El documento define el delito como una conducta ilegal tipificada por la ley. Específicamente, describe dos tipos de delitos informáticos: 1) aquellos donde las computadoras son usadas como herramientas para cometer delitos como fraude y 2) aquellos donde las computadoras u otros sistemas de TI son el objetivo directo como en ataques que causan daños o niegan el servicio. Finalmente, explica dos métodos comunes de fraude informático: la manipulación de datos de entrada y la manipulación de programas.