COLECTIVISMO
CURSO: FILOSOFÍA Y ETICA
MG. PERVIS PAREDES PAREDES
COLECTIVISMO
• El colectivismo es una doctrina política y social que defiende
la propiedad comunal de los bienes y medios de producción. A lo
largo de la historia se han registrado numerosas actividades
colectivistas, pero hasta el siglo XVIII no hubo una teorización de las
mismas.
• Durante el siglo XIX el colectivismo fue defendido por el anarquismo,
sin embargo, algunos reformistas, como
los regeneracionistas españoles, lo propusieron como solución a los
problemas agrarios. Tal es el caso de Joaquín Costa, autor
de Colectivismo agrario en España
Colectivismo (del latín “collectivus”, derivado de “colligere”, reunir,
juntar). Principio de la vida social y de la actividad conjunta de los
hombres; es contrario al individualismo. Surgió en el período de la
formación de la sociedad humana. El colectivismo posee varias formas
históricas. En la sociedad primitiva, se manifestaba en la lucha conjunta
por la existencia. Su base era la propiedad comunal.
En el colectivismo, se acentúa el concepto de lo colectivo, exactamente
lo contrario del concepto de lo individual. Lo que vale es la suma de
individuos, el conjunto. el grupo, la colectividad.
El colectivismo aparece cuando se observa históricamente que existe
ese abuso ya señalado a propósito del sistema capitalista: unos pocos
mandan a los demás: el poder económico de una clase social se
transforma en un poder político dictatorial; la democracia es falseada
por las diferencias de orden económico.
Cuando se observa eso. viene el pensador colectivista o Socialista y
dice: "hay que reivindicar ahora, frente a este abuso de los individuos
convertidos en clase social dominante, el valor de la sociedad. Este
valor de la sociedad tiene que pasar a ser el valor fundamental y hay
que ordenar la Sociedad en función del valor colectivo".
El régimen colectivista nos lleva. en lo económico. a lo que llamamos
precisamente colectivismo, o estatismo, o socialismo estatista, es decir, un
socialismo entendido como que solamente el Estado es centro del poder
económico, social. e ideológico del país. Esto. conduce en el plano político,
así como antes nos IIeva a la democracia falsificada. a la democracia que no
es auténtica, donde las condiciones sociales permiten que un grupo
minoritario pueda manejar y controlar el funcionamiento de las instituciones
• El Colectivismo es un sistema de organización político-económico, a
partir del que se establece un arreglo que afecta a toda la sociedad.
• La base teórica del Colectivismo es la creencia en la mayor
importancia del grupo y la menor del individuo —exactamente lo
opuesto al individualismo, para el que la persona en sí misma es el
centro de la sociedad y no puede ser ignorada.
• La justificación del Colectivismo usualmente se argumenta afirmando que
el bien colectivo es superior al bien individual —y que incluso, el individuo
puede y debe ser sacrificado si ello beneficia a la colectividad.
• • En su aplicación económica, el Colectivismo da pie a la negación de la
propiedad individual frente a la propiedad colectiva —lo que puede llegar
hasta la colectivización de los medios de producción que se ponen en
manos del gobierno presuponiendo que así serán administrados para el
bien colectivo.
• Como consecuencia de lo anterior, el Colectivismo es un gran opositor
a las ideas de mercados libres.
• En su aplicación política, el Colectivismo contempla más grupos que
personas, las que solamente tienen significado en cuanto a su
pertenencia a alguno de esos grupos percibidos.
• Con toda la atención colocada en grupos, las personas son percibidas
con una misma identidad, la asignada a ese grupo —lo que hace al
Colectivismo tener una estrecha asociación con el Corporativismo.
El Colectivismo afirma tener una base moral superior a la del
Individualismo al sostener que el bien de la colectividad es superior al
de la persona sola —un argumento de tipo numérico por el que dos
personas valen más que una, tres más que dos y así sucesivamente.
El Colectivismo, para poder actuar, necesita de líderes que tengan la
capacidad de representación de la colectividad y puedan actuar en su
nombre —lo que presenta el peligro siempre real de personas que
aprovechen su posición para beneficio personal, igual que en cualquier
otro sistema.
• El Colectivismo incurre en problemas cuando se enfrenta a la noción
de derechos humanos, que son una idea claramente personalista, y
que por eso no justifican la sumisión del individuo frente a la
colectividad —lo que ha originado la idea de derechos colectivos que
se asignan a grupos y están por encima de los derechos personales.
Un colectivista extremo puede llegar a afirmar que la persona carece de
derechos individuales y que solo puede ser sujeto de derechos
colectivos como miembro de una colectividad.
El Colectivismo es un modo de pensar en lo político y lo económico,
que pertenece a las doctrinas que solicitan la acumulación del poder
político, económico y cultural en un reducido número de personas que
representan a la colectividad general —por lo que presenta los mismos
problemas de abuso de poder del Socialismo, el Corporativismo y
similares.
• El Colectivismo, en resumen, coloca a todo grupo social por encima de la
persona, a la sociedad, a la nación, a la raza, a los obreros, a cualquier
grupo que sea considerado como benéfico —teniendo la necesidad de
crear grupos opositores o enemigos que deben combatirse.
• No hay amigos ni enemigos personales; todos son grupos amigos o
enemigos —lo que puede verse en dos ejemplos claros, el fascismo y el
comunismo; el nazismo es un caso perfectamente claro de colectivismo.
En el Colectivismo suele existir un componente casi místico que asigna
una connotación sagrada a la colectividad general, lo que convierte a la
colectividad en algo intangible y vago, muy fácil de acomodar a
cualquier acción de los líderes de la colectividad.
• En su fondo, el Colectivismo niega una identidad personal al
individuo, considerándolo una entidad amorfa, sin valor, ni sentido e
incapaz, que solo tiene significado en cuanto que sea una parte de la
colectividad —una noción que es negada a diario en todas partes.