SERIE: ARREPENTIMIENTO
“Ten Piedad de mí, oh Dios, conforme
A tu misericordia; Conforme a la multitud
De tus piedades borra mis rebeliones.” Salmos 51:1
ES MÍA LA RESPONSABILIDAD, YO SOY EL PROBLEMA
Santiago 4:1-10
Propósito de la enseñanza: Entender que; si verdaderamente nos arrepentimos y nos
convertimos, todos nuestros pecados serán borrados, entonces recibiremos directamente del
Señor, tiempos de verdadero refrigerio. Hechos 3:19.
Para poder entender como el verdadero arrepentimiento puede lograr borrar delante de
Dios todos nuestros pecados, debemos partir del principio de saber reconocer ¿Cómo es un
verdadero arrepentimiento? Y ¿cómo lo describe la biblia? es decir, que es para Dios y debería ser
para cada uno de nosotros un verdadero arrepentimiento.
La biblia muestra que un verdadero arrepentimiento implica un cambio genuino en
nuestro corazón y mente, que este verdadero cambio nos llevará a vivir de forma exitosa alejados
del pecado y generará en nosotros un deseo innato de buscar a Dios plenamente, también implica
que nos reconocemos a nosotros mismos como pecadores y este reconocimiento causa en ti y en
mí un dolor real, solo por el hecho de haber ofendido a nuestro Dios.
El Salmo 51:17 nos enseña, que más que acciones vanas (sacrificios) lo que Dios espera
primeramente de cada uno de nosotros es un Corazón y un Espíritu quebrantado que anhele
fervientemente reencontrarse con ÉL y alejarse del pecado.
Cuando cometemos pecado y no nos arrepentimos, herimos el corazón del Señor,
causando tristeza en ÉL, pero Dios es tan bueno que esta tristeza tiene la capacidad de generar en
ti y en mí, un verdadero arrepentimiento, pues la palabra en 2 Corintios 7:10; dice que esta
tristeza que proviene del corazón de Dios nos lleva al arrepentimiento y a la salvación. Es por esta
razón que hoy recordaremos y afirmaremos tres (3) principios bíblicos fundamentales que nos
ayudaran a permanecer alejados del pecado, experimentar un verdadero arrepentimiento y cuidar
nuestra Santidad:
1). SER AMIGO DEL MUNDO, TE CONVIERTE EN ENEMIGO DE DIOS. (V. 4)
Debemos estar siempre atentos a cada cosa que realizamos, por qué la realizamos y para
que la realizamos, ya que en estos tiempos, muchas de esas cosas están guiadas más por la moda,
el comodísimo, la rapidez e incluso la sencillez, dejando de lado el trabajo duro , el esfuerzo y
cosas fundamentales que agradan el corazón de Dios, pero esto no es fortuito, es un plan
elaborado que ha venido normalizando lo malo para que tú y yo no nos demos cuenta que tan
rápido nos estamos alejando de Dios a través de acciones comunes que aparentan ser normales y
parte de nuestra vida.
Es en este punto donde cada uno de nosotros debe tener la capacidad de discernir entre
estas cosas y aquellas que menciona la biblia que son las correctas, ya que de a poco nos hemos
venido alejando de nuestro creador por medio del pecado que ha sido normalizado como una
conducta aceptable e incluso defendible. Satanás ha venido muy sutil y firmemente afirmando su
plan en la humanidad y tú y yo somos su blanco principal, porque tenemos la verdad y su trabajo
es distorsionar esa verdad con sus mentiras y verdades a medias, es por ello que debemos
Arrepentirnos, buscar a Dios mucho más y pedir siempre su dirección en todo para que cada una
de estas mentiras o verdades a medias nos sean reveladas y podamos no solo escapar de ellas,
sino lograr rescatar a todas las personas posibles para la Gloria de su Nombre.
2). SOMETANSE A DIOS, RESISTAN AL DIABLO, Y ESTE HUIRA DE USTEDES. (V. 7)
Son palabras relativamente sencillas, en comparación a la gran lucha que esto implica,
porque es inherente en el hombre querer ser autosuficiente, no necesitar de nadie para lograr las
cosas y es en este punto donde somos capaces de cometer errores y unos muy malos solo por el
hecho de querer lograr metas y sueños.
La biblia nos muestra como estar alejados de Dios simplemente es una receta para el
desastre. Hombres como Saúl (por solo mencionar un ejemplo) son prueba suficiente de lo malo
que es no someternos 100% a la voluntad de Dios y no aprender a resistir las tentaciones.
En la carta a los Romanos, Pablo nos exhorta a que podamos presentar nuestra vida,
nuestros cuerpos como Sacrificio vivo y agradable a Dios, que no nos ajustemos a esta vida
transitoria y que por el contrario enfoquemos nuestros pensamientos y nuestras acciones hacia
una sola dirección, obedecer al Señor. La perfecta sumisión a Dios implica en cada uno de nosotros
un verdadera transformación que no solo nos aleja sino que también nos fortalece para poder
resistir las influencias del diablo y de este mundo ya corrupto.
3). ACÉRQUENCE A DIOS, Y ÉL SE ACERCARÁ A USTEDES, (No pretendan amar a Dios y al mundo
al mismo tiempo). (V. 8)
Buscar a Dios ante cualquier situación es por mucho nuestra única y mejor opción, y
aunque ciertamente el mundo presenta una amplia gama de opciones, es ya evidente que ninguna
de ellas nos dará los resultados que anhelamos, acercarnos a Dios activa el principio de la
Reciprocidad. Santiago nos escribe a nosotros que creemos en Dios y que enfrentamos
constantemente conflictos y tentaciones que procuremos tener una relación más y más cercana
con nuestro Padre, enfatizando que esta iniciativa de acercarnos a Dios es fundamental para
experimentar su presencia y ayudarnos en nuestro diario vivir.
Este principio nos encamina a lograr siempre un verdadero arrepentimiento, y nos deja en
claro que la mayor responsabilidad en la lejanía de Dios es nuestra, es decir; es nuestra culpa estar
lejos de Dios, es nuestra culpa permitirle al mundo distorsionar la verdad aun sabiendo que no es
lo correcto. Hermano, hermana, estamos en un tiempo en el que los verdaderos hombre y
mujeres de Dios harán una real y firme diferencia, pero para llegar a consolidar ese momento,
debemos buscar a Dios con todo nuestro corazón ya que ÉL anhela tenernos cerca y darnos todo
aquello que ha preparado para nosotros, pero para lograrlo debemos buscarlo, arrepentirnos
genuinamente de todos nuestra faltas y cambiar nuestra manera de pensar como muy claramente
también lo expresa Pablo en su carta a los Romanos 12:2.
Arrepentirnos genuinamente implica como ya lo explicamos un cambio total en nuestro
comportamiento y mayor aun en nuestra forma de pensar, cambiar nuestra actitud manteniendo
nuestra vieja forma de pensar solo nos llevará por un camino marcado por el remordimiento y por
ende, alejados de la verdadera presencia de Dios y de su propósito. “Así que, arrepentíos y
convertíos, para que sean borrados vuestros pecados, para que vengan de la presencia del Señor
tiempos de refrigerio” Hechos 3:19
DECLARACIÓN PROFETICA
“Hoy es el día de mi transformación; vuelvo mi rostro y mi corazón a Dios y me arrepiento
sinceramente para que ÉL pueda cambiarme y renovarme, confío en sus promesas y permitiré
desde ahora en adelante que su palabra ilumine mi mente y guíe mis pasos, no me aferrare nunca
más al pasado sino que abrazaré la nueva vida que hoy el Señor me está ofreciendo, hoy declaro
en mi vida que ha llegado el tiempo de renacer en su Amor y en su Verdad” Amén.
Escrito por: Juan Chirinos
Coordinador de la Región Verde Manzana