La gestión escolar implica tres procesos: 1) la generación de diagnósticos, objetivos y estrategias; 2) la organización de recursos humanos y técnicos; y 3) la evaluación del progreso hacia las metas. Existen cuatro dimensiones de la gestión escolar: pedagógica, comunitaria, administrativa y organizacional. La gestión escolar busca mejorar los procesos educativos a través de la planificación, participación de la comunidad y uso eficiente de recursos.