, un trabajo sunanente importante, donde yeafirma lo dicho en Innsbruck y declara decididamente que la fase fAlica de Freud (1925) 0 deuterofAlica -come prefiere Llamarla-, ao es una etapa normal del desarrolie sino un compromiso neurético entre ambos sexoe. “Més papieta que el Jonee efirma gue ¢: complejo de Edipo es universal, rechezando las limitaciones que propone Freud su ensayo “Sobre la sexvalidad femenina” (1931) cuando, al referiree a le fase preedipica de la mujer, dice: "Puesto que en este periodo caben todas las fijaciones y represiones a las cuales atribuimos la génesis de las neurosis, pareceria necesario retractar la univerealidad del postulado segin el cual e] complejo ue Bdipe seria el micleo de la neurosie” (pag. 262); ¥ més adelante afirma: en el nifio varén existe esa fatal conjuncion cimulténea de amor hacia uno de los redres y de odio por rivalidad contra el otre” (Trad. Ludovico Rosenthal). A mediados de la década del treinta las diecrepancias tesricas entre Viena y Londrea aleanzaban una teneién considerable y, fin de discutirias, se propueo una serie de reuniones clentificas. Jones las inauguré el 24 de abril de 1935 leyendo eu trabajo “La sexualided femenine temprana”, en e1 que 10 recisa lae diferencias de lac dos escuelas en cuanto al yearrollo peicoserual de la mujer. Conviene recordar que las piniones de Jones eran compartidas también por analistas del’ mtinente como Karen Horney (1924, 1926, 1933), Mary Chadwick (925) y Jomine Maller (i925), cuyo trabajo aparecté en ei tternational Journal de 1931, no menos que por Melanie Klein y sros (4). Ee evidente que Freud considers eienpre 1a envidia £élica ono Primaria en cuanto 2 la eexualidad femenina y la mantuvo omo pieza fundamental de su doctrina, un punto de viata que yoré de profundizar después Jacquee Lecan (1958, ete.), cuando nica @1 falo como primer aignificante. En los dias de ou conferencia en Viens, Jones hablé a Freud stensamente de Melanie Klein y de aus sportes al peicoanéliste, In lograr convencerlo. B1 26 de imayo de 1938, Freud le zeribi6: “Yo no considero que nuestras divergencies teérices van de poca monta, pero siempre que tras de tales discrepancias > 8@ escondan malce gentimientos, no hey por qué temer oneecuencias enojoses. Puedo afirmar decididamente que peotros, en Viena, no hemos puesto ninguna mala voluntad en ste diepute, y, por otra parte, su amabilidad ha eervido de eparacién por 1a forma en que Melanie Klein y eu hije ee omportaron con Anna. Ea verdad que en mi opinién eu Sociedad ha eguido a la Sra. Klein por un camiac squivocado, pero la esfera V que ella ha hecho sus observaciones me es ajena, de manera 4) Un lticido desarrolis de esta polémica, que se prolongé asta nuestros dias, puede encontr: anine Chasseguet-Smirgel a “La cexualité feminne” (1964). se en la “Introduceién” de aL gue yo no tengo derecho a tener ninguna conviccién bien establecida (Jones, 1958/57, 3: 216). Para retribuir le vieita de Jones, viaJé Robert Wilder = Inglaterra en noviembre de 1935. Ai afio siguiente Joan Riviere ley6 el 5 de mayo en Viena ou trabajo “Sobre la génesia del sonflicto peiguico en 1a primera infancia”, » lo que respondié Walder (1937) con un trabajo pondersdo y minucioso. Mientras los analistas de Londres piensan que dieponen de inetrumentos pasa conocer el primer afio de vida, los vieneses se muestran escépticos, al par que censideran que ni ice impulsce orai-sédicos #1 los mecanismos de introyeceién y proyeccién tienen tanto peso como se pretende en Londres: “Las situaciones de ansiedad que surgen del interjuego de la agresién y le libido, forman el punto de partida de una gran parte del trabajo de los analistas inglesea", dice Joan Rividre (5). ¥ egrega que ja ments del nifio reeponde a su medio con una interpretacién subjetiva de la experiencia, que lleva a cabo a través de mecenismos de introyeccién y proyeccién, base de ev vida de fentasia. Para los vieneses, y desde luego para el mismo Freud, el Yo se va organizande poco » poco y no existe en el lectante ~al menos como instancia capaz de esa supuesta vida de fentacia por dem4s compleda-. Visto con una perspective actual, ce podria decir que la econtroversia radica en el primer afc de vida y adquiere una valencia doble que cuestiona el métedo y el contenido de le (s) “The anxiety-situatione which arise from the interplay of aggression and libido form the starting-point of much of the work of English analysts". (International Journal, 17: 386). investigacién kieiniana, lo cual, dicho sea de paso, es sontradictorio. Bn cuanto el método, W&lder considera que no hey suficientes elementos de juicio para afirmar que lae fantasias que revela e] andlisis de nifios de primera infancia existen ya an el primer afio de la vida. En io referente a contenidoe, se pone en duda que existan en el lactante impulsos agresivos de tanta intensidad como supone Helanie Klein. En este punto, sin embargo, como dice Cttro Kernberg (1972), actualmente oe acepta en general que la agresién tiene importancia en los estadics temprencs del desarrollo (pég. 325). La hipéteeie freudiana del instinto de muerte, en cambio, aplicada por Melanie Klein con tedo rigor, no goza de la simpatis de los paicélogos del Yo, tampoco de Fairbairn (1944), Balint (1952), Winnicott 1950)" y del mismo Jones (i948, “Introduecién” @ Gontribuciones a) peicoanélieisa de Helanie Klein). : Walder encuentra, ademée, que la realidad es poco tenida en cuenta por la teoria kleiniana, cuando efirma gue eu solo efecto ee confirmar o refuter 1a angustia del nifio (ee decir, evs fantesias). Tampoco eres que sea legitimo asimilar los mecanismoe mentales del primer afio con la paicosis. Las objeciones de WAlder eiguen teniendo cierta vigencta, si bien el progreso de la investigacicn psicoanalitica de todas las eecuelas nos ha ido aproximande de hecho a un mejor conocimisnto del primer afio de la vida. Eo verdad que, como advirtié Wilder, lo que se descubre con la técnica itdica en los nifiee de la primera infancia no puede sin més tomeree como evidencia de lo que paga en el lactante, pero aqui la critica es me aplicable a le forma en que se presentan los hallazgos que al métedo: Klein omite un paso metodolégico, que toma la transferencia como teoria presupuesta, aunque lo implica cuando observa que resulta incompronsible que un nifio de cuatro afioe pueda tener uns image parental que devora, corta y muerde; pero es claro, en cambio, que pueda ser eaa la imago de un nifio de un afio (6). Sélo en 1967, en e1 primer capitulo de Envidie y gratitud, justificars ella eu derecho a reconatruir el pasado mde antiguo apoyad el Freud de 1937; y en une nota de la pégina 5 introduce el concepto de "memories in feelings” como une forma de recuerdo de les experiencias més arcaicas. Michael Balint particips en Ja controvereia Viena-Londres titulo de representante de la escuela de Budapest (7). iuego de reivindicar e1 método reconstructivo, afirma que algunos hechos ee repiten continuamente en le eituacién analitica, lo que permite inferir ciertas constantee del deearrollo temprano. Cuando el proceso ha avanzado euficientemente ex invardable que el analizado espers y demande gratificaciones primitivas, como por ejemplo. ser llamado por gu nombre de pila o dare ese + al analista, tener 1s oportunidad de verlo fuera de ia sesi recibir o darle un regalo, establecer un contacto fisico, corporal, ete. Si estes deseos son frustrados, se despierta esa (6) "It does not seem clear why a chiid of, say, four years old should set up in hie mind an unreal, phantastic image of parents who devour, cut and bite. But ig clear why in a child of about ong_yvear old the anxiety caused by the beginning of the Oedipus Conflict takes the form of « dread of being devoured and destroyed” (Writings, 1: 187). (7) Balint leyé eu trabajo en Budepest en mayo de 1937. Ese afio se publicé en Imsso y en 14 ultwdes gama de centimientos que describen los analistas de ares, donde e1 eadiemo ocupa un lugar principalisimo, con el viteble corclerio del temor.a la venganza o a le pérdida del r. Por otra parte, si se satiefacen, sobreviene una ltacién menieca que plantea problemas no menos graves. Sin vargo, si el analista entiende escs desece como un “new Hinning” y loe satiaface adecuadamente, lo que obtiene es una ‘puesta callada y tranguile de bienestar, que nunca va mis \& del placer prelininar. (Los analistas kleinianoa pienaan + esta técnica crea un vinculo idealizado que sofoce la wneferencia negative y la anguetia persecutoria). Como eetas vandas del paciente no se caiman con recursos autoeréticos o teieieticos, Balint postula que los estadice més tempranos del wrollo son radicalmente objetales, aunque de fines pasivos. se amor obdetal primario ca egofeta, asume que loe deseos del 70 son igualee a los propios. De esta forma, cree Balint haber resuelto (desde Budapest je ee también decir desde ¥erenczi-) el desacuerdo entre adres y Viena: las observaciones de los analistas de Londres 1 correctas en cuanto describen con acierto lae reacciones que men a 1a frastracién del amor objetal primario; las eriticas los vienesee eon justas, porque denuncian la unilateralidad esos hallezgos. Balint concluye que ei talén de Aquiles de ous escuelas es 1a adhesién a le hipétesis del narcisiomo imario. He citado extensamente a Balint porque cus ideas enuncian les otros autores més recientes y porque se ubica en un punto que onto va a eer le manzana de 1a discordia. Si bien los alistas de Londres, por la indole de sus investigaciones, ae clinan a pensar que e1 nific nace mds integrado de lo que euponen las teorfas freudianas, s61o muy lentamente abandonan ia hipétecis del narcieimo primaric. Cuando Melanie Klein escr sobre el tle (1926), oscila entre Ferenczi (1921), que considera al tie como un fenémeno eepecificamente narcieieta (aiguiendo alguna sugerencia verbal de Freud) -y Abraham (1921), que io ealifica de convereién pregenital anal-eédica: y decide por fin, saloménicamente, que el tic presenta una estructura nercieiatica daria, ein cuestionar para nada la teoria en au conjunt. Tedavia diez afios después, cuando Joan Riviére visita Viena, ia seoria de log objetos internos no eat del todo formalizada y, 4 pesar de que ya ae afirme que el Yo exiete desde el comienzo de Js vida post-natal, no se cree por ello imperioso abandonar e concepto de narcieimo primaric. Cuando decide incluir eu trabajo ge 1936 en Desarrollos Peicoanglisis (1952), Joan Riviere 8 en alguna nota ia hipétesic del narcieismo prime ro no 1a abandona. Ese mismo afio, sin embargo, en “Los origenes de ls traneferencia”, Melanie Klein (1962) efirma que la relacién de objeto opera desde e1 comienzo de 1a vida, coexietiendo con el sutoerotiemo y el nercisiemo como expreaién de amor por el objeto bueno internalizadc, que en la fantasia forma parte del cuerpo amado y del self: el autoerotiemo es un modo de gratificacién, el narcielemo un estada y no una etava del desarrollo. De esta forma, Klein reconoce por fin explicitamente gue ha abandonado la hipétesis de aque existen une etapa le auteerstica y una etapa narcisicta antes de que se esteblezca etapa objetal, com Freud propone en Schreber (1911) y otros trabajoc de esa época, que van a orietalizar en la “Introduccion al narcisismo” (191: 16 ba diecusién entre Viena y Londres pronto empezé a darae en . eeno mismo de la Sociedad Britdnica, en especial s partir de 1 presentacién de “Una contribucién a la peicogénecic de loa’ stados maniaco-depresivos” en el XIII Congreso Internacional de acerna (1934), donde Melanie Klein empieza a construir ipétesie propias para dar cuenta de sus descubrimientos. La roria de Je posicién depresiva apoya sin duda en Freud (1917) Abraham (i924), pero va més allé en su intento de ordenar el cimer afio de la vida. la etapa oral, en funci6n del Yo, de la igustia y la relacién de objeto. Este esfuerzo se continuaré en lt XV Congreso (Parie, 1938), con “El duelo y su relacién con 26 estados maniaco-depresivos” (1940). El trabajo de Lucerna sostiene que el primer afio de vida es scieivo para el futuro del individuo y que en su transcurse el Lio sufre anguatias de tipo paieético, persecutorias y 2presivas. La nevrosie infantil de la primera infancia -un enial descubrimiento de Freud- tiene pues un antecedente en las igustias peicéticas del primer afio y sirve justamente para laborarlas. Melanie Klein concibe la posicién depresiva a la 3% come una etapa del desarrollo y como una estructura -de ahi ae je liame “posicién” y no “etapa o “estadio™. Con razén dice zltzer (1978) que el concepto de “posicién” eo primero una onetelacién psicopatolégice luego uns. fase del desarrollo y or fin un principio econémico (o estructural), que Bion (1963) 2fiala con su signo Ps -D. Lo que merca ja entrada a 1a posicién depresiva es un cambio wostancial en la relacién de objeto, que de parcial se hace 2tal: paralelamente a su creciente integracién, el nifio se elaciona con la madre como una totelidad -y ee justamente este uevo vinculo lo que lo expone a la vivencia de pérdida. Desde 47 el comienzo de le vide se introyectan objetos buenos y malos, de los cuales 1 pecho de la madre es el prototipo. Los mecanismos | de proyeceién son también muy activos, y por ello el pecho malo ee conatituye no eélo a partir de la frustrecién sino también de la proyeccién de la hostilidad. i Hatas afirmaciones significan un cambio teérico de gran i envergadura. No es de extrafiar que deepertaran fuerte oposicién en el geno de una sociedad en la que ya se estaba planteando el desacuerdo. En eu excelente biegrafia, recién publicada, Hanne Segal (1979) dice que, a partir de este momento, ya no se puede hablar de la egcuela inglesa y de la escuela kleiniana como si fueran io mismo, un punto que también sefialé Bibring (1947) cvando diferencia entre escuela ingleaa y la Soctedad Briténica Las diecrepancias ee expreeaban ahora enérgicamente y eu principal vocero es nada mencs que Glover, que romps bruscamente con Melanie Klein y la acusa de haberse apartado por completo del cuerpo doctrinario del psicoandlisia y haeta de usar métodos ilegitimos para apoyar su causa (Gillespie, 1980, pég. 86). A este creciente malestar en el eeno de la Sociedad Britdnica se agrega la diaspora del grupo de Viena luego de la invasion nazi a Austria en marzo de 1938. Bn junio, Freud, eu espowa y + Anna pudisron salir de Viena y llegar a Londres. Contrastan con las exaltadas afirmaciones de Glover las criticas mesuradas de Marjorie Brierley (1939, 1942) que ee | coloca en una perspective histérica para cvaluar las nuevas ideas recuerda que ninguna opinién puede dejar de darce desde jo personal. Piensa que Melanie Klein ha hecho descubrimientos importantes, pero que no siempre es precisa al conceptualizar sue hallazgos, por lo que a veces el hecho clinico y la te ee guperponen y confunden. Se pregunta 61 la teorie de Ja libido 18 28 compatible con la de les relacioneastempranas de objeto ¥ sefiala que Fairbairn piensa que no 19 sen’ én absolute (8), un punto de vieta gue Brierley no comparte. Loe avatares de la IT Guerra tindial postergaron un wnfrentamiento que era inevitable y que ‘jor fin tuvo lugar en 1943, En esa época le vida de la Sociedad,de habia normalizado y ye decidi6 iniciar una serie de discusiones cientificas sobre la vbra de Klein. Gillespie (1980) precios que esta convocatoiria murgié de una serie de reuniones adminiatrativas donde, se lecutié la naturaleza d= les teorias de Klein, la estructura lel poder en la Sociedad y otros temas. Viato el retiro de fones, nadie cuestionabe a Glover el derecho de ser el ‘nuevo wesidente, pero so deseaba fijar limites para que nadie se ternizara en el cargo. Gillespie llega a afirmar que el grupo sleiniano apoy6 esa opcién para dieminuir el] poder de un nemigo, no por razones institucionales. Bl reeultade de aquellas reuniones administrativas fue que se imité le permanencia en ei poder de lae autoridades de la ociedad y se nombré un comité integrado por Brierley, Glover y ames Strachey para convocar una serie de reuniones clentificas onde se discutieran lae ideas de Melanie Klein. Betas reuniones ue fueron once en total, se. llevaron a cabo en 1943 y i944 y uedaron bautizadas en la historia del movimiento peicoanalitico ome “Controversial discussione". Los cuestionados presentaron cuatro trabajos, a sabe: 3) Una exposicién detallada dei pensamiento de Fairbairn puede ncontrarse en los capitulos 14 y i6 del gran libro de Guntrip 1961). “Waburalesa y funcién de la fantasia”, por Susan isaacs} Aigunos aspectos del papel de la introyeccién y la proyeccién por Paule Heimann; “Regreeién", por Susan Isaacs y Palla Heimann y “La vida emocional y el desarrollo del Yo del lactante, con eepecial referencia a la posicién depresiva”, por Melanie Klein. Fetos trabajos formarcn la base del libro Desarroljos en Palgoanélisie (1952), ef bien el de Melanie Klein no ae publics nunca como tal y originé otros escritos, en especial “Algunas conclusiones teéricas sobre 1a vida emocional del lactante" (1962). El centro de las diecusiones fue el trabajo de Suean Leaace wobre la fantasia inconsciente, que sin duda representa la més acebada y rigurosa, formalizacién del pensemiento de la.escuela kleinians, que tuvo en ella su més vigoroso expoeitor. Si bien Susan Ieaacs encuentra muchos puntos de apoyo enle obra de Freud, como por ejemplo en algunce sus trabajos de comienzos del siglo sobre la fantasia, asi como también en su afirmacién de que todo proceso mental se origina en el inconsciente o en la teoria del deseo, el concepte de fantasia inconsciente transforma la teoria toda del peicoandlisis y se constituye en el punto nodal de una oxplicacién del peiguiemo: cambia el objeto de estudio, modifica substancialmente 1a técnica. Cuendo ce opera con el eoncepto de fantacia inconeeiente no es necesario aguardar una ruptura en el discourse pera interpretar, con lo que la tarea del enalieta se hace més rica y flexible, pero también més rieagose Més allé de las heridae y sineabores que siempre deja un enfrentamiento de esta jole, las “Controversial Discussions" dieron una nueva fisonomia a la Sootedad Britdnica, con tres grupos bien definido el de Anna Freud, el de Melanie Klein y 20 el de loe analietas independientes o piddle group, el née amplic, donde ee alistaron los que reconocian valores en la obra Ge Klein, pero no la aceptaban en bloaue y se reservaban el derecho e criticarla y refutarle. Como consecuencia de esta gran polémica y gracias a las gestiones conciliatorias de Silvie Payne, el Instituto de Londres se reorganizé en dos grupos, el & con los analistas kleinianoe e independientes y el B, de Anna Freud. A partir de la nueva estructura de le ensefianza, los tree * grupos pudieron convivir y no #8 cerré el diglogo. Desde ese momento, como dije al principio, ya no corresponde hablar de una escuela ingleea de Peicoandlisis sino de grupos o tendencies, de pensadores originales que mantienen alto el prestigio de la Sociedad que fundé el gran Ernest Jones en i9i9. Buenos Aires, 5 de octubre de 1980. BIELIOGRAFIA: ° ABRAHAM K. 1921. “Contribucién a una dieguaién sobre el tic” Peicoanélisis Clinico, Cap. 18. Bs.As. Paidés, 1959. Seleated Pavers, Londres, Hogarth Prees, 1973. ABRAHAM K. 1924. "Un breve estudio de ia evolucién de la libido, considerada a la luz de los trastornos mentales". Peicoandlisic clinico, C. 26. Selected pavers, C. 26 BALINT M. 1937. “Early developmental statee of the Ego. Primary object love". Int.J.Psvcho-Anal., 30: 265/73, 1949. BALINT M. 1952, “New beginning and the paranoid and the depressive syndromes”. Int.J.Paycho-Anal., 33: 214/24. 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