La globalización ha traído tanto consecuencias positivas como negativas. Entre las negativas se encuentra la pérdida de identidad cultural, ya que las personas desconocen cada vez más su propia cultura, tradiciones y costumbres. También ha habido una pérdida de valores a medida que lo extranjero se valora más que lo nacional. Sin embargo, la globalización también ha traído beneficios económicos. Para contrarrestar sus efectos negativos, los gobiernos deben establecer políticas para proteger las culturas locales