EMOCIONES EN EL
SISTEMA LÍMBICO
Integrante:
Stefanny Sabrina Andrade Chacaliaza
Sistema límbico
■ El término “sistema límbico” fue acuñado por Paul D. MacLean en 1952 como un
sustrato neural para la emoción (Maclean, 1952).
■ El sistema límbico es una de las redes de neuronas más interesantes e
importantes a la hora de estudiar el comportamiento humano, ya que es una de las
partes del cerebro con un papel más relevante en la aparición de los estados de
ánimo.
■ Es por eso que a veces es llamado "el cerebro emocional".
Las partes del sistema límbico
■ Se pueden señalar partes del encéfalo que tienen un papel de suma importancia
dentro de la red de interconexiones que es el sistema límbico y que, por tanto,
sirven para hacernos una idea sobre cuáles son las zonas por las que pasa este
circuito. Las partes del sistema límbico son las siguientes:
1. Hipotálamo :Una de las zonas del diencéfalo más involucradas en la regulación de
las emociones, por su conexión con la glándula pituitaria y por lo tanto con el
sistema endocrino y todas las partes del cuerpo en el que se liberan todo tipo de
hormonas.
2. Hipocampo : El hipocampo tiene una función muy importante en los procesos
mentales relacionados con la memoria, tanto en la memorización de experiencias e
informaciones abstractas como en la recuperación de recuerdos.
3. Amígdala : Las amígdalas cerebrales están situadas al lado de cada hipocampo, y
por lo tanto hay una en cada uno de los hemisferios del cerebro. Su papel está
relacionado con la respuesta emocional aprendida que despiertan ciertas situaciones,
y por lo tanto están involucradas con el aprendizaje emocional, por lo cual tienen un rol
en el sistema límbico.
4. Corteza orbitofrontal es la válvula de salida de las órdenes "emocionales" hacia
zonas del lóbulo frontal encargadas de la planificación y creación de estrategias. Por
tanto, tiene un importante papel a la hora de aplacar los "impulsos irracionales" que
llegan del sistema límbico y hacer pasar solo parte de estas señales, aquellas que
servirán para definir bien los objetivos de las acciones con metas a medio o largo plazo.
¿Es correcto hablar de un "cerebro
emocional"?
■ En la cultura popular existe la idea muy extendida de que el cerebro humano tiene
una parte emocional y otra racional.
■ El cerebro emocional, que habríamos heredado de nuestros antepasados más
primitivos, sería aquél en el tenemos emociones, sentimientos e impulsos difíciles
de reprimir, mientras que el racional se encargaría del análisis más concienzudo y
lógico de las situaciones que vivimos o imaginamos.
■ Como hemos visto, el sistema límbico está profundamente interconectada con otras
áreas del cerebro no directamente identificadas con aquello que conocemos como
las emociones, por lo cual la idea de que tenemos un cerebro emocional es, en
buena parte, una manera excesivamente imaginativa de entender esta red de
conexiones.
Sistema límbico y las emociones
Las emociones han sido definidas como reacciones interrelacionadas que resultan de
estados de premio y castigo. Los premios, por ejemplo, favorecen reacciones
(satisfacción, confort, bienestar, etc.)
■ Las respuestas autonómicas y emociones dependen del sistema límbico:
La relación entre emociones y respuestas autonómicas (cambios corporales) es
esencial. Las emociones son, en el fondo, un diálogo entre cerebro y cuerpo. Por
ejemplo, las respuestas de miedo e ira inician en el sistema límbico, que causa un
efecto difuso en el sistema nervioso simpático. La respuesta corporal masiva, conocida
como la “respuesta de lucha o huida”, prepara al individuo ante situaciones
amenazantes para luchar o huir.
■ El miedo depende del sistema límbico: Se pueden producir respuestas de miedo
estimulando el hipotálamo y la amígdala. Asimismo, la destrucción de la amígdala
elimina la reacción de miedo y sus efectos corporales. La amígdala también se
involucra en el aprendizaje del miedo.
■ La ira y sosiego son funciones del sistema límbico: Se observan respuestas de ira a
estímulos mínimos tras la extirpación del neocortex. La destrucción de varias áreas
del hipotálamo, como los núcleos ventromediales y núcleos septales, también
produce ira en animales. La ira también puede generarse a través de la
estimulación de zonas más amplias del cerebro medio. Por el contrario, la
destrucción bilateral de la amígdala produce sosiego.
■ El placer y adicción se inician en el sistema límbico: El circuito del placer y la
conducta adictiva incluye la amígdala, el núcleo accumbens y el hipocampo. Este
circuito está involucrado en la motivación del consumo de drogas, la naturaleza
compulsiva del consumo, y las recaídas.
Implicaciones clínicas. Alteraciones del
sistema límbico
1- Demencia
El sistema límbico está relacionado con las causas de enfermedades
neurodegenerativas, particularmente la enfermedad de Alzheimer y la enfermedad de
Pick. Se encuentra atrofia marcada en el sistema límbico, en particular en el
hipocampo.
2- Ansiedad
Los trastornos de ansiedad son el resultado de anomalías a la hora de regular la
actividad de la amígdala.
3- Epilepsia
Epilepsia como consecuencia de una alteración en el sistema límbico. La epilepsia del
lóbulo temporal es la más común en adultos y sucede por esclerosis en el hipocampo.
Parece que este tipo de epilepsia se debe a una disfunción a nivel del sistema límbico.
4- Trastornos afectivos
Hay estudios que muestran variación en el volumen del sistema límbico en trastornos
afectivos como el trastorno bipolar y la depresión. Estudios funcionales han revelado
actividad menor en la corteza prefrontal y la corteza cingulada anterior en los
trastornos afectivos. El cingulado anterior es el centro para la integración atencional y
emocional, e interviene en el control de las emociones.
5- Autismo
El Autismo y el síndrome de Asperger conllevan una alteración en aspectos sociales.
Estructuras del sistema límbico, como el giro cingulado y la amígdala, están alteradas
en estas enfermedades.