La globalización neoliberal ha incrementado la pobreza y la desigualdad al beneficiar principalmente a las grandes empresas y los ricos. El llamado "libre mercado" en realidad está controlado por empresas multinacionales que evaden impuestos y privatizan servicios públicos para obtener mayores ganancias, mientras que la mayoría de la población paga más impuestos y servicios esenciales. La globalización económica, tal como se ha implementado, solo ha traído más problemas sociales y menos oportunidades para los pobres.